CAPITULO DOS

Hola hermosos Shikatemiences, si, si los estoy adulando, ya les traje el siguiente capítulo espero que les guste y que lo disfruten; perdonen la tardanza pero si les soy sincera se me olvido =0

DISCLAIMER: los personajes que aquí aparecen con propiedad de Masashi Kishimoto, son usados en esta historia porque tengo una grave obsesión con el ShikaTema

El director de medicina general se encontraba delante de su escritorio revisando los expedientes de los pacientes que habían ingresado recientemente al centro de rehabilitación, siempre le daba lástima que la mayoría de los pacientes eran tan jóvenes; la mayoría tenía lesiones permanentes y solo estaban ahí para aprender a llevar un nuevo tipo de vida. Alguien llamo a su puerta sacándolo de sus pensamientos; volteo a ver el reloj de la pared y ya casi era el cambio de turno, tal vez alguien necesitaba salir antes de la hora.

– Adelante – una joven enfermera de ojos azules entro a la oficina llevando una carpeta entre sus manos – ¿Que se le ofrece?

– Doctor, esta mañana me asignaron el cuidado de la paciente Sabaku no Temari – el nombre de la paciente le atrajo la atención, esa misma mañana él la había revisado y había ordenado un cambio de enfermera – y pues…

– ¿Qué es lo que paso? – pregunto levantando la vista de sus papeles

– Hubo una pequeña confusión cuando estaba tomando un baño, fue una torpeza de mi parte – comenzó a titubear – es que…

– ¿pero qué fue lo que sucedió? – cuestiono algo preocupado el doctor

– deje a la paciente en la tina, mientras yo cambiaba las sabanas de su cama, cuando regrese a verla estaba toda desguanzada y con los ojos cerrados y yo… – Ino bajo la mirada y suspiro – yo, me asuste; pensé que había muerto y la tome con rudeza.

El medico simplemente negó con la cabeza y suspiro – tranquila, en el cambio de turno me acompañas a revisarla – guardo silencio y dudo continuar, pero el mismo sabía que necesitaba un punto de vista diferente – ¿tú crees que necesita ser revisada por un psiquiatra?

Ino quedó sorprendida por la pregunta, ella misma dudaba de que la paciente estuviera completamente cuerda ya que en sus expedientes clínicos hacían referencia a medicación y tratamiento psicotico, pero sus pensamientos viajaban por un rumbo diferente – yo creo señor, que un psicólogo le vendría mejor – el doctor asintió con la cabeza y con la mirada le pregunto en que se basaba para pensar así; a Ino no le gustaba dar opiniones personales sobre los pacientes, pero también creía que más valía prevenir que lamentar – bueno; ella lo que necesita, a mi parecer, es hablar con alguien para que pueda desahogarse, un psiquiatra la medicaría y eso no le va ayudar en su recuperación

– Tienes razón – el doctor le firmo los papeles que describían el pequeño accidente y le dijo que la veía en el cambio de turno, dando por terminada la plática.

…

Temari había descansado gracias al relajante baño que había tomado; hacia mucho que disfrutaba del agua caliente, normalmente las enfermeras la limpiaban con una esponja y eso no le gustaba, ahora sentía su cuerpo fresco y descansado, tanto, que había dormido y ahora tenía ganas de leer un libro; lo único malo es que el estante con los libros que le habían dejado sus hermanos, no estaba a su alcance y eso la hacía sentirse molesta y una completa inútil; aun no podía creer lo que le estaba pasando.

¿Cuándo fue la última vez que disfruto de un relajante baño?...

Flashback

– Aún no puedo creer que vinieras – decía mi amiga emocionada mientras me abrazaba – no tengo idea de cómo lo convenciste, pero estoy más que feliz – seguía diciendo, ni yo misma sabia como había convencido a Darui de viajar a otro país; normalmente le gusta pasar sus vacaciones encerrado en su casa, pero esta vez le dije que viajaríamos al país del fuego a ver a Shin, de inmediato dijo que nos acompañaba.

– No te creas – le dije – yo también estoy sorprendida de que haya venido

– Pues es maravilloso – siguió Samui con su entusiasmo – hace tres meses que no veo a Shin, desde que le dieron lugar en la universidad de Konoha para terminar su doctorado – ya lo sabía, pero a ella le encantaba restregarme que su novio obtendría por fin su doctorado en astronomía, pero así era ella y por dicen que genio y figura, hasta la sepultura.

Darui había insistido que viajáramos en su camioneta; a mí me pareció absurdo desperdiciar cinco días de viaje, pero él se había empeñado y Samui lo había apoyado, así que quedamos dos contra uno.

Cuando por fin llegamos a la aldea de Konoha, Samui nos indicó hacia donde se ubicaba el departamento de Shin, también nos dijo que se tomó la molestia de rentar una habitación de hotel para que estuviéramos cómodos, lo cual a mí me pareció una maravillosa idea así que dejamos a mi amiga con su novio y nos dirigimos al que sería nuestro hogar por una semana.

– Esta muy cómoda esta habitación ¿no te parece? – le pregunte a mi novio, el solo alzo los hombros y no me contesto – ¿No me vas a contestar?

El bufo de mala manera y me miro – Es solo una habitación Temari, como cualquier otra – y así sin más ni más, me dejo sola para darse un baño. Yo también resople de mala gana y me puse acomodar mi ropa en los cajones de la cómoda, si él quiere que acomode su ropa, sino que la use arrugada –pensé – al fin y al cabo yo no lo invite, él se coló en el viaje.

Estaba tan entretenida en mis cosas que salte en mi lugar cundo sonó mi teléfono

– ¿Que paso? – respondí

– ¡vamos de compras! – grito Samui por la bocina

– ¿Ahorita? – Conteste haciendo mohines – aun no me baño, además Darui anda de mal humor

– pues no lo lleves, que sea una tarde de chicas – ahora que lo decía no me parecía una mala idea – paso por ti en dos horas

– De acuerdo – y colgué; cuando levante la vista, Darui ya había salido del baño y ahora me miraba – ¿Qué? – le pregunte

– Pensé que me alcanzarías en la ducha

– Pues pensaste mal – tome mis cosas y me dirigí al baño, el me tomo del brazo y me jalo para poder besarme, en ese momento iba a contestarle el beso, pero recordé su comportamiento de hace un rato y lo quite de mi cara – lo siento mi vida – le dije – pero como estabas de mal humor, hice planes que no te incluyen

– ¿y me vas a dejar aquí solo? Yo solo vine para estar contigo

– Eso lo hubieras pensado cuando decidiste ponerte de malas, ahora si me disculpas tengo el tiempo medido – le di la espalda y me encerré en el baño.

Abrí las llaves de la regadera para que se calentara en lo que me desvestía, solté mi cabello y me metí bajo la regadera– Que delicia de agua – pensé mientras recorría mi cuerpo con mis manos, la temperatura estaba justo como me gusta, me dispuse a disfrutar de ese momento, cerré mis ojos y deje que mi mente divagara…

Fin del flashback

Temari despertó de su ensoñación cuando alguien abrió la puerta de su habitación; esta vez entraron tres personas, el doctor que la reviso por la mañana, su nueva enfermera y un joven rechoncho y carismático; Temari frunció el ceño al darse cuenta de que el joven vestía de enfermero, una cosa era que otra mujer la mirara desnuda y la ayudara en sus necesidades, ¡pero un hombre! No, lo último que necesitaba era a un hombre viéndole su desnudo y mallugado cuerpo.

– Buenas tardes – comenzó el doctor – ¿Cómo te sientes Temari? – la mencionada se sonrojo ligeramente y trato de contestar sin titubear esta vez

– Bien, la verdad descanse bastante

– Me alegro – contesto y volteo a ver a Ino – me comento la señorita Yamanaka que habían tenido un incidente por la tarde – hizo una pausa – ella ha estado preocupada por que no sabe si te lastimo

Temari miro fijamente a Ino y se dio cuenta de que estaban omitiendo un pequeño dato – ¿Eso es realmente lo que le preocupa? – soltó sin miramientos.

– ¡Por supuesto que es lo que me preocupa! – Exclamo Ino – no sé si te lastime tu espalda, por lo brusco que te jale

– Haber tranquilas – intervino el doctor – no quiero que se alteren; Temari solo nos preocupa la reacción que podría tener tu columna, te recuerdo que la última cirugía la tuviste hace tres semanas y aunque tu sientas que la herida ya sano, internamente sigue delicada

– Lo siento, pero pensé que lo único que querían evitar era una demanda – Ino al escuchar esto, abrió los ojos como platos – y por la reacción de ella, parece que acerté – de un momento a otro la habitación se quedó en completo silencio – de todos modos – comenzó Temari – no pensaba hacerlo, la señorita Ino se portó muy amable conmigo.

La mencionada se quedó sorprendida al escuchar el comentario de la paciente, no era una bruja después de todo.

– Aun así – continuo el doctor – voy a revisarte, pronto comenzaras tus terapias físicas y no quiero arriesgarte a una fractura

El doctor con ayuda del nuevo enfermero la recostó en la cama y descubrió su abdomen para poder palparlo; Temari se sentía avergonzada, llevaba un solo un camisón y debajo sus braguitas blancas, sabía que ellos eran profesionales y que no la veían con morbo, pero aun así no dejaba de incomodarle que la descubrirán así sin más ni más. Le revisaron la cintura y la cadera, la ayudaron a sentarse para revisar su espalda y los reflejos de sus piernas, todo parecía estar en orden o al menos eso creía ella, ya que el doctor asentía y anotaba.

Después de todo el chequeo la volvieron acomodar en su cama, esta vez fue Ino y el enfermero, del cual no sabía su nombre, pero se veía bastante agradable.

– en un momento te traerán tu cena – comento Ino – mi turno ya está por acabar, pero si necesitas algo antes de que me vaya puedes pedírmelo, o en su defecto mi compañero es quien estará para atenderte

Temari miro al chico que conversaba con el doctor y anotaba las indicaciones que este le daba, a simple vista se veía bastante agradable, claro que no se comparaba con el dios que tenía por doctor que justamente se acerba hacia ella.

– Todo parece estar en orden – sonrió con calidez – cualquier cosa que necesites o si te sientes mal, puedes decírselo al joven Akimichi

– Gracias doctor, fue muy amable en venir a revisarme

– No te preocupes, la verdad es que me recuerdas mucho a mi hijo – Temari se sorprendió ante el comentario, el doctor se rio al ver su expresión – bueno, yo te veré mañana, descansa Temari.

Choji se acercó con una charola de comida y la dispuso en la mesa móvil para llevársela a la cama – su cena señorita Sabaku no

– Venga Choji, si es de nuestra edad – dijo Ino, Choji la miro y se sonrojo por lo que dijo su amiga – verdad que te gusta que te tuteen – afirmo Ino sin que preguntara primero, Temari suspiro y volteo a ver al chico.

– Tú puedes llamarme por mi nombre, si yo te puedo llamar por el tuyo ¿te parece, Choji? – preguntó con una sonrisa en su rostro

– Esta bien, por ahora me retirare ya que mi turno comienza formalmente a las siete de la noche y falta media hora – se dio la vuelta para salir y dejar a las dos chicas a solas.

Ino se sentó en la silla junto a la cama de Temari, ya en la mañana le había dicho que la acompañaría cuando le tocaran sus alimentos, así que con resignación tomo el tenedor y comenzó a picar la fruta sin ánimos – sabes – comenzó Temari – antes me gustaba comer balanceado, ya que no soy de matarme con ejercicio pero… - Ino se sorprendió de que ella fuera la que iniciara la plática – llevo una semana comiendo fruta tres veces al día y ya me aburrió.

– Lo sé linda, pero estas tomando medicamentos que te causarían ciertas reacciones si se mezclan con otro tipo de alimentos – Ino la miro y sintió pena por ella – por fortuna, los medicamentos que hoy te administren, serán los últimos de un tratamiento

– ¿En serio? – Pregunto entusiasmada – o sea que ya mañana podre pedir un gran trozo de carne

– Bueno no exactamente – Temari hizo una mueca cuando escucho eso – seguirás con dieta blanda, pero ya no solo será fruta

– Bueno, no quiero sonar malagradecida pero lo que sea es mejor que fruta – Ino sonrió y la alentó a seguir comiendo.

Después de que terminaras la cena, Ino retiro la bandeja de la comida y le dijo que vendría para el cambio de turno, Temari le agradeció sus atenciones y le dijo que esperaba que pasara a despedirse antes de que se fuera.

Ahora que lo pensaba detenidamente, estaba haciendo lo que no quería y no quería aceptarlo, estaba entablando una amistad con su enfermera que era muy agradable, se había dicho a si misma que no quería una amistad por caridad pero tampoco quería sentirse sola, desde su última cirugía no había visto a sus hermanos y ni hablar de sus amigos que desde el día del accidente no sabía que había pasado con ellos y eso la mortificaba.

Justo a las diez de la noche Choji entro con una charola de medicamentos, le dijo que esta sería la última inyección que le administrarían y que ya mañana se le asignaría un nuevo doctor para un nuevo tratamiento.

– Entonces el doctor de esta mañana ya no va a tratarme – dijo más para sí misma que para su acompañante, aun así él la escucho.

– Bueno – comenzó – el doctor Minato esta cargo de tu caso, pero también es el director de medicina general en este centro y tiene mucho trabajo

– O sea que no tiene tiempo para un solo paciente – al menos ya sabía cómo se llamaba su doctor – bueno, eso hará que conozca a más personas en esta habitación

– no te preocupes, ahora que comiencen tus terapias saldrás a conocer las instalaciones – dijo mientras le aplicaba la inyección – de hecho cuando tú quieras podrás asistir al área del comedor – termino de aplicar el medicamento y la acomodo ya para dormir, la arropo como si fuera una niña chiquita y le paso la mano por la cabeza, a Temari le dio gracia como la estaba tratando

– ¿También me darás un beso en la frente? – ella sonrió y Choji se puso rojo hasta la nariz

– Lo-lo siento yo…

– Tranquilo, es broma – ella le dedico una sonrisa y cerró los ojos – ahora si me disculpas, quiero dormir.

Choji apago la luz de la habitación y cerró la puerta con mucho cuidado; Ino tenía razón, podía parecer una bruja pero era realmente agradable, ahora sentía un poco de pena por ella, ahora que estaba consciente y tranquila podrá recibir visitas y no sabía cuánto podría afectarle, el doctor les había dado indicaciones de no darle información acerca del accidente, ni de sus amigos y sobre todo, de su estado de salud. Querían manejárselo lo más tranquilo posible para que no sufriera un ataque de pánico, otra vez.

Muchas gracias por leerlo, espero que haya sido de su agrado y si es así pues pueden dejarme un review, pero si quieren castigarme por la tardanza, pues tambien dejen uno jajajajajaja ok no.

Gracias a todos por sus follows y sus alerts, hacen que me vuelva loca de felicidad en especial cuando me dejan un review; Karinitis-san, Karma3985, MadizH, Arikina, Lirio-Shikatema, Nonahere(aún sigo sin créelo) y FannyK03. gracias por sus comnetarios

Nos leemos!