Capitulo 1
Una hora había pasado desde el ataque del Kyubi, los ninjas de Konoha revisaron los parámetros del lugar para encontrar supervivientes del ataque, cuando escucharon un llanto, los ninjas que escucharon no dudaron en ir al lugar y apareció otro llanto, confundiéndolo aun más, al llegar no pudieron ocultar su sorpresa y a continuación con tristeza, ya que encontraron el cuerpo del 4 hokage muerto, junto con su mujer y dos bebes.
"¿Qué hace la esposa del cuarto Hokage con él?" Salto unos de los ninjas de Konoha.
"No lo sé, pero lo que estoy seguro es que esos dos criaturas tiene el kyubi en su interior por el sello que tiene en sus estómagos" hablo otros de los ninjas
"Entonces debemos eliminarlo" miro el ninja a los recién nacido sacando su Katana, cuando una mano le agarra por la muñeca y lo manda contra el suelo con fuerza.
"Si algunos de vosotros tocáis a esas criaturas conoceréis mi ira" hablo Hiruzen Sarutobi muy enojado.
"Tercer Hoka..hokage ¿Por qué?" preguntaron los ninjas confundidos.
"Esos bebes son unos héroes al sellar el kyubi en ellos" recogió a las criaturas en sus viejos brazos "todo lo que es relacionado con el kyubi será de alto secreto y cualquiera que rompa conocerá porque soy considerado el dios ninja" sin más se fue del lugar para llevar a un lugar seguro a los bebes.
Pasaron 4 años del ataque del kyubi, en la aldea de Konoha dos niños rubios corrían por sus vidas, ya que eran perseguidos por un grupo de aldeanos enojados, cada año en esas fechas era lo mismo pero en esta ocasión era distinta. Un aldeano lanzo una piedra que alcanzo a unos de los niños dejando inconsciente, el otro al verlo fue en su ayuda. Sin embargo recibió un golpe por la espalda por parte de los otros aldeanos, al ser pillado, el niño limito a abrazar a su hermano intentando protegerlo sin mucho éxito, porque los golpe venia de todas direcciones, el niño que tenía el pelo más largo sentía dolor por todo su cuerpo, estaba a punto de perder el conocimiento, cuando vio por un segundo estar delante de una gran jaula, sin más sus ojos azules volvieron rojos, su pupila se afino como un gato y sus colmillos sobresalieron.
"¡DEJANOS EN PAZ!" grito demostrando que era una niña por su tono de voz, haciendo que los aldeanos cayeran al suelo por la fuerza del grito.
"Ella es el monstruo" hablo el aldeano que agarro un palo con fuerza para golpear a la pequeña, pero es bloqueada por la niña.
"He dicho que nos deje en ¡PAZ!" volvió gritar haciendo que el aldeano saliera volando por los aires.
Sin decir más los aldeanos cogieron piedras para lanzar a los niños, la niña hacia lo posible para proteger a su hermano cuando vio como un kunai iba directa a su frente, la pequeña se sorprendió ya que era la primera vez que tenía un ataque de un ninja.
"¿Qué hacéis?" pregunto un Anbu en el tejado mientras tenia a los dos rubios entre los brazos, mientras la niña estaba aun en shock por lo ocurrido.
"Eso me gustaría saber" apareció el Tercer Hokage muy enojado.
"Nosotros solo queremos eli…"no pudo continuar el aldeano al estar rodeados de Anbus
"Tengo que recodar que estos niños están bajo mi protección" Miro el Hokage mas enojado.
"No ha visto como está la niña, es un monstruo" salto otro de los aldeanos.
"Yo solo he visto a una niña defender a su hermano de unos criminales" sin decir nada más el hokage dio la orden de arresto.
Al termina el asunto, el anciano y el Anbu, que cargaban los niños, se fueron a la torre Hokage. Cuando llego Hiruzen se agacho quitando el sombrero para estar a la altura de la niña que aun estaba en los brazos del Anbu, aún tenía la rabieta ya que daba pequeño gruñido.
"Tranquila, ya paso todo, debería sentirte orgullosa de proteger a tu hermano" hablo el Tercer Hokage abrazando a la niña para tranquilizarla.
Al sentir el abrazo, la niña lo devolvió, sus ojos volvieron a la normalidad mientras empezaba a llorar.
"Vamos, esta no es la Naruko Uzumaki que conozco" dijo intentando el anciano en animarla.
"Pe..Pero ¿Qué hemos hecho para tratarnos así?" pregunto la niña "¿fue porque nacimos?" pregunto Naruko mirando al Hokage.
Esas palabras fueron la gota que colmo el vaso para Hiruzen, sin más se levanto y se dirigió al escritorio, saco un pergamino y escribió, al termina se lo entrego al Anbu, este al leer de que se trataba se quedo mudo y miro al anciano, el hokage sabia que tipo de miraba era aunque tuviera su máscara puesta y afirmo, haciendo que el Anbu dejara al niño en manos del anciano antes de irse.
"¿Está bien?" pregunto Naruko mirando a su hermano.
"Claro que está bien, tu hermano Naruto se despertara en poco tiempo" dijo antes de que la puerta del despacho se rompa en mil trozos.
"VIEJO ¿QUE DEMONIOS PIENSA?" grito Tsunade con el pergamino en una mano y en la otra tenia sujetado el Anbu que solo limito a suspirar, porque lo venia venir la reacción de la sannin.
"Como dice en el pergamino, te pongo a cuidado de estos niños" respondió el hokage dejando a Naruto en brazos de Tsunade.
"Lo siento pero tengo mis propios problemas" contesto la mujer mirando a otro lado.
"Hazlo por ella, recuerdo que dijiste que Kushina era para ti una hija, ¿crees que ella podría descansar en paz viendo como sufren sus hijos?" susurro Hiruzen a su ex alumna para que solo la mujer lo escuchara, ella al mirar el estado del niño y la palabras del hokage provoco que mordiera levemente su labio inferior.
"Solo cuatro año y medio, ni un año más, después me iré de la aldea" respondió la sannin soltando el Anbu y agarrando el brazo de Naruko para llevarla, pero la niña mira algo asustada "no te preocupes te cuidare bien" sonrió Tsunade haciendo que la niña mirara al Hokage y este daba el visto nuevo, haciendo que Naruko aceptara irse con la sannin.
"¿Está seguro de esto? Yo podría cuidarlo" Pregunto el Anbu preocupado por los niños.
"No puedes Kakashi, eres un Anbu y por eso está casi sin tiempo para dedicar en su cuidado, además Tsunade es la mujer más fuerte de toda Konoha por lo que los ciudadanos se lo pensara dos veces antes de hacerle daño, pero antes investiga de quien era el Kunai" ordeno el Hokage, haciendo que Kakashi se fuera del lugar.
Al día siguiente Naruto se levantó y miro al techo, le parecía extraño, no recordaba que el techo estuviera tal alto, al levantarse se dio cuenta que estaba en una cama muy grande y en ella estaba su hermana gemela Naruko durmiendo tranquilamente, lo único que recordaba era que estaba huyendo de los aldeanos, suspiro el rubio, cada año era igual, le perseguían durante todo el día pero esta vez era distinto, porque los aldeanos tenía intenciones de hacer daño, el motivo, no lo sabía.
"Buenos días" dijo Naruko bostezando y estirando los brazos.
"Buenas, ¿Dónde estamos?" pregunto Naruto con curiosidad.
"El abuelo nos mando con una mujer, parece que no le agrado lo que paso ayer" explico Naruko temblando un poco por la experiencia.
"¿Está bien?"Miro el niño preocupado, mientras la niña afirmaba con la cabeza "¿Quién es esa mujer?" Naruto intento cambiar de tema.
"Su nombre es Tsunade" paro al notar un olor en el ambiente "hermano ¿esta oliendo lo mismo que yo?" pegunto la niña con brillo en los ojos.
Tsunade estaba en la cocina, estaba preparando ramen, recordaba que unos de los antojos de Kushina eran ramen, por lo que pensó que tal vez le gustaba y no se equivoco al girar y ver a los niños sentado esperando el desayuno.
"No lo digáis, vuestra comida favorita es el Ramen" hablo Tsunade con una sonrisa dejando el desayuno en la mesa.
"SIIII" gritaron feliz los niños antes de empezar a comer su comida favorita.
"Cuando terminéis de comer, daremos una vuelta por la aldea" ve como los niños dejan de comer y mira preocupado entre ellos confundiendo a la sannin "¿Qué ocurre?" Pregunto la mujer con curiosidad.
"Aun no es seguro para nosotros" contesto Naruko algo asustada.
"los aldeanos podría volver a seguirnos" siguió Naruto tristemente.
"Conmigo no pasara nada, lo prometo" hablo Tsunade con una sonrisa.
Al terminar el desayuno, los niños fueron a visitar varias tiendas. Tsunade no tenía preparado la casa para dar cobijo a dos niños, por eso le faltabas cosas, lo que no esperaba la Sannin era la mirada de odios que daban los aldeanos, haciendo entender en parte porque su maestro lo puso a su cuidado, veía como los niños estaba detrás de ella muy pegados demostrando el miedo que tenia de los aldeanos, si Kushina estuviera viva más de un aldeano estaría en el hospital.
"Espero que antes de que me vaya, mejoren las cosas" suspiro Tsunade por lo que veía.
Sin pensar nada más, Tsunade se paró de golpe llamando la atención de los aldeanos, parecía que había escuchado algo y sin decir nada mas fue directo a un aldeano que lo golpeo mandando por los aires, estaba completamente fuera de sí.
"Si alguien vuelve a decir esa palabra, no lo mando al hospital, lo mando al cementerio" grito la Sannin para que toda la ladea lo escuchara.
Más Tarde se veía como Tsunade y los niños estaba tomando uno baño juntos, Naruko estaba jugando con un patito de goma y cuando se aburrió salto sobre Tsunade ganando la risa de la mujer, mientras Naruto estaba en el otro lado de la bañera.
"¿Qué pasa hermano?" pregunto Naruko con curiosidad.
"Es...esto..." intentaba no mirar a Tsunade pero cuando giro levemente a ver su hermana, vio un poco a Tsunade provocando un gran sonrojo y volteara de nuevo.
"Hermano, no será que es la primera mujer que ves desnuda y está muerto de vergüenza" dijo Naruko burlándose de su hermano.
"Si fuera un niño, estaría en mi situación" salto Naruto enojado pero al hacerlo cae sobre los pechos de Tsunade, haciendo que le subiera los colores.
"Yo también voy" salto Naruko encima de Tsunade al ver su hermano.
"Hey que mis pechos no son almohadas" se quejo la Sannin pero aun sonreía.
Pasaron otros 4 años, en la oficina del Hokage, estaba Hiruzen y Kakashi hablando del último informe que había recibido del peligris.
"Desde que Tsunade está cuidando de los niños a enviado al hospital a unos 1.345 aldeanos y sin contar a Jiraiya cada vez que lo espía" suspiro el anciano algo agotado.
"la mayoría de los ataques eran de los primeros años" explico Kakashi tranquilamente "en este año solo a mandado a uno y este porque estaba borracho, por lo que no creo que pase nada malo cuando Tsunade-sama se vaya, ya que los niños están en la academia ninjas, aprenderá a defenderse" hablo el ninja copia.
"Por suerte para ellos, su generación no sabe nada del asunto, aunque me sorprende de que vuelva a ser Jounnin y deje el trabajo Anbu, Kakashi" hablo el anciano dando un suspiro con su pipa.
"Hay cosas que solo un Jounnin puede hacer, con vuestro permiso me voy" Salió Kakashi de la oficina.
En la casa de Tsunade, los tres se estaban bañando de nuevo, con la diferencia de que Tsunade y los niños llevaban toalla para cubrirse.
"Ya soy lo suficiente mayor para lavarme el pelo, ¡ttebayo!" replico Naruto intentando que la Sannin le dejara en paz, mientras Naruko lo miraba desde la bañera con una sonrisa.
"Mientras estéis a mi cuidado, tenéis que estar saludable y limpio" dijo Tsunade amablemente "o ¿quiere hacerme enfadar?" levanto el puño la mujer en modo de amenaza, haciendo que el niño se callara.
"Es raro somos gemelos pero mi pelo es liso, ¡ttebane!"" hablo Naruko jugando con su pelo que le llegaba a la cintura.
"Que va, si tu hermano fuera chica seria igual que tu y si tu fuera chico seria igual que a tu hermano, la pequeña diferencia que tenéis es porque sois del sexo diferentes" explico la Sannin terminado de lavar el pelo de Naruto "Te toca" sonrió Tsunade a la niña uzumaki para lavar su pelo "tiene el mismo tipo de pelo de Kushina pero del color de tu padre" pensó la sannin lavando el pelo de Naruko.
Al día siguiente Tsunade estaba jugando las cartas con una amiga, mientras los gemelos Uzumaki estaban entrenando.
"Bushi not jutsu" gritaron los dos niños al mismo tiempo.
Al disiparse el humo se veía a los bushi en el suelo sin apena color y deformados, provocando que los gemelos empezara a soltar maldiciones.
"Maldición no nos sale, ¡ttebane!" grito Naruko su mala fuerte.
"¿Dónde nos equivocamos?, ¡ttebayo!" siguió Naruto igual de enojado.
"Se parecen a su padre pero en actitud es como su madre" pensó Tsunade mirando a los niños antes de coger una carta "maldición volví a perder" hablo la sannin dejando las cartas en la mesa, mientras su amiga sonreía por su victoria.
La sannin y los dos uzumaki dieron una vuelta por la aldea, la gente que veía no se metían con ellos pero aun lo miraban con odio, para los gemelos no le dio mucha importancia ya que tenía pensado una cuantas cosas y era hacerle varias travesura, pero antes de hacerlo se lo decían a la sannin para dar el visto bueno.
"Tsunadene-chan ¿Por qué nos falla el bushi not jutsu?" pregunto Naruko mirando su plato de ramen ante de empezar a devorarlo con fiereza.
"Eso, eso nee-chan tu como ninja medico debería saberlo" hablo Naruto antes de empezar a devorar su plato
"Falláis por el mal control de chakra" hablo Tsunade claramente.
"Solo eso" dijeron los gemelos a la vez.
"Pues mejoraremos para aprobar el próximo examen, que será dentro de 3 meses, ¡ttebane!" Señalo Naruko a la sannin con los palillos antes de volver a comer.
"Le enseñaremos a los aldeanos a reconocernos, ¡ttebayo!" siguió Naruto por su hermana.
"Ya veo, suerte en el examen" Tsunade acaricio a los niños con ternura "en 3 meses me iré de Konoha, ya que Shisune habrá terminado sus prácticas" pensó la Sannin empezando a comer
Los días pasaron, convirtiéndose en meses, llegando el día del examen, los gemelos Uzumaki se levantaron con alegría pero no lo duraría lo suficiente al ver que no había nadie en la casa.
"Tsunadene-chan" llamo Naruko sin mucho éxito "¿está en su habitación?" preguntó Naruko a su hermano que acaba de llegar a la habitación.
"No, pero no han dejado una nota" dejo Naruto la nota a su hermana y esta lo leyó.
Continuara…..
Nota del Autor: antes de nada, este es mi primer Fanfics de naruto que pensaba publicar en Fanfiction, pero cambie de idea y publique el renacer del clan Uzumaki y como sabéis este capítulo es el comienzo, pero no se continuaran hasta que acabe el fics de renacer del clan Uzumaki, cuando acabe, pediré cual fics comenzar, si lo público ahora es para que la gente lo lea y decida cuál de los tres que publique, sea la siguiente en continuar.