¡He aquí la continuación!
Al principio no tenía ideas para hacerle un siguiente "capítulo", pero dado el hecho que esta historia recibió apoyo aquí y en Wattpad, me decidí por colocar el tan pedido lemon de la parejita~ Hice mi mayor esfuerzo, es mi primer lemon publicado, espero haya quedado bien.
Sin más, a la lectura n.n
- ¡Kurosaki-kun!
Me está llamando.
- ¡Sálvanos, Kurosaki-kun!
Ella me está llamando... Puedo escucharla.
- ¡Sálvanos!
Levántate.
¡Levántate! ¡Levántate!
- ¿Ese es tu deseo, m irey...?
¡Yo...yo-!
- Lo cumpliré...
¡Te protegeré!
(...)
No todo podía ser perfecto...
Pasos resonaban en las paredes de los rascacielos, llenando todo ese mundo en el cual solo habitaban dos seres. El causante de aquel sonido era uno de ellos, el cual pronto se detuvo en una de las esquinas de un edificio que solo dejaba ver aun más edificaciones. Su vestimenta era blanca al igual que todo su físico, a excepción de sus ojos los cuales contaban de una esclerótica negra junto a una iris ambarina que solo daba paso al vacío.
No se podía estar seguro de lo que pasaba por su mente, o si pasaba algo en especifico. Se sentó dejando sus piernas colgando, sus brazos le ayudaron a apoyar su cabeza en una posición mas cómoda para él y su estado. No le prestaba atención a nada, más pudo notar que su cuerpo empezaba a mojarse por unas conocidas gotas que caían del cielo, empeorando su humor.
- No deberías darle tanta mente -A sus espalda y a una buena distancia de donde él estaba podía verse el otro ser que habitaba allí, su vestimenta oscura meciéndose con el inexistente viento que corría allí. Su rostro como siempre estoico, más su tono de voz se oía un poco más calmado, haciendo que frunciera levemente el ceño.
- No te entrometas, Ossan -Le reclamó molesto sin siquiera voltear a mirarle, aunque eso tampoco le importaba al viejo, sabía perfectamente como estaba el otro sin tener que verle de frente.
- Trajiste a Ichigo de vuelta con nosotros -Habló de nuevo, sin importarle el gruñido de advertencia del contrario- Lo sacaste de un gran peligro. Deberías estar orgulloso.
Sabía que esas palabras no eran las indicadas, pero la respuesta no llegó, lo cual fue hasta extraño para el viejo, sin demostrarlo facialmente claro está. Esperaba quejas o gritos de parte del Hollow, aunque muy por dentro sabía que también podía no reaccionar como esperaba. En un momento ya estaba cerca del albino y éste no volteó a chocar sus miradas, bien podía sentir la de el mayor analizándolo, como si tuviera palabras exactas para sacarle todo a la luz aunque no fuera necesario para aquel ser.
Él sabía perfectamente por qué estaba así...
- Fue mi error -Las palabras salieron en un susurro de sus pálidos labios, escondiendo sus ojos en la sombra de su mojado cabello. El contrario no le dijo nada, no era el indicado para eso.
Sin más, se alejó mientras la lluvia se hacia mas pesada para ambos, como si aquellas últimas palabras hubiesen invocado aquel diluvio que ahora acompañaban el dolor del albino, que se culpaba así mismo sin poder evitarlo...
Su instinto hollow y parte de sus sentimientos le hicieron daño a su portador, a pesar de lo que le había dicho.
"Lo cumpliré"... ¿Qué clase de mentira fue esa?
Aunque no fuese precisamente su voluntad la que estuvo presente en la batalla, por supuesto no iba a proteger a esa puta pelirroja, y el Quincy también estaba metido en ese combo.
A pesar de tener fuertes sentimientos por el Shinigami, y haberle confesado todo hace poco...no significaba que aun no le tenia celos a sus amigos, familia...y mas que nada a aquella 'amiguita'. Se había tragado aquello solo para no perturbar al Kurosaki en su misión, pero ya había sido suficiente.
También aprovecho la oportunidad de destruir al Cuarto Espada, Ulquiorra. Ichigo estuvo a punto de morir mas de una vez, y rozó la muerte dos veces gracias al mismo Arrancar, ¿acaso creía que se quedaría de brazos cruzados a verlo todo? Jamás.
Pero lo que mas le dolía era la reacción de Ichigo ante sus actos, tenia sentido que no lo aceptara, después de todo... él no era así. Debió pensarlo antes de hacer nada...pero aquel agujero en su pecho le consumía la vida en cuestión de segundos... ¿Cómo debía sentirse?
- "¿Yo fui quien apuñaló a Ishida?"
Sus piernas le ayudaron a encogerse, abrazándolas para apoyar su cabeza en ellas, escondiendo su rostro empapado de la mirada inexistente que le recalcaban su idiotez.
- "¿También fui yo el que te cortó el brazo y la pierna?"
- No... -Respondió, como si el pelinaranja le pudiese escuchar, como si de algo cambiaría la situación en la que se encontraba.
- "¡Entonces, corta los míos!"
- "Estaba inconsciente cuando luché contigo en esa forma de Hollow. Ese no era yo. ¡No sería una pelea justa a menos que esté en las mismas condiciones que tú!"
No supo porque esas frases se reprodujeron tan lento en su mente, pero no pudo evitar gruñir molesto. Se percató también que estaba caminando ahora, todo se veía cada vez mas oscuro mientras daba cada paso, hasta notar donde estaba.
- "¡No quiero ganar de esta forma!"
Esas palabras retumbaron en el lugar, como si todo a su alrededor fueran paredes que provocaron el eco en su interior. Y la razón no se hizo esperar, un luz familiar a lo lejos se acercaba, mostrando en la pantalla el rostro de su portador.
Nuevamente, está triste...
¿Y que estaba haciendo él? Arruinándolo.
Odiaba ver esa expresión en sus ojos caramelo, ver como casi se sacrificaba por su culpa, sentir como se derrumbaba al ver a Ishida lastimado por su arma, como casi mata a Ulquiorra sin ser él mismo...
Y de nuevo apareció ese fuerte dolor en su pecho, acompañado con el ardor en sus ojos que aseguraba no era culpa de las gotas que antes cayeron en ellos. Se sentía pésimo, como si nada hubiese cambiado aquel día...
- Ichigo... -Le llamó sin fuerzas, quería abrazarlo, decirle tantas cosas, pero dudaba siquiera poder dirigirle la mirada de frente. Y aquella pantalla de recuerdos solo mostraba su rostro de varios ángulos, dejando ver su desesperación y angustia mientras Ulquiorra desaparecía frente a sus ojos.
Apretó los puños con fuerza, su rostro contorsionando en ira hacia si mismo. Nunca pensó llegar a ser tan patético, de llegar a infligir miedo en el Shinigami a arrepentirse de hacerlo llegar a esa transformación, solo para salvarlo...
Había intentado pensar en que hubiese pasado si no le daba aquel poder, si quedaba con aquel agujero en el pecho... Solo logró odiarse más, por no haberlo protegido antes, nada de esto hubiese sucedido.
- Perdonadme, Ichigo...
...
- No te disculpes, Shiro.
Sus ojos se abrieron como platos, sin saber cuando los cerró. Esa era la voz de Ichigo, pero no veía en ningún lado. Su mirada se dirigió hasta la pantalla el cual ahora se veía el Kurosaki de frente a él.
- ¿Kurosaki-kun...? -La voz de Orihime también se escuchó, e Ichigo volteó a verle.
- Inoue, te encargo a Ishida -Le dijo serio, y la chica no tardó mucho en asentir hasta ir junto al de lentes dejando de lado las palabras que escuchó decir del pelinaranja.
Shiro lo miró aun quieto, Ichigo tampoco se había movido de su posición mirando a sus dos amigos. De pronto aquella imagen se paralizó, oscureciéndose lentamente hasta desaparecer y notar que ya no estaba en aquel lugar, sino en uno de los edificios de la mente de su Rey.
Eso significaba...
- Shiro.
Un escalofrío recorrió su espalda, de pronto sentía su cuerpo temblar a cada paso que daba el Shinigami mientras se acercaba a su posición. No se giró obviamente, y pudo notar que la mirada acaramelada se intensificaba en él.
No podía decir que tenia miedo del Kurosaki, pero si le angustiaba la visión que tendría hacia su persona. Él le había dicho que no le odiaba, pero ahora no podía estar tan seguro de aquello...no quería afrontar el rechazo, temía que solo se hubiese atrasado esa respuesta negativa y solo se dio una falsa esperanza de poder estar bien con Ichigo.
- Mírame, Shiro.
Lo aceptaba, cualquier insulto, regaño o ataque hacia su persona lo permitiría sin rechistar. Se lo merecía.
Cerró los ojos, la distancia era la suficiente para darle un ataque que le dejaría bastante lastimado, ¿o quizás no estaría satisfecho con ello? ¿Tendría que hacerle añicos su cuerpo? ¿Romper sus huesos? Realmente, no le importaba justo ahora.
Porque en ese momento, algo le rodeaba su cuerpo dándole la calidez que nadie mas podía darle.
- ¿I-Ichigo...? -Hasta ahora no había notado las lágrimas que caían de sus ojos, puesto que se confundían con las gotas de lluvia que apenas empezaban a cesar. No sabia la razón hasta que lo sintió mas cerca, confortándolo...y a la vez, disfrutándolo él.
- Baka, te dije que no me gustaba verte llorar -Dijo rasposo en su oído, sacándole un sonrojo por aquel tono sensual en que lo pronunció- También dije que me miraras...
- No... -Respondió, dándose cuenta de que su voz sonaba ronca. Pero no pudo hacer nada contra aquellos brazos que le hicieron voltear hacia él, pero aun así desvío la cabeza- Ichigo...para...
- No estas en posición de pedirme eso -Gruñó y tenia razón, después de todo esto era lo que ya tenia previsto. Le miró a los ojos y no pudo definir aquella mirada que le dirigía- ¿Por qué lloras?
- ... -Quería apartarse, dejar fluir esos sentimientos que le estaban comiendo por dentro, ¿por que tenía que preguntarle eso? No le iba a responder, y eso lo notó el Kurosaki, lo que le hizo suspirar.
- No estoy enojado contigo -Le indicó con tranquilidad, sorprendiendo al oji-ámbar- Más bien, estaba preocupado...
- ¿Ah? -Era poco decir que estaba descolocado, anonadado, ¿de qué estaba hablando?
- En esa forma, pude sentir de nuevo aquella soledad e ira...me sentí culpable -Bajó un poco la mirada el pelinaranja, aun para sorpresa del hollow- La quería proteger, les quería salvar...pero, tal vez si hubiese pensado un poco más en ti, nada de esto hubiera pasado.
- Ichigo... -El nombrado subió la mirada para encontrarse con la del contrario, la ambarina mostraba dolor y molestia junta- ¡Eso no importa! Yo solamente...sólo... -Cerró los ojos con fuerza- ¡No te quería perder!
Ambos se sentían idiotas por no darse cuenta de como estaba realmente el contrario, llegando a situaciones como estas. Pero se querían tanto que compensaba todo el dolor sufrido, se necesitaban mas que el oxígeno que utilizaban, sin importar que sucediera...ambos se preocupaban el uno al otro.
Una sonrisa apareció en los labios carnosos de Ichigo, llevó una de sus manos a la mejilla blanquecina para limpiar los rastros de lágrimas y lluvia de está, haciendo que éste abriera un poco sus ojos.
- Gracias -Dijo con sinceridad, sus miradas se volvieron a cruzar y fue que Shiro notó que tan cerca estaba el contrario, pero era tarde cuando ya su boca estaba apresada por la de Ichigo.
Cerró los ojos de nuevo, disfrutando su conexión y el como la lluvia por fin se detenía. La odiaba, y más odiaba la tristeza de su Rey, pero ya no sentía nada de aquello en él, creando paz en su interior.
Sólo quería que fuera feliz.
A la distancia, la otra parte del alma del Kurosaki miraba todo con tranquilidad. Podía decirse que se le notaba feliz de que la lluvia se detuviera, o porque su portador y su 'compañero' arreglaran sus confusiones. Se dio la vuelta y se alejó sin ser detectado, prefería dejarlos solos, sabiendo que esto no terminaba aún.
Se separaron con la respiración un poco alterada, sonriéndose sin necesidad de decir nada. Aunque esta vez Shiro, que había gastado bastante reiatsu en la batalla, no pudo reaccionar ante la mano que iba bajando por su cadera.
- ¿I-Ichigo?
- Creo que no dije que te perdonaba, ¿cierto? -El albino se sorprendió, pero tuvo que retener un suave gemido cuando su glúteo izquierdo fue apretado- Por tus actos, voy a tener que castigarte~
(Aquí comienza el lemon. Está bajo responsabilidad del lector seguir leyendo. Hay otro aviso más abajo donde acaba la escena)
(...)
- ¡I-Ichi...go! -Su garganta dolía de tanto gritos y gemidos que había soltado en ese rato, ya no veía nada por sus ojos nublados de placer- N-No...ahh...pares~
- A-Ahg...callate...uhg... -Empujó con mas fuerza dentro de él, agarrando el cuello que ahora tenia algunas marcas de sus dedos ante la fuerza que ejercía en este y agarrando su pierna para impulsarse desde atrás. Su cuerpo arrodillado en una ventana de aquel edificio, el Hollow teniendo la misma posición pero al frente del Shinigami.
Aunque la posición no duró mucho más. Ichigo soltó su cuello dejando caer al albino, se acomodó un poco antes de volver a embestirle mas a fondo, tocando un punto que hizo gritar a Shiro.
- ¡A-Ahí~! -Apretó con fuerza la tela de su kosode que hace tiempo había sido retirado de su cuerpo, casi la rompía sino fuera por otra oleada de placer que le recorrió desde su anatomía, la cual ahora estaba siendo masturbada por la mano del Shinigami. Se aguantó esas sensaciones hasta que ínsito su acabada, logrando desesperarlo.- I-Ichigo...y-ya no...¡A-ah!
Pero al decir eso, de pronto Ichigo salió de su cuerpo, haciéndole hasta sentirse vacío. Le miró enojado con intenciones de reclamarle, hasta que vio la sonrisa burlona del Shinigami seguido de que sus muñecas fueron tomadas y llevadas hasta su espalda baja, siendo amarradas por la misma cinta que sostenía su Hakama.
- No te dejaré venirte aún, esto es un castigo -Tuvo que aguantar reírse por la expresión sorprendida y hasta casi dolida del albino, parecía como si le hubiesen quitado su juguete favorito- Ven aquí -Se sentó en lo que era el marco de la ventana, abriendo sus piernas lo suficiente para dar a entender que era lo que quería. Shiro tragó saliva y se movió hacia él con dificultad, miró toda la longitud de su miembro y dudó, pero ante la mirada expectante del Shinigami concluyó en empezar a lamer desde lo mas abajo de su falo hasta el glande varias veces, hasta por fin atraparlo entre su cavidad bucal.
Pudo escuchar un suave sonido proveniente de Ichigo y de pronto todo esto le pareció divertido. Con lentitud empezó a mover su cabeza, masturbandolo con su boca, chupando y lamiendo desde dentro, todo a un ritmo tranquilo que pronto fue interrumpido por las manos desesperadas del pelinaranja que le empujaron para meterlo completo, rozando así con su garganta.
Apenas se puso quejar, puesto el vaivén empezó a hacerse mas rápido aunque sin ritmo específico, solo se escuchaban los gemidos del Kurosaki hacerse mas fuertes e irregulares. La vista que tenia desde abajo le había excitado tanto que ahora casi que sollozaba por no poder atender su miembro que goteaba. Casi en reclamó decidió chupar mas fuerte, sorprendiendo y alarmando al pelinaranja.
- ¡Shiro, alto! -Le ordenó prácticamente, aunque él mismo le separó de su miembro- Joder, ¿qué te pasa? ¿Tanto quieres recibirme? -Preguntó "molesto", no iba a admitir que estuvo a punto de correrse gracias a la boca de su hollow.
- ¿Y aún lo preguntas...? -Hizo un puchero mientras movía su cadera de un lado a otro, logrando hipnotizar al contrario- Además, no quieres acabar...¿dentro de mi? -Sonrió ladino, logrando su cometido y de paso condenándolo también.
- Si tanto quieres que te rompa el culo, pues que así sea -Fue directo a robarle un beso que le quitó el aliento por ser tan repentino, pero tan rápido como se lo dio también se lo quitó, ordenándole que se volteara y así hizo de inmediato. Ichigo no daba crédito a la vista que le permitían sus ojos ver, Shiro con su trasero arriba mientras su pecho y cabeza se recostaba contra el vidrio, sus rodillas lo suficiente separadas para darle espacio para entrar... No dudo en ir hasta él y besar su espalda, besando luego sus muñecas antes de jalar la tira, sacando su gemido de dolor placentero al tenerlo suspendido en el aire, pero todo se vio detenido por la estocada directa a su punto mas sensible.
- ¡A-Ah! -Gimió con su lengua azulada fuera, sus ojos habían perdido órbita por momentos, aunque volvieron a hacerlo gracias a que Ichigo repitió el acto, una y otra y otra vez...
Gotas de sudor resbalaban por el físico esculpido del Shinigami, estaba llegando al límite ya no iba a ser capaz de detenerlo, mucho menos por tremendo acompañante que tenía, el cual movía las caderas al compás de sus embestidas.
- ¡M-Mi Rey~! ¡Me ve-vengo...!
- ¡Y-Yo también...!
Con tres estocadas mas, la semilla de Shiro salió disparada sin detenimiento alguno, seguido por la de Ichigo que le lleno cada rincón en su interior, que sólo cuando salió del él fue que soltó aquel líquido espeso. El Kurosaki desató sus manos y estos cayeron como plumas al suelo, como su cuerpo después que el pelinaranja lo soltara, y eso le hizo sonreír satisfecho. Tomó el kosode blanco para arroparlo lo más que podía para seguido vestirse.
(Hasta aquí llega el lemon(?)
- Descansa -Le susurró en el oído, aunque duda que le haya escuchado pues parecía estar demasiado exhausto, cosa que era rara en él pero no le dio demasiada mente. Le dio un suave beso en la mejilla antes de desaparecer de allí, tenía que ir a ayudar a sus amigos ahora, y eso le daría tiempo de descanso al albino.
Unos minutos más tarde cuando todo parecía estar en silencio, de pronto la risa de aquel ser estalló. Era tan genuina que no parecía él, pero se sentía demasiado bien como para retenerla. Se sentía humillado y a la vez agradecido, ¿cómo había llegado a ser así? Ni con un adivino llegaría a una respuesta concreta, pero Ichigo había hecho estragos en él.
- ¿Se divirtieron? -La voz del viejo sólo hizo que el oji-amabrino volteara a verlo, su risa apagándose dejando su gran sonrisa en el rostro.
- Como nunca, Ossan -A pesar de verse cansado se intentó levantar, teniendo que detenerse de inmediato ante un fuerte pinchazo en su parte trasera. Se quejó varias veces sin poderlo evitar- M-Maldito Ichigo...
- "Como nunca", ¿no es así? -Una pequeña sonrisa que Shiro reconoció como en burla le hizo tener que retroceder antes de ser golpeado por el shitagi negro del contrario. Escuchó un bufido de parte del albino mientras giraba la cabeza y se cruzaba de brazos en un puchero.
Tomó aquella prenda del piso y luego le volvió a ver antes de acercarse para tendérsela. Shiro le miró de reojo y de un movimiento rápido se la quitó de las manos bajo la sonrisita burlona que no se había quitado de la casi siempre estoica cara del viejo.
- No te soporto.
- Lo sé, Gaki.
Fin.
¡TERMINADO! ¡Espero les haya gustado! x3
Nuevamente agradezco a Ely p y a Seishin19 por su incomparable apoyo, ellos son la razón por la que escribo, y me alegra ver que hay gente que si le agradan mis escrituras. También agradezco reviews con sus humildes opiniones, intento responder siempre que me paso por aquí n.n
¡Nos veremos a la próxima! ¡Sayo~!
¡Gracias por leer!