N/A: Creo que no tienen idea lo sentimental que me dejó escribir el último. Agh, justo en mi kokoro. Y en fin: ¡El final! ¡Es hoy! ¡Es hoy! :D

Rated: K

Palabras: 442

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Free day: día libre

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Futuro

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Lucy quiso soltar un quejido monumental cuando escuchó el golpe en la puerta de su habitación. Apretó los ojos con fuerza antes de comenzar a pestañear al mismo tiempo que su pequeña hija entraba gritando.

—¡Mamáaaaaa! —¿cómo diablos se había estado bajando sola de la cuna los últimos tres días? Había revisado todos los barrotes y los filtros de seguridad. La niña de casi tres años se aventó hacia sus piernas dando berridos.

No había notado el momento en que ella se había incorporado con rapidez para atrapar a su hija en el aire, pero lo hizo—, ¡Mamáaaaa!

—Tranquila, tranquila —acarició su cabeza—, ¿estás bien?

Siguió llorando desconsolada.

Atrás de ella, hubo un pequeño gruñido y giró para encontrarse a Natsu, todavía boca abajo, apoyandose en ambos codos y mirándolas con un ojo entreabierto y el otro completamente cerrado.

—¿Qué le pasó?

—Eso intento saber.

Él se talló los ojos con el dorso de la mano y ella palmeó la espalda de la bebé. Se giró ignorando a su esposo que salía de la cama y caminó hacia el cuarto de la niña.

Todo pintado de rosa, con muchos juguetes en un lado y la cuna sin abrir del otro.

Su hija la estaba dejando sorda con los chillidos.

—Ven aquí, pestañas.

Natsu la tomó de ambos brazos y ella la soltó para revisar la cuna con más detalle. Natsu siguió hablando con su hija, intentando calmarla mientras ella investigaba que estaba pasando.

La niña empezó a hipar mientras volvía a verificar la posición de los barrotes.

—¿Ves? No tienes por que llorar así, ya estamos aquí.

Si de por sí las palabras de la pequeña eran poco comprensibles, es ese momento soltó una tanda que no lo entendió ni Dios. Natsu se comenzó a reír.

—Tiene hambre, Lucy.

—¿Qué? —Levantó la cabeza por encima de la cuna—, ¿entendiste eso?

Natsu en la entrada de la habitación, le sonrió presionando una mejilla de la niña—. Es que se parece a mí.

Y sí, en efecto eran una copia casi exacta. Solo había sacado sus ojos oscuros y las largas pestañas enmarcandolos.

Happy entró volando a la habitación desde la ventana y paró en seco cuando los vio a ambos ahí. Atrapado.

El que había estado sacando a su hija de su cuna.

—¡Happy!

El gato se rascó la parte de atrás de su cabeza—. Aye, le quería hacer algo de comer y se me perdió.

Ah. Entonces lloraba desconsolada por haber perdido a Happy. Natsu se fue de la habitación riendo y llevandose a su hija consigo.

—¿Qué quieres comer Happy? —El gato ronroneó, dándole una mirada que conocía bien—, pescado será.

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Nota: Lo que comenzó como un viaje que se suponía iba a ser corto terminó dos años después, con una sensación muy bonita en general por hacer todos estos drabbles. Sí, me costaron más trabajo del que supuse porque o no tenía tiempo, o se perdían o en general no me inspiraba el prompt, ¡pero al fin ya lo terminé y espero que a ustedes les hayan gustado!

¡Lamento mucho la tardanza! ¡Muchas gracias por leer esta historia y que le dieran una oportunidad, y gracias a todos los que le dieron fav y follow, y por supuesto muchísimas más gracias a aquellas lindas personas que dejaron comentarios, que se emocionaron con algunos prompts, los que a pesar de tardarme aaaños en subir siempre estuvieron apoyándome n_n, no creo que tengan una idea de los bonitos sentimientos que me han hecho sentir por ustedes.

¡Hasta parece que me estoy despidiendo para siempre! ¡Nos leemos en más historias!

¡Los quiero!

Pd. Si les gustó esta historia, pasen a mi perfil. ¡Tal vez les guste alguna otra! (Plx, necesito patrocinadores xd)

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BONUS:

—¡TE VOY A ASESINAR! ¿¡COMO TE ATREVES A INTENTAR DARLE PESCADO CRUDO A MI HIJA!? —gritó Lucy desde la cocina, Natsu abrazó más a la niña, evitando que viera las riñas de su madre y Happy salió volando a toda velocidad por la puerta de la cocina.