Temporada de caza: Otoño II

Necesidad

"Hecho o circunstancia en que alguien o algo es necesario"

"¿Cuándo usaste esto?"

Nico miró por encima de su libro. La sonrisa tonta de Percy fue lo primero con lo que se topó.

Ah y sin poder ayudarse a sí mismo un rojo brillante se propagó simétricamente a través de sus pómulos.

"No te importa"

Percy se acercó a él sosteniendo un saco blanco colmado de holanes. Agitó la prenda frente a Nico, para hacerle saber que estaba ahí. A veces cuando su primo se siente incómodo o avergonzado va a ir y fingir que nada sucede. Percy hizo una mueca cuando el niño siguió leyendo sin prestarle atención. Él ama ser el centro de atención de Nico.

"Oye, vamos no puede ser tan malo" Su ceño tembló un poco con la mirada fugaz que su primo le lanzó. "Bueno sí. Es horrible, pero siempre te ves adorable en todo lo que te pones." Nico alzó la mirada ahora mostrando interés instando al muchacho a continuar con lo que decía. "¿Podrías por favor ponerte esto? Creo que si te veo con está cosa podré morir feliz" Percy tuvo que tragarse las ganas de reir.

La respuesta inmediata de su primo fue poner los ojos en blanco.

"Es ridículo."

Percy se rió.

"No es ridículo, Nico." Posó una mano en su cadera como si estuviera indignado. Colgó el saco sobre sus hombros. "¿Ves? Ahora, si tú no fueras un pequeño tonto te probarías esta maravilla para mí y podríamos hacer algo divertido. Tú y yo y esta cosa y me refiero a que no llevarás nada más que esto." Tocó el saco para mostrar su punto y santo Dios cuando movía así las cejas Nico sentía como que se iba a desmayar.

"Eres ridículo, Perseo" Dijo mientras le pinchaba la nariz con una sonrisa peligrosa. Se acercó asegurándose que sus labios rozaban los de Percy causando que tragara seco. "Cuando me lleves a Italia entonces voy a usarlo" Retiró la cara y delineó su contorno desde la rodilla hasta su cuello. "Mientras tanto voy a asegurarme de que me siga quedando. Ya que es pequeña y muy, muy apretada"

La garganta de Percy se secó. Tomó su lugar cerca de Nico y señaló el libro que sostenía.

"¿Lee algo para mi?" Su primo enarcó un ceja al tiempo en que se ajustaba en la estrecha cama y comenzó a leer en voz alta.

Nico resopló cuando se dio cuenta que Percy estaba durmiendo. "Por supuesto que ibas a hacer eso".

Cerró el libro con un ruido fuerte. Hizo una mueca al ver que su primo no se despertó muy por el contrario suspiraba muy a gusto. Sus dedos se dedicaron a acariciar el mechón más largo.


"¿Tengo algo en la cara?"

Su mente estaba de vuelta a la realidad. Mordió su lengua cuando se dio cuenta que sus ojos habían estado clavados en el niño. Aunque en realidad, después de un rato solo estaba absorto en sus pensamientos. Nada más que eso.

No tenía idea de qué hacer. Lo único de lo que estaba seguro en ese momento era que el niño parecía tener poca paciencia. Poseía una mirada penetrante y abrumadora.

Estaba esperando por su respuesta.

"No" Reconoció. Se aseguró de sostenerle la mirada mientras respondía. Mostrando que no estaba para nada intimidado.

"¿Te conozco?" El ceño del niño se remarcó.

"No" Repitió.

"¿Me conoces?" Percy casi retrocede en el momento en que el otro se acercó.

"No"

"Entonces deja de mirarme" Pronunció lentamente, llegando a sonar más como un consejo que una orden.

Percy no pudo mover un sólo músculo. Para cuando recobró la compostura una brecha de 3 metros los separaba. Lejos de estar molesto tenía esta leve sensación de desencanto. Parpadeo rápido para despejarse. Vio al niño dirigirle una mirada de soslayo aunque fue meramente fugaz al igual que el tiempo que le tomó subirse la capucha. Pese a que no era más que un extraño no pudo ayudarse a sí mismo al sentirse ignorado. Bien, ahora, después de todo sí estaba molesto.

"Perdón por llegar tarde… ¿Percy?"

Era semi consciente de que llamaban a su nombre pero se encontraba incapaz de enfocarse en algo que no fueran sus pensamientos.

"¿Percy?"

Orientó la mirada hacia la rubia y tardó unos segundos antes de recuperarse de la conmoción. Sonrió y la abrazó en silencio. Ella dejó salir una risita cariñosa y le acarició el pelo de la nuca.

"¿Estás bien?" Preguntó mientras se separaban. "Por un momento imaginé que iba a tener que echarte agua encima… Me asustaste" Codeó a Percy como recriminación. Él se disculpó. "Bien, bien. ¿A dónde vamos, sesos de alga?"

"A donde quieras, Beth" Comenzaron a caminar. Annabeth recargando su brazo entre la sangradura y el brazo de su novio.

El arrebol crepuscular estaba por desaparecer cuando Nico decidió irse.


"¿Nico?"

Se volteó para ver a Jason Grace. El rubio con la mirada extrañamente reconfortante, Nico apartó la mirada. Jason se acercó cauteloso, con miedo de espantarlo. Hacía no menos de dos semanas que no tenía idea de la existencia del joven y aún así ahora no dejaba de preocuparse por él.

"¡No te me acerques!" Nico gritó. Por algo más que simple inercia Jason se detuvo. "Odio estar aquí, odio todo."

Jason pensó en todo lo que su padre, Zeus, le había dicho sobre la familia di Angelo. Nico definitivamente había pasado por mucho para ser un niño de diez años. Él mismo se pregunta si podría manejarlo, sólo se le ocurre que no.

De ninguna manera le tiene lástima, es que, él siempre sucumbe ante los ojos llorosos. Thalia, su hermana menor, siempre le dice que eso no le hará ningún bien… pero ¿Quién escucha a las hermanas menores en estos días?

Nico tiene un pose demasiado defensiva. Jason da un paso adelante y su primo lo hace también, tal vez para demostrar que no iba a retroceder ¿quién sabe?. Nico parecía estar listo para soltar un buen puñetazo en cualquier momento.

"¡Vete…-" El niño trató de empujar al rubio, sin embargo, Jason ya lo estaba abrazando muy fuerte.

"Vas a estar bien, Nico"

Y eso bastó para que cediera. En ese momento se derrumbó. Justo lo que necesitaba.

"¿Por qué tuvimos que venir a América? ¡Quiero de vuelta a mi mamá! ¡Quiero ver a Bianca!" Finalmente estaba llorando, finalmente tenía un hombro donde hacerlo.

Algunas otras cosas que dijo Jason no las pudo entender, esa fue la forma en que Nico se debía sentir todo el tiempo.

El niño entendía y hablaba el inglés vagamente siendo su lengua materna el italiano, no tenía a nadie más a parte de su familia que pudiera entenderlo. Comunicarse era un reto.


"Amor"

"..."

"Nico"

"..."

"Nico, despierta"

"Mhm"

Percy se acercó al oído de Nico.

"Creo que tú papá acaba de llegar" Susurró con el corazón latiendo con fuerza.

Fue como una cubeta de agua fría cayéndole encima. De inmediato se levantó. Medio dormido no podía pensar con claridad ¿no era Percy el que estaba durmiendo?

"¿Hades? Pero si… pero si iba a llegar hasta el viernes"

"Yo no sé" Susurró alterado, sintiendo que sus nervios podrían traicionarlo en cualquier momento. No es como si hubieran estado haciendo algo "indecente" pero Percy no era exactamente la persona favorita de Hades en este mundo (o en otros)... Cada vez que lo mira a los ojos una brisa fría le rodea el cuerpo como si supiera el tipo de relación que ha construido con su hijo.

Cuando su familia estaba de visita su tío Hades apenas y le dirigía la palabra, se limitaba a mirarlo sólo cuando era extremadamente necesario, juzgando cada movimiento que hace.

Nico se mordió el labio a lo cual Percy tuvo que sacudir el pensamiento de que se ve lindo cuando hace eso, después de todo ya tendría tiempo para pensar en eso. Por ahora tenía que apurarse a salir de allí.

"¿Por la ventana?" El menor murmuró casi para sí. El de ojos verdes comprendiendo de lo que hablaba rodó los ojos por la sugerencia.

"Estamos en el segundo piso, Nico" Aunque dijo eso echó una vistazo rápido a la ventana, como era de esperarse no había manera en el infierno que bajara por ahí.

"No se me ocurre otra cosa… ¿Tal vez distraerlo con Hazel o algo?" Vaciló. Casi se veía enojado. Percy suspiró ¿cuál era el límite para hacer cosas estúpidas por Nico? Al parecer no había.

"Voy a bajar por la ventana"

Los ojos del niño volaron inmediatamente a los de Percy. Atónito.

"Percy, era una idea estúpida. No tien-

"No, no lo es. ¿Has olvidado que Hazel no está? Y si Hades me encuentra aquí nunca más me dejara verte. Eso no está en mis planes, además mi moto no está lejos del patio así que…" Se encogió de hombros.

La ventana de Nico por suerte daba al patio trasero, una bendición impuesta por azares del destino.

A veces piensa que haría cualquier cosa por el niño y es algo que debería asustarlo pero no es así. Como si un interruptor en él ya no pudiera apagarse más. Es curioso, porque ni siquiera piensa que Nico lo ama tanto como él lo hace pero aún así podría congelar el infierno por su primo.

"No pienso dejar que te mates, Jackson" Frunció el entrecejo. Bajo su mirada los hombros del hombre mayor se tensaron.

Por un breve episodio su determinación tembló. Nico sintió culpa por haber dudado en detener a Percy. ¿Acaso prefería dejar que se lastimara antes que enfrentar la ira de su padre?

Se sacudió cuando su primo le pasó la mano por los ojos. Se le quedó mirando atentamente como si todavía no procesara en dónde estaba. Lo único en lo que se podía concentrar era el verde intenso en los ojos de Percy. Como si un huracán lo arrastrara al ojo de la tormenta.

"Nico, no tenemos tiempo para esto" Hizo un ademán abriendo sus brazos como si pidiera un abrazo, pero no era el caso.

"¿Tiempo para qué?" Indignado cruzó sus brazos sobre el pecho. Ugh, a veces sólo era tan infantil, él lo sabía pero en momentos como este no le importaba hacer una escena.

"Para discutir"

"Bueno, nadie me dijo que lo estábamos" Por supuesto que es una persona obstinada e iba a seguir hasta que Percy le diera la razón. Está bien, quizá se estaba desquitando con él por toda la porquería que últimamente le pasaba. Para empezar ni siquiera tuvieron el tiempo de verse desde el comienzo del mes, luego las malditas pesadillas sobre Bianca y su madre casi todas las noches y recientemente su constante falta de apetito.

"¿Ves? Ahora lo estamos haciendo y no me vayas a decir algo como: "No, no lo estamos haciendo, Jackson. Es una charla". Tengo que salir de algún modo" Percy dirigió su mirada a la ventana mientras Nico chasqueó la lengua porque eso era exactamente lo que iba a decir.

Abrió la boca pero lo sea que iba a decir fue tragado por los labios de su primo.

"Te amo, Nico"

Se quedó ahí sin poder hacer o decir nada. Su corazón retumbaba veloz al igual que los pasos por la escalera de madera rechinaban.

No podría decir en qué momento Percy desapareció o desde cuando Hades lo miraba ahí de pie.


"¿Quiénes son los nuevos vecinos?" Jason le dijo a su hermana menor con waffles atiborrados de miel en su boca. Incluso no siendo eso suficiente enterró el tenedor agarrando un trozo bastante generoso y trató de meterlo en su boca miserablemente.

"Ewww, la miel se te escurre por la barbilla, prácticamente eso es más miel que waffles" Thalia hizo un gesto de desaprobación "Mamá dijo algo como los McLean".


Bien, volví y bueno yo sé que en general es bastante corto y al parecer carece de relevancia pero créeme cuando que te digo que no es así. La llegada de Piper es algo importante así como el sentimiento latente de culpa por parte de Nico.

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