con el titulo de Dragon oscuro, Vritra tallo su nombre en las paginas de la historia como un ser maligno que fue destruido por Indra, sin embargo, es poco lo que se sabe de esta historia ¿que tan cierta es realmente? mas importante, ¿cual fue el verdadero peso que tuvo el dragón negro en la historia y como esto afectara a quienes lo rodean actualmente?¿proteger o destruir? esta es la historia del Asura conocido como el Dragon de la prisión
Historia escrita sin animo de lucro para abrirle las puertas al 2017 y por que no tengo muchas mejores cosas que hacer
Citando a los videos Abridged: Highischool dxd y sus personajes pertenecen a Ichiei Ichibumi, la presente historia fue escrita con fines sin animo de lucro, por favor, apoyen a obra original... por mas dificil que sea hacerlo
WELOVEGB: vaya, un review de uno de los mejores escritores del fandom, todo un honor debo decir antes que nada, y me alegra mas al saber que tocaste unos puntos que la verdad debo aprovechar para explicar de una vez, para empezar, con lo primero que dijiste tuve que hacer una investigacion un tanto mas profunda, ya que tocaba adentrarse un poco en el tema de la religion Vedica para tratar todo lo que ocurrio entre Indra y Vritra por lo mismo, este fic va mas enfocado hacia la mitologia que hacia el canon de la novela ya que hay una clara diferencia entre el papel de Vritra en ambas versiones, mejor optar por la primera ya que estabamos en estas
segundo, yo tambien pense eso cuando toanei subio el cap de un fic similar hace tanto tiempo (si recordaba que alguien habia tratado de hacer algo como esto pero no recordaba si era en un fic en español o en ingles) queria ver algo mas enfocado a lo que nos podia mostrar el mundo que solo lo que antañe a Issei, despues de todo como dijo antifanboy "parece que la alianza esta mas centrada en contentar a Issei que a funcionar como un organismo en los fanfics de ahora"
y sobre lo tercero, tambien tuve el mismo descontento con la novela, creo que me parecio interesante hasta la novela 16 por que fue ahi donde me di cuenta que la formula en todas era la misma ( inicio casual del dia a dia - problematica o pensamiento de la chica de turno - intento de lemon que se corta cuando aparecen las demas del harem - se prendio el peo - sentimientos de la pelea a todo dar - power up de Issei - se acaba la pelea - momento x con la chica de turno) asi como dices, la novela pierde interes por que no hay nada que tenga un enfoque a futuro o que genere una verdadera espectacion, lo mas parecido era ver que en las ultimas novelas antes de la 20, practicamente todos los planes le salian a pedir de boca a Rizevim aun cuando los DxD ganaban la pelea, pero como dices "¿si uno ya sabe el final para que seguir leyendo?" y tampoco es que sea muy partidario del humor de la novela, entrando con lo de Asia la forma de ella de invocar a Fafnir o la forma en la que este influyo en los dragones de produccion en masa :v
Para cerrar, tienes razon, una de las cosas que hace a Saji Saji es el respeto que tiene por Issei, asi que esa parte por supuesto no la voy a descuidar
LIBERTAD: ok howdy, new chapter incoming Enjoy it
ERENDIR: hombre Erendir gracias, siempre sabes como animarme para escribir, y pues bueno, ya lo recalco WeLoveGb, hay un enorme paralelo entre Indra y Vritra en lo que infiere entre novela y mitologia por lo que ya ves
GUEST: ok, aca esta un nuevo cap, lo de blood trail ya lo ire trabajando
JORGE4: tratare de actualizarla lo mas seguido posible
DARIUS619: gracias por el apoyo hermano, pero para la otra ahorrate la publicidad
TOANEO07: bueno, de esto ya paso por que ya salio, lo unico es que le dejare el nombre como tal al fic
HORAKTHY BARAQ: bueno, eso solo fue un giro que se me ocurrio para el fic, segun Azazel, Vritra en comparacion a Draig o Albion es un gatito o algo asi no recuerdo mucho del tema, por lo que como dices, me enfocare mas en la mitologia que en el canon
El heroe del fuego negro
Capitulo 2: la noche de la diosa
Pese a lo que muchos podrían llegar a pensar por el rojizo color del cielo, el aire del inframundo no era diferente en muchos aspectos al del mundo humano, la brisa que soplaba refrescaba la piel de los demonios de la misma manera que las frías corrientes de viento lo hacían para los seres humanos, más en época de invierno tal cual lo era actualmente
Esta fue de las primeras cosas que noto Saji cuando piso por primera vez el suelo de aquel lugar dentro del territorio Agares, más precisamente la ciudad de Auros, lugar donde se había construido la escuela de Rating Games la cual había sido el sueño de su ama y señora y de buena parte el suyo mismo, de aquello se dio cuenta cuando estaba peleando poniendo su vida en la raya contra Wallburga, contra Grendel y contra Ladon precisamente para evitar que esta cayese ante el reciente ataque de los dragones oscuros
Y sin embargo había fallado, la escuela había sido destruida así como buena parte de Auros, para peor descontento propio, el plan de Quillipot había salido a la perfección, todo lo relacionado con ese ataque había sido únicamente para desenterrar y apoderarse de Agreas, la isla flotante, de eso ya había pasado poco más de dos semanas y desde entonces buena parte de esa bucólica ciudad ya había sido reconstruida, así como la misma escuela
El rubio apretaba sus puños imponente estando frente a la entrada de la escuela de Auros, mirando al suelo frustrado
-al final no fui lo suficientemente fuerte…-
Susurro para sí mismo, era cierto, la escuela había sido reconstruida y en buena parte el enfrentamiento había hecho que la popularidad de la misma aumentase, era una enorme ventaja para cuando esta abriese oficialmente, pero eso no quitaba que había fallado en la tarea de proteger el sueño de su ama ¿la próxima vez correría con tanta suerte? ¿la destrucción se limitaría nada más a unos cuantos edificios y tierras agrícolas?
-tú no tienes la culpa Saji, hiciste mucho más que nadie para proteger a las personas dentro de la escuela, date por bien servido al haber protegido sus vidas-
Fueron las palabras que le dedico su ama poco después de la invasión, ella trataba de reconfortarlo al ver como él se sentía desmoralizado tras haber luchado con tanto ímpetu, haberse enfrentado a las llamas que hirieron mordazmente a Sairaorg Bael y salir triunfante ante estas con el poder de su Balance Breaker, pero pese a sus palabras, las lágrimas de Sona Sitri ya secas relucían en sus mejillas, mostrándole a este como a ella le había dolido horriblemente ver las instalaciones del lugar destruidas, esa era la clara señal de su fracaso
Por eso mismo estando en ese lugar, no podía evitar sentirse decepcionado, curiosamente la única victoria que hubo ese día, fue la captura de Euclide Lucifuge y esta como muchas otras victorias, era gracias a Hyodo Issei
Durante mucho tiempo él había estado viendo al As del grupo Gremory con bastante admiración, para él era un ejemplo de superación, un demonio de clase baja que había ido trepando poco a poco a la cima protegiendo a todos a su alrededor volviéndose cada vez más fuerte, sin duda alguna era su ejemplo a seguir, pero tras enfriarse su mente tras el calor del momento no pudo evitar sentirse disminuido por eso mismo, Issei había triunfado donde él había fallado miserablemente
Necesitaba ser más fuerte
Eres extraño, Saji kun
Todos esos sentimientos habían salido a flote nuevamente por culpa de una persona, la extraña violinista a las orillas del rio la noche pasada
-aja…Daisuki…- bufaba el rubio mirando con una ceja arqueada a la extraña violinista, cruzado de brazos -… o sea te llamas "te quiero…-
-hi…- contestaba la oji gris divertida, guardando su violín en su estuche y levantando el pequeño bafle, guardándolo todo en un bolso de viajero -…¿te gusta mi nombre? Creo que es mejor que Saji…-
-déjate de bromas y dime tu verdadero nombre de una vez…- cabía decir que la forma enigmática de hablar de esta era algo estresante para el peón Sitri, más cuando ella se empecinaba en comportarse de manera tan infantil
-¡Nuop!¡de momento nuop!...- contestaba descaradamente llevando ambas manos a su espalda inclinándose hacia el rubio -… si no me recuerdas no tiene caso recordarte mi nombre-
-¿nos conocemos de alguna parte?...-
Si ella decía que él debía recordar su nombre, probablemente era porque se habían visto en el pasado, pero la sola idea prácticamente se descartaba sola, el recordaría sin ninguna clase de duda a cualquier persona que le hubiese hablado de Vritra en el pasado, mucho más si era una belleza como ella, sin embargo, esa pregunta fue un balde de agua fría para la misteriosa chica
-por supuesto que sí, pero no parece que me recuerdes de verdad…- murmuro con bastante pesar, el suficiente para pensar que definitivamente no estaba bromeando en ese aspecto -…bueno, en parte esperaba algo así por lo que no tiene caso insistirte en que lo hagas…-
Rápidamente el rubio se alertó, aleteando sus manos nerviosamente
-oye en serio, discúlpame, si nos hubiésemos antes definitivamente te recordaría, pero en serio no creo que nos hayamos visto antes ¿de dónde me conoces? -
Esa chica sin duda era extraña y era desquiciantemente enigmática, pero no parecía mala persona por lo que no quería hacerla sentir mal, quizás charlando con ella pudiese saber un poco más de Vritra ya que ella parecía saber algo sobre el dragón de la prisión
Para confusión de él, la peli azul sonreía tenuemente tras su decepción inicial, como si hubiese asumido el panorama que ella no esperaba
-No pasa nada, si dice que no me recuerdas es porque así es, no eres la clase de persona que mienta a quienes son importantes para él…- respondía ella dedicándole una sonrisa amena -…bueno, entonces creo que lo lógico será empezar de cero ¿tienes algo que hacer mañana? - pregunto ella proponiendo lo que podría ser una cita, sin embargo, el rubio centro su atención en específico que ella dijo
"importantes para él"
¿ella estaba asumiendo que era alguien importante para él?
-la verdad, tenía cosas que hacer algo lejos de aquí…- contesto este rascándose la cabeza desviando su mirada a un costado
-¿en el inframundo?...- pregunto ella asertivamente arrancándole un suspiro al rubio
-así que también sabes sobre eso…- contesto este asumiendo que esa chica sabia muchas cosas sobre él como para pensar que se estaba equivocando de persona
-sí, tu presencia demoniaca te delata…- contesto esta divertida para luego mirar al rubio con cierta aprehensión -…¿Por qué decidiste volverte demonio? No puedo creer que el gran Saji haya entregado su alma al inframundo…-
-es una larga historia…- contestaba este ya asumiendo que esa chica era un misterio que tendría que desvelar, no era normal que ella supiese tanto sobre él y que le hablase de esa manera -…además ser demonio no tiene nada de malo ¿Por qué lo haces sonar como si hubiese hecho una estupidez? -
-hi hi como tú digas…- contestaba alzando sus brazos decepcionada -… lo hago sonar como una estupidez porque realmente es eso, pero esta no es la noche para decir por qué…- tras decir eso, ella era ahora quien miraba al peón Sitri con cierta decepción -… no puedo creer que el gran Vritra se haya reducido a esto…-
Por supuesto el rubio no iba a dejar pasar tal ofensa, así como así
-¡oye!¡¿pero qué te…?-
-te has vuelto débil, eres extraño Saji kun-
El Exabrupto de rubio prácticamente desapareció ante tan cruda afirmación, quedando atónito ante la fría mirada de la oji gris, ya no era solo decepción, ahora también había algo de enfado en su mirar
-No tiene caso hablar más esta noche…- finiquito la peli azul llevando su mano al pecho del rubio -…si quieres saber más sobre mí y sobre ti, te espero mañana en el Boulevard comercial de la ciudad, si no, olvídate de que existes y limítate a ser un triste demonio…- tras decir eso, un aura grisácea rodeo la mano que estaba en el pecho del chico, haciendo que este palpitase con fuerza ante la repentina sensación de algo entrando en su ser
-[el estará allá en la noche como desees]-
-¡¿pero qué?!...- exclamo el rubio exaltado ante la aparición de Vritra tras tanto tiempo sin haberle dicho una sola palabra
-sé que será así…- concluyo ella dándose la vuelta, comenzando a caminar en direcciona la caudal del rio alejándose poco a poco, sin embargo, pese a la distancia, Saji claramente pudo escuchar lo que ella dijo a la distancia, aumentando aún más las dudas que lo estaban asaltando
-…mi otra mitad…-
-Mi otra mitad…- susurro recordando claramente esas palabras, no era fácil olvidarlas, esa era la forma en la que la criatura en su interior lo llamaba ¿Por qué ella lo llamo de la misma manera? No había manera alguna en la que ella pudiese saber la forma en la que él hablaba con Vritra
Sin embargo, estaba el detalle de que ella prácticamente lo sabía todo sobre él, y si tenía en cuenta lo que sabía sobre el dragón de la prisión, prácticamente sabia más sobre él que él mismo
Curiosamente, durante la noche no tuvo su sueño recurrente de la ciudad destruida bajo el fuego de Vritra, sin embargo, su mente ahora estaba llena de dudas y de preguntas sin respuesta, no pensaba que lo hubiese hecho adrede, pero definitivamente ella había tocado un nervio sensible en él
"te has vuelto débil"
Por culpa de esa maldita frase ahora se encontraba molesto consigo mismo, reexaminándose buscando lo que hubiese hecho mal
-¿realmente soy tan débil?...-
Se preguntó a sí mismo, no llevaba mucho tiempo convertido en demonio, mucho menos de haber despertado el poder de su dragón, sin embargo ¿era culpa de su propia debilidad la destrucción de la escuela, así como los daños a Auros? Si era así ¿acaso podía haber sido más fuerte de haber tomado otro camino? ¿otras decisiones?
"lo hago sonar como una estupidez porque lo es"
¿si el no fuese demonio sería más fuerte? Al hacerse esa pregunta rápidamente sacudió su cabeza, esa si era una pregunta estúpida, él quería ser más fuerte precisamente por la persona que más admiraba, en pocas palabras por un demonio, eso estaba fuera de discusión, pero definitivamente el sentimiento de que algo estaba mal le decía otra cosa
-disculpe…¿Saji sensei?...-
Al ser llamado de esa manera, el rubio volteo a mirar al costado, para ver a uno de los trabajadores que había ayudado con la reconstrucción de la escuela, uno de los demonios que no había demorado en inscribir a su hijo a esta para cuando hiciese su apertura oficial, lo recordaba de una de las clases en las que ayudo
-¿sí?...- pregunto este afirmando quien era, haciendo que el demonio sonriese
-vaya, me alegra verlo por estos lares ¿Cómo han estado las cosas? - pregunto este amablemente, arrancándole una sonrisa al rubio
-han estado bien, gracias por preguntar, ¿ustedes han estado bien tras el ataque? -
La sonrisa del demonio titubeo momentáneamente antes de volver a brillar
-la reconstrucción ha sido difícil, pero gracias a los recursos de la familia Agares y Sitri pudimos reconstruir casi toda la ciudad ya…- contestaba este mirando con cierta admiración la escuela -…. No se preocupe, la escuela ya ha sido reconstruida en su totalidad, solo falta hacerle las modificaciones que su ama nos pidió para evitar que sucesos como los de hace dos semanas vuelvan a ocurrir…-
El rubio no pudo evitar suspirar aliviado al escuchar eso
-me alegra escuchar que estén bien, y gracias por todo lo que hacen…-
El demonio sonreía alegremente, también satisfecho
-sí, es una suerte que ustedes, el grupo DxD estuviesen aquí ese día, no hubiésemos salido de esta sin la ayuda de Hyodo Issei y de sus amigos…-
Si bien la sonrisa del rubio no desaparecía, aquella declaración lo había descolocado terriblemente
-sí, es una suerte…- respondía este de buena manera
-sí, gracias al Oppai Dragon pudimos salir bien librados en esta ocasión, sin su ayuda todos nosotros pudimos haber muerto, es un alivio contar con alguien así en el inframundo…- dándole unas cuantas palmaditas en el hombro, el demonio le dedicaba una sonrisa amistosa al amable adolescente Sitri -…por favor, sigan trabajando para protegernos de ese enfermo de Lucifer ¿si?...-
-si claro…- contesto el rubio de manera algo escueta -…nos esforzaremos lo más que podamos…-
Sin decir mucho más, el hombre desaparecía, dejando al rubio mirando en dirección a este desapareciendo por aquel camino empedrado que dirigía a unos edificios en reconstrucción varios metros a lo lejos antes de desaparecer de la vista, casi sin darle importancia a esto, sintiéndose más bien extrañamente ofendido
-¿Por qué me siento tan molesto?-
Claro que la pregunta tenía más bien un tinte hipócrita, era obvio porque lo estaba, entre lo dicho por "Daisuki" y lo que dijo ese anciano solo lo hacían sentir más impotente, tanto que su mirada no pudo evitar estrecharse
-acaso…- murmuro con cierto auto desprecio -…realmente es Hyodo el único que destaca de todos nosotros? -
No negaba el poder de Issei y de hecho lo admiraba por eso, pero si lo pensaba en detalle ¿acaso las cosas no siempre eran demasiado perfectas para con él? Cada batalla que iba teniendo iba obteniendo un nuevo power up, era obvio que era producto de su entrenamiento, sin embargo ¿eso era justo? Siendo así ¿Cómo podría llegar a ser como él?
Antes de darse cuenta, se vio a si mismo ya caminando alejándose de la escuela, con sus manos en sus bolsillos, pensativo sobre la buena fortuna de su compañero, era el héroe del inframundo, no había nadie quien no conociese su nombre, tenía la fortuna de contar con el amor de su ama y ya lo habían promovido a ser un demonio de clase media y probablemente no demorarían en ascenderlo a clase alta ¿acaso había algo en su vida que podría estar mal? ¿tendría alguna especie de preocupación? Pareciese que no
Sin embargo, no demoro en retirar esos pensamientos de su mente, era ridículo pensar así de todas maneras, no le aportaría nada y de hecho era algo ridículo y vergonzoso sentir celos de un compañero que lo ayudaba tan arduamente
-además…- susurro él de manera casi inaudible -…yo soy uno de los únicos que lo ha derrotado…-
Ciertamente el cayo en combate primero, pero Saji solo se recordaba a sí mismo como el único que lo había derrotado en un combate limpio fuera del cruento combate del grupo Gremory contra Cao Cao, era cierto que su compañero había muerto y resucitado como dragón, pero fue por una táctica rastrera, fuera de eso, ni el mismísimo Vali Lucifer había tenido el logro de derrotar a Hyodo Issei en combate uno a uno, Cao Cao tampoco pudo hacerlo en ese aspecto
Ciertamente estaba aún por debajo de él, pero definitivamente cumpliría su palabra de alcanzarlo y así mismo superarlo tarde o temprano
-Si quieres saber más sobre ti y sobre mí ven mañana al Boulevard comercial-
Bueno, no quería aceptarlo, pero de alguna manera esa chica misteriosa había dado en el clavo para convencerlo de hablar con ella
-Tadaima…-
Saludaba el rubio entrando a su hogar cerca al medio día, pensaba ir de una vez al Boulevard comercial de la ciudad a buscar a "Daisuki" sin embargo el cielo grisáceo espeso como una placa de acero le dio a entender que no demoraría en comenzar a nevar por lo que primero pasaría por su hogar para ponerse una chaqueta, si la noche y la nieve lo encontraban nada más con la camisa larga que llevaba, probablemente el frio le taladraría hasta los huesos
-Okaeri…-Saludaba una voz cantarina al fondo, la de la única persona que lo recibía en su hogar desde hacía mucho tiempo -…volviste temprano…-
-no durare mucho tiempo aquí Fuku san…- contestaba el rubio dejando sus zapatos en la entrada dirigiéndose a las escaleras -…vine por una chaqueta, volveré por la noche…-
-¿hasta la noche?..- pregunto la castaña saliendo de la cocina llevando un delantal de color blando por encima de su ropa formal -…¿tienes mucho que hacer hoy?...-
La pregunta hizo pensar levemente al rubio
"Saji, quiero que ayudes con lo de la entrega de regalos, por favor consigue unos cuantos disfraces de Santa para el fin de semana"
Era la orden de su ama, el evento que habían organizado los altos líderes de las tres facciones para esa navidad, una entrega de regalos a todos los habitantes de la ciudad, los regalos ya estaban listos, lo único que faltaba es quienes los entregaran, papel que ejecutarían ellos
"Momo y Ruruko tienen las tallas de las demás chicas, por lo que ellas te acompañaran"
Bueno, técnicamente si tenía que hacer ¿no?
-No mucho…- contesto de manera desinteresada -…pero hay algunas cosas que quiero ojear por el Boulevard Comercial…-
-ohhhh…- bufo divertida la castaña sonriendo divertidamente con cierto toque de picardía llevándose la mano a la boca -… parece que el pequeño Saji kun va a comprarle regalos a alguien…¿a quién será?...- pregunto esta de manera jocosa acercándose de manera casi fantasmal al rubio quien ya tenía un fuerte sonrojo en su rostro, más al posesivo abrazo de ella sobre su cuello -… ¿a Momo chan?¿a Ruruko chan?¿a esa misteriosa Kaicho sama?...- tras decir eso ella acercaba su boca a la oreja del peon Sitri haciéndole temblar todo su cuerpo -…¿o a su querida Onee sama?...-
-Fuku ..san…-
Temblaba el rubio, ahora que lo pensaba, no sería mala idea comprarle un regalo a ella, pero ni loco le iba a decir que le iba a dar un regalo, siendo ella tan pastelera como solía ser, no dejaría de abrazarlo por una semana entera si se lo decía
-está bien…- contestaba está soltando al rubio antes de que le diese un infarto por la pena, volviendo a la cocina -…cuando bajes te serviré un chocolate, si vas a salir al menos toma algo caliente antes de hacerlo…-
-hi…-
Contestaba el rubio ya sonriendo divertido a su habitación, buscando una chaqueta para salir, mientras lo hacía no pudo evitar pensar que, si bien tenía unos padres que pensaban más en el trabajo de lo que lo hacían con él, esa chica llenaba ese vacío de hogar que esto solía hacerle sentir, era gracias a ella que no era un completo desastre, pasar con ella la navidad no parecía mala idea si no lo podía hacer con sus amigos de DxD
-bueno, técnicamente ellos no estarán en navidad…- pensó para si mismo recordando la llamada de su madre, probablemente ni si quiera pasaron por su casa para recoger equipaje, saldrían con lo que tenían en el hospital y listo
-me pregunto qué regalo le gustara a Fuku san…- murmuro pensativo, no le importaba darle un gran regalo a su hermana mayor, mucho menos escatimaría dinero en ello, ¿pero que sería adecuado para ella?
Bueno, tenía mucho tiempo para pensarlo aún, y de hecho, era como ella decía ¿Por qué no pensar en un regalo para ella mientras buscaba a "Daisuki"? no es como si lo que esa loca extraña le fuese a decir fuese tan trascendental que le hiciese olvidarse por completo de su única familia
No sabía lo equivocado que estaba
De alguna manera, no había comenzado a nevar aun, el cielo mostraba que no demoraría en hacerlo desde la tarde, pero curiosamente no había pasado de tener ese color plomizo cubriendo el firmamento entero, dando la constante sensación de que en el siguiente minuto caería una gruesa capa de nieve, segundo que nunca llegaba dejando esa sensación constante de que el clima cambiaria de un momento a otro
Sin embargo el ambiente de las festividades hacia que esto pasase desapercibido, más en un lugar que estaba conformado por cuatro cuadras circundantes a cuatro calles totalmente abarrotadas de gente, todas preparando sus compras navideñas entre el sector que estaba conformado únicamente por centros comerciales cuyos volados en cubierta permitía que también unos pequeños grupos de Buhoneros vendiesen sus productos artesanales los cuales exhibían con cierto orgullo tendidos sobre una modesta tela o plástico para mayor practicidad de los mismos
Saji recorría los mismos tratando de no chocar con la muchedumbre que caminaba, sin embargo, era tal el abarrotamiento que tenía que caminar bastante lento no solo para enfocar a su objetivo si no para no chocar con una que otra familia distraída que iba en dirección contraria a la suya
Eso le hizo notar que era demasiada la gente que estaba en un lugar que prácticamente era gigante
-rayos ¿Cómo le hago para encontrar a alguien precisamente en un lugar así?...-
Vieselo como lo viese, era casi imposible notar a una única persona en un sitio tan conglomerado, sin embargo, no tenía mucho más que hacer, se había desentendido del asunto de su clan al menos por ese día y tal como había pensado antes, si gustaba podía tomarse un tiempo para buscar un regalo adecuado para su guardiana para la gran fecha por lo que centrándose en eso, comenzó a ojear los distintos locales que hubiesen por las calles y si no, entrar a los enormes centros comerciales a ojear una que otra cosa, al menos sabía que en cosa de productos en venta la cosa no faltaría
Como era de esperarse, en el interior de los centros comerciales la cosa estaba tan abarrotada con el exterior, limitando su exploración a mirar de reojo a los suntuosos locales y ver desde lejos que podían ofrecer, una de las maneras más cómodas de hacerlo era subiendo a los últimos pisos de los mismos viendo desde los corredores a los pisos inferiores, así se evitaba pasarse por en medio de las trifulcas , asi mismo los miradores de los últimos pisos a las calles, de esto algo le llamo su atención, había un grupo particularmente grande de personas en torno a algo, pero no podía ver por qué la cornisa de las cubiertas de pisos inferiores impedía ver lo que ocurría desde ahi
Sin embargo
-¿Saji kun?-
-¿Gen chan?...-
La voz de sus dos compañeras atrás de él le llamaron la atención
-¿Momo chan?¿Ruruko chan?...- pregunto extrañado al ver a ambas chicas con bolsas de compras en sus dos manos
-¿Qué haces aquí?...- pregunto la peli blanca con cierto reproche -…Kaicho nos dijo que estarías ocupado hoy para lo de las compras de los trajes de santa…-
Obviamente el rubio no demoro en ponerse nervioso, era cierto, había querido salir de ese tema para resolver lo de Daisuki y de paso lo de Fuku san, pero nunca espero que ambas chicas estuviesen ahí haciendo compras, eso se podía mal entender como que él no quería estar con ellas
-bueno, es una larga historia…- comenzó este rascándose la nuca nervioso -…yo quería… hacer unas compras personales y por eso pedí el día…-
Ambas chicas miraban aun con cierta molestia al rubio
-eso pudiste haberlo hecho los otros días, para lo de los disfraces tenemos poco tiempo…-Si bien el regaño parecía que iba a ir a largo, ambas chicas comenzaron a mirar a su compañero con algo de ilusión, cosa que el mismo no demoro en notar -…o será ¿Qué querías comprar regalos para alguien en especial?-
Saji no demoro en ver por dónde iba el tema, comenzando a sudar como cerdo
-¡Si!...- exclamo particularmente entusiasta -…¡quería comprar los regalos de Navidad y bueno, entenderán que son una sorpresa!...-
-¿ooowwww una sorpresa?...- ataco Ruruko particularmente entusiasta -…¿hay alguna para mí?...-
-¡¿también para mi?...- pregunto Momo olvidándose momentáneamente de su papel como chica estricta
-no sería una sorpresa si lo dijera…- contesto lánguidamente el rubio, comenzando a hacer cuentas mentales sumando dos regalos más a la lista de sus compras, ya con la aparición de ambas chicas encontrándolo infraganti, era mejor darse ese pequeño lujo para con ellas
-¡ohh Gen chan!...- rápidamente el rubio fue presa de un abrazo de oso por parte de su enamorada Kouhai quien de lo contenta que estaba parecía que iba arrojar corazoncitos al aire
-bueno, ya que se trataba de eso, no veo porque no podemos dar una vuelta y disfrutar un poco del día…- murmuraba la peliblanca también esforzándose lo más posible en no parecer que la ahogaría la felicidad de saber que su enamorado había hecho planes a escondidas para comprarles un regalo de navidad
-chicas, no es necesario…- balbuceaba el rubio, ahora parecía que por la agradable sorpresa ninguna de ellas se quería separar de él, cosa que no le ayudaba en su actual labor
-vamos Gen chan, no seas tímido…- decía la castaña de coletas animada -…vamos, acompáñanos…-
Al final, el buen Genshirou Saji derrotado libero un amplio suspiro, no tenía caso tratar de negarle nada a sus amigas cuando se veían tan entusiastas, quizás el pasar lo que quedaba de la tarde con ellas no sería mala idea, con suerte no se encontraría con Daisuki mientras estaba con ellas
Ese era un asunto que él quería resolver sin que ningún miembro de su Clan se enterase
Podía decir todo lo que quisiera que no disfrutaba de la situación, pero la forma en la que ambas chicas lo llevaban cada una abrazada de un brazo suyo era suficiente para que cualquiera que lo viese, pensase que él era un descarado hipócrita
Y por eso mismo pese a todo lo que hubiese querido protestar al inicio, pronto se vio disfrutando del recorrido por el lugar en compañía de ambas compañeras en vez de como un sujeto arrastrado por una mala coincidencia, eran pocas las veces que como miembros del grupo Sitri podían tener para interactuar más entre ellos sin tener que haber algo del ámbito demoniaco de por medio, un entrenamiento, un evento de la escuela, un operativo del grupo DxD como lo era lo de los uniformes, por eso mismo el recorrer los centros comerciales se había convertido en una salida de tres amigos y había que decirlo, la música por todo lo alto del lugar así como el ambiente vespertino ayudaba a que la sensación de familiaridad fuese mayor
La tarde comenzaba a morir, tiñendo el cielo grisáceo de un color más oscuro, pareciendo que la noche llegaría mucho más temprano, asi mismo el poco calor que había en el ambiente no demoro en desaparecer comenzando a sentirse el frio con más fuerza pese a la enorme muchedumbre que aun se mantenía a esas horas
-gracias por el chocolate Gen chan…- Agradecía Momo con un amplio vaso de icopor cuyo contenido humeaba en sus manos, producto que también tenía la pequeña Ruruko
-no hay problema…- contestaba este contento con el agradecimiento de ambas chicas -…disculpen por haber cancelado lo de los uniformes…-
-neh, no hay problema…-
De cierta manera era algo descarada esa respuesta viendo que ahora el peon Sitri llevaba en sus manos varias bolsas de comprar con los presumibles regalos navideños entre otras cosas, el saber popular suele decir que si no puedes con el enemigo, únete, asi pensaba el rubio en ese momento tras haber gastado buena parte de sus ahorros en regalos para los miembros de su clan y para su guardiana asi como para otra persona mas, por lo que ya habiendo gastado un buen dineral, lo mejor era disfrutar de los modestos beneficios de estos
El trio Sitri ahora iba en dirección a la salida del Boulevard comercial, ya con las compras hechas, ambas chicas ya no tenían nada que hacer ahí, historia diferente por parte del chico Vritra
-las acompañare hasta el cruce, cuando se hayan ido volveré a buscar a esa loca-
Por ahora se valdría del estado de animo de sus compañeras para pasar bajo perfil
Ya la calle de los sectores aledaños se estaba haciendo visible cuando algo llamo la atención de los tres, había un grupo particularmente grande de personas aplaudiendo en torno a algo, pero no se podía ver por la cantidad de personas siendo testigos de lo mismo
-¿Por qué hay tanta gente reunida ahí?...- pregunto Ruruko algo intrigada
-no lo se ¿vamos a ver antes de irnos?- agrego la peli blanca, haciendo que el rubio comenzase a lamentarse de su mala fortuna, el tiempo de buscar a Daisuki se iba agotando poco a poco
-solo debe ser algún artista callejero o algo por el estilo…- contesto el rubio tratando de disuadir a sus amigas de quitarle más tiempo
-pues debe ser bastante bueno, mira cuanta gente hay ahí…- contestaba la castaña ya corriendo a ver qué era lo que estaba ocurriendo
-si, por algo tiene que ser, mirare un rato…-
Con el proceder de sus amigas, Saji se vio obligado a acompañarlas también a mirar que estaba ocurriendo
Entre más se acercaban, era más distinguible entre el ruidoso barullo de la calle los demás matices de lo que se estaba gestando en ese momento, ya no solo se escuchaban los acompasados aplausos si no también unos leves ruidos de tambor con un toque étnico entre otros instrumentos del mismo estilo, tales como un acordeón o un violín
-no es cierto….- bufo el rubio con una expresión agria, el violín no era del mismo estilo pero por alguna razón no le sorprendería mucho ver a la peli azul en ese lugar tocando el mismo
Los tres comenzaron a meterse entre las personas de manera poco sutil, pero tratándose de un lugar tan lleno de gente eso era del común en esas calles por lo que permitiéndose poner un poco mas de fuerza que de costumbre, rápidamente se vieron en el borde interior del circulo de personas que rodeaban a los particulares artistas
-¡Sucia mestiza!-
-¡Lárgate de aquí!...-
-¡No queremos monstruos en esta ciudad!-
Esos entre tantos otros improperios eran arrojados así como piedras y basura por la turba iracunda que rodeaba a una chica tirada en el suelo, vestida de harapos destrozados, llena de lodo y suciedad opacando su azulado cabello y su piel cortada, la misma parecía inconsciente, jadeando pesadamente en el piso visiblemente adolorida
-¡¿Qué es esto?!...- Gruño el rubio mirando la escena en primera fila ¿eso era lo que estaba viendo tanta gente tan entusiasmada?
Ante tal demostración de crueldad humana, Saji dejaba caer sus bolsas al suelo, iracundo como pocas veces se le había visto antes
-¡ustedes!...- grito con la misma intensidad de un dragón iracundo, llamando la atención de parte de la muchedumbre quienes lo miraban como a un bicho raro por su exabrupto
-¿Gen chan?...- pregunto extrañada Ruruko al arranque de su enamorado
-¿estás bien?...- se sumó Momo, con un claro gesto de preocupación
-¡¿Cómo se supone que este bien cuándo?!...- antes de continuar, noto que de alguna manera, la escena de su mente había cambiado radicalmente, lo que había visto antes era una trifulca vestida en trajes harapientos de colores ocres por el polvo, ahora, estaba nuevamente en las calles del centro comercial
-¿otra alucinación?...-
Agradecía que la banda que estaba tocando fuese lo suficientemente buena para que su arranque fuese notado únicamente por unos cuantos que no demoraron en volver a enfocarse en el espectáculo
-si, estoy bien, no es nada…- finiquito el rubio volteando a mirar el espectáculo, lo que en un principio fue un desagradable espectáculo causa de sus extrañas alucinaciones temporales, ahora era algo totalmente distinto
En el suelo con unos bongos uno de los artistas, de pie junto a este otros dos, uno con el violín tocando dinámicamente y el otro con un acordeón, los dos que estaban de pie llevaban el compás de los aplausos golpeteando el piso con sus pies de forma casi caricaturesca
Y frente a ellos sobre un tapete rojo brillante al parecer la persona que estaba causando tanto revuelo
Bailando al ritmo de la música callejera, la chica de cabellos azules plateados, curiosamente estaba vestida de manera bastante llamativa, sobre su cabeza llevaba atada una pañoleta de color rojo incrustada de joyería, con el volado del nudo de la misma cayendo hasta su espalda, su pecho era cubierto por una ajustada camisa escotada blanca amarrada de tal manera que su abdomen se viese completamente y cuyas mangas tenía unas amplias solapas, la falda que llevaba puesta no era menos ostentosa ya que llevaba varias solapas que hacían parecer que tenía puesta no menos de tres faldas diferentes que variaban entre el color rojo, negro y blanco, todo esto, acompañado por una llamativa joyería artesanal tal como un collar con hebilla, una serie de argollas en sus muñecas y todas sus prendas llevaban castañuelas
La misteriosa violinista giraba sobre si misma alzando sus brazos sobre su cabeza con sus ojos cerrados, dejándose llevar por la música y los aplausos siendo estos quienes llevaban su danza, tan efusiva pero a su vez tan agraciada como el más fino ballet, un efecto más vistoso gracias al largo y color de su propio cabello actuando como una cortina atrás de ella por su forma de moverse
El dragón de la prisión se vio rápidamente hipnotizado por la forma de bailar de la violinista de azulados cabellos
-vaya…-
-¿Saji?...- y sin embargo, solo basto su nombre en boca de alguien para sacarlo de su trance
Los tres Sitri voltearon a mirar a quien había llamado al rubio
-¿Kaicho?...-
También en primera fila pero un tanto lejos, tanto la presidenta como la vice presidenta del concejo estudiantil se encontraban mirando a sus tres Kouhais, claramente asombradas de verlos en ese lugar a esa hora, el sentimiento era mutuo
Invadiendo un poco del espacio de los artistas, los tres chicos se dirigieron a donde sus superioras
-Kaicho, buenas noches…- saludaron los tres respetuosamente
-buenas noches chicos ¿Qué hacen por acá?...- pregunto esta curiosa, cruzada de brazos mirando inquiridoramente a los tres -…pensé que estarían ocupados el dia de hoy…-
Era obvio por donde iba el tema, más precisamente para el rubio, el tono de reproche daba a entender que Sona Sitri definitivamente no estaba contenta con el "permiso" que él había pedido al verlo en el lugar en el que tenía que hacer su diligencia
-bueno, vera, yo…- comenzó a balbucear el peon Sitri tironeándose levemente el cuello de su camisa buscando pensar una buena excusa, pillado primero por sus dos amigas y ahora por sus dos estrictas senpais, nada podía ir peor
Pero como es normal en el proceder del destino, la danza de la chica de cabellos azulados terminaba, haciendo que ella hiciese una pronunciada Avenía antes de volver a abrir los ojos por supuesto, notar al pequeño grupo que estaba destacando por encima de la demás multitud
-¡¿Saji?!...-Un escalofrió que solo podía compararse al que generaría el vaciar de una cubeta de nitrógeno sobre su espalda fue lo que sintió el chico Sitri al sentir como la bailarina dejaba su espectáculo de lado para acercarse a este -…¡es bueno ver que viniste!...- exclamo está particularmente alto, llamando la atención de las otras cuatro chicas
-¿Saji la conoces?...- pregunto Sona Sitri con su típico tono neutral pero con un cierto matiz de regaño que solo hizo que el sudar del chico aumentase indiscriminadamente
-pues…-
Así mismo como las Sitri notaron a la peli azul, esta no demoro en ponerse en guardia al mirar a las cuatro chicas uniformadas de manera similar al rubio, adivinando instantáneamente quienes eran
De manera igual de agraciada a cuando bailaba, se posaba entre el rubio y sus amigas dando un giro sobre si misma terminando en una pose donde ladeaba su cadera hacia las Sitri y posaba ambas muñecas sobre su cintura mirándolas desafiante
-así es, Saji es mi querido guardián…-contesto está sonriendo crédulamente mirando directamente a los ojos a Sona Sitri -…¿y ustedes quiénes son?...-
-¡¿guardian?- pregunto extrañada Tsubaki mirando inquiridoramente a su compañero de clan
Fue en ese momento donde el alma de Saji trataba de escapar de su cuerpo mortal
-yo soy la presidenta del concejo estudiantil de la escuela donde estudiamos…- contesto la líder Sitri particularmente tranquila tras su repentina impresión inicial -…Saji es un miembro de nuestro grupo, el único masculino realmente…-
Las tres chicas se miraban entre ellas sutilmente, al parecer Sona pese a la descripción de la artista callejera no estaba dispuesta a describirse en su papel de demonio, si lo pensaban con cabeza fría, eso era lo lógico
-vaya, así que son de tu escuela…- continuaba la peli azul mirando preventivamente a la peli negra, si bien Sona quería mantenerse bajo perfil, no le costó mucho saber que ella era el líder del Clan de demonios, la arrogancia la desbordaba por los poros -… y único miembro masculino ¿eh?...- pregunto esta jocosamente
-¡Saji!...- exclamo la líder Sitri con un tono particularmente alto y claramente molesto -…corrígeme si me equivoco, pero espero no me hayas pedido el permiso para zafarte del tema de los uniformes simplemente para venir a reunirte con tu amiga-
-Kaicho… yo…- balbuceo débilmente el peli rubio sin saber ya cómo defenderse
-así es ¡yo lo cite para que se encontrara conmigo esta noche querida!...- y como si no le estuviese echando suficiente gasolina al fuego, la oji gris continuaba respondiéndole altaneramente a su ama -…tengo un asunto urgente que tratar con mi querido Saji, tendrás que disculpar si te pidió un día libre para hacerlo….-
-no me molesta que me pida permiso…- continuaba Sona fiel a su perfil sereno, sin embargo, se comenzaba a notar como con tres palabras intercambiadas con esa callejera tenía ganas de destrozarle ese lindo cabello -…sin embargo, tenemos una tarea urgente que atender lo más pronto posible, si quiere tratar un tema contigo, que lo haga cuando estemos desocupados…-
-hablas como si fueses su ama más que una amiga del concejo estudiantil…-
Cabía decir que el descarado sarcasmo en esa frase solo la percibió el rubio
Durante unos segundos, la tensión fue palpable, parecía como si de un momento a otro se fuese a desatar una masacre de mano de ambas mujeres, aun asi, la primera en dar el brazo a torcer fue la líder Sitri
-tienes razón, ciertamente estamos atareados, pero no soy la dueña de tiempo completo de Saji…- otorgo ella cerrando sus ojos, suspirando hondamente -...pero agradecería que, si tienes algo que resolver con él, lo hagas esta noche, tenemos un evento grande que organizar con urgencia y necesitamos de todo el personal disponible…-
Por la paz, la peli azul asintió
-de acuerdo, tratare entonces de que dejemos nuestros problemas resueltos esta misma noche…-
-Excelente…-
Sin mucho mas que decir, Sona Sitri se daba la vuelta para retirarse, siendo seguida por su reina quien mantenía silencio respetuosamente
-Gen chan…- bufo levemente decepcionada la castaña de coletas, Momo simplemente se limitó a actuar tal cual como la reina del grupo, asi en menos de nada, las cuatro chicas se habían retirado, dejando al peli rubio con un amargo sabor de boca
-Bueno chicos, llegaron por mi…- anunciaba Daisuki volteando a ver hacia los músicos que la habían ayudado recién, quienes la miraban con algo de pesar al ver que tenía que irse -…¡me llevo el treinta por ciento de lo que hayamos recogido esta noche como quedamos!-
-claro….- contesto uno de ellos con una pinta del típico sujeto estereotipado del reggae -…gracias a tu ayuda recogimos más que otros días ¿no quieres venir de nuevo mañana?...-
-no lo creo…- otorgaba ella también con cierto pesar en su voz y su mirar -…esto es cosa de una sola vez, aun así gracias, me divertí bastante…-
Los tres se despedían amablemente, volviendo a tocar su música, permitiéndole a la oji gris abrazarse del brazo del dragón de la prisión
-bueno, ¿tienes hambre?...- pregunto de manera casual, como si no hubiese ocurrido lo de hacía unos minutos con las chicas Sitri -…yo invito…-
Solo fue cuestión de unos minutos para que ambos finalmente hubiesen salido del revuelo del distrito comercial, haciendo una parada ya llegando a la zona residencial, lugar donde se ubicaban los últimos restaurantes de comidas rápidas más casuales
-asi que esto es una pizza…- murmuro ella examinando curiosa el trozo de comida a base de harina, salsa y queso, Saji mientras tanto comía el suyo sin prestarle mayor atención a los desvaríos de su excéntrica compañera
El local donde ambos se encontraban era pequeño con apenas ocho mesas más el escaparate del servicio donde se ofrecían los platos, siendo recién llegada la noche, el establecimiento se encontraba lleno de clientes, por lo que ninguno de los dos hizo nada que fuese particularmente llamativo, o al menos eso intento Saji, no era común ver a una chica vestida de gitana, menos con una apariencia tan poco recatada
-¿no tienes frio con eso puesto?...- pregunto el rubio un tanto inquieto al ver la mucha piel que el traje de su compañera dejaba entrever, no era solo el pronunciado escote o la cintura totalmente destapada, es que bajo el volado de su holgada falda se podía ver un corte que llegaba hasta su muslo, por el cual ella dejaba libre su pierna
La oji gris volteaba a mirar a su compañero, viendo como este la veía entre preocupado e inquieto, sin embargo, ella no demoro en notar otro matiz en su mirada, haciéndola sonreír con malicia
-no mucho fio la verdad, además, se nota que te gusta lo que ves…-
Fue entonces cuando Saji noto que, si estaba tan preocupado, era porque en ningún instante había dejado de mirar a la loca cuyo nombre no sabía, haciendo que los pensamientos se le nublasen por la vergüenza, su cara, más roja que el cabello de Rias Gremory
-¡no-esto… no, yo….!- balbuceaba con un trozo de pizza a medio comer en su boca mientras aleteaba su mano libre en su defensa
La peli azul simplemente reía sutilmente tapando su boca con su puño
-bueno, si se trata de ti, no creo que me moleste que me mires de esa manera, en el pasado hicimos muchas más cosas juntos que solo vernos…-
Pese a lo sugerente de tal afirmación, la mirada del rubio se estrechó inmediatamente, la forma inquisidora de ver de este no pasó desapercibida para la peli azul
-¿hoy me vas a decir de donde nos conocemos?...- pregunto Saji serio y directo, aun tratando de mantener un perfil amable y sereno para con la chica, pero ya estaba hartándose de tantas incógnitas o hablar sin ser clara
-no creo que me recuerdes aun si te digo de donde nos conocemos…- contesto esta con una seriedad que era equiparable a la de Sona Sitri -… es más, me dirías que estoy loca…-
-no te preocupes por eso, eso ya lo tenía claro…-
La mirada de la oji gris se estrechó lo suficiente tallando un claro "idiota" en su rostro
-por lo que decidí, que lo mejor era demostrarte que lo que estoy diciendo es verdad de otra manera…- agrego ya volviendo a su típico gesto
-¿demostrarme?...-
-no será difícil…- contesto dándole un sorbo a su gaseosa volviendo a su típica actitud jovial -…pero antes de eso, disfrutemos de la comida…- continuo sin pausar su arremetida contra su pizza entusiasmada, como si no hubiese comido en días -…¡esto esta delicioso!¡ojala hubiese podido comer pizza en el pasado!-
-¿nunca probaste una pizza?...- pregunto el rubio arqueando una ceja
-no sabía de la existencia de estas…- contestaba Daisuki de manera casual, acabando su trozo actual y atacando el siguiente sin ninguna clase de ceremonia
-para no conocerlas tendrías que haber vivido en una cueva sin conocer la luz del sol- bufo sarcástico el rubio
-algo así…- repuso ella desinteresadamente
-¿uh?-
-nada olvídalo…- corto de manera arbitraria -…¿Cómo ha sido crecer en esta ciudad?...-
-bueno…-
Si bien el rubio se sentía inquieto por la forma de ser de Daisuki, pronto igual que con sus compañeras de clan se vio disfrutando del ambiente con su acompañante, no solo por el hecho de que la comida corría por gasto de ella a diferencia de lo del centro comercial hacia unas horas, si no que pese a todas las dudas o preguntas que pudiese tener teniendo como centro a esa extraña chica, la familiaridad que sentía con ella era algo fuera de lo normal, no solo no le incomodaba su presencia, si no que de cierta manera lo reconfortaba y le hacía sentir tranquilo, como si fuese verdad lo que decía ella de que eran conocidos de hacía mucho tiempo
-entonces ¿están segura de que nunca antes la habían visto? - preguntaba Sona Sitri a los dos miembros de su Clan que solían ser las más cercanas a su peón
-para nada…- contestaba Momo estoica -…fuera de nosotros o las personas de la escuela, Saji solo se relaciona con la guardiana que le asignaron sus padres desde niño…-
-ya veo…¿creen que su niñera sepa sobre ella?...-
-no lo se….- esta vez era Ruruko quien contestaba, a diferencia de su amiga, con cierta intranquilidad -… no creo que Ren san sepa algo sobre ella…-
-ya veo…- bufaba Sona mientras continuaba caminando junto a sus chicas, lo que en un principio había sido una salida para distensionarse junto a su Reina de un momento a otro había ganado un tinte más delicado, todo de parte de esa artista callejera -…no será mala idea vigilar a Saji si sus salidas con ella son más recurrentes…-
Ambas amigas cercanas del rubio no pudieron evitar sentir cierto malestar a tal afirmación
-no creo que sea necesario…- decía Ruruko en un tono bajo avergonzado -…no parecía tener ninguna conexión con nada sobrenatural-
-también creo que lo mejor será vigilarlos…- contraponía Tsubaki, con un tono particularmente alto como para ser de una conversación casual
-¿Tsubaki san?-
-Ruruko chan, trata de pasar más tiempo en la casa de Saji…- ordenaba Sona Sitri con su tono autoritario -…según entiendo, su guardiana te tiene en alta estima…-
Ruruko quería protestar, sin embargo, no se vio capaz de contraponerse a la orden de su ama, asintiendo silenciosamente, por su parte Sona Sitri tenía una expresión indescifrable en su rostro, era obvio que no estaba para nada contenta
Una cosa es que su sirviente hubiese pedido el día para irse de pinta con una amiguita que tuviese, hasta cierto punto podía entender eso por más que en el fondo le diese cierto toque de celos, sin embargo, el problema no era tan simple como eso
-así que solo Tsubaki se dio cuenta…-
Pensaba para sí misma, mirando la palma de su mano, viendo como esta aun temblaba levemente, por más que ella trataba de que esta se quedase quieta
-sea quien sea, esa mujer no es alguien común, ni si quiera en nuestro contexto-
Si tan solo las cosas se limitasen a algo tal trivial como una amiguita indeseable, ella no estaría así de shockeada, por más que la gitana de cabellos azules tratase de disfrazarlo, había algo en ella que altero horriblemente sus sentidos, como si le alertaran de que, si seguían discutiendo con ella, algo horrible ocurriría
Ya más caída la noche, Saji se vio a si mismo caminando junto a Daisuki nuevamente a la orilla del rio donde la había conocido la noche pasada, tan pronto salieron de la pizzería continuaron charlando mientras que caminaban sin rumbo, o al menos asi lo había percibido él antes de fijarse de que nuevamente estaban en el mismo lugar, ya siendo más tarde en un sitio de poco transito como lo era ese, el deje de intimidad era mayor, haciendo que la peli azul se abrasase nuevamente de su brazo simplemente disfrutando del momento, con su camino únicamente iluminado por las farolas de la calle un tanto lejanas, el cielo aún mantenía su plomizo color oscuro, con un leve relinquicio de iluminación por la luz de la ciudad chocando contra las nubes
-¿te gusta este lugar?...- preguntaba Saji un tanto intrigado de ver la insistencia de ella en hablar de los temas de seriedad ahí
-bueno, me agrada todo lo que tenga que ver con el agua, sean ríos, el mar mismo, cascadas, fuentes…- contestaba ella con un tono solemne -… aunque mentiría si dijera que hay una razón en particular…-
-ya veo…-
Conforme más caminaba por la caudal del rio, más extraño era la sensación que corroía el pecho del dragón de la prisión, estaba muy cómodo junto a una extraña que hablaba de manera casi esotérica sobre la criatura que residía en su interior ¿Cómo era eso posible? Sin embargo, por lo mismo, todas las preguntas que pudiese tener desaparecían poco a poco de su mente ¿acaso era tan malo que Daisuki le generase esa sensación de paz interior? ¿como si de que el mundo entero no importaba en compañía de ella?
Y eso lo regreso a la noche pasada, donde ella se había despedido con esa enigmática frase que solía utilizar la criatura en su interior
-Daisuki…-
-¿sí?...- pregunto ella sosegada por la tranquilidad del momento
-¿Por qué me llamaste ayer "mi otra mitad"?-
Las cartas habían sido destapadas sobre la mesa, era hora de cortar con el ambiente tranquilo por el tema a tratar, ambos sabían que tenían que llegar a eso
-¿no te podía llamar así?...- pregunto esta con su voz inocentona, sin embargo para Saji no fue ajeno el matiz sarcástico de fondo
-no creo que no sepas que así es como me llama Vritra cuando habla conmigo…- contesto él, terminando de cortar el rato ameno con esa declaración, después de todo, Daisuki no dijo o hizo nada para negar lo último dicho
-tienes razón…- otorgo ella tomando un matiz más serio mientras continuaban charlando -… se perfectamente que así es como te dice el dragón en tu interior-
-entonces tu…-
-Saji…- cortaba ella con intensidad en su mirada -… dime que tanto sabes sobre Vritra…-
La mirada del rubio gano intensidad, deteniéndose en seco mientras que la gitana avanzaba unos cuantos pasos mas ganando distancia
-siendo honesto no mucho….- contesto con firmeza pese a su afirmación -…solo sé que fue un dragón oscuro que cambió de bando al de los reyes dragones y que su ser fue completamente despedazado cuando se enfrentó a Indra sama…-
La peli azul continuaba avanzando, con una expresión estoica
-cuatro de sus Sacred Gear residen en mi, gracias a eso pude ser el primero en despertar su conciencia desde que se tiene conocimiento, soy el primer usuario de sus poderes que logra llegar al Balance Breaker…-
-cuatro Sacred Gear…- fue lo único que dijo antes de detenerse en seco y darse la vuelta, confrontando al Peon Sitri estando a aproximadamente veinte metros de distancia
-así es…- contesto Saji no ajeno al cambio de comportamiento de Daisuki -… hablando recientemente con sensei, dijo que cabía la posibilidad de que hubiesen mas Sacred Gear de Vritra de las cuales no se tuviese conocimiento aun… aunque esto último solo son suposiciones…-
-ya veo, supongo que no puedo pedirte que me digas más, parece que solo sabes eso de Vritra…- bufo ella ganando un matiz aún más determinado -…pero bueno, todo lo que dijiste no es totalmente irrelevante… estas en lo correcto al suponer que esas cuatro Sacred Gear no son toda la esencia del campeón de los Danava-
-¿Héroe de los Danava?...- pregunto extrañado Saji, era la primera vez que escuchaba ese título para el dragón de la prisión
-si, dudo que lo sepas, pero en su apogeo, Vritra no solo fue conocido como el dragón Asura que se enfrentó a Indra, también era el mas recio y poderoso miembro de los Danava… decirte quienes eran ellos no tiene caso por ahora…-
Si bien ya hacia un rato desde que había caído la noche, por alguna razón la temperatura continúo descendiendo asi como las luces de la ciudad parecían opacarse ante la presencia de ambos adolescentes, la brisa vespertina se detuvo por completo y a los ojos de los dos, todo el mundo había desaparecido prácticamente en su totalidad a excepción de ellos dos y el brillo mortecino de sus presencias
-sin embargo, te equivocas al pensar que Vritra solo fue contenido en unas cuantas Sacred Gear, Indra no sería tan confiado de dejar el alma de una criatura tan peligrosa desperdigada por el mundo por lo que en su afán de sellar por completo su victoria por encima de los Danava, destruyo cualquier vestigio de su existencia, su cuerpo, parte de su alma, su raza asi como a todos aquellos a los que trato de resguardar, sin embargo…- tras una leve pausa el mirar de la oji gris ganaba la suficiente intensidad para hacer sudar al rubio -….la propia voluntad de Vritra trascendió todo esto, permitiéndole la oportunidad de volver a este mundo más adelante, cuando todas sus partes se juntaran…-
En ese instante, el ambiente se colapsó por completo, aquella predisposición del clima que parecía que nunca iba a llegar, llego, la nieve comenzó caer permitiendo que el blanco de sus copos contrastase violentamente con la noche oscura como el vacío, un espacio monocromático violentado por el aura de la chica de cabellos azules que comenzaba a ganar fuerza, haciéndole brillar de un color azulado opaco
-tu tampoco eres el primer usuario en despertar el Balance Breaker de Vritra, porque es imposible que un ser ajeno a él pudiese traer su mente y su alma del vacío en el que fue encerrado tras ser destruido por Indra…- la nieve caía con mayor copiosidad, haciendo que la visión de Saji sobre su compañera se volviese casi etérea -…¡la única forma en la que Vritra volvería en si sería cuando las partes que conforman su alma se volviesen a juntar todas!-
Tras decir eso, sus ojos brillazón de color azul resplandeciente, asi como el aura que la rodeaba también ganaba mayor brillo e intensidad, llevando su puño a su pecho, el cabello de la peli azul comenzó a alzarse, evocando una extraña sensación de que el poder que residía en su interior era más grande de lo que se hubiese podido pensar sobre una chica tan frágil físicamente
Por su parte Saji estaba atónito viendo el espectáculo frente a él, el poder que estaba liberando Daisuki era inconmensurable, si ella así lo deseara, este podría cubrir toda la ciudad sin problema y así mismo probablemente todo el país entero
Y la forma del poder de ella, se condenso a más de cincuenta metros en el firmamento, una figura la cual era la primera vez que Saji la veía directamente, pero que era el protagonista principal en sus sueños recurrentes
-por eso tú no eres Genshirou Saji, ni Vritra reside dentro de ti, eso es imposible así como el hecho de que tú seas el primero de los portadores de sus Sacred Gears en despertar su conciencia, eres el único porque Vritra no vive dentro de ti ¡tú mismo eres Vritra!-
GGGRRRROOOOOOOOOOWWWWWWWWWWLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLL
El poderoso rugido de la enorme serpiente alada de tres cabezas hizo retumbar el firmamento y cimbrar la tierra, extendiendo sus alas a todo lo que daban lanzando poderosas corrientes de aire a sus costados barriendo furiosamente las hojas de los árboles y todo rastro de nimiedades que hubiera por el suelo cercano
Y sin embargo, pese a la catalítica escena, la atención de Saji se centraba en la gitana, al ver a tan gloriosa criatura en todo su esplendor por primera vez, aquellas alucinaciones se concretaron en forma de un recuerdo reprimido
-¿te encuentras mejor?...-
Preguntaba el nuevamente a la chica de cabellos azules, quien vestida en harapos atacaba vorazmente un trozo de pan duro y reseco como quien no había probado bocado en su vida, de la misma manera desesperada, tomaba el recipiente con agua, este, bebiéndolo con mayor mesura
-si, discúlpame…- se expresaba ella con pesar en su mirada -…por favor, come algo tu también…-
-yo estaré bien, créeme…- contestaba un chico de cabello rubio opacado con una sonrisa amable en su rostro, al igual que ella, vistiendo ropas destrozadas y harapientas, mirando con cierta calma el desierto en el que se encontraba actualmente, tan tranquilo en la paz de la noche, iluminado únicamente por la improvisada fogata que los calentaba a ambos
-no es cierto, tu no has comido aun…- protestaba ella nuevamente, pese a que su cuerpo protestaba para no hacerlo, ella le ofrendaba el pan que tenía entre sus manos, así como la poca agua que quedaba -… no es justo que yo sea la única que coma-
-ya dije que estaré bien, tan pronto lleguemos a la ciudad conseguiré algo de comida…también asi podremos comenzar a averiguar donde está tu familia…-
Quería seguir protestando, pero tratar de hablar con el chico que la salvo de aquellos ladrones del desierto era tiempo perdido, su forma ruda y hasta cierto punto prepotente de ser era algo que había destacado desde que se habían encontrado en ese extraño viaje, por lo que con todo el dolor, ella siguió comiendo con lágrimas en los ojos, tanto adolorida como agradecida
-Gracias Vritra…- murmuro débilmente, pasando el pan pesadamente
Con seriedad el chico asentía
-come tranquila Da…-
La reacción del rubio no pasó desapercibida para la chica de cabellos azules
-¿ya recordaste algo?...- pregunto con un tono esperanzado aunque burlón, Saji por supuesto asintió en silencio, anonadado viendo a como al igual que en sus sueños, los tres pares de ojos de la serpiente alada lo miraban inquiridoramente
-recuerdo algunas cosas…-
-¿Cómo cuáles?...- pregunto esta curiosa, sin perder el brillo sobrenatural de sus ojos
-tu nombre… es Danu-
Otorgo, arrancándole una sonrisa triunfante a la gitana, así como otro poderoso rugido a la enorme criatura
-oh… vaya…-
Bufo un sujeto de apariencia desgarbada y juvenil como si estuviese de vacaciones, su cabello peinado en un estilo que muchos podían definir rebelde tal cual podía ser un mohicano, sus ojos eran cubiertos por unas gafas de sol oscuras, sus vestimentas únicamente consistían en una camiseta playera, así como una pantaloneta de tela pesada que llegaba hasta sus rodillas, terminando su atuendo con unas sandalias gastadas
Reponiéndose de su momentáneo trance de pereza, se levantaba de la silla en la que se encontraba sentado como si estuviese escurriendo, sin perder su sonrisa torcida casi burlona comenzaba a hacer unos cuantos movimientos de estiramiento
-bueno, parece que no estaba equivocado…-
Tras recomponerse y despertarse por completo, se dirigió al enorme ventanal de la suit donde se encontraba, mirando el imponente y majestuoso paisaje con vista al mar del cual disponía en su habitación y oficina, pensativo, centrado únicamente en el poderoso color azul de las aguas costeras
Estos le traían recuerdos de hacía mucho tiempo, de un asunto que creyó zanjado
Pero que ese enorme escalofrió que recorrió su ser le hacía entender que no era así
-bueno, incluso yo puedo tener mis tropiezos…-
Concluyo tras saber que no se estaba equivocando, a lo largo de las eras, el cómo deidad que era había participado en un sinfín de enfrentamientos, muchos de ellos terminaron con su absoluta victoria, inclusive contra otras deidades o razas enteras
-es decir, supongo que desde el momento donde quedó atrapado en Sacred Gears, ya había pensado en una y dos maneras de volver a las andanzas…- pregunto con tono burlón a la nada, recordando, sin embargo, sus recuerdos en comparación eran amargos, su enfrentamiento contra Vritra y los Danava hacía ya tanto tiempo que los mortales no podían recordar, así mismo como su enfrenamiento directo contra la hija bastarda de Kashyapa
Su mirada gano un matiz atemorizante al notar que la presencia que había hecho retumbar al mundo recientemente, no era otra si no la de ella, y para peor, estaba en el mismo lugar donde se encontraba el mocoso que tenía los pedazos de Vritra en su interior
-¡¿tanta es tu obsesión con este mundo Diosa bastarda?!-
Suspirando volvía a recuperar la calma, sonriendo divertido, había pasado un gran trecho de tiempo desde aquel encuentro, las cosas no serían como en el pasado
-bueno…- bufo este divertido -…parece que los dragones oscuros serán más de los que pensamos en un inicio, espero que a Cao Cao no le moleste ese pequeño detalle…-