Voy caminó a aquel lugar en donde todo comenzó,gotas de lluvias caen y el viento es fuerte, alzó mi rostro y tomó aire.
-Hola mi Lady, ¿me extrañaste?
Veo esa sonrisa tan hermosa en su rostro la cual me pone celoso ya que se que se la dedicas a muchos otros.
-¿Sabes? Hoy luche con un akuma yo solo.
Veo sus grandes ojos azules.
-Te estuve esperando, pero tu ni te apareciste. Debés de agradecer que soy genial.
Me siento a su lado y veo unas flores cerca nuestro.
-Esas flores son un espanto.
Me giró para no ver su rostro y mi anillo comienza a sonar dando a luz mí identidad.
-¿Verded que soy guapo?
Ella no contesta, esta quieta.
-Me hace raro que cuando tu estás Marinette no y viceversa.
Mis ojos pican, seguro debe de ser el viento.
-Eres cruel, yo ya se quien esta detrás del antifaz y tu también lo sabes.
Acarició su rostro y unas lágrimas comienzan a caer.
-Es más, todo París ya sabe quien eres.
Siento esas gotas de agua fría caer por mí rostro.
-¿Cuándo volverás al acción? Todos están ansiosos por verte de regresó.
Hace un mes que ella no luchaba a mi lado, un akumatizado la atacó y yo no la pude proteger y por ende ella ya no lucha, el ataque si que fue grabé.
-Desde ese día en que el akuma te hizo daño no me puedo perdonar.
Me colocó de pié y me arrodilló ante ella.
-De ahora en más yo sere tu escudo.
Tomó las flores que están a un costado y las apretó.
-¿Son de unos de tus fans, verdad?
Nuevamente miro su sonrisa.
-No quiero que recibas cosas de extraños ¿entendido?
Se que desperdició tiempo ya que me ignorara.
-Me destrozas mi Lady.
Mi cabeza toca el suelo, mi cuerpo tiembla de frío y yo empiezo a llorar con más fuerza.
-Lo siento, te mentí, París ya se resigno a que yo sea su único héroe.
Todo es inútil, ella no me oye, solo me mira y me sonríe.
-¡Ya vasta!
Me pongo de pié furioso y tomo aire.
-¡Todos en París afirman que no volverás a luchar y eso que te ven todos los días, son unos ingratos!
Golpeó mi propia mano y te vuelvo a ver.
-Pero se que si los dejó a su suerte tu me odiaras por eso lo hago por ti...
Miró las luces de París.
-Lo hago por ella.
Le ordenó a Plagg que me transforme y me marcho dejándote atrás, sola, en la lluvia y con esa sonrisa que nunca quitas de tu rostro.
Llegó a mi casa y mi compañero me mira preocupado.
-Ya debés dejarla ir.
Lo ignoró y me voy a duchar.
-Sabes que ella...
-¡Cállate!
Me volteo furioso y veo que Plagg simplemente se marcha.
-Yo se que volverás.
.
Pasó cerca de mi computadora y veo el Ladyblog de Alya.
-Sigue sin actualizar nada interesante.
Me marchó intentando no pensar en lo que acababa de leer.
"Ya hace un mes que se reveló la identidad de Ladybug o debería decir Marinette, una gran amiga, compañera, diseñadora y súper héroe con o sin máscara... descansa en paz amiga mía. Nunca te olvidaremos y ese póster gigante en la Torre Eiffel de ti con tu más linda sonrisa lo demuestra."
Limpio unas lágrimas que calleron inconscientemente y me encierro en el baño.
-Yo se que volverás.
Ese sujeto que te hizo daño esta en frente mío.
-No puedo creer que desaparecieras por mí culpa.
Miró a ese sujetó y lo golpeó.
-¡No puedo creer que te destruyera con mi cataclismo!
Los pedazos del espejo que golpe caen al suelo mientras mi mano sangra.
-Por favor, vuelve.
¿Fin o no?
.
Si que soy malo ¿verdad?
Tengo en mente una continuación para ésta historia, ¿que dicen, la escribo?
Tal vez le guste lo que sigue, tal vez.
Volveré...