El disgusto solo le duraría un par de segundos al darse cuenta de inmediato que todo en la habitación estaba paralizado. Nadie movía un dedo ni se escuchaba ningún sonido vocal, físico o ambiental. Sus ojos se expanden y su instinto de supervivencia se enciende al ver como todo a su alrededor empieza a desvanecerse desde las paredes hasta las cuatro figuras de las mujeres cabeza a pies que se encontraban ahí.

La desesperación por querer moverse empeora al no poder ni siquiera sacar nada de aliento salvo su propia respiración rápida. El sentido bizarro de que todo se vaya volviendo nada a tu alrededor hace bombear sin control el corazón de hunk a tal punto de maldecir con todas su fuerzas la impotencia.

Cuando el único espacio que quedaba por borrarse era su ubicación y ya empezaba por la punta de sus pies avanzando con gran rapidez, no pudo evitar gritar internamente por la forma de morir que le había tocado. El horror que le invadía era indescriptible hasta simplemente desaparecer.

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No supo cuanto tiempo estuvo flotando en la nada en un espacio infinito con los ojos cerrados sin poder hacer nada más que estar profundamente molesto y lanzar uno que otro insulto guardado en sus años de experiencia.

Pero por otro lado aun cuando quisiera negarlo, se sentía sumido en una gran tranquilidad y paz que parecía siglos no sentía. Estando en umbrella su objetivo de vida solo se resumía en cumplir órdenes, tratar de mantener a los integrantes de su equipo con vida y si eso no era posible sobreponerse ante todo para terminar las misiones sin importar que fuese el único sobreviviente.

Una dura realidad que pocos estarían aptos para vivir y mantener en completo control

Las responsabilidades no ceden aun en otras dimensiones y tiempos, más cuando tiene que lidiar con un universo ninja, chakra, deidades antiguas y criaturas de la oscuridad. Cambios drásticos pueden dañar la psique emocional pero para su fortuna o infortunio esa ya estaba dañada desde hace años debido a muchos acontecimientos en su vida que lo han hecho quien es actualmente.

Repentinamente sus pensamientos fueron perturbados al sentir como la palma de una mano se posicionaba en el centro de su pecho tomándolo por sorpresa.

"He terminado de observar todos y cada uno de tus recuerdos."

Una voz femenina desconocida y vieja fue lo que escucho antes de sentir como un choque eléctrico recorre cada centímetro de si hasta dejarlo sin aliento. Solo le tomo un segundo de dolor y recuperado el aire para darse cuenta de que ya no se encontraba flotando sino de pie en alguna base solida.

"Ese viejo tonto no puede hablar en serio." La voz se oye irritada "Darle todo el peso de salvador a este hombre que no se lo merece."

A pesar de no entender nada, aquella voz tenía un punto.

El no era un héroe en ningún sentido y tampoco un salvador de dimensiones.

El solo veía esto como una operación que debe ser cumplida con una tasa alta de éxito, lo cual volvía su situación un poco estresante.

"Recupera tu cordura y no lo mates" Una nueva voz tranquila y femenina se hace presente tocando también su pecho para su incomodidad y molestia por no poder evitarlo "Ellos depositaron su confianza en este hombre y has observado por ti misma sus logros mediante tu enfoque"

La primera voz emanaba mucha irritación

"Como pretendes calmarme cuando dejaron que este hombre de otra dimensión completamente diferente a la nuestra se le hiciera cargar con un destino que no le pertenece." La segunda voz solo soltó un largo suspiro

"Porque él ha hecho lo que ha estado en sus manos para poder hacer algo y ha logrado un gran avance aun con esta pesada responsabilidad pegada en sus hombros. " Contesta con convicción "Bien, ya que has saciado tu curiosidad de cómo estaba la situación actual es momento de retirarnos y esperar a una nueva oportunidad para volverlo a ver."

"¡No puedes hablar en serio!" La primera voz eleva más su tono molesta pero aun así no parece afectar a la segunda debido a una ligera risa que expresa en diversión.

Siente sus miradas menos pesadas

"Sé que puedes oírnos y sé que debo disculpar esta extraña forma de contacto de las dos." Escucha un hmp por parte de la primera voz "Pero de alguna manera terminamos aquí y teníamos que entender que estaba pasando lo cual nos deja con una grata sorpresa por el enemigo actual."

Mientras la segunda voz le agradece por su trabajo hasta ahora, la primera no pensaba lo mismo.

"Se agradecido de que no te extermine." La amenaza de la primera voz ni lo inmuta dejando a la segunda dar otro suspiro

"Creo que ya es momento de despertar, agente hunk"

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Fecha: Treintaiuno de marzo del dos mil trece (31/03/2018)

Ubicación: Isla rockfort. Universo Resident Evil

Mundo real.

Como si su alma hubiera vuelto a su cuerpo, el hombre abre la boca buscando aire que no sabía que había perdido, desesperado infla su pecho hasta el máximo para luego botarlo nuevamente. De golpe se sienta en la orilla de la cama repitiendo la acción varias veces hasta que está completamente de acuerdo consigo mismo de que todo está bien y en su lugar.

Al hacerlo tan rápido cierra sus ojos y se vuelve a acostar por el golpe de luz solar que daba desde la ventana. Las persianas no estaban abajo.

Presiona los ojos antes de lentamente abrirlos adaptándose a la parte oscura de la habitación.

Su visión es borrosa al principio y sus movimientos lentos, esto lo hace con el fin de entender si no está en un sueño o su subconsciente.

Los músculos en su cuerpo ardían y pesaban debido al agotamiento de sus días sin dormir.

En solo unos instantes su visión se recupera y vuelve a sentarse de golpe nuevamente en la cama respirando normal.

"¿Qué demonios fue todo eso?" Coloca una mano en su rostro, pasando desde la frente hasta su mentón limpiándose el sudor. Al posar su vista en su mano esta nota que estaba temblando, lo mismo sucedía con la otra.

"Tiemblo de miedo… ¿Cómo es que he llegado nuevamente a esto?" Tomando otro buen suspiro se pasa la mano por el cabello y decide contactar con su inquilino.

"Son." El agente hace un llamado que no recibe ninguna contestación "Contesta."

Siguió haciendo varios llamados sin obtener señales ni ruido alguno, incluso intento entrar a su subconsciente para entender que sucedía pero al intentarlo era rápidamente rechazado o empujado.

Maldiciendo por lo bajo, decide ponerse en marcha en realizar las actividades mañaneras y deshacerse de la ropa sucia akatsuki que llevaba puesta. El reloj digital en la mesita a su lado daba las ocho de la mañana.

Ya de pie, no llegaría a dar dos pasos cuando un parlante que se encontraba en todo el rincón elevado a su izquierda de la habitación comenzó a sonar.

"Atención a los recién llegados del vórtice que están despiertos, espero hayan tenido una noche factible para su recuperación. Esto es un aviso para señalarles de que cercano a la puerta entrada y salida encontraran un baúl de metal en donde podrán encontrar vestimenta que podrán usar para cambiarse. Eso es todo, corto y fuera". Suena la voz de tayuyá

El comunicado se termina, se estira un poco y hunk solo se limita a levantar la tapa.

Dentro se encontraban varias mudas de ropas con temática militar como pantalones de camuflaje, remeras negras, botas de combate y guantes negros. Todo completamente ordenado y limpio que pareciera que aunque pasaran los años estos no perderían su calidad.

Pero…eso no era lo único que se encontraba en ese cuadro metálico. Bajo su brazo completamente y extendió su mano hasta tocar una superficie un tanto dura pero que parecía relucir bajo sus dedos sin enguantar. La toma y retira su brazo de dentro fácilmente hacia afuera para poder verlo mejor.

Era una pistola algo pesada. Una Desert Eagle Mark 1.

Ha pasado ya un número grande de días desde la última vez que poseyó un arma de fuego proveniente de su dimensión. Peleas, invasiones, chakra, técnicas y monstruos no se comparan en sentimiento de volver a tener parte de su vida de nuevo.

Como si de un descubrimiento ancestral se tratase comenzó revisar completamente el armamento. No dio cuartel al darle un ojo a toda su estructura como el cilindro, el porta-cerrojo, el cargador y el gatillo. Para su buena suerte el arma estaba en plena forma, sin terminar de decir que tenía un visto que decía que no fue usada nunca.

Volvió a dar un ojo dentro del baúl nuevamente y encontró la otra parte del tesoro, la munición. Pudo contar unas veinte o veintidós cajas que fueron revisadas en un santiamén. Nada sin aspecto corroído.

Extrae el cargador y cuenta que puede tener nueve cartuchos .357 Magnum.

Se sabía de antemano que este tipo de arma es utilizado únicamente para tiro al blanco y cacería. Por sus mismos calibres grandes, es un arma pesada y posee pocos proyectiles en el cargador. No tiene función policial o de fuerzas especiales.

Un concepto que termina rompiéndose en esta situación por lo que se está viviendo prácticamente con esta amenaza oscura que algo se está aclarando.

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El sonido de un ascensor bajando a planta baja resuena en el conducto del susodicho, otro ruido confirma que ya se estacionaba y posteriormente se abrían las puertas. Hunk salía por las mismas con aire diferente. Ya no vestía aquellas ropas akatsuki y estaba agradecido por eso, demasiado fantasioso para su gusto. Su apariencia estaba a lo cercano de un integrante swat pero sin tener chaleco antibalas, la radio estaba en su cintura, no tenía un casco especial y la nueva incorporación de fuego en su funda en la pierna diestra. Supuso que no necesitaría la espada, así que la dejo desarmada sobre la cama junto a las bolsas pequeñas.

Antes de bajar había tomado nota de que aun era temprano por la mañana, eso era más específico de saber gracias al reloj electrónico digital que se encontraba en la mesa de noche bajo el televisor pantalla plana. La hora exacta serian las ocho con cuarenta y nueve minutos.

Se decidió entonces salir del edificio y contemplar con sus mismos ojos el panorama visto a través de las cámaras de seguridad plantados en la isla, sobrevivientes al desastre biológico producido por la estupidez de umbrella.

Las puertas del hotel se abren, se cierran automáticamente y da sus primeros pasos al exterior. El viento mañanero golpea su rostro sin contemplación y los rayos del sol le daban una calurosa bienvenida a ese nuevo mundo.

A primera vista era la imagen de una entrada típica con lujos altos pero sin la apariencia de abandono. El camino de pavimento giraba en torno a una fuerte de agua abandonada centrada que daba tanto espacio para retroceder, estacionar o avanzar los vehículos que se encontraban abandonados, repletos de sangre seca hacia tiempo. Podía distinguir olores como de carne putrefacta y agua de mar tan mezclados que daban un regurgitar asqueroso en su estomago.

Usando su conocimiento sobre el chakra, lo canaliza en sus pies y se permite dar grandes saltos que lo llevan fuera del perímetro cercano al hotel. Para no dar tantas vueltas decide seguir el camino asfaltado que ya empezaba a verse el daño ambiental por las distintas grietas que esta poseía. Su avance lo hizo tocar con sus pies distintos carteles publicitarios, puestos de recuerditos, restaurantes, postes de luz, palmeras y mas vehículos en muy mal estados. Los cadáveres de los antiguos propietarios de los susodichos se hallaban desperdigados por el suelo, encontrándose secos y esqueléticos.

Muchas posiciones de los cuerpos daban señales de que intentaron defenderse, huir o gritaron de terror mientras eran devorados y asesinados.

Por otro lado, se puede agregar que no solo se hallaba la muerte humana, sino también el reguero sangriento monstruoso. Animales, animales deformes y seres humanoides contaban entre los que ya no respiraban en este mundo.

El espectáculo grotesco dio a entender al agente que lo que se vivió aquí fue una rotunda masacre, a tal punto que recuerda el ataque de un huracán a gran escala, pero hecho de grandes ganas de derramar sangre.

Tranquilamente aterriza sobre la arena de la playa pasados los vistazos hechos a las estructuras. El mismo lugar tampoco se salvaba de tener sangre seca regada, cuerpos y vísceras podridas, pero era en menor cantidad de lo que había esperado. Da un giro y visualiza desde una vista lejana, el panorama completo. A excepción del hotel a lo lejos, podía definir todo como un verdadero episodio de un desastre parecido al de raccoon city. Lo que lo hacía diferente era que no tenía a una de esas cosas tratando de comérselo y en un estado de alerta máxima donde su única preocupación entre tanto llanto y lamento inútil saliente de las bocas de los civiles, era su propia vida.

Cambiando el foco, lo que el recordaba de la isla rockfort ya no existía. Estuvo alrededor de doce o trece minutos dando vueltas y fue una plena confirmación a ese hecho. El recuerdo es lo único que mantiene del desastre virus, abandono, construcción y posterior devastación de la idea hotelera.

"Todavía recuerdo los viejos tiempos que pasé en el centro de entrenamiento militar. Ya nada es igual."

Su mirada neutra decía mucho y eso jamás lo admitiría. Jamás.

Paseo su visión hacia diferentes lados de la playa, siguiendo un solo curso movible con su cabeza. Dentro de su campo se percato de una mesa plástica, una que se hallaba intacta aunque algo sucia por el tiempo. Encima de la misma se hallaban unas frutas completas de color marrón que poseen el nombre de coco. Contaba cuatro en total.

Podía verse extraño para cualquiera que viera el repentino interés del hombre por el objeto y las frutas, pero para él era una oportunidad casi casual para probar algo que espera no se halla oxidado.

Desenfunda la pistola de su pierna, reviso la munición que tenia, carga en un ligero choque, prepara una dirección usando sus dos manos y jala el gatillo. La primera bala viaja a una rapidez que ya venía acostumbrado e impacta en la figura redonda haciéndola volar en cuatro pedazos. No sabía si era el tiempo o el uso constante de estos jutsus realizados y lanzados por sus manos, pero había extrañado el ruido de un disparo ejecutado por el objeto en sus manos. Se preparo nuevamente y volvió a jalar del gatillo hasta que la pistola quedo descargada.

Para la suerte del mueble de plástico rojo, los cocos fueron los únicos alcanzados por las balas y yacían a los lados hechos pedazos en una imagen espectacular.

El hombre suspira satisfecho por esa sensación de adrenalina olvidada y procede a guardar el arma, no sin antes recargarla y mantenerla preparada en todo momento.

Solo da tres pasos antes de que su radio comenzara a sonar en estática y una voz intentara comunicarse.

"Agente hunk ¿Me escuchas?"

La voz en comunicación es reconocida perfectamente. Levanta su mano y presiona el botón del micrófono en su oído.

"Aquí hunk, te recibo." Su tono de voz seguía siendo el habitual.

"Es un alivio que hayas respondido." El comentario le hace alzar una ceja "Uzumaki hizo un escándalo molesto cuando no te pudo encontrar y tampoco pudo dar contigo usando a la mujer uzuki por tu chakra."

"Esa mujer es una problemática." Contesta mientras mira las olas.

"Es un dolor de cabeza que sea mi prima. Me despertó mientras dormía." Responde suspirando "He revisado todas las cámaras y no te he encontrado. Descríbeme tu ubicación."

"Estoy en una playa, veo desde aquí el hotel."

"No poseo ojos electrónicos en ninguna playa." Escucha un tecleo y un gruñido "Te hago el pedido de que regreses para empezar la reunión de todos y presentar la información completa del problema actual con la oscuridad. Además de ya apaciguar a la rubia gritona."

"Entendido, estaré en breve." Aun con esa respuesta, no se sentía motivado a querer lidiar de nuevo con esa mujer. Raccoon city infernal se oye tan atractivo ahora mismo.

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Las puertas del hotel se abren y el aire frio golpea directamente al cuerpo del hombre que entraba apacible hacia el vestíbulo principal. El calor va desapareciendo de su cuerpo para darle paso a la frescura y sentirse más cómodo. Se decide a caminar hacia un sofá color café para esperar al resto y terminar con eso.

Solo tuvo que esperar unos dos minutos, mientras estaba en ese proceso intento nuevamente contactar con su residente, fallando al tratar.

Los ascensores se detienen y ambas puertas metálicas se mueven a los lados para dar acceso a quien lo haya usado para estar ahí. Doce figuras dan a conocer su presencia y no podían estar más extrañados. Se levanta y automáticamente los analiza.

Los ojos de hunk se estrecharon al ver que siete de los doce frente a él, parecían en su gran mayoría a un común escuadrón swat que se preparaban para una misión asignada por los altos mandos.

"¡TU!" Parpadea repetidamente mientras veía a la joven rubia acercarse con un ceño fruncido "¡Como te atreves a desaparecer así, bastardo! ¡Estaba muy preocupada!"

Los ojos de un adulto con una cicatriz en la nariz se abren de incredulidad.

"No veo porque eso deba importar." El hombre responde irritado por su señalamiento.

"Importa bastante, hunk." Irrumpe yugao antes de que la uzumaki explotara "Vivimos muy agitados estos días, no nos podemos dar el lujo de perder gente por el camino."

"Morir no está en mis planes." Se cruza de brazos "Tengo una misión que terminar antes de que eso siquiera ocurra."

Gaia no hablaba, se concentraba en tratar de leer las emociones del hombre sin conseguir una conclusión completa. Lo que tocaba era una coraza muy fuerte pero agotada.

"En eso tiene razón." Kurotsuchi comparte sus palabras "Aun debo vengar a toda mi gente en iwa."

"Es inevitable querer buscar venganza." Satsuki parpadea con su único ojo "Parece que todos aquí estamos en el mismo camino."

Los más jóvenes veían al grupo confusos porque no entendía mucho sus palabras.

"Pensar en la muerte no ayuda demasiado." Itami también irrumpe la conversación "Yo ya lo estuve y no es muy agradable que digamos, aunque posea sus ventajas."

"Tenemos una diferencia con tu situación anterior durante la guerra." Neji se acerca también "No sé quien es peor molestando a los muertos, si kabuto o birkin."

"No me interesa buscar una opinión de uno de los dos." Hunk mantuvo fija su mirada en el portador del byakugan "Solo sé que birkin es mi blanco principal si llego a encontrarlo."

En eso escuchan como alguien choca sus palmas para apagar e interferir en la conversación.

"Bien, eso es suficiente." Voltean y ven que era tayuyá con su peculiar bata de laboratorio "Pueden seguir la conversación en otro momento, ahora necesitamos aclarar los temas importantes."

Inari hace una señal con su mano para que lo sigan.

El sonido de muchos pies andando resonaba por el pasillo en el que se encontraban, ventanas a los lados y un sol radiante que alumbraba lo suficiente para evitar el uso de focos. No les tomo demasiado llegar hasta su destino, el cual tras abrir una puerta de buena madera se revelaba como un gran salón de ejecutivos.

Las paredes tenían un toque entre blanco y negro con varios cuadros de colores extravagantes. Una gran mesa una vez más de buena madera en el centro, sillas negras acolchadas y un televisor grande pegado en la pared.

Tayuya e inari caminaron hasta estar cada uno al lado del nombrado televisor.

"Siéntense, empezaremos a explicar muchas cosas." Cada uno hizo caso y tomaron una silla que para su suerte, era bastante cómoda. Los dos niños se sentaron con la oba-san de confianza, cada uno en sus piernas lo cual les genero una pequeña sonrisa "Neji, hunk." Ambos al escuchar el llamado se detuvieron de hacer caso a las órdenes anteriores. "Necesitare que ambos se queden de pie y vengan acá con nosotros." El muchacho de ojos blancos le mira directamente a los ojos esperando una confirmación. El solo asiente y hace lo que le pidieron.

Al llegar a sus respectivas posiciones, la mujer de cabello rojo enciende la pantalla, para revelar que no hay nada mostrándose.

"Damos arranque a esta reunión con una nota bastante alta." Levanta un lado de su bata y en un bolsillo oculto, saca un pequeño control. "Desde el principio de la investigación y del primer desastre registrado, hemos hecho una labor exhaustiva, por no decir un tanto masoquista, de ser espectadores recurrentes sobre las invasiones oscuras ordenadas por una nombrada reina."

Presiona un botón, se apagan las luces y aparecen las primeras imágenes en pantalla.

"No sabemos la fecha exacta de cuando comenzó o donde ocurrió la primera destrucción de una dimensión, por mas investigaciones que hicimos durante el tiempo que estuvimos aquí, no encontramos nada." Tayuya pasaba las visualizaciones que trataban de sus versiones alternas que lamentablemente ya no existen al morir en batalla "Lo único que podemos constatar es que todos sin excepción, opusieron resistencia hasta el final."

"Solo buscan erradicar toda vida existente en los universos que visiten, en muchos casos sin necesidad de la presencia de dicha reina." Inari prosigue "Sus acciones, masacres y torturas no tienen límites. Tanto es esta monstruosidad que en ocasiones, cuando el oponente y según sus términos, posea un espíritu de lucha increíble con el que haya aguantado suficiente batalla…puede llegar…a arrebatarle el alma."

Solo la respiración sostenida del resto se medio escucha en un silencio inestable.

Eso último le costó un poco decirlo. Recuerdos de su familia todavía rondaban su mente, como un mar de desgracia que carga en su conciencia por no poder hacer nada para protegerlos.

Presiona otro botón y aparece un símbolo de carga en pantalla.

"Este metraje fue sacado después del rescate de ellos tres." El jounin de la cicatriz se sobresalta

Lo primero que salía era un enorme ejército de criaturas de diferentes tipos y tamaños, que marchaba por un camino rocoso hacia un destino desconocido. Poseían restos de sangre, pedazos de carne que estaban devorando o peleaban entre ellos como animales por supremacía. Dos niños se cubrieron por el horror que veían.

"No hemos visto un tope a su ya desmesurado ejercito, matas uno y reaparecen veinte." El movimiento de la cámara se desplaza durando un par de segundos, viajando entre los diversos seres.

"Ahora llegaremos al plato fuerte y definitivo." La pelirroja presiona nuevamente un botón del control y el movimiento del video cesa en una sola imagen estática. "Ella es la reina de la que tanto han escuchado. No tenemos informes de un nombre o de donde proviene." Un asombro colectivo despierta en los presentes, excepto en uno de los dos únicos elegidos para estar de pie.

Se mostraba la imagen de una mujer con el cabello naranja, un kimono que llevaba un rojo muy profundo, tenía una figura de infarto de muy buenas proporciones tanto en sus dedicados pechos como un trasero, cintura y piernas que dejarían una fila entera de pretendientes si fuera una realidad muy diferente. Lo más resaltante de esta fémina era que tenia rasgos únicos, unas orejas puntiagudas y nueve colas esponjosas danzando en el aire.

Fácilmente lograron hacer conexión de la verdadera identidad de ese individuo.

"E-es una versión humana y femenina del kyubi." Yugao cumple al decirlo en voz alta

"Incluso desde aquí se ve muy poderosa." Satsuki presiona sus dientes.

"Llegar a ella no será fácil." Gaia le daba una mirada de muerte.

Naruko no sabía cómo reaccionar a este descubrimiento, pero mas extraño aun era no tener un comentario de su compañero.

El ánimo se encontraba candente y lleno de odio cargado, tanto que asustaba aun más a los niños. Intentar calmarse con esta revelación era muy complicado. Tienen la imagen de su asesina de vidas y no podían hacer demasiado.

"No te has asombrado demasiado." El muchacho pelinegro se dirige al agente "Es momento de que compartan la información que poseen ahora, eso te incluye a ti también, hyuga."

Los tres intercambian miradas y dan un ligero signo positivo para poder hablar.

"Toda la información recabada en todo el tiempo que estuvimos ahí afuera no llevaba a absolutamente nada. Puede que literalmente haya perdido el tiempo" Hunk fue el primero en dirigir su mensaje "No fue hasta el enfrentamiento contra nagato que fue un poco más claro, pero necesitaba una forma adicional para darle veracidad a estas imágenes mentales que se me fueron proporcionadas en un intercambio. Detesto trabajar con falsas pistas."

Rápidamente los que estuvieron cerca para presenciar el momento, eliminaron las dudas de los que se encontraban en el mundo puro y los rescatados.

Levanta su brazo y estira un dedo que apunta hacia la misma pantalla.

"Estoy corroborando lo que se ha dicho aquí." Vuelve puño su mano "Esa mujer es la causante del mal que ha hecho poner de cabeza sus vidas. Es la mujer zorro de la que tanto hemos escuchado hablar." Se encontraba irritado y no tenia duda de que si la tuviera en frente, ya la hubiera desaparecido a disparos.

Tayuya suspira por la situación y en un acto extraño, saca del otro lado de su bata una flauta para pegárselo a la boca. El tiempo no falto para que diera un toque suave y relajante que calma las increíbles ganas de asesinar que emanaban en la sala. En un cálculo rápido, la tonada solo duro un minuto con trece segundos.

Dejo atónitos a los presentes.

"¡Cálmense de una vez!" Tayuya reacciona molesta "No es el momento para ser idiotas."

Pronto la imagen se aleja y se detiene frente a otras figuras que la acompañaban. Neji decide proseguir la explicación cuando el silencio inunda.

"Ellos se hacen llamar sus generales." Hunk pudo reconocer a la mujer harpía, al extraño sujeto con la máscara blanca, el bastardo de birkin, otro sujeto que cargaba una gabardina negra y un casco de motocicleta que protegía su cara, hanzo y el poderoso danzo shimura en edo-tensei. "Durante el control de birkin pude conocer a los ya vistos aquí en pantalla. Desconozco si existen otros además de ellos aunque es muy probable." Neji niega saber sus nombres.

Los ojos del equipo en cuestión estaban analizando y pegando cada rostro en sus mentes para alguna posterior intención de exterminio debido a sus altos índices de peligrosidad. La uchiha menor no se hallaba para no contenta de ver nuevamente al shimura.

"La magnitud de esta situación conjunta y corrompida ha hecho mucho de sí." Itami reflexiona con sus manos en la mesa "Y hasta hace poco me encontraba muerta." Su humor era muy agrio.

"Corrección, estábamos." Neji le corrige y ambos suspiran pesadamente.

"Que pesimistas son los dos." Kurotsuchi los mira con una clara decepción.

Hinami y shinachiku pasado el susto, solo se quedaron viendo como avanzaba la conversación sin entender nada.

Nuevamente se escucha un nuevo botón siendo presionado y el televisor entrando a una nueva oscuridad. Fue apagado.

"Antes de terminar, quiero saciar esta curiosidad que llevo rondando en mi mente desde que di comienzo al primer contacto por radio." Las miradas de todos se clavan en ella "¿Que tanto conocen de este hombre?" Señala con el pulgar a hunk quien estrecho sus ojos por el señalamiento.

La desorientación por la incógnita fue enorme.

"¿Qué estás diciendo, tayuya?" El muchacho de pelo negro también se encontraba igual que el resto.

"En un punto plano y existencial, nosotros no deberíamos de existir ni estar aquí ahora. Pero por motivos ajenos a nosotros, estamos aquí respirando, hablando, interactuando y planificando maneras de contrarrestar esta pesadilla andante. Absolutamente es imposible que convivamos en un mismo universo sin que haya consecuencias a largo plazo que hagan cambiar la historia ya escrita." Ella guarda su flauta y se cruza de brazos "El universo y el destino son extraños, tan retorcidos que eligieron a este hombre, fuera de la jurisdicción ninja para hacer este trabajo, un tanto obligado. Un simple ser humano que fue convertido en una poderosa guía al sobrevivir un infierno ocasional."

Hunk se pone muy serio con el asunto. El fue convertido en términos sencillos, en un salvador forzado y negado a sus deseos personales por los otsutsuki, transformándolo en un trabajo de por vida que posiblemente no tenga una paga, sino poco más que un miserable reconocimiento.

Una sola mano se levanta en el aire, pidiendo permiso para poder preguntar. El acto llama atención y un asentimiento positivo para realizar su intervención.

"Entiendo todo lo que han hablado hasta ahora en esta habitación y entiendo por experiencia mortal esta amenaza que representa esta entidad." Iruka habla con claridad y calma "¿Pero qué tiene que ver el en todo esto? ¿Quién es el?" Las claras dudas atacan al pobre chunin.

Solo una sonrisa divertida y burlesca aparece en el rostro de la pelirroja.

"El, mi querido instructor." Coloca una mano en el pecho del agente para su consternación. "Él es quien hizo que todos aquí todavía estén con vida. El fue enviado por el mismo sabio de los seis caminos, como investigador y soldado para detener lo que ya has visto. Incluso su poder es muy interesante."

La mirada del hombre se estrecha por la horrible declaración y la de la pelirroja solo le responde llena de diversión.

"No puedo creerlo." Fue como si recibiera una poderosa patada llena de realidad

"Es mejor creerlo, sin su contribución y movilidad en esto, ninguno aquí estuviera hoy." Inari decide ayudar también en su concepto de lo que ha visto del hombre.

Hunk gruñe y quita su mano.

Quería que se callara, detestaba la atención innecesaria que lo hacía ver como un buen tipo. El era todo menos eso. Maldición, incluso no se ha acostumbrado a hablar en japonés.

"¿Por qué decidieron seguir a un simple desconocido en cuestión, que salvo sus vidas sin intención de hacerlo y quien se encuentra bajo un nombre en clave?" Ella lanza esta pregunta como una bomba que espera aclarar este pensamiento oculto. "Podrían haberse separado en un punto del camino y seguir por su propia cuenta."

Podría admitir tal vez un poco, que quería la respuesta a esa pregunta. Les dio la oportunidad para que se mantuvieran ajenas a esto, fallando miserablemente.

Para sorpresa de unos y esperado por otros, naruko fue la que se levanto de su asiento abrazando al pequeño rubio en sus brazos y dirigiéndose directamente al agente.

"Le debo la vida." Se planta una respuesta que emanaba mucha determinación, dejando sin palabras al resto "Lo conocí cuando era más joven, en ese entonces usaba un atuendo extraño y tenía su cara tapada, me salvo de un grupo de civiles que intento acabar conmigo en mi quinto cumpleaños. Rescato mi juventud al inicio y lo hizo de nuevo en mi dimensión durante mi encierro cuando ya había perdido la esperanza. No pretendo alejarme de él ni quiero hacerlo, ya estuve lo suficientemente lejos."

Esas fueron sus palabras cargadas de una emoción centrada que no daba paso a embustes y engaños. Los dos rubios sin quererlo, generaban una amplia gama de fortaleza que los empujaba irremediablemente a ser sinceros consigo mismos. Hunk, por su parte estaba un tanto perturbado por esas palabras, no tanto por lo emocional sino porque en sus años de experiencia social mínima, en esa última línea sonaba mucho a una acosadora.

Solo fue cuestión de segundos.

En la habitación los asientos fueron empujados hacia atrás lentamente en una acción voluntaria, cuando sus ocupantes se levantaron y repitieron esa misma frase varias veces.

Le debo la vida.

Adicional a sus palabras, a su pesar interno de que eran el único o lo únicos que quedaban con vida de su dimensión, de que nadie más lo consiguió, que posiblemente este pasado tormentoso de oscuridad precoz sea un recordatorio permanente, lograron expresar de forma clara y concisa aquellas experiencias que vivieron antes de conocerlo, el horror sin escrúpulos de lo que es capaz el odio al introducirse así sea un poco, dentro de los corazones vivos y el efecto perpetuo.

¿Perdieron algo? Perdieron demasiado y no lo supieron apreciar en su momento.

El dueño del chaleco táctico verde no podía salir de su perplejidad ante esta narrativa emotiva llena de pesar y sufrimiento. Eran demasiado diferentes a lo que conocía.

'¿Qué clase de infierno existe tras las paredes de nuestra propia seguridad?'

"Creo que esto es todo." Tayuya levanta la sesión "Con esto podemos concluir esta reunión."

El agente no fue afectado por los sentimientos que tenían esas palabras. Para bien o para mal, se necesita un empuje sádico y tétrico para despertar de un sueño lamentable que solo posterga el momento de chocarse con la dura realidad. Durante su tiempo en umbrella, tal pensamiento fue reforzado hasta convertirlo en el tipo que es ahora. No queda lugar para lamentarse, nada para él hubiera, solo la actitud de sangre fría para salir con vida del peligro inminente.

"Les pido que no se vayan aun." Inari les hace un llamado "Hay algo que debemos mostrarles."

Tayuya lo observa confundida hasta que la idea se prende en su cerebro "Rayos mocoso, casi se me olvida."

De la sala ejecutiva son guiados hacia la parte de atrás del hotel. La travesía fue, en perspectiva del agente irritado, una guía casi turística mientras pasaban por tiendas y puestos de recuerditos, ropas y accesorios que abandonados, llamaban la atención. Existía un mínimo y máximo interés en el grupo que intentaban disimular, para los niños era otro cuento, entre pucheros y pedir tener juguetes.

Iruka hablaba cercanamente con naruko y shinachiku. Gaia escuchaba lo que decían y opinaba si le preguntaban. Itami regañaba a satsuki por su ojo faltante, no era difícil decir que ella trataba de ignorarla, trataba. Kurotsuchi e hinami tapaban sus risas por el trato. Yugao y neji se me limitaron a ver toda la estructura a su alrededor. Hunk se mantenía al frente, ignorando su espalda y expectante de lo que iba a ver.

El exterior de atrás del hotel era una imagen bastante agradable para los visitantes que se costeaban estos lugares. El piso para recorrer era de cerámica hasta cierto punto, conectando a su derecha una gran piscina, derivando a un jacuzzi y otra piscina más pequeña para niños. A la izquierda se podía notar un bar centrado, techado y con varias mesas de madera. Ya para el camino del frente, pasando una ligera valla metálica, estaba un buen campo de hierba natural, brillaba en un saludo silencioso y varios árboles daban una danza al soplar de la brisa. Era a simple vista una gran idea para jugar golf y conducir un carrito para pasear.

"¿Para qué nos has traído hasta aquí?" Hunk rompe el esquema de relajación naciendo del rodeo natural.

"¿Han notado algo extraño al despertar esta mañana?" El chico de cabello negro contraataca con otra pregunta. "¿Han intentado comunicarse con sus inquilinos?"

Uno fija su mirada en los jinchurikis, esperando que dijeran algo. Dos corrían y jugaban en lo verde. Tres no entendían a que venía ese plural. Cinco se alarman al recordar ese minúsculo detalle.

"Por sus caras debo decir que acerté al blanco." Tayuya levanta nuevamente el lado derecho de su bata y busca en un bolsillo debajo del otro, anteriormente nombrado y saca otro control que tenía una forma diferente "En esta isla, se implanto un poderoso sistema anti-rastreo satelital y bloqueo de cualquier señal con la finalidad de evitar cualquier desparrame de testimonios innecesarios, si se llegara a descubrir el lado ilegal."

"Aquel loco millonario fue el primero en ser atacado, y antes de morir activo este sistema para desaparecer la isla y con eso mandar a la gente residida al infierno." Inari habla sin preocuparse de nada por sus palabras.

Ella presiona el único botón que posee el aparato en su mano y el resto fue un espectáculo futurista. En la cima del hotel había una línea de color azul oscuro que se disparaba a una distancia al cielo, este choca en un sitio y empieza a llenar una larga distancia que cubre toda la isla completa. Era literalmente un domo gigante de estadio.

"Esta tecnología es lo que provoca ese problema que tienen. La estoy cambiando a solo comunicación de este mundo." Era como un anochecer provocado "De alguna manera que no nos explicamos, esta cosa fue afectada por un vórtice que hizo un cambio repentino a su configuración."

Al pasar el tiempo, este empieza a cambiar del azul oscuro hacia un azul claro.

"Diversas pruebas hicimos para asegurarnos de que todavía funcionase como debería de ser y, en efecto todavía funciona. Sin embargo, impide que hagamos uso del kuchiyose no jutsu y evita la comunicación con el bijuu residente. Desconocemos si bloquea algo mas."

De entre el grupo itami fue la que se lleno de curiosidad por ese dato.

"¿Cómo hicieron para saber eso ultimo si no tienen un bijuu aquí?" Una pregunta que es muy válida.

Tayuya se muerde la lengua e inari fija su mirada hacia otro lado para intentar escapar.

"No es una historia muy interesan-"

"Secuestramos a la jinchuriki de dos colas e hicimos un pequeño experimento para ver qué pasaba." El chico apenas termina de hablar solo para terminar esquivando los golpes de la mujer a su lado.

"¡Maldito traidor!" Inari se aleja una gran distancia, mostrándole una diminuta sonrisa y se queda refunfuñando "No le hicimos nada malo, la tuvimos de que devolver a las pocas horas por un pequeño detalle con esa máquina."

"¿Detalle?"

La respiración se quedo revoloteando, atrapada en sus gargantas. Seis cuerpos fueron reducidos a canticos de un poderoso dolor, que a su vez bañaba sus cuerpos en un chakra de diferentes colores acorde a su circunstancia no planeada. Rojo, naranja, azul oscuro, blanco, arena, negro y verde. Un pequeño remolino de polvo se formaba a su alrededor, crecía en tamaño e impedía el pase o la obtención de ayuda.

"¡¿Qué está pasando?! ¡¿Qué ocurre?!" Yugao exclama en gritos, mientras usaba su cuerpo para proteger al pequeño rubio. Itami hacia lo mismo con la chica de los ojos diferentes.

"No lo sabemos." Inari se protegía los ojos con sus brazos "Es por esto que tuvimos que devolver a la mujer de kumo. Entramos en pánico."

Nadie sabía qué hacer, solo esperar a que esta misteriosa animalia terminase.

Para poner todavía peor la situación, la diadema de neji se dispara de su frente, dejando libre la marca maldita que brillaba intensamente. En iruka ocurre lo mismo, su diadema también se dispara, lo cual no sorprendería mucho de no ser porque su cicatriz en la nariz brilla intensamente. Ambos retoman un grito profundo y explotan en una nube de humo bastante espesa.

Al resto le ocurre un acontecimiento insólito en todo sentido de la palabra. A la altura de sus estómagos, en el centro de sus sellos se disparan un hilo grueso de chakra a una distancia de veinte metros. Lo que ocurre a continuación son cinco explosiones de humo que liberan fuertes ráfagas de aire que hacen retroceder varios pasos a los presentes no afectados.

Itami y yugao se recuperan de la conmoción provocada por el inesperado fenómeno y tratan de entender que había sucedido. Tayuya e inari esperaban que nada fatal haya pasado y que no hubiera ocurrido algo estúpido que destruyera lo que tanto les costó reparar.

El humo se disipo un poco para mostrar a hunk y a su grupo jinchuriki arrodillados en el suelo, respirando de cansancio y gruñendo del dolor,

Antes de que nadie hiciese algo, la figura de un mono dispersa el humo usando sus brazos. Los ojos de ambas se abren como platos. En todo su esplendor y sin estar de verdad cuerdas, tenían a varios bijuus frente a sus ojos. En vivo y en directo.

"Una, dos, cuatro, cinco y nueve colas…" Yugao no salía de la impresión "¿P-pero cómo?"

Inari no podía evitar estar asombrado también. Esto no sucedía a diario.

"Oh, eso es fácil de explicar," La mujer pelirroja les hace un seña para que vean a su costado "Miren bien."

El hulo de chakra todavía estaba visible y saliendo de los afectados. La conexión se hizo evidente, por no decir muy obvia.

"¿Mi hermana es una jinchuriki?" Veia a satsuki presionando sus dientes "No sé porque tengo la necesidad inmediata de darle un buen sermón al no decirme nada."

Los niños lejos de estar asustados, no podían dejar de sentirse maravillados. Shinachiku reconoció rápidamente al zorro de las nueve colas.

"¡Hunk!" El gran mono se pronuncia tras su aparición "Maldito bastardo ¡¿Qué has hecho?!"

"¿De qué demonios hablas, son? No he hecho nada."

"¡¿Nada dices?!" Golpea el suelo con sus palmas "¡¿Por qué estoy fuera del sello?! ¡¿Vas a morir?!"

"Cierra la boca." La irritación en el agente va en aumento "No lo estoy, ni siquiera sé que está sucediendo,"

"Gaia te ves horrenda." El shukaku aprovecho el momento para burlarse

"Sigues igual de fastidiosa." A gaia le gusta la broma.

"Esto es algo que no me esperaba." Kokuo gira su vista a todos lados

"Dímelo a mí." A kurotsuchi le pesaba el cuerpo.

"Ese edificio tiene una forma muy extraña." Matatabi hace lo mismo que su hermano.

"Estoy muy débil." Satsuki trataba de caer al suelo.

"No me veas asi, mocosa. No tengo idea de nada." Kurama no entendía como estaba afuera sin matarla y como era que estaban sus hermanos aquí.

"Taicho ¿Qué está pasando?" Naruko le pide respuestas a un hombre que tampoco sabe.

"Tenemos otro problema aquí." Tayuya fue llamada por su curiosidad acerca de que le había pasado a los otros dos y vaya que esta fue otra sorpresa.

En conjunto un desconcierto masivo.

"El sello desapareció."

"Sandaime-sama dijo que no era posible romper ese sello."

Se levantan del suelo y empiezan a inspeccionarse. Cintura, pecho, piernas, cara y cabello. Se revisaron no tan a fondo, solo superficial, no irían a hacer una locura en público.

"¿I-iruka-sensei y ne-neji son mujeres?!" Como no podía ser, naruko fue quien expreso muy a su modo, esta extrañeza.

Hunk solo pudo maldecir desde sus adentros.

'Mi estúpida y extraña ilusión se hizo casi realidad.'

Inserte aquí ending del capítulo.

Continuara…