HEY!

FELIZ AÑO! Aqui les dejo un regalito..


WARNING:

Lo mismo de siempre: Rated L por LUJURIOSO (debería existir esa clasificación haha).

N/A:

Uhm, estoy algo insegura de este FF porque es la 1ra vez que escribo un FemSmut donde usan un Strap-On, por lo que si me dejaran saber que les ha parecido sería genial!

N/A2:

Este mes es mi cumple...así que les sugiero propongan: Ya sea tema o pareja (PM o Rvw) y como regalo de mi para uds lo publicaré el día de mi cumple!

A LEER!


"Inesperado despertar"

By. Leyla zinD

Una faunus no lo quería admitir pero en el más recóndito espacio de su mente un terror y pánico de decepcionar a su rubia chica carcomía su confianza y 'sabiduría' adquirida de sus novelas literarias románticas. Por lo que Blake había estado despierta toda la noche mirando videos pornográficos de chica y chica en su scroll. Quería sorprender a Yang al haber 'aprendido' de estos como una chica complace a otra sexualmente.

En alguna ocasión en la que Blake detenía el acalorado toqueteo e intensos besos que compartía con su chica, Yang había comentado que era totalmente normal sentirse insegura e inexperta en esa área ya que ninguna de los dos tenía conocimiento en el área femenil más que consigo mismas…Pero nadie mejor que la ávida lectora y amante de la búsqueda del conocimiento: Blake Belladonna.

Weiss Schnee, confidente y segunda mejor amiga de la faunus pelinegra –Yang sería siempre su mejor amiga,-, había bromeado alguna vez cuando Blake le confesara sus temores, 'Quizá Yang se va cansar de siempre ser detenida antes de las cosas escalaran un paso más físicas' Blake odiaba admitir que tenía cierto grado de razón. Sabiendo que la única manera de enfrentar sus temores y, al mismo tiempo, de demostrarle a Yang que, al igual que ella, la faunus deseaba aquel intimo contacto tanto como ella. Blake decidió investigar.

La pelinegra sabía que debería ir a dormir a la habitación que compartía con el resto del equipo RWBY, Ya son las 3 am! Pensaba sumida en el alejado sillón en un rincón en la biblioteca donde realizaba su 'investigación'. Por un instante se perdió sumergida en sus propios pensamientos, tanto así que por poco no nota que el sol ya comenzaba a entrar tenuemente por la ventana de dicha biblioteca.

Saltando fuera de su lugar, guardando su scroll en el bolsillo de la chaqueta de su uniforme, Blake se dirige rápidamente hasta su dormitorio. Al entrar es saludada por una pobremente despierta, pero totalmente vestida, Ruby Rose.

"Hey Blake," susurra señalando a Yang, esta estaba dormida sobre la cama de la faunus y no en la litera de encima, "-disculpa a Yang, se quedó despierta esperándote anoche y-"

"Solo asegúrate de que ambas lleguen a tiempo a clase de Oobleck," murmura Weiss sonriendo divertida a Blake interrumpiendo a Ruby, "-Ruby es hora de irnos." Dice con sequedad antes de tomar la mano de la joven líder encaminándose rumbo al comedor a tomar el desayuno, guiñándole un ojo a la faunus antes de salir de la habitación.

Parpadeando un par de veces para salir de su estupor, la faunus recuerda que tanto ella como Yang aún tienen un par de horas antes de su primera clase del día, por lo que Blake se lanza a tomar una ducha rápida justo después de tomar la ropa interior más sexy que poseía y su típica yukata.

Blake se detuvo frente a Yang a un par de pasos de esta luego de salir de la ducha. Tomando aire para tranquilizar sus nervios anda hacia la puerta de la habitación asegurándose de cerrarla adecuadamente. Nuevamente observa a su chica, quien está dormida plácidamente bajo la manta de la faunus.

Yang estaba profundamente dormida teniendo un lindo sueño con Blake en este. La rubia disfrutaba de no compartir todas y cada una de las clases con Ruby y Weiss pues eso significaba dormir a un par de horas más al menos un día a la semana.

Un suspiro tranquilo escapa de los labios de la pelinegra al acercarse sigilosamente hasta Yang notando, como al colocarse sobre el final de la cama, está sigue dormida. La faunus sonríe suavemente comenzando a sacar con sumo cuidado el short negro del pijama de Yang. Blake sonríe ante el pesado sueño de su chica, retirando con cuidado la manta que cubría a la rubia dejándola únicamente en su blusa de tirante amarillo y la delicada tela en su entrepierna a juego con el amarillo de dicha tela.

Esperando que su chica continuase dormida para lo que está por ocurrir, Blake se acomoda lenta y cuidadosamente entre las piernas de Yang sobre la cama. Timando con delicadeza la ropa interior de la rubia, la retira con lentitud deteniéndose de vez en cuando al ver a Yang agitarse entre sueños.

Blake nunca había estado tan feliz de que Yang durmiese como una roca, pero gracias a esto la tenía frente a ella a medio desnudar y al darse cuenta de esto contiene el aliento súbitamente. El deseo empieza a ganar terreno sobre su nerviosismo. La faunus separa las piernas de la rubia con suavidad agachándose al colocarse entre estas, alineando su rostro sobre su centro.

Alzando la mirada una última vez antes de cuidadosamente tomar a Yang por sus muslos, busca así mantener su cadera firme en su agarre al comenzar su exploración en lo más íntimo de su chica. Utilizando sus dedos, Blake separa los labios inferiores de Yang, tratando de hacerlo lenta y cuidadosamente para no despertarla antes de tiempo.

Sin detenerse a pensarlo más, Blake presiona su lengua contra la entrada de Yang comenzando a moverse de arriba abajo explorando simplemente. Segundos después sus movimientos cambian a lametones más seguros, los cuales van desde de la entrada hasta su clítoris, haciendo que Yang exhalara en place entre sueños. Blake se detiene momentáneamente sonriendo al sentir como Yang comienza a regalarle muestras del placer que causa en ella al empapar su lengua y labios al recorrer el recóndito espacio en la rubia. La faunus sonríe una vez más con orgullo reanudando su tarea.

Sin detener su labor, la faunus recorre con sus labios y lengua el centro de Yang. Sus orejas felinas se movían siguiendo la respiración entrecortada de esta así como también los pequeños y placenteros gemidos que se escapan a la rubia hacían que sus orejas se agitaran con ansiedad. Alzando la mirada, Blake nota que su chica está completamente despierta, observándola fijamente. Recordando que sus otras compañeras no volverían hasta por la tarde, Blake continúa la exploración del ardiente y húmedo centro de Yang.

En ese momento la rubia hizo nota mental: Esta, es la más inesperada y placentera forma de despertar que he experimentado en mí vida.

Por más deleitable que la situación fuese, Yang deseaba asegurarle a Blake que estaba completamente despierta por lo que enreda su mano izquierda en el negro cabello de la faunus, haciendo que la pelinegra sonriera; ojos ámbar se veían oscurecidos a causa de la excitación que se apoderaba de la faunus. Blake sonríe suavemente a Yang segundos antes de regresar a su labor. Yang acomodaba el cabello negro de Blake de manera que este no impidiera ver lo que la faunus hacía en y con ella.

Haciendo todo lo posible en demostrar las habilidades que había aprendido la noche anterior Blake aceleraba sus toques y movimientos orales, Yang podía sentir como se acercaba a la cima sabiendo de antemano que no tardaría nada antes de alcanzar el éxtasis total.

Podía sentir a Yang cada vez más húmeda, escuchar su agitada respiración e incoherentes murmullos comenzar a aumentar en tiempo y frecuencia solo le reafirmaba que lo que hacía estaba más que bien recibido, todo esto animándola a moverse más rápido. La rubia sujeta a Blake entre sus piernas, apretando el agarre sobre el cabello de la faunus conforme esta la orillaba cada vez más cerca del éxtasis supremo.

Unos cuantos hábiles lametones más y Yang se retorcía bajo Blake gritando su nombre de a los cuatro vientos. Espalda arqueada, ambas manos (tanto su nueva prótesis como la original izquierda) sujetaban a la faunus por el cabello y manteniéndola cerca, muy cerca de ella. La nombrada, recordando lo que había aprendido la noche anterior, continúa lamiendo y succionando sobre el pequeño montículo de la rubia lentamente buscando extender su orgasmo por el mayor tiempo posible antes de ayudarle a descender de la cima.

Cuando Yang afloja su agarre del cabello de Blake, esta última besa el ascenso de su camino sobre el cuerpo de la rubia encontrándose con la blusa amarilla antes de alzarla ligeramente para atender los dotados pechos de su chica, recorriendo con su mano uno de estos hasta pinchar el pezón entre su índice y pulgar, mientras sus labios y lengua atendían el otro pecho. Sonriendo al escuchar la fuerte inhalación de la rubia, Blake decide continuar su ascenso hasta llegar a la altura de los labios de Yang. Observándola buscar recuperar su aliento, la adoración en los ojos ámbar de la faunus es correspondida por los violeta de Yang al mirarle con la misma necesidad en los ojos sin apartar su vista de la suya. Blake se inclina hasta besar, de manera dulce y pasional al mismo tiempo, a su chica buscando demostrarle en ese beso cada sensación que despertaba en ella.

Tan pronto como Yang sintió podía confiar en su cuerpo lo suficiente para moverse, atrae a su chica besándola apasionadamente, murmurando ligeramente palabras inaudibles al detectar su propia esencia apoderada de los labios de la faunus. La rubia se retira la blusa del pijama que aun llevaba puesta haciendo sonreír a Blake al dejarle ver que no llevaba sujetador.

Tomando una profunda inhalación ante el contacto piel a piel al abrazarle, Yang susurra suavemente a los oídos felinos de Blake, "Esa fue la mejor manera en la que me he despertado jamás." La faunus reía suavemente contra el área de pulso en el cuello de Yang asintiendo antes de alzar su rostro para besar con pasión y desesperada necesidad a la rubia.

Momentos después, Yang se aleja de la pelinegra con una sonrisa divertida en el rostro. Blake la sigue con una mirada confundida en el rostro notando que la rubia comienza a rebuscar en su armario y, al encontrar lo aparentemente buscado, camina de regreso hasta la faunus sonriente con una caja en brazos.

Yang toma un respiro más, esperando la reacción de Blake al entregarle dicha caja. Observándole con curiosidad, y un poco de ansiedad, la faunus abre lo recibido e inmediatamente su quijada casi podía tocar el suelo. La rubia podía sentir el latir de su corazón acelerarse cada segundo que Blake se mantenía en silencio observando con sorpresa el contenido, lo que no esperaba era que la pelinegra tomara el objeto de dentro: En sus manos, la chica sostenía un strap-on tamaño ¿Común? Yang sintió un espasmo placentero recorrerle por completo al observar a Blake comenzara a desatar la correa del mismo.

"¿De dónde lo sacaste?" pregunta finalmente Blake, rompiendo el silencio.

"Nora." Murmura Yang. Por primera vez en mucho tiempo, Blake sonríe con diversión al ver el rostro de su chica sonrojarse.

Sin dejar de sonreír y reír por lo bajo, Blake indica a Yang ayudarle a colocárselo. Ambas ajustaban las correas acomodando el artefacto en el lugar 'apropiado' en lo que Yang pensaba fue tiempo record. La faunus, nerviosa pero ansiosa al mismo tiempo, se acomoda en posición sobre la cama en espera de la rubia. Tomando aire una vez más al inclinarse y colocarse en posición entre las piernas de la faunus, Yang la besa nuevamente mientras recorre con sus manos lo tersos muslos de está buscando tranquilizar cualquier rastro de duda.

En un suspiro aquellos besos escalaron convirtiéndose en pasionales y necesitados, Yang frotaba la punta del Strap-on contra la entrada de Blake. La faunus incapaz de contenerse comienza a empujar su cadera buscando aliviar la ardiente sensación que se apoderaba de ella. Buscando aliviar a la faunus, Yang se posiciona en la entrada de Blake adecuadamente y sujetándole por la cintura, se ayuda a adentrarse lentamente en la faunus. Blake exhala pesadamente un sonido mezcla de placer y satisfacción haciendo sonreír divertida a la rubia.

Yang se toma las cosas con calma, adentrándose poco a poco en Blake ayudándole a acostumbrarse a la sensación antes de estar completamente dentro de esta. Al notarse por completo dentro de la faunus, la rubia la besaba con suavidad dándole tiempo antes de comenzar a moverse dentro de ella con ayuda de sus caderas.

Echando su cabeza hacia atrás, Blake aprobaba lo que sentía a Yang hacerle y para más inri, enreda sus piernas alrededor de las caderas de la rubia. Yang comienza a empujarse dentro y fuera de la faunus.

"D-Dust, más rápido Yang," pide Blake respirando entrecortadamente.

Feliz de cumplir el deseo de su chica, Yang aumenta el ritmo de sus movimientos yendo más rápido. Sonríe al sentir las uñas de Blake enterrarse en sus hombros así como el aliento de esta sobre la base de su cuello.

Se sentía estar en el cielo por de la manera en que Yang se movía buscando complacerla. Blake hasta entonces no habría aprobado utilizar aquel artefacto, pero se aseguraría de agradecerle a la entrometida Nora Valkyrie por tan exuberante regalo. El strap-on alcanzaba lugares dentro de ella que no sabía podían ser tan placenteros y el sentir a Yang recorrer su costado, pierna, pechos y cada rincón en su piel mientras se empujaba en ella, sobrecargaba sus sentidos.

Cuando Yang se sintió batallar al tratar de continuar su empuje con el strap-on sabía que Blake estaba cerca, muy cerca del orgasmo, lo que en ese momento comenzaba a representar un pequeño detalle era que su mente comenzaba a tener problemas para seguir pensando dado que la parte interna del strap que masajeaba su clítoris la acercaba rápida y violentamente a un segundo orgasmo.

Buscando que Blake llegase a la cima primero, Yang utiliza su mano izquierda al deslizarla entre ambas comenzando a frotar sobre el clítoris de la faunus al mismo tiempo que seguía empujándose dentro de ella. Blake se abraza con fuerza a la rubia al sentir el éxtasis supremo apoderarse de ella causando así detener todo movimiento por parte de la rubia, quien fue incapaz de continuar pues al escucharla gritar su nombre, Yang es poseída por su segundo orgasmo del día.

Respirando agitadamente, Yang besaba con suavidad el área e pulso y cuello de la faunus, mientras esta otra a su vez recorría con igual suavidad la espalda de la rubia, dejándose ambas envolver por el silencio post-climax.

Alcanzando con una de sus manos la cintura de Yang y con la otra su mejilla, Blake besa con dulzura sus labios sin gana alguna de dejarla salir de aquella habitación.

"Eh, Blakey-" murmura entre besos.

"Mmm ¿sí?"

"Aún tenemos poco más de una hora antes de la clase de Oobleck, que dices si-"

Proponía Yang pero fue interrumpida por Blake cuando esta la gira inesperadamente dejándola bajo suyo sin remover la adición al cuerpo de Yang de dentro de sí.

Succionando la base del cuello de Yang, la faunus murmura suavemente, "Me has leído la mente…"

::FIN::


Ahí lo tienen mis pervertidos-as lectores!

Saben que adoro leer tanto sus coments como PMs así que si quieren otro FF de RWBY solo hay que pedirlo... ¿Dónde? Uh, ¿Ves esa cajita aqui abajo? Ahh es la Rvw box así que llegale a escribir tu opinion o sujerencia y considerenlo hecho!

Los adoro y los leo en los coments...

Ahhh!

No están pa' saber ni yo pa' contarlo PERO, entre los varios PM que recibí, alguien me preguntó porque no escribía un FF donde una de ellas use uno y yo pensé…Uhm, jamás he escrito uno con un falo falso…. Pues VA!

Escrito especialmente para ese especial amiguito que pidió permanecer en las sombras…Solo diré: ¡Fue un Bato! Haha, su género si me lo autorizó decir.

(Soy del norte de México, disculpe uste' los modismos) :B

Enero 03, 2017.