Crónicas de un Enamorado (que tal vez es masoquista)

Por Cassiopeia Druella Black Stark.


Disclaimer: Tite es el creador de Karin y Toshi (y de cagarl* en el final de Bleach) y yo de este fic.


Para Hitsugaya Toshiro, su novia Kurosaki Karin era... Bueno, ella era muchas cosas, era difícil, inteligente, celosa, manipuladora, madura, infantil, celosa, protectora, fuerte y en serio muy, muy celosa. Pero también era encantadoramente fascinante y diría que dulce si ignoraba el enojo que la cegaba cuando otras chicas coqueteaban con él, aunque ese enojo siempre valía la pena cuando discutían y sus hormonas se alborotaban y terminaban haciéndolo como los adolescentes estúpidamente enamorados que eran.

El sexo de reconciliación valía todos los gritos y golpes que recibía cuando Karin se enojaba y empezaba a arrojarle objetos peligrosos, por muy masoquista que sonara...¡Pero en su defensa él no tenía la culpa de cumplir tanto con las expectativas de novio perfecto que tenían la mayoría de las del género femenino y que todas las mujeres de su entorno vieran eso y lo acosaran!

Además, el nunca hacía escenas por los coqueteos que recibía Karin... Bueno, si las hacía, ¡pero nunca atentó contra la salud física de ninguno de esos tipejos asquerosos frente a ella!Siempre le encantaba desquitarse marcándola en el cuello mientras ella estaba distraída con el toque de sus dedos por su cuerpo perfecto, sin importarle los gritos que le pegaba cuando descubría las marcas rojas que dejaba por su cuello y en rincones al azar de todo su cuerpo. Ella era suya y de nadie más, y se acabó señores.

Además, a ella le encantaba que la marcara, aun cuando no lo admitía y probablemente nunca lo admitiría, sabía que amaba la combinación de su lengua en su cuello, succionando y chupando con fervor.

Haciéndola suya.

Podía verlo en su rostro sonrojado, tratando de callarse los gemidos que sin duda despertarían a la familia de ella, o a la de él cuándo ella se quedaba en su casa, mientras la hacía suya. Pero eso no le importaba ni a Toshiro ni a Karin.

Porque Toshiro amaba hacerla gemir su nombre, aun cuando a ella no le gustara ser ruidosa, a él le encantaba que lo fuera, sabían lo que le gustaba al otro y amaban demostrarlo. Y ella... Bueno, ella amaba lo bien que manejaba su lengua Toshiro. Estaban enamorados y eran jóvenes, y el sexo sí que era bueno, porque no solo era eso, era hacer el amor con todas las letras y con toda la pasión. Ellos sentían que no les faltaba nada... Aunque a sus familias les vendrían bien unos tapones de oído...


Hello~ It's me.