Hola! (no me maten UnU) bueno, volví, feliz año nuevo y navidad y esas cosas, se que es muy tarde pero no ppude hacerlo antes porque tuve algunos problemas (como estar en un hospital) pero nada es tan malo así que aquí estoy. He vuelto con la continuacion y espero hacerlas seguidos ahora que estoy de vaciones. Sin mas preámbulo, les dejo el cap, espero lo disfruten UwU

-Tsubasa…

-Vine en cuanto me dijiste Maki ¿Qué sucede?- La castaña dejó sus pertenencias en la mesita del café en donde la habían citado, era exactamente el mismo en donde había estado con Honoka en su "primera cita" donde mismo encontraron a Rin.- Hola Nico.- Agregó al percatarse de la pelinegra que estaba ahí en silencio, recibiendo una sonrisa.

- Hablé con mi Padre…mmm…ayer por la mañana.- Contestó la menor. Nico miró interesada, una, porque no sabía que tanto hablaba Maki con sus padres, y dos, porque juraba que venía a decir lo de Honoka ¿Era eso importante? Siguió escuchando dejando sus dudas para sí misma, no lo decía con mala intención, pero la gente rica acostumbra de otra forma, pensaba ella.

-Muy bien ¿Y qué dijo?- Tsubasa, hace poco, a pesar de que no fue la fan número uno de Maki, menos ahora viéndola con Nico al lado, no decía nada porque no quería que nadie se confundiera o dar explicaciones, no debía meterse en relaciones ajenas, eran amigas pero…aun así tenía sus opiniones al respecto de todo lo que había pasado, sobretodo en como la vio antes de que, al parecer, volvieran. Por otro lado, este tema no tenía nada que ver y Maki lo sabía, sobretodo lo entendía, la diplomacia está muy bien arraigada en cada una. Cada una de ellas sabía que eran amigas a pesar de los momentos, pero los contactos no se desperdician y bueno, eso agradecía de Maki, cuando le contó a Honoka que quería pedirle este favor, ella saltó con ciertas preguntas aludiendo a la hipocresía, no había nada de eso aquí, negocios eran negocios.

- Dijo que no había problema, solo que te contactaras con su secretaria para calendarizar, así puede ver sus opciones y listo.- Dijo Maki, quien había tenido casi los mismos pensamientos que Tsubasa.- Sin mas ¿Cómo estás? Imagino que este tema con tu jefe debe ser…innovador.- Agregó con una pequeña risa.

-Está bien, debo preguntar ¿Qué están tramando?- Esta era la primera intervención de Nico, que había escuchado todo el palabrerío que daban sin entender demasiado.

-Habías aguantado demasiado el querer saber de mi ¿No?- Le dijo Tsubasa a la más pequeña estirando su mano y sacando la taza que tenía Nico en frente para darle un sorbo. A Nico se le formó una vena en su frente. Maki miraba la situación un tanto extrañada por la confianza que se tenían.

-No digas tonterías, solo intento formar un poco de conversación.- Nico ahora recordaba porque le irritaba tanto Tsubasa, sin embargo agradecía que esta la tratara de la misma forma que siempre habían acostumbrado.

- Veras…- La ojiverde cambio un poco su expresión a una más pensativa.- Sabrás que mi…- Calló unos segundos, ahora se acordaba que Honoka no daba señales de existencia.- Mi relación con Honoka ya es de asunto público, esto trajo unos inconvenientes para mi trabajo, vas a entender tu que es realmente lo que amo. En resumen, encontré un nuevo jefe Americano que me dio una oportunidad y bueno, estamos innovando algunas cosas, para probar…para eso necesitábamos un ala del Hospital Nishikino y pues….aquí está Maki.- Terminó de decir la castaña.

-Para mí es igual de desconocida la razón de porque la necesitan.- Agregó Maki tomando de su té.

-Es una sorpresa.-

##############################################################################################

Nozomi jugaba con una pequeña rubia en el piso de sala mientras en la televisión sonaba música infantil, su cabello estaba tomado, solo vestía una sudadera con la "S" del logo de superman, y el short más cómodo que encontró.

-Anastasia, quédate aquí mientras voy a ver que traigo para que comas.- La de cabello morado solo recibió una sonrisa de la pequeña que tomaba un peluche y se sentaba a ver que daban en la TV.

La mayor se puso de pie y se dirigió hasta la cocina, en uno de los mesones había distintas frutas que se veían exquisitas, decidió que prepararía un mix de frutas para ambas y quizás le agregaría algo de yogurt. Lavó todas las que utilizaría y se dispuso a pelarlas, para que le sea más fácil a su hija comerlas, quitaba las cascaras con maestría, no con la de Nico, pensó, pero era buena también en estos cuidados, podía hacerlo sin necesariamente mirar lo que estaba haciendo, por eso mismo dirigió su vista al frente, le gustaba la cocina de Hanayo, al ser una casa grande, tenían un espacio de aire libra atrás de la casa, un patio trasero, era muy bello, tenía un árbol que brindaba una exquisita sombra y unas cuantas flores adornaban el lugar, le encantaba el hecho de que el lavaplatos estuviera justo debajo de una ventana que le permitía ver, de pronto su vista comenzó a fijarse en el reflejo débil que había de ella en la ventana, sus ojos se recorrieron a si misma viendo una expresión que no reconocía demasiado, se detuvieron en ellos mismos y pensó sobre su vida, estaba feliz, tenía alguien a quien amar y que la amaba, una hija, rayos, bueno, no era biológica, pero consideraba a esa niña su hija, después de pasar unos años en Rusia estaba acá, acompañando a Eli, siempre a ella, porque así era el amor para ella pero ¿Cuándo había crecido tanto? ¿No tenía noción de eso porque no había quien se lo recordara? ¿Estaba haciendo las cosas bien? De pronto el pecho comenzó a apretarse de una forma nostálgica, su reflejo seguía ahí, la casa casi en silencio, pero esta vez se veía como una niña…vivía sola desde la secundaria, pero ¿Dónde estaba su madre? Recordaba algunas cosas que atesoraba como valiosas y su partida a buscando trabajo en otra ciudad, solo eso.

-Nozomi, ya…- La rusa se quedó mirando la figura de su novia estática frente a esa ventana, había ido por unas compras al supermercado.- ¿Nozomi?- Tomó su hombro girándola para ver su rostro notando un rastro de lágrimas que caían silenciosamente.- ¿Qué pasó?- Preguntó la rubia abrazándola.

#############################################################################################

- ¿Por qué no le dijimos a Tsubasa lo de Honoka?- Nico estaba acostada en la cama de Maki mirando sus manos levantadas como si quisiera tocar el techo.

-Honoka me lo pidió…- Maki preparaba vasos de té helado para ambas.- Dijo que quería ver algo ella misma, además de querer decirlo también, tu sabes cómo es…- Decía desde la cocina.

-No demasiado al parecer…- Susurro la pelinegra para sí misma. Nico no quería, pero inevitablemente se peguntaba cuantas cosas se ocultaban así como así, la dualidad de esos cuestionamientos la mantenían un poco intranquila, al igual que ella tampoco podía hacer uso de alguna clase de una intachable sinceridad. Las terapias le habían ayudado a comprender el sentirse comprendida…Lo sabía, sonaba un poco extraño pero para ella servía, por esa misma razón no quería ir más lejos sin sentirse así con Maki.

-¿Por qué lo preguntas?- Dijo Maki llegando al lado de ella, había dejado los vasos en la mesita de noche.

-Solo pensé que eso harías…- Dijo Nico levantándose y desapareciendo en el baño.

La pelirroja sintió que esas palabras iban como reproche, no estaba entiendo a Nico del todo y menos este cambio repentino en donde ponía todos sus esfuerzos para conseguir un acercamiento mayor al que habían tenido alguna vez y luego con esta actitud lejana, suspiró llevando su antebrazo hasta su rostro para cubrir sus ojos de la luz ¿Algo estaba haciendo mal? Le gustaría preguntárselo directamente pero se sentía un poco ansiosa ante como reaccionaria ella, debía admitir que su misma actitud hacia ella había cambiado desde que paso lo que pasó, por otra parte ella misma no era buena hablando lo que sentía, nunca había sido tan buena hablando la verdad, aun así sentía que las ganas de poder sobrellevar lo que sea eran más fuerte que sus mismas ganas de quedarse en esa misma posición lamentadose cualquier cosa. Estaba convenciéndose de todas sus ideas cuando hoyó un estruendo en el mismo baño, se levantó corriendo pensando que a Nico podía haberle sucedido algo.

-¿¡Nico!?- Preguntó, dudó un milisegundo en si debía abrir o no, para ese entonces el impulso ya le había ganado, bendijo el hecho de que no le haya puesto seguro, se asomó y se quedó ahí observando como la mano de la mayor sangraba frente al espejo que se encontraba hecho trizas, Maki pudo observar los ojos carmesí observándose en los pedazos que quedaban unidos, hasta que reacciono.

-Lo siento…-Susurraba Nico repetidamente mientras Maki la llevaba hasta la cocina para enjuagar la herida y vendarla, veía como su propia sangre manchaba su antebrazo y los dedos de su novia que la sujetaba, parecía todo en cámara lenta, la forma en que la llevaba hasta el lavaplatos, su cara, las expresiones que luchaban una entre otras para mostrarse, cerró los ojos al sentir el líquido correr por su mano.

- No se…- Maki vendaba cuidadosamente mientras esas palabras se le escaparon de la boca captando la atención de la mayor, ella estaba hincada frente a la otra, por lo que Nico debía mirar hacia abajo para poder verla a los ojos.- No sé qué decir…- Decidió terminar la frase al terminar de vendar, entonces apoyo sus manos en sus rodillas.

-Lo que pienses en realidad.-

-¿Por qué, entonces?-

-No lo sé, fue un impulso…-Dijo acariciando su rostro.- Debo agradecer que tan buena doctora este a mi lado.- Agrego Nico mientras sonreía.

-No juegues…-Dijo Maki intentando no devolvérsela, no quería presionarla, pero tampoco perder la seriedad de la situación. Sin embargo fue totalmente ignorada por la mayor que levantó su rostro para besarla.

-¡Aah!...-Fue el suspiro que se le escapó al sentir como la pelirroja mordía sus labios de manera un tanto salvaje, podía ser que Maki se haya molestado por ser ignorada de esa forma, pero a ella le estaba encantando como se desquitaba, de pronto pensó en cómo le resultaba placentero este tipo de trato, sabía que quizás no estaba bien y más cuando pensaba en recibir más, pero simplemente no lo podía evitar.

###############################################################################################

Honoka caminaba tranquilamente por la universidad, aun tenia heridas de la golpiza que le dieron pero su actitud era fuerte y no habia cambiado ¿Cierto? Miraba su teléfono, habia pasado todo un día sin comunicarse con Tsubasa y no sabia si no quería preocuparla o ella misma estar sola, por un lado, se conocía, Kousaka Honoka no era de esas personas que aceptaba fácilmente la idea de pensar solo en ella al menos un momento. Vio a la chica que la había golpeado pasar y se quedó paralizada, la otra parecía no haberla visto.

-Honoka.- La nombrada se dio vuelta y se sorprendió al ver quien le hablaba.

-Daisuke…-

-H-hola ¿Cómo estás?- El castaño miraba hacia todas partes, estaba algo nervioso.

- Mmmh…Bien ¿Y tu? Pareces algo nervioso.- Rio Honoka intentando ocultar su incomodidad o al menos el nerviosismo que le provocaba el de él. La ojiazul no tenía alguna idea clara del porque el hermano pequeño de Tsubasa estaría hablándole ahora sin que estuviera su novia presente, en verdad, después de la noticia de su noviazgo, su comunicación no era tan buena que digamos.

-mmmsi…- El chico miro hacia todas partes.- ¿Te impor…- pareció dudoso, luego cerro sus ojos y continuo.-¿Te importaría enseñarme donde queda la secretaria de tu facultad? No conozco muy bien por aquí y desearía hacer unas preguntas.- Se llevó la mano detrás de la nuca.

- Claro, ven, es por aquí…- Honoka tecleo algo rápido en su teléfono y se dispuso a mostrarle el camino.

#############################################################################################

Umi y Kotori se encontraban en una cafetería esperando a quien las había citado, hace unas horas Tsubasa fue hasta la cabaña con la misma camioneta que las había ayudado a escapar, diciendo que necesitaban irse de ahí ahora, la castaña le dio las llaves deseándoles suerte y ahora se encontraban ahí, con sus pertenencias dentro de esa van en una cafetería que nunca había visto en su vida, al menos Kotori ya usaba sus muletas.

- Que bueno que llegaron ¿Cómo están?- Umi escucho detrás de ella y espero a que su invitada se sentara.

- Eli, estamos esperando aquí hace una hora…- Dijo Umi con una vena en su frente.

-Lo sé, estuve treinta minutos vigilando que no las siguieran.- Dijo como si fuera lo mas normal.

-¿¡Que!?-

- Tenía que estar segura Umi…- Dijo Eli como si fuera lo más obvio del mundo.- ¿Cómo te encuentras Kotori?- Se dirigió a la de cabello ceniza de manera amable.

-Estoy mucho mejor, gracias y gracias a la ayuda de Umi también, sin ella sería mucho mas difícil.- Contesto la nombrada de la misma manera.

- Me alegro.- Dijo, la rubia mayor miraba un poco a todas partes, no estaba siendo paranoica en verdad, pero lo último que descubrió involucraba considerablemente a sus dos amigas, no tenía idea de la otra parte pero su padre era estrategia pura.- Bueno, para contestar a la urgencia de Umi, les diré que ocurre.- Eli alzo la mano pidiendo un poco de café para acompañar lo que iba a anunciar.- Verán, yo…no me vine de Rusia en los mejores términos con los negociantes de mi padre, por lo tanto con el tampoco, he estado haciendo unas jugadas para descubrir que no anda a mi caza, mas he sabido que mantiene vigilante, cubriéndome los pasos…- Dijo y luego hizo una pausa para beber.

Umi estaba pensando un poco, no iba a interrumpir, miraba a Kotori que escuchaba atentamente, seguro la misma pregunta inundaba su cabeza esos momentos ¿Qué conexión tenían ellas?

-¿Es mi abuelo?- Susurro la de ojos dorados, entendiendo un poco.

- Ese es el tema…- Apunto Eli.- Me he encargado de saber acerca de su situación, al principio me fue difícil enterarme con quien actuaba mi padre y sé que no se han alejado tan solo de tu abuelo Kotori…-

-Mi familia…- Reconoció Umi como si fuera un descubrimiento.

- Umi, yo tengo asuntos pendientes en Rusia, sabes que los planes de mi padre no era que terminara enamorada de una chica de mi clase, que además no alcanza las expectativas económicas que consideraría el o mi familia.- Reflexiono Eli con un poco de nerviosismo, no quería ser entrometida, sabia como era Umi en alguno de estos casos pero era por su bien.- ¿Qué hiciste tú?-

Flashback

Umi tenía tan solo un día para preparar lo que iba a decir en cuanto a lo que quería, después de todo se graduaba mañana. Siempre había estado apegada a las costumbres que su familia imponía, incluso algunas le gustaban, pero cuando su padre insinuó en la mesa que ella iba a ser la próxima encargada del Dojo no pudo evitar estar totalmente en contra, ella quería cosas totalmente diferentes, la literatura por ejemplo, escribir era su pasión, mas no la de la familia, lo comprobó ese mismo día cuando tuvo el valor de contradecir. Hoy estaba decidida a convencer a su padre, iba por el pasillo de su casa tradicional lentamente, como si sus pies pesaran una tonelada, el solo hecho de tener que enfrentar a su padre ponía sus pelos de punta. Sin embargo nunca llego a entrar porque decidió escuchar lo que hablaba su padre con otra persona que no lograba identificar.

-Lo sé, Lo sé…-Escuchaba la voz de su padre.- Umi siempre ha sido una chica obediente, su disciplina será útil para el Dojo y no cuestionara mis movimientos para esta clase de negocios.-

- Eso espero Sonoda, confío una gran alianza entre nosotros.- La peliazul escucho el movimiento en aquella habitación corrió a la esquina del pasillo para no ser vista, observo como su padre acompañaba a otro hombre a la salida. Espero a que se despidieran y su padre volviera hasta allá para hacerle frente.

-¿Qué traman?- Preguntó a su progenitor con el ceño fruncido.

-Asuntos de hombres.- El mayor solo la observo y siguió su camino.

-Escuche lo de los negocios.- Con esa frase logro que el hombre volteara a darle un poco más de atención.- S-si voy a estar a cargo merezco saber de qué…- Estaba un poco nerviosa, hace menos de die minutos alababa frente a aquel señor su manera de ser y ahora estaba haciendo todo lo contrario.

- El Dojo, brinda ciertos servicios y no todos de ellos son legales…- Soltó su padre de manera rápida mientras la observaba.- Yo me encargaré de eso.

-No.- Umi nunca había sido así, pero pensaba que ya era hora, además, se le ocurrió una forma de conseguir lo que quería.- No seré parte de nada, no dejare que nos arruines, que me arruines ¿Entendiste? No estaré a cargo de absolutamente nada, veras tu qué haces, estudiare Literatura… ¡Ah! Y si te lo preguntas, me mudare con Kotori…De lo contrario me veré obligada a decir que es lo que tramas.- Termino de decir de la manera más seria que podía, la cara de su padre no mostraba más que un poco de sorpresa.

-¿Me estas amenazando?-

-Tómalo como quieras…- Se dio la vuelta y comenzó a caminar, con una leve sonrisa, por primera vez en su vida hacia lo que quería, bueno, segunda si tomaba en cuenta el decidir que nada debía interponerse en sus sentimientos hacia Kotori, pues esta vez lo iba a decir y hacer.

- Estas cometiendo un gravísimo error Umi.- Dijo su padre justo antes de que ella desapareciera por el pasillo, haciendo que se detuviera pero se limitó a darle la espalda.- Seras considerada una traidora y sabes qué hacemos con los traidores…- Umi suspiro, claro que lo sabía, aun así era muy tarde, en ese preciso momento fue en que decidió huir.

Fin del Flashback.

-¿Crees que ese hombre…- No termino la rusa.

-No lo podría decir con certeza, entendiendo esto, explícame lo de la cabaña.- Umi posó una de sus manos en el antebrazo de Kotori acariciándola, Eli al ver ese gesto sonrió evitando que se dieran cuenta.

- Eso tiene una explicación muy simple. Yo conseguí borrar mis pasos cuando me quedé en aquella cabaña, pero cuando volvimos, dado lo que le pasó a Nico y la necesidad hacer la denuncia a la policía, hizo que estuviéramos rastreables en ese instante.- Dijo Eli rascando su mentón.- Es lo que facilita los contactos.- Agregó al ver la cara de confusión de ambas chicas.

-¿Qué debemos hacer entonces?-

-Por el rato, andar con cuidado, por suerte la casa de Hanayo es grande, antes de venir para acá, tuve una conversación con ella y llegamos al acuerdo de que podían vivir con nosotras, no hubo problema de hecho, puede ser mientras resolvemos o investigamos un poco más.- Finalizo Eli.

- No nos queda de otra.- Umi miraba a Kotori, esas palabras iban más para ella que para su amiga.-

###############################################################################################

- Traje palomitas.- Rin levantaba una de esas bolsas de palomitas instantáneas frente a la cara de Maki cuando abrió su puerta.

- ¿Y eso?- Pregunto la pelirroja.

- Sabes que no nos hemos visto muy seguido…-Rin entró sin pedir permiso.- Ya era hora ¿no?

- No me molesta tu presencia Rin.- Dijo Maki con la neutralidad de siempre, de pronto vio como ambas observaban la figura de Nico durmiente en la cama. Rin no pudo evitar fijarse en su vendaje.

- ¿Qué le paso?- Pregunto la pelinaranja con duda, duda que Maki capto por donde iba.

- No es lo que crees, pero es difícil de explicar…-

-Está bien, lo respeto.- Rin decía todo esto mientras movía cosas en la cocina para hacer palomitas. La pelirroja observaba como su amiga hacia las cosas con gestos que desde el principio no pasaron desapercibidos para ella, para no perder el tiempo fue a colocar alguna película en la televisión, maldecía su nula capacidad para interactuar en estas circunstancias, pero por ella iba a ignorar toda su incomodidad y preguntar, solo que aun había tiempo.

La luz natural ya estaba desapareciendo, ambas veian la película en blanco y negro que habia escogido Maki, el sonido de las palomitas revueltas al sacarlas inundaba el lugar, Nico seguía durmiendo.

- Esperaba una de acción.-

-Está tiene mucha acción.- Dijo Maki con una sonrisa.- Ahora dime tus reales intenciones de esta visita.- Rin la película solo corria, ahora ambas amigas se veían a la cara.

- No es nada Maki…solo, no sé, estupideces.- Intento evadir Rin.

- ¿Cómo va a ser nada si te tiene así?- Cuestiono la otra, sabia que su amiga no era la mejor hablando de si misma, entonces se le ocurrio un tema importante.- ¿Es Hanayo?- Maki supo que habia acertado cuando Rin fruncio el ceño como respuesta automática.

- Si…Y no, no se que pensar o hacer.-

Flashback

Rin se encontraba en su hogar, aún vivía con su familia, pero algunas cosas que estaba resolviendo con Eli ayudarían a que pudiera independizarse en no tan largo tiempo, era casi la hora de almuerzo, su madre estaba en la cocina y ella obervaba como su hermano jugaba videojuegos en la sala, no era que estaba cansada de su familia o algo, solo era un paso importante que quería cumplir, tampoco quería quedarse atrás, casi todas sus amigas vivian solas, excepto por Honoka, aunque ella era un caso distinto, por el negocio principalmente, Maki, Nico, Eli, Nozomi, no quería pensarlo y aunque haya sido de manera casi obligatoria, hasta Hanayo ya conocía la independencia. Estaba pensando en eso cuando el sonido del timbre interrumpe en la casa.

-¡Que alguien abra!- Escucharon a su madre gritar desde la cocina.

- Anda tu.- Dijo su hermano sin despegar los ojos de la pantalla.

- Ve tu.- Dijo Rin secamente. Su hermano solo la miro y le respondió con un simple "Tu" otra vez, estaban enfrascados en esa pelea hasta que Rin decidió imponer su poder de hermana mayor.- Tu eres el menor, ve, si no quieres que desconecte todo.- Dijo con una mirada malvada y traviesa, su hermano la miro un rato y decidió no arriesgarse así que dando un suspiro desapareció. No tardo mucho tiempo en aparecer junto a otra figura en la sala, figura que dejo a Rin sin habla.

- Te busca tu novia.- Lanzo su hermano al aire como venganza sentándose en donde estaba mientras continuaba jugando. Ambas personas que se encontraban a parte ahí se sorprendieron, Rin rápidamente fruncio el ceño, fue hasta donde su hermano, le dio un palmazo en la cabeza y desconecto su juego de todas formas.

-¡Heeey!- Se quejó el menor. Rin no dijo nada y se llevó a la otra persona hasta su habitación.

- Eso fue muy malo de tu parte.- Escuchó que le decían.

-¿Qué haces aquí Hanayo?- Soltó la pelinaranja sin rodeos, su estómago estaba revuelto, no entendía nada de lo que estaba pasando.

-Pasaba por aquí y decidí saludar a una amiga ¿Eso está mal?- La rubia se acomodó los anteojos mientras registraba con su mirada el cuarto de la otra, no había cambiado, no era de sorprender, en el fondo la conocía y Rin no era muy buena para los cambios.

- Tu y yo no somos amigas…- Dijo Rin sin pensar.- No como antes…- Corrigió después de todo, hasta para ella, dejar de ser amigas sonaba duro. Aun así quería serlo.

- Vamos Rin…- Dijo Hanayo acercándose peligrosamente.- No quieres que te busque como amante y ahora tampoco me dejas ser tu amiga…- La nombrada tragó saliva ante la declaración.

- No es…- No pudo continuar porque la puerta se abrió de golpe.

-Es hora de la comida… ¡Hanayo! ¡Tanto tiempo! ¿Te vas a quedar a almorzar?- La madre de Rin ignoraba todo lo que en ese cuarto estaba pasando o a punto de pasar.

- Si no es molestia.- Dijo la de anteojos tímidamente ante la mayor.

El almuerzo había pasado de manera amena para todos, exceptuando la pelinaranja que aun pensaba en lo que le había dicho la otra hace poco, sin embargo los juegos de su hermano la distraían mientras su madre y Hanayo conversaban como si fueran grandes amigas. Ambas ayudaron a levantar los platos de la mesa y ordenar, la rubia acepto un poco de té que le ofrecieron y luego ella misma anuncio su partida, Rin decidió acompañarla a la puerta.

-No vuelvas a hacer esto sin avisarme.- Dijo de manera un poco dura, eso es lo que le molestaba en el fondo a Rin, no encontraba la explicación de su forma de ser ante ella, era como ser un poco antipática tan solo por serlo o así se sentía, después de todo Hanayo no estaba haciendo nada malo ¿O sí?

- Tranquila, para la próxima no será de sorpresa, la pasé muy bien.-

-¿Habrá una próxima?- No pudo evitar preguntar con una sonrisa. Cosa que la otra percibió y le devolvió el gesto.

- Tan solo si quieres…- Hanayo se acercó lentamente hasta la pelinaranja que estaba un poco nerviosa, sus manos pasaron por alrededor de su cuello sacándola un poco del marco de la puerta, espero un tiempo y sintió otros brazos tímidos rodear su cuerpo, le encantaban los abrazos de Rin, eran como si la contuvieran por completo.- Gracias…-Susurro en su cuello, de pronto se iban separando lentamente, sus rostros estaban cerca y a la rubia solo le basto buscar un poco para atrapar sus labios de manera suave, esperando una respuesta que de apoco de hacia afirmativa, su corazón se aceleró al sentir la aceptación de Rin, porque sabía que su lucha no iba a perdida. Se separaron lentamente, Hanayo solo dijo un pequeño "Adiós" antes de marchar.

-¡Hanayo!- Tuvo que levantar la voz logrando que la otra volteara llamando su atención.- Lento ¿Si?-

Hanayo asintió mientras le daba una sonrisa aún más grande y se volteo para seguir su camino. Rin no sabía porque lo había hecho, le habría gustado estar con una sensación de felicidad por completo pero era otra también que la acompañaba.

Fin del flashback

-Ahora me es inevitable no sentir miedo.- La película ya había terminado, así que ambas estaban casi a oscuras conversando, Rin le conto lo ocurrido a Maki y decidieron no encender la luz para no molestar a Nico.

-¿A que le temes específicamente Rin?- Maki no estaba segura que decir, pero al menos quería ser útil para que su amiga se descargara.

- No lo sé realmente, decidí avanzar un poco más y aun así no logro sacarme esta sensación en donde es como si supiera que me voy a llevar un daño enorme, no quiero salir lastimada, tu sabes cómo fue, como soy, me alejare, quien sabe cuánto, no quiero.- Decía Rin con un poco de desesperación en su voz.

-Opino…- Se frenó Maki un momento, pensando.- Opino que el temor viene de la mano con esta sensación tan bella que no dejas crecer en tu pecho debido a las experiencias pasadas Rin, entiendo cómo te pudiste haber sentido o al menos intento, pero no puedes negar que lo está intentando, no creo que hayas venido aquí para respuestas emocionales como de arriesgarlo todo y esas cosas…- La de ojos violestas solto una pequeña risa porque su respuesta no sonaba como esperaba.- Pero es lo que la evidencia te da ahora, sus intentos están ahí plasmados junto a sus sentimientos y yo confío en tu juicio, falta que tú misma lo hagas…- Termino de decir junto a un suspiro, esperando que eso haya quedado tan claro como sonaba en su mente. Sintió como Rin correspondía ese suspiro con otro mientras se movía.

-Creo que es tarde, es mejor que te deje…- Decía la otra caminando hasta la puerta, Maki se levantó con ella para acompañarla.- Gracias Maki.-

-Descuida, vuelve cuando quieras.- Respondió bajo y la vio marchar, pensó cual sería esa sensación que sintió ella ante esta misma escena pero con la persona que amaba. Cerró la puerta y ordenó un poco lo que habían dejado en la mesa de centro, se apoyó en el mesón un poco pensativa, hablar con Rin le dio otra forma de pensar las cosas, quizás debía ser mas involucrada en la vida de las personas que ella consideraba importantes, sin dejar su estilo en cuanto a la privacidad se trataba, pero demostrando un poco mas de interés y no porque era obligación, sino porque en verdad le interesaba, antes de conocer a las chicas, se mantenía alejada de ese tipos de cosas, quizás también sentía un poco de miedo, quien sabe, al rechazo, a la decepción, eso conllevaba para ella las relaciones humanas ¿Pero no todo podía ser tan malo, verdad? Tomó su teléfono y tecleo todo lo que sabía acerca de lo sucedido con Honoka a Tsubasa, fue un impulso que consideraba útil, vio como la castaña se encontraba un poco preocupada y no pudo quedarse tan tranquila como pensó, por otro lado tecleo también a Honoka regañándola y diciéndole primero, lo que habia hecho, para que no se sintiera traicionada y segundo para decirle que se comunique un poco. Rio por lo bajo pensando que ella no era la persona para decir ese tipo de cosas. Dejo su móvil en el mismo mesón en donde se encontraba y se dirigió hasta la cama, solo la luz de la luna alumbraba por la ventana que daba al departamento, observo a la pelinegra que dormía plácidamente, era hermosa, no podía descifrar lo que pensaba, quizás encontraba que estaba rota, la sensación de despertarla y hacerla sentir amada invadió su cuerpo, se acostó ignorándolo, porque justo después de eso, la culpa vino a su mente.

################################################################################################

Honoka miraba su teléfono mientras sonreía un poco al leer el mensaje de Maki, tarde o temprano debía enfrentar a Tsubasa, no le quería decir pues porque no quería ser un problema, la veía tan ocupada con su proyecto de música con aquel estadounidense que no quería agregar otro problema en su vida, después de todo, ella pensaba que quizás su carrera no hubiese ido en baja si no la hubiera presionado tanto con el reconocimiento de ser novias o algo así, era por eso que deseaba resolver esto ella sola, no era tan grave.

-Bueno…Aquí estamos, supongo que vendrás mañana…- Dijo Honoka un poco seria.

- ¿Eh? ¿Por qué?- Preguntó el castaño.

- Bueno, no era muy temprano cuando pediste mi ayuda, ahora se hizo más tarde, debe estar cerrado.- Miro Honoka para comprobar su teoría, la verdad es que el camino era largo pero quizás, no sabía porque, se tardó un poco más con Daisuke.

-Ah…si…- No dijo nada más el chico.

- Bueno, creo que ya es hora de que me vaya.- La ojiazul no podía evitar sentirse un poco nerviosa ante la presencia del hermano de su novia, su cuerpo no le daba muy buena señal, de pronto todo comenzó a verse más peligroso, quizás estaba siendo paranoica, era su cuñado después de todo, pero quería irse a un lugar un poco más iluminado, menos lejano.

- N-no tienes por qué irte aun ¿Te incomoda estar conmigo?- Habló de pronto el joven. Honoka no supo que decir, estaba pensando a que se debía lo que decía aquel chico ¿Le diría algo importante? Rio un poco ante la inevitable imagen de él confesándole que estaba enamorado de ella o algo así novelesco.- Lo siento…- Lo escuchó decir. Iba a preguntarle porque lo sentía pero sintió un brazo alrededor de su cuello.

- Bien hecho mocoso, no sabía que lo lograrías así de fácil…- La pelinaranja reconoció esa voz de inmediato, era aquella rubia que la había golpeado en el baño, se golpeo internamente por no pensar en esa situación, aunque recapacito al pensar que nadie podía culparla por confiar en el novio de su hermana.- Ya cumpliste, ahora vete.-

-Y-yo…No…- El hermano de Tsubasa balbuceaba mientras veía como otras dos chicas estaban a parte de aquella rubia, ambas estaban con lo que parecían bates de beisbol.- N-no.-

-Sáquenlo de aquí.- Mando la que obviamente era la líder. Ambas chicas amenazaron con golpearlo si no se iba logrando que le dedicara una última mirada Honoka antes de irse corriendo.

-¿Qué quieres ahora?- Dijo Honoka intentando liberarse.

-No te muevas.- La mujer puso el filo de un pequeño cuchillo en su cuello amenazándola.- Te dije que había sido un escándalo que tú, una babosa, esté saliendo con Tsubasa ¿Quién te crees que eres? Este ojo morado no te costara gratis.- La chica se tocó su ojos recordando el golpe que le había dado la pelirroja.- Sabia que jugabas sucio.- Honoka entendía tan solo la mitad de lo que aquella loca le decía.

-¿Por eso tanto alboroto?- Intento discutir, debía aceptar que ese cuchillo hacían que dudara del poder de razonamiento de su captora.

-Si.- La ojiazul sintió como aquella mujer susurraba en su oído justo antes de sentir una punzada en su estómago y luego ser arrojada al suelo, no pudo evitar retorcerse un poco ante el dolor, sus manos se posaron de inmediato en su herida captando la tibieza de lo que sabía que era su sangre, con sus dedos sangrientos y mientras se arrastraba para alejarse saco el teléfono de su bolsillo marcando el número que tenía en último registro. Escuchaba la risa de las tres chicas casi alrededor suyo, sabia que no llegaría tan lejos, pero al menos tenia que darle tiempo para que atendieran su llamada, ni siquiera sabia a quien llamo, en esos cortos segundos solo pensaba que no quería irse sin que alguien supiera, solo escucho el "Hola" de quien había contestado la llamada antes de sentir los batazos y probablemente patadas sobre su cuerpo.

Continuara...

Bien, primero que todo quisiera aclarar que no, todas las cosas, o casi todas las cosas que vayan pasando no se van a pasar por alto, con esto me refiero a que en algún minuto Maki tendrá que enfrentar las consecuencias de sus actos, como todas las demás chicas, pero todo a su tiempo OuO. En segundo lugar, espero que se entienda un poco lo que esta sucediendo en cuanto al pasado, es que a veces siento que no soy muy clara...sin embargo en los próximos capítulos también habrán más aclaraciones y otras sorpresas jajaja. Un minuto de silencio por Honoka...y eso. OuO Repito que espero hayan disfrutado de este capitulo y mi vuelta jajajaja (ok ya se que no se me extraña unuU) Desearles un muy buen día, Nos vemos UwU!