El amor de un padre de familia y un esposo
Capítulo 17 RECUERDOS, CONFUSIONES Y ACCIDENTES

El abuelo de Hinata estaba que se lo llevaba el diablo. Su puesto de trabajo era de los más miserables que a su nieta se le pudo ocurrir.

-Maldita niña irreverente, ya no respeta a sus mayores-se quejó el viejo Hyuga.

De repente, uno de los trabajadores que lo reconoció como uno de sus antiguos patrones quiso molestarlo ahora.

-Tome anciano para su almuerzo-se burló el sujeto dándole una moneda.

Este se fue en su carro divertido y el Viejo Hyuga se quedó muy furioso por la acción del sujeto igualado.

-¡MALDITO SEAS, IRRESPETUOSO!-gritó iracundo el hombre anciano.

De repente, otro trabajador se bajó de su coche y le dio otra moneda de forma despótica.

-Quiero que mi coche quede bien limpio y seco-ordenó el sujeto al Hyuga.

El anciano estaba colérico y se sentía humillado porque ahora estaba en el peor de los trabajos de gente de clase baja.

-¿Qué puede ser peor que esto?-se cuestionó el viejo molesto.

En ese momento, un carro pasó por un charco de lodo y lo baño de suciedad para su mala suerte.

-Tenía que hablar-murmuró el anciano.

Mientras tanto en las oficinas de Hyuga Corps donde Hinata seguía como la "Jefecita Suprema" como ella quería que la llamaran todos sus familiares que habían sido malos con ella, Neji se encontraba afuera del baño de mujeres esperando a Karin, pues la chica le había ordenado que la llevara cargando para evitarle la fatiga. Ella salio lista y arreglada, y a pesar de lo molesto que se encontraba Neji con su trato, no negaba que la chica era muy hermosa e intrigante. Su pelo rojo era muy extraño en ese país y era muy atrayente para cualquier hombre normal, pero lo peor de todo el asunto es que disfrutaba el amargo trato que ella tenía con él.
Neji cargó a la chica de forma nupcial mientras ella revisaba su celular mientras tomaba un poco de café en una taza blanca.

-¡Oye Neji, mi café ya se enfrió!-avisos la pelirroja con un puchero-Quiero otro de inmediato-.

-Cuando la deje en la oficina, le llevaré otro-mencionó el castaño con enojo.

-¡No, lo quiero ahora!-.

-Pero… esta al otro lado del edificio-replicó el sujeto.

-¡Pues apresúrate que se van a acabar!-se quejó la chica pataleando como una niña traviesa y malcriada.

-Como ordene señora…-murmuró el ojiperla aguantando su molestia.

-Epa, epa, ¿Cómo debías llamarme?-preguntó la chica con burla.

-Como ordene mi Sexy Reina de Fuego-susurró el chico con pesar.

-Bien dicho-felicitó chica y buscó unas galletas en su bolso-¿Quién quiere galleta?-.

-Deja de tratarme como un perro…-se quejó el pobre sujeto.

-¡Tres galletas!-.

-Yo por favor!-dijo el castaño ya rendido.

Durante todo el camino, Neji solo podía mirar de forma disimulada a la chica, la cual lo ignoraba. Pero el no podía negar lo atractiva que resultaba la pelirroja. Cuando llegaron a la sala para tomar su café, la chica tuvo que apegársele al cuerpo de Neji, haciendo que sus manos tocaran su trasero por accidente, poniendo mas alborotado al joven empresario que jamás había tocado a una mujer de esa forma. También notó como los pechos de mediana talla de la chica resaltaban en ese traje de oficina y tragó duro. Después de ello, los dos llegaron al elevador para ir a la oficina de la chica, pero esta lo detuvo de inmediato.

-Sabes Neji, me siento un poco cansada y no soporto el aroma y las canciones de los elevadores-mencionó la chica apegándose al castaño-Llévame a la terraza para que tome un poco de aire-.

-Pero son 6 pisos hacia arriba-declaró el chico con pesar.

-Pues si quieres puedes bajar los 10 pisos hacia el vestíbulo principlar y luego subir-le advirtió la chica dándole golpecitos en la cabeza al castaño con su mano-¡Vamos, que el tiempo es dinero!-.

-Como ordene mi…-iba a decir Neji, pero la chica le gritó repentinamente.

-¡NEJI, EL PISO ES LAVA!-.

-No jugare a ese estúpido juego…-se quejó el sujeto.

-Entonces, ¡El piso son cartas de despido!-amenazó la mujer seria.

Como si fuera un rayo, Neji salió corriendo por las escaleras y en solo unos minutos llegaron a la terraza donde había una especie de jardín de meditación que Hinata mandó instalar para relajarse del estrés de la empresa. Karin se dirigió a una hamaca que estaba en el lugar y tronó los dedos para que el ojiperla empezara a darle aire con un abanico gigante de plumas. El chico estaba que le hervía la sangre del coraje, pero no era por el trato de la chica, sino por algo que le hizo tragarse su orgullo por completo.

-Neji, necesito un buen masaje de pies-ordenó la mujer exigente.

-Ya voy-murmuró el joven muy enojado.

En ese momento, el joven empezó a darle un delicado masaje en los pequeños y suaves pies de la pelirroja y ella gemía un poco porque el dolor la estaba matando debido a que no estaba acostumbrada a andar zapatillas todo el día.

-Necesito vacaciones, estoy muy estresada-suspiró la mujer exhausta.

-Váyase, y así descanso yo también-dijo en forma de sarcasmo el Hyuga.

-Ahora por chistoso vas a ir conmigo a casa después del trabajo porque tengo un montón de documentos que ver y necesito una mano-le ordenó enojada la chica.

-Pero...-trató de protestar el asistente.

-Nada de peros, me ofendiste y no te lo perdonaré-le mencionó muy molesta la Uzumaki.

-Yo y mi bocota-.

Los chicos habían ido de nuevo a la escuela y había un evento que se celebraba en la escuela. Los alumnos estaban reunidos y desenterraban algo de la tierra.

-¿Qué es eso?-preguntó Boruto curioso.

-Una cápsula de tiempo-le respondió Sarada.

-Interesante-asintió Chouchou.

-Niños, este es una cápsula que dejaron los alumnos de hace 18 años a la generación posteriores. Hoy decidimos abrirla frente a todos para que se fijen en como era la vida estudiantil en otros tiempos-dijo el profesor Kakashi serio.

En la cápsula estaban varias cosas como un video de ejercicios de un tal Rock Lee, que reconoció su hijo Metal Lee presente. Había una foto de una mujer en traje de baño llamada Ino Yamanaka, para la vergüenza de Inojin en el sitio. Había un retrato muy bonito de la escuela de parte de un tal Sai, el padre de Inojin; una foto de todos de Hinata con sus amigos como Sasuke, Sakura y Naruto antes de que los 4 tuvieron sus relaciones amorosas. Pero el más extraño de todos era un VHS que tenía una grabación titulada: "Mi escuela y yo" de Naruto Uzumaki.

-Papá hizo un video-señaló emocionada Himawari.

-No sé porque tengo un mal presentimiento, mi mamá dice que mi papá hacía muchas idioteces de chico-mencionó Boruto muy turbado.

-No es para tanto. Kakashi sensei proyectará el video en el salón de clases en un rato-declaró Chouchou muy despreocupada.

Unas dos horas después, el maestro decidió proyectar el vídeo y pronto se arrepentirían de muchas cosas que revelarían.

Momento #1

Un rubio estaba con una cámara y grababa muchas cosas despreocupado. De repente, se veía a su compañero Chouji fajando de forma salvaje con una morena desconocida de cabello rojo.

-¡NOOOOOOOOOO!-exclamó Chouchou rojísima.

-No puede ser-alzó la ceja Sarada muy impresionada.

El joven Naruto se acercó aún más y veía que el gordito le metía demasiada lengua a la chica desconocida para él.

-Me gustas mucho, Karui-se escuchaba la voz de Chouji.

-Te amo, soy toda tuya-susurró entre gemidos Karui.

Todos se reían de la pobre gordita avergonzada de que veía a sus jóvenes padres en acción y quería que se lo tragara la tierra.

Momento #2

Naruto iba camino a la escuela en su cámara y grababa a una Hinata que bajaba de su limosina.

-Qué bonita es mi Hinata, ¿aceptará salir conmigo?-habló solo el Uzumaki con un tono enamorado.

Momento #3
Era un bonito ballet que bailaba Hinata en la clase de danza. Era muy buena y Naruto fue a ver la obra de la escuela, pero solo enfocaba en la hermosa peliazul.

-¡QUE HERMOSO!-decía Himawari con brillo en los ojos.

-Mamá nunca nos dijo que era buena en eso-mencionó Boruto impresionado.

Momento #4
Era un momento donde Sasuke coqueteaba con su entonces novia Sakura. El rubio se ocultaba y se veía que estaban muy felices con relación. En ese momento Hinata llegaba a su casillero que estaba a lado de la rosada y saludó a la pareja.

-Guau, son mis padres-señaló Sarada curiosa.

En ese momento, Naruto fue hacia los tres y se enfocó en ella con Hinata, mientras la abrazaba.

-Hinata, saluda a nuestros hijos si llegan a verlo-le pidió el rubio sonriente.

-N-Naruto, no digas eso-dijo la chica muy sonrojada.

-¡SALUDOS A LOS HIJOS DE NARUTO Y HINATA!-habló Sakura animada.

-Deja de molestarla que está al borde de un colapso nervioso-le regañó Sasuke.

Momento #5
Este era Sasuke con la cámara y grababa a Naruto dominando un balón de fútbol y daba un potente cañonazo a la portería. El rubio tenía una excelente técnica de juego y sabía hacer muchos trucos que veía del futbolista del momento Ronaldinho.

-Guau, tu papá era bueno con los balones-afirmó Mitsuki interesado.

-Ya sé, hubiera sido buen futbolista pero se lastimó la rodilla-declaró Boruto lo que le contaron.

Momento #6

-Apuesto a que no eres capaz de sacar el balón del viejo Sakumo-le dijo Sasuke muy confiado.

-Sí puedo-bufó Naruto.

-Pero desnudo-dijo Chouji muy serio.

-Nada de ropa interior-aclaró el pelinegro.

-Claro-afirmó Naruto y tomó dos sartenes.

El Uzumaki estaba completamente desnudo, pero se cubría astutamente con los dos sartenes. El Uchiha grababa y el Akamichi comía unas papas.

-Admiro su valentía-admitió Sasuke impresionado.

-¿Despertaste al perro?-preguntó el gordito.

-Así es-.

De repente, se escuchaban los gritos de dolor de Naruto y unos ladridos de un doberman en la residencia Hatake, mientras los dos sujeto se morían de risa por la mala suerte del Uzumaki.

Momento #7
Se veía a Naruto salir del salón de clase y la cámara quedó en un rincón donde fue olvidada, sin nadie que la pudiera localizar. Unas horas después, se veía entrar a Orochimaru junto a una de las maestras del sitio.

-¿Mamá, papá?-dijo Mitsuki asombrado.

Se veía a Anko usar una versión muy atrevida del traje escolar y se veía su abdomen lavado y sus hermosas piernas en ese entonces.

-Mamá estaba en forma en ese entonces, ahora está bastante gorda por comer tanto dango-mencionó muy abrumado su hijo.

-¿Qué hacen esos dos?-se preguntó Kakashi muy intrigado.

Todos los estudiantes contemplaron la escena de sexo más sucia y salvaje de toda su vida. Los dos sujetos se daban besos de lengua de forma muy vulgar y Orochimaru se la penetraba de forma dura y sin piedad, mientras le metía un vibrador por el trasero.

-¡AAAAAAAAH, AAAAAAAAAH, AAAAAAAAH!-se escuchaban los potentes gemidos de una joven Anko y todos en el salón tenían derrames nasales y otros se desmayaban.

-¡ADELANTEN EL VÍDEO!-les pidió Mitsuki traumado.

Para su fortuna el sexo había terminado y se vestían para irse del lugar en su esfuerzo a no ser descubiertos. En la edición, se veía a un Naruto encontrando su cámara, ignorando lo que había pasado para después checarla al rato.

-Bravo, eso fue maravilloso-aplaudió Kakashi maravillado.

-¡PERVERTIDO!-dijeron todos molestos.

Momento #8
Todo estaba tan oscuro y se veían a Sasuke y Sakura desnudos y cubriéndose como podían en la rampa más alta de la piscina escolar.

-¡MALDITO PERDEDOR, ME LAS VAS A PAGAR!-decía Sasuke sonrojado.

-Hace frío, shannaro-decía la rosada muy furiosa.

-Recuerdan que Hinata y yo ganamos la apuesta, y firmamos un contrato-les dijo el rubio muy sediento de venganza.

La Hyuga tenía muy apenada un papel y venía establecidos los paneles de la apuesta que estaban haciendo.

-Si yo y Naruto comemos 100 platos de ramen en menos de una hora, Sasuke y Sakura se aventarán desnudos desde lo más alto de la piscina. Si no cumplíamos el reto, nosotros lo haríamos en su lugar-explicó Hinata a la cámara.

Sarada estaba en blanco y Boruto se carcajeaba de sus dos tíos que eran un par de locos en su juventud. Ahora se veía a los dos aventarse al agua y Naruto tomó sus ropas para irse corriendo con Hinata del sitio.

-¡CORRE HINATA COMO LO PLANEAMOS!-le dijo Naruto muy malvadamente.

Los dos se fueron del sitio y se oían los gritos de los dos nudistas persiguiéndolos empapados y con las risas del rubio.

-Tus padres son malignos, Boruto-se quejó Sarada muy seria.

-Los tuyos no se quedan atrás-dijo Himawari disfrutando la película con unas palomitas robadas de la mochila de Chouchou.

-¡ESAS ERAN MÍAS!-reclamó la gordita molesta.

-Matanga dijo la changa-solo contestó la peliazul.

Momento #9
Era Sakura grabando en la cámara de Naruto y se veía su cara muy sonriente. Se había tatuado recientemente un rombo violeta en la frente por una moda de esos tiempos, pero no se dio cuenta que era permanente y hasta la actualidad lo conservaría.

-Naruto me pidió que no lo espiara, pero me dijo que le confesará a Hinata lo que siente por ella. Se nota que la ama demasiado, pero no sé que vaya a pasar. Los padres de Hinata son unos estirados y no querrán a Naruto, pero de mi parte corre que esos dos terminarán juntos-prometió la rosada a la cámara.

La Haruno estaba ahora escondida en los arbustos y se veía a Naruto junto a Hinata solos. Estaban lo suficientemente cerca para que se oyera lo que decían ellos dos.

-Hinata, te amo-se escuchó la confesión del rubio

Se veía a la peliazul en shock y con una cara feliz porque jamás creyó que a ella le diría algo así. Por su parte, Sakura estaba furiosa porque se le hizo tarde y salió de los arbustos para la sorpresa de ambos amantes.

-¡VUELVAN A REPETIRLO, QUIERO GRABARLO PARA LA POSTERIDAD!-exclamó Sakura y los enfocaba a ambos muy nerviosos.

-¡VETE DE AQUÍ, SAKURA! ¡ESTÁS ARRUINÁNDOLO TODO!-le reclamó Naruto muy molesto.

En ese momento se veía a una Ino salir de los arbustos y tenia su propia cámara con la intención de grabarlos.

-Salte de allí, frentona. Te lo paso después, pero deja terminar la exclusiva-le dijo Ino nerviosa.

-¡¿POR QUÉ TODOS QUIEREN GRABARNOS?!-exclamó Hinata muy nerviosa.

-Son la OTP de la escuela que faltaba por confirmar que se unieran. Antes habían Narusakus, pero se termino cuando la frentona se hizo novia del guapísimo Sasuke, y ahora que el Sasusaku se hizo mas estable el Naruhina se alzaba en la preferencia del público-explicó la rubia.

De repente, salían muchos de la escuela y con sus cámaras listas para grabar el chisme de la temporada. Naruto y Hinata estaban en shock porque al parecer eran más populares de lo que creían.

-¡YO QUIERO TENER LA EXCLUSIVA!-decía una alumna del periódico escolar.

El par de chicos estaban yéndose muy lentamente y se les perdieron de vista a la multitud. Sakura se dio cuenta y los siguió sin que nadie se diera cuenta de sus intenciones. La rosada los halló escondidos en un sitio desconocido de la escuela y jadeaban por el cansancio.

-Eso estuvo cerca-suspiró la peliazul.

-Lamento lo que sucedió, no sabía que todos quisieran que fuéramos novios-mencionó Naruto muy turbado.

-Lo sé, por cierto. A mí me gustas mucho-le respondió la confesión la ojiperla.

-¿En serio?-dijo asombrado el Uzumaki.

-Así es, desde el primer momento en que te vi supe que eras especial-confesó la chica lo que sentía.

-No sabes lo feliz que me haces, Hinata. Eres rica, poderosa e influyente, y yo solo soy un pobre sujeto sin aspiraciones en la vida-dijo el rubio muy preocupado.

-Tú eres de las personas que hacen lo que se proponen y ese es el rasgo que más me gusta de tí. A veces me gustaría ser como tú-le comentó muy sonriente la mujer.

-Te prometo una cosa: Te daré lo que te mereces no importa lo que pase, serás la mujer más feliz a mi lado-le juró Naruto muy serio.

Hinata le dio un beso al chico y Sakura tenía corazones en los ojos porque esperaba pacientemente este momento. Una nueva relación destinada a ser eterna comenzaría de esta extraña forma, pero tendrían muchos problemas en el camino.

Momento #10
Habían pasado muchos meses y era casi el final de la escuela, todos estaban a punto de graduarse de la escuela, pero había un grave problema: Hinata y Sakura estaban embarazadas.

-Fue un problema ajustar de nuevo la talla de la toga, mi barriga me crece mucho-suspiró la peliazul.

Naruto estaba feliz y jugaba con la pancita de Hinata porque quería criar a su niño que venía en camino.

-¿Quién es el nene consentido? Tú lo eres-decía juguetonamente el rubio.

-Naruto, ya sé donde conseguir trabajo. Podemos ir a Senju Corps. Dudo que el padre de Hinata te deje trabajar en todas sus empresas con el odio que te trae después del puñetazo que le diste-mencionó Sasuke serio y abrazando a su futura esposa.

-Ya sé, mañana vamos a solicitar empleo-aceptó el ojiazul.

Los chicos veían que la generación tenían verdaderas sonrisas ya que emprenderían un camino que les aguardaría felicidades y sufrimiento a la vez, pero iban a afrontarlos como fuera, sobre todo los que estaban formando su familia en ese momento.

-Que bonito fue ver que mamá y papá se amen desde hace tantos años-suspiró Himawari soñadora.

-Y siguen así de melosos-dijo aburrido Boruto.

Mientras tanto, Hinata estaba en su oficina y sonreía al ver una foto de su familia y la familia Uzumaki cuando vivían como vecinos en el barrio Uzushio.

Flashback

Naruto cargaba a su hijita Himawari que estaban con 6 meses de nacida y Sarada jugaba a las escondidas en el parque con Boruto.

-Chicos, hay que tomarnos la foto-decía Sasuke preparando la cámara con una repisa.

-Niños, vengan acá-llamaba Sakura al par de pequeñitos.

Los dos nenes fueron a donde estaban sus mamás y ambas familias se juntaron para tomarse una foto y sonrieron para salir bien.

Flashback fin

-Hace tiempo que no nos tomamos un tiempo libre, voy a decirle a Naruto que vayamos a un día de campo como en los viejos tiempos-dijo la señora Uzumaki sonriente.

En ese momento, llegó a la oficina Hiashi que apestaba a caño y la mujer se tapó la nariz porque su delicado olfato era ofendido.

-Hinata, no puedo tolerar esto. Yo no nací para esto-se quejó Hiashi.

-Y yo no nací para ser una ama de casa y lo he hecho bien estos años-le replicó Hinata con voz nasal.

-Quiero un ascenso-reclamó el padre de la presidenta.

-Bien, pensé que ibas a bajar la toalla pero te subestimé. Desde ahora serás nombrado Gerente ejecutivo de manejo de documentos históricos de la empresa-declaró la ojiperla.

-¿Y eso que es?-preguntó confuso el hombre.

-Vas a encargarte del almacén-.

-¡¿ES UNA BROMA?!-dijo molesto el hombre.

-No, el viejo encargado se jubiló y necesito un reemplazo. Es mejor que andar oliendo pestes de baños de godínez gordos-explicó seria la mujer.

Más tarde, Hiashi acomodaba muy molesto un montón de documentos muertos en el almacén de la empresa, pero al menos era mejor que lavar baños.

-Maldita sea la hora en que Hinata se decidió fastidiarme la existencia-maldijo el hombre azotando un paquete en una columna.

En ese momento, el pilar de paquetes se desestabilizó y le cayó muchos papeles en forma de avalancha de forma dolorosa.

-Auh-solo se quejó el viejo cascarrabias.

En otra parte, Mirai paseaba muy casualmente en el centro comercial para encontrarse a su novio secreto. En ese instante se veía llegar perezosamente a Shikadai que estaba recordando los videos de la mañana en la escuela.

-Mi amor, que bueno que llegaste-saludó muy feliz la chica de 18 años.

-Apenas y pude levantarme de mi cama después de volver de la escuela-contó el Nara con un bostezo.

-¿Nunca se te va a quitar lo haragán?-preguntó un poco divertida la mujer.

-Lo heredé del tonto de mi padre, que fastidio-.

-El señor Nara, ¿eh? Hace tiempo que no llega a mi casa para hablar de negocios con mi papá-mencionó la joven pensativa.

-Dejemos hablar de eso y vamos a pasear un rato-propuso el ojiverde.

-De acuerdo-.

Los dos niños se dispusieron a disfrutar su tiempo a solas e iban tomados de la mano como dos jóvenes enamorados. Mirai se había convertido en una chica muy hermosa debido a la herencia del físico de su madre Kurenai y Shikadai era bastante apuesto a sus 15 años. Después de ello compraron unos conos de helado y se sentaron en un banco frente a una fuente.

-Ojala esto durara para siempre-deseaba la chica muy sonriente.

-Creo que ya es tiempo de decirle a tu papá que hemos salido formalmente desde hace un año como pareja-mencionó el joven Nara.

-Me da miedo, mi papá es muy estricto con esa área e mi vida-suspiró la chica.

-Tarde o temprano esto iba a pasar. Yo no quiero ser como mi padre y deseo pelear por tí si es necesario, te amo y haría lo que fuera para verte feliz-le comentó sinceramente el cabeza de piña.

-Por eso te amo, ¿tienes planes esta noche?-.

-No, mi mamá esta fuera de la ciudad porque mi tío Gaara la necesitaba para un asunto-mencionó el chico.

-Quiero pasar la noche contigo-le decía sonriente la Sarutobi.

Shikadai estuvo a punto de ahogarse porque no se le había cruzado por la mente tener sexo con su novia por el momento y había olvidado que ella era mayor que él.

-¿Estás segura?-preguntó muy nervioso el joven.

-Así es, te amo y solo le daría mi cuerpo y alma a tí-le respondió segura la chica mayor.

Ella lo abrazó y solo sonreía porque realmente estaba prendada de su pareja, y ya estaba dispuesta a dar el siguiente paso en su relación.

-"Esta será muy problemático"-dijo mentalmente el chico.

En la noche, Neji estaba en el departamento de Karin por el castigo de su comentario sarcástico y andaba viendo un papeleo enorme junto con su jefa.

-Odio mi vida-declaró Neji muy cansado.

-Creo que mejor le paramos, ni yo aguanto. El resto del papeleo puede esperar. Ya puedes irte-le dijo la Uzumaki.

-¡AL FIN!-exclamó al cielo el Hyuga.

En ese momento, se soltó una lluvia torrencial y atrapó a Neji en la casa de su opresiva jefa.

-Creo que no podrás irte-sonrió divertida la Uzumaki.

-Por un demonio, lo que me faltaba-se quejó molesto el joven.

-Siéntate, traeré una lata de cerveza-le dijo la pelirroja.

-Creí que ofrecerías sake o vino-mencionó confuso el sujeto.

-A pesar de haber recibido mi herencia sigo siendo medio corriente, fresita-le comentó la oficinista.

Karin revisó su refrigerador y solo tenía una caguama Negra Modelo de importación, y le sirvió un tarro de cerveza que estaba muy fuerte para Neji.

-Cof, cof, tiene mucho alcohol-se quejó el castaño.

-Eres un marica-le recalcó la Uzumaki seria.

-Te apuesto a que puedo beber mas que tú-retó el sujeto sintiendo ofendida su hombría.

-No creo que me supere, principiante-dijo arrogante la chica.

-Te tragarás tus palabras, jefa-.

Un montón de caguamas y tres Doritos después...

-¡MÁS POR FAVOR, MÉTEME TU ENORME VERGA CON TODO Y HUEVOS!-se escuchaban los gritos de placer de Karin por toda la cuadra.

-¡ESTÁS MÁS APRETADA DE LO QUE PENSÉ, ME VOY A VENIR!-se oían los gritos de Neji.

-¡ME VENGO, ME VENGO!-se oyó por último a la pelirroja borracha.

El barrendero del lugar llamado Dosu no estaba sorprendido porque esto ocurría seguido y solo llevaba unos audífonos a todo volumen.

-Estos jóvenes de ahora son muy libertinos-se quejó el hombre con unas vendas en la cara.

Al día siguiente, Karin despertaba con un dolor de cabeza terrible y cuando iba a levantarse se dio cuenta que estaba desnuda junto a Neji en su cama. En ese momento, se puso extremadamente colorada y completamente avergonzada.

-¡KYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!-gritó asustada la Uzumaki.

Neji despertó y se dio cuenta de que estaba desnudo a lado de su jefa, por lo que tuvo miedo de morir.

-¡ESCÚCHAME BIEN, NENE! ¡SI DICES QUE ALGO SUCEDIÓ ENTRE NOSOTROS, NO VIVIRÁS MÁS TIEMPO!-amenazó la chica con una mirada muy furiosa.

-Te lo prometo-susurró aterrado el sujeto.

-No vayas a trabajar hoy y harás como si esto no pasó-ordenó la pelirroja.

-Como diga-temblaba el ojiperla.

El chico se vistió y Karin no fue a trabajar ese día por la cruda y la vergüenza de lo ocurrido con su asistente.