Los personajes pertenecen a Hiro Mashima y la portada a Rusky Boz.
-No te muevas, o esto dolerá mas.- Sherry le advertía. A pesar de que le había colocado anestesia local, Levy sentía el pinchazo cada vez que la aguja traspasaba la piel.-Estoy tratando de ser lo más prolija que puedo, así que mantente lo mas quieta posible para que la cicatriz que quede no sea tan grande.
Gray los había llevado hasta la casa, Gajeel aún permanecía inconsciente en su habitación, Lily se había ocupado de dejarlo allí, y Levy recibía las curaciones necesarias en el living de parte de la amiga de Wendy. En un principio estaba el temor de cruzarse con esta cuando fueran a pedir ayuda al hospital, tuvieron suerte de que no estuviera de guardia esa noche, no se enteraría de nada por el momento, sabían que en cuanto Gajeel despertara no había forma de poder contenerlo, esa había sido la charla que mantuvieron con Gray cuando venían en el auto, fue el intento del vampiro de distraerla del dolor, pero este era mas profundo que la herida en su costado.
Tras pedir ayuda a la enfermera y dejarlos en la casa, él se había ido en busca de Juvia, Lily le había pedido que lo hiciera, ya que sería necesario que ella estuviera ahí para ver si entre los dos podían intentar contener a Gajeel, y porque preferían no incluir a nadie mas hasta no hablar con los cabecillas de ambos bandos, y así intentar frenar el caos que se desataría cuando también Natsu y Wendy se enteraran, sin contar que ahora había dos licanos mas como ellos a quienes contarles la noticia.
-Eres buena para meterte en problemas- La enfermera le daba conversación.-, y no creo que sea la última vez que tenga que ayudarte.
-Lo siento.- Decía muy bajo, solo para abrir la boca diciendo algo que no fuera un insulto ante el dolor punzante que experimentaba, y también para que no se notara en su voz que estaba conteniendo el llanto. Debería haberle pedido a Sherry que no le pusiera anestesia, de esa forma sentiría todo y eso evitaría que su cabeza analice lo sucedido y sobre todo su accionar. Por mas que se justificara pensando que había hecho lo correcto, cuando vio la forma en que Gajeel la había mirado sintió que no había sido así y odiaba sentirse con una culpa tan grande, quería gritar y sin embargo era como si el grito se quedara atrapado en sus pulmones, dificultándole la respiración, y sentir como la herida la quemaba no ayudaba, porque parecía que ardía, y no era culpa de él, era de ella. Ella se interpuso y ahora llevaría un par de cicatrices mas para su colección, que estarían por siempre ahí para recordarle cuantas veces se había equivocado.
El miedo era peor, no sabía que iba a suceder ahora, y la incertidumbre era demasiada. Ella había esperado respuestas, que él doctor también conociera del pasado de los licanos, había hecho que la situación se saliera de control y ahora había mas cosas en juego de las que hubiese supuesto.
-Listo.- Cortaba el hilo y comenzaba a cubrir la herida.
-¿Ya terminaste?- Lily que había estado en la habitación de arriba con su amigo, se acercaba a ellas.
-Si, en un par de horas revisen la herida para verificar que no siga sangrando, y si es necesario cambien las vendas.- Se dirigió al hombre que había entrado a la habitación.-¿Ustedes podrán hacerlo o prefieren que venga?
-No va a ser necesario, yo se como curar...- Levy lo interrumpió antes de que continúe.
-Estaré en lo de una amiga, ella me ayudará.- Le explicó a Sherry, quien intercambió miradas con el hombre, pero no dijo nada.
-Te dejaré algunas vendas para que puedas cambiarlas.- Apoyó todo en la mesa ratona.- Ahora lo mejor será que vuelva al trabajo, antes de que se den cuenta que falto. Si necesitas algo, avísame, y no se preocupen que se donde es la salida.
En cuanto la puerta se cerró detrás suyo, Lily se dio vuelta para enfrentar a Levy, y ella sabía que iba a cuestionar su decisión, pero estaba decidida a mantenerse firme.
-No es necesario que te vayas.
-Si lo es, no tardará en despertar y se que no voy a ser la primera persona a quien quiera ver.- Se acomodaba la ropa y tomaba su celular para ver si había recibido algún mensaje.
-Estará cabreado, eso es todo, él es así- Intentaba excusar a su amigo.-, se le pasará. Si te vas empeorarás todo.
-No creo que haya vuelta atrás después de esto- Suspiraba y se acercaba a donde estaba Lily.-, además ya le avisé a Cana y vendrá a buscarme, solo tengo que buscar mis cosas.
-Supongo que no tiene sentido que te diga que te estás equivocando- Ella negaba con la cabeza.-. Al menos dejame ayudarte, no queremos que se abra la herida, yo traeré tus cosas y tú esperame aquí.
En poco tiempo armó un bolso con algunas de sus pertenencias, como estas estaban en la habitación donde estaba Gajeel intentó ser rápido para evitar despertarlo antes de que el efecto del tranquilizante se le pasara, y cuando bajaba para entregárselo a Levy, Cana estaba tocando la puerta y Lily se apresuró a abrirle.
La primer impresión entre ambos fue buena, pero la visita rápida, y tras informarle que ellas se ocuparían de poner al tanto a Erza de todo, para que esta se pudiera poner en contacto con el líder de la manada y así advertirle que se prepare para lo que sucedería con esto que habían descubierto, se marcharon, cruzándose de camino a Gray quien volvía junto a Juvia.
El fuego destruye todo, literalmente lo reduce todo a cenizas que al ser arrastradas por el viento terminan borrando cualquier vestigio de lo que se quiere dejar atrás... al menos eso pensaba Natsu, cuando tras invadir el edificio que el consejo tenía en las afuera de la ciudad junto a los otros cuatro y revolver todo lo que allí había, simplemente decidió dejar que las llamas consuman todo lo que ese lugar representaba para ellos.
Había sido frustrante. Cuando llegaron al lugar no había nadie. Vacía y abandonada fue como encontraron la sede. Sin embargo su ira era demasiada como para dar media vuelta e irse, por lo que solo se quedaron a la luz de la luna menguante observando como el lugar ardía, como sus llamas pasaban de rojo a naranja y en algunas partes blancas al aumentar la temperatura del fuego, y mas allá que el calor era abrasador seguían allí, porque la angustia y el dolor que sentían, hacía que todo lo externo no los afectara, al menos no de la forma en la que descubrir la verdad lo había hecho.
En el momento en que Gajeel recuperó la conciencia, desorientado por estar en su cama, sin siquiera poder recordar como había llegado allí y preguntándose si había bebido, porque el dolor de cabeza que sentía se asimilaba a una resaca, fue en el momento en que supo que algo no estaba bien.
Los recuerdos de lo que había sucedido mas temprano esa noche, o esperaba estar en el mismo día al menos, empezaron muy lentamente a volver a él. Y ver a Juvia y Lily en la puerta de entrada a su habitación al reincorporarse de la cama confirmaba todo, ¿a quién mas llamarían para poder contenerlo mas que a sus amigos? Porque ellos eran todo lo que tenía, lo demás se lo habían robado.
No comprendía, si sabían lo que le estaba pasando, ¿por qué intentaban contenerlo? Incluso Gray estaba allí para ayudarlos, ¿acaso se habían complotado entre todos para traicionarlo? Igual que ella, quien no parecía estar en el departamento. Su aroma permanecía en todo, lo podía percibir hasta en su ropa y eso lo hacía enfadar todavía mas. ¿Dónde se había metido?
Cuando el forcejeo estaba pudiendo con su paciencia y sus nervios haciendo que su sangre hirviera, empleó la única salida que encontró viable, y adquiriendo su forma lupina completa embistió contra la ventana de su habitación que daba al balcón y saltó hacía el suelo con total facilidad huyendo en dirección al primer destino que se le pasó por la mente: la casa de Natsu.
De ahí en mas la situación fue de mal en peor, al arribar este estaba con su novia y el niño, quienes terminaron dejando el hogar al ver el arranque de furia del pelirrosa. Nada mejoró cuando fueron con Wendy, aunque ella reaccionó de una forma muy diferente, con un llanto incontrolable que partía el alma, y al ir con Rogue y Sting pudieron ver dos formas distintas de responder a una misma noticia, mientras el rubio lloraba y arrojaba cosas, intentando ser contenido por su novia, Rogue se limitó a deslizar su espalda hasta caer en el suelo donde ocultó su cara entre sus brazos y no emitió palabra alguna.
Como tampoco lo hacía ahora, mientras observaban como todo se quemaba, aún sabiendo que no podían quedarse mucho tiempo, ya que el humo alertaría a las autoridades y los bomberos no tardarían en aparecer, por lo que terminaron por hacer lo único que los liberaba y los hacía apaciguar el dolor, corrieron como si no hubiera un mañana, no debían decir nada, no necesitaban comunicarse, actuaban en completa sincronía, como si fueran uno, porque lo eran... eran parte de una manada, eran los últimos de una especie en vías de extinción.
La fiebre era la peor parte, nunca había sido propensa a enfermarse, un resfrío de vez en cuando, nada superior a eso, pero ahora parecía que iba a deshidratarse si seguía transpirando de la forma en la que lo hacía. Parte de la medicación que le habían prescripto era para eso, otra para controlar su estado febril y la otra eran antibióticos para prevenir cualquier infección.
La realidad era que lo que sucedía con su cuerpo era como su propia magia luchaba contra la naturaleza de Gajeel.
Ella no podía convertirse en un licántropo, aún queriéndolo era algo complicado, ella era una bruja, su esencia no cambiaba tan fácilmente a menos que eligiera renunciar a lo que era, y Levy no pensaba hacerlo, había sido difícil, con el tiempo había aprendido a quererse y aceptarse tal cual era, a pesar que hasta su magia era igual de simple que la persona que la portaba. Además su poder lo había heredado de su abuela y de su madre, y ahora sabía que ambas habían sido dos mujeres fuertes, su abuela había llegado a reina del aquelarre y lo había manejado de forma espléndida durante todos los años que lo había sido, a la vez que se encargaba de criarla, y su madre había sido tan valiente de dar su vida por su bienestar, alejándose para que ella estuviera segura, y por culpa de esta estúpida guerra nunca volvería a verla. Y solo le quedaba su magia y el deseo de algún día ser fuerte como ellas, pero los libros solo te daban la técnica, la bruja era quien le daba el poder al hechizo y por eso estaba acostumbrada a no poder ser de mayor utilidad.
Y por haber leído al respecto sabía que ese era el motivo por el que estaba sufriendo este dolor insoportable. Y mas allá de eso, también era humana, la herida aún no había cicatrizado y solo habían pasado unos días con el constante cuidado y supervisión de Cana.
Todavía no había podido abandonar la habitación mas que para ir al baño y con lo poco que estaba comiendo, ni siquiera eso. Estaba cansada, y el dolor le impedía dormir profundamente y agradecía que su amiga estuviera ahí para ella. Desearía también tener a Gajeel, le gustaba particularmente cuando la cuidaba, pero él no había intentado ponerse en contacto y por tanto había decidido que ella tampoco lo haría.
Su amiga le había dejado sobre la mesa de luz un vaso de agua y los medicamentos. En su celular estaban programadas las alarmas que indicaban el horario en que debía tomarlos, porque el bar Alberona no se manejaba solo, al menos eso decía Cana, quien controlaba el lugar heredado de su padre cuando este decidió dedicarse a viajar, dejándola a ella a cargo de todo. No era un trabajo muy exigido, igual la hacía tener que estar presente, y por eso Levy pasaba casi todas las noches sola dormitando o mirando al techo de la habitación pensando.
-Hola, mi reina.
Si pudiera sobresaltarse lo hubiese hecho, solo que no tenía la suficiente energía.
-Llevo días intentando contactarme contigo y nada, la chica del clima fue bastante evasiva. Por mas que no me dijera nada logré averiguar que estabas aquí.
Totomaru estaba en el umbral de la puerta, observando hacia el centro de la habitación donde Levy estaba recostada, no eran energías lo que le faltaba, era paciencia y ganas. No creía ser capaz de tolerar por mucho tiempo al vampiro, no con su humor actual.
-¿Cómo entraste?- Fue lo único que le preguntó, cubriéndose con el cubrecama los ojos cuando este encendió la luz. Sentía tanto calor, pero sabía que no debía desabrigarse, por eso estaba tapada.-¿Qué haces aquí?
-Ya te dije, quería hablar contigo, y fuiste bastante esquiva estos días hasta que te encontré. Esta casa esta llena de trampas, pero soy muy bueno en esto de meterme en propiedades ajenas.- Se acercó hasta ella. -Estás enferma.- Levy solo gruñó en respuesta.- Y apestas a él, ¿qué sucedió?
Tras un largo silencio decidió contarle. Le hizo un resumen de lo que había pasado, omitiendo la información con respecto a la clase de hombre lobo que era Gajeel, y mintió diciendo que el doctor lo había provocado y ella para evitar perder al único que podía darles mas información se había metido entre ambos y terminado herida.
-Estas que ardes- Apoyó una mano en su frente y ella quiso mirarlo molesta, pero suspiró cerrando los ojos ante el alivio que sintió.-, en el buen sentido también.- Levy lo insultó por lo bajo y él sonrió picaramente aunque en cuanto intentó quitar la mano ella se la retuvo.
-Llevo horas sin poder cambiar el paño que Cana puso en mi frente, así que esto servirá por el momento.- El frío en la mano de Totomaru calmaba un poco su dolor de cabeza, a su lado en la mesa de noche había un paño dentro de un bowl con agua, que en algún momento había sido hielo, y como cualquier cosa que él intentara contarle ella debía prestarle atención, sabía que solo así podría enfocarse.-¿Qué querías decirme?
-Mi padre se dio cuenta que el tipo ese desapareció, creo que no sospecha de mi.- Sonaba inseguro y ella abrió lo ojos para mirarlo.-Lo sé, debo ser precavido, por eso intenté contactarte.
-¿Hay alguna novedad acaso?
-Nop.- Se encogió de hombros.- No que yo sepa, lo que quería era hablar de algo que llamó poderosamente mi atención.- Levy no respondió nada esperando a que él continuara.- Tengo a Aria y a Sol arriesgándose para nada, infiltrándose con esta gente detestable, y todo en vano si ustedes no confían en mí, pensé que íbamos a ser sinceros el uno con el otro, hermosa.
-No se a que te refieres.- Y la verdad era que no lo sabía, intentaba concentrarse en lo que decía y el cansancio no le permitía razonar del todo.
-El plan de mi padre involucra hombres lobo- Hasta ahí era la información que todos compartían.-, y la pelirroja psicópata me dijo de dos que casi atrapan son de esta especie que se transforma cuando quieren, porque sus padres eran licántropos y los padres de estos y así... ¿tú me entiendes?- Levy le había quitado la mano y se había incorporado sentándose en la cama.
-Entonces...
-Vi los nombres de un extenso árbol genealógico, no reconocí a nadie - Levy suspiró aliviada.-, pero es normal, el libro donde estaban escritos tiene cientos de años, la gente se casa, algunos pueden adquirir el apellido de su pareja y de igual forma su descendencia.
No se escuchaba ningún sonido en la habitación, mientras ella aguantaba la respiración.
-No entiendo a donde vas con esto.
-Y siempre está esta estúpida costumbre, ¿sabes?, esa de ponerle los nombres de abuelos o bisabuelos a sus hijos.- Lo sabía, Totomaru lo había descubierto por si mismo, y sabía que comúnmente ella se pondría pálida ante lo que él iba a decir, pero en su estado actual ya lo estaba, pálida y enfermiza.- El nombre Gajeel figuraba allí.
-¿Y qué con eso?- Intentó retrucarle.- Porque aparezca un nomb...
-No me mientas.- La detuvo.-¿Qué clase de relación tendríamos si empezamos con las mentiras? Mi padre quiere a un licántropo puro, y Gajeel cumple esos requisitos.- Afirmó, lo dijo sin un atisbo de duda, porque esa era la verdad, y ahora él también lo sabía.
-No te permitiré...- Se levantó tan rápido de la cama, que todo a su alrededor dio vueltas, y sus piernas flaquearon no permitiéndole permanecer en pie, esperaba caer cuando Totomaru la sostuvo y la ayudó a quedar sentada en la cama.- Debo parecer patética- Respiraba entrecortado, porque cuando el vampiro la había ayudado a sentarse la había sostenido de la cintura haciendo que los puntos tiraran.-, aún así no voy a dejar que le hagas nada.
-Nunca dije nada de eso- Levy lo miró sin entender y él le sonrió.-. Solo vine a comentarte mi plan.
Era difícil enfocarse en el trabajo, pero era preferible a tratar de pensar en todo lo demás, la música lo distraía, el volumen al que la escuchaba lo aislaba.
No ayudaba el hecho de que no había dormido nada en los últimos días. Era irónico porque en todo su vida había tenido la capacidad de dormir donde sea, no importaba el lugar, ni el clima, ni estar a la intemperie, y ahora, sino la tenía a su lado, no podía conciliar el sueño, la extrañaba, la necesitaba y se odiaba por eso, porque se sentía culpable, y también porque la culpaba, aún sabiendo que ella era la única que había actuado de forma coherente, la rabia que tenía era superior a ese pensamiento.
Tampoco ayudaba estar acompañado por dos personas en la misma situación. Sting se la pasaba insultando o escapándose a cada rato a la azotea. Rogue no hablaba, y eso lo ponía mas nervioso, porque no sabía que esperar de él, y cuando explotara iba a ser incontenible, de eso estaba seguro.
Lo había escuchado hablar muy poco desde esa noche, todos terminaron yendo a la casa de Macao, donde varios miembros de la manada se acercaron para contenerlos y llevarlos a sus respectivos hogares. No sabía nada de Natsu, Wendy seguía yendo a trabajar, poniendo toda su atención a su trabajo, aún así las veces que la vio la notó muy decaída, y él... bueno, él no sabía que hacer.
Makarov los había regañado por incendiar la sede del Consejo, sin embargo al viejo también le parecía extraño que el lugar estuviera vacío, se avecinaban problemas y esto no era un buen indicio.
-No deberías desaparecerte así.- Le dijo Gajeel a Sting cuando este entró a la oficina que compartían.- Ya no se que excusas inventar para explicar tus ausencias, finge que haces algo al menos.
El rubio solo lo miró entrecerrando los ojos.-¿Es lo qué tú estas haciendo? Escucho la música desde aquí, no se como a Rogue no le molesta.- Respondió irónico, y Gajeel bajó el volumen desde la pc.
-¿Mejor?
-Si.- Se sentó en su silla y se puso a observar fijamente a Rogue para molestarlo y viendo que este no se inmutaba, desistió y volvió a enfocarse en su jefe.-¿La patrona no vendrá hoy para el almuerzo?
Gajeel solo hizo una mueca, y antes de que pudiera responder algo, el otro chico lo hizo por él.-Levy está enferma.- Levantó la vista y al ver la cara de incógnita de Gajeel siguió con lo que estaba diciendo. -Mira fue quien me comentó.- Para la jefa de Recursos Humanos no existía la necesidad de tener una conversación fluida e incluso si el interlocutor no respondía, si había algún chisme de por medio ella lo comentaría. -Y tú deberías tener mas tacto- Señaló a su amigo.-, ya no están mas juntos.- Sting abrió la boca con una gran O y miró a Gajeel quien respondía enfurecido.
-¡Si que lo estamos!... Creo.- Ninguno de los otros dos dijo nada por unos minutos.
-No se si estoy en posición de nada- Empezó el rubio.-, pero tener a Yukino conmigo es lo único que me ayuda.- Hizo una pausa antes de seguir, porque notaba como Gajeel estaba tenso.- Deberías arreglar las cosas con Levy.
¿Cómo si no lo supiera ya? Lily no se cansaba de repetírlo, Juvia aparecía a diario en su casa intentando convencerlo de lo mismo. Y si no eran ellos dos, era esa maldita cadena que le decía que lo necesitaba tanto como él a ella, e ignorarla era difícil. Por eso cuando se hizo la hora de volver a casa para todos los trabajadores de la editorial, Gajeel supo que iría a buscarla donde sea que estuviera, y lo mejor era consultarle a su mejor amiga, ella sabría donde podía encontrarla.
Lucy abrió la puerta de su departamento sorprendida, comúnmente debía bajar a abrir la puerta del edificio, y en esta ocasión no había sido necesario porque un vecino había dejado pasar a Gajeel.
-Hola Gajeel - Fue lo primero que preguntó, sabía que ella era alguien cortés, a excepción de esta vez que no se hizo a un lado para dejarlo pasar. Se notaba que estaba molesta.-, ¿qué haces aquí?
-Hola Lucy.- No la llamó por sobrenombres porque no ayudaría, y quería que respondiera a su consulta, no sentía el aroma de Levy en el lugar, pero la rubia debía saber donde estaba.- Quería saber...
-¿Por qué se supone que te lo diga?- Gajeel la miró extrañado, no estaba acostumbrado verla actuar tan hostil.
-Yo... pensé que tu sabrías- Ella solo negó con la cabeza.-.¿No sabes donde está Levy?
-¿Debería decírtelo?- Lo miró con desdén.
-Por favor...- Su tono era bastante inseguro, no era una frase que acostumbrara a decir, pero necesitaba saber.- Siento molestarte.
-Discúlpame a mi, no estoy descansando mucho, Wendy está haciendo turnos dobles, y por eso además de a Happy estoy cuidando a Charle y no se nada de Natsu desde hace días...- Sus ojos se nublaron, la irrupción de los dos niños hizo que se secara las lágrimas rápido antes de que comenzaran a caer.
-¡Gajeel!- Happy se acercó corriendo hacia él, y la niña hizo lo mismo quedándose a un lado de la rubia.-¿Has visto a Natsu?- Le preguntó mirando hacia arriba porque él aún permanecía de pie en la puerta.
-¿Y a Wendy?- Charle se dirigió hacia él con la misma duda.
-No, ahora venía para averiguar sobre Levy, para poder verla a ella.- Le explicó a los dos niños, que ante su respuesta no pudieron ocultar su decepción.
Todos estaban siendo egoístas y de alguna forma, indirecta o directa, como había sido su caso cuando hirió a Levy, estaban lastimando a sus seres queridos al aislarse de la forma en la que lo hacían. Ahora lo comprendía, si no era fácil para un adulto manejarlo, como sería para Happy y Charle que eran solo unos críos, deberían protegerlos, y no hacerlos padecer esta situación, ellos eran mas frágiles y no tenían porque pasar por esto por culpa de ellos.
-Vengan aquí.- Se agachó en el suelo y los dos niños se acercaron para quedar cada uno a un lado de él.- Wendy y Natsu están tristes porque todavía no saben que hacer con la noticia que recibimos, es difícil, fueron muchos años que estuvieron solos por esto y ahora no pueden evitar estar enojados porque hagan lo que hagan nada cambiará lo que pasó.- Los niños no pudieron ocultar sus sollozos, y a él mismo le estaba costando no llorar, porque se daba cuenta de que estaba hablando de lo que sentía, y decirlo en voz alta era complicado.-. Deben entenderlos, darles un tiempo y ya todo volverá a ser como antes. Las familias siempre permanecen unidas, y todo esto también pasará- Charle estaba abrazada a su cuello y Happy hundía la cabeza en su pecho, mientras él los abrazaba a ambos.-. Tienen que ser fuertes- Se separó para mirarlos.-, ¿qué clase de lobos serían si no?- Les sonrió y con los ojos llorosos los dos le sonrieron de vuelta.-Por Natsu y por Wendy. ¿Prometen que serán fuertes?- Los dos asintieron.-Bien dicho.
-Chicos ahora deben despedirse, porque Gajeel debe irse- Los dos lo saludaron con un abrazo y Lucy le pasaba un papel.-. Toma, es la dirección de Cana, queda a una hora de aquí caminando, supongo que tu harás mas rápido, intenta ir antes de que se vaya a trabajar. ¿Quieres que le avise a ella? Se que estará enojada.
-¿Cuándo Cana no ha estado enojada conmigo?- Le respondió.-No te hagas problema, dejame sorprenderla, si está sobria tal vez pueda lograr que razone.- Lucy se rió.
-Gracias por lo que les dijiste- Se cruzó de brazos, mirando a los niños que se habían puesto a dibujar sobre la mesa ratona del living.-, aunque no lo creas necesitaban que alguien los tratara así, sin ocultarles lo que está pasando y mostrándose sincero.
-No es nada. Yo... yo trataré de hablar con Natsu.
-Primero ocupate de mi amiga, y dejame a mi que arregle las cosas con el pirómano de tu amigo.
Gajeel solo asintió y sin mucho mas se despidió y se dirigió a la casa de Cana, ya no era nuevo en la ciudad, había aprendido las calles y no tardó mucho en orientarse, y en poco mas de media hora estaba tocando el timbre de un chalet ubicado en una zona residencial. Insistió varias veces, ya que nadie atendía, y sabía que había gente adentro, escuchaba ruidos y había luces encendidas.
-¿Quién mier...- Cana abrió la puerta con una botella de cerveza en la mano.-TÚ...- Fue lo único que dijo e intentó arrojarle la botella y Gajeel la detuvo antes de que lo golpeara, por lo menos con el objeto, la morena era casi tan alta como él, y sabía defenderse, Levy le había contado que su padre era quien les había enseñado a todas a luchar, y a pesar de que la chica pareciera que solo podía involucrarse en la típicas peleas de borrachos donde acaban mas lastimados por caídas que por golpes dados por quien se enfrentaban, ella era letal.
-Hola Cana- La sostenía de ambos brazos, con suficiente fuerza para contenerla sin lastimarla para evitar ser golpeado.-, necesito ver a Levy, así que si me disculpas.- La hacía a un lado para meterse en la casa a la que no había sido invitado.
-¡Nadie te dijo que podías entrar!- Le propinó un golpe en la espalda que dolía mas de lo que quería demostrar.-¡Sal ya de mi casa!
-Te dije que quiero hablar con Levy.- Respondía entre dientes esquivando otro golpe, que terminaba con algo rompiéndose detrás suyo.
-¡Y yo te dije que te fueras!- Volvía a intentar pegarle.
-Cana, ¿qué suc...- Levy salía de una habitación vestida en un pijama improvisado que era un short y una remera que Gajeel reconocía como propia.-¿Gajeel? ¿Por qué estás aquí?
-Quería hablar contigo- Respondió mirando a Cana.-. Solo que alguien no me dejaba a pasar.
-¡Te metiste solo!- Intentaba golpearlo, deteniéndose cuando Levy se interpuso para detenerla.-¿De verdad? ¿Levy?
-Si, Cana. Él quiere hablar y...- Se dio vuelta a mirarlo.- yo también.
Resopló en respuesta.-Como quieras, princesa.- Se acercó a la puerta de entrada y tomó una chaqueta.-Saldré por media hora. Media hora.- Recalcó mirando a Gajeel.-Y si la lastimas de algún modo, te mato.- Le dijo antes de cerrar la puerta.
Se quedaron los dos de pie en lo que era la sala de estar.
-Al fin, pensé que iba a ser mas difícil conseguir que nos dejara hablar... ¿Levy?- La observó cuando se dejaba caer en un sofá.
-Lo siento, gasté todas mis fuerzas en apurarme a salir de la habitación.- Se recostó contra el respaldo y apoyó su cabeza cerrando los ojos.
Gajeel se apuró a sacarse su saco y dejándolo junto a su mochila en el suelo, se sentó a su lado.-¿Estás bien?- Le tocó la frente y sintió que tenía algo de fiebre.-Tienes fiebre.
-Solo un poco, ya está empezando a bajar la temperatura, y estoy comiendo.- Le respondió con una sonrisa.
-Es mi culpa.
-No lo es, no te culpes.- Le dijo apoyando una mano en su rostro.-No debí interponerme, fue mi error, pensé que no nos servía de mucho si el tipo moría. Kagura lo tiene encerrado y sigue tratando de sacarle mas data.
-No me importa nada de él, no debí hacerte daño a ti.- Apoyó su frente en la de ella y se quedó en silencio.-Fui un estúpido y saliste lastimada por mi culpa, si te pasaba algo no se que hubiese hecho.- Levy iba a responderle, cuando Gajeel la tomó del rostro con mas delicadeza de la necesaria y le dio un beso con mucha ternura.- Estamos juntos en esto para siempre, y no existe nadie mas para mi que tú, y he hecho un montón de cosas de las cuales no me siento orgulloso, y haberte herido es la peor de ellas.- Hizo un pausa para reunir el coraje de decir lo que había venido a transmitirle.- Por favor, necesito que me perdones, te extraño y te necesito conmigo.
-Oh, Gajeel, yo también te extrañé.- Levy había comenzado a llorar aunque sonreía, y él le secaba las lágrimas.
-Dormir es todo un desafío sino estás conmigo, y se que no me merezco a alguien como tú y aún así no quiero nada mas que estar toda mi vida contigo.-Apoyó su cabeza en el pecho de ella.-Por favor no me dejes, eres todo para mi.
-No pienso dejarte- Lo tomó del mentón para poder mirarlo a los ojos.-, pensé que ibas a ser tú quien no quisiera verme mas.
-Si estaba molesto era conmigo mismo, tal vez fue bueno que te alejaras para así no desquitarme contigo como lo hice con Lily y Juvia.- Se quedó pensando.-Creo que les debo una disculpa.
-Puede ser.- Le sonrió.- Igual ellos te conocen, y comprenden la situación, no creo se enojen contigo.
-Siempre tienes una respuesta a todo.- Se rió, y quiso ayudarla a que se colocara sobre su regazo, deteniéndose cuando la pudo oír gemir de dolor.-Muéstrame.-Su tono pasó a uno mas serio. La ayudó a ponerse de pie e instándola a sostener la remera por debajo de su busto, empezó a inspeccionar el vendaje y a descubrirlo con sumo cuidado.
-Está bastante mejor.- Levy se apuró a decir al escuchar como gruñía.
Tenía cuatro zarpazos. Un par eran un poco mas profundos y habían requerido puntos y los otros eran raspones, parecían ser de unos quince centímetros, no era mucho, pero su cintura era pequeña y parecía mas grande.
-¿Es por eso que estas enferma?- La miró con el ceño fruncido.-¿Se infectó la herida? Pensé que la trataron rápido.
-No, los antibióticos son por precaución, lo que hace que...- Le explicaba mientras él lamía la herida desconcertándola.-¿qué- qué haces?
-Ayudará a que cicatrice mas rápido.- Le retiraba la venda.-Deberíamos cambiar esto, tiene sangre.- Ella asintió y le indicó donde buscar todo para ayudarla a cambiar el vendaje.
Cuando Gajeel volvía a limpiar la herida y a cubrirla con la gasa, ella comenzó a explicarle el motivo de que la herida la afectara de tal forma, él comprendió que funcionaba similar a como sería si él atacara a alguien, provocando que se transformara en licántropo, pero al ser una bruja en ella respondía como un virus, y su cuerpo subía la temperatura para eliminarlo de su organismo.
Levy había permanecido de pie hasta que él terminara, y cuando lo hizo Gajeel la abrazó apoyando su rostro en su estómago.
-¿Cómo crees que sea cuando tengamos un bebé entonces?
La inesperada pregunta dejó a Levy sin habla, hasta que pudo procesar lo que implicaba.
-¿De verdad estamos teniendo este tipo de charla?- Le sonrió viéndolo a los ojos hacía abajo, porque él no había dejado de abrazarla.-Solo llevamos unos meses juntos, ni siquiera vivimos juntos.
-Si que lo hacemos.- Sonrío con soberbia.
-Es provisorio.
-Gihi, eso es lo que tú crees.- Ella puso los ojos en blanco.-De verdad, ¿cómo será?, yo lo único que quiero es que se parezca a ti.
Ella empezó a pensar en lo que había leído.-En realidad va a ser como tú, un licántropo, tú sangre es mas fuerte y el gen debe heredarse, y con respecto a como se verá no lo sé, espero que tenga tu altura.
Gajeel se rió ante eso.-Yo también.
-Hey, no se le habla así a la futura madre de tus hijos.- Bromeó y ambos rieron.
-Igual quiero que se vea como tú.- La ayudó a sentarse sobre él, con una pierna a cada costado de su cadera.-Eres la mujer mas hermosa del mundo, si saca un solo rasgo tuyo seré mas que felíz.- Cuando ella se rió, la silenció con un beso de esos que la dejaban sin aire.-Vuelve a casa, por favor. Yo cuidaré de ti. Perdóname.
-Ya te dije que no hay nada que perdonar, te amo, tonto Gajeel.- Lo volvió a besar.-Por supuesto que volveré a tu casa.
-Es nuestra.- La corrigió.
-Mis libros no están allí, y mis cosas aún siguen en mi departamento.
-Entonces busquemos un lugar para los dos, solo nuestro...
La puerta abriéndose los sobresaltó.
-Veo que ya hicieron las pases, espero no hayan ensuciado mis muebles.- Levy se sonrojó, aunque no hubieran hecho nada.- Como te pueden un par de músculos, muñeca.
-Veo que estás mas tranquila.- Le dijo Gajeel, ayudando a Levy a ponerse de pie.
-Hablé con Lucy.- Respondió y Gajeel supo que debía agradecerle a la novia de su amigo por ayudarlo.-¿Quieres quedarte a comer? Yo en una hora salgo para el bar, pero Levy todavía no cenó.
-Está bien.- Asintió el licano.- Luego de eso nos vamos a casa.
-Los llevaré yo, no arriesgaré a que Levy se enferme mas porque la obligues a ir caminando.
-De hecho, pensaba pedir un taxi.
-Inténtalo.- Resopló Cana.-Comamos algo y luego los llevo.
Cenaron algo liviano, ya que Levy había estado comiendo tan poco que su estómago se había cerrado y solo tomó una sopa, y luego Cana, tras guardar las cosas de Levy en el bolso que había llevado, los acercó a lo de Gajeel, antes de ir al bar.
Al llegar a la casa quien mas felíz estuvo de verla fue Lily, y cuando Gajeel había ido a desarmar su bolso y separar la ropa que era para lavar, volvió a remarcarle que se había equivocado al haberse marchado, la entendía, pero ya no importaba porque estaba contento de ver que había vuelto y mas porque Gajeel había ido a buscarla, ya que realmente se notaba el cambio para mejor que la chica había provocado en su amigo.
Y a pesar de que intentó convencer a ambos de llamar a Juvia para cenar todos juntos, la pareja se excuso ya que Levy estaba cansada y lo mejor sería que los dos fueran a dormir, no habiendo podido descansar completamente en todo el tiempo separados. Ya habría tiempo para reunirse, ellos solo querían reconciliarse y unas horas de sueño no le vendrían mal a ninguno de los dos, aunque podían permitirse una distracción antes.
Levy pudo recuperarse mas rápido con los cuidados de Gajeel, sabía que las cosas estaban mejorando, solo esperaba que pronto le quitaran los puntos, eran demasiado molestos.
Mas allá de eso no se quejaba, hablar de su futuro ya no la asustaba y que Gajeel deseara compartir todo lo que anhelaba junto a ella la hacia sentir felíz de una forma inexplicable. Era amor lo que sentían, y la hacía creer que podían enfrentarse a lo que sea.
Se había enterado que Lucy ya había vuelto a hablar con Natsu, lo que era algo bueno. Sabía que el pelirrosa tampoco se había tomado la noticia bien, había desaparecido y vagado convertido en lobo, y con el pasar de los días al igual que Gajeel comprendió que debía encarar las cosas de otra forma si querían conseguir algo, y alejarse de sus seres queridos no era una solución.
No se tardó mucho tiempo mas en convocar a una reunión entre el aquelarre, la manada y los vampiros que se habían unido a la causa. Levy ya le había comentado el plan de Totomaru a Gajeel, Juvia y Lily, era mas arriesgado de lo que hubiesen preferido, ella tenía miedo, pero confiaba en Gajeel y sabía que él iba a estar bien.
Era momento de comunicárselo a todos para que pudiera decidirse de una forma democrática.
-Lo que implicaría que Gajeel se infiltraría junto con Totomaru.- Makarov analizaba lo que le explicaban.
-Juvia también.- Gray iba a protestar, pero ella no le permitió que la interrumpiera.- Si Totomaru quiere involucrar a su "equipo" creyendo que su padre no sospechará, Juvia también volverá a unirse.
-Es muy peligroso.- Erza intervino.- No solo estamos exponiendo a uno de los licántropos sobre los que Porla quiere poner sus garras, sino a ti también. No, no lo acepto.
-No creo que sea un mal plan.- Kagura fue quien intentó persuadir a la reina del aquelarre.-Sabemos lo que está en juego, y sino nos arriesgamos no conseguiremos nada.
-Comparto la opinión de ambas- Macao las interrumpió.-, es enviar a Gajeel al matadero, pero teniendo en cuenta que también podemos vigilarlo y protegerlo a como de lugar, si podemos acercarnos, tal vez resolvamos esto. Makarov, ¿qué opina?
-Creo que ya lo decidieron y solo nos están avisando, ¿no es así Gajeel?
Nadie respondió nada, estaba implícito. Habían decidido que primero se encargarían de Porla, luego enfrentarían al Consejo, y tanto Natsu como Wendy estuvieron de acuerdo y decidieron mantenerse cerca para protegerlo, Rogue y Sting ayudarían, y Juvia no había aceptado un no como respuesta cuando le explicaron la situación.
Ella se mantendría al lado de su hermano, a pesar de que ya había enfrentado a una de las brujas que estaba en el bando enemigo, y sabía que debía ser mas precavida por ese mismo motivo, por mas que Gray trató convencerla de todas las formas posibles, ella se sintió mas decidida que nunca.
Solo restaba saber si contaban con el apoyo del resto, quienes viendo que por mas que opinaran distinto no lograrían hacerlos cambiar de parecer, terminaron cediendo.
Por lo que solo un par de días después, habiéndose ocupado Totomaru de hacer todos los arreglos posibles, los pasó a buscar en su auto por el centro de la ciudad, empezaba a oscurecer y había mucha gente que se disponía a salir por el comienzo del fin de semana, lo que los hacía pasar desapercibidos. Lo vieron llegar y a Sol y Aria en otro vehículo detrás, ya que todos no entrarían en el primer auto.
Levy los vigilaba de cerca, podía luchar a pesar de no estar recuperada del todo, Lily iba a ocuparse de manejar su camioneta, ya que su coche sería reconocido, y en esta ocasión Sting y Rogue transformados completamente vigilaban desde otro punto sin ser vistos, y Levy estaba segura que Gray andaba cerca.
Totomaru siempre conducía a mucha velocidad, no le importaba nada cuando manejaba su auto, y el ronronear del motor lo hacía querer pisar el acelerador aún mas fuerte, algo que Gajeel detestaba, por eso se había sentado en el asiento trasero, y dejado a Juvia en el asiento de acompañante, ya que sentía como su cena se revolvía en su estómago y no lo dejaba pensar. Trataba de concentrarse en no vomitar, que era lo que siempre hacía cuando viajaba en cualquier medio de transporte, por eso no podía mantenerse atento a lo que sucedía a su alrededor.
-Es divertido como se pone, ¿no?- Le conversaba a Juvia el vampiro, viendo a Gajeel descompuesto por el espejo retrovisor, porque la chica no había abierto la boca desde que se había subido al auto.-No esperaba verte, ¿sabes?- La bruja siguió sin responderle nada, el vampiro solo asintió al doblar en una esquina, Juvia creía saber el destino al que iban por el camino que venían siguiendo, y suponía era una de las direcciones que Totomaru les había dado.-Solo invité a Gajeel, no tenías que venir tú también, entiendo que pienses que ustedes son como un combo, y hermanos y toda esa mierda.- Ella seguía sin hablar y miraba por la ventanilla.-De haber elegido, hubiese preferido que venga Levy.- Asintió para si mismo al decir esto, y por la parte de la ciudad en que se encontraban la bruja del agua sabía que no faltaba mucho para llegar, no tenía mucho tiempo antes de que el auto se detuviera y Gajeel empezara a recomponerse.
-Juvia tiene ciertas sospechas.
-Al fin hablas, ya se me hacía aburrido el viaje.- Festejaba.
-Juvia no es estúpida.
-Jamas dije eso.- Levantaba las manos, quitándolas del manubrio para defenderse.-Solo me sorprendió que te nos unieras, no pensé que fueras fan de nuestro grupete.
-No es eso. Juvia vino para vigilarte- El vampiro la miró sin entender.-, Juvia te conoce.
-Tú "hermano" es bastante fuerte, puede cuidarse solito.
-Si, Gajeel sabe arreglárselas.-Le respondió.-Juvia sospecha que es lo que planeas.
-Ah si, ¿y cuáles son esos planes que piensas que piensas que armé en esa mente conspirativa tuya?- Dijo con ironía.
-Piensas dejar que se ocupen de tu padre para así deshacerte de él.
-Culpable.- Dijo concentrándose en la calle.- No es que lo oculte demasiado, todos saben que lo detesto, no hay que ser muy avispado, solo es sumar dos mas dos.
Juvia asintió e hizo una pausa antes de continuar, lo conocía desde que era una niña, casi al mismo tiempo que al licano en el asiento trasero. La gente no cambiaba tanto y no lo había dicho al resto para no empeorar las cosas, sin embargo en el auto solo estaban ellos, no había necesidad de ocultar nada.
-Pero primero piensas dejar que tu padre se ocupe de Gajeel para quedarte con Levy.
Totomaru dio vuelta el rostro sonriéndole y detuvo el motor.-Ya llegamos.- Le guiñó el ojo y abrió la puerta para bajarse del auto.
¡Nuevo cap!
Que les puedo decir mas que me encanta Totomaru y me divierte escribirlo.
Soy un desastre monumental, pero pude terminar este, espero no demorarme tanto en los que siguen, todavía quedan los one-shot que no pude subir, tengo que terminar de revisarlos.
Gracias por los reviews a Shonenevolution, Hati-chan y L-Rosie.
Wendy: Dudas y mas dudas, ya falta poco y se van a ir develando mas, aunque nunca vamos a saber como es que Levy logra pervertir tanto a Gajeel jajaja, porque acá entre nos, yo creo que ella es la que lo provoca, las calladas son las peores ;)
No falta tanto, sigan ahí, un beso grande, nos leemos.