Cap 7

Después de un ardúo duelo, Eli, Kord y Pronto se tiraron al suelo apenas llegaron de combatir. Sólo que al percibir un agradable olor a hamburguesas, se pusieron de pie rápidamente, siguiéndolo hasta llegar a la cocica. Allí se encontraron a Trixie y a Blakk cocinando juntos dicha comida, con una alegría que se transmitió al resto de la banda.

—¿Puedes llamar a tu padre? Ya casi están listas —pidió la chica, a lo que Eli va de inmediato a buscar al nombrado. Taddeus sólo reviró los ojos, ya que no le agradaba compartir una cena con ese hombre.

El topoide y el troll se sentaron ansiosos de probar la cena, y en especial de seguir escuchando sobre la historia de Blakk.

¿Ven cómo cambian las cosas? De un momento a otro ya no se interesaban tanto en las hazañas de Will como se interesaban por descubrir cada detalle sobre la vida del villano. Después de todo, era algo increíble que su compañera fuera su hija todo ese tiempo. Y tenía lógica, pues algunas de sus aptitudes eran similares a las de su padre.

Los dos Shane tomaron asiento, el mayor en medio de Kord y Pronto, e Eli al otro lado.

—Oh, no. Yo quiero sentarme junto a mi hermano —mencionó el Ingeniero, cambiando de asiento junto al peliazul. Este rió y le golpeó con el puño, en forma de juego, su enorme brazo.

—Si vamos a elegir asientos, estaré junto a Eli —añadió la Blakk*, tomando los platos y sirviendo, al tiempo que se sentaba junto a su chico—. Si no es molestia, Shane —siguió, con un tono suave y juguetón. Él le guiñó un ojo, recibiendo su mención con una sonrisa atrevida, cosa que no se les hacía diferente a todos, exceptuando a Taddeus y Will, claro está.

—Por supuesto que no, Trix.

Sobra decir que los padres de ambos se sentían incómodos y algo molestos, en especial porque se tuvieron que sentar en la misma línea, sólo que con el topoide en medio.

—No hablen tanto, ¿quieren? Venimos a comer —reclamó Will, comenzando a probar la cena. Los demás sólo callaron y procedieron a hacer lo mismo.

Pero en cuanto todo fue silencio...

—¿Me pasan la salsa? —preguntó la pelirroja, a lo que su padre se la pasa con gusto. Todo pudo seguir su curso normal, de no ser porque a Will le molestaba ver a su enemigo no tan derrotado.

—Será mejor que no le concientas que esté comiendo así: el acné existe ¿sabes? —y tomó el contenedor de salsa y lo puso donde estaba, sin dejar que la chica untara su hamburguesa con ella.

Eso le molestó a Taddeus, mientras a los demás los confundió: ¿desde cuándo el Shane era tan riguroso en cuanto a la comida?

—Si ella quiere comer su hamburguesa con salsa, que lo haga —y se la pasó de nuevo a su hija. Esta iba a tomarla, cuando el lanzador insistió, quitándosela de nuevo.

—Se nota que la cuidas.

—Sólo es salsa, no lo come todo el tiempo, Will —respondió, tratando de quitarle el envase de las manos.

Fue cuando todos se dieron cuenta de que la cena no terminaría bien.

—¡Eso no es saludable!

—¡Se trata de mi hija, no la tuya!

—¡Pero sigue sin ser bueno para ella!

Y así ambos se peleaban por el envase se salsa, el cual la pelirroja no tuvo de otra que dejar ir, conformándose con su hamburguesa sin ese toque especial.

Mientras tanto, Eli, harto de la discusión, se puso de pie, llamando la atención de sus amigos, imaginando lo que estaba por hacer el intrépido muchacho, quien cargó su lanzadora con Burpy, y sin mucha dificultad, disparó la infierno hacia ellos, causando quemaduras leves en los nudillos de ambos, y haciendo que soltaran el objeto por el que tanto hacían alboroto. Fue un alivio que se tratara de un envase plástico, así que no hubo preocupación alguna en que cayera sobre la mesa desde una altura considerable.

Atónitos por lo que acababa de hacer Eli hacia su padre, Kord, Pronto y Trixie no hicieron más que esperar lo que diría a continuación.

Por otro lado, el responsable del tiro estaba impresionado e indigando de la inmadurez de su padre y de Blakk. Así que tomó la salsa y se la pasó a la joven que tanto la anhelaba, cosa que le sacó una leve sonrisa.

En cambio, ambos progenitores sólo veían al chico con rabia, y éste, de igual manera a ellos.

—Si van a venir a interrumpir la tranquilidad que nosotros tenemos aquí, entonces comerán en las habitaciones —Will negó con la cabeza, mientras se paraba y se dirigía con su cena hacia la alcoba, sin decir palabra, más que sólo susurrarle a su hijo:

—Más te vale no volverla a complacer.

Blakk hizo lo mismo, pero en un lugar donde la banda lo observara, así que sólo se sentó en el sofá de la sala, a seguir comiendo.

Los espectadores, sin mencionar nada al respecto, pues sabían que a Eli no le agradaría oír algo sobre lo que pasó hace unos segundos, volvieron a sus respectivas cenas, para seguir disfrutando de la noche.

—Gracias —susurró ella a su oído, mientras tomaba discretamente su mano y la entrelazaba con la suya.

No fue tan discreta dicha acción, puesto que Burpy la había visto, y obviamente no evitó sorprenderse, ya que ella tampoco sabía sobre la cercanía que había crecido entre ellos, ni mucho menos de su relación.

—Todo por ti, dulzura. —la joven se ruborizó al oír como la había llamado. No se acostumbraba todavía a recibir piropos, y él a decirlos. Mientras, la infierno no se acostumbraba a escucharlos.

Los otros dos sólo los miraban con detalle, sospechando que hubiera algo que ellos no supieran. Claro que, como algunas veces solían actuar de ese modo, tampoco era mucha la atención que le prestaban.

El resto de la noche fue todo tranquilo.

Cuando llegó la hora de dormir, ésta vez le dieron un par de almohadas y una cobija a Blakk para que descansara más cómodo en el sofá. Trixie le dio un beso de buenas noches a él, infinitamente feliz de tenerlo con ella, aún sin poder creer que todo lo que había ocurrido ese día fuese real. Sentía que si hacía algún movimiento en falso, ese sueño tan agradable ¡puf! Se rompería en fragmentos de deseos que alguna vez le parecieron tan distantes, que decidía no cumplirlos.

Se dirigió a su habitación, cansada, como era de esperarse. Kord y Pronto estaban esperándola para dormir y apagar las luces. En cambio, Eli se encontraba esperándola en el balcón, recostado del barandal. Eso se debía a que había visto la muestra de afecto que ella le había dado a el ex-empresario, y se preguntaba porqué él no podía recibir una también.

—Antes de dormir, tampoco me molestaría un pequeño abrazo —susurró, debido a que, no sólo se encontraban cerca del villano, sino que la puerta de la habitación de Will estaba abierta, y también se podía oír lo que decían si hablaban como si nada.

Ella sonrió, negando con la cabeza.

—Estamos muy expuestos, Eli.

—¿Y qué? ¿Está mal despedirse? —preguntó, esperando recibirla. Trixie, aunque sabía lo arriesgado que sería si lo abrazaba justo ahora, no lo contuvo más y se lanzó en sus brazos, expresando todo el amor que le tenía. Él la elevó en el aire y le dio un par de vueltas, causando que ella se riera, y que Blakk pusiera su atención en el lugar de donde provenían esas risas.

Al ver lo que ocurría, arrugó el entrecejo, confundido y enojado.

¿Acaso ellos eran tan cercanos así? ¿O ya eran pareja? De haber sido así, Will habría mencionado algo al respecto. ¿Entonces por qué actuaban de esa forma? Ah, Blakk, recuerda que ellos siempre hacen eso, ¿no ves que están enamorados?

¡Rayos, era cierto! Él comprendía muy bien lo que sentían esos dos, y estaría de más decir porqué lo sabía.

—¿Se puede saber qué sucede? —gritó, con un tono que los hizo separarse de manera repentina, el cual era su principal objetivo.

El segundo, era recibir explicaciones.

Los pobres tenían el miedo colmándolos, esperando a cómo podría reaccionar el causante de aquella interrogante.

Trixie no quiso que Eli saliera pagando aquel acto, por lo que le hizo una seña para que se fuera, y así él lo hizo, con el terror consumiéndolo, rogando que su padre no hubiera oído tal grito. Y si lo oyó, que no preguntara por eso.

Por otro lado, la pelirroja bajó las escaleras, en vez de lenta, rápidamente, gracias a que los nervios la traicionaban. Su rostro estaba pálido, y ruborizado, al tiempo que sus manos temblaban. Pero por más que no quisiera enfrentar a su padre, llegó el momento en que ella se paró frente a él, tratando de inventar una excusa.

—¿Qué significa ese abrazo? —Trixie nada más podía sentir como sus piernas flaqueaban y su rostro ardía. El corazón parecía querer salir de su lugar, y sin mencionar que su mirada no sabía dónde posarse.

Con la voz algo torpe, decidió contestar, para parecer relajada ante el asunto:

—Él sólo quería "despedirse". —incluso sus comillas hechas con los dedos al aire parecían nerviosas. Además, sin darse cuenta, ya había echado toda la responsabilidad del acto a Eli, a quien menos quería culpar en ese momento.

—¿Él? Yo vi que el acto también te incluía.

Excelente, el primer día con su padre y ya le estaba reprendiendo.

—S-sí, pero no podía dejarlo con los brazos abierto, ¿o sí? —preguntó ella, sonriendo nerviosamente, aunque Taddeus se le viera una cara de disgusto.

—Una simple negación hubiera bastado —respondió, con un tono más severo, dando a entender a la chica que no se trataba de un simple juego: de veras la estaba reprendiendo.

—No seas exagerado, sólo fue un abrazo —comentó, cruzándose de brazos y apartando la vista de la seria expresión que llevaba su padre en el rostro—. No es como si tú no hubieras abrazado a alguien más aparte de mamá. —él elevó una ceja, impresionado por la astucia de su hija. Esta le vio por unos instantes y luego volvió a apartar la mirada— Fue un abrazo de amigos.

—¿Me quieres decir que eso fue de amigos?

Bueno, cierto, en ese punto tenía razón.

—Quiero infromarte que ese "abrazo amistoso" puede terminar en un sentimiento más especial, y estás increíblemente joven para ello.

La pelirroja bufó, tratando de hacerle ver a su padre que no tenía ningún interés en el Shane, aunque este no le creyera en absoluto su pequeño teatro. Además, como ya sabía que ella sí le tenía un sentimiento especial a ese niñato, también tenía en cuenta lo lejos que debía mantenerla de él.

—No sería capaz —sentenció ella—. Y no pretendas que termine mi amistad con él por tu odio infantil hacia Will, ¿bien?

—Aun si yo los aceptara como amigos, dices tú, Will no te recibirá con los brazos abiertos en su familia —contraatacó, con toda la razón—. Se lo puedes agregar a que tampoco yo lo aceptaré en mi familia.

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*Su apellido oficial no es este. El tema se aclarará más adelante.

:v he vuelto! Creo xD eh, por ahí viene un fic colectivo entre Nat, The Eastern Writer y yo ;3 es navideño, pero hubieron complicaciones para subirlo en su debida fecha.

También quería decir que este fic se puede encontrar en Wattpad, con portada y todo :''3

Punto, final.