Info: En este fic, ni Sasha ni Angie tiene hijos, pero sí están casadas. David Miller (marido de Sasha). Erik Grey (marido de Angie).

*Ambientemos el fic en la quinta temporada *

N/A: Llevo muchísimo tiempo queriendo publicar una fanfiction sobre Angie Harmon y Sasha Alexander. Espero que os guste. Si hay algún tema sobre Sasha y Angie que os gustaría que quede reflejado en esta historia (o en otra nueva), me gustará saber que es.

Capítulo: 01

"Entrevistas promocionales".

8:00 am.

Angie y Sasha estaban acompañadas únicamente por un chófer y por el mánager que la producción de la serie había proporcionado exclusivamente para las entrevistas del día de hoy.

Cuando llegaron al edificio de la cadena de televisión, Sasha y Angie tenían un camerino para ellas dos solas. Allí esperarían hasta que el equipo del programa les avisara para entrar en directo.

—Cariño, me encanta cuando usas tanto escote —Admitió Angie con una pícara sonrisa.

—Sigo pensando que es muy atrevido ¿Crees que me veo bien o debo cambiarme?

Preguntó Sasha mientras que mirándose al espejo del camerino se colocaba el cabello de la manera que más le gustó.

—Te ves hermosa.

Angie se acercó a ella por detrás y depositó un tierno beso en la nuca.

Sasha sintió un cómodo cosquilleo provocado por el beso. Se giró sobre sus talones encontrándose a Angie de frente, pocos centímetros era la separación entre ambos cuerpos.

—No podemos estropearnos el maquillaje… Pero no pasará nada si te doy un beso siendo sumamente cuidadosa, ¿cierto? —Preguntó poniendo cara de niña buena.

—En absoluto… —Angie juntó su boca a la de Sasha y la besó dulcemente.

Alexander se estremeció al sentir el contacto de los labios de Angie. Aquella mujer le imponía demasiado, cosa que le fascinaba.

Ambas sabían que aquello no era una buena idea porque quedaba menos de diez minutos para ir al plató y las dos sabían lo que pasaba entre ellas cuando estaban solas en la intimidad…

—¿Es obsceno admitir que ahora mismo me encantaría que estuviésemos en mi casa? —Preguntó Sasha para seguidamente atrapar y estirar con los dientes el labio inferior de Angie.

Con ambas manos, Angie rodeó la cintura de Sasha.

—¿Es obsceno reconocer que siento lo mismo? —Sonrió divertida.

La puerta fue golpeada varias veces con cuidado.

—Chicas, cinco minutos para estar en directo. ¿Podéis salir ya?

Se pudo oír desde fuera. Nadie podía entrar en los camerinos a no ser que tuviese autorización.

Sasha y Angie se separaron y después de comprobar que el maquillaje no las delataba, abrieron la puerta.

—Si ya estáis listas, por favor, acompañadme.

Pidió la persona encargada de llevarlas hasta el plató donde serían entrevistadas. Detrás de cámaras esperaron exactamente dos minutos.

Durante la entrevista escucharon y respondieron preguntas de todo tipo referente a la serie, pero pronto llegó la pregunta qué destacaría sobre todas las demás…

—¿Que os parece el fenómeno Rizzles? —Preguntó la periodista.

Angie y Sasha sonrieron intercambiando miradas de complicidad.

—A mí me parece interesante —Explicó Sasha—. Entre Jane y Maura no existe una relación romántica, pero en pantalla la química entre Angie y yo es tan pura que al público le gusta tanto como para shippear a Maura y Jane.

Angie cerró el puño de su mano izquierda y lo acercó a la boca de Sasha fingiendo tener un micrófono en la mano y haciéndose pasar por reportera.

—Por favor Sasha, explícale al público que quiere decir la palabra shippear.

Sasha, al igual que Angie, no pudo aguantar la risa.

—Sí por favor —Pidió la periodista entre risas.

—De acuerdo —Prosiguió Sasha—. En resumidas cuentas, shippear quiere decir que te gusta una pareja y en el caso de que no esté junta tú quieres que sí lo esté. Entonces creas un nombre referente a esa pareja. En este caso la unión de Rizzoli y de Isles corresponde a la expresión Rizzles.

—Muy bien explicado Sasha. ¿Y qué opinas tú, Angie? En internet hay cientos de historias respecto a Jane y Maura como pareja sentimental y sexual.

—Sí, los famosos fanfiction… —Sonrió—. Me gusta la idea, los fans son libres de creer en aquello que les llama la atención y les gusta. He leído algunas historias que me han dejado con la boca abierta.

Angie buscó a Sasha con la mirada y ambas sonrieron volviendo a ser cómplices.

—Pero no me disgusta —Prosiguió Angie—, estaría bien para la serie tener en cuenta alguna de las historias que escriben los fans, daría mucho juego entre Maura y Jane.

La presentadora continuó con algunas de sus preguntas sobre la serie. Angie y Sasha respondieron a todas y cada una de las preguntas que les formularon. Minutos más tarde la entrevista terminó, pero todavía quedaban tres más. En todas se trataban temas relacionados con sus personajes y con la serie en general.

Las horas corrieron y al finalizar todas las entrevistas, Angie y Sasha almorzaron juntas en un restaurante de la ciudad. Más tarde, el coche de producción las recogió en el restaurante y las llevó a los estudios de Paramount Pictures.

Al terminar de grabar una escena, Angie fue a la sala de descanso. Allí estaban Lorraine y Sasha sentadas juntas en un sofá hablando y haciendo tiempo hasta tener que volver a grabar.

—Hola chicas —Dijo una risueña Angie.

—Hola —Dijeron Sasha y Lorraine al mismo tiempo.

En la sala de descanso había una televisión, de repente anunciaron los nombres de Sasha y de Angie.

Mientras la presentadora hablaba, en televisión se mostró un video con imágenes detrás de cámaras donde aparecían Angie y Sasha en los pasillos de uno de los programas que visitaron para promocionar la serie.

—Hoy nos han visitado las estrellas de la serie Rizzoli & Isles. Entre bambalinas nuestras cámaras captaron la buena relación que existe entre ambas actrices en la vida real. Pero lo que nos ha sorprendido ha sido una imagen en concreto que ha hecho saltar las alarmas. Hace semanas los rumores de que Sasha y Angie podían ser más que amigas llamaron toda nuestra atención debido a un video donde se mostraba a ambas en una discoteca bailando con mucha confianza y rozando el erotismo. Hoy nuestro equipo a capturado estas imágenes. No pierdan detalle…

Ahora se mostró otro video donde Angie acariciaba cariñosamente el rostro de Sasha mientras esta última tenía depositadas ambas manos a cada lado de la cintura de Harmon y hablaban entre ellas. Ambas aparecían la una frente a la otra y aquella escena duró alrededor de quince segundos.

—¡No puede ser! —Dijo Angie visiblemente sorprendida.

Sasha parecía igual de incrédula y sorprendía que Angie. Habían sido grabadas sin que ninguna de las dos se diese cuenta.

—¡Mierda! —Exclamó Sasha quien de inmediato recordó que afortunadamente no se besaban en público.

Lorraine era conocedora de la verdad entre Sasha y Angie. Sabía que desde algunos meses eran algo más que amigas.

—No os preocupéis chicas —Pidió—. Desde hace años están diciendo lo mismo de vosotras y todo ha quedado en rumores. Nunca hacéis nada comprometido en público.

—Pero ahora tienen imágenes comprometidas… —Dijo Angie.

—Eso no es nada —Prosiguió Lorraine—. Todo el mundo sabe que tú eres una persona sumamente cariñosa con amigos y seres queridos. Las cámaras ya te han visto en actitudes como esas en más ocasiones y con distintas personas, no os preocupéis por estas imágenes.

Angie frunció ligeramente los labios, Lorraine tenía razón.

—Lorraine, es tu turno, acompáñame —Pidió una persona del equipo.

—Debo irme, luego hablamos —Lorraine abandonó la sala.

Sasha apagó la televisión y se sentó al lado de Angie.

—Si la prensa nos pregunta al respecto… ¿Contestamos o simplemente lo dejamos pasar?

Angie se levantó y contestó secamente.

—No lo sé, no quiero hablar ahora…

—Angie —La siguió con la mirada—. Espera, Angie…

Pidió en sin éxito porque Harmon ya había abandonado la sala.

El teléfono de Angie no dejó de recibir llamadas, su marido intentaba comunicarse con ella después de ver las imágenes que aparecieron en televisión. Pero Harmon lo tenía en silenció y no había consultado su teléfono desde este mediodía.

Cuando Angie terminó todas las grabaciones del día, fue al camerino de Sasha. Necesitaba hablar con ella.

—Hola Sasha. ¿Puedo entrar? —Esperó fuera.

Visiblemente molesta, Sasha se alejó de la puerta y caminó en el interior de su camerino hasta llegar al sofá y sentarse. Angie entró y cerró la puerta, recorrió el camerino hasta detenerse frente a Sasha.

Había pasado una hora desde que se vieron por última vez.

—Cariño, siento muchísimo lo de antes en la sala de descanso. Últimamente estoy teniendo problemas con Erik y lo último que necito es que salgan rumores.

—Pero en este caso los rumores son reales…

Dijo sarcásticamente porque seguía enfadada, pero rápidamente se dio cuenta de que no podía reprocharle nada. A fin de cuentas ella también estaba casada.

—Sasha… —Frunció el ceño pidiendo una tregua—. Ya hemos hablado de esto en otras ocasiones. No estoy bien en mi matrimonio, pero no es tan fácil tomar una decisión.

—Quizás yo no sea lo suficiente para que tengas el valor de tomar según qué decisiones frente al señor Erik Grey.

El nombre de Erik lo pronunció con desprecio.

Angie alzó amabas cejas presa de la incredulidad del momento.

—¿¡Me estás montando una escena de celos!? —Exclamó— ¿Tengo que recordarte que tú también estás casada? —Se mostró molesta por la injusta actitud de la rubia.

Sasha cruzó los brazos sobre el pecho y tomó unos segundos para estar en silencio, reflexionó de lo que acababan de hablar. Finalmente mirarla.

—Tienes razón, lo siento Angie —Descruzó los brazos—. Todo eso es una mierda, no sé por qué han sacado esas imágenes.

Angie se sentó a su lado y le acarició cariñosamente una rodilla.

—Es su trabajo… Pero Lorraine tiene razón, no es la primera vez que yo me muestro cariñosa con las personas que quiero. Si tenemos un poco más de cuidado, no creo que esas imágenes nos delaten.

—Mi teléfono está lleno de llamadas de mi marido, pero no quiero hablar con él ahora.

—Te entiendo. Yo no he querido mirar mi teléfono todavía.

—¿Sabes? A veces me dan ganas de olvidarme del resto del mundo y no esconder mis ganas por besarte delante de quien sea.

Angie sonrió, ambas se miraban a los ojos.

—A mí me pasa lo mismo. Pero si hacemos eso empezarían a agobiarnos y tendríamos que dar muchas explicaciones…

—Cierto —Admitió con resignación.

Angie se inclinó hacia adelante y la besó tiernamente.

—Te quiero. Y aunque no lo creas, me importas muchísimo como para darlo todo por ti.

—Lo sé cariño. No tengas en cuenta lo que dije hace unos minutos, hablé estando enfadada.

—Bueno, pero no está de más si te lo aclaro —Sonrió.

La puerta del camerino de Sasha era golpeada tres veces seguidas.

—Soy yo, Lorraine.

Angie se dispuso a abrir la puerta, pero Sasha le agarró de la mano y jaló de ella consiguiendo que volviese a sentarse de golpe.

—Por cierto… Yo también te quiero, Angie —La besó.

—Vaya… Me encantan este lado tuyo.

Finalmente Angie se levantó y abrió la puerta ya que desde fuera no se podía abrir sin la llave.

—Hola chicas, si interrumpí algo lo siento —Comentó divertida.

—No estábamos haciendo nada —Dijo Sasha.

—Bueno, fuese lo que fuese puede continuar cuando me vaya. Venía a informaros de que el coche pasará esta noche a por vosotras sobre las ocho.

Angie frunció el ceño, no se acordaba de la cena y de la fiesta que una pequeña parte del equipo de la serie habían planeado para esa noche.

—Yo no voy a ir —Comentó desanimada.

—¿¡Por qué no Angie!?

Preguntó Lorraine sentándose en el sofá con ellas dos.

—¿Te parece poco motivo lo que han dicho de Sasha y de mí en televisión?

Respondió siendo igual de sarcástica que cuando interpreta a Jane y habla con su madre.

—¡Angie! —Replicó en el mismo tono que lo hubiese hecho su personaje Ángela ejerciendo de madre— Hagáis lo que hagáis ellos siempre tendrán tema del que hablar y van a exagerarlo todo.

—Lo sé, pero últimamente están hablando de Sasha y de mí y no quiero darles la razón. Tengo que pensar en mi familia, ellos ven la televisión y se hacen preguntas.

—Que les den a todos ellos.

Sorprendidas, Lorraine y Harmon miraron a Sasha quien estaba en medio de ambas.

—¡No! Esperar, no me refiero a la familia de Angie. Me refiero a la prensa —Miró a Angie—. Cariño, no tienes que dejar de divertirte por miedo a que nos sigan y nos hagan fotos comprometidas.

—Sasha, creo que no es lo mejor. No quiero ir a la cena y contener mi personalidad para no dar de qué hablar. ¿Entiendes?

—Por favor Angie —Insistió—. Es viernes y al terminar la fiesta te iras a tu casa como todos los fines de semana para estar con tu familia y no regresar aquí hasta el domingo en la noche… Hazlo por mí —Pidió.

Lorraine asintió con la cabeza estando de acuerdo con Sasha.

—Voy a irme para que puedas convencerla como las tres sabemos… —Enarcó una ceja sonriendo—. Angie, espero verte esta noche, eres importante para todos nosotros.

Se puso en pie y después de depositar un cariñoso beso en las cabezas de Sasha y de Angie, abandonó el camerino.

—Angie. Por lo menos piénsalo otra vez.

—¿No vas a convencerme como Lorraine cree que lo harás? —Preguntó con aquella sexy ronca voz que la caracterizaba.

Sasha sonrió.

—No quería influir en tus decisiones con sexo, pero de acuerdo. Encantada…

Entre besos, Sasha se puso sobre el cuerpo de Angie obligándola a que esta última se acostase a lo largo del sofá. Allí estaban seguras, nadie excepto Sasha tenía llaves del camerino, y ambas habían terminado de trabajar por hoy.

N/A: Este fic cuenta con dos capítulos. Después de eso no sé si añadiré alguno más.