DISCLAIMER: Es una traducción de un two-shot llamado Prince Aaron y está en inglés. Pertenece a oliviahotchner, la cual me ha dado permiso para traducir la historia al español. Los personajes pertenecen a la CBS y a Jeff Davis, los personajes que no reconozcáis y la historia son de oliviahotchner.

PD: Hay cosas que no he podido hacer una traducción literal. Si veis algún error en la traducción, decídmelo y lo cambiaré.


Se sentó en el sofá y la sentó en su regazo, acurrucándose más cerca de su pecho. Ella lo besó desde su cuello hasta su mandíbula y sonrió cuando él gimió y apretó su agarre sobre ella. "¿De verdad te tienes que ir mañana? ¿No puedes quedarte un par de días?" Preguntó en voz baja.

Ella suspiró y sacudió la cabeza con pesar. "No puedo. Tengo que llevar a Bethany de vuelta a Londres. Yo ni siquiera la debería haber traído a este viaje. Tuve que pedir permiso a la trabajadora social. La tengo solo desde hace seis meses. Tengo que esperar otro seis meses más para hacer las cosas permanentes y tener total autonomía para moverse, viajar, hacer lo que quiera, ya sabes".

Él asintió con tristeza inclinándose para darle un beso. "Entiendo..." Él inclinó la cabeza hacia un lado teniendo en cuenta algo. "Bueno... tengo algunos días de descanso para coger y Jack está en las vacaciones de verano... si no te importa tener dos chicos estadounidenses visitándote por unos días podríamos ir..."

Ella le sonrió. "¿En serio?"

"Por supuesto. Nunca he estado en Londres y estoy seguro de que a Jack le encantaría también..." Dijo sonriéndole.

"Por supuesto que no me importa Hotch. Aunque, todavía hay algo que tenemos que hablar... ¿qué hay de Jack? ¿Cómo crees que va a reaccionar a que estemos juntos?" Ella preguntó con ansiedad.

"Está bien, en primer lugar. ¿Crees que puedes llamarme Aaron? Quiero decir, ya nos hemos besado mucho, estamos haciendo planes para el futuro... Ya no soy su jefe. Soy ¿tu novio...? Es raro, estoy viejo para ser un novio... "dijo haciendo una mueca, haciéndola sonreir.

"Está bien, Aaron... Y no creo que seas viejo. No, en absoluto..." Dijo mirándolo de arriba abajo, provocando un rubor de él.

"Claro, lo que sea..." Murmuró, ignorando su sonrisa maliciosa. "De todos modos, en segundo lugar, voy a tener una charla con Jack para explicárselo todo. Pero él es mayor, más maduro. Estoy seguro de que lo entenderá y se sentirá feliz por mí. Está obsesionado con mi felicidad..." Él dijo riendo. "Y... a él siempre le ha gustado la señorita Prentiss..."

"Es un niño muy dulce..." Ella sonrió.

Se acurrucó más cerca de él de nuevo, metiendo la cabeza debajo de la barbilla, jugando con su corbata y disfrutando de la sensación de sus dedos acariciando su espalda y su cadera. Ella suspiró y lo oyó murmurar. "¿Qué estás pensando?"

Ella no quería tener conversaciones serias en este momento. Ella no quería echar a perder lo que estaban empezando a construir juntos después de tantos años esperando. Pero ella sabía que necesitaban hablar de ello. No podían ignorar el elefante en la habitación. Todavía pertenecía a la Oficina de la Interpol en Londres y él todavía dirigía la Unidad de Análisis de Conducta del FBI en Quántico. Todavía había 3.665.18 millas entre ellos. También hay dos hijos a tener en cuenta antes de tomar cualquier decisión. Todavía hay tantas cosas para que todo vaya mal.

"Estoy pensando en la cantidad de cosas que aún tenemos que hacer entre nosotros..." Murmuró y lo oyó suspirar.

"Lo sé, cariño". Dijo en voz baja. "Y sé que no vamos a ser capaces de resolver nada en este momento o estar juntos de forma permanente en este momento tampoco. Pero creo que podemos encontrar una manera de hacer las cosas hasta entonces y cuando llegue el momento, tomar la decisión que será lo mejor para todos nosotros".

"¿Cómo Aaron? ¿Cómo podemos estar juntos y no estar juntos, al mismo tiempo?" Ella pidió que se sentara derecho para mirarla correctamente.

"No somos adolescentes Emily. Confío en ti. Sé que va a ser terrible a veces con la distancia, pero sé que somos lo suficientemente maduros como para respetarnos el uno al otro. ¿Y con la vida que tenemos? Honestamente bebé, con la rutina, con el trabajo y nuestros hijos, sólo tener a alguien a quien llamar, enviar un texto o incluso sólo para pensar cuando las cosas son duras es todo... "Él discutió con ella.

"Lo sé..." Ella asintió sabiendo que tenía razón. "Hay días en que sólo quiero renunciar. Siento que no tengo a nadie con quien hablar, para compartir cosas... es difícil. Es solo..."

"Exactamente... No tiene que ser más..." dijo besándola. Devoró su boca con pasión, tratando de hacer que todos los años que desperdiciaron debido a sus miedos y terquedad. "Es tan bueno para ser capaz de hacer esto... de tenerte aquí, tan cerca... para poder tocarte y besarte y sentir que..." Dijo dándole besos por toda la cara. "Te amo tanto, Emily... mi Emily..." Dijo con reverencia, mirándole la cara y su cuerpo. "Eres mía..." Respiró. "Eres finalmente mía..."

Canturreó y le devolvió el beso a fondo, disfrutando de la sensación de sus manos sobre ella, de su cuerpo bajo sus manos como ella siempre quiso. Su pecho era tan firme y fuerte, con los hombros tan duros y el pelo tan suave y liso. Le pasó las manos por todo su cuerpo, su boca repasó todos los recovecos de la boca, saboreando su sabor a café y menta. Ella no quería dejarlo ir.

Se separaron sin aliento, jadeando y se apoyaron en sus frentes. "Por favor, dime que estás dispuesta a hacer este trabajo..." Susurró con suerte.

Ella lo miró y vio el deseo en sus ojos. Todavía no podía creer que este hombre estaba aquí, suplicando que le diera una oportunidad. "Por supuesto que quiero, Aaron..." Ella susurró. "Estoy asustada..."

"¿De qué estás asustada?" Le preguntó con el ceño fruncido.

"¿Qué pasa si no podemos hacerlo? ¿Y si empezamos esto a distancia, pero nunca ser capaces de ir más lejos? No es sólo conmigo. Tengo a Bethany y si dejo que se acostumbre y tí y ¿y dejamos de funcionar? Ella adora el suelo por el que pasas. No puedo dejar que mi bebé se quede con el corazón roto, Aaron".

Él le sonrió. "Eres realmente una madre". Ante su ceño fruncido, continuó. "Un padre siempre pone a sus hijos por delante. Eres una gran madre, amor. Entiendo tus preocupaciones, Emily, y yo no puedo decir que no vamos a tener problemas, que no vamos a luchar o incluso que haremos que esto dure para siempre. Diablos, yo estuve casado durante casi veinte años y un día llegué a casa y mi esposa me había dejado". Él respiró profundamente. "Vamos a luchar, vamos a tener que hacer sacrificios y algún día vamos a tener que decidir cuál de los dos tendrá que dejar todo atrás y mudarse". Ella asintió con la cabeza y miró hacia abajo. Reflexionó sobre cómo continuar. "Yo... he estado pensando últimamente acerca de aceptar la jubilación que me ofrecieron cuando Haley falleció..."

Ella negó la cabeza y lo miró con incredulidad. "¿Qué?"

"He estado pensando... He estado haciendo este trabajo durante tanto tiempo y que me costó mucho, ya sabes. Jessica sustituyó a Haley y prácticamente crió a Jack sola y eso no está bien. Me he perdido casi toda su infancia y yo no quiero perder su adolescencia también. Y estoy cansado. Honestamente, tengo casi cuarenta y seis años y no duermo bien, no como adecuadamente. No sé lo que es tener tiempo para mí, ya sabes. Me gustaría tener tiempo para disfrutar de las cosas, a leer cosas que no tengan asesinos en serie en el mismo. Me gustaría ser capaz de prometer cosas a mi hijo que realmente voy a lograr. Me gustaría llevarlo a un viaje, jugar al fútbol con él sin ser llamado en cualquier momento por un caso o no tener tiempo para llevarlo a comer helado después. Creo que es el momento para mí para poner el Agente Hotchner en stand-by y ser Aaron, el padre, el amigo, el compañero".

"Nunca pensé que te oiría decir que querías retirarte". Ella dijo conmocionada.

"Creo que es lo más inteligente, no es saber lo que quieres hacer, pero darte cuenta de cuándo lo debes dejar. Llevo en la BAU durante más de trece años. Es hora de seguir adelante... hay cosas en la vida que son más importantes".

"Guau…"

"Sí... Por supuesto que puedo darme por vencido. Llevará tiempo... tengo que entrenar a alguien para reemplazarme y asegurarme de que todo va a estar bien sin mí... Pero cuando me vaya, voy a ser capaz de moverme..." se apagó.

Le tomó unos segundos para entender lo que estaba diciendo. "¿Quieres decir a Londres?"

Él asintió con la cabeza lentamente. "Sí... Sé que sería un gran ajuste para Jack y esa es mi gran preocupación, pero creo que podemos hacerlo... lo que podría convertirse en un problema es la familia de Haley, ya pesar de que es mi derecho como su padre, llevarlo lejos, ellos sentirían mucho su ausencia. Especialmente Jess, así que tendría que trabajar esto con ella por un tiempo... hacerle entender, llegar a algunos arreglos para asegurar su contacto con él... "

"Aaron, espera, espera un minuto". Ella lo detuvo. ¿Estaba considerando seriamente en mudarte al otro lado del océano con tu hijo de once años de edad para vivir con ella? "No quiero saltar sobre cualquier decisión. Es una gran oportunidad para ti y especialmente para Jack y no se puede. Jessica estará devastada, no teniéndolo cerca, no es justo, ya perdió a su hermana, él es lo único que tiene de ella... "

"Lo sé Emily pero tengo el derecho a vivir mi vida también y no puedo estar lejos de mi hijo". Razonó.

Ella lo miró por un segundo antes de susurrar. "estás realmente seguro acerca de esto, ¿verdad?"

Él frunció el ceño por un segundo. ¿No podía ver que él realmente quería estar con ella? Se enderezó y tomó sus manos entre las suyas. "Emily, ¿conoces la primera vez que supe me sentía algo más por tí?" Ella sacudió la cabeza lentamente. "Cuando oí a Morgan gritarme en el bullpen y me pareció que estabas en ese recinto con ese sociópata. Supe entonces que la opresión que sentía en mi corazón no era normal. No era algo que debería sentir si se trataba de un subordinado. Y cuando él te estaba pegando... ¿la perspectiva de vivir en un mundo en el que tú no estabas? fue un infierno, Emily. Fue demasiado. Tomó cada habilidad de compartimentación para calmarme y no estallar en ese lugar y matar a ese hijo de puta y llevarte fuera de allí".

"Aaron..." Ella susurró entre lágrimas.

"Y con los años el cariño creció y siempre erais tan increíbles... todo lo que hicieron por mí después de Foyet. Todo lo que hicieron por mí y Jack después de que Haley muriera... simplemente no me diste ninguna otra opción más que amarte y por eso me acerqué a ti y te dejé entrar... yo sabía que nunca podría arriesgar tu carrera tratando de hacer algo así que me contenté simplemente con ser tu amigo... teniéndote cerca... "Él le acarició la mejilla y le limpió una lágrima que caía. "Y cuando pasó lo de Doyle... yo estaba tan asustado. Pensé que no lo lograríamos. Pensé que iba a perderte y era tan difícil de soportar... es por eso que hice lo que hice. Tenía que protegerte, no importa lo que costó".

"Voy a estar siempre agradecida por eso..."

"Y lo haría de nuevo. Te amo Emily. Hemos perdido tanto tiempo. Estoy cansado de eso. Quiero estar contigo... Quiero vivir mi vida contigo y criar a nuestros hijos juntos. Quiero al ser una figura paternal en la vida de Bethany y yo quiero que lo seas para Jack. Quiero que seamos una familia. Lo quiero todo... Si tú no, lo entenderé. Pero yo lo tengo claro desde el principio".

"yo también lo quiero. Pero no quiero que te mudes..." Ella dijo.

"Em..."

"Quiero volver". Dijo mirándolo.

"Pero ¿qué pasa con tu trabajo? ¡Es la Interpol!" El exclamó.

"Lo sé. Y lo he estado haciendo durante casi cuatro años y que no llenó todo lo que tenía en mi pecho desde Doyle". Ella confesó. "Bethany lo hizo. Y ahora, tú. Y eso es lo que necesito. Puedo conseguir un trabajo aquí otra vez. Si vamos a constituir una familia prefiero que sea aquí. No, no tengo a nadie aparte de Bethany y ella no tiene a nadie más que yo. Y ella es más joven. Se ajustaría el cambio mejor que Jack. Y el no perdería el contacto con Jessica. Además, yo extraño a mi familia. El equipo se convirtió en mi casa. Lo echo de menos. Vivir aquí de nuevo me gustaría verlos más a menudo. No sé si volvería a la BAU, probablemente no. No con mi hija. Es demasiado peligroso. Pero hay otras opciones..."

"¿En serio?"

Ella asintió. "Lo estoy. Tengo que esperar seis meses por Bethany pero es probable que tenga tiempo de ordenar todo en la Interpol. Entonces me puedo mudar. ¿Qué opinas?"

La miró sin expresión durante unos segundos antes de dejar que apareciera en sus labios una gran sonrisa. "Creo... creo que me quiero casar contigo".

"Q-qué?" Se atragantó.

"¿Quieres casarte conmigo, Emily Prentiss?" le preguntó mirando directamente a los ojos llorosos.

Ella tragó el sollozo y ella misma se lanzó a él, besándolo con fuerza. "Sí, por supuesto... me casaré contigo. Dios. ¡Me casaré contigo!" Ella dijo riendo.

Él le sonrió y la apoyó de nuevo en su pecho. "Entonces, señora próximamente-Hotchner" comenzó y ella sollozó de nuevo "tenemos seis meses para planificar el resto de nuestras vidas".

Ella sonrió y se acurrucó más cerca de él. Ella finalmente había encontrado a su príncipe.

SEIS MESES DESPUÉS…

"¡Vamos Bethany! ¡Tenemos que irnos! ¡Nuestro vuelo sale en noventa minutos!" Emily gritó a su hija, mirando al otro lado de la habitación para ver si ellas no estaban olvidando nada.

Tuvieron que pasar seis meses, como estaba previsto, pero por fin iban a casa. La adopción de Bethany había terminado y tenía el derecho de llevarla a donde ella quería sin pedir permiso. Había hablado con Clyde justo después de regresar de DC y aunque estaba un poco decepcionado por haberla perdido otra vez él la apoyó y le ayudó a encontrar un reemplazo y entrenarlo para tomar su lugar cuando se fuera.

Durante esos meses no podía hacer ningún otro viaje a Washington DC, debido a Bethany pero Aaron se aseguró de pasar al menos un par de días de cada mes en Londres. Él sólo trajo Jack la primera vez y otra más debido a la escuela, pero el chico estaba completamente enamorado de su nueva hermanastra y había aceptado a Emily muy bien.

Ellos usaron todos los recursos que pudieron para mantenerse en contacto a diario. Debido a la diferencia horaria se llamaban en horas específicas, para ponerse al día, hablar de su día y hablar con los niños. Aaron trató de llamar todas las noches en la hora de acostarse de Bethany para contar sus historias y desearle buenas noches y la niña siempre lo esperaba con ansiedad para ello. Siempre hablaba de su Papá Príncipe a todos en la escuela y todos los que querían oír.

Por supuesto que tenían sus momentos difíciles. Lucharon a veces, sobre todo debido a las inseguridades de Emily pero siempre encontraron una manera de arreglar las cosas.

Su peor pelea fue una vez cuando Bethany se puso muy enferma y tuvo que ser hospitalizada. Emily lo llamó, pero él estaba en el medio de una negociación de rehenes y no lo vio hasta casi cuatro horas más tarde. Cuando él volvió a llamar, se estresó debido a que dos de los rehenes fueron asesinados y el sospechoso casi había escapado, Emily respondió histérica, acusándolo de no estar a su lado cuando lo necesitaba y preguntando qué clase de padre que quería ser para su hija cuando él no estaba allí cuando lloraba por él, asustada en una cama de hospital.

Y él le gritó diciendo que ella no estaba siendo justa, que sólo estaba haciendo su trabajo y que no sabía que su Bethany estaba enferma. Y ella gritó diciendo que él siempre puso su trabajo primero y que por eso Haley le había dejado y estaba contenta de que lo había detectado a tiempo.

Y más tarde esa noche, cuando estaba sentada en la silla de visita incómoda al lado de la cama de Bethany, la puerta se abrió y una Hotch muy cansado y sucio entró en la habitación y se arrodilló a su lado. '¿Cómo está ella?' preguntó con los ojos vidriosos y ella no pudo no caer en sus brazos y llorar sobre sus hombros, susurrando que lo sentía, que estaba asustada por su hija y que no creía nada de lo que ella le había dicho, que sólo estaba frustrada. Y él le tomó la cara entre las manos y se disculpó por no responder a ese maldito teléfono y por no estar allí para ella. Y pasaron treinta y seis horas junto a Bethany y cuando fue dada de alta se fueron a casa y se quedó dos días más con ellos.

Y justo antes de que cogiera su vuelo de regreso tomó a Emily en sus brazos y la besó con fiereza justo en el medio de la zona de embarque y él le dijo que era lo que le importaba, junto con sus hijos, y ya estaba formando a Morgan para reemplazarlo porque el trabajo no era importante ya. Su familia lo era. Y ella lloró y dijo que le quería más que nada y que no podía esperar para estar con él para siempre.

Y ahora aquí estaba ella. Todas sus cosas embaladas y enviadas y en menos de doce horas estaría en sus brazos y sería finalmente permanente. Miró el anillo de plata con un diamante de corte princesa y sonrió al pensar que en quince días tendría otro anillo en su dedo, un anillo que marcaría su compromiso y amor. Y finalmente sería la señora de Aaron Hotchner. Ella en verdad no creía que la vida podía ser mejor.

"Estoy lista mamá..." Oyó a su niña diciendo que bajaba con una pequeña bolsa de color rosa en la espalda y la muñeca blanca como la nieve aplastada en su pecho.

Ella sonrió y la tomó en brazos, tomando su bolso de mano y dirigiéndose a la puerta, contando los minutos para ver sus príncipes.


Hotch se paseaba por la zona de llegadas, mirando su reloj con ansiedad. Ellas deben llegar en cualquier momento y no podía esperar. Finalmente los seis meses habían pasado y Emily y Bethany volvían a casa definitivamente. Habían pasado por algunos momentos difíciles como predijo pero se las arreglaron para trabajar a través de todo y permanecer juntos.

Emily había dejado la Oficina de la Interpol y tenía una oferta en la Academia. Ella aceptó porque era el trabajo menos peligroso que podía conseguir en la Oficina y tenía un menor número de horas por lo que estaría más en casa.

Hotch finalmente se había retirado y Morgan había tomado su lugar como Jefe de la Unidad. No podía estar más feliz. El primer día que tuvo después de su retiro se despertó después de las ocho y media, por primera vez en Dios sabe cuántos años. Comenzó un libro de Vonnegut que Emily había recomendado y actualmente usaba su cocina para cocinar comida real. Comió lentamente, saboreando su comida y no sólo masticó y tragó. Fue a recoger a Jack a la escuela y luego los dos se fueron al cine y tuvieron pizza para cenar después. Y él estaba en casa para poner a su hijo en la cama y cuando se acostó en su propia cama esa noche se sentía tan ligero y feliz de que él sabía que había hecho la elección correcta.

"¡Papi!" Oyó su voz antes de verlas y su rostro se iluminó con una enorme sonrisa.

Las miró, finalmente, vio finalmente su amplia sonrisa y ella estaba corriendo hacia él, su vaporoso vestido rosa de flores y su cola de caballo balanceándose de lado a lado y entonces ella estuvo en sus brazos y sintió que su corazón se hinchaba con amor. "¡Mi dulce princesa!" Respiró en su pelo y cerró los ojos, sonriendo satisfecho.

"Eh, tú". Él abrió los ojos y fue recibido con la sonrisa más hermosa en el mundo. Cogió a Bethany en un lado y la tomó en sus brazos, todavía no creer que sostenía sus dos niñas y que no tuvieran el reloj en su contra, que estaban aquí para decirlo y no desaparecer de nuevo.

"Corazón". Le susurró al oído y ni siquiera se molestó en ocultar las lágrimas que habían brotado en sus ojos. Estaba tan feliz. "No puedo creer que ya estás aquí..."

"Yo tampoco..." susurró ella y se apartó para mirarlo. Su cara era tan hermosa, sus ojos estaban brillando y él no podía esperar. Él llevó su boca a la suya en un beso dulce, lleno de amor y agradecimiento.

Se separaron y él sabía, en ese momento, con ambas en sus brazos, que todo estaba justo donde se supone que estaría.


Más tarde esa noche, estaban acurrucados en su cama, ambos niños en sus habitaciones ya dormidos después de una cena familiar y dos películas en el sofá. "Realmente me gusta esta casa..." le susurró. La había sorprendido, llevándolos a esta casa de cinco dormitorios y no su a viejo apartamento como ella esperaba. Dijo que tenía mucho tiempo para planificar su vida juntos después de dejar la BAU y no podía dejar que sus dos princesas vivieran en su pequeño y aburrido apartamento. Así que se fue a buscar casa y cuando la encontró, supo que iban a vivir allí.

"Sabía que lo harías..." Él susurró a su vez. "¿No estás realmente enfadada porque que he comprado esto sin ti?"

Ella lo miró y sonrió. "Por supuesto que yo no lo estoy... fue muy dulce. Y honestamente es todo lo que lo que he deseado en una casa".

Él le sonrió y le dio un beso, porque finalmente pudo hacerlo, porque estaba finalmente aquí, porque era finalmente feliz, porque por fin tenía su familia completa. Cuando hicieron el amor esa noche, cuando sintió su piel suave bajo sus dedos y oyó sus gemidos acallados por sus besos, él dio gracias a Dios por haberle dado otra oportunidad, por permitirle encontrar su felicidad con esta mujer y para él lo que demuestra que a veces las hadas de los cuentos eran reales. Tenía la prueba en este momento. Y que iba a vivir su felices para siempre...


Aquí llegó el fin del two-shot.