Hola ^.^, les traigo otro fic de mi pareja favorita en SSLC. Kardia y Degel.

Advertencia. Es un fic de temática yaoi. Con clasificación de M por posible lemon y un poco de violencia (más adelante).

No será un fic muy largo, ocho o nueve capítulos máximo, espero les guste.

Los personajes son propiedad de Masami Kurumada y Shiori Teshirogi.

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Parque

Pop Degel

La vista se le nublaba, el peso en su hombre se volvía insoportable, las pisadas más lentas y el cuerpo más pesado. Estaba exhausto, terriblemente agotado. Sus maltrechos pasos le llevaron hasta un parque, con mucho esfuerzo llego hasta una banca y se sentó, había alguien más ahí pero no le importo.

Era un día caluroso, el sol estaba en su máximo apogeo y esa banca era la única que contaba con la sombra de un frondoso árbol, solo descansaría un poc…. zzzzzzz.

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Pop Kardia.

¡Maldito y estresante trabajo! odiaba hacer cuentas, sus dedos manejaban con maestría la calculadora, anotando los resultados en una libreta. Alguien se había sentado a su lado pero no le dio importancia, el parque era libre. Termino, 3-4 ecuaciones, los resultados no le convencían pero ya los checaría en su casa, ahora solo quería comer.

Estaba por guardar sus cosas cuando…una ligera presión en su hombro capto su atención, la persona a su lado se había dormido… ¡y lo usaba como almohada! Una vena palpo su frente, no tenía tiempo para tratar con idiotas.

-¡óyeme imbe…!

-¡shit! ¡Ay niños presentes!

Unas señoras que pasaban a su lado le reprendieron. El peli azul les miro con odio y les mostro la lengua cuando estas se alejaron. Dirigió su vista al chico que le usaba como almohada…era lindo.

-mmm

El joven se movió un poco, acomodándose, Kardia bufo molesto, una maquiavélica idea broto en su mente, empujarle y dejar que se fuera de nariz contra el piso. Sonrió con malicia, movió su hombro de manera que el menor quedo más pegado a él, le removió los lentes (se veían caros y no quería pagar por ellos) solo un ligero empujoncito y listo. El mocoso aprendería a no usar a las personas como re cargadera.

Estaba por realizar su travesura cuando algo le llamó su atención, las enormes ojeras bajo las pestañas, parece que no había dormido en mucho tiempo. Pero no era lo único, si veías con atención notabas las ligeras mordidas en el labio producto del estrés, a él también le ocurría, mordía su labio al intentar concentrarse y buscar una solución, en ocasiones era tan fuerte que se sacaba sangre. Su piel se veía pálida y estaba muy delgado ¿estaría comiendo bien?

Se quedó contemplando al chico, parece que tenía su edad. Posiblemente estudiaba, por algo la mochila…o vendía drogas y ahí cargaba la mercancía, ya le preguntaría cuando despertara, era un poco más bajo, su cabello verde y muy liso…se veía bien, algo demacrado, pero bien. La ropa que traía era de marca…tal vez si vendía drogas.

Un suspiro cansado broto de sus labios ¿ahora que hacia? Podría recostarlo en la banca y marcharse, pero… qué tal que un pervertido aparecía y se aprovechaba de él, o peor, que tal si la policía se lo llevaba por pensar que estaba ebrio, ¡uf! ni hablar, tendría que esperar hasta que despertara ¿Cuánto podría tardar?

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Pero el peliverde sí que tardo, Kardia tuvo tiempo de revisar sus anotaciones y corregirlas, se tragó la vergüenza de las miradas soñadoras que les dedicaban algunas jovencitas…y jovencitos, aprecio una disputa por un columpio de unos niños y una pelea de pareja de unos ancianitos, antes de retirarse el hombre le dijo que el peliverde estaba mejor así…calladito y dormido. Ya empezaba a atardecer y el chico no desertaba ¿pues desde cuando no dormía?

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pop Degel

El dolor en sus parpados se esfumo, así como la migraña, las piernas ya no le dolían y el calor disminuyo ¿Cuánto abría dormido? 5-10 minutos máximo, un ligero bostezo broto de su boca, se acomodó mejor en su lugar y tallo sus ojos.

-mmm… ¿Qué hora será? pregunto a la nada.

-déjame ver (checando su reloj)-las 5:30, sí que dormiste.

Los ojos violetas se abrieron sorprendidos, nervioso y asustado se giró a ver a la persona junto a él, sin despegar su cabeza.

Era un joven de cabello ondulado y azul, tan largo como el suyo, con unos ojos turquesa muy brillantes, piel bronceada y rasgos dignos de un héroe griego. El joven le sonrió alegre, mientras le colocaba las gafas, de verdad parecía un adonis, pero…

El golpe se escuchó con fuerza, por fortuna el lugar se encontraba casi vacío, solo un barrendero circulaba por ahí, recogiendo los botes. El hombre suspiro y continúo su camino, otra pelea de pareja, no podían resolver los problemas en su casa.

-¿Qué diablos te pasa? ¿Por qué me pegas?

-¡por que! tu maldito pervertido, ¿Cómo te atreves a tocarme?

Degel le regalo otro golpe, cortesía de su mochila. Kardia se levantó furioso y le arrebato su arma.

-óyeme maldito cuatro ojos malagradecido, todavía que me quedo a cuidarte y te permito usarme como almohada y así me lo agradeces.

Degel le miro sorprendido, el chico parpadeo antes de abrir la boca.

-¿de qué hablas?

-ah, es broma no.

Pero la cara de confusión en el menor le respondió, parece que si estaba cansado.

-ok, te refresco la memoria. Yo estaba tranquilamente sentado haciendo unos pendientes cuando… ¡tú llegaste y te sentaste a mi lado y en menos de un segundo te quedaste dormido! hasta me babeaste…mira.

Kardia le señalo una ligera manchita en su solapa.

El francés le miraba sorprendido, si recordaba haber llegado al parque y sentarse, después… ¡hay no! parece que su cansancio llego al extremo. Pero no fue su culpa, estaba exhausto, se le habían juntado exámenes y trabajos, llevaba varios días sin dormir y…

La vergüenza se reflejó en su rostro, bajo la cabeza apenado ¡esto no era cierto! El peli azul le miraba satisfecho, parece que le había bajado los humos.

-tsk, me largo, muero de hambre y no tengo tiempo para tratar con locos, escupió burlón.

Degel le miro molesto, ese maldito arrogante, nadie le pidió que…Mordió su labio, no quería decirlo pero…

-gra…

Pero Kardia no le dejo terminar, le arrojo la mochila directo a la cara. El peliverde apenas si la alcanzo a detener.

-olvídalo niño, adiós.

El heleno paso a su lado, caminando con orgullo.

Degel apretó el bulto en su pecho, eso fue humillante. Tomo un respiro, era momento de regresar, sus padres estarían preocu…

¡plafff!

-sí, son tan suavecitas como imagine… ¡ahora estamos a mano!

Kardia salió corriendo del lugar, antes de que el chico quisiera matarlo por la nalgada que le acababa de dar…pero que esperaba, se merecía un bono por haberle cuidado ¿no?

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Y se acabó este primer capítulo, espero fuese de su agrado.

Intente enfocarme en las personalidades, pero creo que no me quedaron muy bien. Mejorare en el siguiente, lo prometo.