ORCS and ELVES
Capítulo 12: Troll Huntress
-¿Quién eres tú!?- pregunto el líder del grupo a la criatura que se encontraba justo enfrente de ellos sentada en una roca lejos del brillo del fuego, esta criatura sonrió y soltó una pequeña carcajada que puso a todo el grupo de Orcos en alerta- ¿De qué demonios te ríes?- pregunto Laxus claramente enojado por la actitud de aquel individuo.
-Ustedes Orcos siempre tan desafiantes y arrogantes, se creen superiores a todos solo por tener brazos del tamaño de un puto tronco- dijo aquella criatura riéndose abiertamente del grupo de guerreros ante el- Todos los de su raza son iguales, solo son matones descerebrados que piensan únicamente con el pene, tal vez por eso es tan fácil atraparlos- agrego este mientras se retorcía de la risa en su lugar.
-¿"Atraparlos"?- repitió confundido uno de los integrantes de aquel escuadrón
-Ups… lo lamento estoy hablando de mas, suele pasar cuando tengo un buen día- dijo la criatura cubriéndose la boca- pero ¿pueden culparme?, me encanta cazar orcos en las noches de luna llena- agrego este ser soltando una carcajada que helaría la sangre de cualquiera.
-Thunder Charge!- grito Laxus cargando su lanza con electricidad para luego arrojarla hacia el enemigo, este esquivo el ataque saltando hacia el techo de la caverna
-No puedo creerlo, esquivo tu ataque Laxus!- exclamo sorprendido Elfman al ver como aquella criatura se desvanecía en la oscuridad
-No le estaba apuntando a el- dijo el líder del grupo sonriendo levemente
La lanza electrificada impacto la pared destrozándola al instante, la potente carga eléctrica que estaba dentro se propago a lo largo de la pared húmeda de aquella oscura caverna alcanzando los cristales enormes que adornaban la superficie, cargándolos con tanta magia que empezaron a emitir una luz cegadora.
-Jeje…esa pequeña elfa sí que sabe varias cosas útiles- sonrió el rubio cruzando los brazos al recordar lo que la pequeña peliazul le contó a Gajeel anteriormente.
-Nada mal, señor!-grito la voz desde el techo con un tono menos alegre esta vez- a ver que puedes hacer contra esto!- desde su ubicación desconocida aquella criatura arrojo varios objetos de un tamaño diminuto que se hundieron en el suelo rocoso.
-…oh no- pensó Zeref al reconocer lo que eran esos objetos- SALTEN!- grito este agarrando a su hermano desprevenido para arrojarlo hacia atrás, todos los demás hicieron lo que este les ordeno sin pensarlo siquiera. De pronto un brazo gigantesco hecho de roca y barro salió del suelo, seguido por varias otras extremidades de igual tamaño solo que hechas de otros minerales distintos.
-¿QUE DEMO…- Grey no pudo alcanzar a terminar su oración cuando una mano enorme atrapo su pierna, evitando que este escape junto al resto.
-Son Golems!- exclamaron los Orcos en shock al ver como las criaturas hechas de barro y roca surgían del suelo mientras soltaban un largo y tortuoso gemido, estas criaturas superaban a los orcos en cuanto a tamaño se trataba, cosa irónica teniendo en cuenta sus piernas tan cortas a comparación de sus enormes brazos y torso, el cual también comprende a la cabeza de la criatura ya que estas no tenían cuello. Estos seres variaban mucho en cuanto a diseño, siendo que algunos por ejemplo solo tenían un solo ojo mientras que otros dos, unos tenían boca mientras que otros no, etc.
-Mierda, no pensé que este idiota tuviera Homer Gélems- maldijo Laxus en voz baja
-Este sujeto debe ser alguien muy especial, los Trolls normalmente no son capaces de utilizar magia- comento Lily impresionado a la vez que sacaba su espada listo para la batalla- Solo espero que Gajeel y Levy tengan cuidado, estos tipos son peligrosos- pensó el hombre pantera tragando saliva.
Mientras tanto con Levy
-Juro en nombre de Chernabog que te matare de la forma más horrenda imaginable, maldita zorra!- grito una voz femenina cargada de ira desde las sombras
Levy sonrió casi perversamente mientras pateaba los restos del troll que ella petrifico hace unos segundos.
-Así que aún siguen creyendo en ese payaso de Chernabog - dijo la elfa remarcando la palabra payaso, cosa que no pareció agradarle a los trolls escondidos en las sombras- Por cosas así es que están condenados a vagar en cuevas apestosas por toda la eternidad mientras nosotros gozamos del mundo exterior… en cierto sentido me dan lastima, vaya vida más patética- dijo la joven peliazul con un torno burlón y sarcástico
-CALLATE!- grito una de la voces desde las sombras
Las orejas puntiagudas de la joven elfa se movieron levemente al detectar un sonido extraño, al instante la joven dio un salto hacia atrás esquivando a tiempo a la criatura que se abalanzó sobre ella a toda velocidad destrozando el suelo rocoso, aquella criatura soltó un gruñido molesto al ver que había fallado, luego tomo impulso nuevamente y se lanzó hacia arriba para desaparecer nuevamente en las sombras del techo.
-Eso estuvo cerca- pensó Levy buscando a sus atacantes con la mirada
CRACK
El suelo bajo la elfa tiemblo violentamente, haciendo que la joven peliazul se tropiece, casi cayéndose al suelo debido a que la tierra se levantó de forma muy repentina.
-TE TENGO!- grito uno de los Trolls saliendo de las profundidades de la tierra, esta criatura pateo fuertemente la espalda de la joven peliazul antes de que ella pueda siquiera reaccionar.
-AH!- grito la elfa al recibir el impacto en su espalda, Levy se mordió el labio inferior con rabia y se dio la vuelta al instante lista para atacar a aquel Troll.
El ser ante Levy soltó una carcajada perversa al ver la expresión en el rostro de la joven, este empezó a acercarse lentamente hacia la pequeña elfa, la cual retrocedía lentamente a medida que este avanzaba.
-Pobre Elfita chiquitita, ¿te dolió el golpe?- pregunto el Troll inclinando su cabeza al costado a la vez que su sonrisa se agrandaba, los compañeros de esta criatura empezaron a bajar lentamente del techo rodeando a Levy.
La pequeña elfa ahora podía apreciar de mejor manera al cuerpo de aquellos Trolls, siendo que estos eran criaturas humanoides con un físico trabajado casi a la par de los Orcos, con grandes colmillos sobresaliendo por sus labios anchos, orejas puntiagudas y adornadas con algunos huesos, cabellera casi inexistente con la excepción de la hembra del grupo, la cual realmente no era muy diferente a los otros dos machos, salvo tal vez por sus caderas más marcada, pechos y dedos, los cuales eran más largos en sus manos.
Levy no podía ver de qué color era la piel de aquellos seres debido a la oscuridad de la caverna, pero si podía notar que habían rocas incrustadas en varias partes del cuerpo de los machos, por ejemplo, los codos tenían rocas filosas pegadas y en lugar de tener uñas estos tenían unas rocas blancas con la punta achatada. La joven peliazul trago saliva al notar como las uñas de la hembra se alargaban como navajas, lista para atacar, Levy busco con la mirada alguna cosa en el cuerpo de aquellos seres que pueda serle de utilidad, alguna debilidad o herida abierta, pero no pudo encontrar nada peculiar más allá del hecho de que los dos machos Troll estaban completamente desnudos.
-¿Acaso estos monstruos no conocen que es la decencia?- pensó Levy apartando la mirada apenada- Este no es momento para distraerte con tonterías Levy, piensa algo ahora o nos van a mataran!- se gritó Levy mentalmente
-¿Qué le paso a esa actitud tan prepotente que tenías hace unos segundos?, ahora hasta te ves asustada- dijo la Troll hembra lamiéndose las garras, la joven elfa peliazul noto la intensa sed de sangre que despedía aquella mujer a comparación de los dos machos que la acompañaban, los cuales simplemente sonreían perversamente sin despedir tanta hostilidad como ella.
-¿Cómo demonios es que había uno de ustedes bajo tierra?, yo vi que algo salto nuevamente hacia el techo- pregunto Levy volteando la cabeza para ver al troll que se acercaba hacia ella a sus espaldas mientras no dejaba de dar vuelta su cuerpo para evitar ser atrapada por alguno de los otros.
-Fue muy fácil realmente- dijo el troll que había salido de debajo de la tierra- lo que tu viste "saltar" no fui yo, yo quede enterrado bajo tierra cuando me tire hacia ti- explico el Troll mientras las rocas filosas de sus codos, hombros y dedos empezaban a salir.
-P-Pero eso no tiene sentido- dijo Levy bloqueando el ataque de la Troll hembra con su báculo- AH!- exclamo la joven elfa empujando a la hembra para luego agacharse rápidamente, evitando así el golpe de una de las criaturas masculinas que estaba detrás de ella.
La elfa peliazul se escabullo entre las piernas del Troll, este fue derribado luego por un potente golpe que le propino Levy en la cabeza usando su báculo.
-El idiota de Gajeel tenía razón, esto sí que sirve como un arma- pensó Levy complacida al ver como su rival caía desplomado al suelo debido al golpe
-Quarz idiota!- exclamo la hembra enfurecida
-Cierra el puto hocico Alpha!- grito el otro Troll macho haciendo que la hembra se calle- esta pequeña zorra es más fuerte de lo que pensábamos…. debe ser por eso es que el Maestro nos ordenó que la atraigamos hacia nosotros separándola del grupo de Orcos- dijo este mirando a la joven elfa de pies a cabeza.
-….¿Maestro?- pregunto Levy mientras trataba de recuperar el aliento –Mierda, siento el cuerpo muy pesado, parece que hace tiempo que no hago ejercicio- pensó la elfa limpiándose el sudor que caía por su frente
-¿Qué propones que hagamos con ella?- le pregunto Alpha a su compañero
-Creo que es hora de mostrarle a esta pequeña putilla cual es el verdadero poder de un Troll- dijo el macho sonriendo perversamente, la hembra pareció captar cual era el mensaje ya que esta también empezó a sonreír maléficamente.
-Bien dicho Beta- dijo Alpha acercándose al macho, este agarro la mano de la hembra con sumo cuidado para luego atraerla hacia él de tal forma que casi parecía algún tipo de danza, la joven elfa observaba con confusión a las dos siluetas que bailaban en la oscuridad.
-¿Qué están haciendo?- pensó Levy poniéndose en guardia
-Joven elfa… ¿acaso no sabes que-
-…nosotros los Trolls somos más fuertes unidos?- dijeron los dos trolls simultáneamente, casi como si fueran un mismo individuo
-¿Q-Que está pasando?- pensó la elfa asustada al ver como los dos cuerpos se fundían en uno solo de gran tamaño
-Somos Omega- dijo la criatura resultante de dicha fusión
-Es-Eso es nuevo- pensó Levy en shock
-Deberías ver la expresión que tiene tu cara, das pena- dijo la criatura acercándose a la elfa, esta salió de su estupor cuando vio que esa fusión tenía 4 pares de brazos y ojos, los cuales brillaban intensamente en la oscuridad.
-A-Ahora lo entiendo… ese amigo suyo que me ataco estaba fusionado con uno de ustedes- dijo la peliazul viendo el cuerpo inerte del tercer troll- cuando el impacto el suelo una de las parte se separó mientras que la otra quedo enterrado bajo tierra, por eso vi que alguien saltaba de aquel cráter- agrego Levy dando una voltereta hacia el costado, evitando ser golpeada por aquella nueva criatura.
El golpe del Troll fusionado impacto la pared de la caverna destrozando así a los cristales que estaban incrustados en su superficie, pero eso no fue todo ya que en ese mismo momento el suelo rocoso debajo de Levy se transformó en un puño gigante hecho de roca, el cual impacto a la joven de forma violenta, casi dejándola sin conocimiento al instante.
-M-Mierda- murmuro Levy escupiendo sangre a la vez que caía de espaldas al suelo frio
-¿Eso te dolió?- pregunto el Troll pateando a la joven que estaba en el suelo, esta soltó un alarido que retumbo en las paredes rocosas de aquel lugar.
-M-Mierda n-no tengo suficiente magia como p-para usar otro S-Solaris- pensó la pequeña elfa mientras trataba de que sus ojos no se cerraran- F-Fui muy estúpida al haber u-usado ese h-hechizo al principio de la pelea… AGH!- exclamo Levy al sentir como Omega apretaba su cuello con su pie
-El Maestro nos dijo que solo necesita usar tu cuerpo, así que tu vida realmente nos importa una mierda… lo lamento, pequeña zorra- dijo Omega viendo con placer morboso a la joven retorciéndose a sus pies- MUERE-
-NOOOOOOO!- grito Levy tratando desesperadamente de zafarse
-Helheim!-
Un gigantesco objeto hecho de acero surgió de las sombras golpeando a Omega en el rostro con una fuerza demoledora.
Levy, que apenas estaba consciente, sintió como alguien la levantaba del suelo delicadamente, esta volteo un poco la cabeza para ver el rostro de su salvador.
-Primer día fuera de ese mercado y ya estas hecha un desastre, la verdad que eres problemática- dijo un hombre alto rodeado de sombras con ojos carmesí como la sangre- para la próxima no te apartes de mí lado…. Levy- dijo Gajeel sujetando a la joven elfa contra su pecho con un brazo mientras que con el otro agarraba a su confiable mazo de acero.
La joven en sus brazos apoyo su cabeza en el pecho ancho del Orco, dejando que las lágrimas caigan libremente por sus mejillas, entre ese llanto lleno de angustia ella logro formar un pequeño "Si"
Continuara….