Un fantasmagórico amor

Mis queridos amigos y amigas, ¿Que hay de nuevo?.
Los saluda su amigo Rompeordenes para daros la bienvenida a mi primer fanfic progresivo que subiré a la página.

Hasta el momento solo he subido One-shots y han tenido una buena recepción pero ahora quiero ir un poco mas allá y explorar confines desconocidos (Para mi evidentemente).

En fin esta es una historia de amor que en realidad sucedió, la más hermosa que existió. Es una historia de amor que nunca se olvidará, ¡los huevos siempre se amarán!. Jajaja ok no texto equivocado. Ya les explicare mas abajo de donde sale este fragmento de canción.

Como dice arriba esta es una historia romántica, aunque contiene Yuri (chica x chica) y probablemente en un futuro contendrá lemon (Sexo explícito) por lo que les sugiero discreción y bueno, si no les gusta este tipo de cuestiones les sugiero busquen una historia que sea más de su agrado. Nadie los obliga a leer y les advierto desde el vamos (como dice Dross jeje) que voy a tocar temas en los que daré mi punto de vista y opinión y podrían herir sensibilidades (como son ciertas posturas sociales hacia la religión principalmente).

Nuevamente les pido de la manera más atenta que si no les agradan este tipo de temas busquen otra historia que sea mas de su agrado.

Si a pesar de mis advertencias si quieres continuar leyendo te deseo buena lectura.

My little pony no me pertenece. Sus personajes y toda su propiedad intelectual pertenece a la corporación Hasbro y a su creadora creativa Lauren Faust. Este solo es un proyecto de un fan para fans sin ánimos de lúcro con el único objetivo de entretener.

Este relato se desarrolla en un universo Humanizado. No son la version EQG sino una version humana en un ambiente completamente distinto, ya verán a que me refiero.

Sin mas que añadir por el momento disfruten del relato...

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Prólogo: ¿Qué te pasa Twilight?

Una mano temblorosa se deslizaba graciosamente por el papel acartonado mientras sostenía un pequeño gis de color pretendiendo dibujar un trazo firme que copiaba de una imagen en el monitor de una pantalla frente a la chica dueña de dicha mano.

-Vamos Twilight, tú puedes hacerlo, es sencillo vamos- se repetía mentalmente una chica de cabello azul oscuro con dos franjas de colores morado y rosa que le recorrían la cabellera en toda su extensión, desde el flequillo al frente a la punta del final de su cabello detrás de su espalda, mientras se concentraba en recrear el tono exacto del color que veía al frente en la imagen del monitor, sacando la lengua, concentrandose lo mejor que podia.

-Es un simple trazo, no es tan complicado- se repetía mentalmente.

Tras que su mano diera un par de vueltas en el papel dejando las líneas marcadas por el gis, Twilight soltó un bufido y soltó el colorete con desespero comenzando a borrar por tercera vez el trazo que intentaba recrear.

-¡Esta imagen es imposible!- dijo exasperada mientras tallaba el borrador y retiraba las birutas residuales con el dorso de la mano del papel ayudandose de un pequeño soplido de su boca.

-Si nisiquiera puedo hacer el estúpido trazo bien ¿cómo se supone que voy a recrear esto?- dijo tomandose la cabeza y echándola hacia atrás mirando el techo, empujandose con las piernas hacia atrás girando en su silla de oficina que usaba para trabajar más cómoda.

-El pastel seco es imposible- dijo desganada con una expresión cansina y una actitud pesimista.

Consultó por tercera vez la hora en su reloj de muñeca. Las 2:15 a.m., tendría que estar dormida desde hace horas, no debería estar batallando con esta tonta tarea que no podia terminar.

-Estúpido pastel seco, estúpido tono ocre, estúpido atardecer irreal photoshopeado para que parezca más hermoso- decía Twilight tallandose los hermosos ojos violeta que se veian con sueño mientras se estiraba en su silla.

-Pero querías ser diseñadora gráfica ¿no?- se regaño a si misma mientras volvía a tomar el gis pastel y trataba de recrear las luces que veía en la imagen del atardecer.

-Maldigo al masoquista loco al que se le ocurrió crear la técnica de la pintura pastel- decía Twilight borrando otra vez el trazo de color que acababa de pintar.

-Si sabes que mientras mas lo maldigas él se ríe mas de ti ¿verdad?- dijo una voz masculina algo adormilada al pie de las escaleras que sobresaltó a Twilight.

-Spike...me asustaste, ¿que haces despierto? Es tarde- dijo ella pegando un pequeño brinquito en la silla.

El muchacho que tenia el cabello verde y los ojos del mismo color soltó un ligero bostezo.

-Lo sé, pero tengo cierta hermana que a las 3 de la mañana se pone a maldecir a un tipo que de seguro lleva muerto décadas solo porque se le dificulta una tarea de su carrera- dijo el chico sirviendose un vaso de agua en la cocina.

-humm dejame en paz, cuando vayas a la universidad sabrás lo que es sentir un verdadero calvario- dijo ella apoyando su cabeza en una de sus manos mientras jugueteaba con un lápiz y daba un nuevo bostezo.

El muchacho se acercó detrás de su hermana y contempló el hermoso trabajo de arte que estaba creando. Abrió los ojos asombrado.

-¿Pero tú de qué rayos te quejas? Ese atardecer es hermoso, ¿cúal es el problema?- preguntó Spike.

Twilight lo miro con una expresión cansada.

-Este estúpido brillo de aquí debería ser más iluminado como el que está aquí. Pero sucede que no puedo llegar al tono correcto y entre mas color le ponga y más le talle seguirá perdiendo más brillo, pero si no lo tallo el color no se fijará y entonces quedaría un espacio en blanco.-dijo la chica señalando las diferencias entre su trabajo y la imagen en el monitor.

Spike rodó los ojos. Así era su hermana, perfeccionista en cada pequeño detalle.

-Twilight, creeme, se ve hermoso no tiene que tener ese estúpido brillo. Te pondrán la calificación máxima estoy seguro, deja de preocuparte tanto- le recomendó el chico a su hermana.

-Esto es importante Spike. No puedo omitir ese brillo, la composición de la imagen en si se vendría abajo y quedaría desequilibrada. Tengo que igualarlo- respondió Twilight tallando uno de sus ojos y volviendo a aplicar el color.

-Te digo que se ve espectacular Twilight. Además, estoy casi seguro que como siempre estas exagerando en ser excesivamente puntaual con tus entregas. ¿Para cuando revisarán esto?- preguntó el chico.

Twilight se mordió el labio inferior dudosa de responder.

-¿Y bien?- insistió Spike

-Para el viernes a las 5:00- admitió Twilight

Spike solo suspiró resignado, ya conocía a su hermana súper estudiante.

-¿Estás desperdiciando tus preciadas horas de sueño por tratar de terminar una tarea de la que solo te falta el brillo que se entrega hasta dentro de cuatro días? Estas loca. Anda, a dormir- dijo el muchacho del cabello verde haciendo levantarse a su hermana.

-Pero Spike yo tengo que...-

-Tú tienes que dormir, no es sano que te desveles de esta manera.- interrumpió el chico guiando a su hermana escaleras arriba hasta su habitación donde le abrió la puerta y la acostó en su cama.

-Pero...- Twilight se quedó casi sin fuerzas para protestar y llego a su cama arrastrando los pies. Spike la ayudo a quitarse las pantuflas de unicornio que tenía y la arropó cuando estuvo en la cama acostada. Twilight trató inútilmente de protestar otra vez haciendo amago de levantarse solo para que Spike la detuviera de nuevo.

-Pero...Spike...tengo que...- dijo ella adormilada cayendo en brazos de Morfeo unos escasos segundos después.

-Jeje, Buenas noches Twilight- susurró el chico antes de retirarse a su propia habitación apagando la luz.

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Twilight dio un largo bostezo de nuevo viendo por la ventana del autobús las luces de la calle que pasaban rápidamente viéndose como graciosos espíritus refulgentes que ella dejaba atrás cómodamente sentada. Sonrió divertida por su pensamiento tan absurdo.

Twilight Sparkle. Ella era una chica normal de 20 años como cualquier otra. Una chica que gustaba de pasar tiempo con sus amigas, leer, los largos paseos en la playa en la costa, salir a pasear al parque y salir de fiesta en las noches de fin de semana.

Si había algo que podría decirse que hacía que Twilight fuera distinta a las demás chicas eran dos cosas. La primera de ellas es que era sumamente dedicada al estudio y la escuela, llegando inclusive a niveles insanos. La segunda, ni siquiera ella la conocía aún.

Bostezó de nuevo mientras cabeceaba en el autobús, se le notaba en los ojos que estaba cansada. Se había levantado a las 5:45 de la mañana para tener tiempo suficiente de terminar el detalle del molesto brillo en su trabajo de pastel seco, montarlo, desayunar algo rápido y estar lista para tomar el autobús para llegar a su escuela a las siete de la mañana como era su costumbre aun cuando su clase comenzaba a las 8:00 de la mañana. Como se dijo antes, sumamente dedicada a la escuela y el estudio llegando inclusive a niveles insanos.

Twilight recostó su cabeza en el cristal de la ventana. Se estremeció ligeramente al sentir el frío contra su frente pero unos escasos segundos bastaron para que se acostumbrara a la sensación. Se dedicó a escuchar el suave choque del aire a través del vidrio que llegaba adormilado hasta sus oídos mezclado con todos los demás sonidos de la calle como el roce del asfalto contra las llantas del autobús, el ligero ronroneo del motor de otros autos afuera, y las aves que hacían un escándalo escondidas entre las copas de los arboles tal y como sucedía cada mañana a las primeras horas del amanecer. Twilight comenzó a sentirse adormilada, más aún de lo que ya estaba.

Sostuvo sus pertenencias un poco más fuerte temiendo que si se dormía alguien pudiera llevarselas.

-¿Qué podrían encontrar de todos modos? ¿Solo un montón de cosas sin sentido ni valor para nadie más que para mi en este planeta lleno de sinsentidos y tonterías?- se preguntó a sí misma en su mente mientras sonreía con un resquemor de acidez en la lengua por querer soltar una maldición.

Se acomodó por quinta vez en su asiento, tratando de hallar una posición cómoda en tal dureza y pensando en que tal vez el viaje podría hacerse más interesante si trataba de poner atención a la información que pasaban en las pantallas del autobús con datos curiosos sobre el funcionamiento del mundo, noticias recientes, tips para decoración y un montones de trivias tontas sobre datos de artistas y gente de la farándula.

Sobra decir que nada de eso le interesó en la más mínimo. La mayoría de las cosas que ahí ponían ya las sabía, y las que no sabia no le interesaba saberlas.

Se aburrió nuevamente y cerró los ojos un instante. Escuchando el suave murmullo del rugir del motor en la parte delantera exterior del autobús. Comenzó a quedarse dormida, apretando más su mochila y pertenencias contra su pecho.

El vehículo hizo una parada y de repente entró una chica preciosa con unos ojos azules cual mar paradisiaco y una cabellera rosada esponjada que, hiendo en contra de toda coherencia, tenia forma. Hablando un poco más calaramente, el cabello de la chica era esponjado y no parecía tener un peinado definido, pero muy contrario a lo que cabria esperar de un cabello así, este no lucia ni desaliñado ni como un completo desastre.

Twilight logró reconocerla apenas abriendo un ojo y oliendo un poco el aire que se había impregnado con un peculiar aroma dulzón, como a algodón de azúcar.

Pinkamina Diane Pie, o como Twilight y sus amigas la llamaban de cariño "Pinkie Pie", una chica extrovertida, hiperactiva y además ( según Twilight pensaba) una chica alocada y divertida.

La chica entró dando brinquitos y al girar graciosamente sobre un pie divisó a Twilight sentada al fondo con los ojos cerrados y aferrada a sus cosas como si la vida se le fuera en ello.

-¡Hola Twilight!- saludó enérgicamente la chica de cabellera esponjosa corriendo a sentarse junto a su amiga. La otra la miró con una sincera sonrisa cansada.

-Buenos días Pinkie, ¿Que tal tu día?- le preguntó con falso interés. La otra chica puso una sonrisa aun más grande de lo que ya tenia en el rostro.

-Oh tontita, el día aun está comenzando, son apenas las 7:15. Aun hay mucho por hacer. Pero hasta el momento muy bien ¿Que tal tu día Twilight?- contestó alegre la chica del cabello esponjoso.

Twilight solo sonrió en respuesta y volvió a recostarse sobre el cristal de la ventana intentando cerrar sus ojos de nuevo para descansar un poco antes de llegar a su ultima parada.

Pinikie la miraba sonriente, pero poco a poco fue disminuyendo esa sonrisa hasta que la desapareció y su cara adquirió un semblante triste.

Hacia meses que Twilight estaba así. Parecía estar aburrida de todo, su buen humor era cada vez mas intermitente y poco duradero y cada vez parecía estar peor sin importar lo que sus amigas hicieran para ayudarla.

Cuando Pinkie la conoció, Twilight era una chica antisocial, retraída, y absorta en su propio mundo, entre libros, y tareas, lápices de color, dibujos y bocetos, llevaba una carrera como el diseño gráfico (que se supone debía desarrollar tus aptitudes de creatividad y sensibilidad a tope) a un nivel casi descarado de monotonía y aburrimiento.

Pinkie, junto con la ayuda de sus amigas y un poco de apoyo del hermano menor de Twilight, Spike, lograron sacarla de su ensimismamiento y aislamiento, para mostrarle que había mucho mas en la vida que solo estudiar para ser el mejor en lo que haces. Y había funcionado bien por un tiempo.

Pero sin previo aviso, Twilight comenzó a hacerse más distante y fría de a poco de un par de meses hacia la actualidad y parecía que estaba volviendo a ese agujero solitario del que sus amigas habían luchado tanto para sacarla.

Pinkie simplemente no lo entendía. ¿Por qué querría volver a estar sola habiendo experimentado ya lo maravilloso que era tener amigos?. Entendía que todo el mundo, aún por más cómodo que se sientan con la gente, algunas veces simplemente necesita estar solo, para pensar en sus asuntos y tener su espacio. ¿Pero de eso a estar sola todo el tiempo?, no era algo que pareciera mejor que el sitio de donde venia.

Twilight le había agradecido a sus amigas infinidad de veces el haberla ayudado a salir de su enclaustramiento para poder desarrollarse como una persona normal. Pero ahora parecía que simplemente habia decidido volver a ello, y las chicas no habían podido disuadirla.

Para estas alturas Pinkie había tratado por todos los medios posibles de animar a Twilight invitandola a pijamadas con todas sus amigas, organizando picnics en el parque, noches de películas de terror en sus casas, fiestas sorpresa, idas al Spa favorito de Rarity, etc, pero nada de eso parecia funcionar o entusiasmar siquiera un poco a Twilight.

Aunque ella decía que estaba bien y que no le pasaba nada malo, Pinkie no podia estarse tranquila sabiendo que una de sus amigas tenia un problema y no quería compartirlo.

La miró de reojo otra vez, mientras Twilight volvía a acomodarse en el asiento recargando su cabeza contra el cristal de nueva cuenta.

Pinkie sabia que no había mucho que pudiera hacer para sacarle información a Twilight que ella no quisiera compartir o que negara que existiera y esta perdería la paciencia al poco rato de hostigarla con el asunto si lo intentaba y lo más probable era que le gritara o algo peor.

Se sentía impotente. Twilight le importaba, como le importaban todos sus amigos, pero si Twilight no quería o no buscaba ayuda simplemente ella no podía ayudarla.

Agachó un poco la cabeza y le dirigió a Twilight una ultima mirada antes de colocarse sus audífonos resignada y poner una de sus canciones favoritas, "Smile", esa canción siempre la hacia volver a su estado de felicidad usual.

De nada le serviría a Twilight si en algun momento quisiera hablar si ella comenzaba a ponerse triste también.

El viaje duró unos quince minutos más y las chicas finalmente divisaron la escuela a lo lejos, o al menos una de ellas.

Pinkie se giró hacia Twilight y la vio completamente dormida contra el cristal del autobus con la boca abierta y dando ligeros ronquidos.

Pinkie se permitió sonreír de nuevo.

-Oye Twilight despierta- le dijo moviendo insistentemente el brazo de su amiga.

Twilight abrió los ojos asustada

-¡Una composición radial con gradación de tamaño!- dijo la muchacha levantandose y gritando eso como si se lo hubieran preguntado en un exámen oral.

Pinkie y algunos otros pasajeros que bajaban y otros que subían del autobus la miraron extrañados. Pinkie se rio ligeramente.

Twilight puso una expresión de disculpa en el rostro al momento que se sonrojaba de la verguenza. Se aclaró la garganta y tomó sus cosas apretadoras contra su pecho saliendo del autobus intentando esconder su rostro entre sus libros y sus materiales. Pinkie la seguía divertida desde atrás.

La puerta era un hermosos sitio. La fachada del exterior parecía ser mas de un banco que el de una escuela. Tenia una enorme torre de unos 12 pisos que serian las oficinas. Con enormes ventanales en cada piso.

La torre estaba empezaba con su primer piso junto por encima del tercer piso de bloques de salones, que se extendían desde el piso inferior (al nivel del suelo) con las oficinas administrativas de control escolar y ventanillas de atención a alumnos para cada carrera que se ofertaba en el plantel como eran Arquitectura, Diseño Gráfico, Diseño industrial, Diseño de modas, urbanística, Música, Teatro, Etc. Tenían un programa muy amplio.

Los bloques de salones se extendían a lo largo de veinte salones por piso, dando un total de tres pisos de bloques de salones, resultando en unos 60 salones a lo largo de tres pisos.

Luego de eso justo a un lado se encontraba una enorme biblioteca, donde Twilight pasaba gran parte de su tiempo metida.

La extención de la escuela se extendía también hacia atrás, con otros tres edificios que tenían mas salones y algunas áreas con cuidados y lindos jardines, mesas de trabajo comunitario que los alumnos podían usar para hacer tareas, el jardín, que tenia varias mesas con sombrillas donde los alumnos podían sentarse a relajarse, platicar o hacer investigaciones o tareas que tuvieran pendientes, ya que esa área contaba con internet.

El ultimo edificio era una área aparte que estaba literalmente, al borde de un precipicio. Era un edifico en donde se encontraban los talleres de computación, costura y maquinas y herramientas de los alumnos de diseño industrial.

Parecería una locura construir un edificio al borde de un precipicio, pero tenia una gran vista de la barranca que se extendía con un verdor hermoso, ademas de que se podia respirar un aire muy fresco y puro y durante las frescas mañanas, respirar una bocanada de ese aire, era totalmente embriagador y relajante.

Volviendo con nuestras amigas, cuando llegaron a la puerta principal, la escuela estaba casi vacía, pues a excepción de algunos alumnos que vivían cerca del instituto, Twilight y Pinkie siempre eran de las primeras en llegar.

Se sentaron a conversar en los pequeños escalones que habia frente a la puerta de la escuela. O mas bien, Pinkie se puso a tratar de sacarle una sonrisa sincera a Twilight contando chistes y anécdotas graciosas. Twilight se limitaba a responder con monosílabos apagados y secos. Ni siquiera ponía atención a lo que Pinkie le contaba.

Twilight, aunque no lo parecía, hacia un esfuerzo por atender a lo que Pinkie le contaba. Sabia que su amiga trataba de ayudarla pero ella ya le había aclarado muchas veces que estaba bien, cosa que no era realmente cierta del todo.

La verdad era que no sabia que le pasaba. Twilight no era una mala persona y no le gustaba hacer sentir mal a sus amigas y sabia que no había razón para tener ese humor tan apagado, pero simplemente se venia sintiendo así desde hacia unos meses y no se sabia explicar porque.

Siempre podría intentar fingir estar bien para con sus amigas y para darle tranquilidad a Pinkie pero, no era muy buena mentirosa y sobre todo, sabia que no podia engañarse ella sola.

Pensando en todo eso, dando un par de bostezos y escuchando de modo lejano a Pinkie 20 minutos pasaron hasta que se escucho una voz que les gritaba.

-¡Oye cerebrito, piensa rápido!- dijo una chica con cabello teñido de color arcoiris, ojos rojizos y una actitud rebelde y pateando un balón de foot-ball.

El nombre de esta chica era Rebecca Dashimer, aunque debido a que tenia su cabello teñido como el arcoiris y le gustaban los deportes y todos lo que incluyera velocidad, todo el mundo la conocía por el nombre de Rainbow Dash.

Al principio esto le molestó a la chica, pero lentamente se fue acostumbrando al apodo y le fue tomando cariño. Ahora ya incluso se presentaba con ese nombre a todos.

La chica pateó el balón de foot-ball y este cayó delante de Twilight botando varias veces hasta tocar sus pies. Twilight miró a la chica y le regaló una sonrisa, regresandole el balón con un ligero movimiento del pie que lo hizo rodar hasta la chica de cabellos arcoiris otra vez.

Rainbow observó la pelota rodar hasta ella sin fuerza alguna y seguidamente levantó el rostro para compartir una mirada con Pinkie. Esta solo negó decepcionada ligeramente con la cabeza, como si hablara con Rainbow sin emitir palabras. La chica de los cabellos arcoiris suspiró resignada.

Unos minutos después en los que Rainbow se les unió a sus amigas, un auto entró al estacionamiento de la escuela con una hermosa y despampanante chica de cabello morado y bellamente estilizado y ojos azules al volante, acompañada de una chica de cabello lacio largo y rosado de unos ojos verde-acua y una chica rubia con sombrero vaquero y ojos verdes.

Las chicas descendieron del auto una vez que la chica que conducía se estacionó y luego de recoger sus cosas y cerrar las puertas del auto estas chicas se reunieron con las otras tres que estaban sentadas en los escalones de la entrada.

-Hola cariños, Twilight, Rainbow, Pinkie, ¿Cómo están?- dijo la chica de la melena estilizada.

-Hola chicas- dijo la chica de los ojos acua.

-Hola- dijeron las otras tres a coro.

-Twilight cariño, ¿Cómo se encuentra mi querido Spike?- preguntó la chica de la cabellera estilizada, queriendo saber sobre el hermano menor de Twilight.

-Haa Rarity, ya hablamos sobre esto. Spike es muy chico para ti, mamá y papá jamás aprobarían que estuviera contigo- dijo la chica del cabello morado suspirando ya cansada de repetir esa información.

Rarity la miró con un mohín indignado.

-¿No crees que ya es lo bastante grande como para decidir por si solo con quien quiere estar?- preguntó seria.

Twilight levantó un ceja. Suspiró resignada.

-Él está bien Rarity, gracias por preguntar. Y antes de que lo menciones, no, no me ha preguntado por ti- dijo Twilight.

Rarity puso una expresión exagerada de tristeza.

-Oh mi querido Spikey Wakey, tan pequeño e inocente que no te das cuenta de lo que mi corazón grita por ti. ¿Cuándo sucederá que al fin logres ver que la mujer que te ama está justo frente a ti?. No importa, no me interesa el tiempo que tenga que esperar por ti mi querido Spikey Wakey, yo esperaré.- dijo la chica con un tono melodramático.

Todas la miraron con un semblante sarcástico.

-¿Es en serio?- preguntó Rainbow.

-¡Por supuesto que es en serio!- dijo Rarity ligeramente molesta luego puso una sonrisa burlona en el rostro- El amor no es algo que una chica se tome a la ligera querida. Tú lo sabrías de ser un poco más femenina-

Rainbow rechinó los dientes y apretó los puños

-¿Qué estás insinuando?- preguntó Rainbow con la mandíbula apretada y un semblante sombrío.

-¡OOps!, Cariño, ¿Acaso dije eso en voz alta?, Ay, lo siento querida no quería hacerlo evidente aquí frente a todas Rainbow- dijo Rarity en un falso tono de disculpa con una amplia sonrisa burlona de oreja a oreja.

Rainbow resoplaba por la nariz.

-¡Ya...Estás...MUERTA!- dijo la peliarcoiris lanzandose al ataque comenzando una persecución por el estacionamiento de la escuela.

-¡No, No Rainbow basta! ¡Soy una dama! ¡Traigo tacones Rainbow NO! ¡Ahhh, chicas auxilio!- decía la muchacha del cabello arreglado mientras corría por su vida.

-¡Vuelve aquí! ¡Voy a matarte!- decía Rainbow persiguiendola.

Todas miraban a las dos chicas frente a ellas compartir los mismos insultos y bromas en serio como hacían cada mañana con una mirada aburrida.

-¿Cómo se las arreglan para hacer el mismo numerito cada mañana?- preguntó Applejack mientras las veía correr con los brazos cruzados.

-No lo sé, pero esto me da innumerables visitas en Youtube, Asi que ¡SHHHHHHH!- la calló Pinkie Pie mientras grababa toda la persecución con su celular.

-Aún no comprendo como fue que Rarity se fijó en Spike. No me mal interpretes Twilight, Spike es un gran chico, pero es un poco menor y bueno este tipo de cosas usualmente se dan alrevés.- mencionó la chica del sombrero vaquero.

-No, descuida. Me pregunto lo mismo todos los días.- dijo Twilight restando importancia al asunto con un movimiento de su mano.

-¡Ahhh! ¡¿QUE TE PASA! ¿¡ESTÁS LOCA!?- se escuchó gritar a Rainbow

-No me dejaste opción, te dije que dejaras de perseguirme- se defendió Rarity caminando lentamente de regreso al encuentro de las chicas mientras se alaciaba un poco el cabello seguida por detrás por una Rainbow que se tallaba los ojos.

-¿Que le hizo?- preguntó en un susurro la chica de los ojos acua llamada Fluttershy a su amiga Pinkie Pie que miraba divertida la persecución de sus amigas en video otra vez.

-Rarity uso gas pimienta- respondió la chica del cabello esponjoso mientras reproducía ese momento exacto otra vez.

-¡Oh cielos...!- respondió la chica tapandose la boca.

-Lo sé es asombroso ¿no?, ¿Quieres una copia del video antes de que lo suba a YouTube?- preguntó Pinkie.
La otra chica pareció pensarlo un momento y luego le pasó su celular a Pinkie de un modo discreto.

-Continuando con el asunto, de cualquier modo cariño, dale mis saludos a tu hermanito. Dile que la hermosa Rarity le manda sus saludos especiales- dijo Rarity con ojos soñadores y un suspiro en mirada perdida en la nada.

-Seguro- respondió Twilight con una voz aburrida.

Unos pequeños pitidos sonaron desde el reloj de muñeca de la chica del cabello morado y esta lo miró. Las 7:45 a.m.

-Tengo que irme chicas las veo en el almuerzo ¿está bien?- dijo Twilight levantandose.

-Deacuerdo, te vemos después- dijo Applejack y todas se despidieron de Twilight a su modo.

La chica agitó levemente la mano mientras se despedía de todas y se retiraba.

Una vez se hubo ido todas se miraron entre ellas preocupadas.

-No parece haber ningún cambio- dijo Applejack algo triste.

-Es como si no pudiera sentir nada- secundó Fluttershy sentandose en las escaleras.

-¿Aún sigue sin decir nada Pinkie?- preguntó Rarity.

-Ni una palabra- contestó decepcionada borrando el video que había tomado segundos antes de la falsa persecución de sus amigas. -Ni una risa ni tampoco una reprimenda por dañar la reputación de alguna de mis amigas en internet publicando su video. Me aseguré de que escuchara lo que planeaba hacer, ni siquiera se molestó- dijo Pinkie guardando su celular y entregandole el suyo a Fluttershy.

-A mi tampoco me dijo nada por ser cómplice- dijo la chica tímida.

-Ni siquiera hubo respuesta con lo del gas pimienta- dijo Rainbow dejando de tallarse los ojos.

-¿Trataste de hablar con ella en el autobus?- preguntó Rarity.

-Como hago todas las mañanas, ni me miró. No puedo hablar con alguien a quien ni siquiera puedo escuchar respirar. Twilight simplemente no da entrada a ninguna conversación, ya ni siquiera intenta corregirme cuando digo mal una palabra ni tampoco hace gala de su inteligencia dándome lecciónes express de gramática u ortografía. Nada- mencionó Pinkie.

-Es como si se hubiera ido- dijo Rarity tristemente mirando la dirección en que Twilight se había marchado.

Todas las chicas se miraron con decepción en el rostro en un silencio pesado y triste. Todas estaban preocupadas por su amiga.

-¡Oigan!, ¡Reaccionó al falso interés de Rarity por Spike!, Eso tiene que ser algo ¿no?.- preguntó Applejack con una ligera esperanza en la voz luego de un rato.

-¡¿Quién dijo que mi interés en Spike es falso?!- respondió Rarity ofendida.

Applejack la miró con desconcierto.

-¿De verdad te gusta Spike?, Pero si tiene cuatro años menos que nosotras, ¿que eso no es ilegal?-

-Para el amor no hay edad querida y no tiene cuatro años menos, solo son tres. Además si estar enamorada de Spike es un delito, que me pongan las esposas y me encierren de una vez porque amo a ese chico- dijo Rarity melodramática extendiendo sus brazos al frente como si se entregara a la policía.

Applejack sacudió la cabeza de un lado a otro deshaciéndose de todas las ideas raras que le saltaban a la mente de Rarity con el hermano de Twilight.

-Bueno, pero reaccionó ¿no es verdad?, eso tiene que ser una buena señal- dijo la vaquera optimista.

-No lo creo, ella solo repitió lo que cree que dirían sus padres, no dio una opinión personal- dijo Rainbow recordando las palabras de la chica de rayos en el cabello.

Hubo otro silencio.

-Bueno, tenemos otro intento en el almuerzo, quizás ahí podamos hacer algo- dijo Rarity mirando su reloj –por ahora debemos irnos.

Todas asintieron y se despidieron para ir a sus respectivas clases. Applejack se quedó atrasada un poco sintiendo una ligera brisa pasar por ahí. Miró la dirección en que Twilight se había marchado.

-Hhaa...¿Que te pasa Twilight?- preguntó Applejack al viento en un susurro.

Bueno este es el prólogo de mi primer fic progresivo. Espero que lo lean y que les guste mucho porque lo tengo planeado para durar al menos unos 30 capítulos así que tendré mucho material.

Trataré de actualizar tanto como me sea posible tan pronto como me sea posible (que no será mucho) por lo que les pido solo paciencia y que no me presionen demasiado jaja.

Todos los review son bien recibidos y bueno esperen por el capitulo 1. Nos vemos la próxima, BROHOOF!