La vi acomodar sus bragas y no pude dejar de admirar su cuerpo mientras me encontraba sentado al borde de la cama.
Ciertamente ya no tenía el cuerpo de una niña.
Camino hacia mi muy lentamente y en el último segundo se lanzó a mis brazos como una niña pequeña haciéndome desequilibrar y cayendo los dos a la cama entre risas.
Ella sobre mí se acomodó para robarme un beso más, que correspondí gustoso.
-Sakura será mejor que vayas ya a tu cuarto -
-No quiero Sharorin, aparte me habías dicho que podía quedarme a dormir -
Era cierto pero con esa ropa... no ciertamente no resistiría que durmiera aquí.
-Princesa si nos encuentran así no creo que nos vaya bien a ninguno de los dos-
La sentí acomodarse sobre mí sentándose justo en mi hombría haciéndola crecer al instante mientras se movía meciéndose tortuosamente.
-Sakura... tu ganas... solo deja de hacer eso por favor o no podre contenerme -
-Yo nunca te he pedido contenerte conmigo Shao, eres al único que nunca le prohibiría nada conmigo... incluso si mi vida la tomas- dijo un poco más bajo que el resto de la oración.
La cargue en mis brazos como la princesa que es, como pude destendi la cama y la deposite ahí metiéndome junto a ella abrazándola con toda mi fuerza.
- No digas eso nunca más Sakura porque tú eres mi vida entera-
La sentí acurrucarse entre mis brazos y levantar la cabeza besando mi cuello mientras susurraba un te amo, que se desvaneció mientras se quedaba dormida.
Ciertamente ella es a lo único que nunca me harán renunciar.
Tendría que ver cómo hablar al siguiente día con el rey, quiero volverla mía totalmente pero no arruinare su vida por mi capricho.
El resto de la noche la sentí acomodarse entre mis brazos, tan tranquila, su respiración tan pausada como si nada pudiera molestarla en ese momento. Yo… bueno yo sufrí una erección casi toda la noche, sentir como se me repegaba y se acomodaba justo ahí me excitaba pero no la tocaría sin su consentimiento… bueno no mucho.
Empecé a acariciar su cintura, bajando a sus piernas y la vi retorcerse ligeramente, si definitivamente quería despertar y encontrarla ahí conmigo, continúe solo abrazándola hasta caer profundamente dormido con ella entre mis brazos, hasta la mañana.
-¡LI, ABREME!- Desperté sobresaltado poniéndome apenas la ropa, cubrí a mi princesa que aun dormía y abrí la puerta saliendo.
-¿Por qué demonios no abrías Li? ¿Sabes dónde está Sakura?- Me pregunto exaltado el príncipe, me bajo la sangre del cuerpo, si veía que la tenía ahí conmigo en mi cama, seguramente cortaría mi cabeza en este mismo instante.
-¿Qué es lo que pasa príncipe?-
-No la encuentro, ayer se retiró de la fiesta muy mal y no está en su cama- lo vi mirarme de arriba abajo y vi como frunció su nariz –no es de mi incumbencia con quien duermas, pero TÚ deber es proteger a mi hermana, así que sal en este mismo instante a buscarla, si no ¡olvídate de tu trabajo en este castillo!-
Y lo vi caminar hacia el jardín, yo me quede ahí paralizado con la cara más roja que un tomate, ¿olía a sexo? …
Entre rápidamente, poniendo seguro en mi puerta e intente despertar a Sakura, haciendo que solo me jalara a la cama enojándose.
-Princesa no entiendes, tu hermano…- No termine de completar mi frase y la vi salir disparada de su cama.
-¿Me vio aquí contigo, así?-
-No, tranquila no te vio, aunque si piensa que estaba con alguien yo, iré por algo de ropa a tu cuarto, ve al lago, tendremos que mentir-
-Si, si, enseguida voy- sentí como me planto un beso en los labios y salió corriendo.
Cuando la encontré mojada por completo, en ese lago en medio del bosque, se veía endemoniadamente sexy, intento abrazarme pero la rechace ofreciéndole su ropa, vi su cara molesta por el rechazo pero me sentía observado y no me equivoque, solo dos segundos después llego su hermano regañándola, gritándole, me dio coraje el como la trato, aunque sabía que era de preocupación.
-Majestad, solo vino a darse un baño- Fui interrumpido bruscamente.
-Tú cállate mocoso, que es tu deber el cuidarla por completo cosa que no hiciste por estar acostándote con una cualquiera en tu propia habitación, ve a tomarte una ducha que Sakura y yo tenemos que hablar-
-¡Hermano! No le hables así, yo fui la que..-
-Calla Sakura y tu Li, después de esto ve a hablar con mi padre-
La vi jalonearla un poco y seguí sus pasos de cerca, tome una ducha rápidamente y vestí mi armadura caminando hacia el trono, sentía nervios, necesitaba hablar con el rey, pero gracias a esto seguramente terminaría regañado o hasta expulsado.
-Adelante- escuche esa voz suave detrás de la puerta.
-Permiso su majestad, me dijo el príncipe que quería hablar conmigo-
-Así es Li, escucha seré directo ¿es verdad que tenías a alguien dentro de tu cuarto?, una de las mucamas me dijo que escucharon ruidos por la noche-
-… Si majestad, alguien estaba conmigo-
-Ya veo, tu sabes que tu tarea…-
-Si majestad, es cuidarlos, en especial a la princesa-
-Correcto, pero también sé que eres un hombre, haz servido desde hace años a mi familia, dime Li ¿Estás pensando en formar una familia?-
¿Cómo iba a responder eso?, Si majestad, con su hija… ¿en serio?
-Si majestad, quiero formar una familia con la mujer que amo-
-Entiendo, tu sabes que para mí tu haz sido como un hijo, agradezco cada sacrificio que has hecho por nosotros y si ese es tu deseo te liberare, podrás vivir en el reino si tu así lo deseas, te regalare una casa para ti y tu familia y…-
-Majestad… perdón por lo que diré, perdón por interrumpirlo, perdón por todo, pero… usted mismo lo ha dicho ha sido como un padre para mí, pero no lo es y de la persona que estoy enamorado es de su hija, haría cualquier cosa por ella, daría mi vida entera por ella-
-Li...-
-Espere déjeme continuar, y si la única forma de continuar a su lado solo será siendo su guardián, le suplico olvidemos este tema, solo no me separe de ella-
-Li, ¿Quién estaba en tu cuarto anoche?- Su mirada fue de seriedad, nunca había tenido esa mirada sobre mí.
-Su hija alteza- No supe cómo interpretar su mirada.
-No me malentienda, solo…-
-Padre, ¡Yo fui la que entro a su cuarto! No lo castigues padre, por favor, el me pidió salir de su cuarto, intento obligarme pero se lo ordene, solo eso, pasar solo la noche en su cuarto, como cuando tengo miedo… tenía miedo de que me obligues a casarme con alguien a quien odio padre-
La sentí correr a mi lado abrazándose a mi espalda, apoyando sus manos sobre donde se encuentra mi corazón como protegiéndome, el rey y yo nos sorprendimos, yo no quise ahondar más en el tema, no creo que me dejara vivir si supiera lo que le hice a su hija.
Lo vimos suspirar, me separe un poco de Sakura, besando una de sus manos y posicionándome frente al rey de rodillas.
-Mi Rey siempre le sere eternamente agradecido por todo, se que no merezco algo tan importante para usted, pero créame cuando le digo que la amo, daría cualquier cosa por ella-
-¿Darias tu vida Li?-
Saque mi espada entregándosela.
La tomo entre sus manos y la blandio apuntando a mi cuello.
-¡SHAORAN!- escuche a mi princesa gritar con todo su aliento.
-La daría mi Rey, pero nunca haría nada que la hiciera sufrir, si quiere mi vida tómela en otro lugar, no me opondré- susurre para que apenas escuchara él, voltee y sentí a Sakura tirarse a mis brazos llorando.
-Tranquila, tu padre no lo hizo en serio, si no no la hubiera podido detener- le dije intentando tranquilizarla, acariciando su cabello, sintiendo como solo afirmaba sobre mi pecho.
-Escucha Li, te sere honesto, no dejare que te cases con mi hija, pero todos en este cuarto te debemos la vida desde que eras solo un niño-
-¿De qué habla mi rey?-
-Tu siempre has vivido en este castillo, el amor entre ustedes dos lo vi desde el primer momento, en que nació mi hija, tu padre al igual que tú fue guardián del castillo, tu madre fue la mejor amiga de mi esposa y gracias a ustedes 3, al menos mis hijos y yo vivimos.
Tu padre era poderoso, como ninguno, en aquel entonces había constantes guerras y no perdió ni una sola. Cuando mi hija Sakura nació, tu padre te llevo con él y tu madre a verla, siempre has sido un niño muy serio pero cuando la viste, por primera vez en dos años vi aparecer una enorme sonrisa, aún recuerdo perfectamente como mi hija recién nacida se aferraba a tu dedo, cosa que nunca hizo ni siquiera con su madre.
Paso un año y su primer palabra fue papá, estaba emocionado que fui a enseñarle a Xien, tu padre, ambos nos emocionamos y buscamos a nuestras esposas, no nos dimos cuenta en que momento Sakura gateo lejos de nosotros, solo hasta que la empezamos a buscar y te vimos a ti, tan pequeño, apenas podías con tu peso y traías a mi pequeña hija cargando como podías, cayéndote cada segundo al piso- vi a mi rey sonreír ante este recuerdo.
-Cuando cumpliste 4 años Li, mi hija no paraba de decir tu nombre, de decirte Sharorin, me disculpo por eso pero creo que la volví una malcriada, le dábamos todo lo que pedía, pero tú también empezaste a malcriarla, te trepabas a los arboles de mangos solo para regalarle los más dulces, eran inseparables.
Ese día en tu cumpleaños, llegaste firmemente a decirme "Rey, yo seré el guardián de Sakura, así que no acepte a nadie hasta que no sea un poco más fuerte ¿Entiende?" Me causo mucha gracia tu comentario y después verte correr a donde estaba Sakura, jugando con ella, haciéndole caras para que no llorara o cargándola cuando apenas podías contigo mismo.
Durante los dos siguientes años tú, tu padre y tu madre fueron a entrenar al bosque, los dejamos de ver y mi Sakura lloro por días y días preguntándome dónde estabas tú.
Cuando regresaron eras un niño fuerte, valiente, activo, pero frente a mi esposa, mis hijos y yo te portabas serio, recto, Sakura te intentaba hacer reír pero nunca reaccionabas a sus maldades.
… Solo unas semanas después de su llegada nos invadieron, atacaron el castillo, matando a tu madre y a mi esposa… - por primera vez en mi vida vi llorar al rey y mi pequeña princesa estaba incrédula ante lo que nos contaba, soltando pequeñas lágrimas en contra de su voluntad.
-Tú padre y yo … no pudimos hacer nada y el ejército entero peleo, uno de esos soldados llego hasta la habitación donde se encontraban ustedes, no estoy seguro de que paso pero cuando llegamos encontramos a mis hijos desmayados y a ti sobre Sakura abrazándola, siendo pateado por ese hombre. Luchamos contra él pero era demasiado fuerte, intentaste atacarlo junto con nosotros cuando te recuperaste un poco pero tu padre te grito que protegieras a mi hija con tu vida.
…La espada de ese hombre atravesó a tu padre frente a los ojos tuyos y míos, y la blandió contra mí, tú te lanzaste recibiendo un golpe sumamente duro de su parte, pero continuaste levantándote, poniéndote en medio de ese hombre y de mi o de ambos de mis hijos… solo tenías seis años Li, solo seis años, su espada te corto y en un último momento donde tu padre uso su último aliento y yo lo atravesamos.
Perdón Li, tu padre, tu familia murió esa noche y la mía está viva gracias a ti, te debo todo, todo en esta vida, pero… es mi más grande tesoro el que me pides-
No podía contener las lágrimas, no logro recordar nada de eso, solo recuerdo despertar un día, no sé qué edad tendría y ver a mi princesa ahí a lado mío, pidiéndome que me despierte para jugar con ella, la ignoraba y diariamente volvía, empecé a ceder a sus órdenes.
Solo recuerdo a mi princesa ordenándome ser su guardián, ser más fuerte para pasar todo el día con ella, y solo recuerdo obedecerla.
No logro recordar las caras de mis padres, mi rey y mi princesa se encuentran llorando, el príncipe Touya no se en que momento llego pero mantiene la cabeza agachada.
Me siento como una vil basura, quiero irme de aquí, quiero abandonar todo, pues justo aquí murió mi madre, mi padre… y casi muero yo.
Perdon la tardanza, aqui esta lo ultimo que llevo :P
Gracias por sus comentarios tan lindos a todos 3 y pues espero pronto continuarla, posiblemente solo hag capitulos mas :P hahaha