Buenas gente, este es mi primer fic, tuve esta idea rondando por mi cabeza un tiempo. Lo digo ya desde el principio, intentare darle el mayor realismo posible en base al manga pero con mi propio toque personal, ya os daréis cuenta desde el principio, otra cosa importante a nivel de emparejamientos, voy a darle a Naruto un harem y ya tengo las elegidas y no pienso cambiarlo, también quizás ponga algún que otro OC para hacer la historia mas fluida, soy un novato así que set un poco indulgentes, las criticas constructivas son más que bienvenidas

(Personas hablando)

(Bijuus/Invocaciones hablando)

(Pensamientos de las personas)

(Pensamientos de los Bijuus/Invocaciones)

No soy dueño de Naruto, u otros personajes de anime en la historia

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Capitulo1: Revelaciones y despedida

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La villa oculta de la hoja en el país del fuego, considerada como una de las 5 grandes naciones ninja, fue conocida por ser el hogar y origen de algunos de los mas prominentes ninjas de la historia. También era conocida públicamente por fomentar la camaradería y la solidaridad, pero si supieran algunas de las acciones de los habitantes de dicho pueblo , la gente se sentiría ultrajada.

En el hospital del pueblo se encontraba en este momento un niño maltratado y con todo el cuerpo vendado. El niño de 6 años tenía un cuerpo ligeramente musculoso y bien proporcionado, con la piel ligeramente bronceada y era un poco mas alto que los niños de su edad. Pero los rasgos mas singulares del niño eran 3 marcas en cada una de sus mejillas que le daban cierto parecido a un zorro, su corto pelo rojo escarlata y su ojo derecho de un color azul tan profundo que solo podía ser comparado al de un zafiro. Sí, un ojo, el otro no estaba y en su lugar estaba una venda para tapar el hueco atravesado por una cicatriz vertical. El nombre del niño era Naruto Uzumaki, el jinchuriki de Konoha.

El niño parecía estar durmiendo pero si supieran que en el fondo se su mente estaba ocurriendo una conversación que cambiaría su vida para siempre.

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Paisaje mental

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En una alcantarilla oscura se podían oír los sollozos de dicho niño. Este pequeño individuo estaba llorando en posición fetal sobre la pata humanoide del zorro rojo y colosal. Este zorro con 9 colas encerado detrás de unos barrotes de oro tenia orejas de conejo y un torso extrañamente humano. La bestia gigante era un bijuu para ser precisos era Kurama el kyubi no kitsune, el más poderoso de las bestias con cola. El zorro a pesar de estar atrapado y encerado dentro del niño, no lo estaba mirando con odio y rencor, sino con pena e impotencia.

Hace 7 años Kurama había sido sellado de nuevo en un anfitrión por el yondaime hokage y su esposa. Después de casi un siglo de cautiverio había sido liberado de su segundo jinchuriki¡ solo para ser controlado poco después por ese maldito Uchiha y su sharingan! Acabó matando a los que su pusieron en su camino y destruyendo una buena parte del pueblo hasta que se libero del control del bastardo. Intento huir entonces pero el Yondaime no se lo permitió, acabó tele transportado fuera de la aldea y sellado por tercera vez en un anfitrión.

En un primer momento había decidido odiar al bebe y a la primera oportunidad que se presentase escapar. Pero con el paso de los meses se había empezado a relajar. Claro aquí encerado no había mucho que hacer, su carcelero era apenas un niño y aunque podía mirar sus recuerdos o a través de sus sentidos no le interesaba ver como era el día a día de un infante. Pero curiosamente, casi no le importaba. Nunca se había sentido tan tranquilo y con la mente más clara. Pensó que era debido al sello pero descarto la idea, dudaba que el Yondaime se hubiera molestado por su estado de animo o comodidad por lo que solo podía ser su carcelero, aunque no tenia ni idea de como lo hacia.

Su situación solo se volvió mas singular cuando después de un año en esa alcantarilla, el pequeño apareció. El zorro gigante se quedo de piedra, sabia que algún día se iba a encontrar cara a cara con el pelirrojo, era inevitable, pero siempre pensó que seria en algunos años ¡no algunos meses! Aunque lo que realmente le sorprendió fueron sus ojos, no por su color, sino por la mirada que el bebé le estaba dando. Desde que su padre y creador ,el sabio de los seis caminos, había muerto solo había recibido miradas de odio, miedo y/o desprecio.

El pequeño en un primer momento lo había mirado con curiosidad( nada sorprendente, era un niño después de todo) y después con admiración. Kurama se había quedado paralizado, no estaba acostumbrado a esta situación y solo podía ver como el pequeño gateaba hacia la jaula con entusiasmo. No podía entenderlo, era un zorro gigante, un demonio según muchos decían pero este renacuajo simplemente parecía dirigirse hacia el como si de una persona normal se tratara.

El pequeño siguió gateando hasta alcanzar los barrotes de su jaula y pasar entre ellos. Este momento habría sido perfecto para atacar a su contenedor, pero este pensamiento ni siquiera había pasado por su cabeza, simplemente estaba demasiado conmocionado por la situación. Pronto noto algo suave sobre una de sus patas, miro hacia abajo y vio al pequeño acariciando su piel con curiosidad. Solo se quedo mirando-lo hasta que Naruto alzo la vista hacia arriba y le dio una sonrisa. Esa simple sonrisa pura y sincera consiguió cambiar completamente la opinión del antiguo bijuu.

Desde su padre, nadie le había sonreído, nadie le había hablado ( maldiciones y insultos no cuentan), nadie intento tratarlo como una persona.

Kurama ese día decidió darle una oportunidad al pelirrojo y en 6 años nunca se había arrepentido. Naruto se convirtió en su cachorro, su hermanito pequeño y se encargo de él lo mejor que pudo dado su encarcelamiento. Le enseño a leer y escribir cuando esos bastardos del orfanato se negaron ha hacerlo, lo consoló cuando esos malditos cabrones lo echaron a la calle y poco después le enseño como encontrar comida en el bosque para que pudiera sobrevivir sin un techo. Esta situation duro 1 año entero hasta que el viejo Hokage lo encontró en la calle y le dio esa mierda de apartamento. Kurama, viendo que los aldeanos ahora sabrían donde encontrarle decidió que debía empezar a entrenar al pequeño. Le ayudo a desbloquear su chakra y le obligo a hacer exercicios rigurosos y intensivos. Sabia que era demasiado para un pequeño como él pero no tenían elección, estaban prácticamente solos por su cuanta ha merced de los civiles y ninjas resentidos, el pequeño necesitaba ser fuerte. En vista que los aldeanos no iban a venderle comida en condiciones Naruto siguió cazando en los bosques cerca de Konoha. Aunque no le importaba, su amigo peludo siempre convertía la caza en un juego para divertirle. Incluso fue tan lejos como para desbloquear sus habilidades y beneficios como jinchuriki: un factor de curación increíblemente avanzado y su habilidad para percibir las emociones. Esas dos ventajas le habían salvado el pellejo mas veces de las que podía contar Siempre cuido de él como un padre cuida de sus crías. Por desgracia esta noche no fue suficiente. Hoy era 10 de octubre, el cumpleaños de Naruto, pero también el aniversario de su derrota y la ''muerte'' del Yondaime Hokage.

Gruño de rabia, Naruto se dirigía hacia casa cuando una turba de aldeanos y algunos shinobi se formo para cazarlo. A pesar que kurama le había ayudado a entrenar en su físico y chakra seguía siendo un niño, y acabo siendo atrapado. Esos malditos le molieron a golpes, algunos shinobi sacaron sus kunai y jugaron a tiro al blanco con él, hubo uno que fue tan lejos como para arrancarle el ojo izquierdo. Hubieran seguido si no fuera porque el Sandaime Hokage, Hiruzen Sarutobi, apareció y ordeno a sus AMBU para arrestar a todos los implicados. El viejo hombre solo pudo mirar con remordimiento el lamentable estado en el que Naruto se encontraba y llevarlo los mas rápido que pudo al hospital.

Ahora, el joven jinchuriki se encontraba dentro de su paisaje mental llorando y con su figura de hermano mirándolo sin saber que hacer o decir. No había sido la primera vez que su cachorro había recibido una paliza pero nunca habían sido tan brutales. No importaba cuanto chakra empujara hacia afuera o su factor de curación, su ojo se había perdido para siempre. Kurama decidió que habían ido demasiado lejos.

''Naruto, mírame.'' le dijo el zorro pero Naruto seguía llorando en la palma de su mano/pata derecha. Kurama levanto su otra pata y con cuidado levanto la cabeza del niño y miro profundamente en el único ojo azul que le quedaba'' Naruto, no podemos seguir así, tenemos que irnos. ''

El pequeño no entendía la pregunta ''¿Irnos adonde?''

''Irnos del pueblo Naruto, no puedo seguir viendo como esa escoria sigue abusando de ti. Me destroza por dentro el ver como te tratan y no poder hacer más. Te mereces algo mejor que esto cachorro.''

El pelirrojo entendió entonces lo que su figura de hermano intentaba decirle ''Pero jiji siempre dice que debo...''

''¿Debes qué?¿Perdonar? Naruto, hay una linea muy fina entre la bondad y la estupidez. ¡Hace mucho que has cruzado esa linea! Cuantas palizas mas vas a tener que soportar para que lo entiendas, y lo peor es que ese viejo mono no hace nada para impedirlo.'' Le soltó el bijuu frustrado. El pequeño Uzumaki había sufrido tanto durante su vida que era prácticamente un milagro que no tuviera un trauma y aun conservara aun una pizca de inocencia pero Kurama no se hacia ilusiones. Sabía que eso podía cambiar si esa basura de Konoha seguía con sus acciones.

El viejo mono no iba a hacer nada, Kurama supuso que el Consejo Civil lo tenia agarrado por las pelotas. Era realmente triste, el hombre que fue una vez aclamado como el ' Shinobi no Kami '( Dios de los Shinobi) fue reducido a un patético anciano sin espinas. También estaba el estudiante del Yondaime, Kakashi Hatake, pero en 6 años ese hombre no hizo nada para ayudar a su cachorro y no creía que fuera a hacer algo a corto plazo. Supuso que estaba demasiado ocupado auto compadeciéndose o quizás, simplemente no le importaba lo que le pasara al pequeño Uzumaki. Las únicas otras personas que eran buenas con el eran ese viejo hombre y su hija del puesto de ramen pero siendo civiles había poco que pudieran hacer. No podía permitirse esperar, tenia que tomar cartas en el asunto.

Naruto se había quedado callado, las lagrimas seguían cayendo por sus mejillas. El viejo Hokage, su figura de abuelo, le decía siempre que debía perdonar a los aldeanos y que con el tiempo lo iban a aceptar. El quería creer en su jiji, pero las palabras de su figura de hermano habían calado hondo. En el fondo, sabia que era verdad y que en realidad se estaba agarrando a un clavo ardiendo, pero que más podía hacer. No tenia familia, vivía en un viejo apartamento casi demolido por los civiles en el barrio rojo, la casi totalidad de la población odiaba al pobre niño o simplemente no les importaba. La única razón por la que había sobrevivido hasta ahora era gracias al entrenamiento y aprendizaje del zorro. Lo único que le quedaba era tener fe en que las cosas mejorarían pero al parecer ni eso podía permitirse.

Kurama suspiro ''Lo siento cachorro pero tienes que afrontar la realidad, Konoha no es un lugar seguro para ti y si no hacemos algo la cosa no va mejorar.''

Naruto asintió mientras se limpiaba las lagrimas ''¿Entonces, donde debería ir? Nunca he salido del pueblo y por lo que me has contado tu has estado encerado durante mucho tiempo.''

El pelirrojo sabia que su figura de hermano había estado encerrado en 3 personas siendo él mismo, la tercera pero nunca le dijo quienes fueron las 2 otras. Cuando pregunto, el zorro simplemente le dijo que se lo diría cuando estuviera preparado. El pequeño no lo entendió, pero a pesar de ello decidió confiar en su hermano. Esta conversación llevaría a revelar cierta información que no querría divulgar. No porque no confiara en el sino porque las respuesta podrían destruir completamente al niño. Solo iba a decírselo cuando estuviera listo y el nunca lo estaría en este infierno que era Konoha.

Kurama sonrió aliviado, al fin había conseguido convencerlo'' Lo pensare durante la noche, por ahora vete a dormir y ya hablaremos más adelante en cuanto te recuperes. ''

Naruto asintió y se acerco al borde de su garra para abrazar su hocico. El pobre chico casi no había tenido contacto humano en su vida siendo el zorro gigante y el viejo Hokage las únicas excepciones. Por ello, Kurama le permitía abrazarlo siempre que quería, aunque nunca lo admitiría, en el fondo el antiguo bijuu lo disfrutaba. Los dos se quedaron así durante un rato hasta que Naruto lo soltó y le dio una pequeña pero genuina sonrisa.'' Buenas noches Kurama-nii. '' dijo el pelirrojo antes de desvanecerse.

En cuanto se fue, el zorro se tumbo y puso su cabeza encima de sus patas y se sumió en una profunda reflexión. Sacar a su cachorro de este lugar no iba a ser fácil. La seguridad era bastante estricta en el pueblo no solo para aquellos que quisieran entrar sino también para los que querían salir.

Tramo algunos planes en su cabeza durante un tiempo pero todos ellos eran demasiado arriesgados y peligrosos. A medida que pasaba el tiempo el Kurama empezó a desesperarse un poco y no pudo evitar maldecir por millonésima vez al Yondaime por poner al pequeño en esta situación. Pero de pronto una idea le vino mientra recordaba su pelea de hace 6 años. Para ser precisos en un sapo gigante que se le callo encima para inmovilizarlo.

''Podría funcionar, pero es una apuesta muy arriesgada'' Empezó a sopesar los pros y los contras ''… buena nuestro objetivo es salir de aquí y encontrar un lugar seguro, después de eso ya improvisaremos sobre la marcha.'' No le gustaba arriesgar a su pequeño pero era la mejor opción. Decidió hablar lo con él en cuanto saliera del hospital.

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Hospital de Konoha

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Era tarde en la noche cuando el pelirrojo abrió los ojos y no le gusto su situation. Había estado tantas veces en el hospital que aprendio a odiarlo con pasión. El olor de los fármacos y las paredes blancas sin vida no ayudaba tampoco. Pero entonces noto algo diferente. Levando débilmente sus manos hacia su cara y sintió el vendaje envuelto en su cara sobre su ojo izquierdo. Lo que no podía sentir era el ojo detrás del vendaje y entonces entro en pánico. El shock alcanzo por fin al pobre niño tuerto y empezó a llorar y a gimotear de nuevo. Los aldeanos jamas habían ido tan lejos y estaba aterrado de lo que pasaría la próxima vez si se quedaba.

Intento ponerse recto y levantarse de la cama pero se sentía cansado y los sedantes que entraban en su cuerpo no ayudaban. Fue entonces cuando noto unos brazos envolviendo su cuerpo y alzo la vista hacia arriba aterado por su vida solo para ver una de las pocas persona que se preocupaban por él: el Sandaime Hokage, Hiruzen Sarutobi.

El anciano llevaba un largo haori blanco que tapaba completamente su cuerpo a excepción de la cabeza donde tenia su sombrero que lo distinguía como hokage con un kanji ''Fuego'' de color rojo que tapaba su pelo de punta de color gris canoso. Tenia varias arrugas en su frente y por debajo de los ojos mostrando su avanzada edad, una perilla de color gris canoso y unos ojos negros en los que solo se podía ver preocupación y tristeza.

Naruto al ver a su abuelo en todo menos la sangre, solo pudo abrazarlo y llorar a moco tendido mientras el anciano solo podía acariciarle la espalda sin saber que decir.

Le había fallado, otra vez. Lo había hecho tantas veces que solo podía odiarse aun más por ello. En su vida había cometido muchos errores pero el que tenia en sus brazos ahora era el mayor de ellos. Ningún niño debería tener este tipo de daño, aun menos por su propia gente y solo podía culparse a si mismo. Jamas debió escuchar a su sucesor y revelar su situación como jinchuriki. El yondaime pensó que al hacerlo el pueblo lo trataría como a un héroe, que estúpido y ingenuo fue, la vida de estos pocos era una de dolor, el nombre de las personas como él lo decía todo: el poder del sacrificio, tal era el significado de la palabra jinchuriki. Debió mantenerlo en secreto, tal y como fue con sus dos predecesoras pero en vez de eso anuncio su condición públicamente y las reacciones no se hicieron esperar.

Los civiles ignorantes pidieron su muerte a gritos, los ninjas tuvieron reacciones mixtas: a pesar de saber la diferencia entre el niño y el demonio algunos pidieron su muerte también, otros simplemente decidieron ignorar el tema y en el futuro no relacionarse con el y unos pocos pensaron en convertirlo en una arma. Debería haber sabido lo que pasaría después de todo había tenido una reunión con el consejo antes de hacer el anuncio y sus reacciones habían sido las mismas. El consejo civil clamando por su cabeza, los jefes de clan no quisieron saber nada del tema excepto Fugaku Uchiha, pero sus intenciones con el recién nacido estaban mas que claras para el Sandaime Hokage y no iba a permitir que Naruto estuviera bajo su custodia. Los ancianos tuvieron la misma idea que el líder Uchiha: convertirlo en una arma. La única diferencia era que Fugaku quería que el infante fuera leal a su clan mientras los ancianos lo querían leal al pueblo.

Hiruzen hizo una mueca al recordar los acontecimientos pasados, se reprocho por millonésima vez el no haberlo visto venir. Debería haber guardado el secreto y mentido para protegerlo, en vez de eso le clavo una diana gigante en su espalda. Lo único que pudo hacer fue declarar su condición como jinchuriki un secreto de rango S para evitar que el odio de los mayores se propagara a la generación más joven y, francamente, no sirvió de nada. Los adultos a pesar de no contarles el porque, siempre les prohibieron a sus hijos el relacionarse con él condenando al muchacho a una vida de soledad y dolor. Sin duda, la situación de su nieto adoptivo era y seria siempre el peor error de su vida.

''Jiji'' la voz entrecortada por los sollozos del pequeño acurrucado en sus brazos lo trajo de vuelta a realidad ''Ya no...(Snif)...puedo más, no quiero que me...(Snif)...hagan más daño, quiero que paren...(Snif)...¡quiero ser feliz!'' acabo gritando el pelirrojo para acabar llorando de nuevo en los brazos del anciano.

Hiruzen no pudo evitar las lagrimas que se asomaban por sus ojos y solo pudo apretar aun más al niño entre sus brazos para consolarlo mientras en su interior el sentimiento de odio y desprecio en si mismo seguía creciendo por momentos

El anciano no lo soltó hasta que Naruto acabo dormido en los brazos del ninja veterano. Lo puso de nuevo en la cama y demoro un poco su mano sobre su rostro mientras lo miraba con arrepentimiento. Solo duro unos segundos y poco después procedió a salir de la habitación

''AMBU'' dijo y de pronto entre las sombras, 5 ninjas con mascaras de porcelana en forma de animales salieron de las sombras. Estos hombres y mujeres llevaban todos una armadura que cubría el pecho, estomago y los antebrazos, unos pantalones negros estrechos y un tatuajes en espiral en el hombro izquierdo ''Escuchadme bien porque no voy a repetirme, os vais a quedar aquí hasta que Naruto se recupere, vais a montar guardia día y noche y si le pasa algo, os aseguro que lo que vais a perder no sera vuestro rango, sera vuestra vida .¿Entendido?'' los ninjas veteranos se estremecieron por el tono del anciano, esas palabras fueron dichas en voz baja pero el tono del anciano dejo bien claro que si la cagaban podían darse por muertos.

''Hai Hokage-sama''

Hiruzen asintió ''Neko(Gato), quedas al mando de momento, tengo que hablar algunos asuntos con el capitán Inu(Perro)'' Esas palabras fueron dirigidas a una mujer de pelo violeta con una mascara de gato y una bella figura que solo pudo asentir mientras veía a su líder irse hacia la torre Hokage con el capitán de su equipo AMBU

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Torre Hokage

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El Sandaime Hokage entro en su despacho con Inu siguiendo detrás y se apresuro a sentarse en su silla mientras su subordinado serraba la puerta. Hiruzen soltó entonces un largo suspiro lleno de pesar y se quito el sombrero'' quítate la mascara Inu'' el capitán obedeció.

Dicho hombre tenia un cuerpo bien tonificado mostrando un duro entrenamiento incluso con la armadura puesta y el pelo de punta de color gris. En cuanto se quito la mascara Hiruzen pudo ver la cara de dicho hombre. Llevaba una mascarilla que ocultaba su boca, mejillas y nariz, pero sus ojos disparejos eran bien visibles, El derecho era de color negro mientras su ojo izquierdo era rojo con 3 tomoes girando perezosamente. El nombre de este hombre era Kakashi Hatake, el único estudiante superviviente del Yondaime Hokage.

A pesar de tener la boca tapa, ocultando su expresión facial el remordimiento e impotencia eran bien visibles en sus ojos.

''Esto a ido demasiado lejos Kakashi, Naruto a perdido un ojo esta noche y temo que en el futuro vaya a perder algo''

El ninja copion solo pudo apretar los puños con rabia'' ¿Que a pasado con los civiles que lo atacaron?'' pregunto.

''La mayoría los he enviado con Ibiki, por desgracia eran demasiados y algunos consiguieron escapar, y sin pistas no vamos a encontrarlos. Por desgracia hay poco que pueda hacer antes de que el consejo civil se meta de por medio.''dijo con pesar

El peligris dijo con tono enfadado''¿Entonces que?¿Va a soltarlos mañana como si nada?''

''Por desgracia sí. Debido a mi negligencia los he dejado ganar demasiada influencia, si no los suelto lo mas seguro es que armen un alboroto. La condición de Naruto como jinchuriki no ayuda con el caso''

''Sensei y Kushina-sama debe estar revolviéndose en su tumba en este momento.'' Kakashi penso

''Si tan solo supieras'' pensó el anciano con ironía

''No hemos podido evitar los acontecimientos de hoy, pero podremos evitar los de mañana en adelante, en cuanto Naruto salga del hospital voy a ponerte al mando de un equipo para protegerlo'' dijo con confianza el líder del pueblo

El capitan AMBU se sorprendió por la decisión de su líder''¿Acaso el consejo civil no protestara? Algunos pensaran que asignar un equipo AMBU para proteger un niño de 6 años es un poco exagerado'' dijo un poco preocupado.

Hiruzen tan solo pudo sonreír ''Pueden protestar todo lo que quieran, a pesar de su influencia, las fuerzas shinobi siguen cayendo bajo mi mando directo y el consejo no tiene derecho a entrometerse.''luego entrecerró los ojos'' Ademas, puedo contar con Danzo para apoyar mi decisión, a pesar de que nuestros motivos son muy diferentes.'' Kakashi entrecerró los ojos con suspicacia a la respuesta del Sandaime.

Danzo Shimura o como los veteranos lo conocen 'Yami no Shinobi'( Shinobi de la oscuridad), eran uno de los ancianos del consejo. Era un anciano moreno con una cicatriz en forma de 'X' en su mentón que había perdido su brazo y ojo derechos durante la Tercera Gran Guerra Ninja. Los había tapado con vendajes y llevaba generalmente un kimono azul oscuro con un bastón en su mano izquierda.

Tenia una filosofía mas militarista de lo que debería ser Konoha. El creía firmemente que los ninjas eran armas ante todo y que los sentimientos eran innecesarios. El y Hiruzen tenían ideas radicalmente diferentes pero el punto en común que unía a estos 2 antiguos amigos es que tenían ante todo el bienestar del pueblo.

''¿Hokage-sama, esta seguro que podemos contar con el sobre este asunto?'' pregunto desconfiado el ninja peligris.

El Sandaime encendió su pipa y le dio una profunda calada antes de contestarle ''No me cabe duda, en sus propias palabras; al pueblo no le sirve de nada una arma rota.'' dijo con cierto desdén mientras kakashi solo podía hacer una mueca detrás de su mascara ante la sola idea.

''De todas formas seguiremos con este asunto cuando Naruto se recupere, mientras tanto, deberías ir a ver a Ibiki. Estoy seguro que no le importara tener publico y quien sabe, quizás te deje participar'' le dijo con una sonrisa taimada

Kakashi se animo visiblemente ante esas palabras. Ibiki Morino, era un sádico consumado en el arte de la tortura y lo mas seguro es que estuviera ocupado jugando con los civiles que atacaron al pelirrojo. Oh si, desde luego no le importaría pasarse un rato para inspeccionar su trabajo.

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Hospital de Konoha

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Habían pasado dos días desde el incidente y el estado de animo de Naruto solo empeoro. Estar obligado a quedarse en cama nunca le gusto y la mirada de disgusto de las enfermeras que lo atendían no ayudaba. Cuanto más tiempo pasaba , la idea de Kurama sobre dejar el pueblo se volvía más tentadora.

Finalmente le dieron el alta y se dirigió caminando hacia su casa. El pelirrojo vestía unos pantalones azules con unas sandalias shinobi a juego y un camiseta de manga larga roja que Neko le había traído de su casa. La kunoichi enmascarada también le había avisado que los aldeanos se habían colado en su apartamento y habían causado un buen destrozo. Naruto solo pudo suspirar con cansancio y mirando a su alrededor. Las miradas de todo el mundo estaban sobre el. Las miradas de desprecio o odio no eran nada nuevo, se había acostumbrado muy a su pesar. Lo que le dio miedo de verdad fueron las muecas de placer enfermo que algunos aldeanos llevaban mientras miraban la venda sobre su ojo izquierdo. Ya no soportándolo más se dirigió corriendo a su casa mientras trataba de no llorar, no quería darles la satisfacción.

Cuanto llego a la entrada de su apartamento abrió la puerta sin percatarse que el pestillo estaba roto y vio el panorama que era su casa. Las ventanas del salon/cocina estaban rotas, su mesa para comer tenia las patas rotas y no le hacia falta ir a hacia su habitación o el cuarto de baño para saber que estarían en un estado similar. Naruto dejando que sus emociones se hicieran cargo, dejo que sus lagrimas salieran a brotes y se acurruco en un rincón de la sala muerto de miedo.

''Shhh, tranquilo cachorro, tranquilo, ya no tendrás que soportar más todo esto, nos vamos hoy mismo.'' oyó el pelirrojo en su cabeza. Se seco las lagrimas y escucho con atención al zorro en su cabeza. Kurama sonrió ''¿Muy bien, sabes lo que son los contratos de invocación?''

''No ¿debería?'' le pregunto confundido el niño.

''Bueno, no necesariamente, son bastante raros la verdad aunque aquí en Konoha abundan bastante. Básicamente, existe otro reino, otra dimensión donde viven una serie de animales especialistas en las artes shinobi que pueden ser convocados para que te ayuden en la batalla. Para ello debes firmar un pergamino en el cual se te reconoce como invocador de dicho clan. Generalmente esos clanes lo hacen para presumir entre ellos, aunque algunos prefieren mantenerse al margen.'' le explico con paciencia el antiguo zorro

Naruto le pregunto entonces con duda ''¿Pero yo no tengo ninguno y tampoco sé donde conseguirlo, y tu Kurama-nii?''

''Ese es el tema cachorro, hay otra forma para obtenerlos. Si estas afiliado naturalmente a uno de esos clanes de invocación y realizas los sellos de mano par el jutsu de invocación acabaras en las tierra de dicho clan. No voy a mentirte las probabilidades no están a tu favor, solo un grupo de personas muy selectas tienen esa opción pero es lo mejor que se me ocurre para sacarte de aquí sin ponerte en riesgo.''

Naruto empezó a reflexionar sobre ello. Básicamente, estarían apostando mucho. Si el jutsu funcionaba acabaría en la tierra de uno de esos clanes pero eso no quería decir que lo aceptarían como invocador o que el clan al que estaba afiliado podrían ayudarle a entrenar. Aunque no tenia nada que perder, si el jutsu no funcionaba, tendría que encontrar una forma de escapar por otros medios.

''¿Vale, que tengo que hacer Kurami-nii?''

''Primero haz las maletas y luego si quieras, deja alguna carta para las personas que te importan, luego te daré instrucciones.''

El pelirrojo se apresuro a obedecer y se fue a su habitación para recoger su ropa, o lo poco que quedaba de ella. Los aldeanos no se habían cortado un pelo, su colchón estaba partido por la mitad y su armario hecho un desastre, aun así consiguió encontrar algún que otro cambio de ropa, algunas cosas de higiene personal y lo puso todo en una mochila que tenia por ahí cerca. Luego se apresuro a buscar un pergamino en blanco, tinta y un pincel pero a la hora de escribir se quedo en blanco.

Naruto no tenia muchas personas querida aparte de su figura de hermano, las podía contar todas con una sola mano; su jiji, Ayame-nee-chan y Teuchi-oji-san. Pero aun así no sabia que escribir, como le dices a las personas que te quieren que te vas porque ya no puedes soportar vivir en el pueblo donde vives. Al final decidió ser sincero y soltar todos sus sentimientos reprimidos, todo el dolor, toda la desesperación guardada durante 6 años de abuso fue plasmada en papel con una caligrafía impecable. Al acabar vio algunas manchas sobre el papel y se dio cuenta que había dejado escapar algunas lagrimas mientras escribía pero poco importaba ya. El niño se dirigió hacia la cocina y dejo la carta sobre la encimera de la cocina y se preparo mentalmente para su (posible) partida.

''¿Lo tienes todo?'' Le pregunto su hermano.

''Si''

''¿La ropa?''

''Si''

''¿Un cepillo de dientes?''

''Siiiii''

''¿No quieres ir al baño antes de irnos?''

''¡Nii-chan! exclamo el pequeño

''Vale, vale solo me aseguraba.'' Naruto hizo un puchero, Kurama se preocupaba demasiado a veces

''Ya te he enseñado los 12 sellos manuales, ahora los que necesitas hacer son, en orden: I (Jabali), Inu (Perro), Tori (Pajaro), Saru (Mono) y Hitsuji (Carnero).''

Naruto asintió y procedió a hacer los sellos requerido mientras en su interior, Kurama rogaba a su difunto creador con todas sus fuerzas para que todo esto funcionara.

''Ninpo: Kushiyose no jutsu.''

Entonces, el pequeño niño desapareció en una nube de humo dejando el apartamento destrozado completamente vació.

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Calles de Konoha

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Era ya de noche cuando Hiruzen acabo sus labores del día y decidió hacerle una visita a su nieto sustituto. El líder del pueblo iba escoltado por el mismo equipo AMBU que había protegido al niño los últimos 2 días. Después de que Neko le contara el estado de su apartamento, decidió que por esta noche podría dormir en su casa y mañana le ayudaría a encontrar un nuevo hogar.

En cuanto llego a la entrada de su apartamento, llamo enseguida y espero. La tardanza le extraño mucho, pensando que quizás el pequeño no lo había oído volvió a llamar y siguió sin obtener respuesta.

''Quizás esté en Ichiraku Ramen.'' sugirió Inu

'' No lo creo, a estas horas ya deben haber cerrado.'' contesto el anciano y intento abrir la puerta. Cuando esta se abrió, el anciano entro en pánico temiéndose lo peor y rápidamente entro con sus AMBU siguiendo detrás. Encendió la luz y vio al fin el estado del apartamento, era completamente inhabitable como se había temido pero no había rastro del niño.

''Buscadlo, tiene que estar por aquí.'' dijo en panico y sus subordinados se apresuraron a obedecer.

El anciano se dirigió hacia la cocina para ver si encontraba algo y entonces vio el pergamino. Con mano temblorosa y ya sabiendo lo que había pasado, lo abrió para leer las ultimas palabras que iba a saber del pequeño en mucho tiempo. Al final de la carta el pobre anciano se dejo caer de rodilla mientras las lagrimas caían por sus mejilla

''Lo siento Naruto, lo siento tanto.''

Era evidente para Hiruzen que Naruto se había ido para no volver, solo podía esperar que allá donde estuviera fuera mas feliz de lo que fue aquí.

X END X

Bueno este era el primer capitulo, espero que os guste, e intentado mostrar la relación de Naruto con el conjunto del pueblo así como su personalidad, es listo, muy listo, pero a pesar de su mierda de vida que le ha obligado a madurar rápido, sigue siendo un niño. El próximo capitulo ya os enterareis con que clan acaba, pero esa no sera su única invocación.

Dejad vuestros comentarios, me puede ayudar mucho a mejorar.