¡Hola, pequeños chikis!

Les presento un pequeño trabajo que no pude evitar escribir en un momento de inspiración.

Se lo dedico a mis queridas Viliandra Odette y Moon Erebos.

A una porque sin ella jamás habría descubierto este anime y esta linda pareja. Y a la otra por hacerme ilusionar tanto con ellos. ¡En verdad eres una manipuladora Lunita! :3

Espero sea de su agrado.


— COLMILLOS —


Observa la mano posada en su mejilla.

La siente cálida, la ve pequeña y borrosa. Pero eso no evita que su corazón salté de forma dificultosa.

Levanta la vista hasta el rostro del pequeño niño, que le sonríe con esa estúpida sonrisa falsa de "todo estará bien", aunque ambos saben que llegados a tal punto las cosas solo pueden ir a peor.

Cierra los ojos, sintiendo que el recuerdo de la horrenda muerte del niño delante de sí volvía a él como tantas otras veces. Unas pequeñas lágrimas salen entre párpado y párpado.

Le duele el corazón, tanto psicológica como físicamente. Con esfuerzo se lleva una mano al pecho, y en seguida el guante blanco se tiñe del rojo de su propia sangre. Era un milagro en si mismo que le clavasen una espada en el órgano vital y aun siguiese vivo. Pero de todas formas, su corazón brutalmente herido no tardara mucho en dejar de latir.

Sus ojos verdes vuelven abrirse, topándose con el niño de antes, esta vez convertido en un chico de su edad. La estúpida sonrisa seguía ahí, junto a unos brillantes colmillos.

Tenía su gracia.

Ocho años odiando a los vampiros, y término enamorándose de uno.

Uno el cual se convirtió en vampiro para salvar su vida, cabe destacar.

— Todo estará bien —le susurra Mika, la frase perfecta para acompañar su farsa, dicha con voz teñida de dolor y remordimientos—. Pronto dejaras de sufrir.

¿Dejar de sufrir? No. Yuu solo dejaría de sufrir en cuanto viera cumplida su venganza. Cuando las cabezas decapitadas de los otros vampiros que hicieron sufrir al suyo estuvieran quemadas a fuego lento.

No, se había pasado cuatro años creyendo que su amor estaba muerto, y ahora que volvían a verse... definitivamente no podía desfallecer ahora.

Humano o vampiro, Mika seguía siendo Mika ¿Qué importaban los colmillos? Si su rubio nunca había probado la sangre humana, ni lo haría... a menos que él se lo pidiera.

— Co... nvierteme —susurró con esfuerzo. Para después tomar una larga bocanada de aire, que solo le hizo más daño.

Mika abrió sus ojos como platos.

— ¡¿Qué?! —preguntó a pesar de haber escuchado perfectamente.

— Con... vierteme en vampiro... —otra respiración dolorosa— Es la un... única manera.

Mika negó efusivamente, con lágrimas cayendo de sus ojos azules. Su moreno no tenía idea de lo que estaba pidiendo.

Yuu llevó su temblorosa mano manchada de sangre a la mejilla de su amor. Entendía su negativa. A él mismo tampoco le hacía gracia, pero por suerte comprendió en el último momento que los colmillos no hacían la gran diferencia en esa guerra.

— Por favor...

Todas las defensas del vampiro se fueron por el desagüe. Era la primera vez que escuchaba a su moreno decir esas palabras. ¿Qué podía perder?

Con un poco de reticencia, juntó sus labios, en un tierno primer beso, en el cuál sus afilados caninos se enterraron en el labio inferior de su amado humano, dejando que surcos de sangre salieran de las comisuras de estos.

Si lo había hecho a tiempo para salvar a Yuu o no... Eso solo el tiempo lo diría.


¿Yuu murió o se convirtió en vampiro? Ni yo lo se xD

Lo dejo en final abierto para que ustedes escojan lo que les guste más. (Supongo Luna que tú ya sabes porque lo digo XD)

Espero que os gustase.

Sin más...

¡Nos vemos!