¡Oh sí! ¡Eh vuelto a casa! No saben cuánto eh extrañado publicar y actualizar aquí. Pero no los pienso aburrir con un gran mensaje de regreso…eso va hasta el final XD. Bueno ya, sin más preámbulos…eh aquí…el comienzo…
Capitulo. 1. Prologo
Todo estaba prácticamente tranquilo y con normalidad en el departamento de policía. Garranza estaba como de costumbre comiendo donas y jugando con su aplicación de Gazelle. De repente, la puerta se abre viendo una conejita y un zorro ambos con traje de policía y que llevaban esposado a un rinoceronte. El leopardo sin poder evitarlo rio para después asomarse y ver a Judy.
-Valla, valla, veo que les fue bien ¿no?- decía al mismo tiempo que otros oficiales se llevaban al rinoceronte a las celdas
-Ja, ya lo creo, dime ¿Cuántos criminales hemos atrapado en la semana?- pregunto emocionada
-Bueno, contando a este… ¡felicidades! Ya han capturado a diez en la semana-
-¡Sí!- grito feliz al mismo tiempo que daba leves saltos y movía su nariz
-Tranquila zanahoria, deberías relajarte un poco- le dijo su compañero mientras le dedicaba una sonrisa divertida
-Me relajare después cuando ya no quede ni un solo criminal en Zootopia, ahora, tengo que ir a investigar sobre a quien más hay que atrapar-
Y sin decir más se fue directo a su cubículo dejando a los dos depredadores ahí.
-Nunca va a cambiar- menciono Nick al mismo tiempo que se quitaba sus lentes para verla irse
-Si…pero no por nada fue la mejor estudiante en su grupo y la primera graduada-
-Si tienes razón, mejor voy a buscarla antes de que recuerde que acabamos con todo el trabajo que nos dio el jefe Bogo-
-No quisiera ser tú-
-Ni yo, pero alguien debe tenerla contralada-
Y sin más se fue al cubículo de Judy donde la vio buscando en diferentes carpetas cualquier caso nuevo. Debía admitir que eso era algo que le gustaba de ella, su gran interés de trabajar para hacer de Zootopia cada día mejor. En cambio el, francamente, se limitaba a ir con Judy y ayudarla en todo lo posible pero contrario a ella no creía que los delincuentes se acabaran y que todo fuera paz, siempre habrían varios que seguirían o llegarían nuevos, pero nunca dejaría de haber crimen.
-¡Ahhh! Ya no hay nada- se quejó ella dejando caer su cabeza en el escritorio
-¿Qué pasa, zanahorias? Creí que te alegraría que ya no hubiera crimen- le dijo con su típica sonrisa al mismo tiempo que jalaba una silla y se sentaba a su lado
-Sí, pero… siento que estoy haraganeando cuando podría estar deteniendo a alguien-
-Pues si lo que quieres es que ya no haya crimen por aquí acostúmbrate, creí que lo comprenderías coneja torpe-
Judy se limitó a sacar un suspiro de cansancio. La verdad, es que ese rinoceronte los había hecho correr mucho, casi por toda la ciudad en realidad.
-Y además estas cansada ¿Qué voy a hacer contigo, saltitos?- se rio Nick –nuestro turno ya está por acabar ¿Qué tal si vamos por un café?-
-En realidad eso suena bien- responde dándose cuenta que si estaba muy cansada y todo eso
-Muy bien Judy, prepárate que ya nos vamos-
La coneja guardo todos los expedientes resueltos y se apresuró a alcanzar a su mejor amigo, el cual ya la esperaba en el lobby. Fueron a una cafetería no muy lejos de la comisaria y lo curioso es que al ser conocidos como "los primeros coneja y zorro en la policía" sin mencionar que también por descubrir y acabar con el caso de los que se volvían salvajes, algunos animales cuando los veían le preguntaban si se podían tomar selfies con ellos. Una vez que llegaron cada uno pidió su café y se quedaron ahí hablando un rato.
-¿No te parece extraño que nos pidan tomarnos fotos con ellos?- comento Judy
-Si un poco, pero por otro lado somos conocidos como "imponentes policías"-
-Mejor dejémoslo en "buenos policías", yo no me termino de acostumbrar, es decir…así es como tratarían a Gazelle si la vieran por la calle-
-Recuerda zanahoria, encontraste a sus familias es normal que te traten como celebridad-
-Ahí cometiste un error- indico Judy
-¿Cuál?-
-Que no lo descubrí solo yo, lo hicimos los dos juntos-
Sin darse cuenta, Judy dejo su mano casi rosando la de Nick y este al darse cuenta de eso la separo rápidamente con las mejillas pintadas de rojo. Miro de reojo como su mejor amiga ni siquiera se había percatado de eso. Por un lado se alegró porque no había notado su sonrojo; pero por el otro se entristeció porque no había acercado su mano a propósito como cuando iban en el teleférico. Si, era cierto…a Nick le gustaba Judy, mejor dicho, estaba enamorado de ella; el problema era que no sabía cómo darle a entender lo que causaba en el. Había hecho algunos esfuerzos en vano diciéndole que tenía un bonito color de ojos o que era lindo lo que hacía con la nariz. Pero ella nunca captaba el mensaje. El rato pasó y cada uno se fue a su casa. Por suerte para nuestra coneja favorita, había logrado encontrar un departamento más bonito, más grande y estaba a una distancia adecuada tanto de la comisaria y de la casa de Nick.
Justo entonces empezó a sonar su teléfono y al ver que era una video llamada de sus padres contesto.
-Hola mamá, hola papá-
-Hola Judy ¿Cómo te va?- hablo su mamá
-Normal, atrapando a los criminales y encerrándolos-
-Oh que bien por ti, cariño ¿verdad Stu?-
-Claro, por supuesto- decía el conejo algo apurado y nervioso como de costumbre
-Díganme ¿Cómo está todo por allá?-
-Oh excelente, muy excelente- dijo Bonnie
-Si excelente, nunca hubiera imaginado que trabajar con Gideon iba a ser mucho mejor para el negocio, las ventas han subido-
-Eso es genial, me alegra que empiecen a aceptar a los zorros- dijo más para sí misma que para sus padres
-Deberías venir un día de estos, cielo-
-Claro mamá, cuando tenga vacaciones iré a verlos los extraño mucho, amm…mañana tengo trabajo así que…-
-Oh si, si, si te dejamos dormir, descansa, adiós-
-Adiós-
Y sin decir más Judy corto la llamada. Se fue a cambiar y no tardo nada en ir a dormir, ese sí que había sido un día muy pesado y lo único que quería cerca o era un café o su cama. Sin embargo, al caer dormida tan rápidamente no logro escuchar que tenía una llamada entrante y de un número desconocido, pero el animal que estuviera del otro lado sí que era persistente pues ya tenía más 20 veces que llamaba. Hasta que finalmente las llamadas cesaron, pero cualquiera diría
"En la mañana despertara y vera el numero e investigara quien la llamo tantas veces"
Pues no.
Porque misteriosamente, las llamadas perdidas empezaron a disminuir, una por una la cantidad cada vez iba siendo más pequeña hasta que finalmente el buzón de llamadas perdidas quedo completamente vacío.
Y hasta aquí el capítulo. Espero que les haya gustado, por favor dejen review diciendo que les pareció y lo gracioso es que apenas vi "Zootopia" ayer 19 de marzo (mi cumpleaños, por cierto) y estoy publicando el fic el 20 XD es que no pude evitarlo bueno. Nos leemos luego.
¡Hasta el próximo capítulo!
¡Princesa Twilight Sparkle 1, fuera!