SOBRE EL FIC:

Esta es una historia crossover entre Harry Potter y Naruto, basada en una historia anterior de mi autoría llamada "Magos y Shinobis".

SOBRE LA HISTORIA:

La historia se centra en el equipo 7 enviado por alguna extraña razón al mundo de Harry Potter, el arco argumental abarca hasta el libro 3 y un año y medio después del final de Naruto, pero con modificaciones de la historia a partir de que Naruto se va con Jiraiya.

SOBRE LAS PAREJAS:

Soy fanática de las parejas extrañas, así que verán algunas por aquí, no entrare en detalles pues se perdería la sorpresa.

NOTAS PERSONALES:

Esta historia está dedicada a quien es y será siempre mi Musa, quien me apoya en mis locuras y me alienta a seguir adelante, mi mejor amiga y hermana del alma Sou, también está dedicado a todos aquellos que seguían mi primera historia "Magos y Shinobis"*, principalmente a Bucio quien me dejaba Reviews muy largos que me animaban a continuar.

*Para más información leer la nota final.

LOS PERSONAJES E HISTORIA DE LOS LIBROS DE HARRY POTTER SON DE J.K. ROWLING, Y LOS DEL MANGA NARUTO SON DE MASASHI KISHIMOTO, YO LOS UTILIZO COMO ENTRETENIMIENTO Y SIN FINES DE LUCRO.

ADVERTENCIAS:

Habrá las necesarias para cada capítulo que lo requiera.

ACLARACIONES:

–Dialogo normal (en mundo mágico Ingles, en mundo Ninja Japones)

–Dialogo en otro idioma (en mundo mágico Ingles, en mundo Ninja Japones)

Chapter 1: Intro

La destrucción era inevitable.

El uso de técnicas dentro de un lugar tan pequeño como lo era aquella cueva, solo podía generar la avalancha de rocas que se abalanzaba rápidamente sobre sus cabezas.

Sasuke no tenían forma alguna de salir de ahí, luchando contra los escombros diviso un cuerpo entre toda la polvareda, intento estirar su brazo para alcanzar a quien parecía ser uno de sus compañeros cuando sintió el pulsante dolor a su costado, una saeta partida por la mitad atravesaba la piel derramando algunas hileras de sangre por ambos orificios, no tenía tiempo de pensar en ello en este momento, volteo de nuevo hacia el frente y no logro divisar de nuevo a la persona que buscaba.

El tiempo parecía haberse detenido a su alrededor, la presión de las rocas y el polvo lo obligaba a retroceder, buscaba algo, lo que sea que le diera esperanza, cuando se topó con un cuerpo.

Rápidamente le dio vuelta y vio las señas características de un cadáver, suspiro involuntariamente al constatar que no era uno de los suyos. El piso dejo de temblar en ese momento, solo se escuchaba el leve siseo de la tierra mientras se deslizaba entre las rocas hasta llegar al suelo, camino sigilosamente entre los paredones, tratando de evitar otro derrumbe mientras sus ojos se acoplaban lentamente a la obscuridad.

Podía sentir cada vez más fuerte una presión, no, una desesperación sería lo más correcto, un giro en el improvisado pasillo le mostró un tenue brillo al final, una salida.

Cuando llego a la pequeña luz escucho un gemido de dolor a su izquierda, giro su cuerpo lentamente pero no vio a nadie, lentamente avanzo unos pasos y encontró otra curva, en uno de los lados visualizo un movimiento leve pero continuo, como si la tierra estuviera respirando, se aproximó y noto una capa de lodo, tierra y rocas aprisionando el cuerpo de su compañera de equipo.

Suavemente desenterró el dorso y la pierna derecha tratando de no moverla mucho por si estaba malherida, milagrosamente la cabeza, brazos y pierna izquierda no estaban enterrados, quizá en el revuelo ella misma intento mantenerse en movimiento para no quedar totalmente enterrada, la arrastro hasta un lugar más amplio, cercano a la pequeña luz de la salida para revisar las heridas de ella y las propias.

La saeta que atravesaba su costado solo era un trozo largo de lo que antes había sido una flecha ligera, no parecía haber dado en algún órgano, pero al no estar seguro decidió solo quebrar los excedentes e improvisar una venda con lo que quedaba de la manga de su camisa.

Otro gemido seguido por un suspiro fuerte y Sakura estaba abriendo los ojos acoplándose a la escasa luz del lugar. En cuestión de segundos estaba rígida y alerta esperando un ataque que nunca llego, levanto un poco la cabeza y vio a Sasuke maniobrar con los retazos de lo que probablemente había sido antes su camisa. Al ver que no había peligro hizo un repaso mental de su condición, una pierna rota, dos costillas dañadas, probablemente fisuradas o en su defecto también rotas y algunos otros golpes más leves, en ese estado no podía hacer mucho, necesitaba entablillar la pierna y fijar las costillas antes de poder levantarse.

Sasuke notando el movimiento de Sakura giro su cuerpo para estar de frente con ella

- ¿Que tan graves son tus heridas?

- No mucho, la pierna rota y dos costillas dañadas, necesito que me ayudes a fijarlas

Sasuke no tenía el conocimiento médico que su compañera, pero sabía seguir sus instrucciones al pie de la letra, un rato más tarde después de atender las heridas de ambos, Sakura estaba sentada a espaldas de la salida y Sasuke se adentró de nuevo en la cueva en busca de Naruto con una pequeña linterna que Sakura traía entre su ahora escaso equipo médico.

Mientras más se adentraba entre los restos de cueva, más viciado estaba el aire y la presión aumentaba, sentía como si estuvieran estrangulándolo. Se concentró en sentir el Chakra de su compañero, pero la falta del mismo en él dificultaba dicha acción.

Después de un tiempo, ¿segundos, minutos, horas? No estaba seguro de cuanto, hasta que al fin logro encontrar un destello, muy tenue, pero estaba ahí, fluyendo pausadamente, como si estuviera dormido, le llamo la atención aquello, puesto que Naruto no se caracterizaba por ser tranquilo y su Chakra normalmente era enérgico y explosivo, exactamente como su personalidad, mientras más se acercaba notaba que la sensación de pesadez aumentaba el aire tenía un ligero olor a tierra, agua, lodo y… ¿sangre?

Se detuvo en seco al reconocer la sensación, ese no era el Chakra de Naruto, bueno, sí lo era, pero no precisamente el que su propio cuerpo generaba, era el de su inquilino, el Kyūbi no Yōko, pero estaba tranquilo y eso no era bueno, olvidando todo el dolor de sus heridas se echó a correr en dirección de la firma de Chakra.

Cuando llego ahí se detuvo respirando muy agitado, el cuerpo de Naruto estaba en una posición extraña boca abajo, entre lo que parecían dos pilares con símbolos que nunca antes había visto. Del cuerpo de su compañero brotaba tranquilamente un halo de luz rojiza, no había visto una escena de esta magnitud, lo más normal era ver como cerraban rápidamente sin dejar rastro, como si nunca hubieran estado ahí, pero esto era totalmente distinto, parecía que el mismo Chakra acariciaba la piel mientras cerraba las cortadas lentamente.

Se acercó con pasos ligeros intentando no caer entre los restos esparcidos por el suelo, dio gracias por estar en una sección más amplia y no en los pasillos estrechos de la cueva, al llegar junto a Naruto observo la luz que emitía su cuerpo, a diferencia de la última vez, ahora no sentía la presencia del zorro, algo muy extraño.

Vacilante coloco una mano en la espalda de su compañero y grande fue su sorpresa cuando el Chakra se esparció hacia un lado, como dándole permiso de tocarlo. Despacio inicio la labor de sacarlo de ahí, cuidando no lastimarlo o a sí mismo, cuando lo dejo recostado en el suelo, vio el tenue Chakra desvaneciéndose del cuerpo malherido.

Paso el brazo de Naruto por detrás de su cuello y comenzó a caminar llevando a cuestas a su compañero. Mientras avanzaba, notaba que se aclaraba más el camino, cuando dio otro giro una gran luz se encontraba al final del pasillo.

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Naruto se encontraba en trance, la pelea había agotado su Chakra y tuvo que recurrir al Kyūbi para salvar a sus compañeros, cuando se adentró más a la cueva en el calor de la batalla, no presto atención al altar que se alzaba a escaza distancia de su ubicación.

El ninja que lo estaba atacando alzo una barrera de tierra entre ambos, con un grito/rugido salto hacia el frente destrozando con una patada la barrera y golpeando en la cabeza a su oponente dejándolo inconsciente en el acto.

Se giró solo para encontrar una pared con símbolos que se iban iluminando en un orden extraño, un grito de dolor se escuchó a lo lejos y corrió para apoyar a su compañera no tomando importancia a la pared, fue en ese momento que la luz se extendió cubriendo cada rincón de la cueva.

Parpadeo por un par de segundos y un dolor atravesó todo su cuerpo, una corriente de electricidad y fuego que lo consumían rápidamente, era como sentir que "algo" salía de su cuerpo, esa sensación oprimía su cuerpo y mente, quería gritar, pero su cuerpo ni siquiera reaccionaba, apretó los ojos y cayó en posición fetal temblando y sudando.

Una explosión lejana provoco una avalancha de rocas y tierra que lo arrastraron hacia unos pilares. Escuchaba sus propios gemidos de dolor, su piel comenzó a resquebrajarse, cuando el primer pilar se desplomo, el dolor desapareció, cuando intento levantarse, una de sus piernas estaba atrapada en el pilar, escucho un crujido detrás de él, después un golpe en la espalda y todo su entorno se volvió negro.

Despertó en un pasillo alcantarillado, desorientado camino hasta llegar a la gran reja con el sello, esta era la cuarta vez que estaba en aquel lugar, se quedó sin aliento al corroborar que no sentía nada, esa mezcla de emociones entre miedo, hostilidad, escalofríos y frustración que emanaba desde adentro de la jaula no estaba presente, agarro con la mano izquierda uno de los barrotes y seguía sin ningún cambio, una desesperación empezó a corroerle, asomo la cabeza entre los barrotes para ver hacia el final.

Una pequeña esfera al fondo fue lo que alcanzo a ver, blanca y opaca, parecía de cristal.

No había señales del zorro y envalentonado se metió entre las rejas para llegar a la esfera, sigilosamente llego a un costado y la rodeo, era más grande que él mismo, quizá unos dos metros de altura. Rodeo la esfera lentamente, observándola cuidadosamente, no tenía idea de porque estaba ahí, pero aún más importante que eso, ¿dónde estaba el zorro y por qué no sentía su presencia?

Lentamente estiro la mano, estaba a punto de tocarla cuando escucho un rugido y el sonido de cadenas, bajo la mano y camino en dirección contraria, adentrándose más a la inmensa celda.

Nunca había entrado a este lugar, normalmente el zorro era quien salía cuando necesitaba su poder para pelear, por este motivo se sorprendió de lo profundo que era, todo estaba obscuro, pero con una claridad rojiza, probablemente por el Chakra rojo que vagaba libremente a su alrededor. Vio destellos aparecer y desaparecer a sus costados como luciérnagas alumbrando su camino.

Llego a lo que parecía un hueco gigante, lo que vio dentro casi lo deja en shock, ahí estaba, tirado sobre su costado con su pelaje totalmente negro y quemado, cuatro colas pegadas a su cuerpo intentando protegerlo, dos en su cabeza y las otras inertes a su alrededor, cadenas de espigas hechas de luz lo tenían sujeto contra el suelo, quemando su piel.

Otro rugido lo hizo botar en su lugar de susto, ahora que escuchaba con atención, no era un rugido de furia como los que le dedicaba siempre que tenía oportunidad, era de dolor, el zorro estaba sufriendo, las cadenas se apretaban cada vez más a su cuerpo, ni siquiera las colas podían amortiguar el dolor.

No lo pensó, su cuerpo se movió solo, el Kyūbi nunca había sido bueno, comprensivo o cualquiera de esas cosas con él, después del entrenamiento con Jiraiya, Kurama supero su odio por la humanidad –o al menos hacia Naruto– quedando en buenos términos con su Jinchūriki , pero no podía seguir viéndolo sufrir de esa forma, nadie merecía ese sufrimiento, ese dolor, se arrojó al pozo y una de las colas amortiguo el golpe, aunque… ¿le dolería un golpe en su propia mente?, mejor no pensar en eso por ahora ya de por si le dolía la cabeza.

Llego a la primera cadena ubicada exactamente sobre ambas patas delanteras del zorro, eran delgadas a comparación de las enormes extremidades, pero no tanto para él, ya que difícilmente podría abrazarla, cuando la toco sintió una vibración de energía, no era Chakra, era más pura, rodeo con ambos brazos la cadena, puso un pie contra la enorme pata y jalo hacia atrás, cayendo de bruces en el piso cuando la cadena desapareció.

Hizo el mismo procedimiento con cada una hasta que solo quedo el zorro tendido sin fuerzas y jadeando ligeramente, llego hasta donde estaba la enorme cabeza y se dejó caer en el suelo sentado estilo indio mientras veía la masa de carne quemada frente a él.

–¿Que eran esas cosas? -Fue lo primero que atino decir Naruto al zorro

–Cadenas de magia -respondió suspirando sin abrir los ojos

–¿Magia?

–Sí –abrió los ojos –magia, una maldita energía parecida al Chakra que utilizan los magos y brujas para purificar a seres como yo –se quedó pensando por unos segundos y respondió a la pregunta no formulada de Naruto –ya no estamos en los países ocultos, aquí la magia reina sobre el Chakra –gruño molesto mientras se acomodaba en sus cuartos traseros

Pasaron un par de minutos mientras el zorro seguía respirando con dificultad

–Oye, y porque no te has curado

–Porque no puedo

–¿Por qué?

–Envié todo el Chakra que tenía a tu cuerpo herido, en este momento ya deberías estar totalmente curado. Después de todo el drenado probablemente tarde un par de meses en recuperarme por completo, es mejor que salgas de aquí, voy a dormir.

Se tumbó en el piso y lo último que vio Naruto fue al zorro acurrucándose, antes de ser arrojado fuera de su mente.

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Sasuke se fue cueva adentro dejándola recargada en un costado de la -quizá- única salida, se sentía inútil, no pudo evitar que sus compañeros fueran malheridos, era trabajo del médico evitar a toda costa muertes innecesarias y heridas de gravedad, al menos, mientras encontraran ayuda o regresaran a la aldea.

Todas las enseñanzas de los últimos tres años vinieron a su mente, el arduo entrenamiento con la Godaime Hokage: Tsunade Senju y los propios para hacerse más fuerte.

Suspiro, necesitaba más Chakra para iniciar el proceso de regeneración de la piel desgarrada y quemada por la explosión, el hueso roto no tenía solución inmediata, habría que enyesar la pierna en cuanto regresaran a Konoha.

Después de un leve descanso se levantó y camino hacia la salida donde solo una pequeña luz se filtraba. Recargándose y tratando de no hacer presión en las rocas logro elevarse lo suficiente para asomarse por el hueco, al inicio no podía ver bien por el encandilamiento, cuando su ojo se acostumbró vio solo unos cuantos arboles un poco retirados de su ubicación actual.

A partir de su punto de apoyo hacia el frente aproximadamente seis metros al primer árbol, había una oportunidad de salir de ahí, pero en probabilidades era un 50-50 de provocar otro derrumbe y lo mejor sería esperar un par de horas para reponer Chakra e intentar salir de ahí con vida.

Bajo lentamente de las rocas sueltas y avanzo un par de metros hacia dentro de la cueva, podía sentir como su Chakra comenzaba a regenerarse mientras avanzaba lentamente, busco una pared firme y se recargo en ella sentándose lentamente para no lastimarse.

Escucho un ruido por uno de los túneles, al elevar la vista noto unas cuantas rocas moverse siendo arrastradas lentamente en un pequeño arrollo de barro, siguió con la vista el trayecto y noto que se dirigían a la pared de fondo justo a la izquierda de la salida.

Otro sonido la hizo girar la cabeza, pero esta vez a la salida, el hueco por donde entraba el leve halo de luz quedo obscurecido momentáneamente y silenciosamente comenzó a crecer, las rocas se movían lentamente hacia arriba y hacia los lados creando una especie de marco, se agazapo detrás de una pila de escombros con uno de los últimos Kunai que tenía y espero para ver quién estaba detrás del -ahora- marco de piedra.

La luz ilumino la salida y a una persona a contraluz, una figura esbelta caminaba hacia dentro, Sakura contuvo la respiración por un par de segundos y siguió la sombra con la vista, traía consigo un palito de madera que empuñaba frente a su pecho.

La figura -que ahora notaba era un hombre- se detuvo a un par de pasos del lugar donde estaba escondida, suspiro y bajo el palito, pero no lo soltó, dio media vuelta caminando unos pasos más hacia afuera y silbo. Unos segundos después "algo" entro a la cueva, parecía un caballo, pero las proporciones eran muy extrañas, las patas demasiado largas y delgadas del frente y la parte posterior más ancha, el cuerpo muy grande y la cabeza con una forma extraña.

La dirección del sol no ayudaba mucho a su vista, pero si a la del enemigo -en dado caso que fuera uno- ya que ella no podía verles con claridad, pero si el hombre avanzaba solo unos cuantos pasos a la derecha podría verla a ella.

–No voy a dañarla, puede salir de su escondite.

Se sorprendió al escuchar la voz rasposa, el sol se ocultó detrás de una nube y ahora podía verlo con más claridad, cuerpo delgado, cabello revuelto, ropa desgarrada, algunos rasguños en la cara, golpes en varias partes del cuerpo y un majestuoso animal a sus espaldas, parecía una de esas criaturas fantásticas de los libros que su madre le leía cuando era pequeña. Salió rápidamente de su estupor y se puso en guardia, aquel hombre la miraba directamente con los brazos levantados en clara señal de no querer atacarla.

–Perdona que te haya asustado, estaba buscando un refugio cuando escuche la explosión –Le sonrió

Aunque lo intento, no logro quitar la mueca de confusión que adornaba su rostro, escuchaba claramente pero no comprendía las palabras, su mente iba a mil por hora intentando descifrar el extraño lenguaje, no recordaba haberlo escuchado antes. Intento ponerse de pie aun en guardia, por la complexión y vestimenta, tenía claro que el desconocido era dos cosas, primero: un civil y segundo: un ex presidiario.

–No comprendo lo que dice

–¿Qué?

Ahora estaba de pie frente al extraño, ambos midiéndose con la vista, ninguno comprendía las palabras del contrario, lo que provocaba una leve tensión en el aire, el sol volvió a salir de su escondite y el hombre volvió a ser una silueta a contra luz, lentamente comenzó a moverse hacia un costado con dificultad por culpa de su pierna rota, el hombre al ver el movimiento camino en dirección contraria hacia dentro de la cueva con las manos en alto.

Cuando podían verse mutuamente detuvieron sus pasos, quedando uno frente al otro

–Sirius Black –Señalo con su mano su pecho –¿tú? –la señalo a ella

–Haruno Sakura –Respondió secamente entendiendo la señal

El hombre estaba a punto de decir algo, cuando sintieron las presencias acercándose desde el fondo del pasillo, Sasuke acababa de dar vuelta con un inconsciente Naruto a cuestas, Sakura en un intento de advertir de la presencia del desconocido giro el cuerpo hacia su compañero, pero no contaba con el pulsante dolor que eso provocaría en su pierna rota, lo que provoco el derrape que la arrojaría al suelo.

Espero el golpe, el cual no llego, unos brazos la sujetaron firmemente de la cadera y hombros evitando que su cuerpo azotara en el frio suelo.

Sasuke vio todo el revuelo y se adelantó rápidamente a donde estaba Sakura, si ese desconocido fuera un enemigo Sakura estaría muerta y no siendo depositada lentamente en el suelo como en ese momento, dejo a su compañero inconsciente a unos pasos y se acercó a Sakura.

–¿Te encuentras bien? –Asentimiento de parte de su compañera–¿Quién eres? –Pregunto girando hacia el desconocido

–Mmm… Sirius Black –Se identificó señalándose con el ceño fruncido no muy convencido de que fuera la respuesta correcta

–El no habla nuestra lengua Sasuke-kun – le dijo su compañera con un gesto de dolor –Parece que nos encontramos por casualidad, no parece peligroso, viaja con esa clase de caballo extraño

Black solamente veía el intercambio de información aun sin entender nada, era frustrante no saber si hablaban de él o no, parecían solo unos chicos perdidos en el bosque, claro que las apariencias engañan, sobre todo al ver la reacción tan sigilosa de la chica cuando recién la vio ahí sentada junto a las rocas y por la forma en que empuñaba ese curioso cuchillo sabía que al menos tenía una formación de supervivencia o autodefensa.

Vio que el chico asentía a lo que sea que le dijo la muchacha y cuando giro el rostro a verlo, un escalofrió lo recorrió completo, estaba casi seguro que vio los ojos negros del chico al llegar a su lado, no esos ojos rojos que ahora se dirigían a él con esas cosas girando en ellos.

Lo primero que sintió fue como el chico entraba en su cabeza, tan aturdido estaba ante aquella visión que no logro realizar una barrera a tiempo para que no la penetrara su mente. Pasaron segundos, minutos, horas… realmente, no estaba seguro, recordaba un destello de dolor y después estar tirado en el piso de rodillas jadeando tomando todo el aire que podía con gran dificultad.

Buckbeak estaba a su lado cuando recobro el control de su cuerpo, su cabeza le daba ligeros golpeteos en el costado ocasionando que se desestabilizara y cayera de lado raspándose parte del brazo.

Escucho el chillido de su acompañante y elevo la vista del piso hacia el lugar al que se dirigía el sonido, la chica a quien ayudo a no caer estaba en posición de querer avanzar hacia el frente, pero Buckbeak le cerraba el paso amenazándola con sus garras.

–Se recuperará, solo tome la información que necesitaba sobre su lengua –

¿Ese era su idioma?, ¿Qué no hablaban otro?... Espera, ¿a qué se refería con que la "tomo"?

–¿Co… cómo? –parpadeo sorprendido, jadeando ligeramente al hablar y sorprendido por la intrusión –¿Qué has hecho? y ¿Quiénes son? –pregunto sorprendido

–Soy Sasuke Uchiha, ella Haruno Sakura y el rubio Uzumaki Naruto, somos ninjas de Konoha, y no diré más hasta saber dónde estamos.

NOTAS FINALES:

Primeramente, una disculpa para todos los que eran seguidores de "Magos y Shinobis", lamento decirles que perdí la historia por dos motivos:

Primero y más importante: Usurparon mi cuenta anterior y comenzaron a subir historias a mi nombre, además de eliminar las que ya tenía.

Segundo: Murió mi computadora y no logre recuperar los archivos, fue pérdida total ya que la tarjeta madre tuvo un corto circuito y se quemó dañando todos los componentes.

Estos son los motivos por los cuales no he vuelto a subir la historia con esta nueva cuenta de Fanfiction, pero tratare de que esta nueva historia sea un remake de la anterior, pero con cambios argumentales que no estaban en la anterior.

Solo cuento con algunas de mis antiguas historias porque las tengo publicadas en un foro de fics, las subiré más adelante, cuando les dé una repasada y modifique algunas cosas.

Gracias por su comprensión y espero disfruten esta historia tanto como a mí me complace escribirla.

Luna (antes BeLiKaSe ó BeZeMi)

Capítulo 1: Intro - 3550 palabras, 07 de Marzo de 2015, 4:30 p.m.