Declaración: No soy dueña de los personajes de Dragón Ball, que claramente le pertenecen a Akira Toriyama. Yo solo los tomo prestados para crear estas historias que salen de mi loca imaginación, con el fin de entretenerles

Sentía la boca seca, y tenía un leve dolor en la cabeza, como si alguien, le estuviera punzando dentro de su cerebro, y lo hiciera de manera insistente, aun cuando ella pedía que se detuvieran

Quería abrir los ojos, pero algo pesado en ellos, le impedía, poder levantar sus parpados. Lo intento de nuevo, sin embargo, esa misma opresión, siguió en sus ojos, impidiéndole cualquier movimiento posible. Quiso moverse, pero tal parecía que su cuerpo no estaba siguiendo sus ordenes en esos momentos, era como si alguien más, controlara su cuerpo y sus movimientos, y por ello, se le hacía imposible seguir con lo que ella realmente deseaba hacer en aquel momento

Sus latidos empezaron a aumentar, y sentía que el aire no estaba llegando a sus pulmones; estaba sintiéndose nuevamente asustada, no más bien, aterrada, pues nada estaba bien. Ella no podía ni moverse, o abrir sus ojos, además, su madre estaba en una cama de hospital, completamente herida, y casi desfigurada, su padre… bueno, su padre, había llevado la peor parte, y todo lo que tenía, era a su hermano, su amante, al cual no podía mirar en aquel momento, de hecho, no tenía idea de donde se encontraba Vegeta, o siquiera, donde ella misma estaba en aquel momento

Sintió una gran opresión en su pecho, y eso fue suficiente; prontamente sintió un leve apretón en su mano, y un suave susurro llegando a sus oídos

"Tranquila, todo está bien linda… trata de relajarte, además, así no preocupas a tu hermano linda" Era una suave voz, dulce y empalagosa

Esa voz era demasiado melosa, y al oírla, sintió que su pecho se apretó aún más, sentía que debía reconocer la voz, pero por más que trataba, no sabía de quien era la voz, y la mano que apretaba la suya. Ya que el calor, y la sensación, no le era para nada familiar, sintió el instinto de apartar su mano, pero su cuerpo no respondía a su demanda

"Lamento mucho lo que les está pasando linda, pero debes estar tranquila, no es bueno para tu hermano verte en este estado, Vegeta ya tiene mucho con lo que lidiar, y que tu sigas en este estado, simplemente no es bueno para él, solo lo estas atormentando más, así que tranquilízate, y no le des más molestias a tu hermano, compórtate como una chica adulta" La melosa voz, de pronto empezó a sonar demasiado chocante, y altanera

Bulma trato de abrir sus ojos ahora con más insistencia, pues sin duda alguna, ahora más que nunca, deseaba saber, de quien era aquella voz, y donde se encontraba Vegeta

…..

Vegeta camino con desgano, mientras se frotaba el rostro, y se quejaba un poco, por lo bajo, a causa del cansancio

¿Cuánto tiempo había pasado?, solo tres días, y en tan corto tiempo, ya muchos de sus vecinos, y conocidos se habían enterado de la noticia. El funeral de su padre, había sido solo un día antes, y aun cuando el dolor había sido grande, se impidió derramar una sola lagrima en el lugar; no iba a permitirles a los demás, ver su estado más deplorable, ni el dolor que había en su pecho

La condición de su madre era estable, o al menos eso decían los doctores, pues la mujer había salido de la operación, pero su conciencia, parecía haberse perdido en algún lugar lejano, y no sabían si algún día iba a regresar de donde estuviera. Y, aunado a todo eso, aun no se le permitían las visitas, pues la rubia, se encontraba en terapia intensiva, aun recuperándose de la operación previa

Él, se había encargado de todo, desde los preparativos para el funeral de su padre, hasta de firmar todos los papeles que el hospital requería para la asistencia de su madre, y su hermana, aun cuando seguía siendo menor de edad

La gente había estado entrando y saliendo del hospital, para darle las condolencias, y otros para ayudarle a cuidar de Bulma, mientras que ella se encontraba internada, por el fuerte ataque de pánico que se había auto provocado, gracias a todos los sucesos que habían golpeado a la familia de manera tan repentina; sin embargo, no se sentía aliviado de la ayuda extra que había estado recibiendo, más bien, ya comenzaba a sentirse un poco cansado y mareado de tantas personas. Pero no podía quejarse, después de todo, se había mantenido el hospital desde el incidente, y si no hubiera sido por la ayuda de la familia Son, quizás hasta de sus propias necesidades, se habría olvidado

Sin embargo, apenas se tomaba unos minutos al día, para ir a tomar un baño, y comer un poco, antes de regresar nuevamente al hospital, para así permanecer a lado de la única persona que le quedaba en buen estado. Hizo un gran esfuerzo para que los primeros dos días, le dejaran quedarse en la habitación de Bulma, pues, el área era exclusiva de mujeres, y al no haber ningún otro familiar, el medico de turno, le otorgo un permiso especial, sin embargo, ahora mismo, no estaba para nada contento

Le surgió la necesidad de salir, y en el lugar, solo se encontraba, una chica que estaba seguro, estudiaba con él, sin embargo, no recordaba su nombre, y apenas y había saludado de manera monótona a la mujer; y aun así, la chica, amablemente se ofreció, a quedarse con Bulma, un par de horas, mientras él se cambiaba, y conseguía comida, y aun cuando no había querido, tuvo que aceptar la oferta de la chica, ya que era la única en el lugar

Kakaroto apareció, se veía algo cansado, estaba bostezando, y llevaba una bolsa en la mano. Camino con fatiga por el pasillo blanco del hospital, mientras miraba en todas direcciones, tratando de encontrar a su amigo. La noche anterior, ambos habían estado hasta muy tarde en la funeraria, resolviendo los últimos detalles, sin embargo, Vegeta, en lugar de regresar a descansar, fue directo al hospital, para pasar la noche con Bulma, así, que suponía, su amigo, debía estar en peores condiciones que él

"¡Te encontré!" Kakaroto levanto un poco la voz, y toco el hombro de su amigo "Traje un poco de comida, mi madre la mando, para que así no tengas que salir tanto, ni andes comiendo fuera, además..."

Vegeta se giró, su rostro estaba algo demacrado, tenía un par de ojeras bastantes pronunciadas, y se veía bastante cansado, aun cuando su cabello aún estaba algo húmedo del reciente baño que debía haberse dado. El azabache, extendió su mano, tomando la bolsa con desgano, trato de mirar a su amigo, mostrándole, una leve sonrisa de agradecimiento

"Gracias, nos han apoyado mucho, pero no tienes que estar aquí conmigo todo el día, no es tu deber" La voz cansina de Vegeta, demostraba lo mal que se encontraba

Kakaroto por su parte, siguió caminando a un lado de su amigo, toco su hombro, dándole una leve palmada

"No me molesta, además, sabes que somos como familia" Kakaroto sonrió

Vegeta bufo "SI fuera familiar de alguien tan estúpido, sin duda, estaría aún más desanimado, no me haría ninguna gracia" Murmuro por lo bajo

Kakaroto rio un poco "Bueno, al menos, parece que estas de mejor humor que ayer" Y entonces, el silencio volvió a invadir, el caminar de ambos jóvenes

Kakaroto no sabía si debía decir algo más, ahora se sentía un poco estúpido por su comentario, después de todo, el día anterior, habían enterrado al padre de su amigo, y aun cuando el chico parecía completamente sereno mientras el ataúd de su padre bajaba, sin duda, él, como mejor amigo del chico, noto la débil expresión de angustia y dolor en el rostro de su amigo. Ahora mismo no sabía cómo tratar con Vegeta, los nervios le estaban invadiendo, y el solo reír, ahora, le parecía algo grosero, por todo el dolor que debía estar pasando su amigo, así que solo guardo silencio, unos momentos, tratando de decidir, como debía actuar

Vegeta seguía esperando que Kakaroto hiciera otro comentario extraño como era su costumbre, para tratar de animarlo; sin embargo, su amigo de pronto estaba extrañamente silencioso, caminando solo a su lado, como un robot guiado

"Bulma sigue entrando y saliendo de conciencia, dijo el médico que es normal, que su cuerpo está agotado, y que es mejor que descanse lo más posible, por el shock, así que le siguen dando sedantes, para mantenerla dormida" Comento de pronto Vegeta, cruzando sus brazos

"Mi madre hizo planes, parece que hoy podrá quedarse con Bulma, me pidió que te avisara que vendría más tarde, así que hoy puedes quedarte a dormir en nuestra casa, así aprovechas a descansar un poco, por cierto… ¿Se quedó sola ahora?" El chico de cabellos en forma de palmera, pregunto de manera relajada, tallándose los brazos, mientras por el pasillo, miraba a las enfermeras caminar con algunas bandejas llenas de jeringas, y un leve escalofrió recorría su cuerpo "¡Odio el ambiente de los hospitales!" Susurro para sí mismo

Vegeta suspiro "No, de hecho, una chica de la escuela vino, y se ofreció acompañar a Bulma, mientras me iba a cambiar, la verdad, no se su nombre, solo que va en nuestra escuela, y que la eh visto por los pasillos, y tal vez, alguna vez hable con ella" La voz del chico, seguía sonando desganada, no parecía tener interés en la chica que estaba cuidando a su hermana

Kakaroto asintió "Bueno, han estado llegando casi todos de la clase, después de que se enteraran, la mayoría, ha decidido apoyarte. La verdad me sorprendió, es decir, no eres muy amigo de nadie… por cierto, Yamcha me estuvo llamando, le comenté del estado de Bulma, pero sigue diciendo que no quiere problemas contigo, así que por eso no ha aparecido"

"No veo por qué tenga que venir ese insecto, además, nadie le está pidiendo venir aquí, así que es mejor que nos deje tranquilos"

"¡Ya, ya entendí!, pero aun así… no debes ser tan aprensivo, recuerda que ni Yamcha, ni nadie más sabe de tu extraña relación con Bulma" Kakaroto suspiro un poco "Solo recuerda mantener la compostura, incluso mi hermano me dijo que te había visto algo extraño con Bulma, y eso no es bueno" El de cabellos en forma de palmera se froto el cabello

"Mi relación con Bulma no es extraña Kakaroto, ella es mi novia, es algo… normal" Vegeta se detuvo y froto un poco sus ojos "Tienes razón, entiendo el punto, solo que es un poco molesto, no es como si me agradara toda esa gente que viene, y trata de estar a solas con ella, sobre todos los mocosos esos que vienen de su escuela"

"No sé qué decirte Vegeta, después de todo, es normal, como amigo de ambos, solo te puedo decir, que es normal estar preocupado por un amigo, así que supongo que eso pasa igual por las mentes de sus amigos, así que tal vez, solo debas tomar esto como es"

Los dos jóvenes siguieron su camino por los pasillos de aquel lugar, mientras discutían el cómo iban a seguir las próximas horas, y el dónde pasarían esa noche, para así tener un poco de descanso

Al llegar a la puerta de la habitación donde Bulma debía estar, los dos jóvenes abrieron la puerta sin ninguna delicadeza, y miraron a una joven de larga cabellera rubia, que acariciaba con delicadeza, el cabello azul de la chica en la cama, mientras, que los rostros de ambas chicas, se encontraban demasiado cerca el uno del otro

"¿Hasky?" Pregunto un poco asombrado Kakaroto, así alertando a la rubia "¿Pero, como es que tu…?"

La chica se separó de la peli azul en la cama, y sonrió un poco, a ambos chicos

"Goku, no esperaba encontrarte aquí a estas horas, yo solo me entere de lo ocurrido, y vine a para ver si podía ser de ayuda en algo, y creo que llegue en buen momento, pues Vegeta necesitaba salir, y no había quien se quedara con su hermanita, así que me ofrecí" La sonrisa en el rostro de la rubia, era deslumbrante. Sin embargo, en cuanto Vegeta se acercó un poco más, la sonrisa perdió brillo "No se levantó mientras estuve con ella, y solo llego una enfermera a cambiar el suero, y le hizo un chequeo, pero no me dijo mucho"

Vegeta ignoro a la chica, y siguió de largo, pasando a la rubia, para mirar más de cerca el rostro durmiente de la chica, quien parecía estar serena en el momento. Pero en cuanto se acercó más a la cama de Bulma, noto que la peli azul, levemente fruncía el ceño, y empezaba a moverse

Hasky por su parte, llevo sus manos a su espalda, y apretó un poco sus puños, mientras fingía seguir serena, ante las atenciones que Vegeta mostraba por su pequeña hermana, al grado de no parecer importarle nadie más

Kakaroto se aclaró la garganta, y se acercó a su rubia compañera de escuela

"Gracias, por haberte quedado con Bulma, la verdad, es que pensaba venir yo, pero, aun así, no me dejarían quedarme, además de que no soy un familiar directo, soy hombre" El de cabellos de palmera, rio nervioso "Solo puedo entrar ahora, que empieza el horario de visita"

La chica, dio un liguero saltito, y se acercó a donde Vegeta, que tomaba la mano inmóvil de su hermana

"Si necesitas más ayuda, puedo pasar la noche aquí con ella si es necesario, es decir, quizás igual tengan problemas por eso, y a mí no me molestaría seguir ayudándote Vegeta, después de todo, somos amigos, no" La rubia sonaba bastante alegre

Sin embargo, Vegeta, ni siquiera la miro, solo siguió tomando la mano de su hermana

"¿Ah?, no es necesario, no sé si seguirá en cama, hoy, ella en realidad no tiene nada grave, y si reacciona hoy, tal vez le den de alta, además, la señora Son, se ofreció, así que no. Gracias, por haberlo hecho ahora, pero era solo una emergencia, así que ya no es necesario" La voz tan fría, y plana del azabache, sonó como a fastidio, y el que no mirara a la rubia mientras lo decía, parecía confirmar su conducta

Sin decir más, la chica tomo su bolso, y con un poco de molestia, apenas y se despido con fastidio de ambos jóvenes, para así salir algo incomoda, de la habitación de hospital. Dejando solos, a tres jóvenes en una habitación, completamente silenciosa

Kakaroto, sintió la atmosfera incomodarse en un momento, y después de ver a Hasky salir, no supo si debía decir algo, o solo quedarse parado, a una distancia prudente de donde Vegeta, pues el azabache, solo suspiraba, y casi de manera inconsciente, acariciaba la mano de Bulma, sin decir más nada, solo soltando leves suspiros, que sonaban, dolorosos

Vegeta se había estado conteniendo durante todo el día anterior, desde que miro el cuerpo de su padre, hasta que, en el cementerio, vio como bajaban el cuerpo sin vida, para así terminar el ciclo de vida del hombre, que lo crio, y lo amo durante su vida, dándole consejos, y cariño, mientras que siempre trato de entender lo que él deseaba en la vida, sin juzgarle, más bien, siempre apoyándole

Sin embargo, ahora, que por fin se encontraba, lejos de las masas, y que, por fin, no había gente a su alrededor, preguntándole, si necesitaba, algo, o si se sentía bien; por fin podía sentir, que tenía la oportunidad de sacar un poco de su dolor y frustración. Cerro sus ojos con fuerza, y agacho el rostro, mientras sostenía con fuerza la cálida mano de su hermana, y ahí, sin más, dejo que el dolor, invadirá su cuerpo, haciéndole temblar de rabia, e impotencia, mientras en el interior, gritaba a todo pulmón, por el dolor de ver a su padre sin vida, siendo enterrado en un frío y triste ataúd, y por la impotencia, de no poder ver a su madre, y comprobar que se encontrara bien

Sentía un dolor agudo en el pecho, pues él, no poder hacer más por su familia, lo estaba matando; y solo mirar a Bulma en la cama, mientras que él, no podía hacer, más que depender de otros, lo hizo sentirse un imbécil total

Kakaroto de pronto se tensó, y es que cuando se giró para hablar con Vegeta, noto que el chico, ligueramente estaba temblando, y a pesar de que sus ojos estaban cerrados, vio una triste lagrima, bajar por la mejilla de su amigo, mientras sus labios se apretaban cada vez más, y un leve gruñido salía de los labios del chico

El de cabellos de palmera, no tenía idea de que decir o hacer, pues nunca antes había visto a su amigo derramar una sola lagrima, ni siquiera, por alguna lesión, más bien, por lo regular, lo veía molesto, frunciendo el ceño, y gruñendo, pero, nunca le vio caer una sola lagrima, ni por rabia, dolor, al algo parecido; ni siquiera en el hospital, o el funeral de su padre, sin embargo, ahora que estaban solos los tres en aquella habitación, parecía que Vegeta había encontrado la tranquilidad necesaria, para dejar que sus sentimientos acumulados pudieran al fin, salir

Antes de que el ambiente tenso en la habitación, se pusiera más incómodo, alguien toco a la puerta, y pronto apareció en el lugar, un hombre joven, con bata blanca, logrando que la atención pasara a él, de manera inmediata

Vegeta se limpió, rápida y disimuladamente la lagrima en su mejilla, para luego soltar la mano de su hermana, y dar un paso más cerca de su amigo

El Doctor, sonrió un poco a los chicos

"Es bueno verte de nuevo Vegeta, y Kakaroto" El hombre saludo, mientras se acercaba al cuerpo de Bulma, y abría los ojos de la chica, mientras le alumbra las pupilas "La mantuvimos sedada, sin embargo, no es bueno que siga así, yo creo que ya hoy, puede salir de aquí, solo deberán mantenerla tranquila, para evitar otro ataque de pánico, de todos modos, si le vuelve a suceder, solo tienen que traerla, en caso de no ser capaces, de controlarla" El hombre, se mostraba sereno, mientras tomaba el pulso de la chica, y miraba a ambos jóvenes

Vegeta asintió "Y, ¿Cuándo podre ver a mi madre?"

Antes de que el Doctor contestara la pregunta, una chica apareció, con unos papeles en mano, y de manera apresurada, entro al lugar

"Doctor, siento interrumpir, pero hay una señora mayor, que está exigiendo ver a la señora Bunny Briefs, y pide que sea traslada de inmediato, dice que es su suegra, y ha pedido ver a Vegeta, y Bulma Briefs"

Tanto el Doctor, como Vegeta y Kakaroto, se quedaron estáticos, y pronto, los tres se miraron extrañados

"Pensé que no tenían familiares, y por eso habías sido tú, quien firmaba los papeles, chico" El Doctor dio un paso cerca de Vegeta "Si la su abuela está aquí, tal vez, debamos hablar con ella, así que dime, ¿es madre de tu padre, o de tu madre?"

Kakaroto parpadeo un par de veces "¿Tienen una abuela?" La pregunta fue con suma sorpresa

Vegeta por su parte, jadeo un poco, y se tocó el cabello, mientras empezaba a negar, enérgicamente

"¡Eso es imposible!, no tenemos más familia, ¡eso es imposible!, no puede haber nadie aquí, diciendo que es mi abuela, o madre de uno de mis padres" De pronto, había demasiado calor en la habitación

…..

"No creo que exigir, sea la mejor manera de obtener lo que deseas" La voz masculina, apenas se escucho

La mujer mayor, frunció nuevamente el ceño, y volvió sus ojos, hacia la mujer de blanco, detrás del escritorio

"Señorita, no quiero repetirlo, así que solo, dígame donde esta Bunny, y mis nietos. No tengo paciencia, y, además, si no me equivoco, mis nietos aún son menores de edad, y no tengo informes, de ningún adulto apoyándoles en estos momentos" La demandante voz de la mujer, resonó por los pasillos. Si bien, se veía mayor, la mujer, sí que daba miedo "Debe saber, que Pepper Ouji, no tiene nada de paciencia señorita, y lo que digo se hace"