Hola! Estoy actualizando rápido para prevenir los tiempos de universidad (?)
Disclaimer: los personajes de Naruto no son de mi propiedad, solo la historia es lo mío.
Advertencia: contenido yaoi [chico x chico]
Disfruten~
Kakashi abrió los ojos completamente rojos, sentía la cabeza pesada y le dolía bastante seguro ocasionado por las pocas horas de sueño que estaba teniendo últimamente. Se puso de pie y dio unos cuantos pasos para estar frente a la cuna del pequeño de un mes y unos días. Lo tomo entre sus brazos y sintió el inconfundible olor de un pañal sucio. Prendió la luz de su habitación y después de calmar un poco a Haru lo puso sobre el mueble especial para cambiar al bebé que ya no lloraba, pero tenía los ojos llorosos.
Hatake le sonrió levemente a su hijo, la predicción estaba resultando completamente cierta, un cariño casi antinatural surgía en él cuando veía a esa persona diminuta, con sus mejillas sonrojadas y esos adorables pijamas de perritos que le había comprado Sakumo a Haru. Sin embargo, no podía negar que lidiar con Haru y su trabajo resultaba completamente cansado, pero no se quejaba mucho. El mes había avanzado bastante rápido en realidad, entre cosas por aprender para cuidar con mayor facilidad al pequeño, cambios de pañales, sonrisas tiernas y papeles para tener la completa custodia del niño y que en ningún futuro alguna mujer apareciera queriendo hacerse la madre sufrida. Kakashi no había conocido a su madre personalmente, pero habían álbumes enteros de su madre embarazada viendo con cariño su abultado estómago así que ese papel era importante para él.
Sonrió levemente mientras alzaba a Haru―. ¿Contento ahora?―el niño sonrió levemente y Kakashi lo apretó contra él un poco, camino hasta el basurero y dejo el pañal sucio en el canasto. Ojeo el reloj que se encontraba en la cómoda de su cama―. Despiertas a horas muy complicadas, Haru―murmuro levemente observando al niño que parecía a punto de quedarse dormido de nuevo. Se acercó con pasos suaves a la cuna de color blanco con muñequitos colgados, lo depositó con suavidad, pero apenas estaba a punto de dar unos pasos escuchó el quejido disconforme. Lo tomo entre sus brazos resignado―. Eres bastante manipulador también―Kakashi ya estaba acostumbrado a ese comportamiento en su hijo así que simplemente se acostó en su cama y lo acomodo sobre su pecho.
El mayor cerró los ojos y se preguntó internamente cómo demonios le hacía para no girarse cuando Haru se dormía sobre él. ¿Instinto paterno? Decidió ya no pensar en eso y dormir un rato antes de tener que levantarse de nuevo para ir al trabajo. Sonrió levemente antes de caer dormido, Haru desprendía cierto calorcito agradable.
Hatake abrió los ojos con pesadez, la vibración del celular sobre su cama lo despertó, lo apago todavía algo adormilado. Pestañeó confundido al sentir que algo le faltaba, el pánico empezó a inundarlo al recordar que Haru había dormido con él, pero no estaba por ninguna parte. Se puso de pie de inmediato y empezó a revisar debajo de la cama y por todas partes en busca del niño.
Escuchó unos ruidos de la cocina y casi corrió en dirección del lugar, al ansiedad le estaba consumiendo por dentro. Al ver a su papá cargando a Haru mientas lo alimentaba no supo si ponerse a llorar o reír, el ataque de pánico que había sufrido se comparaba al de aquel accidente. Se pasó una mano por el cabello, el sueño había desaparecido en cuestión de segundos―. Papá, no hagas algo así de nuevo―murmuró todavía algo consternado viendo a un sonriente Haru entre los brazos de Sakumo.
El mayor pareció algo avergonzado y arrepentido―. Lo siento, fui a buscarte a tu habitación, pero seguías durmiendo y Haru ya había despertado, es bastante madrugador―añadió con cariño observando a su nieto. Le quitó el biberón cuando este se vació.
―Hu―el bebé dejo salir un sonido suave mientras estiraba su manita en dirección de Kakashi.
―Al parecer quiere que su papá lo cargue un rato―mencionó amablemente Sakumo pasándole al menor con cuidado. Casi de forma imperceptible Kakashi lo abrazo con fuerza, solo cuando lo tuvo entre sus brazos se sintió completamente aliviado. Recordó que todavía no le habían sacado los gases y lo acomodo con suavidad sobre su pecho para darle palmaditas, quería evitar algún cólico fuerte.
Otra vez sucedió, Haru regurgito sobre su hombro―. No sé si lo haces a propósito, ¿lo haces?―preguntó con suavidad mientras lo alzaba un poco, el pequeño solo dejo salir una risita cristalina que le provoco ternura.
―Tal vez solo quiere recordarte que tienes que irte a bañar, yo me hago cargo de él. Además el desayuno ya está, solo apúrate―Kakashi asintió y se fue directo a la ducha. No tardó mucho en bañarse y se puso la camisa manga larga de color blanco y la corbata negra. Ya después se pondría el saco.
Se sentó en el comedor y comió con tranquilidad mientras le daba miradas a su hijo que parecía divertido viendo como Sakumo movía un sonajero frente a él. Lavo los platos que uso y le dio una mirada a la pared decidiendo que todavía tenía tiempo―. Bañaré a Haru―le informo a su padre mientras estiraba los brazos y Sakumo le pasaba al bebé que no protesto.
―Si quieres lo puedo hacer yo―se ofreció el mayor.
―No te preocupes, tengo tiempo y ya suficiente haces cuidándolo mientras yo trabajo―se encamino al baño y saco la bañerita de tonalidad celeste. Se remango las mangas de la camisa y después de desnudar al pequeño lo introdujo al agua. Kakashi todavía recordaba la primera vez que lo bañó, más de una vez sintió como si se le fuera resbalar, todavía le daba algo de miedo, pero sabía que podía manejarlo. Los perritos de goma flotaban en la bañera y él sonrió. A Haru no parecía molestarle bañarse siempre parecía feliz cuando lo hacía.
Tomo una toalla para envolver el cuerpo desnudo del más pequeño y se dirigió a su cuarto, puso a Haru sobre su cama, le dio una ojeada antes de moverse rápido, tomar los pañales y una ropita para cambiarlo. Sonrió divertido al verlo mover los bracitos. Lo vistió después de asegurarse de haberlo secado bien.
Kakashi se apuró al notar la hora en el reloj, necesitaba irse ya, tenía pensado cambiarse la camisa porque se había mojado, pero igualmente se secaría después. Agarró el saco negro mientras cargaba a Haru―. Ya me voy―anunció Hatake entregándole el bebé a Sakumo con una sonrisa.
Kakashi llegó algo apurado al edificio en el que trabajaba, Hatake había seguido los pasos de su padre y había estudiado derecho, además de administración empresarial. Trabajaba para una gran compañía y era un miembro importante en la compañía siendo el manager del departamento de relaciones, así que su situación económica era bastante estable. Todas las miradas de las personas se posaron sobre él y es que ver a Kakashi Hatake llegar unos minutos retrasado, con la camisa remangada y sin saco no era algo de todo los días. Algunas mujeres en la recepción soltaron un suspiro, se veía guapo.
Hatake por su parte iba maldiciendo internamente al tráfico. Frunció el ceño en el ascensor al recordar que había dejado el saco sobre el asiento del copiloto, cuando tuviera tiempo podría ir a recogerlo. Bajo del ascensor y cuando planeaba entrar a su oficina fue detenido por su secretaria.
―¡Señor Hatake!―llamó ella algo apurada.
―¿Qué ocurre?―preguntó sintiéndose algo tenso.
―La representante de Sharingan vino más temprano para hablar acerca de los trámites para el nuevo proyecto en conjunto―la joven informo mientras era seguida de cerca por el hombre.
Kakashi maldijo internamente y recordó otra razón por la que había estado estresado y recordando cosas que prefería olvidar. La propuesta para el trabajo en conjunto le había llegado hace una semana y los recuerdos habían empezado a aflorar en él. Por lo menos sabía que Obito no estaba en el país y eso en cierta parte era doloroso, pero también le daba algo de calma.
Ingresó a la sala de juntas donde una mujer de cabello pelinegro y ojos rojos lo esperaba, a Kakashi se le hizo vagamente parecida a alguien―. Disculpe la tardanza, soy Kakashi Hatake―mencionó mientras tomaba asiento al frente de la mujer.
―Kurenai Yuhi―la mujer le dio una mirada larga―pensé que las personas en esta compañía eran puntuales―fue lo único que dijo mientras abría una carpeta.
Kakashi apretó los labios, pero no dijo nada más y abrió su maletín para sacar la carpeta que tenía preparada para esa reunión. De manera casi cómica al abrirla se regaron unos folletos sobre la mesa, Kakashi se sintió algo avergonzado al olvidar que los había dejado ahí―. Disculpe―murmuró apenado mientras recogía sus folletos, pero uno ya era revisado por la mujer.
―¿Pediatras?―preguntó la mujer con un tinte de curiosidad en su voz, incluso la molestia en sus ojos parecía haber desaparecido un poco.
Kakashi asintió mientras alargaba la mano para tomar el folleto―. He estado buscando uno para llevar a mi hijo, lo he llevado a otros anteriormente, pero ninguno ha sido de mi agrado―y era completamente cierto, siempre eran chicas que parecían olvidar que al que debían atender era a Haru por estar preguntándole cosas de su vida.
―Entonces tiene a un hijo―siguió ella con la conversación, parecía bastante curiosa por el asunto―. ¿Es ya grande?
Hatake siguió hablando porque Kurenai parecía olvidar el incidente de la mañana y porque en realidad no había hablado de su hijo con nadie a excepción de su padre―. No en realidad, apenas tiene un mes y una semana―Kakashi sonrió levemente.
Kurenai pareció relajarse completamente― ¿Y cómo es la vida de un padre?―la mujer se sentía curiosa al respecto, después de todo la noticia de que iba a ser madre se la habían dado hace poco.
Kakashi pareció meditar un poco la respuesta―. Es cansada, apenas y duermo, pero cuando sonríe vale la pena―dijo con una sonrisa relajada.
Yuhi agradeció la sinceridad―. Supongo que su esposa se hace cargo mientras usted trabaja, espero que mi esposo me ayude cuando el bebé nazca―comentó la ojiroja poniendo su carpeta sobre la mesa con claras intenciones de comenzar la reunión.
Kakashi entendió el porqué de la curiosidad de la mujer―. Felicidades y en realidad el que me ayuda es mi padre, también tengo que buscar una niñera que sea confiable…―murmuró para sí mismo, al ver la pregunta en los ojos de la mujer agregó:―Soy padre soltero.
Kurenai sonrió y empezaron la reunión.
El peligris regresó a su casa algo cansado, pero satisfecho con su trabajo. Al finalizar la reunión Kurenai le había recomendado una pediatra llamada Tsunade Senju. Pensaba ir el día siguiente en la tarde, agradecía que fuera sábado.
Al entrar a su casa se encontró con su padre viendo la televisión con el radio para escuchar a Haru sobre la mesita así que supuso que se encontraba dormido―. Buenas noches, hijo―la saludó el mayor con una sonrisa amable.
―¿Te quedarás a dormir, papá?―preguntó dirigiéndose a la cocina, tenía demasiada hambre.
Sakumo a veces se quedaba a dormir mientras que otras regresaba a su casa―. No esta vez, quede con unos viejos amigos que no veía hace bastante.
Kakashi asintió sacando algo de comida del refrigerador―. Gracias papá, entonces te veré el lunes―sacó su billetera, tomo el cheque que tenía preparado y se lo tendió a su padre―. Aquí está por lo del último mes―Hatake sabía que Sakumo no lo hacía por nada a cambio y que de hecho disfrutaba pasar tiempo con Haru, pero no quería aprovecharse del hombre―. Por favor… y ya sabes por si encuentras algo bonito para Haru.
Sakumo soltó una risa leve mientras tomaba el cheque y despeinó a su hijo―. ¿Sabes, Kakashi? En verdad me siento orgulloso de ti. Nos veremos el lunes―se despidió.
―Buenas noches, papá.
―¡Eres un asesino!
―Pero…
―¡Debiste hacerlo!
―Obito…
―¡Te odio!
Kakashi se despertó de golpe, abrió los ojos y suspiró agotado al sentir las lágrimas descendiendo por sus mejillas. Sonrió levemente al ver a Haru con los ojos abiertos en su cuna―. Lo siento, ¿te desperté?―murmuró con suavidad mientras se ponía de pie. Lo alzó con cuidado y empezó a mecerlo con suavidad, el dolor en su pecho fue disminuyendo de poco a poco―¿Sabes? Tú eres el que me ayuda a mí―Haru soltó una risa y Kakashi sonrió―. Mañana te llevaré al parque, gracias―y le dio un beso en la frente. La risa de Haru se escuchó pura y dulce, Hatake pudo dormir bien esa noche.
Muchas gracias por haber leído, en realidad estoy bastante entusiasmada con esta historia, encuentro bastante lindo lidiar con un Kakashi siendo padre. Como sabemos Kakashi es una persona responsable así que no creo que quiera deshacerse de su hijo, además que siempre conto con el apoyo de Sakumo así que creo que a él le gustaría ser un buen padre. Gracias por su apoyo, los amo :3
Nanami off~