Agradezco a la colaboración de para este proyecto y me disculpo por no haberlo continuado antes, espero disfruten del cap.

Itami y Yao habían partido apenas el sol salió anunciando un nuevo día. Si bien Itami ya estaba tan retrasado que le daba igual llegar a su base, ya que de todas maneras seria reñido por su retraso, por lo que tardar un poco mas no haría diferencia alguna, lo que si lo había hecho salir corriendo de la aldea de los elfos oscuros fue que una de las chicas le susurrase Pussy Destroyer, eso había sido todo lo que el soldado necesitaba para saber que debía emprender una pronto retirada estratégica.

-Solo espero esa elfa cumpla su promesa y no repita eso-Itami se frota la cabeza con dolor.-Dios bebí demasiado, y eso que se suponía era solo una pequeña celebración.

Itami maldijo mentalmente a los elfos oscuros, sus calientes chicas, su suculenta comida, su vino, su delicioso y exquisito vino, el cual parecía causar una resaca de los mil demonios.

-¡Yao! ¿Ya terminaste?

El grito alerto a la elfa oscura quien regreso a ver a su amo.

-Lo siento amo Itami, pero aún falta para que la comida este lista.

Itami solo vio como la elfa oscura bajaba sus orejas en señal de vergüenza.

-Vale, no te pongas así-Itami le frota la cabeza con dulzura.- Solo me duele la cabeza, no me hagas caso.

Yao no entendió lo que decía su amo, pero acepto la caricia de buena gana.

Itami y Yao habían tenido que parar cerca del mediodía para comer algo, lamentablemente ya que ninguno había comprobado la comida que traían, además de que itami había olvidado reaprovisionarse en la aldea por su graciosa huida-La comida se les habían terminado, así que le toco a Yao hacer gala de sus habilidades y casar un conejo.

La caza no duro mucho, pero el desollar al animal, para luego cocinarlo estaba tardando más de lo que los viajeros hubiesen esperado.

Itami se sentó frente a la fogata esperando que el conejo estuviese comestible pronto, ya tenía visto una oreja y la quería para el mismo. Yao por su parte se sentía algo extraña, la conversación que había tenido con su madre había sido peculiar, si bien, al principio su madre se disculpó de rodillas por lo que supuestamente ella estaba obligada a hacer, la charla termino con su madre enfadada con Itami, porque esta no se la follase cada noche como según lo esperado debía ser.

-Amo Itami, ¿Puedo hacerle una pregunta?

Itami solo asintió sin mucho interés, ya que el ver como la grasa del conejo se quemaba era por mucho lo que más le interesaba en ese momento.

Yao parpadeo un poco, para luego echarse para atrás con miedo. Finalmente en un arrebato de valentía decidió confiar en lo que había aprendido de su amo.

-Si le pidiese volver… ¿acaso podría hacerlo?

-No, en lo absoluto.

La respuesta tan rápida y directa fue un flechazo en el corazón de Yao.

-Tú te comprometiste a ayudarme a regresar el carro, ya una vez terminemos esa tarea puedes regresar a tu pueblo si asi lo deseas, por mí no hay problema… -Se apresuró a completar, mientras que le miraba seriamente aunque con algo de melancolía.-Como ya te dije en Japón no hay esclavitud así que tú eres libre de ir donde te plazca.

Al completar su declaración, Itami deseo poder patearse el hígado a sí mismo, él aun quería hacerle muchas cosas a la elfa oscura, pero, incluso en su perversión no quiera atar a Yao a un lugar donde ella fuese infeliz, el no sería capaz de tal aberración.

Yao se sintió desconectada por esa última declaración, más que desconcertada insultada, ¡ella solo quería que su amo volviese a visitar su pueblo! Y su amo quería deshacerse de ella. Fue entonces que uno de los comentarios de su madre le golpeo.

"si él no te ve como esclava, tal vez te quiera como algo más….sería un ciego por no anhelar la belleza casi perpetua que tu posees"

-Itami-Yao se levantó mientras dejaba caer su capa.-Estoy segura de poder hacer su espera más agradable, si usted me lo permite claro está.

Itami sintió como el bulto en sus pantalones se hacía más grande al ver a Yao hincarse en el suelo mientras dirigía sus manos hacia el pantalón, hace unos días la hubiese rechazado, pero él ya había sobrepasado ese punto, Yao era su puta, su agujero personal, y él quería hacerla gritar de placer y dolor.

-Supongo que una mamada mientras esperamos el conejo no estaría mal de hecho-Dijo mientras que se abría la bragueta y revelaba su firme miembro.- Te lo encargare…

Yao sonrió complacida, antes de devorar el miembro de Itami con hambre. Habían pasado demasiados problemas hasta que ella pudiese postrarse ante su amo, y ella no renunciaría a su lugar de ninguna forma.

Literalmente Yao se metió el miembro hasta su garganta mientras que su lengua estimulaba el contorno del miembro de Itami. Mientras Yao le demostraba a Itami una vez más sus increíbles habilidades, el soldado no pudo evitar una nueva comparación de su actual amante con su ex esposa al verla en esa pose.

/Si las pusiese a las dos a la par ¿Cuál sería mejor entre ambas? /

La pregunta carcomió la mente de Itami, si bien Yao le ganaba a Risa en apariencia y por mucho con su sensuales curvas y su tono de piel tan seductor, a Yao aún le faltaba experiencia que su esposa había desarrollado con la practica e imitando una gran variedad de doujins. Experiencia que lastimosamente él no podía darle, ya estaba en sus 30, ya no era un chiquillo y sabía que su aguante no podía seguir a la elfa oscura por mucho tiempo…..aunque se había sentido como un toro últimamente, asumía que únicamente era por el poder disfrutar de esa manera con tan excepcional mujer.

/Está decidido, me cobrare todo el dinero que Risa me debe en un trio, las pondré a competir. Si me he de morir al menos quiero saber quién es mejor entre ambas en este ambito/

Yao por su parte estaba jugando un interesante juego en ese momento, debido a la cercanía de su amo con el fuego, ahora ella sentía como las brasas le quemaban ligeramente el trasero, no era muy doloroso, pero la prendía como solo la noche que su amo le enseño el anal lo había hecho.

/Este…este sentimiento/Yao mueve ligeramente para poner su otra nalga al fuego. /Amo, amo deme su semilla, la necesito saborear su semilla/

Itami por su parte estaba a punto de correrse cuando noto el curioso movimiento de las caderas de Yao.

/Parece que se está quemando/Itami nota como Yao comienza a succionar más fuerte su miembro /Supongo le duele un poco/

-¿Quieres que me corra Yao?

Pregunto Itami burlándose de la situación que se había dado esporádicamente, Yao solo asintió sin quitarse el miembro de la boca.

-Vaya, pues si tanto te gusta el sabor de mi semen-Itami sujeto la cabeza de Yao con fuerza y la presiono todo lo que pudo hasta que sus testículos fueron aplastados contra los labios de la elfa oscura.-Te lo daré…..

Itami soltó todo el contenido de sus bolas en la garganta de Yao, pero antes de que esta pudiese tragarlo todo.

-Ahora continua así hasta que me haya corrido otras tres veces más… no te atrevas a dejar caer una sola gota de mi semen ¿Entendiste?

Itami sabía que Yao cumpliría esa orden al pie de la letra, por lo que la soltó, y continuo disfrutando del curioso espectáculo, dudaba las llamas la lastimasen realmente, después de todo Yao tenía más de medio metro de distancia entre sus nalgonas y las llamas, por lo que era un espectáculo inofensivo, pero que incentivaría el sentimiento masoquista que Yao tenía dentro.

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En las calles de la aldea de Arnus. Rory se encontraba incomoda, de hecho, tanto que la única razón por la cual no había despellejado a cada ser vivo en la ciudad era que quería ir a Japón con Itami para las vacaciones de este mundo. Sin embargo tan grande era esa sensación de drenado que no comprendía que la fuerza en sus piernas parecía fallarle cada pocos pasos, además tenía esa picazón casi como si le estuviesen haciendo cosquillas directamente en su vulva, debía matar a alguien para quitarse ese molesto picazón, pero su deseo de ir a Japón se lo impedía.

-Solo, solo unos días, solo unos días.

Repetía lentamente Rory mientras caminaba usando su enorme hacha como bastón para poder sostener sus piernas.

-Solo unos días más.

Fue cuando la picazón de Rory subió de nivel y ella fue incapaz de seguir moviéndose al sentir como si el placentero climax estuviese por llegarle.

-Aaaaaaaahhhhhhhhhhh.

Grito la sacerdotisa con todas sus fuerzas, y si bien semejante grito hubiese hecho que cualquier hombre en un radio de 10 kilómetros a la redonda hubiese sentido a su pequeño compañero despertar duro cual diamante, este no fue el caso porque el grito no solo iba cargado con lujuria sin control, también contenía un deseo tan incontrolable de sangre, que toda bestia que lo escucho sintió miedo al instante y más de un hombre bestia huyo del lugar con el rabo entre las patas.

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-Señor, estoy seguro de que el senado aprobara que le demos como sacrificio a los prisioneros de guerra si lo justificamos como tradiciones locales… por favor comandante apruebe esta ley.

Rogo uno de los múltiples soldados quienes se habían refugiado en la oficina del general de la JDPS

El pobre soldado ya veterano solo golpeo a su subordinado con su bota, pero eso no impidió que todos los presentes le sigan rogando usar a los prisioneros de guerra como escudo ante tal situación.

-Itami vuelve de una maldita vez, Rory está apunto de mandarnos al otro, otro mundo en tu ausencia.

Rogo el comandante mientras veía a cada ser con alas salir volando casi como si su vida dependiese de ello, como si presagiasen otra calamidad.

Todos los presentes se unieron a sus ruegos, todos menos Yaganami quien no pudo guardarse sus comentarios.

-¿Y por qué Itami está relacionado con el estado de Rory?

-Porque los ataques de ansiedad de Rory comenzaron cuando él se fue sin ella… de seguro está relacionado con el ritual que ella informo con antelación o algo.

- Y asumiendo que eso sea verdad ¿Cómo creen que Itami logre mantener a Rory controlada? Hasta donde se no tiene ningún poder sobre la semidiosa.

Uno de los oficiales le lanzo un libro a Yanagami.

-Si Itami no puede manejar a Rory, bien podemos usarte como chivo expiatorio.

Esa declaración fue secundada por todos los presentes, incluso el mayor. ¡Quien sugirió que sea asignado a controlar a la parka en ausencia de Itami!

-Supongo que así no sería un acto de deshumanización y no podrían culparnos si en verdad eres sacrificado en un ritual local.

-¡Esperen! ¡¿Qué cosa?!

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De regreso con Itami este se encontraba comiendo la pierna del conejo el cual se había dorado un poco más de lo esperado, pero seguía delicioso, en especial porque antes de probar su jugosa carne, le había vaciado las bolas dentro de Yao, quien lejos de molestarse por no poder lavarse el esperma de su cara, estaba comiendo tranquilamente, completamente desnuda y saboreando la comida con la salsa que su amo había expulsado sobre su ración.

-Sexo y buena comida….. Creo que fue algo así como conocía a Risa.

Se preguntó Itami, mientras recordaba la noche donde tras una buena comida, un poco de cerveza y unas horas de buen sexo, su exesposa le propuso matrimonio.

Yao por su parte solo estaba centrada en comer su comida, aunque ya estaba medio llena por las beses que Itami se corrió en su boca.

-¿Desea más amo?

Itami solo regreso a ver a elfa oscura y supo que ciertamente aún no estaba satisfecho, claro que lo que deseaba no era comida.

/¿Que pasa conmigo? fueron como 5 veces antes, y aun tengo energía, sin duda las elfas deben tener algo especial para lograr estas cosas/

Se preguntó mentalmente Itami, quien comenzaba a notar que tenía mucha más energía de lo que le correspondía a alguien de su edad. Si bien era cierto que no había podido ni masturbarse por algunos meses por compartir casa con una elfa que tenía la manía de colarse en su cama desnuda, siempre confundiéndole con su padre. Eso ya debería habérsele pasado tras los encuentros que tuvo con Yao.

-Bueno, a quien le importa-Itami sonríe y se acerca a Yao.-Ven, es hora de otra clase de lo que es el sexo anal.

Yao asintió con una sonrisa, desde que su amo le había enseñado los usos que tenía el agujero en medio de sus nalgas había estado ansiosa por una segunda sección, claro que no se había atrevido a mencionarlo por cuestiones culturales de los elfos oscuros, cuestiones que esperaba Itami no tuviese problemas en ignorar.

Itami hizo que Yao se apoyase contra el todo terreno y sin mediar palabra le penetro con fuerza y comenzó un violento mete y saca. Nuestro héroe ya lo había decidido, haría de Yao una adicta al sexo anal, y cuando volviese a Japón compraría todo tipo de artilugios para cumplir dicho cometido.

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Sin embargo mientras Itami disfrutaba de la perversión de Yao. En la capital imperial del área especial, el enviado para las negociaciones especiales, Suwara estaba a nada de salir a la calle armado con su reglamentaria de 9mm.

Y era que hace algunas horas se había informado que Sherry, la chica a la que él le había enseñado a hablar japonés en un esfuerzo por ganarse a sus padre, estaba siendo pretendida por unos de los lores del senado del imperio de gran edad, como medida política para ayudar a la familia de esta a incorporarse más a la bancada del senado.

Suwara aunque no podía identificar el porqué de su enojo, ya había identificado al viejo verde que decía querer deposar a Sherry y de disponía enviarle un mensaje, un mensaje el cual incluía varios kilos de C4.

Más atrás de Suwara se encontraba atrapado en su rabia. La princesa Pina junto a sus subordinadas sonreían en complicidad, mientras lanzaban uno que otro comentario que solo prendía más las llamas de la furia en el corazón de Suwara.

A su vez Suwara anotaba en una pizarra todo lo que le decían, mientras preparaba lo que bien podría considerarse un asesinato premeditado.

La princesa pina por su parte no decía nada, solo se limitaba a ver como sus subordinadas sacaban de sus casillas a Suwara, quien claramente mataría al concejero Edison a más tardar antes del amanecer de seguir con sus planes.

-Señor Suwara, el consejero Edison, suele tener fiestas en sus jardines al menos un día a la semana podría allí acercarse a el y platicar cerca del lago aunque puede ocurran accidentes por dicha zona.

Dijo una de las asistentes de Pina, mientras se mordía el labio para no reír.

-Yo sé que es muy presumido, siempre habla de sus años en el ejército y no dudo que incluso acepte tener un duelo con su persona aun si usted usa sus armas del otro mundo.

Menciono otra.

-Debería ya de aceptar lo que él siente por esa niña-Quiso decir la princesa Pina, pero no lo hizo y solo suspiro, sin duda el japonés se resistía a aceptar la situación con la infanta y se complicaba las cosas.-Señor Suwara creo saber cómo puede solucionar el problema sin derramar sangre.

Pina estuvo a nada de horinarse en sima, cuando Suwara le sujeto de los hombros exigiendo la respuesta.

-Con solo un pequeño dote de seguro los padres de Sherry olvidan esta proposición.

Las subordinadas de la princesa entendieron la indirecta, pero se callaron, si de alguna forma Suwara intuía que lo estaban relacionando amorosamente, la conversación se convertiría en un recordatorio que él no era un lolicon, sea lo que eso signifique.

-No solo le daría a Japón un punto a negociar más fuerte al tener sus padres una deuda, sino que además eliminaría al tercero en discordia sin demora.

Suwara asintió ante ese detalle.

-Tener a los padres de Sherry es importante, Japon podría negociar con eso.

Todas las presenten rodaron los ojos mientras decían "si Japón". Afortunadamente Suwara no se dio cuenta.

-¿Pero qué les envió?

La princesa sujeto las bocas de sus subordinadas justo antes de que estas comenzasen a lanzar sugerencias, sugerencias que de seguro causarían problemas serios.

-Eso ya es algo que usted debería pensar a profundidad…ahora si me disculpa, tenemos que irnos.

Si les gusto esta historia no se olviden pasarse por mis otros trabajos o busquen las historias de una lucha por ser (Uzumaki, Dranel, Kurosaki, Kepchu, o Britania) de kaiserofdarness donde yo le ayudo un poco.

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