Hacía un bonito día en la ciudad de Tomoeda, el sol brillaba con mucha fuerza, se empezaban a sentir los aires de la primavera y en la primaria Tomoeda, la emoción por las vacaciones que se acercaban.
Tomoyo y Sakura comían su almuerzo sentadas en una de las tantas bancas que había en la escuela, aprovechando el clima. Sakura comía sin prestar mucha atención. — ¿Sucede algo malo? — Preguntó Tomoyo preocupada por su amiga. Eso la sacó de su ensimismamiento y sonrió. — No me pasa nada malo. Es que estoy pensando en la última carta que me envió Shaoran. — Contestó muy seria. — ¿Qué te cuenta ésta vez? — Esperaba que no fueran malas noticias. — Me estaba hablando acerca de sus compañeros de clase, y de que sus hermanas lo molestan mucho. — Tomoyo sonrió, de hermanos molestos Sakura sabía bastante. — Pero al final de su carta, me pidió que le enviara una fotografía mía, porque dice que quiere verme. El problema es que no tengo fotos mías que pueda enviarle…— Comentó Sakura. Su amiga se levantó y aplaudió. — ¡Tengo una excelente idea!—
Hong Kong
—Señor Xiaolang, debe mejorar su defensa del lado derecho. — Comentó Wei mientras Shaoran caía. Estaba agotado mentalmente, pues el entrenamiento mágico del día anterior había sido brutal. —Lo siento. — Se levantó con mucha dificultad, con el sudor escociendo en sus ojos. — Creo que lo dejaremos aquí por hoy. Necesita descansar. — Dijo Wei ayudándolo a incorporarse. — No sé si a madre le agrade la idea. A mí sí, hoy entreno de nuevo con Thomas. — Thomas era el entrenador de magia occidental de Shaoran. Era un irlandés de padre chino, también un Li, un mago muy fuerte y un profesor extremadamente exigente. La magia oriental era muy fácil de utilizar para Shaoran, pero su madre quería entrenarlo en la magia occidental.
El chico entró a casa, decidido a darse un baño antes de comer. A veces pensaba que sería lindo tener el fin de semana libre como los demás chicos de su edad, pero recordaba que hasta que no terminara todos sus trámites y asuntos ultra secretos del clan, no podría regresar junto a Sakura. —SHAORANCITOOOOOOOO— Desde la entrada de la casa, Feimei venía gritando hacia su hermano. Llegó hacia él con un pequeño paquete en las manos, y sus otras hermanas también, detrás de Feimei. Lo veían expectantes. — ¿Qué sucede? — Preguntó Shaoran no muy seguro de querer saber la respuesta. — ¡Sakura te mandó un paquete! — Contestaron las cuatro hermanas. Inmediatamente Shaoran se los quitó de las manos. Era una pequeña cajita, y sonrió al ver la descuidada letra de Sakura en la dirección. — ¿Qué es? —
— ¿Es comida?—
— ¿Boletos de avión? —
— ¿Irán a venir su hermano y el amigo de su hermano? —
Shaoran aprovechó que sus hermanas seguían discutiendo y fue a su cuarto a abrir el paquete.
Emocionado, olvidó el cansancio de sus músculos y los ejercicios de Thomas que no había practicado mientras abría rápidamente la caja. Dentro de ella, había un pequeño libro, parecido al que Sakura utilizaba para guardar las cartas. Shaoran lo tomó y al abrirlo sintió su corazón llorando de felicidad. Era un álbum de fotos, fotos de Sakura utilizando todos los trajes que le había confeccionado Tomoyo. "Esto no fue idea suya" pensó sonriendo al ver la foto de Sakura con el traje de hada que usó al capturar la carta tiempo. Internamente dio gracias a Daidouji por mantener la colección y tener tal habilidad artística. Se detuvo especialmente en la foto de Sakura con el traje de gatita. Ese era el traje que había usado la primera vez que pelearon juntos. "Me comporté como un idiota" pensó al recordar cómo la había llamado debilucha y la había despreciado. Había fotos de ella en su uniforme de porrista, probablemente del evento que había tenido hacía poco. Sonrió maliciosamente, a Wen Wei le iba a causar unos celos enormes saber que su novia era porrista. Tomó esa foto y la metió dentro de un cuaderno para enseñársela al día siguiente.
Iba a tirar la caja cuando descubrió otra cajita dentro. Sólo entonces se dio cuenta de que no había ninguna carta con el álbum. "¿Se habrá molestado por lo que pedí?" Se preguntó Shaoran apenado. Al tomar la caja que quedaba, miró que era una cinta de video. "Todo esto fue idea de Daidouji" La cinta sólo decía "Para Shaoran". Pensó mil cosas que podía contener la cinta (no todas aptas para cualquier público), lo que hizo que se sonrojara violentamente y sacudiera la cabeza para apartar todos esos pensamientos.
Shaoran no tenía televisor en su habitación, así que tuvo que esperar a que todos estuvieran dormidos para poder mirar el video. Eso tuvo la agradable consecuencia de que en el entrenamiento con Thomas todo salió perfecto, pues necesitaba mantener su mente ocupada para evitar sentir ansiedad de querer mirar el video en ese instante.
Metió la cinta en la videocasetera y prendió el televisor.
"Producciones Daidouji" Anunciaba el video. Shaoran sonreía muy divertido, hasta que salió Sakura. Llevaba un vestido azul cielo y miraba nerviosa a la cámara. Podía ver sus mejillas ligeramente rojas y jugaba con sus manos para calmar sus nervios. — Eh… Bueno, yo… — Sakura miró hacia un lado de la pantalla. Hubo un corte de edición. Él sabía que Daidouji había dejado esa escena a propósito, haciendo alusión a una situación que se presentó cuando el seguía en Japón.
Era la clase de historia y Sakura estaba hablando acerca de la era Taisho. Ella estaba increíblemente nerviosa y Shaoran la miraba embobado. — Sakura se mira muy adorable cuando está nerviosa, ¿no es así? — Le susurró Daidouji desde su pupitre. —Eh, qu-, n-no yo… ¿P-porqué dices eso?— Contestó él sin querer mirar a su vecina. — Es que la estás mirando con mucha ternura. —
Sakura volvió a salir en escena. Se miraba con un poco más de confianza. — Eh… esto es muy raro. Em… Sh-shaoran. Tal vez te preguntes porqué no hay ninguna carta con el álbum que mandé. Etto… ¡Esta es la carta! — Sakura adoptó una expresión muy seria en su intento de parecer natural, lo que le causó a Shaoran una carcajada. — Siento que solamente escribiendo no es suficiente, y hay cosas que no me es posible poner en papel. — Miraba hacia abajo y de repente alzó la mirada y sonrió. — Muchas gracias por la carta que me mandaste. Me alegra mucho saber que sigues con bien, y entiendo perfectamente tu situación con tus hermanas. — Dirigió su mirada acusadoramente a donde estaba la habitación de Touya. — Mi hermano es muy parecido, sólo que cuando me llega algo tuyo se pone muy irritante y no quiere que lo reciba. — Shaoran, que había estado embobado con la sonrisa de Sakura, de repente sintió mucho coraje. ¿Qué tenía que hacer para que Touya Kinomoto lo aceptara? — Pero papá siempre interviene. Hablando de eso, me dijo que mamá ya te conoce. — Shaoran se sintió vigilado. Eso quería decir que Nadeshiko Kinomoto había estado cerca de él en días pasados. Había sentido una presencia extraña de la que no podía adivinar su procedencia. — Dice que eres un chico encantador y que no le hagas caso a Touya. — Era más fácil decirlo que hacerlo. — Las vacaciones comenzarán pronto, ¿ no sería posible que vinieras? — Preguntó con el brillo de esperanza en sus ojos. A Shaoran se le rompió el corazón al ver su expresión, no había nada que deseara más que decirle que sí y saber que podría verla de nuevo. Pero eso no era posible aún. — Si no, no hay problema. Desde aquí estaré apoyándote, ya verás que todo saldrá bien. — Sakura sonrió de una manera que hizo a Shaoran recordar porqué la quería tanto. Sintió un calor en su pecho y a la vez unas ganas locas de ir al aeropuerto y tomar el primer vuelo disponible a Japón. — Espero que podamos hablar pronto de nuevo. Te extraño y… — El chico se acercó expectante al televisor. — Te quiero mucho Shaoran. — Eso lo mató. Sentía que estallaba de felicidad, y sólo pensaba "Yo también".
Esa noche iba a dormir muy tranquilo.
Perdón ; ^; les ofrezco una disculpa por la demora, y la verdad voy terminando de escribir esto en clase, pero ya quería actualizarles. Me disculpo también por lo corto del capítulo :c
¿Qué le va a contestar Shaoran a Sakura? O más bien ¿Cómo? :P No se pierdan el siguiente capítulo :D!