Hinata POV
Eran alrededor de las 9 de la mañana, el sol ya empezaba a colarse por mi ventana, dándome la señal de que era hora de levantarme. Cubrí mi rostro con las cobijas, me negaba a salir de mi cómoda cama, además era sábado y no tenía tareas ni deberes, ventajas de ser una chica nerd. Rodé unas cuantas veces sobre mi cama hasta que empece a sentir sueño de nuevo sin embargo, alguien había llegado a interrumpir mi momento feliz.
"Hinata-chan" Escuche al otro lado de la puerta que mi hermano mayor me llamaba. Me levante y me asegure de que tuviese ropa puesta, no iba a pasar otra vergüenza frente a él. Abrí la puerta mientras frotaba mi ojo, aún estaba medio dormida.
"Hey, buenos días señorita" Me dijo apretando una de mis mejillas, su tacto con mi piel se sentía frío, era obvio que él llevaba despierto mucho rato.
"Buenos días Itachi-madrugador-san" Le dije haciendo pucheros, ¿Porque levantarse a las 7 de la mañana un día sábado?
"Aun estas dormida ¿verdad?" ¿Era necesaria la pregunta?
"¿Se nota mucho?"
"Tu cabello te delata un poco, además la pijama de ositos no me deja mentir" Sentí vergüenza, literal soy una bebé. Sonrió al verme tratar de esconder los ositos con mis manos. "Hinata-chan, lamento haberte despertado pero debo salir por asuntos laborales y regresare hasta la noche, ¿Podrías mantener el orden en esta casa por unas cuantas horas?" Me pidió amablemente y obviamente asentí.
"¿Quieres que te guarde algo de cenar?"
"Me gustaría algo dulce, si te queda tiempo prepara un postre" Me sugirió y nuevamente asentí "Bien, debo irme ahora mismo pero olvidaba un último favor" Lo observaba mientras tomaba su saco y su celular.
Sacó de un bolsillo las llaves que abrían la puerta de enfrente y antes de salir por esta misma me sonrió "¿Podrías despertar a Sasuke?" Creí haber escuchado mal.
"¿Qué?" Tal vez aún seguía adormecida.
"Solo tócale la puerta y llámalo unas cuantas veces, te lo agradeceré mucho Hinata-chan"
"Pero Itachi-san yo..." Trate de defenderme.
"Oh mira la hora, ya es tarde y debo irme, nos vemos en la noche" Sin más mi hermano mayor cerró la puerta y corto nuestra deliberada conversación. Allí estaba yo, parada en la mitad del pasillo, no supe en que momento había caminado.
"Muy valiente de tu parte, Itachi-san"Pensé y luego solté un suspiro, bonita forma de levantarme un día sábado.
Yo podía limpiar, cocinar, regar las plantas e incluso podar el césped pero ¿Despertar a Sasuke Uchiha un día sábado antes de la 1 de la tarde? me sonaba imposible y también como una sentencia de muerte. No quería, de verdad que NO QUERÍA, esta era la tarea de mamá pero ella no estaba, debía hacerlo a pesar de no haber ni aceptado.
Camine hasta mi alcoba para lavar mis dientes y mi rostro, ya era hora que despertara totalmente, pero bueno, ¿Cómo no estar despierto con semejante labor? Resignada y sin ánimos camine hasta aquella puerta que literalmente decía fuera de aquí.
"Llego la hora" Me dije a mi misma y toque débilmente la puerta un par de veces. No obtenía respuesta y era obvio el porqué. Respire hondo, fruncí el ceño, yo no le temo al baboso de mi hermano. Toque la puerta fuertemente un par de veces, luego otro par de veces más y así hasta que llegaron a ser 8 veces.
"Vamos Sasuke, coopera con la causa" Dije en voz alta, me sentía incomoda levantando mi tono de voz pero al parecer mis golpes de nena, como él los llama, eran inútiles.
"¡Sasuke, levántate!" Ordene en el mismo tono de voz anterior pero no sucedía nada. Toque nuevamente hasta que mis puños empezaron a tornarse rojizos.
"Sasuke, van a ser las 10 de la mañana, levántate" Grite un tanto desesperada, ¿Acaso de verdad no escuchaba? ¿O se estaba haciendo el que no escuchaba? Me moleste ante esa última idea, la cual no estaba tan lejos de lo que podía ser la realidad.
"¡Sasuke, deja de jugar y abre la puerta!" Grite para finalmente explotar. Me hacía enojar y juro que no soy de este tipo de personas. Finalmente sentí que se dignaba a abrirme, imposible si no se levantaba después de escuchar mis gritos por casi quince minutos.
"Niña, tu voz me molesta" Me dijo una chica que llevaba su rojiza cabellera bastante desordenada y solo vestía su ropa interior.
"Esto es asqueroso" Pensé y de hecho mi cara me delataba. "Oh, dis-sculpa, no sabía que Sasuke estuviese ocupado" Y tampoco tenía ganas de saberlo
"Sasuke-kun está dormido pero a mi simplemente no me dejas dormir" Me dijo con molestia en su tono de voz de recién levantada.
"No era mi intención despertarla pero ahora que lo está, ¿le importaría despertar a mi hermano?" Pedí sin tratar de sonar grosera, me fastidiaba que Sasuke metiera a cualquiera a la casa, era desagradable y más encontrármela así.
"Lo haré, solo aléjate de esta habitación" Me ordenó y sin más cerro la maldita puerta en mi cara. Ok, ahora si estaba molesta, literal, Sasuke es la peor plaga existente.
"Estúpido Sasuke" Susurraba mientras caminaba hacía la cocina. Desayunar me haría bien y cambiaría mi mal genio, no iba a amargarme mi día por él. Abrí el refrigerador y para mi suerte encontré todos los ingredientes para prepararme unos deliciosos hot cakes con frutas y crema batida. La comida alegraba a cualquier chica y yo no era la excepción.
Había decidido que la música sería mi compañía mientras cocinaba así que conecte mis audífonos al celular y de inmediato sentí que mi día empezó a cambiar. Bailaba por toda la cocina mientras servia mi desayuno. Un hot cake, otro más, tres es suficiente y uno más por si acaso, empece a ponerles frutas, crema batida y un poco de azúcar glass.
"Debo admitir que se ve rico" Me dije a mi misma con una sonrisa pintada en mi rostro, la cual no duro mucho cuando vi quien entraba por la puerta en ese mismo instante.
"¿Mi desayuno?" Me preguntó con ese tono arrogante tan propio de él pero no me enojaría, mi buen humor no se iba a ir por su culpa. Me saque los audífonos y tome mi plato con el fin de salir inmediatamente de ese lugar.
"En el refrigerador hay leche y en la lacena cereal" Le dije sin siquiera mirarlo pero el no es del tipo que se rinde fácilmente.
"Son casi las doce del día, quiero comida real" Sasuke no tenía vergüenza o dignidad.
"Y la preparare pero no aun. Ahora, si tu hambre es tanta le puedes pedir a tu amiga que te prepare algo ya que obviamente yo no lo haré" Le respondí bastante calmada y seguí caminando pero nuevamente me bloqueaba el camino.
"Sasuke ¿Porque no maduras?" Le pregunte frunciendo el ceño, él solo sonrió irónicamente y puso su mano en mi rostro. Cerré mis ojos por puro impulso, en ese momento sentí que el plato que mis manos sostenían caería al piso.
Uno de sus dedos froto mi mejilla. Estaba helado, de no ser porque estaba frente a mi supondría que estaba muerto. Dejo mi rostro y esa incomoda sensación desapareció al instante, devolviendome la determinación y poco carácter que tengo. Llevo su dedo a sus labios y se movió de la puerta dándome a entender que podía pasar.
"Estas demente" Le dije mientras lo observaba servirse agua.
"Mas demente estas tu si de verdad creíste que comería algo preparado por ti" Lo fusile con la mirada y al parecer eso lo hacia sentirse mas dichoso. Salí de la cocina y a mitad del pasillo pude sentir la puerta de salida cerrarse fuertemente.
"Se había demorado en largarse pero por fin lo hizo" Dije aliviada mientras empezaba a comer y disfrutar el hecho de que Sasuke no estuviese en casa.
Eran las 3 de la tarde, hacía algo de calor y el sol aún estaba en pleno esplendor pero en la casa de cierto rubio particular la noche había llegado antes.
"Carajo Naruto, no entiendo cómo se te pudo olvidar pagar la luz si tu casa es más oscura que el corazón de Sasuke" Exclamo Kiba que trataba de caminar sin tropezar con cuanta cosa tenía el rubio en su habitación.
"No me culpes, yo vivo solo y son cosas que se me olvidan" Se excusó el rubio mientras alumbraba el lugar con su celular
"Tranquilo, eso de que vives solo lo hemos notado todos" Dijo Shikamaru mientras trataba de no tocar los empaques de comida, la ropa sucia y uno que otro objeto o liquido de extraña procedencia.
"Teme abre alguna maldita ventana antes de que nos asfixiemos todos en este hueco" Ordenó Sasuke y Naruto obedeció. La tenue luz de la tarde entro al infierno del rubio.
"No nos podemos quedar aquí, podríamos asfixiarnos o perdernos dentro de tanto mugre" Dijo Shikamaru buscando la puerta para salir de aquel lugar.
"Sasuke, ¿Tu casa no está sola?" Preguntó Kiba y ya todos habían captado la idea. El pelinegro asintió.
"Podemos estar ahí hasta que llegue la noche ¿verdad dobe?"
"Supongo, solo que no dormirán allá" Aclaro Sasuke
"¿Podemos llevar amigas?" Preguntó Kiba emocionado
"Las amiguitas de cuatro patas se las reservan para sus habitaciones" Respondió Sasuke de forma calmada y bastante directa.
"Por cierto ¿Cómo te fue con la amiguita que te llevaste ayer después de clases?" Aparecía la curiosidad de su mejor amigo.
"Hpm. Lo de siempre, nada extraordinario" Explicó con simpleza
"Vamos, Karin no es fea, es una chica bastante sexy" Dijo Kiba "Además, te la llevaste hasta tu habitación y tú no metes a cualquiera en ese lugar"
"Karin no es nada fuera de lo común además lo de la habitación fue un completo error, no esperaba amanecer con ella"
"¿Y entonces como fue que amanecieron juntos?" Preguntó Shikamaru, eso se había vuelto un interrogatorio.
"Creo que me quede dormido antes de sacarla de mi alcoba" Explicó sin darle realmente mucha importancia.
"Tienes suerte que tus padres no están en casa, ellos tienen una estricta política de no-amiguitas-en la casa" concluyó el rubio.
"Hinata se dio cuenta" Soltó Sasuke para finalizar su explicación.
"Estas jodido" Afirmaron los tres al mismo tiempo.
Las horas empezaron a pasar y ya la noche se asomaba, eran las seis de la tarde y Hinata aun disfrutaba sus horas libres. Se había duchado, limpiado un poco, regado las plantas e incluso había terminado de leer un libro. Cuando vio la hora se levantó del sofá y se dirigió a la cocina para preparar la cena, recordaba la sugerente petición de su hermano sobre el postre y sonrió ante la idea de hacer un pastel de chocolate semi-amargo. Saco todos los ingredientes para preparar la cena y el postre pero su mirada se clavó en el plato que ella misma había dejado en el mesón.
"Sasuke no vino a almorzar" Se dijo así misma, se había sentido un poco mal por no darle desayuno. Sin embargo, su expresión cambió al recordar las palabras de su hermano antes de irse.
"Mínimo ya comió, no sé ni porque me preocupo" Aseguró mientras empezaba a lavar las verduras para la cena. Después de unos minutos la comida estaba hirviendo, había llegado a su parte preferida: El postre de chocolate que pensaba hacer para ella e Itachi-san, sabía que a Sasuke no le gustaban los dulces.
"Es semi-amargo, supongo que le guardare un poco para no sentirme mal"Pensó mientras iniciaba a preparar el pastel. Ya había empezado a entretenerse cuando escucho el timbre, le pareció extraño porque tanto Itachi como Sasuke tenían llaves.
Caminó hasta la puerta de entrada y miro por el picaporte, no era ninguno de sus hermanos sino ¿Sakura e Ino? ¿Qué hacían allí? Abrió la puerta para encontrarse con dos animadas chicas.
"Hinata-chan, ¿Cómo has estado?" Preguntó la pelirosa sonrientemente.
"Bien, estaba preparando algo para la cena" Respondió tranquilamente pero con varias dudas.
"Nosotras trajimos películas, pop corn y algunos dulces" Dijo la rubia alegremente mientras enseñaba las caratulas de las películas.
"¿Eh?" La pelinegra ladeó un poco su cabeza.
"Hinata-chan, ¿Recuerdas la pijamada que haríamos hoy?" Preguntó Sakura a su confundida y dulce amiga.
"Etto... sí, solo que me distraje preparando la cena, pasen por favor" Pidió la olvidadiza chica sonrojada para después cerrar la puerta.
Sus amigas entraron y de inmediato fueron a la cocina con Hinata, les encantaba verla cocinar.
"¿Que preparas?" Preguntó la curiosa pelirosa.
"Solo son verduras con un poco de pollo y también preparare un pastel" Respondió sonrojada la pelinegra.
"Hinata-chan eres muy buena cocinando, tu cena se ve deliciosa" Aseguró Sakura.
"Me imagino que el pastel quedara delicioso" concluyo Ino. Ambas notaron como el sonrojo de la pelinegra aumento.
"Gracias, les serviré un poco" Dijo Hinata entusiasmada mientras servía un poco de vegetales con pollo en dos platos y los colocaba sobre la mesa de la cocina. "P-Por favor coman, espero que les guste"
"Gracias por la comida" Dijeron las chicas al unisono mientras empezaron a disfrutar la comida de la pelinegra.
Hinata se dedicó a terminar el postre mientras sus amigas terminaban de cenar, se sentía alagada por su comida y eso la entusiasmaba mas a hacer las cosas. Cuando por fin termino empezó a lavar trastes para dejar todo limpio y en orden, tal y como el mayor lo había pedido.
"Hina-chan, ¿Estás sola el día de hoy?" Preguntó la rubia y la aludida asintió.
"Creí que Sasuke-kun estaría contigo" Dijo Sakura ingenuamente.
"Sasuke no pasa los sábados en casa, es muy rara la vez que llega antes del domingo por la noche" Aclaro la pelinegra sacándose el delantal.
"Aww que mala suerte no poder echarle un ojo a tu hermano" Decía Ino mientras hacía pucheros.
"Honestamente no sé qué le ven a Sasuke, no es la persona mas amable, es más dudo mucho que se le pueda catalogar como persona"
"Vaya... De verdad se llevan mal" Concluyo Sakura al escuchar las palabras de Hinata.
"Cierto, tu no eres así" Afirmó Ino.
"Es solo la verdad, además eso de que nos llevamos mal no es un misterio, siempre ha sido así, simplemente no compaginamos" Explicó Tranquilamente la pelinegra.
"Como sea, tu lo ves así porque es tu hermano pero piensa por un minuto que no lo es, no me niegues que como mínimo te parecería atractivo"
Hinata hizo un gesto de asco y miro al piso, en ese momento recordó la sensación de la mano de Sasuke sobre su mejilla y por alguna extraña razón sintió que en la cocina empezaba a hacer calor.
"Hinata-chan" La llamó Sakura pero la pelinegra no respondía.
"¡HINATA! EL HORNO ESTA BOTANDO HUMO" Exclamo Ino y la aludida reaccionó, hacía calor porque literal la cocina se estaba quemando.
"¡Dios!" Exclamo Hinata mientras buscaba la forma de apagar estufa pero el humo no paraba de salir, no podía ni ver o respirar bien y para su suerte la alarma contra incendios se activó y de esta forma las gotas de agua empezaron a salir de un aparato que había en el techo.
"Hinata ¿Qué diablos pasa aquí?" Preguntó un chico bastante alterado mientras entraba a la cocina.
"Sasuke-kun" Chillaron al unisono Ino y Sakura el nombre del chico.
"¿No es bastante obvio?" Preguntó la pelinegra mientras lograba por fin apagar la estufa no sin antes salir un poco empapada.
"Te dejan un sábado la casa sola y tú la incendias" Regaño Sasuke a la menor.
"No ha pasado nada y no me levantes la voz" Aclaro ella.
"Le contare a Itachi de tu pequeño accidente" Amenazó Sasuke a la menor.
"¿Ah sí? Dile y yo hablare con mamá y papá sobre tu amiguita" Aseguró Hinata, los dos se fusilaban con la mirada mientras tres chicos y dos chicas miraban desde el marco de la puerta la convivencia de esos dos hermanos.
"Sasuke creo que nosotros deberíamos irnos, podemos venir otro.." Las palabras del rubio fueron interrumpidas por el pelinegro.
"Suban a mi habitación ahora mismo" Ordenó él y sus temerosos compañeros obedecieron. "Y tu" Refiriéndose a la menor "Vas a limpiar este lugar y a recoger todo este desorden ahora mismo"
"Sabes perfectamente que no estas a cargo así que no te las des de muy responsable" Respondió Hinata y prosiguió "Además, tengo una pijamada planeada, así que limpiare cuando me dé la gana"
Sin más Hinata camino hacía su alcoba con sus dos sorprendidas amigas dejando a Sasuke solo en la cocina.
"¿Pijamada? ¿Eso es lo que quieres? pues entonces no dejare que duermas ni un minuto" Pensó Sasuke mientras subía hasta su habitación.
Sasuke POV
Fui hasta mi habitación con la firme intención de hacer enojar a Hinata y efectivamente conocía la mejor forma de hacerlo. No entendía porque era tan terca, ¿Acaso no se da cuenta que pudo causar un incendio o desmayarse ahogada por el humo? De verdad que es tonta y aun así tiene el descaro de pelear. Encendí el estéreo, el televisor con vídeo juegos y conecte mi guitarra al enorme amplificador.
"Teme vas a despertar a medio Tokio" Dijo Naruto preparado para lo que venía.
"Hinata me va a escuchar a las buenas o a las malas" Dijo él acomodándose en la cama.
"Literal, ella te saca de tus casillas y no puedes negarlo" Aseguró Shikamaru al ver el comportamiento del más "serio y sensato" de sus amigos.
Sasuke ignoró olímpicamente los comentarios y empezó a tocar. Por cada acorde los vidrios empezaban a amenazar con quebrarse, los objetos empezaban a bailar hasta caerse o en su defecto romperse.
"TEMEEEEEEEEEEEEE" Gritaba Naruto pero era inútil
"SASUKE YA DETÉN ESO MALDITO DEMENTE" Pedía Kiba sin obtener respuesta
Sasuke estaba en su mundo, feliz de hacer molestar a Hinata, la cual no demoro en tocar la puerta. Solo el mismo pudo escuchar a través de todo el ruido. Se detuvo y se levantó para atender a su querida hermanita.
"¿Se te ofrece algo?" Preguntó sarcásticamente a la pelinegra, la cual solo lo asesinaba con la mirada.
"Que te mueras o en su defecto que dejes de hacer tanto ruido" Dijo ella bastante molesta.
"¿Acaso no querías una pijamada?" Preguntó nuevamente y vio que Hinata no lo miro de frente, más bien escondía su rostro bajo el flequillo.
"Ino-chan y Sakura-chan básicamente huyeron a penas empezaste a tocar eso que llamas música, yo...yo solo quiero dormir" Explico ella, no tenía ganas de pelear con Sasuke, debía limpiar la cocina y luego dormiría si es que él se lo permitía.
Sin más, la pelinegra se dio media vuelta y se dirigió hacia la cocina, no alego, no peleó solo le pidió algo razonable.
"Creo que esta vez lo que hiciste si fue bastante inmaduro" Dijo el rubio tratando de recuperar sus órganos internos después de tal estruendo.
"Viejo, va a ser raro lo que voy a decir, pero Naruto tiene razón" Aseguró Kiba.
"Es solo un berrinche" Mascullo Sasuke al ver lo blandos que eran sus amigos.
"¿Acaso el ruido te afecto los ojos en vez de los oídos? Ella quería llorar, es más, no dudo que este llorando" Agregó Shikamaru, de verdad se sorprendía al ver la inmadurez de Sasuke cuando se trataba de Hinata.
"Hmp. Si tanto les importa ¿Porque no van tras ella?" Preguntó el pelinegro sin mostrar señal de arrepentimiento.
"¿Tal vez porque no fuimos nosotros los que ahuyentamos a sus amigas y no la dejamos dormir?" Preguntó sarcásticamente Kiba "Como sea, creo que ya es hora de que nos vayamos"
"Si, la fiesta en casa de Temari va a estar brutal" Concluyo Shikamaru mientras salía del cuarto con Kiba, dejando al rubio al pelinegro solos.
"Teme, discúlpate con ella" Pidió Naruto.
"¿Vas a seguir?" Preguntó Sasuke bastante alterado.
"Sabes que no estuvo bien lo que hiciste, Hinata no hizo algo tan malo y solo se estaba defendiendo"
"Es que eso es lo que me molesta. Ella cree que puede hablarme y tratarme como se le da la gana" Explicó Sasuke tratando de calmarse.
"Hey ella no te va a alabar como las demás chicas, no tiene por qué hacerlo, es tu hermana después de todo y te conoce, no es como esas chicas que te adoran, de veras que no lo es" Decía Naruto tratando de enfriar las cosas. Suspiro y prosiguió "Teme, yo iré a la fiesta de Temari pero creo que es mejor que tú te quedes esta noche en casa"
"Hmp. también iré, me alistare y los alcanzo allá" Dijo Sasuke y acompaño a sus amigos hasta la salida de la casa. Cerro la puerta y miro hacía la cocina, no se escuchaba ruido, no parecía ser que su hermana estuviese limpiando ni nada similar.
"Hina.." Se detuvo apenas abrió la puerta y encontró a la menor acostada sobre la mesa con los ojos cerrados ¿Se habría quedado dormida llorando? Se acercó hasta el rostro de la chica para verificar si estaba dormida pero ella de inmediato abrió sus blanquecinos ojos y retrocedió.
"¿Qué quieres ahora?" Preguntó con tono cansado y el ceño algo fruncido.
"Quiero cenar" Le dijo de forma tranquila.
"Te recuerdo que la cena se quemó y que tu jamas comerías algo preparado por mi ¿no?" Preguntó ella aun molesta.
"Aun así guardaste mi almuerzo" Dijo Sasuke mientras veía el plato tapado en el mesón.
"Vamos Sasuke, ¿Porque no te vas como todos los sábados? Es bueno hasta para ti" Decía ella bastante cansada, no tenía ganas de pelear o algo similar.
"Me iré en un rato pero antes voy a comer" Decía él tranquilamente mientras se sentaba en la mesa y empezaba a comer el que era su almuerzo. Hinata lo observo por unos minutos y después se levantó como si nada para empezar a limpiar.
Seco la cocina y recogió las cosas que sus amigas habían tirado en el momento del susto, también seco el piso con el trapeador y por ultimo saco eso que iba a ser un delicioso postre del horno microondas. Suspiro, puso su fallido experimento sobre la mesa y sentó en la esquina contraria de donde estaba su hermano.
"Ya termine, ¿Puedo dormir ahora?" Preguntó resignada.
"No tenías que limpiar, pensaba proponerte algo pero ya que lo hiciste supongo que no sera necesario" Decía Sasuke pero ella no mostraba interés alguno, simplemente miraba a otra dirección. "Aun así, creo que aun puedo proponerte algo que nos conviene a los dos"
Hinata lo miro dándole a entender que tenía su atención, o al menos un poco de esta.
"Yo no diré nada de tu accidente en la cocina si tu no dices nada de la chica que viste hoy" Hinata en ese momento frunció el ceño e inflo sus mejillas, despeinada y todo se veía adorable.
"Acepto" Dijo ella a secas, no quería que le quitaran su pasatiempo preferido, pero no era tonta "Con una condición" Sasuke la observo irónicamente, Hinata era un caso aparte. "Tu limpiaras la cocina cada vez que yo prepare algo, durante un mes"
"Debes estar bromeando" Aseguró Sasuke.
"Yo no bromeo contigo, Sasuke" Respondió la menor "Deberías aceptar, te conviene más a ti que a mí y lo sabes" Concluyo ella y en ese instante el pelinegro se levantó hasta quedar frente a ella. Coloco sus brazos entre en la mesa y la silla de la menor, acorralándola y acercándose peligrosamente.
"Sa-Sasuke" Tartamudeo "¿A-Acaso n-no conoces el espacio personal?" Se maldijo así misma por ponerse nerviosa.
"¿No me digas que estas nerviosa?" Preguntó el irónicamente y ella negó moviendo su cabeza y cerrando los ojos ante el mismo impulso. Era obvio que estaba asustada, esa clase de acercamiento no era normal. "Yo creo que estas asustada, hermanita ¿Porque no abres los ojos?" Hinata solo seguía negando y el sonriendo, se aprovechó de la situación y se acercó al oído de la menor "Creo que te vez más bonita así que respondiéndome" Susurro y se despegó totalmente de ella.
Hinata había abierto los ojos pero no decía nada, estaba estática en su silla, con el sonrojo hasta en el cabello y el corazón latiendole a mil por hora en la garganta. Sasuke sonrió nuevamente al verla de esa forma, su hermana era testaruda pero una chica a fin de cuentas, una bastante especial. Tomo un poco del pastel desfigurado de Hinata y lo comió.
"Con chocolate amargo hubiese quedado mejor" Dijo antes de marcharse y dejarla básicamente pegada a la silla. Después de unos minutos Hinata reacciono y corrió un mechón de su cabello detrás de su oreja. Suspiro y se levantó de la silla, miro su prospecto de pastel y lo guardo en el refrigerador, luego miro el plato en el cual había comido su hermano, estaba totalmente vació.
Nuevamente se había sonrojado y no sabía porque. Apago las luces y subió directamente a su habitación, se encerró, se hecho seguro, corrió la cortina y se metió a la tina de su baño, el agua helada la haría reaccionar y olvidar esa extraña calidez que esta vez no era producida por un incendio. "Estúpido Sasuke" pensó mientras mantenía la cabeza bajo el agua y contenía la respiración. Luego de un rato se acostó sobre su cama y cayó profunda en el mismo instante.
A los pocos minutos el Uchiha mayor llego, pero para su sorpresa lo único sobre la mesa era un pastel medio quemado y un plato vació. "Qué bueno que comí por fuera" Se dijo así mismo mientras dejaba un pastel de frutas en el refrigerador, sabía que su hermana se alegraría al verlo al día siguiente. Camino hasta su alcoba y examino cada pasillo, levanto los hombros y entro a su habitación "Por lo menos no quemaron la casa"pensó él ingenuo hermano mayor.
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Hi. Pueden seguir la historia en myworks/66119057-sibling-issues ya que lo mas probable es que deje Fanfiction.
