Un hermoso día soleado como el sábado, las mañanas son tranquilas, los pájaros "cantan" y ...

-¡MIROKU!-Gritaron cincos voces, que posiblemente se escucharon por todo el vecindario.

...Y seis mocosos adolescente arruinando las tranquilidades de las mañanas.

El barrio Shikon, es el lugar mas conocido en Japón. Este lugar, son para las personas que ganan dinero y le sobra, que tiene clase y estilo. Las casa de este barrio son todos del mismo modelo, pero son grandes, lujosas, ostentonsas y elegantes. En el interior de cada casa esta decorada de acuerdo con el carácter de la familia que la habita, la mayoría de las familias que habita el barrio Shikon son muy pretenciosas.

Pero entonces si el lugar son para esas personas. ¿Qué hace AHI la familia Higurashi?. La respuesta: Nadie la sabe. Esta familia es muy hogareña, unida, numerosa y CASI llenas de hombres. Ellos siempre vivieron de una forma decente, no vivieron es una casa TAN elegante pero tampoco vivieron en una choza. La familia Higurashi, esta conformada por un padre joven y viudo, con seis hijos, cinco son hombres y una es mujer. Solo paso un día que esta familia se mudo, y ya probablemente la mitad de los vecinos estarán tocando la puerta de su casa quejándose, por el griterío que hacen.

En una de las casa probablemente la mas ruidosa del todo el barrio, se encontraban cuatro jovencitas y un joven, todos mojados por su único hermano que se encontraba seco y riéndose de ello a mas no podes, en el medio de la sala. Toda la casa estaba en silencio, hasta que se escucho el ruido de pasos bajando la escalera. La persona que bajo por esa escalera es ni nadie mas ni nadie menos que Kyouta Higurashi, un hombre de pelo corto azabache y ojos azules, de unos 35 años, demasiado joven para ser padre de seis hijo.

-¿Que esta pasando?-Pregunto Kyouta mirando la mayoría de sus hijos mojados, excepto uno.

-Lo que pasa es que ese-Dijo Koga señalando a Miroku.-Se quiso hacer el gracioso. No solo estamos mojados, si no que ahora estamos en los cuerpos que no deberíamos estar.-Dijo mirando su ahora cuerpo femenino.

-¡Te voy a matar Miroku!-Dijo una furiosa Aome en su cuerpo masculino.-Mas vale que corras, ahora no soy una chica y te hace aseguro que tengo la misma o mas fuerza que tu para querer estrangularte.

-No eres la única Aome, yo te ayudo a estrangularlo-Dijo Koga mirando a Miroku como si fuera una presa para cazar.

-Nosotros también nos unimos-Dijeron Souta, Shippo y Kohaku.

Todos fueron corriendo hacia Miroku, este lo único que hizo fue tragar seco y salir corriendo. Kyouta lo único que hizo fue suspirar con cansancio mientras se masajeaba las sienes, escuchando los gritos de sus hijos y diciéndose a si mismo "no hay tranquilidad en las mañanas".


En la casa de al lado, se encontraba viviendo la familia Taisho. La familia mas prestigiosa del todo el barrio Shikon. En la cocina se encontraba los Señores Taisho desayunando. La señora Taisho tenia pelo azabache y ojos marrones, sus edad rondaba por los 33 años. El señor Taisho tenia pelo plateado y ojos dorados, su edad era de unos 37 años.

-Es curioso, ayer se mudaron los nuevo vecinos y nadie los vio-Dijo la mujer tomando su te.

-No hace falta verlos, con solo escucharlos te podes imaginar cualquier cosa-Dijo el hombre mientras daba la vuelta la hoja de su periódico.

-¡InuTaisho!-Regaño la mujer.

-No me retes Izayoi, es la verdad.

En el umbral de la cocina aparición un muchacho de unos 15 años, de pelo azabache y ojos marrones. Y su lado estaba una niña de 11 años, muy parecida a su hermano.

-¡Inuyasha! ¡Rin!, que bueno que despertaron-Dijo Izayoi mirando a sus hijos.

-Buenos días-Dijo Rin sentándose al lado de su madre.

-Buenos días-Dijo Inuyasha de mala gana.

-¿Y Sesshomaru?-Pregunto InuTaisho aun leyendo su periódico.

-No quiso bajar, y por cierto a ti también buenos días-Dijo Inuyasha con sarcasmo.

Hubo un pequeño silencio, hasta que Rin pregunto:

-Mama, ¿tu viste ayer las nuevos vecinos?

-No, Rin. Pero pensaba en ir a visitarlos, para darles las bienvenida.

-¿Te puedo acompañar?, yo también quiero darles las bienvenida-Dijo Rin emocionada.

-Esta bien, y tu Inuyasha, ¿nos acompañas?-Pregunto Izayoi a su hijo.

-No lo se, por lo que veo son algo ruidosos-Dijo Inuyasha comiendo su desayuno.

InuTaisho se paro, cuando iba a hablar se escucho el ruido del agua, como si al alguien hubiera arrojado algo en la piscina. Como la ventana de la cocina daba a al patio de sus vecino se fijaron lo que pasaba. En el patio de sus vecino vieron que el agua de la piscina estaba algo turbulenta.

-Tiraron algo en su piscina. ¡Estan locos!-Dijo Inuyasha dijo aun mirando el patio de sus nuevos y ahora locos vecinos.

-Y ustedes que querían darles las bienvenida. Suerte con ello-Dijo InuTaisho y salió de la cocina.


Mientras los Taisho pensaban en lo que acaba de pasar. En la casa Higurashi los jóvenes recién mojados chocaban sus manos mientras miraban a su hermano chapotear en el agua. Miroku salió de piscina transformado ahora en mujer y se metió rápido a la casa para que nadie lo viera.

-Esos mis hermanos, se le llama hombre al agua-Dijo Aome mirando a Miroku.

-Prefecto Miroku, ahora estas igual que nosotros-Dijo Shippo riendo.

-Define "igual" Shippo-Dijo Miroku enojado.

-¡Oye! No te molestes tu empezaste-Dijo Souta.

-Es cierto, el que la hace la paga-Dijo Kohaku mirando su "hermana".

-Nadie mejor que tu Kohaku, lo puedo a ver dicho-Dijo Koga.

Kyouta se dirijo en donde estaban sus hijos, mirándolos con severidad.

-No tendría que a ver hecho eso-Dijo el hombre serio.-Alguien puedo a ve visto a Miroku mientras salía de la piscina en su otro "apariencia".

-Bueno, si no hubiera sido por CIERTA persona-Dijo Aome recalcando la penúltima palabra.- Que nos llevo a unos malditos lagos. Posiblemente no seriamos "esto" cuando estemos con el contacto con el agua fría.

-Aomecita, ya pedí perdón por eso-Dijo Kyouta mirando a su hija, aun esta su estado masculino.-Además yo no creía en esas leyendas de los lagos de Jusenkyo.

-Porque crees que esos lagos son secretos y solo lo sabes personas relacionadas con las artes marciales-Dijo Koga con su tono de voz femenina suavemente.-¡POR QUE TODAS ESAS LEYENDAS SON VERDADERAS!.

-Además cuando nos llevaste ahí, éramos unos niños inocentes-Dijo Miroku con drama.

-Niños inocentes algunos, algunos ya estaban en la perversión-Dijeron Shippo, Souta y Kohaku mirando su "hermana" Miroku.

-Que dijeron "MOCOSAS"-Dijo Miroku con burla.

-Nada, nada "HERMANA"-Dijeron las "mocosas".

-Bueno, ¡basta!-Dijo Kyouta.-Entiendo. En esos momento fui un mal padre. Pero trato de arreglar esto. Ahora jovencitas y jovencito, se van a dar una ducha con agua caliente y cambiarse.

Todos de mala ganas subieron las escalera excepto Aome que le dijo a su padre:

-Por lo menos, yo no me transformo en un panda mutante-Dijo y subió las escaleras.

Kyouta suspiro mientras miraba a su hija subir las escaleras.

Después de lo sucedido en la mañana, la familia Higurashi tubo por lo menos una tarde tranquila. Como era fin de semana todos terminaban de desempacar algunas cosas que faltaban. Hasta que tocaron la puerta. Los hermanos curioso por ver quienes eran, fueron todos juntos hacia la puerta excepto Souta que ayudaba su padre en el patio. Al abrir la puerta, vieron a tres azabache.

-Hola, me llamo Izayoi Taisho. Y estos son mis hijos Inuyasha y Rin Taisho. Veníamos a dales las bienvenida por mudarse al barrio Shikon-Dijo finalmente.

Aome que estaba en el medio de la puerta con sus hermanos detrás de ella, iba a hablar hasta que se escucho los gritos de Souta dirigiéndose a ella.

-¡Aome! ¡Aome!

-¿Que pasa Souta?-Pregunto Aome arrodillándose frente a su hermano.

-Papa se tropezó y callo a la piscina-Susurro Souta a Aome.

-¿Se tropezó nada mas?-Arqueo una ceja Aome mirando a su hermano.

-Bueno... en realidad lo empuje... ¿Que?... quería verlo de panda-Susurro sonriendo traviesamente.

-Si te diste cuenta, tenemos vistas-Susurro Aome.

Aome se volvió a parar y miro los tres Taisho parados enfrente de ellos. Aome se presento con todos sus hermanos, después de haberse presentados todos, los tres invitados iban a entrar en la casa de los Higurashi, hasta que Izayoi hablo:

-¡Eso es un panda!

Los hermanos Higurashi, miraron al panda detrás de ellos.

-No, no en realidad es nuestro padre "disfrazado" de panda-Dijo Miroku.

-¿Porque esta disfrazado de panda?-Pregunto Rin mirando al panda mutante. Ya que nunca había visto un panda tan grande.

-Perdió una apuesta que hizo con nosotros. Y pues... esta es la prenda que le toco-Dijo Kohaku.

El "panda" que aun estaba ahí, siendo observado. Tenia un cartel que decía "HOLA".

-¿Porque tiene un cartel, en ves de hablar?-Pregunto Inuyasha algo desconfiado.

-Los pandas no hablan, y como nuestro padre es un panda le dimos un cartel-Dijo Koga como si fuera lo mas obvio del mundo.

-Pero, en esta ocasión, vamos hacer que se saque el "disfraz" para presentarse decentemente-Dijo Aome agarrado la garra del panda. Casi arrastrándolo por las escaleras.

Aome suspiro y pensó porque todo siempre nos pasa a nosotros.