Animals

Disclaimer: El titulo de este fic, he inspiracion fue tomado de la cancion "Animals - Maroon 5", ni la cancion, ni los personajes de Naruto nos pertenecen, solo son usados con meros fines de entretener.

Advertencia: Este fic contiene violencia y situaciones que podrían ser ofensivas o molestas para algunas personas. Si eres una persona muy sensible te recomendamos que no lo leas.

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"Sucede cada noche, te ataco, te corto o te ahogo y mueres mirándome con tus preciosos ojos verdes mientras te desangras entre mis brazos" Jace Wayland, Cazadores De Sombras

Capítulo 1

"Olfato"

Esta nueva misión parece sencilla, eliminar a una joven promesa médica. No me tomara más que solo el tiempo de llegar a Suna; hacía mucho tiempo no tenía una misión en solitario, así que... -Procurare divertirme con esta pequeña presa.- Me dije esbozando una maquiavélica sonrisa digna de cualquier pesadilla, antes de colocarme aquella fría y blanca mascara de porcelana sobre el rostro. Dicho eso encamine mi rumbo hacia Sunagakure.

Llegue a un pequeño oasis justo a la mitad del camino, como no tenía prisa decidí acampar esa noche y así tener tiempo de revisar la información del objetivo con relativa calma, pues nadie en su sano juicio se atrevería a encontrarse conmigo, no después de sentir mi presencia; y es que podría decirse que era algo oscura y abrumadora o eso solían decirme.

Tome el pergamino con la información y comencé a revisar.

-Nombre: Haruno S.- Aunque realmente no importaba, lo asesinaría de todos modos, y terminaría por olvidarlo en pocos días.

-Genero: Femenino- "¿Con que una mujer?, ¿Que podría haber hecho como para que la manden asesinar?"- pensé mientras seguía leyendo el informe del objetivo, sin detenerme demasiado en los detalles que eran irrelevantes para mi propósito.

-Estatura: 1. 65, es algo bajita, será fácil de manejar.-

-Advertencias...- realmente ninguna, no me sorprende es solo una médico, al parecer muy inteligente y joven.

-Edad: 18, si realmente joven, muy joven, es una lástima, pero no se puede hacer nada al respecto. Bueno, yo no haría nada al respecto.

-¡Que sorpresa! me han incluido fotografía.- Es algo raro normalmente no las incluyen.- Pero mira nada más que atractivo resultó este objetivo.- dije mientras memorizaba su bello rostro, pues sin lugar a dudas su belleza era muy singular.

-Cabello rosa, algo corto, ojos verde jade... Para vivir en Suna su piel parece demasiado clara, definitivamente será una lástima terminar con tan hermosa vida.- comente esbozando una sonrisa debajo de la máscara que portaba. Una chica como está no se veía todos los días, casi pude sentir una pequeña señal de remordimiento... casi.

Como no me gustaría ser descortés con la dama, decidí no hacerla esperar. Levante mi pequeño campamento continuando con mi camino a mitad de la noche con más entusiasmo que antes, ansioso de empezar la cacería.

Me detuve a una distancia prudente de la aldea para preparar mi primer movimiento. Según el informe es una médico especialista en toxicología, por lo que me hice un par de marcas con un senbon ligeramente envenenado, me disfrace como un turista mas y pretendí haber sido mordido por una serpiente en el camino, quedándome cerca de un transitado camino en espera de algún incauto que pudiese "auxiliarme". Con la suerte de mi lado eso no tardo en suceder y pronto me encontraba ya en las puertas de Suna temprano por la mañana, siendo llevado a cuestas por uno de los tantos guardias shinobi, dado a mi estado se saltaron el protocolo de seguridad para darle prioridad a mi salud.

Y así "casi con los pies por delante" es que llegue al concurrido hospital de la aldea, la alarmada recepcionista rápidamente llamó a los camilleros -"Tan sencillo resultó convencerlos de que estaba lastimado, he aprendido muchas artimañas en este negocio"- Al colocarme en la camilla me examinaron enseguida encontrando la "mordida" de serpiente, escuche que me llevarían a toxicología.

¡Bingo!, el plan estaba en marcha, el veneno comenzó a hacer efecto poniéndome un poco somnoliento, subiendo un poco mi temperatura, pero nada que no pudiera manejar ni que interfiriera con mis planes.

-¡Llamen de urgencia a la Doctora Haruno!- escuché a una de las enfermeras en el pasillo. Mientras esperaban su llegada decidieron canalizarme y ponerme algo de suero simple para mantenerme hidratado a causa de mi alta temperatura. Cuanta consideración.

Un par de minutos después pude percibir una fragancia totalmente embriagadora que se acercaba, la cual rápidamente impregno todo el ambiente y me hizo inhalar profundamente en un vano intento de llenarme los pulmones con el delicioso aroma.

Al parecer inhale tan fuerte que alarme a la doctora. -Este hombre está a punto de sufrir un paro respiratorio.-dijo, lo cual era cierto, pues esa era una de la cualidades del veneno que me suministre, acercándose velozmente a donde yo estaba, intentando ayudarme a respirar con seguros movimientos sobre mi pecho que contrastaban con sus palabras delicadas.

Ahí me di cuenta de que no era tan débil como aparentaba su delgada silueta, pues sus pequeñas manos presionaban firmemente mi pecho una y otra vez.

-Todo estará bien, no te preocupes...- eran las típicas palabras con las cuales los doctores solían calmar a todos sus pacientes. - No temas- me decía con voz segura; que ironía, es ella quien debía temer de mí, quien sería su verdugo.

Al abrir mis ojos pude notar claramente su belleza, su ceño ligeramente fruncido en señal de estar completamente determinada y concentrada en su trabajo, sin duda mi objetivo era hermoso, y será eliminado antes de que se dé cuenta de que es lo que ha pasado.

En lo que ella intentaba mantenerme respirando, las enfermeras, como si fueran cucarachas o algún insecto que se ve expuesto a la luz, iban de un lado a otro buscando frenéticamente un respirador o algo que me mantuviera con vida.

La doctora, sin embargo, no quería perder el tiempo y comenzó a darme resucitación cardio pulmonar. De pronto vi su rostro acercarse al mío y si ella quería salvarme, ¿Quién era yo para impedírselo?, sentí sus manos posicionarse con experiencia sobre mi rostro, una sobre mis fosas nasales y la otra sobre mi mentón manteniendo mi boca abierta, para después recibir de su parte la vida llenando mis pulmones nuevamente.

Sus suaves y carnosos labios sobre los míos, sin poder ni querer resistirme mordí su labio inferior con mis afilados caninos, hiriéndola y haciéndola sangrar un poco sobre mi boca, sin perder tiempo probé el metálico y dulce sabor de su sangre, como si de un elixir se tratara; mientras ella se retiraba para limpiarse la herida argumentando con las enfermeras que solo fue un movimiento involuntario de mi parte.- "Si, claro..."- involuntario sobre todo y que había sido su culpa no haber sostenido con más fuerza mi mentón.

Para ese entonces el veneno comenzaba a perder efecto dejándome respirar libremente de nuevo. Suspiró aliviada al ver que ya no peligraba mi vida, con un paño sobre la parte lastimada de su boca se acercó nuevamente y coloco su mano sobre mi frente, retirándome unos cuantos mechones de mi cabello que se me habían pegado por el sudor.

-Estas fuera de peligro.- me dijo dulcemente -Vaya que muerdes con fuerza, creo que requeriré un par de puntos, pero no te sientas mal por ello, solo fue un pequeño accidente- completó en un tono gentil.

¿Cómo podía cambiar tanto su actitud de un instante a otro?, ahora su rostro mostraba una expresión mucho más suave y gentil.

-Te dejare en observación para ver como evoluciona tu estado de salud, por el momento descansa... eh... ¿Cuál es tu nombre?,- dijo revisando mi expediente- mmm, por lo visto ni tiempo tuviste de registrarte, si no te molesta revisare tus pertenencias para ver si algo está a tu nombre.- Y entonces registró mi mochila encontrando en ella un álbum fotográfico en donde en la portada interna descansaba mi nombre falso. No soy ningún estúpido novato como para dejar que mi objetivo se dé cuenta de mis verdaderas intenciones antes de tiempo.

-Con que Sukea Mitsuki, lindo nombre, y al parecer eres fotógrafo, en fin gusto en conocerte Mitsuki-san, mi nombre es Haruno Sakura.- Escuchar mi nombre aunque falso salir de sus labios, fue como escuchar el canto de una sirena, más me pregunto... ¿Cómo será su voz... en otro tipo de situaciones? o ¿Cómo se escuchara su último grito antes de partir de este mundo guiada por el filo de mi espada?

Ideas como esas inundaban mi mente, como una jauría de lobos ante una presa indefensa. Sin más se retiró de la habitación dejándome al cuidado de las enfermeras, no sin antes darles instrucciones precisas de que antídoto y cuanta cantidad suministrarme.

Un par de horas más tarde, el veneno había sido completamente eliminado de mi sistema, el plan seguía ejecutándose de la manera deseada, cree un clon para que tomara mi lugar en el hospital y salí a la calle a esperar que mi objetivo terminara su turno, usando un henge para tomar la forma de un civil promedio para cuidar de no llamar la atención de los transeúntes. Para cuando la mujer salió del lugar ya había anochecido, lo que me facilitaba tremendamente el poder seguirla, sin necesidad de usar mis habilidades ninja.

Así que me puse en marcha, siguiéndola sin que ella me notara, caminando a una distancia que fuese cómoda, al menos para mí, ya que era una buena oportunidad para verla en movimiento desde otros ángulos; la oscuridad no representa ningún impedimento, mis sentidos están mucho más desarrollados que los de la mayoría, incluyendo a mis compañeros shinobi. Incluso a esta distancia podía seguir oliendo su esencia, la cual me extasiaba en demasía, todavía sentía sus manos sobre mi cara, sus labios sobre los míos, el sabor de su sangre en mi boca, y quería más de ella, mucho más.

Pronto llegamos a lo que supuse seria su departamento. Se encontraba en un sector bastante solitario, se debería tal vez a que era un complejo nuevo y aun no se habían vendido todos los pisos; mejor para mí, nadie la escucharía implorar cuando por fin estuviéramos a solas.

Me coloque en un árbol cerca de la ventana de su habitación, al parecer el hecho de vivir en un quinto piso la hacia pensar que podía dejar las cortinas y ventanas abiertas, aunque también pudiera deberse al hecho del horrendo calor del lugar durante las noches de verano. Fue entonces que la vi entrar y con parsimonia comenzar a desnudarse, quedándose solo en ropa interior, que cabe destacar no era ni mínimamente sexy, pues solo constaba de un par de pantys y sostén blancos de algodón, ¿En que universo paralelo eso era sexy?, tal visión provoco que sonriera con burla.

Encendió la luz del cuarto de baño, se inspecciono minuciosamente la herida que le cause esa misma mañana ante el espejo, su labio se veía algo hinchado y rojizo, no le dio más importancia y termino por desnudarse completamente ajena al hecho de que la observaba. No tenia mucho pecho, desde donde me encontraba calcule que aproximadamente seria una copa b, lo cual era compensado muy bien con ese lindo trasero.

Observe que ella se disponía a tomar una ducha, el vapor rápidamente inundo el cuarto de baño nublando la vista, el ruido de la ducha ahogaba cualquier sonido que pudiera delatarme, dándome la ocasión perfecta para hacer el primer acercamiento a su hogar e invadir un poco su privacidad, quería saber un poco más de ella antes de ponerme a trabajar. Tome la ropa que había dejado en el piso de la habitación; aun se encontraba tibia y me la lleve al rostro para sentir esa calidez y embriagante aroma, después la coloque arreglada sobre la cama y decidí inspeccionar el resto de sus pertenencias.

No había nada que me interesara realmente, solo quería curiosear, de hecho el lugar era bastante simple con algunos objetos para intentar darle calidez al ambiente o eso imaginaba. Tenia pocos muebles y desgastados, un armario al fondo que no dude en abrir para echar un vistazo, ropa en ganchos, la mayoría eran batas blancas; se notaba que estaba comprometida con su carrera, el resto de prendas eran de alguien recatado. Chasque los dientes ante la decepción, tenia la vana esperanza de encontrar algo que valiera la pena ser visto, así que abrí el resto de los cajones encontrando otro tipo de ropa, parecía deportiva: playeras, calcetines y un montón de basura, todo acomodado en un perfecto orden.- Aburrido...- era la única palabra que me pasaba por la cabeza en ese momento, al menos hasta que me di la vuelta, mirando aquella cama llena de almohadas y cojines, a un lado encontré una bolsa de papel con un logo en letra cursiva estampado, al parecer perteneciente a una tienda de ropa, su contenido me alegro un poco el pensamiento pues contenía una fina lencería y un corto vestido de noche de esos que dejan apreciar hasta la espalda baja y una pequeña nota que decía:

"¡Feliz Cumpleaños, Frente de Marquesina!

Que lo "disfrutes" con algún galán.

Atte. Tu Mejor Y Más Bella Amiga... Ino"

Vaya, vaya, al parecer la chica tenía una amiga muy ególatra y considerada, pues se preocupaba de la vida intima de su amiga.- Y pensar que no volverá a verla, eso sí que es triste.- mencione negando con la cabeza y soltando un suspiro, como si realmente estuviera afectado.

Escuche como cerraba la regadera, por lo que deje la bolsa donde la encontré, pero me quede con su ropa interior, quizá podría encontrarle un buen uso después o simplemente me la quedaría de recuerdo, eso era lo de menos. Vi como giraba el pomo de la puerta del baño, y me escabullí rápidamente por la ventana por la que había entrado.

No me fui, quería ver como se vestía, lo cual no hizo de inmediato para mi disgusto, pues se quedó mirando la ropa que deje en su cama, cuando ella estaba segura de haberla dejado regada en el suelo. Lucia desconcertada; mirando las prendas como si fueran de otro mundo; hasta diría que asustada, pero negó con la cabeza quitándose la zozobra de encima, se aproximó a la ventana y la cerró junto con las cortinas.

Baje del árbol donde me encontraba escondido y por fin solté la carcajada que estaba reteniendo, viéndome en la necesidad de apagar el sonido con mi mano, si seguía así alguien podría escucharme y el juego se terminaría antes de empezar.

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Angy: Bueno, después de tanto tiempo cof cof años cof cof, les traemos una nueva historia que viene ser completamente lo contrario de Tiro al blanco, sin spoilearles mucho solo les diré que sera un fic oscuro, en el que estamos trabajando arduamente (mas bien Sempai me obliga a escribir 7.7)

Sempai: ¿yoooo? tu me diste la idea! ahora acepta las consecuencias!

Angy: Bueno si, la idea original es mía, pero le pedí a ayuda a Sempai para llevarla a cabo pues tiene algo de experiencia con este tipo de fics, al menos mas que yo.

Sempai: seeee, llevo uno de lo mas encantador!

Angy: que les recomiendo encarecidamente leer si quieren saber a tipo de fic se enfrentaran en un futuro con este, el fic de Sempai se llama: "El Viaje"

Sempai: al anbu le gusta ponerse juguetón, pero nadie lo entiende.

Angy: pues ¿como quiere que lo entiendan si sus compañeros de juegos no viven para contarlo?

Sempai: ¿a que querían que jugaran los anbu? ¿a la matatena?, pero buee, lo que importa es este nuevo proyecto, después habrán fics mas familiares e inocentes.

Angy: En fin esperamos sea de su agrado este fic, al que ya le tenemos un cariño especial y que si se demoro en su salida, es en mucho mi culpa XD, que procrastino demasiado, háganos saber sus opiniones, ideas, traumas que les deje el fic, en forma de reviews. Agradecemos de antemano el tiempo que inviertan leyendo este fic.