-Por favor Wendy, deja de decir tonterías- dijo Natsu molesto- son surrealistas y una perdida de tiempo.
-Pero Dr. Natsu, dicen que es verdad, aun que no este probado científicamente tiene mucha lógica por las marcas que se encuentra alrededor del mundo, los werecats existen.
-Wendy, déjalo ya, son tonterías, piénsalo bien ¿Hombres gato? ¿Lo sacaron de un libro romántico o algo? Venga, vámonos de una vez- dijo el levantándose del escritorio- Cierra la veterinaria que ya es tarde.
-Si, doctor.
En esta ciudad existe una estúpida leyenda, de esas en las que los niños creen y las madres las utilizan para que hagan caso, como "si no te comes todas tus verduras el hombre-gato vendrá y te comerá" y cosas por el estilo, e sido veterinario por cinco años y no e encontrado algo similar o algún descubrimiento que de razón de existir a esta leyenda, son historias urbanas, sobre hombres y mujeres como nosotros que se pueden transformar en algún felino determinado al alcanzar la edad suficiente. Se pueden transformar cuando quieran y en donde quieran, son más agiles, más rápidos y más fuertes, pero claro, todo depende de que felino sean, un hombre-león será mucho más fuerte, rápido, y ágil que un hombre-gato, pero lo esconden por alguna razón. Esa es la prueba numero uno por la cual se que no existen esas criaturas, no se muestran ante el publico, si existieran criaturas como esa valdrían millones, y ellos serian los que más se beneficiarían, se harían famosos y cosas por el estilo Y tenemos que ser sensatos, si existen hombres-gato que vendrá después ¿Duendes? ¿Hadas?¿Vampiros? Hay que ser realistas, no hay cosas como esa, no hay secreto escondido bajo el cielo, así que si hay monstruosidades así ya hubiera salido a la luz. Para el colmo dicen que se enamoran y tienen sentimientos y todo, si son humanos, son humanos, si son gatos son gatos ¿Quién se pudiera enamorar de alguien así? Seria enamorarse de un animar, eso es ilegal, zoofilia en otros términos . Completamente asqueroso e inhumano, pero aun así no existe, nadie puede ser más fuerte que el humano, ni mas inteligente, y para esconderse tendrían que serlo. Es estúpidamente imposible.
-Que descanse bien doctor- dijo Wendy.
-Ten cuidado en el camino a casa, es de noche Wendy - respondió el- Hasta mañana
-Doctor, mañana es mi día libre-
-Es verdad, bueno, entonces la espero el jueves- se despidió.
Wendy era una linda y tierna chica de pelo azul, haciendo que cualquier hombre despierte su deseo de protegerla, por el contrario de estos bichos gatos, la misma leyenda dicen que son los seres más atractivos sobre la tierra, pero...¿Un hombre gato atractivo? Por favor... serán unos peludos y vagos animales en forma de persona, y dependiendo del felino, serian unos caníbales asesinos por naturaleza. No es que tenga nada en contra de los animales, me encantan por algo soy veterinario, pero fantasías como esas hacen que la gente se desconcentre de las cosas de verdad y pierdan el tiempo en un mundo de sueños.
Natsu se subió al coche plateado, puso su portafolios en el asiento pasajero, se abrocho el cinturón y se dirigió a casa, estuvo pensando en cosas del trabajo en el camino, había recibido un caniche de dos años herido por un ataque de otro perro, y un gato que se cayó de la cuarta planta y se había echo un esguince en la pata derecha, varia vacunas...fue un día normal, pero a el aun así le encantaba, le encantaba su trabajo, las mascotas eran compañeros de toda la vida, y despreciaba a los que los abandonaban, pero el no podía hacer nada en contra de eso, pero si se topaba con uno en mitad de la calle le daría el puñetazo de su vida. No le agradaba la violencia, pero si alguien se lo merecía, se la daría. El era un hombre sereno, serio, tranquilo y realista, no era negativo o positivo sobre la vida, solo era realista, aun que tener pelo rosa no era muy realista, pero eso le importaba un comino.
Al llegar al establecimiento donde aparcaba el coche, aparcó, recogió su portafolios, se puso su chaqueta y bajó del coche. El aparcamiento estaba a unas tres manzanas de su casa, hoy había luna llena, el cielo estaba despejado y podía percibir las pequeñas brisas de viento de la noche, y un gritó, el grito de una mujer, era un grito desesperado que hacia eco a través de las calles en la oscuridad de la noche, el grito vino de un lugar cerca de donde el estaba, seria en el pequeño callejón que estaba a unas tres casas en frente de el. Se acerco corriendo al lugar escondido y otro grito retumbo en sus oídos, no esperaba ver lo que acababa de percibir.
Una violación, en el suelo habían trozos de tela despedazada, parecían medias y una chaqueta negra de mujer, al levantar la vista, vio tres hombres de espaldas, con los pantalones colgando de sus rodillas, y una mujer rubia tirada en el suelo con un vestido banco que sostenía en las manos para cubrirse, no podía verle la cara, estaba cubierta con mechones rubios, ella estaba templando violentamente.
-No tienes porque llorar muñeca, esto te va a gustar- dijo el hombre de la izquierda.
-¿Nunca has soñado con que te jodan tres tíos distintos?- dijo el del medio riendo.
-Yo voy a ir primero idiotas, no ven el cuerpo que tiene, le follare cada agujero que tenga y cuando me canse de esta belleza os la dejare- dijo el de la derecha.
-No, la dejaras muerta en media hora- dijo el del medio- tu eres un bru- se interrumpió al escuchar un gruñido proveniente de la mujer tirada en el suelo- ¿No puedes esperar?
-¿QUÉ CREEIS QUE ESTAIS HACIENDO?- Grité abalanzándome sobre ellos, algo estúpido, tendría que haber llamado a la policía, si me muero en este callejón nadie se dará cuenta hasta que todo el barrio huela a muerto Los hombres se apresuraron a levantarse los pantalones para poder luchar contra mi, pero yo ya estafa en frente de la mujer y le pegué duro en la cabeza con el maletín, que gracias a Dios estaba lleno, al chico del medio, y calló inconsciente al suelo, el de la derecha se abalanzo hacia mi mientras que el de la izquierda tenia problemas para subirse los pantalones, le di un puñetazo en la cara in de cambio recibí uno en el estomago, intercambiamos puñetazos y patadas, a el le sangraba la nariz y a mi el labio, le pegué una patada en los huevos tan fuerte que se retorció en el suelo, el que tenga una asquerosa erección le provocó más dolor, y le di otra vez con el maletín en la cabeza dejándolo inconsciente. El tercero o era una gallina o era inteligente, porque huyó sin dejar rastro, pero teníamos que irnos de ahí antes de que vinieran más.
Giré sobre mis talones hacia la mujer rubia detrás de mi-¿Estas bie...- ya no estaba, salí del callejón corriendo para encontrara, era de noche, estaba asustada y probablemente herida, y tenia la ropa destrozada, tenia que encontrarla pude percibir un destello blanco a la derecha y la vi corriendo a gran velocidad, y obviamente fue tras ella, de todas maneras estaba corriendo en dirección a mi edificio.
-¡Espera!-Gritó el- No voy a hacerte daño- pero ella no lo escuchaba, seguía corriendo sin mirara atrás, y se alejaba más y más de el. Cuando llegaron al edificio donde el vivía ella giró hacia la izquierda metiéndose en otro callejón donde estaba la puerta trasera de edificio, y desapareció de su vista. Solo podía escuchar sus pesados jadeos que resonaban entre las pareces, delatándola. Al entrar al callejón vi su cabellera rubia brillando con la luz de le luna y sus ojos apuntando al cielo, ella estaba sentada sobre sus rodillas en un gran cubo de basura vacío. Rugió, rugió con dolor.
-Ah!- exhalé sorprendido, y ella giró hacia mi, con los ojos bien abiertos, y si no lo veía no lo creía. Sus ojos eran de un chocolate profundo que poco a poco comenzaron a transformarse en dorado, saltó con agilidad dejando caer su vestido blanco. Ella era alta y esbelta, piernas largas y fuertes, con manchas, su piel lucía lindas y pequeñas manchas de leopardo, también adornaban su vientre plano y hombros. .
Se abalanzó sobre mi, tirándome al suelo, sentada a horcajadas sobre mi. Tenia los ojos hambrientos y sus colmillos sobresaliendo de su boca, a un costado de mi cara. Ella estaba sobre mi, levantó las dos manos y me arrancó la chaqueta con las garras. Asustándome.
-¡Para! ¡Detente!- grité- ¡Déjame ir!
Ella chocó su mirada con la mía, mirándome con atención y curiosidad, se relamió los labios y bajó de nuevo la mirada a mi pecho. Arrancándome la camiseta del pecho. Lo primero en lo que pensé fue en separarla de mi, si entraba por la puerta trasera de mi edificio que estaba a unos metros de mi tenia oportunidad de escapar. Puse las manos sobre sus hombros e intenté empujarla lo más fuerte que pude, pero lo único que conseguí fue que me pusiera las manos sobre la cabeza, y me quedara inmovilizado, ella me sujetaba con una mano y con la otra me arranco los pantalones. Me va a comer, los leopardos son carnívoros, y al parecer a este no le gusta la ropa en sus platos. Podía ver mi ropa completamente destrozada alrededor de nosotros, pero el frio nunca llego a mi cuerpo. Al parecer el leopardo que iba a comerme me mantenía caliente, ya que su temperatura era más alta que la mía. Mierda, los werecats existen, pero no viviré para contarlo. Quien iba a pensarlo, morir comido por un mitad leopardo - mitad humano. Con otro gruñido me arrancó los bóxers.
-Detente- suspire- Por favor.-
Su mano rozó mi estómago ligeramente ,se deslizó hacia abajo y me agarro la polla. Aguanté la respiración cuando la apretó suavemente. Y sin poder evitarlo me arquee contra su mano y cerré los ojos. Me mordí el labio para acallar un gemido.
Comenzó a lamerme el pecho con su caliente lengua, rozando cada musculo, hasta que se posó sobre uno de mis pezones. Me quedé sin aliento cuando lo tomo dentro de su boca caliente y húmeda. Sus dientes, su lengua áspera jugo con mi tenso pezón y envió descargas por todo mi cuerpo.
Las lamidas y tirones de su boca y dientes fueron cada vez mas duros, mi cuerpo empezó a arder por el deseo mientras me masturbaba ferozmente con una mano . No me hizo daño, pero sabía que podría hacérselo. La excitación me puso tan erecto, esperando por la liberación.
Sus labios implacables se negaban a liberar a su cuerpo y el placer era casi doloroso, mi cuerpo ardía . Me mordí el labio, pero esta vez no pudo detener el suave gemido . Mi cuerpo me estaba traicionando al responder al toque de una mujer-leopardo, una mujer que iba a matarme.
Natsu vio la pasión ardiendo en sus ojos dorados. Se veía tan increíblemente sexy entre sus muslos, que le dolía todo el cuerpo por la necesidad. Me matara después de todo - pensó - no estrangulándome o a rompiéndome el cuello ,pero si con su lengua y sus manos.
El clímax me golpeó brutalmente, haciéndola gritar y sacudiendo su cuerpo. Mi cuerpo temblaba mientras intentaba recuperar el aliento. Me estremecía mientras la mujer-leopardo me soltó las piernas y empezó a subir por su cuerpo. Su piel se rozo suavemente con mi cadera. Hasta que quedamos cara a cara.
Si decidía matarlo ahora ,ni siquiera le importaría. Demonios-pensó- nunca antes se había sentido así. El abrió los ojos para encontrarse con los suyos.
Que patético, se reprendió en silencio. Había perdido la mente por una mujer-leopardo. Se había jurado que nunca volvería a permitirle a nadie acercarse demasiado a él y allí estaba, deseando estar en la cama con ella.
Y sin previo aviso metió la punta de una estocada en su cuerpo envolviéndome la polla fuertemente, estaba tan caliente, tan húmeda que perdí el control, levante mis caderas para poder penétrala más profundamente.
Se retiro hasta casi salirme de su cuerpo y volvió a empujarse dentro. Con cada empuje conseguía avanzar en su interior un poco mas, se detenía y esperaba hasta que los músculos de su cuerpo se estiraban y acomodaban el grosor de mi pene. Continuo moviéndose hasta estuve completamente dentro de su canal ajustado. Hizo una pausa para permitirle adaptarse a su tamaño. Respiraba con fuerza, pero la sensación de estar rodeado de su ardiente cuerpo era increíble . Se retiró unos centímetros, poco a poco y luego empujó hacia adentro. Ella gimió. Era tan apretado y se sentía tan bien. Sus cuerpos se ajustaban a la perfección .
Se tenso y un suave gemido salió de los labios entreabiertos de la mujer-leopardo. Se miraron a los ojos. Esto era demasiado bueno.
Puso la mano libre que tenia sobre mi pecho para apoyarse y comenzó a cabalgarme. Se sentía tan llena de energía, que lo cabalgó una y otra vez, al galope. Era maravilloso tener un animal tan sexual y fuerte encima de el, dominarlo, disfrutarlo. Oh, sí, aquello estaba siendo perfecto, la experiencia de placer intenso que andaba buscando. Movíamos las caderas al mismo ritmo para que pueda legar más y más profundo.
De repente, me embistió, lo que la hizo gritar de placer, encantado de que sus voluntades se encontraran para ver quién podía más en aquel duelo de placer para dos. y se corrió fuertemente, mientras que ella lo exprimía dejándole completamente seco. El éxtasis llegó como un tsunami, fuerte y sin aviso, arrollando todo a su alrededor.
Oía su propia respiración, fuerte y entrecortada. Se sentía muy bien. Estaba sudada de pies a cabeza. Ella cayó sobre el, apoyando todo su peso, dejándole sentir su cuerpo de mujer, tan pequeño y tan frágil. Algo fino y suave rozó su mejilla, y vio sus orejas de leopardo sobresaliendo de su cabeza. Como veterinario sabia que las orejas de un felino eran muy sensibles, y no pudo resistirse. Besó la puntita de la oreja y comenzó a lamer su interior de arriba abajo, su pecho comenzó a vibrar y un suave ronroneo salió de sus labios, sentí como su interior me apretaba más y su agarre sobre mis manos se aflojaba, y seguí estimulando su oído, era muy sensible, era suave y tibio al tacto, y sin poder evitarlo lo mordí, y ella relajó su cuerpo al instante, ronroneando en mi cuello.
Era mi momento para escapar, huir de la mujer-leopardo y seguir con mi vida, estar con ella solo me traerá problemas, debería odiar sentir su tacto, es mitad animal. O podría pensar que estoy loco ¡Acabo de tener el mejor sexo de mi vida con una criatura mítica! Tenia que alejarme de esta locura de una vez
Puse mis manos sobre su espalda para empujarla, al instante que hice el contacto ella ronroneo suavemente, por el amor de Dios, era un sonido tan sexy, solo me dejaba deseando más, y comencé a frotarle la espala, y ella ronroneó más fuerte, comenzó a sobarse contra mi cuerpo, y me puse duro de nuevo.
.Mierda.
En ese momento supe que desde la vi, nunca tuve oportunidad de escapar, no porque ella me tuviera agarrado de manos y estuviera sobre mi, simplemente es porque no quería alejarme de esos hermosos ojos dorados brillando de excitación. Y esta vez giré sobre mi espalda con cuidado para que ella no se hiciera daño y quede sobre ella.
Me la follé hasta el amanecer, pero tuve que detenerme al escuchar voces de la calle, trayéndome a la realidad, hice le amor con ella 5 veces esa noche y tenia que irme a trabajar, pero no podía dejarla en la mitad de la calle desnuda, y menos aun con la cola y orejas de leopardo.
-Venga- le susurre al oído- vámonos
Gracias a Dios que tenia mi departamento tenia ascensor privado, no puedo ni imaginarme como seria encontrarme con algún vecino en esta situación, ya que lo único que tenia para tapar a esta werecat y a mi era un portafolios. La cogí en brazos y la levanté del suelo, me costo bastante ya que tenia las caderas débiles de tanto...movimiento. En el ascensor le acariciaba suavemente la espalda con el pulgar, y ella ronroneaba con los ojos cerrados. Al llegar a mi apartamento en el piso decimonoveno le deje apoyada en la pared de la entrada.
-No te preocupes, no le diré a nadie sobre tu secreto- dije dándole la espalda dirigiendo desnudo a mi habitación para buscar algo de ropa para ir a trabajar- se que eres una mujer leopardo pero no te haré daño- lo único que pude escuchar en respuesta fue una pequeña carcajada irónica y me giré a verla, no sabia que estaba detrás de mi y que me había seguido a mi habitación, como sabia desde antes, los felinos era agiles y muy silenciosos. Me tiro contra la cama con fuerza sentándose a horcajadas sobre mi. Y muy rápidos.
Comenzó a mover su sexo contra el mío, excitándome de nuevo
-No...-susurre- espera...no puedo.
Demasiado tarde, ella ya me tenia dentro y me estaba cabalgando ferozmente, mi cuerpo no estaba listo, tantas sensaciones de éxtasis en tan poco tiempo hizo sentirme súper sensible, la mejor parte era que esta tan mojada y apretada como el primer momento, y se notaba que aun le quedaba energía, demasiada. Comparando conmigo, que ahora me cuesta caminar.
-Es...demasiado- intenté...- Ahhh...Ahhh...¡Ahhh!- ya no podía callarme, mis neuronas sensitivas estaban llenas de adrenalina. Bloqueando todo en el mundo aparte de ella. Solo podía gemir, y gruñir, suspirar, y gritar al sentir todas estas sensaciones juntas y a tanta velocidad. Y como un chiquillo de 15 años, me corrí al instante.
Sentía algo dulcemente pesado sobre mi, y comencé a palparlo, era suave y redondito, y comencé a subir las manos, con los ojos cerrados de sueño, encontré una curva tibia y al subir mis dedos se enredaron con algo mus sedoso. Pelo. Significa que hay una mujer encima mío...pero no recuerdo...
-Buenos Días- dijo esa voz, trayéndome todos los recuerdos a la cabeza de golpe, La mujer que tenia en brazos era una mujer-leopardo, Bueno, tenia la otra mano sobre su trasero- ¿Tienes ganas de otra ronda?
-¿¡Otra!?- grité sorprendido- ¿Cómo puedes hacer otra?
-Ayer había luna llena- como si eso fuera una explicación.
-¿y?-Pregunté
-Estoy en celo- sonrió. Ante eso me levanté al instante de la cama, ella era una ninfa del sexo con resistencia de siete militares juntos.- Por 4 días- dijo ella.
. . .
Caí de culo al suelo, las piernas no me sostenían y las caderas me fallaban, mierda, no podía ni levantarme, y al parecer a ella se le había pegado la costumbre de sentarse sobre mi.
-Hola- saludó con una sonrisa- Me llamo Lucy, soy una mujer leopardo y será un placer tener sexo contigo por cuatro días.
-¿Cómo que tendrás sexo conmigo por cuatro días?- respondí, ojo, no era una queja, pero si no podía ni mantenerme de pie el primero, no quiero pensar como será el ultimo. Sip, para mi también será un placer.
-Solo haces preguntas- dijo ella con un mohín- ¿Cómo te llamas?
-Nat..Natsu- la idea de tenerla en mi cama por cuatro días aun rondaba en mi mente.
NOTAS DE LA AUTORA: Bueno, ese fue el primer lemon que escribi hacia ya un tiempo y lo tengo en otra pagina pero estoy intentando en esta para ver que tal va. Estra historia va a ser apx de 10 caps mas o menos
¿Que les parecio?¿Les gustó? Espero que si... ;)
Comentarios?
Bueno es mi primera historia de Fanfiction, espero que me traten bien :*
Aria