Wow hace mucho que no actualizaba y eso que tenia esto escrito desde un tiempo... pero en fin, lo importante es que volví.

OH una noticias que tal vez le interese después de meditarlo haré un Subaru x Oc, desdés de todo. Y también les quiero decir que apartidar de este capitulo se empezara a formar el haren de Yui, jajaja (risa diabólica)

Sin mas nada que decir salco que disfruten el capitulo. Microphone fuera.

Llego lo mas rápido al lugar. Hoy como a las 5 de las mañanas se informo de unos disparos que se escucharon en un hotel del centro.

Estoy arto de esto, todo mis hermanos han sido ascendidos, yo soy el único que tiene que hacer esto, solo por ser el menos, esto no es justo, he resulto mas crímenes que Ayato y Raito juntos y he capturado a mas criminales que todos, pero a pesar de toso el viejo no se digna en ascenderme.

Al llegar no vi nada fuera de lo común, pero al entrar había unos adornos rotos, una pared con agujeros de balas y un charco de sangre.

Al acercaren al escritorio veo a una mujer con una herida de bala en el abdomen. Me agacho para verla mejor… está muerta, no hay señales de vida… de seguro vio algo que no tenía que ver, puede que haya sida la única testigo. Doy un suspiro será mas difícil de lo que creo

-quiero que revisen todo el hotel. Hay un muerto, es sufriente para poder entrar por la fuerza a las habitaciones. ¡No quiero que dejen habitación sin revisar!- después de eso me agacho donde estaba el cadáver y me la quedo mirando, he visto mucho asesinatos, esto ya no me sorprende o me afecta

-que desastre- me habla una voz descocida- si no se limpia la sangre dejara una mancha horrible- me doy la vuelta. Sea quien sea no sabe cerrar la boca. Al voltearme veo a un hombre rubio con vestimentas muy llamativas, tenía una gran sonrisa en su rostro

-¿Quién demonios eres?- le pregunto desviando la mirada otra vez hacia la mujer tratando de buscar una pista

-soy Kou Mukami- hablaba de una forma tan alegre que no parecía que se diera cuenta de que había un cadáver - mis padres son los dueños del hotel. Vine porque me informaron que hubo un tiroteo, y al parece fue así- sentí como alguien se agachaba en mi lado- su nombre es Mildred Isabey, una buena mujer

Frunció el seño, como podía hablar de forma tan relajada y alegre habiendo un cadáver justo enfrente nuestro. Iba a decirle que se retirada pero justo una voz me llamo

-seño, hemos encontrado algo

-perfecto, muéstrame- y después nos dirigimos a un habitación

Doy un suspiro mientras miro a Mildred, de seguro mamá y papá harán lo imposible para no pagar un centavo a la familia. Me paro de donde estaba y me dirijo a donde se fue el chico de pelo blanco, le quiero pedir los detalles. Eso pude llegar a ser crucial para un juicio

-es aquí señor- miro la puesta, habitación 112. Al entrar veo a todos mis hombres buscando pistas- señor, creeos que esto es información importante- el me entrego un boleto de avión- creemos que los atacantes pueden ser narcotraficantes, y el ataca fue ya que sospechaban que la mujer los descubrió- examine el boleto, después de verlo levante la mirada

-es demasiado complicado. Un narcotraficante de importancia nunca dejaría este tipo de pistas y mandaría a un tercero para cualquier negocio pequeño, nunca haría algo por sus propias manos. Además si fueran de importancia mandarían a un profesional, esto es obvio que no es nada profesional- miro otra vez el boleto. Para Canadá, el vuelo salía hoy a las 9 de la mañana- lo mejor es que sigamos investigando- miro mi reloj, las 6:00, aun tengo algo de tiempo

-¡qué vamos hacer estas tres horas! ¡Más vale que el avión no tenga retraso! – empezó a gritar Yumma

-calma. Me preocuparía más por lo que paso en el hotel

-no te preocupes. Somos profesionales, no lo olvides- yo solos los sigo de atrás, no quiero que me hagan daño, así que por el momento no intentare nada

-creo que si- el mira para todos lados en busca de algo- ya vengo, quiero ir al baño- después de eso el salió corriendo.

Yuma dio otro suspiro

-¿Qué pasa?- le pregunto. Tal vez si lo distraiga tenga una mínima oportunidad de escapar o puede me diga algo importante para usar en su contra. El me mira desafiante, pero después su rostro se calma

-el tiende a cortarse, tiene todos los brazos con lleno de cicatrices. Me preocupa un poco, es casi de mi familia- me quedo mirando un poco. Tal vez si… si encuentro algo para que los dos se pelen podía escapar. Al parecer Yuma volvió a la realidad ya que me grito- ¿¡para que quieras saber eso!?- lo miro a los ojos

-curiosidad- fue lo único que conteste. Su enojo se hiso mas en se cara. Estaba a punto de gritar cundo Azusa salió del baño

-ya estoy mejor. Vamos- Yuma suavizo un poco su mirada y asistió. Me tomo de la muñeca y me apretó con toda su fuerza

-¡suéltame! ¡Me duele!- le exigí. Los dos parecieron ignorar mis suplicar ya que empezaron a caminar arrastrándome con ellos. A los poco paso me resigne, estaba a punto de darme por vencida y dejar que me arrastraran, hasta que agache la cabeza y vio que por el brazo de Azusa corría un gota de sangre

-Azusa- el solo voltio la cabeza para verme- te esta sangrando el brazo ¿te paso algo?- a decir eso Yuma paro de repente y la cara de Azusa dio un leve cambio, parecía sorprendido

-no es nada, de seguro fue tu imaginación- me dijo muy tranquilo mientras seguía caminando, pero Yuma lo tomo por el brazo y lo detuvo

-muéstrame el brazo- el moreno estaba a punto de protestas, hasta que el grito- ¡que me mutres el maldito brazo -al hacerlo todo se dieron vuelta a vernos.

El más bajo de apoco se rindió, le pidió que lo soltara y se arremango dejando ver algunas vendas. El rostro de Yuma mostraba un claro enfado. De apoco fue desasiéndose de las vendas, dejando ver su brazo lleno de cortes y al parecer eran recientes ya que todavía sangraban. Sonreí internamente

-me prometiste que nunca lo volvería a hacerlo- el tono de voz mostraba una clara decepción.

-yo…yo…- en cambio el rostro de su amigo mostraba una mezcla entre vergüenza y miedo- Yuma… lo siento- ya decir esas palabras el soltó mi muñeca

-¿¡crees que con solo decir "lo siento" todo se solucionara!?- me lo quede viendo un minuto mientras retrocedía lentamente, a ver que no se acorvan de mi existencia, me dio la vuelta y salió corriendo lo mas rápido que podía, el aeropuerto era grande, no sería tan fácil encontrarme

-¿¡que mierda quieres saber!?- le grito al rubio

-solo quiero que me digas lo detalles de todo- me dijo sin perder la calma- mis padres me pedirán las detalles y yo…- lo interrumpió

-mira, no pude darte los detalles del crimen, es información clasificada, a demás ya viste la parte más importante de todo- el solo sé que queda viendo un momento

-como quieras- el levanto los hombros- no tienes que ser tan rudo- y después de decirme eso se fue por la puerta. Me relajo un poco, que surte que ese mocoso ya se fue. Miro mi reloj de nuevo, ya casi son las 6, es mejor que me vallas es aeropuerto está cerca, pero de muy grande y será algo difícil encontrar a alguien o algo en ese lugar

Corro y corro, no piro para atrás, no me importa nada solo quiero escapar, pero no importa cundo vueltas de o que pasillo tome, nunca llegaba a ningún lado. Mientras corría llegar ver unos tétenos públicos, mira para todos lados y con cierto miedo me dirijo a donde estaba. Pude unas pocas monedas que tenia y merque el numero de la policías, antes de esto nunca antes había marcado este número, ahora se me hacia tan común

-911 ¿Cuál es su emergencia?- al sentir la voz de la operadora me cierta sensación de alivio

-soyYui Komori, meencutroenelaeropuerto, metienesecuentrada por favor vengan rápido- le hablo en susurro como si supiera que Yuna y Asuza están cerca, pero también hable tan rápido que hasta a mi me sorprendió

-por favor calmase y repita su ubicación- mi respiración cada vez es más pesada estoy agitada y los nervios son demasiado. Estaba a punto de hablar de nuevo cuando…

-¡no te muevas!- era la voz de Yuma, me doy la vuelta el está corriendo a donde estoy, al verlo solo suelto el teléfono y salgo corriendo. Solo espero que alguien venga por mi ayuda…

-señor, ¿ a dónde lo llevo?- me pido mi chófer… solo lo me quedo callado, esperando a que alguien saliera. Espere unos treinta minutos hasta que al fin sale

-quiero que siga a ese tipo- le dijo con indiferencia

-señor, el es un policía podríamos meterse en problemas si…

-¡solo obedece!- le grito, el solo responde con un "sí, señor" y empieza a manejar. Ese policía se subió a una patrulla y manejo y manejo. Lo seguía de legos no quiero que se diera cuenta de que alguien estaba cerca.

Reconocía el camino por donde iba, camino al aeropuerto, mis padres siempre están de viaje en genera los acompaño hasta allí, conozco el camino mejor que nadie

-señor… perdone mi pregunta… pero ¿Por qué quiere seguir a ese oficial?- no le contesto, ni yo se la respuesta, solo quiero una mini venganza por tratarme así, nadie, absolutamente nadie, me habla como él lo hizo, pero aun así era realmente tonto seguirlo hasta tan legos por esto. Peor algo dentro de mí quería sus disculpas

-motivos personales- le digo al fin

Al llegar al aeropuerto solo me baje y le dijo al chófer que me espere. Al entrar no veo nada fuera de lo común un monto de gente con valijas yendo de aquí para allá. Con la mirada trato de buscar a ese policía pero no lo encontró, así que doy un suspiro empiezo a caminar. Conozco el aeropuerto como si fuera mi casa, he vivido viajando, algunas ocasiones de vacaciones, pero muchas otras solo eran viajes de negocios de mis padre, a veces agradezco que me llevaran con ellos y no me dejaran con una niñera solo en casa, pero de todas formas nunca los veía, siempre me quedaba en el hotel mientras ellos trabajaban… y normalmente les llevaba todo el día…

Miro la lista de los aviones que salen y llegas, no estaría mal tomarme unas vacaciones. Estoy arto de manejar los hoteles de mi familia mientras mis padres no están.

Estaba viendo los aviones hasta que una chica rubia me choco

-lo siento mucho- la miro no tiene valijas, de seguro las dejos por allí mientras esperaba el avión y, seguramente, ahora se le hace tarde. Ella miraba todos lados paranoica- de casualidad no sabes donde esta…- pero no termino la frase ya que salió corriendo. Me quedo mirando por donde ella salió corriendo un rato pero alguien me tiro al piso. Levanto la cabeza y miro con enfado al chico que está parado en frente mío

-lo siento mucho- el me estira la mano para ayudarme a levantarme pero niego con la cabeza- lo siento mucho- me dijo una vez que ya estaba pardo

-¡la próxima vez mira por dónde vas!- le dijo con un enfado notorio

-fue mi erro no miraba por donde iba- bueno, al menos lo reconoce- no has visto parar a un chica rubio, tiene los ojos de color rosa

-emm si – señalo hacia atrás- se fue por allá- el me dio las gracias y se fue corriendo, fue algo sospechoso pero de seguro es un familiar o su novio. Eso ya no importa, empiezo a buscar de vuelta al policía, me debe una disculpa

Me detengo un poco a tomar aire, ya he corrido demasiado.

Miro a todas partes en busca de mis secuestradores, no me sentía cómoda en ninguna parte, tengo la sensación de que me están viendo.

Doy una gran bocanada de aire, y al abrir mis ojos veo mi salvación, Subaru, estaba parado a unos pocos metros de mí. En ese momento la felicidad se apodero de mí.

-Su…-no termine de decir su nombre ya que alguien me tapo mi boca y me arrastro atrás de una pared. Mis ojos se humedecen, estaba tan cerca, tan cerca de ser libre

-cálmate, todo saldrá bien. Solo tienes que obedecernos- me decía mientras me acariciaba la cabeza. Empiezo a llorar, estaba tan cerca y tan legos- calma. Acabara pronto- no quería escucharlo, solo lloraba- ahora cálmate y vayámonos- me saco la mano de la boca – si gritas o intenta escapar otra vez- me mostró el arma escondida- no te lo dejare tan fácil- me toma de la muñeca de forma brusca y me tiro para empezar a caminar.

Llora en silencio solo quiera la ayuda de alguien, quiero que alguien me ayuda.

-no he visto nada interesante. Cambio- le hablaba a la central desde la radio. No sé si la información era correcta, pero ya he investigado una parte del aeropuerto y ya me estaba aburriendo

-solo investiga un poco más. Estamos seguros de que los secuestradores se encuentran allí. Cambio y fuera- después de eso sigo recorrido el lugar y de vez en cuando le pregunto a alguien si no ha visto a Yui

-lo siento, no he visto a nadie con esa descripción- me respondió una señora

-gracias por su tiempo- le dijo y ella se marcho. Iba a seguir recorriendo el lugar hasta que una voz, que conocía, a pesar de que solo la escuche una vez, llamándome

-hey, policía- me doy la vuelta, ha solo es el- me debes una disculpa- al escuchar eso solo me lo quedo mirando un poco

-¿a qué te refieres?- el frunce el sueño y se cruza de brazos

-me trataste mal en el hotel, así que me debes una disculpa por hablarme así- doy un suspiro y bajo un poco la cabeza para luego levantarla y mirarlo con cierto desagrado

-perdón. Lista. Ya puedes dejarme en paz- deja soltar una risa de molestia y frunce mas el seño

-no fue una disculpa sincera. Mientes. Quiero una respuesta sincera-cada palabra lo decía con cierto tono de desprecio

-mira, no tengo tiempo para esto. Estoy en servicio y estoy con algo muy importante entre manos- el parecer su mirada se relajo un poco

-¿enserio? ¿Qué?- su expresión de enfado se remplazo por una de intriga- puedo ayudar. Conozco este lugar como la palma de mi mano- lo miro de arriba hacia abajo

-solo alégate ¿quieres?- el pereció decepcionado

-está bien, pero aun me debes una disculpa- solo lo vi dar unos pasos pero al verlo marcha me acorde de lo que estaba asiendo

-¡espera!- le grite. El paro de caminos y dio la vuelta- solo tengo una pregunta. Has visto a una chica con el palo hasta un poco más largos que a los hombros, rubia, con ojos rosados, baja- el solo piensa un poco

-ahora que lo dices… vi una chica con esa descripción tropezó conmigo y me pregunto algo

-perfecto, ahora sé que logro escapar. Ya me puede ir

-espera, eso no es todo. Después de tropezar con ella, un chico me pregunto a donde iba. Creo que es su novio o algún familiar- abro los ojo lo más grandes que pude y deje escapar un gruñido- ¿te pasa algo?- no respondí y salí corriendo

-¡no tengo tiempo de hablar!- corría lo mas rápido que podía ya eran casi las 9, el avión estaría a punto de partir

-fuiste una mala niña- con cada palabra apretaba mas mi muñeca- tienes suerte que te quieren sana- me dijo con una gran sonrisa. No decía nada, no quiero hacerlo enojarlo mas, eso sería todavía peor

-oh, mira quien apareció- Azusa se paro donde estaba Yuma- te encontramos a tiempo, el avión está a punto de salir- ente es mi fin, es lo único en lo que pensaba mientras hacia la cola para subir al avión. Para mi mala suerte en la fila no había mucha gente, así que en poco tiempo estabas frente a una azafata

-¿puedo ver sus boletos?- dijo la azafata- disculpe pero falta un boleto- al escuchar eso levante un poco la cabeza con cierto aire de esperanza

-emmm… Azusa…¿ tienes el boleto?- el con la mano sobrante reviso sus bolsillos y negó con la cabeza de forma lente. Los dos estaban a punto de decir algo cundo una voz que me lleno de esperanza

-¡alto!- era la voz de Subaro, di vuelta la cabeza y di una gran sonrisa- ¡policía!- Yuma y Azusa se miraron un momento

-tenemos que irnos- dijo en un susurro el más alto

-pero… ¿y la chica?- los dos me miraron y asistieron con la cabeza. Asuza me soltó y saco una pistola, dio uno o dos tiro al aire, suficiente para que todos se asustaran y le dejaran el paso. Me lleve las manos a los oídos y grite, al abrir los ojos solo los vi corriendo por la manga para subir al avión

-quiero refuerzos- dije por radio. Mientras sacaba mi arma

-¡hey espérame!- no, no esa voz otra vez- ¡quiero ayudar!- no lo soportaba mas

-¡está bien!- ya perdí la paciencia- vez a la chica rubia quiero que la protejas hasta que vuela bien – el asistió con la cabeza. Los dos corrimos hacia Yui

-¡Subaru!- el grito con una gran sonrisa, mientras corría a abrazarme

-calma- trate de consolarla, pero tenía que irme. Rompí el abrazo- me tengo que ir- y me fui por la manga para atrapar a esos dos

Miro a la chica, que solo que quedo quieta mirando fijamente a donde se fue jugando

-¿t-te sientes bien?- ella desvió la mirada a mí y asistí con la cabeza- el estará bien- ella solo volvió a mirar por donde él se fue

-lo sé- me contesto- pero no puedo dejar de preocuparme- ella se dio la vuelta y me abrazo- gracias por ayudarle- me quede helado, en realidad solo lo perseguía por la intriga y que quería que me pidiera perdón. Pero saque esos pensamientos de mi mente y la abrazo. Le sonreí con le dijo una gran mentira

-solo trataba de hacer lo correcto- ella me mira a los ojos me sonríe de nuevo. Trato de no sonrojarme, dios es demasiado lindo