¡Hola mis queridas(os) lectores de Fanfiction!

Resurjo de las sombras para traerles un nuevo Fic, esta vez de Haikyuu! ¡Me encanta esta serie! Y no veía la hora para comenzar a escribir de ellos, es literalmente IMPOSIBLE no amar a un personaje o a una pareja.

He estado algo inactiva, por eso quería intentar algo nuevo con este nuevo fandom; como ya conocerán por tumblr los challenges de 30 días. Quise enfrentar el desafío, pero como me tengo poco amor quise darle un giro: HACERLO HARD.

Así es, cada drabble será nsfw (osea para mayores). Desde ya les pido, si les es incómodo para ustedes leer pornografía, paren hasta acá y se abstengan de leer. Si son tan pervertidas como yo, entonces tomen un buen asiento. También es necesario decir: mi vida es un caos completo y el tiempo es más escaso que la lluvia en un desierto; así que DUDO que pueda actualizar diariamente, sin embargo, espero hacerlo bastante seguido y planeo llegar hasta el final: 30 DÍAS DE DELICIOSOS LEMONS.

Como me encanta experimentar con los personajes, las parejas variaran, pero las principales (las que tendrán más días serán):

Kagehina

Asanoya

Kurotsukki

Y luego habrán apariciones de otras como:

Oikage,

Iwaoi

Bokuaka

Daisuga

Los personajes no me pertenecen sino a Furudate, el resumen del fic es un pedazo de la letra de The Killers - Bones (excelente canción)

Si después de esta larga introducción siguen conmigo, entonces espero que les gusten estos drabbles.


CUDDLES (NAKED) / ABRAZOS (DESNUDO)

KAGEHINA

Resopló profundamente otra vez, lo hizo sin pensar; había algo tranquilizador en llenar sus pulmones de aire hasta sentir que iban a explotar, solo para sacarlo todo y llevar su angustia con él.

Si tan solo pudiera hacer lo último.

Miró en la pared de su cuarto el póster de su estrella favorita de voleibol, como era de esperarse era de un armador. Kageyama esperaba entrenar lo suficiente para llegar a ser de su calibre, pero para eso debía sobrepasar las paredes que ahora tenía en frente.

Se debía recordar mentalmente qué él no estaba solo, se necesitaba de un equipo completo para ganar; y también que alguien siempre estuviera ahí para recibir sus pases.

―Kageyama ―la voz lo sacó de su ensimismamiento―, estás pensando demasiado, puedo escuchar todo.

Se tensó.

―¿De verdad?

El otro se rio.

―¡Claro que no! ―dejó salir una carcajada, el armador se comenzaba a irritar―. Es imposible leer la mente... a menos que seas un mutante, yo no soy un mutante, Kageyama.

La cabeza peluda del pelirrojo salió del cobertor y se apoyó en su pecho, por su clavícula; cálido pensó el chico. Hinata comenzó a pasar sus dedos por su abdomen, provocando que la piel se levantara con el toque de sus dígitos, comenzó a dibujar pequeños círculos alrededor de un pezón; pero sin ningún tipo de segundas intenciones, solo para sentir más del pelinegro. Los dos chicos estaban cansados después de descargar el estrés como lo habían empezado a hacer hace poco.

Los padres de Kageyama habían salido y tuvieron la oportunidad de ser tan ruidosos como podían. Se había convertido en un ritual cada noche antes de un partido importante, el siguiente día ellos despertarían completamente relajados y enfocados en la meta. Su ropa estaba descartada en el suelo y ninguno de los dos planeaba comenzar a recogerla pronto.

El más alto estaba viendo al techo, pensó que tal vez si fueran mutantes ganarían el partido sin ninguna dificultad, pero eso sería trampa, ya que sus contrincantes solo serían humanos más. Debía ser justo, así que sus oponentes debían ser mutantes también; pero eso los haría más fuertes y eso los regresaría al punto de partida.

―¡Kageyama! ―exclamó el más bajo subiendo encima de él, una pierna a cada lado― ¡Piensas demasiado!

―Y tú no piensas nada ―contrarrestó ignorando como sus mejillas comenzaban a calentarse con la vista del otro chico encima de él, completamente desnudo. Algunas ideas comenzaron a pasar por su mente, pero sabía que no podía hacer nada por un rato más―, los oponentes de mañana son de calibre nacional, no se parece a nada de lo que hemos visto hasta ahora.

―No importa ―respondió Hinata―, igual ganaremos.

―Eres un idiota, ¿cómo puedes estar tan seguro?

―Porque sí.

El pelirrojo sonrió, esa misma sonrisa que siempre hacía a Kageyama querer golpearlo o besarlo. No se podía razonar con el chico, no sabía qué estaba mal con Hinata, o era un genio positivo o un idiota completo.

Se acercó al pelinegro y lo besó, Kageyama todavía podía probar el sabor de él en sus labios. Hinata se acostó a su lado, aun teniendo ambas piernas a su alrededor, obligándolo a ladear su cuerpo en la cama, para que no siguiera mirando más el techo y se enfocara en él.

El pelinegro lo acercó, abrazando su pequeño cuerpo.

Disfrutó el completo contacto de piel con piel, no había centímetro que los dos chicos no tocaran. Bajó su mano por la espalda baja del pelirrojo hasta que acarició su trasero. Hinata lo volvió a besar, él puso ambas manos en la melena rebelde del chico, estuvieron así por un rato, solo sintiendo sus cuerpos y la cercanía del otro.

―Además te tengo a ti ―dijo el pequeño bloqueador después de unos minutos―, no podemos perder.

Kageyama no supo qué responder y miró a otro lado.

―Y tenemos a Daichi, Tanaka, Noya, Asahi, Sugawara, Yamaguchi, Ennoshita, Narita, Kinoshita ―comenzó a numerar, el pelinegro se irritó―, el profesor Takeda, el entrenador Ukai, el abuelo del entrenador Ukai, Shimizu, Yachi y ¡hasta Tsukishima!

Lo golpeó con su cabeza.

―¡Ay! ¡Kageyama eres un tonto por eso nadie te quiere como novio! ―reclamó, una pequeña lágrima escapándose de sus enormes ojos avellanas.

El armador lo besó otra vez, por un momento pensó que tal vez Hinata realmente se había enojado, pero cuando sintió al pequeño responder, se tranquilizó.

―¿Solo tú? ―preguntó, teniendo su labio inferior entre sus dientes, mordisqueándolo y respirando su aire.

―Idiota Kageyama.


Este par de idiotas me enamoraron desde el episodio 1, espero que hayan disfrutado de este cortito.

Si la vida es buena conmigo, subiré el segundo mañana, aquí el tema:

KISS (NAKED) / BESOS (DESNUDO) y será Kurotsukki

Nos leemos luego.