Rompiendo esquemas

Disclamer: Ni Hetalia ni LatínHetalia me pertenecen.


Nadie los imaginaba juntos, ni siquiera se les había pasado por la cabeza. El callado González y el elitista Artigas. Pero ahí estaban. Juntos. Próximos a cumplir un año contra todo pronóstico.

Nadie supo nunca cómo es que se enredaron. Unos le echaron la culpa a alguna borrachera, otros a la casualidad. Los más les echaron a la culpa a Martín y a Luciano debido a que la ahora pareja era participe indirecta de sus constantes peleas.

A decir verdad, estos últimos casi colapsaron cuando se enteraron para después enredarse entre sí meses después.

Para ser sinceros, a nadie le molestaba en gran medida que Chile y Uruguay estuvieran juntos. Por más que estos hubieran roto el esquema respecto a que los demás esperaban que ocurriera.

Se suponía que Argentina y Chile, pese a todos sus conflictos, acabarían juntos así como Brasil y Uruguay finalizarían su supuesta tensión de idas y venidas cuando se comprometieran. Pero ninguna de las dos cosas llego a concretarse.

En cambio, no se sabe cuándo ni dónde, las cosas comenzaron a tomar otro rumbo. Ocasiones nunca faltaron y las posibilidades, aunque ínfimas, estuvieron presentes. siempre.

Tal vez fue una noche o varias. Tal vez fue algo inesperado o siempre estuvo ahí y nadie se dio cuenta más que ellos mismos cuando el momento preciso para dejarlo ir se manifesto. Lo que Manuel y Sebastián si sabían es que su amor siempre rompería esquemas y desafiaría lo establecido mientras permanecieran juntos.