Disclaimer: Grojband no es de mi propiedad, solo la historia. Grojband y su personajes son creaciones de sus respectivos dueños.

¡Hola! ¡Bienvenidos a una nueva historia!

Yo estaba feliz y empezó a llover y pues empece a escribir y este es el resultado, a mi me gusta siempre guardar capítulos para no estar presionada pero este me gusto tanto que aquí lo dejo:

No copien, ¡Eh! Que los vigilo mientras duermen 7u7 bueno, tal vez no pero no lo hagan. XD

¡Espero que les guste de verdad! -3-

Se despertó en una habitación extensa de longitud pero no de anchura. Abrió los ojos lentamente con un gran dolor de cabeza y sintió su espalda contactando con una lámina fría, congelada, para ser exactos. Sus ojos se acostumbraban poco a poco a la luz tan brillante que daba directo a su cara, aún con el dolor se sentó despacio y notó como una sábana azul verdoso caí de su pecho ¿Estaba desnuda? ¿Por qué? ¿Dónde diablos estaba? Sus ojos empezaron a dilatarse, ¿Qué diablos estaba pasando?

Volvió a acomodar la sabana sintiendo escalofríos al percibir por completo esa lámina extraña en la cual reposaba. Levantó la vista topándose con un cuarto blanco que si no fuera por las rayas negras que separaban cada losa de piso, creerías que es el vacío puro, eso y una pared forrada de unos cajones de lámina que entre ellos algunos yacían abiertos incluyendo el suyo solo que, al parecer, ella era la única allí.

Se levantó temblorosamente asegurándose que la sabana cubriese su cuerpo mientras se dirigía al único objeto que se encontraba en aquella habitación, al llegar encontró un cambio de ropa, junto a un celular moderno... ¿Pero qué diablos? Eso era muy moderno ¿Y los botones? Aquí solo había una pantalla con un solo botón y un cargador dentro de una caja con una fotografía del objeto ¿JuicePad? Demasiado raro ¿Cómo se enciende?, bueno, ya lo descubriría, primero tiene que descubrir donde diablos estaba.

Al lado de esos objetos se encontraban dos sobres y uno de ellos decía "Bienvenida, 320." ¿Qué?... Abrió la carta con duda la cual se encontraba vacía, el miedo dominaba a la pobre chica, ¿Y sus padres? ¿La abandonaron? ¿Estará en su pueblo natal? ¿O por lo menos en el país?

Se cambió notando como sus manos temblaban y estaban blancas, lo que haría por un espejo en ese momento. También noto como esa ropa jamás la había visto, era... Rara. Termino de cambiarse y empezó a buscar una salida, una pista, algo que la ayude y eso fue lo que encontró, frente a ella se encontraba una puerta blanca que se camuflaba con la pared por completo a excepción de su perilla dorada. Tomo lo de la mesa, el teléfono, la carta vacía y el segundo sobre que lo abrió al sentir un pequeño peso dentro de él ¿Eso era dinero? Que extraño modelo ¿Lo cambiaron? Empezó a contar el dinero ¿10,000? ¡Wow! Mientras ella miraba sorprendida cayó a la mesa dos llaves rodeadas con un papel el cual decía su dirección y el mensaje:

"Oficina 3,123. Cada primer sábado preséntese por su bono mensual."

¿Qué? ¿Por qué su dirección estaba anotada? ¿Para recordarla? ¡Ella la recordaba!

La chica pelirroja veía indefinida la puerta mientras respiraba intranquila ¿Debería salir? Después de casi 10 minutos de reflexión su respuesta fue un sí. Saliendo cerro los ojos con fuerza y los abrió de nuevo lentamente del otro lado de la puerta topándose con un pasillo enorme igual de brillante y blanco, empezó a caminar mientras abría las 6 puertas que se encontraban una frente a otra repartida en 3 de cada lado del extenso pasillo, cada vez que abría una puerta se topaba con una pared que estaba separada de ella con el suficiente y único espacio para parecer que tuviera profundidad, pero, no era así, en ninguna, ¿Tan solo era decoración? Pues eso parecía. Solo faltaba 1 puerta la que se encontraba la fondo y frente de donde había salido, miro hacia atrás y vio como sobre la puerta de la cual ella había salido tenía un cartel con la escritura:

"Experimento MORGUE"

A la chica la recorrió un escalofrío al leerlo y repetirlo en su mente... acaso ella... ¿Había muerto? No... Imposible, eso no explica la ropa, el celular ni las cartas. No importaba, todo esto tenía una respuesta solo tenía que buscar a sus padre y a su hermana. Abrió la puerta, decidida a encontrar respuestas.

Esto era imposible, era un sala de estar, con las paredes color crema, un escritorio y unos sofás color negro, tenía un aspecto moderno, futurista para su gusto. Se dirigió al escritorio y tomo un espejo, al verse no se reconoció, era pálida muy pálida, ni sus labios ni mejillas tenían color, paso sus manos por su cara y cabello rojo. Por lo menos esto tiene color- Burló en su mente enredando un mechón de su corto cabello en su dedo, dejo el espejo en su lugar y vio como era de día por las puertas de cristal que la separaban de la calle, salió lentamente y vio por todos lados, sabía dónde estaba pero era muy diferente a como lo recordaba. Cruzaba la calle antes de que un auto de modelo extraño casi la atropella dejando en shock a la chica mientras el conductor avanzaba y le gritaba desde su auto. Corrió a la primera tienda y miro por el aparador las extrañas pantallas gigantes

"16 de Junio de 2015..."

¿Pero qué diablos está pasando?- habló por primera vez asustada sin comprender nada y escuchando su voz sorprendiendo a si misma ¿No recordaba su voz?

"Esto es raro, estamos en 1994" se replicaba a si misma tratando de convencerse.

No saben, ósea me ilumino una luz y se me ocurrió esta historia. Les digo, me encanto como quedo. Espero que a ustedes también -3- ¡Disfrútenla!

por cierto, esta historia no tiene horario, no me acomodo porque el lunes presento pero luego ya le echare ganas por las vacaciones ;)

¡Chao! ¡Los quiero, por favor, dejen Reviews!