Hoy les ofrecemos: El Final de una Mentira

Nuestra historia de hoy comienza en lo que inició como una tarde de victorias, pero terminó como una noche de tragedias.

Nuestras seis defensoras de la amistad por excelencia estaban rodeadas por varias naves y vehículos de los Plomeros siendo el Proto-Camión el que lideró a los demás plomeros para llegar. De éste, bajaron Rook Blonko, Kevin Levin, Gwen Tennyson y la Plomera Molly al igual que los demás plomeros de sus respectivos medios de transporte para rodear a las Mane 6.

—Pero si tengo el recibo… —dijo Applejack convertida en Eco-Eco.

—Yo me encargo, Applejack. —sugirió Twilight, luego preguntó—: ¿Pueden aunque sea decirnos la causa, motivo razón o circunstancia del arresto?

—Es inútil que sigan tratando de engañarnos, chicas —decía Molly—, sabemos que ustedes privaron de su libertad al ciudadano Ben Tennyson para removerle su Omnitrix y encontrar la manera de sextuplicarlo para que cada una lo usara para sus despiadadas fechorías.

—Claro que no, señora, ninguna de nosotras hizo eso que usted está diciendo y que no entendí. —dijo Pinkie Pie convertida en Frankenstrike.

—En cualquier caso, tendrán que acompañarnos para realizar las interrogaciones necesarias. —dijo Rook a las chicas a través de un megáfono mientras las apuntaba con su Proto-Herramienta en modo pistola, luego se dirigió a los demás plomeros—: ¡Arréstenlas!

—¡Es nuestro fin! —exclamó Twilight repleta de miedo.

—Aún no, Twilight querida —decía Rarity convertida en Piedra—, pues todavía contamos con nuestros impresionantes poderes para derrotarlos a todos y así poder escapar.

—Twilight, somos tus amigas. —dijo Fluttershy convertida en Frío—. Siempre te ayudaremos y te protegeremos hasta el final.

—Relájate un poco, Twilight —decía Rainbow Dash convertida en Walkatrout—, mientras estemos juntas nadie nos podrá dañar.

—¿Tú crees? —dijo Gwen, transformada en la Chica Suertuda, luego de sacar un extraño dispositivo que, como estaba enlazado a los Omnitríces de las Mane 6, bastó con oprimir el botón para destransformarlas a todas—. ¡Vaya! ¡Sí funcionó!

—¡Es nuestro fin! —exclamó Fluttershy repleta de miedo mientras se escondía detrás de Twilight.

A la mañana siguiente, las Mane 6 se encontraban inmóviles debido a que, luego de capturarlas, los plomeros las sentaron en distintas sillas y les esposaron los tobillos a las patas de las sillas y las muñecas a los respaldos de las mismas. Ellas se encontraban en un cuarto amplio pero de escasa iluminación en el que Kevin también estaba puesto a que él había sido previamente encargado para vigilar a las chicas y sacarles la información necesaria si fuese posible.

—Por enésima vez, ¿qué hicieron con Ben Tennyson? —exigió Kevin Levin a las chicas esperando una respuesta inmediata.

—¡Por mis corrales! —reclamó Applejack— ¿cuál enésima vez? Si nos acabamos de despertar.

—Sí, lo sé pero creí que así responderían más rápido.

En eso, Gwen y Rook entran a dicha habitación.

—¿Nuestras pequeñas prisioneras están bien, Kevin? —preguntó Gwen.

—Bueno, ninguna se ha escapado ni roto sus grilletes así que yo diría que… tal vez. —contestó él.

—¿Sabes algo, Rook? Esas chicas se me hacen conocidas, pero por más que intento no puedo recordarlas. —mencionó Gwen mientras las Mane 6 se ponían cada vez más nerviosas.

—Pues no lo podrá creer, señorita Gwendolyn, pero a mí también se me hacen muy familiares, pero tampoco puedo acordarme de ellas por más que he intentado. —afirmó Rook.

—¡Déjenos ir! —dijo Rainbow Dash forcejeando sus grilletes para poder romperlos.

—Ni siquiera lo intentes. —señaló Rook—. Tardarías una vida en romper estos grilletes de energía punto cero cubiertas de cuantitanio en bruto.

—Y ni hablar de las resistentes sillas de madera de chirimoyo. —dijo Kevin mientras golpeteaba la silla, luego añadió—: Tus cabellos de arcoíris se volverán blancos antes de que puedas romper estas preciosuras.

—¿Por qué no nos dejan ir? —decía Rarity—. ¿Qué hicimos para merecer esto?

—Una fuente confiable nos informó de seis niñas con Omnitríces que podrían estar relacionadas con el desaparecimiento de Ben Tennyson. —explicó Rook.

—O sea, yo. —dijo un joven blanco de cabellos morados y verdes que estaba detrás de una ventana y recién entraba a la habitación. Luego, satisfecho por su dulce venganza, dijo—: Te dije que me las ibas a pagar, Rainbow Dash, te dije que me las ibas a pagar.

=FLASHBACK=

Era el día de ayer y Art Proud se encontraba pescando en el muelle cuando de repente la caña de pescar se empezó a sacudir como loca y cuando él enrolló la cuerda de la caña con la manivela, se dio cuenta de que finalmente había pescado el pez de sus sueños: Un pez luna de una tonelada.

Lamentablemente, nadie le prestó atención porque toda la gente estaba concentrada en el colosal tiburón que Billy Billones había pescado. Billy se encontraba apretando el estómago del tiburón hasta que éste expulsó por la boca a Rainbow Dash convertida en Walkatrout.

—¿Lo atrapamos? —preguntó ella.

—Sí, Rainbow Dash, lo atrapamos. —dijo Billy mientras abrazaba a su "esclavamiga".

—Me las vas a pagar, Rainbow Dash, me las vas a pagar. —dijo Art Proud muy enojado e insatisfecho por su mala suerte mientras preparaba su dulce venganza.

=FIN DEL FLASHBACK=

—¿Lo conoces? —preguntó Rarity a Rainbow.

—Debería. —contestó ésta.

—¡Hay, ya! ¡Si te acuerdas, bien! ¡Y si no, pues no! —decía Art Proud molesto mientas dejaba la habitación.

—Ese tal Art Proud es muy raro. —dijo Kevin.

—Sí, pero sus historias son buenas. —opinó Gwen.

—¡Déjenos ir, por favor! —exclamó Fluttershy.

—¡Nosotras no hemos hecho nada! —exclamó Rarity.

—¡Ni lo volveremos a hacer! —exclamó por accidente Pinkie Pie.

Al oír esas palabras, los amigos de Ben se pusieron más alerta que nunca para sacarles toda la información a las seis chicas.

—¡Ha, lo sabía! —exclamó Kevin—. ¡Sabía que ustedes seis estaban involucradas! Ahora, confiesen.

—Basta de exclamaciones, chicos —dijo Gwen—, dejemos que ellas nos expliquen lo que pasó.

—Por favor, chicas, explíquense. —dijo Rook tratando de ser imparcial con las Mane 6.

—Es que… no podemos… no es algo fácil de explicar. —mencionó Fluttershy.

—Acaso… ¿ustedes secuestraron a mi primo para obtener el poder de su Omnitrix? —supuso Gwen.

—¡Claro que no! —intentaba explicar Applejack—. ¡Nosotras no lo secuestramos! ¡Él vino a nosotras por su propia pata!

—Puede que tengan razón, Gwen. —opinó Kevin.

—Gwendolyn. —dijo ella.

—¡Todos los villanos quieren eso! Y estas chicas no se ven malas.

—¿Tú crees?

—¡Tan solo míralas! De seguro son fanáticas que se alocaron cuando conocieron por primera vez al gran Ben 10 y quieren que sea el presidente de su club de fans.

—Eso explicaría los Omnitríces. —señaló Rook.

—No le des cuerda, Rook. —dijo Gwen molesta, aunque después mencionó—. Aunque la chaqueta de esa chica de cabellos de arcoíris es un poco parecida a la que Ben solía usar.

—Bueno, yo no la escogí. —decía Rainbow Dash—. Aunque las gafas me gustan.

—¿Acaso… este es un sueño y ustedes son parte de él? —supuso Gwen.

—¿Un sueño? —preguntaba Twilight—. ¿Y nosotras qué representaríamos?

—No lo sé. —decía Gwen—. ¡Ustedes son el sueño! ¡Ustedes díganme!

Y así, Kevin y Gwen se la pasaron adivinando los motivos de las Mane 6 luego de ver que el interrogatorio era inservible.

—¿Ustedes son versiones de Ben de otra dimensión y vinieron a buscar al Ben original? —supuso Gwen.

—No. —contestaron las Mane 6.

—¿Albedo volvió a crear "El Show de Ben 10" y ustedes son actrices que él contrató? —supuso Kevin.

—No. —contestaron las Mane 6.

—¿El Doctor Ánimo las fabricó con el ADN del Omnitrix? —supuso Gwen.

—No.

—¿Fueron un experimento fallido para crear a la niñita perfecta? —supuso Kevin.

—No.

—¿Son robots del futuro que viajaron al pasado para destruir a Ben? —supuso Gwen.

—No.

—¿Son piratas del pasado que viajaron al futuro para piratear el Omnitrix? —supuso Kevin.

—No.

—¿Cazadoras de recompensas de Vilgax? —supuso Gwen.

—No.

—¿Alguna falla en el ADN del Omnitrix? —supuso Kevin.

—No.

—¿Incurseanas disfrazadas? —supuso Gwen.

—No.

—¿Cosplayers? —supuso Kevin.

—No.

—¿Azmuth las envió para reemplazar a Ben? —supuso Gwen.

—No.

—¿Son cantantes roqueras de pop electrónico-hidráulico alternativo y secuestraron a Ben para tocarle una canción? —supuso Kevin.

—Eh… no.

—¿Ustedes son seis ponies y su amiga de cabellos morados es una hechicera unicornio que es princesa y mientras practicaba sus encantos de magia creó un portal que trajo a Ben y a Charmcaster a su mundo y con los poderes de ella, los de Charmcaster y los del Omnitrix juntos su ADN fue alterado y llegaron a la Tierra sin saber cómo volver a su mundo ni qué le ocurrió a Ben? —supuso Rook.

Al oír semejantes barbaridades, Kevin se echó a reír mientras que Gwen se moría de la vergüenza; y las chicas, por su parte, no podían creer lo cerca que estaban los plomeros de conocer la verdad.

—Ja, ja, ja, ¿qué? ¿tienes cinco años, Rook? —dijo Kevin intentando hablar por tanta risa que sentía.

—Rook, por favor. —decía Gwen—. Esta es una situación seria. ¡La vida de Ben está en peligro! No estamos para bromas.

—Yo… lo siento. —dijo Rook apenado.

Antes de proseguir con el interrogatorio, Blukic y Driba entraron a la habitación con unos largos papeles que tenían que entregarles a nuestros jóvenes plomeros. Resulta que, antes de que ellas despertaran, a las Mane 6 se les extrajo un poco de su sangre para examinarlas e intentar saber si ellas eran chicas humanas normales o algo más.

—Acá están los resultados de los exámenes sanguíneos de las detenidas. —dijo Blukic mientras entraba a la habitación.

—Será mejor que vean esto. —dijo Driba andando junto a Blukic y entregándole los resultados a Gwen y los demás.

Cuando leyeron los resultados de los exámenes sanguíneos, Gwen, Kevin y Rook no lo podían creer.

—El 60% del ADN de las chicas coincide con el ADN de Ben. —leyó Gwen.

—Y el otro 40% restante pertenece a diferentes razas… —leía Kevin.

—¿Ecuestres? —leyeron ambos.

Ambos nuevamente voltearon a ver a nuestras seis protagonistas y notaron que cada una contaba con facciones muy parecidas a la del desaparecido Ben Tennyson. Luego, dirigieron sus miradas a Rook y preguntaron:

—¿Cómo lo adivinaste?

—¡Oh, vamos! —contestaba Rook—. ¡Fue solo una corazonada!

—Una muy desesperada y mal escrita corazonada. —secreteó Kevin a Gwen señalando que… ¡Oh, vamos! ¡Hago lo mejor que puedo! No por escribir fanfics en internet significa que tenga yo que ser un García Marques, ¿saben?

Como sea, al menos a Gwen le gustan mis historias…

—Gwendolyn.

¡Te callas!

10 minutos después, Twilight estaba explicándoles a nuestros amigos plomeros todo lo que ella y las demás pasaron estos últimos días. Para evitar meter en problemas a Rarity, omitieron las partes donde conocieron a Gwen y se toparon con Rook porque, por algo, les borraron la memoria al final de cada encuentro.

—…y desde entonces, hemos estado sobreviviendo en este extraño mundo desde hace como siete días. —explicaba ella.

—¿Entonces, dices que Charmcaster estuvo involucrada? —preguntó intrigado Kevin.

—Sí, ella llegó con Ben mientras él estaba transformado en un monstruo similar a un lobo. —señaló Applejack.

—¿A un lobo? —se sorprendió Rook.

—Sí, a un lobo. —contestó Pinkie Pie, luego preguntó—: ¿Qué tiene eso en especial?

—Es que… creo que acabo de recordar lo que pasó esa vez. —decía Rook mientras sufría de una fuerte migraña mientras que ciertos recuerdos le llegaban a la mente—: Hace una semana, Ben y yo estábamos afuera del Burger Snack limpiando todo después de su fiesta de cumpleaños.

=FLASHBACK=

—De verdad te agradezco por haber organizado la fiesta, Rook. —decía Ben mientras barría el patio del Burger Snack—. ¿Pero era necesario que barriéramos nosotros al final?

—Entiende, Ben, el lugar nunca había organizado un cumpleaños antes. —explicaba Rook—. Me costó mucho convencerlos hasta que aceptaron con la condición de que nosotros barriéramos al final.

—¿No puedo tan siquiera transformarme? —preguntaba Ben mientras observaba los distintos aliens de su Omnitrix—. ¡Creo que XLR8 sería una buena opción!

—Eso dijiste hace tres días cuando teníamos que organizar el nuevo local de Pakmar.

—¡Buen punto! —opinó Ben retirando su mano Omnitrix—. Igual, gracias por la fiesta. ¡Fue genial!

—No es para tanto, Ben, es lo que los hermanos hacen. —dijo Rook mientras chocaba los puños con Ben—. ¡No es para llamarme "genio"!

—No, no me entendiste… yo lo que… yo… ¡Bah! ¡Como sea! —decía Ben un tanto despistado debido a que se percató que, en ese preciso instante, él debía encargarse de un asunto de mayor prioridad—: Ahora vuelvo, Rook, debo ir al baño.

Unos cuantos minutos después cuando Ben seguía en el baño del Burger Snack, Rook ya casi terminaba de limpiar el patio y ya estaba empezando a extrañarse que su socio tardara tanto en el baño.

—Se me hace que esta va a ser la última vez que Ben coma en este lugar. —pensaba Rook—. Lleva demasiado tiempo metido en el baño.

En eso, un resplandor de color blanco destelló como a cuatro cuadras lejos del Burger Snack. Al percatarse de lo sucedido, Rook fue corriendo al lugar para saber lo que le pasaba.

=FIN DEL FLASHBACK=

—Cuando llegué, ya era demasiado tarde. —contaba Rook con la mano puesta en la cabeza—. Ben había desaparecido; lo último que recuerdo es que él se había transformado en Blitzwolfer y se encontraba peleando con Charmcaster… y cuando atravesaron el resplandor blanco… ya nunca volvieron.

—Sea lo que sea que les haya ocurrido, debió ser muy fuerte como para que a ti y a Gwen les causara ese gran dolor de cabeza y no poder recordarlo. —opinaba Kevin.

—Sí… ¡Quién sabe qué haya sido! —mencionó Rarity algo nerviosa.

—Bueno, ¿y siempre qué? —preguntaba Rainbow Dash—. ¿Nos van a dejar ir?

—Eso no sería decisión de nosotros; esa decisión más bien quedaría manos del primer pensador, Azmuth. Después de todo, él fue quien el Omnitrix. —opinó Rook, luego añadió—: Vigilen bien a las prisioneras, Señorita Gwendolyn y Kevin Levin, voy con el Magistrado Tennyson para ponerme en comunicación con Azmuth y decidir qué hacemos con ellas.

—Cuídate. —dijo Pinkie mientras veía como Rook dejaba la habitación.

Rook salió de la habitación. Él fue al centro de la base plomera donde había un gigantesco monitor en el que el Abuelo Max revisaba una impactante noticia que involucraba al pueblo donde nuestra historia se centra: Bellwood.

—¿Qué ocurre, magistrado? —preguntó Rook.

—La ciudad está en peligro, Rook —contestaba el abuelo mientras corría hacia el Proto-Camión— es nuestro deber deshacernos de las bestias que la amenazan.

Ya dentro del Proto-Camión, ambos despegaron al centro de la ciudad que estaba siendo atacada por diversas criaturas prehistóricas aparentemente mutadas. Mientras ellos se preparaban para detener esta invasión, Rook llamaba a Gwen para informarla del asunto. Ella contestó:

—No te preocupes, Rook, yo y Kevin las tenemos bien vigiladas.

Luego de que colgara, las Mane 6 más que nunca exigían ser liberadas puesto que, durante su práctica con Rook, a Gwen se le escaparon unas cuantas palabras sobre la misión de la que el plomero se estaba encargando.

—¿Por qué no nos dejan libres? ¡Podemos ayudarles a salvar su ciudad! ¡Podemos hacer todo lo que Ben hacía y hasta más! —decía Applejack exigiendo que las liberaran a ella y a sus amigas.

—No solucionas un problema liberando otro más grande. —opinó Kevin.

—¿Qué les hace creer que les vamos a creer a unas desconocidas así como así? —dijo Gwen.

—Yo les creo… —dijo Art Proud recargándose en la puerta entreabierta de la habitación llevando en la mano una pequeña mochila con dibujos de caramelitos.

—¿Qué haces con mi mochila? —preguntó Pinkie.

—La encontré tirada en la calle luego de que los plomeros las detuvieran para mandarlas aquí. ¡Y pensaba devolvérselas! Hasta que encontré… ¡Esto!

Art Proud abre la mochila y se las enseña a Gwen y a Kevin los cuales observan sorprendidos la gran cantidad de tadenita con la que la habían llenado.

—¡Guau! —exclamó Gwen—. ¿Cómo consiguieron tanta tadenita?

—Conozco a alguien. —dijo Fluttershy.

—Dame la mochila, viejo. —decía Kevin sujetando la mochila—. Rook dijo que debemos confiscar sus cosas como posibles futuras evidencias.

—No. —dijo Art Proud arrebatándole la mochila de las manos—. Me quedaré con esta mochila y todos los trozos de tadenita que contiene.

Al oír esto último, las Mane 6 se enojaron y empezaron a decirle al individuo hasta de lo que se iba a morir. Y éste, aprovechándose que Kevin y Gwen se encontraban distraídos por el bullicio de las prisioneras, sacó de su bolsillo un extraño artilugio el cual fue usado para electrocutarlos y, cuando ambos estuvieran enteramente inconscientes, observó a las chicas con una mirada maléfica y les dijo:

—¡Hagamos un trato!

Unos cuantos minutos más tarde, el Abuelo Max, Rook y los demás plomeros estaban combatiendo en contra de unos feroces velociraptors los cuales estaban a punto de atacar a unos pobres civiles.

—Vayan a refugiarse con los demás civiles. —dijo el abuelo mientras disparaba en contra de los reptiles para alejarlos—. Nosotros nos encargaremos.

Los demás plomeros guiaron a esa gente a una zona segura donde los demás transeúntes aguardaban a que el peligro cese. Parecía que el abuelo Max y Rook tenían todo bajo control hasta que un gigantesco tiranosaurio emergió desde el suelo, destrozándolo con su increíble fuerza y provocando que el suelo se sacudiera con una magnitud tal que a los plomeros más cercanos a él —Rook y Max lamentablemente— se les cayeran sus armas por accidente. El tiranosaurio estaba a punto de atacarlos y comérselos hasta que una extraña entidad alienígena similar a un meteorito se entrometió en su segura muerte para desaparecerlos.

Por otro lado en el Sr. Smoothy, Art Proud se encontraba degustando un batido (sí, ese era el dichoso trato por cierto) mientras que las Mane 6 esperaban su respuesta.

—¿Así está bien? —preguntó Pinkie Pie convertida en Fasttrack sentada al lado de él.

—¡Seh!

—¡Pinkie! ¿Podrías ayudarnos? —dijo Twilight convertida en Bloxx mientras peleaba contra algunos dinosaurios junto a Rarity convertida en Bestia y Rainbow Dash convertida en Walkatrout.

—Sipi, allá voy.

—Suerte con detener la invasión prehistórica. —dijo Art Proud.

—Gracias.

Pinkie convertida en Fasttrack corrió hacia aquellos reptiles prehistóricos para unirse con sus amigas al combate.

En eso, Fluttershy convertida en Cannonbolt aprovechó para ayudar a sus amigas aplastando unos cuantos dinosaurios que desafortunadamente no pudieron apartarse de su camino.

—¡Miren a quiénes encontré! —dijo ella mientras se desenrollaba y estiraba un poco sus músculos, liberando desde su interior a los plomeros que rescató—. Menos mal que los pude rescatar a tiempo.

—¡Vaya! ¡Bien hecho, Fluttershy! —exclamó Rainbow Dash convertida en Walkatrout.

—¡Qué grande eres, amiga! —exclamó Applejack mientras degustaba de un batido sentada al lado de Art Proud en una mesa del Sr. Smoothy.

—¿Qué? ¿Cómo escaparon? —preguntó extrañadísimo Rook.

—Pues fue… —intentó explicar Twilight convertida en Bloxx señalando a la mesa donde Art Proud bebía un Sr. Smoothy en compañía de Applejack sin percatarse que él se había ido con tal prisa que dejó nada más que una estela de humo—. Sí, adiós.

—Ustedes seis están en serios problemas, niñas. —mencionó el Abuelo Max.

—Antes de que diga nada, señor, déjeme proponerle una cosa. —decía Rainbow Dash mientras era elevada por Pinkie Pie convertida en Fasttrack hasta estar cara a cara con el Abuelo Max—. Usted y los demás plomeros nos dejan de molestar y nosotras los ayudamos a detener a todos esos animalejos.

—¿Cómo podremos saber que nos están diciendo la verdad? —preguntó dudoso Rook.

Al fondo, un grupo de dinosaurios liderados por el T-Rex de hace rato marchaban por una larga calle hacia la alcaldía. De pronto, un estegosaurio de entre la multitud vio a las chicas y corrió hacia ellas para atacarlas y devorárselas. Al darse cuenta de lo que este dinosaurio había visto, los que estaban detrás y delante de él lo siguieron con los mismos propósitos.

—¡Estamos a punto de averiguarlo! —dijo Pinkie dejando a Rainbow Dash convertida en Walkatrout sana y salva en el suelo para luego correr hacia el estegosaurio y golpearlo en la nariz.

Y así, comenzó una dura batalla entre los dinosaurios y las Mane 6 excepto por Applejack la cual, al ver que sus amigas necesitaban un poco de ayuda, bebió con mucha fuerza su Sr. Smoothy para terminárselo antes y poder transformarse en alienígena.

—Más les vale que cumplan con su palabra. —dijo ella a los plomeros luego de transformarse en Cerebrón para ir con sus amigas e unírseles a la batalla.

—Lo prometemos. —dijo el Abuelo Max con una mano puesta en su pecho y la otra al aire para demostrar que estaba comprometido con la promesa.

—¿Con cerrojo y si no arrojo un pastelito a mi ojo? —preguntó Pinkie Pie convertida en Fasttrack dejando la batalla por los principios de la Pinkie Promesa.

—¿Eh? —preguntó Rook.

—¡Solo hagan lo que dice! —dijo Twilight convertida en Bloxx mientras se defendía de un espinosaurio que destrozaba cada muro de bloques que ella le ponía en frente para intentar cubrírsele.

Luego de que el Abuelo Max y Rook pronunciaran la Pinkie Promesa, les entró una duda: ¿Cómo van a combatir ahora? Fluttershy solo logró rescatarlos a ellos, pero no contaban ya sus armas o por lo menos eso era lo que creían.

—Me parece que estas les pertenecen. —dijo Fluttershy convertida en Cannonbolt llevando en sus enormes manos las armas que a los plomeros tanto les hacía falta.

—Vaya, no puedo creer que hayas regresado con ese tremendo tiranosaurio solo para devolvernos nuestras armas. Muchas gracias, niña. —decía muy agradecido el Abuelo Max mientras él y Rook recogían sus respectivas armas—. Te debió de haber costado la vida.

—Fue un placer… —contestó ella para luego caminar hacia donde están sus amigas y ayudarlas a detener a las criaturas prehistóricas.

—Te pasas, ¿eh? —dijo Art Proud un poco sucio y con la cara algo rasguñada—. Mira que me iban a dar una buena lana en el Monte de Piedad por esos cachivaches. Si no fueras tan linda…

—Ay, gracias. —dijo ella dándole un beso en la mejilla a Art Proud—. Bueno, voy a ayudar a mis amigas. ¡Cuídate! ¡Sigue con tus historias!

Luego de que Fluttershy convertida en Cannonbolt se enrollara y se fuera rodando, el entristecido Art Proud empezó a caminar hacia su casa no sin antes decir:

—Pues ahora, en la próxima me voy a retrasar tres o cuatro meses para que se quite lo sonsa.

Ya teniendo sus armas listas, el abuelo y Rook fueron a detener a los dinosaurios, estando listos para unirse a la batalla. Applejack, por su parte, estaba lista para abandonarla porque no le estaba yendo nada bien con su forma de Cerebrón ya que no sabía cómo usarla y, por lo tanto, no sabía cómo defenderse del triceratops que la estaba atacando.

—¡Ay, qué bárbaro! —dijo toda adolorida en el suelo—. ¡Pero para algo ha de servir esta extraña forma alienígena! Hmm… veo que tengo la capacidad de abrir mi cráneo para revelar mi corteza cerebral. Veré si puedo usar eso como una habilidad supernatural para detener a esta fiera tan violenta.

Ella abrió su cráneo y, mediante el pensamiento tan solo, lanzó una descarga eléctrica al feroz triceratops dejándolo inconsciente.

—Perfecto.

Y, aprovechando el descubrimiento de su nueva habilidad, ayudó a Rainbow Dash convertida en Walkatrout a liberarse de un cuello largo demente que se la quería comer, envolviéndola en un campo electro-magnético y alejándola de allí, no sin antes dispararle un pequeño rayo en el pie para alejarlo.

—Vaya, acarrear ganado nunca fue tan fácil, ¿no es así? —mencionó Rainbow.

—Lo sé, soy excepcional, pariente. —contestó Applejack convertida en Cerebrón.

Por otra parte, Rarity convertida en Bestia se encontraba peleando contra los dinosaurios que se encontraban más adelante del estegosaurio que armó todo este relajo. Como eran pocos, ella logro vencerlos hasta que llegó con el tiranosaurio. Éste último intentó darle un zarpazo cuando la vio, pero ella lo consiguió esquivar a tiempo. Sin que él se diera cuenta, ella fue hasta la cola del temible depredador y trepo de ella hasta su espalda donde comenzó a dar fuertes rasguños, provocando mucho dolor y algunas heridas en el tiranosaurio.

Ese tiranosaurio en particular contaba con una especie de casco de patinar gigante sobre su cabeza el cual encima tenía una extraña cúpula hecha de un vidrio polarizado y muy resistente. Rarity, gracias a los súper desarrollados sentidos de Bestia, descubrió que había una persona dentro de la cúpula por lo que subió para investigar sin dejar de aferrarse a la espalda de tan inquieta criatura prehistórica.

—¿Qué está haciendo? —preguntó Rainbow Dash convertida en Walkatrout mientras observaba como Rarity convertida en Bestia intentaba romper el cristal de la cúpula sin éxito alguno. Las demás también notaron tan raras acciones de su amiga.

Desgraciadamente, el tiranosaurio se sacudió la cabeza con tal fuerza que hizo a nuestra amiga de melena morada finalmente caer.

—¿Estás bien, Rarity? —preguntó Fluttershy convertida en Cannonbolt levantando del suelo a su adolorida amiga.

Esta última, en un intento de avisarles a las demás de su descubrimiento, usó las pocas fuerzas que le quedaban para comunicárselos pero ellas solo pudieron escuchar gruñidos tan solo.

—¿Qué dices, campeona? —preguntaba Pinkie convertida en Fasttrack—. ¿Spike está atrapado en un pozo?

—Creo que empiezo a comprender que le ocurre a nuestra amiga. —señaló Applejack convertida en Cerebrón luego de observar detenidamente contra la luz que ciertamente se podía notar una persona sentada dentro de la cúpula—. Fluttershy, debes destruir esa cúpula, hay una persona dentro.

—Yo atrapo a la persona, Fluttershy, tú haz lo que dice. —propuso Twilight convertida en Bloxx.

Aceptando la propuesta de sus dos amigas, Fluttershy convertida en Cannonbolt se enrollo y rodó hacia el tiranosaurio subiendo hacia su cabeza usando su cola y su espalda como una rampa para finalmente destruir la cúpula. Usando sus dos manos, Twilight convertida en Bloxx formó una canasta con la que atrapó a la persona revelando que se trataba del mismísimo Dr. Ánimo.

—¿Así que tú otra vez, Ánimo? —preguntó el Abuelo Max de brazos cruzados.

—Yo solo quería matar al alcalde y utilizar mi ejército de dinosaurios mutados para liderar Bellwood con puño de hierro. ¡Es un sueño que he tenido desde la cuna! —dijo el Dr. Ánimo en un intento de defenderse.

—¡Sí, claro! ¡Eso díselo al juez! —dijo Rainbow Dash convertida en Walkatrout intentando divertirse un poco—. ¡Oficiales! ¡Llévenselo!

—Eso le pasa por irse por el mal camino. —dijo Twilight convertida en Bloxx siguiéndole el juego a su amiga mientras empujaba al doctor luego de encerrarlo en la canasta de bloques que ella hizo.

—¡Iras a la cárcel, amigo! ¡Despídete de la salsa picante! —dijo Pinkie convertida en Fasttrack siguiendo el juego ella también.

—¡Chicas! ¡Dejen de jugar y ayúdenme! —dijo Applejack convertida en Cerebrón cargando encima a la tan lastimada Rarity convertida en Bestia.

—¡Listo, magistrado! —decía Rook al abuelo— Los demás plomeros ya están enterados de que la invasión terminó y se están preparando para regresar a las familias a sus casas.

—Me parece bien, Rook. —opinaba el abuelo—. ¿Pero cómo podremos reunir a tantos dinosaurios sueltos por las calles?

—…y, si se portan bien, tendrán un lindo hogar donde cuidarán de ustedes y podrán sanar sus heridas. —contaba Fluttershy convertida en Cannonbolt mientras la seguían todos los dinosaurios que pelearon contra las Mane 6 y los plomeros, y que justificadamente se quejaban de sus heridas.

Más tarde, los plomeros regresaron al cuartel junto con las Mane 6 (ya humanas) para pensar qué es lo que harían con ellas.

—¿Seguro que la puedes curar? —preguntaba Fluttershy a Rook quien llevaba cargando a Rarity.

—Sí, en nuestra enfermería contamos con lo necesario para curar a tu amiga. —contestó él.

—Esas técnicas de pelea fueron muy impresionantes, chicas. —decía el Abuelo Max—. ¿Les interesaría formar parte de los plomeros?

—No lo sé… ¡Tampoco nos vamos a quedar aquí para siempre! —opinaba Rainbow Dash.

Y antes de poder seguir conversando, se mostraba en el gigantesco monitor ubicado en el centro de la base plomera que alguien estaba localizando a Azmuth, el creador del Omnitrix, mediante una videollamada. Resulta que le habían marcado nadie más ni nadie menos que Gwen y Kevin.

—Vaya, vaya, vaya… —dijo Kevin con una sonrisa amenazante de oreja a oreja—. ¡Increíble! ¡Es increíble!

—¡Es increíble que hayan regresado al mismo lugar donde escaparon! —señalaba Gwen—. ¿No crees, Kevin?

—¿Qué? ¡No! ¡Los cuernos de Rayona cuando se entere que la engañas con una de estas pequeñas criminales! —dijo Kevin para luego recibir un codazo por parte de Gwen.

—Un momento, magistrado —reclamaba Twilight—, usted nos prometió que si le ayudábamos nos iban a dejan en paz.

—Pues sí… —contestaba el abuelo— pero ellos no…

—Piénselo mejor. —decía Rook intentando defender a las chicas— Estas chicas son muy buenas usando el Omnitrix. Tal vez si las entrenamos bien, puedan ayudarnos.

—Lo siento Rook, pero Azmuth es el que debe de encargarse de esas cosas. —opinaba Gwen.

Finalmente, la videollamada de Azmuth entró. Sin embargo, fue contestada por Myaxx, la secretaria de Azmuth:

—Está usted hablando a la oficina del primer pensador. ¿En qué puedo ayudarle?

—Necesito hablar con el primer pensador, Azmuth. —decía Gwen.

—¿Asunto?

—Es sobre su más preciada creación, el Omnitrix. Verá, su antiguo portador, Benjamín Tennyson, ha sido desaparecido.

—Pero… ¿el Omnitrix está bien?

—Sí, unas seis pilluelas se encargaron de… rescatarlo, por decirlo así.

—¿Y saben la localización de esas… "pilluelas"?

—Sí, de hecho ellas están justo aquí, en la Base de los Plomeros.

—Holi. —dijo Pinkie Pie atravesándose en la grabación de la videollamada para saludar a Myaxx.

—Este… holi. —contestó ella.

—Entonces… ella y sus demás amigas están haciendo uso el Omnitrix. —decía Gwen intentando quitar la cara de Pinkie de la toma.

—¡Espere! ¿Todas ellas? —preguntó extrañada Myaxx.

—Sí, es un poco difícil de explicar. —explicaba difícilmente Gwen—. Verá, el ADN de Ben parece estar mezclado con el de estas jovencitas y eso, de alguna extraña manera, hizo que cada una tuviera su propio Omnitrix.

—Hmm… Ciertamente, es muy difícil de explicar. Y verdaderamente amerita una visita con el primer pensador.

—¿Cree que podamos ir a verlo?

—Pues vera, señorita Tennyson, Azmuth ha estado muy ocupado últimamente por asuntos laborales diversos. Pero tratándose de su más preciado invento, el Omnitrix, trataré de que su cita sea la principal prioridad del primer pensador.

—Entonces, cuando él se desocupe, ¿nos llamarán a la base?

—Así es, y será lo antes posible. Cuente con mi palabra.

—¿De veras? —pregunta Pinkie entrometiéndose en la llamada de nueva cuenta.

—Sí, lo prometo.

Además de videollamadas, el programa instalado en la computadora principal de los plomeros tenía una función de chat el cual Pinkie Pie utilizó para enviarle un mensaje a Myaxx. Y, al ver que el asunto del mensaje decía "léeme", ésta última lo leyó:

—"Con cerrojo y si no arrojo un pastelito a mi ojo."

—Bien. —dijo Pinkie.

—Bueno, eso era todo. —dijo Gwen luego de alejar a Pinkie Pie con su magia—. Adiós.

—Adiós, Gwen.

Finaliza la llamada.

—¡Gwendolyn! ¡Soy Gwendolyn!

Al ver lo incierto que sería la decisión del creador del Omnitrix en cuanto a las Mane 6, los demás plomeros decidieron dialogar sobre el asunto.

—Así que ahora queda en nuestras manos lo que haremos con estas pequeñas traviesas. —decía Kevin mirando rudamente a Fluttershy por aún sentir el shock eléctrico que "su amiguito" les descargó— ¿Ideas?

—Bueno, inicialmente yo tenía pensado en retirarles a cada una los Omnitríces de sus muñecas. —señaló Rook mientras curaba con alcohol y algodón a Rarity.

—No lo haga, compa. —decía Applejack poniendo su mano en el hombro de Rook.

—Pero ahora creo tener una mejor idea…

Luego de curar a Rarity, Rook llevó a las Mane 6 a un extraño y amplio lugar.

—¿Qué hacemos aquí? —preguntó Twilight.

—Después de haber visto la manera en que ustedes combatían contra aquellos dinosaurios mandados por el Dr. Ánimo, pensé que sería una buena idea llevarlas aquí. —explicaba Rook—. Este lugar es el Cuarto de Entrenamiento de los Plomeros, es un simulador de escenarios y villanos de inteligencia artificial que Ben y yo usábamos para practicar nuestras tácticas de combate.

—¿O sea que aquí podemos practicar cómo pegarle a los tipos malos como si lo hiciéramos en la vida real? —preguntó súper asombrada Pinkie.

—¡Nunca lo hubiera podido decir mejor! —contestó Rook mientras conducía a las Mane 6 al simulador.

El simulador era como una especie de satélite con varias pantallas en el centro con una enorme base circular sobre la cual las chicas debían pararse. Rook usó una de las pantallas para programar una simulación del Pueblo Bajo.

—Suerte. —dijo Rook yéndose lejos de ellas—. Yo las busco cuando terminen.

A lo lejos, un grupo de varios robots de Malware estaban machando hacia a las chicas totalmente listos para atacarlas.

—Ay, no. —decía asustada Fluttershy mientras se ocultaba detrás de Twilight—. ¡Son demasiados! ¿Qué vamos a hacer?

Las Mane 6, luego de mirarse entre sí, deciden activar sus Omnitríces, correr hacia ellos y decir:

—¡Vamos a ser heroínas!

Todas ellas corren hacia los robots, se transforman… y el resto… ¡Es historia!

FIN