Aurore boréale

Los personajes de Saint Seiya, no son propiedad mía, si lo fueran hubiera revivido a los dorados, sobre todo a mi amado Camus de acuario y al sexy bicho XD.

Sumary:

No solo era un santo dorado, también fue la única persona a la que he amado. ((Serie de Drabbles de Camus y MiloFem.))

Drabble 1. Conociendo a Milo.

Versión Camus

Aún recuerdo la primera vez que la vi, portaba su máscara sin ningún adorno y estaba entrenando con las demás aprendices. Su suave cabello se mecía con el compás de su movimiento ella era perfecta, fuerte pero al mismo tiempo frágil, detuve mi entrenamiento para verla mejor, lo cual provocó que terminara siendo golpeado por el aprendiz de leo.

—Hey Camus estas bien?—pregunto Aioria ayudándome a levantarme.

—Lo estoy, solo me distraje pero gracias por la ayuda—

—estabas viendo a las aprendices a Amazonas?—me pregunto mirando el mismo lugar que yo miraba —Es linda me pregunto si entrenara por una armadura de plata o bronce— se preguntó mirando a la misma niña que yo había estado viendo, por algún motivo no me agrado para nada eso.

—Lo que digas pulgoso ahora terminemos el entrenamiento— comente para continuar entrenando, mirando de vez en cuando a la niña de cabello azul eléctrico, estuvimos un rato de esa manera cuando nuestros maestros llegaron por nosotros su junta había terminado, mire por última vez a la niña, justo antes de que el caballero de escorpión llegara a donde estaba ella y la golpeara con fuerza para después llevársela de la muñeca, ella no protesto para nada solo ajusto si mascara y camino con rapidez.

—Más te vale mantener a tu aprendiz lejos de Escorpión— le grito el santo del octavo signo a mi maestro para después marcharse llevando consigo a la niña. Fui con mi maestro temeroso de que fuera a reclamarme, pero el no dijo nada como siempre y me llevo de regreso al templo de acuario.

—Lo lamento mucho maestro no quise causarle problemas con el caballero de Escorpión— dije en cuanto nos quedamos solos en el templo.

—No ha sido culpa tuya, es de Vasilios por no querer que su aprendiza entrene con todos ustedes como debería de ser—

—Por qué debería de entrenar con todos nosotros?—

—Porque la pequeña es la próxima sucesora del templo de Escorpión es una aprendiza a amazona dorada—

—Ahora entiendo todo maestro, no me voy a acercar a ella para que no tenga problemas con el caballero de escorpión—

—Camus, de hecho iba a pedirte lo contrario, desde guerras pasadas, el caballero de escorpión y el de acuario siempre han estado juntos, por eso es que he de pedirte que estés al pendiente de la niña de nombre Milo—

—Tiene nombre de chico—

—Lo se Camus pero no le digas eso o te a golpear, ya lo hizo con todo aquel que la hizo enojar diciéndole que su nombre es de chico—

—Está bien yo tratare de hacerla mi amiga— comente asistiendo, aunque mi maestro fuera un hombre duro incluso frío, cuando lo conocías como yo lo conocía, era alguien amable y con muchos sentimientos.

Después de ese incidente no volví a verla, ya que yo me marche a terminar mi entrenamiento en Siberia, al regresar yo ya traía conmigo la armadura de acuario, de hecho todos ya tenían su armadura, salvo la jovencita de nombre Milo.

—Hey franchute vienes es la prueba de la enana, veamos a ver qué tal le va, aunque he de decir que al ser la última todos estaremos viéndola mientras mete la pata— comento Death mask, yo le ignore, decidí que no iría ver su prueba, aunque tenía muchas ganas de ver que había sido de esa niña que había visto entrenar hace algunos años, sin pensarlo mis pies me llevaron directamente al 8vo templo, la prueba había comenzado, la jovencita estaba luchando con mucha ferocidad, ella era una gran guerrera, nunca había visto a nadie luchar de la manera en la que ella lo hacía, sus movimientos era extremadamente calculados, atacaba con agujas escarlatas al igual que se maestro, la pelea se notaba desigual, ella tenía mucho menos poder que su maestro, tenía muchas ganas de ir a ayudarle, ella termino en el piso a punto de recibir la técnica más fuerte de escorpio, Antares, si lo recibía era el fin, pero para sorpresa de todos se puso de pie y preparo la misma técnica, sobrevivirá aquel que lanzara el ataque más poderoso tal y como había pasado cuando obtuve mi armadura. Cada uno recibió el ataque del otro, pero solo permaneció de pie.

—Te he ganado viejo la armadura es mía, esta vez perdonare tu vida pero deberás marcharte del santuario enseguida— dijo ella vistiendo la hermosa armadura de escorpio solo que esta se había modificado sola a su cuerpo, todos los presentes solo bajamos la cabeza por verla tan desprovista de elementos, era como si llevara una fina lencería hecha de oro —Y que miran a su templo corran que no quiero a nadie en el mío— comento entrando a su alcoba, la chica estaba hermosa vistiendo su armadura, aunque esta le quedaba grande claro tanto ella como yo aún éramos unos niños de 7 años, la vi marcharse por lo que todos decidimos hacer lo mismo.

No la volví a ver en unos meses, supe que se encerró dedicándose solamente a sus deberes como amazona dorada, por lo que no le he podido ver.

Estaba caminando con calma haciendo mi ronda nocturna cuando vi una sombra correr, sin dudarlo salí corriendo para darle caza.

—Alto ahí, está en terrenos sagrados — grite pero la sombra solo corrió más rápido, yo la seguí.

—No se acerque, o tendré que matarlo — dijo una voz femenina, que claro que reconocí era la voz de Milo la amazona dorada de Escorpión.

—Que haces fuera de tu templo amazona de escorpión? —

—Estaba dando una vuelta no se acerque no tengo mascara — me dijo para que no me acercara.

—No me acercare, hagamos algo necesito saber que hacia afuera a estas horas pero no quiero que nos enfrentemos por la ley de las amazonas así que si nos vemos mañana a después del entrenamiento colectivo así usted trae su máscara y asunto arreglado—

—No vas a dejarlo pasar cierto? —

—Así es, si no informare al patriarca—

—Bien usted gana, mañana después del entrenamiento— comento machándose con rapidez para que no viera su rostro.

Ella se marchó, dejándome un ligero tinte rosa en mis mejillas, espere a que este bajara antes de continuar con mi ronda nocturna.

A la mañana siguiente me levante de mucho mejor humor esperaba poder platicar con ella, pero no se presentó a nuestra cita. Estaba regresando a mi templo cuando escuche su voz

—Entonces nos vemos en la entrada del santuario a las 9 de la noche, no se te vaya a olvidar pulgoso—

—Para nada alacrán, no se me olvidara oye no habías dicho que tenías una cita?

—No era una chita romántica solamente era para platicar y aclarar unas cosas con el caballero de acuario, me vio entrando al santuario así que prometí explicarle después del entrenamiento pero me encontré contigo y ya no pude hacerlo, así que iré a su templo y le explicare, a menos que quiera salir de donde esta—

—No es necesario que subas a mi templo, yo iba a ver al patriarca para decirle que ayer la vi entrar al santuario en la noche—

—No es necesario si en la noche nos acompaña, es el último día el festival del pueblo y podemos ir los tres si no le molesta—

—Estas invitándome a salir? —

—Algo así, lo invito a divertirse con el Gato y conmigo, al fin de cuentas todavía somos niños y pues bueno que seamos caballeros no quiere decir que no podamos divertirnos, no lo cree? —

—En ese aspecto tiene razón, quizá si los acompañe esta noche— comente seriamente y tratando de que no sonara con que me agradaba la idea.

—Entonces en la entrada a las 9 de la noche, eso va a ser genial una noche para los amigos, bueno los dejo, debo revisar que los escorpiones de mi casa estén bien alimentados, con su permiso— comento y se marchó corriendo a su templo.

—Es agradable la escorpión me cayó muy bien y a ti cubo de hielo que tal te cayo?

—Demasiado intrépida y se salta las reglas, pero fuera de eso tiene algo que me agrada—

—Entonces nos vemos después cubo, y por cierto Milo me dijo que es un festival de máscaras así que no olvides lleva una máscara— dijo el antes de marcharse.

Después volví a mi templo, comencé a hacer todas mis actividades para estar listo para la hora en la que nos habíamos quedado de ver, y así fue llegue puntualmente, después de mi llego Aioria, quien solo sonrió negando con la cabeza, como si supiera que llegaría tarde.

—Lo siento me entretuve jugando con mis escorpiones— comento usando su máscara plateada la misma que usaba cuando era aprendiz, ahora que es un santo de dorado de Atena debe usa una máscara dorada.

—Descuida yo acabo de llegar, al que tienes que pedirle perdón es al cubo de hielo el llevaba esperándonos unos minutos—

—Lo lamento mucho caballero de acuario no volverá a ocurrir—

—Camus, llámame Camus solamente—

—O bueno entonces nos vamos hay muchas cosas que quiero hacer— dijo alegremente, llevándonos al pueblo cercano al santuario, al llegar todo estaba decorado con rosas rojas, ya fuera de papel o naturales—

—Aquí festejan que el caballero Albalfica de Piscis salvo al pueblo en la última guerra santa, mientras que nosotros pues no sé si sea celebrar pero celebramos su aniversario Luctuoso— explico ella llevándonos por los puestos buscando que comprar. Al verla supe que aun tenía una alegría y entusiasmo que no había visto en ninguno de los demás santos dorados, brincaba de un lado a otro, corría y nos llevaba de la mano como si fuéramos los tres los mejores amigos, realmente verla contagiaba la alegría a cualquiera, por alguna extraña razón me llene de una cálida sensación.