Durante el transcurso de la tarde en la actual ciudad fantasma, karakura, un hombre mayor de sombrero peculiar y sandalias de madera rondaba en solitario por las moribundas avenidas centrales. Para donde su miraba se centraba solo alcanzaba a distinguir el caos inducido por el pánico y la cobardía que llevaron al ser humano a la locura, destrozando todo a su paso intentando huir de lo que desconocían y de lo que no podían hacer frente.
Urohara se hallaba inmerso en su mente teorizando sobre la presente situación con manos en los bolsillos y mirada baja, conforme llegaba a su destino no dejaba de recordar los rostros de aquellos sujetos de energía imposible de presenciar. ¿Pero porque? Si hasta hace unas horas fue capaz de sentir una abertura espacio-tiempo, ¿Por qué no el de dos simples sujetos… o caso será, que no eran simples sujetos?
Además, una cuestión que ganaba mucha más importancia era el porqué los hollows pudieron ser vistos por los humanos si se supone que son almas muertas. Sin duda ese suceso se llevo consigo muchas más vidas de lo habitual. Urohara se había detenido justo a un costado de un cráter con forma de pie observando de reojo aquel fondo lleno de restos de cuerpos destrozados.
Prosiguiendo con su camino, continuo ahogándose con preguntas que hacían surgir más y más incógnitas, de las cuales, dejarían a cualquier persona al borde de la locura.
-si esos sujetos no son de aquí, ¿Por qué solo vinieron por ichigo en especial?- preguntó al viento. –sería más razonable y lógico que una ayuda más capacitada seria la asociación de alma, aunque claro, ichigo es ahora bastante poderoso. ¿Acaso aizen está detrás de esto? Está claro que su desaparición fue muy sospechosa, pero… sigue sin tener lógica. Si fuera él, su punto directo seria la asociación de almas o únicamente a ichigo, evitándose todo esta pérdida de tiempo-
-Únicamente desaparecen objetos al azar y eso cualquiera lo sabe, nada sin relevancia...así que, ¿Qué diablos está ocurriendo?. De pronto urohara se detiene y confuso mira el horizonte. -Y aun mas importante… ¿si los demás en casa ya terminaron de empacar las maletas que les pedí, entonces… a dónde iremos si somos pobres?-
En lo alto de una montaña se avistaba un cielo grisáceo, acompañado de un prolongado viento suave que hacia bailar las ramas y hojas de los arboles tanto frondosos como de los que no, y a pesar de la tranquilidad del momento, de la nada cuatro luces resplandecieron por un segundo dejando escuchar cuatro embestidas contra la húmeda arena que yacía como suelo en ese lugar.
Goku, seiya, naruto e ichigo reaparecieron inconscientes en un misterioso lugar…
El saiyajin lentamente abría los ojos recobrando la conciencia siendo lo primero en observar un cielo nublado y el sonido de una pequeña cascada que parecía estar muy cerca.
Con un poco de esfuerzo pudo alzarse hasta quedar sentado mientras visualizaba el entorno de lado a lado. De su mentón goteaba un poco de sangre que caía sobre la arena, por lo cual el saiyajin se limpio la frente con su palma, y al ver su sangre, recordó por un instante la mirada fría de gogeta, y a su vez, el demencial poder que éste emanaba con solo estar de pie.
Al bajar la mano, y al ver el paisaje a lo lejos, fácilmente se dio cuenta que se hallaban a mitad de una montaña rascacielos. -¿Dónde estam...- en ese momento, pudo sentir nuevamente el ki de sus amigos . –¿acaso, regrese a mi mundo?- se pregunto confuamente.
A los pocos segundos de haberse podido ponerse de pie los gemidos de dolor de ichigo hizo que goku rápidamente lo llevara a recostar sobre un árbol.
El shinigami abrió los ojos y al ver el mismo entorno se asusto de golpe al ver como el rostro de goku se acerco bastante a su cara mientras este le preguntaba, si estaba bien. Por lo cual reacciono con un breve grito.
-¡no hagas eso!- exclamo ichigo enojado apartando un poco a goku.
Una vez recuperado la conciencia totalmente nota el claro cambio de entorno y le pregunta a goku en donde estaban, a lo cual responde que en su mundo, al ver a sus compañeros naruto y seiya se da cuenta que…
-es… espera… ¿!donde esta kon!?- ichigo alarmado se levantó apoyándose del árbol y rápidamente hace un chequeo por el lugar.
-ah!.. ¿Hablas del gracioso oso de peluche que ocupaba tu cuerpo?-
-¡SI!, ¿!sabes dónde está!?-
-veamos... si mi memoria no me falla, creo que se quedo en el otro universo. Todo está bien-
-¿!COMO QUE TODO ESTA BIEN!? El tiene mi cuerpo original, además no puedo dejar que ese pequeño pedazo de cancer este solo-
-vaya, de verdad te preocupas por el…-
-no es eso, quien sabe qué clase de tonterías hará con mi cuerpo en un mundo ajeno. Seguro ya estará acosando mujeres y haciendo cosas indebidas…- ichigo pensó por un momento en todas las cosas pervertidas que kon haría sabiendo que siempre se mete en problemas.
-vamos no te preocupes tanto, ya verás cómo lo volveremos a encontrar… creo- goku con una risa de incomodidad intentaba calmar a ichigo, quien no dejaba de imaginar los desastres que kon ya está haciendo, por alguna razón esto le recordaba a su viejo maestro roshi con esos mismos "problemas".
Inesperadamente seiya empezó a toser fuertemente llamando la atención de ambos quienes se apresuraron en auxiliarle. Ichigo lo alzo un poco para que pudiera respirar correctamente, pues parecía que había un poco de sangre dentro de su garganta que le bloqueaba el oxigeno.
Goku, con un poco de agua en sus manos, le indica a seiya que tome para que se le disuelva y se baje, acto seguido lo hace y de un profundo suspiro recupera el oxigeno faltante.
De un jalón se alzó hasta quedar sentado. No dejaba de jadear, de su rostro descendía sudor que caía en picada desde su mentón tras un esfuerzo de sobrevivir.
El cantar de los pájaros y la melodía de una cascada pequeña le regresaron la conciencia. Alzando la vista al cielo tuvo una nueva perspectiva del mundo.
-¿Dónde estamos?- pregunto indagado.
-en mi mundo, parece ser- respondió el saiyajin.
-se parece al mundo de naruto-
-sucede que estamos lejos de la cuidad, perdidos entre el bosque supongo-
Goku y seiya ven a naruto despierto, reposando un poco del aturdimiento gracias a ichigo-
-te escuche decir que este era tu mundo, eso quiere decir que a esto te referías con "universos", cierto?- pregunto naruto, a lo cual goku asiente.
-jeh.. Soy el único al que le falta un poco de conocimiento sobre los acontecimientos, no es así?- dijo el ninja.
-cuando te lo íbamos a contar… ya sabes, hubo un pequeño inconveniente- ichigo ayudo al ninja a ponerse de pie.
-ahora que lo dices, ¿dónde está gogeta?- interrumpió el caballero de pegaso.
-parece ser que al estar todos reunidos nos envió de una vez a mi mundo-
-antes de que nos atacara, noté que tenía algo de prisa. Aun que no lo mostraba abiertamente, pude sentirlo- comento ichigo recordando la mirada de gogeta.
Seiya toco su abdomen adolorido recordando como el enemigo pudo derribarlo como si nada. -si hubiera querido nos hubiera matado en el acto, pero nos envió aquí ¿para qué propósito?-
-oye goku, habías dicho que nos reunirías para vencerlo, pero ni siquiera le tocamos un cabello, y eso que tenía muchos, era demasiado poderoso ¿acaso todo será inútil?- ichigo se sintió aplastado a pesar de sus nuevos poderes.
-no lo creo. A juzgar por lo que ese sujeto le dijo a madara parecía que se llevaba a cabo un plan que no había cumplido al pie de la letra y que incluso menciono que aun no quería aparecer frente a nosotros, podría ser que su verdadero ataque aun no empezaba?- dijo naruto.
Seiya se puso de pie un poco tambaleante y miro a sus compañeros. –eso quiere decir que algo tenemos que hacer-
-espera un momento seiya, aun hay una incógnita, y es saber si esto no es una trampa de gogeta. Piénsalo, si nos envió aquí con un propósito aparente significa que tal vez quiere algo de nosotros para facilitarle su meta- teorizo el shinigami.
-no es así…- interrumpió goku sorprendiendo al grupo.
-tú sabes algo al respecto?- pregunto naruto.
-yo, me vi forzado a cumplir una orden de gogeta por sugerencia de unos dioses ya que mi mundo y el de los demás corrían riesgo, y yo no era suficiente para vencerlo. Pero cuando leí una carta que me había dejado supe que quería que lo enfrentáramos para derrotarlo…-
-¿!Qué!? Acaso ese tipo quiere que frustremos sus planes. Eso es algo estúpido, y descabellado- exclamo ichigo.
-supongo que para él no sería divertido si lo logra fácilmente- agrego naruto.
-si ese es el caso tenemos que hacernos más fuertes para cuando llegue ese día, no fuimos ni un chiste para el- goku apretó su puño recordando el extraño momento en el que retrocedió ante él.
-tal vez ese es nuestro objetivo en este mundo… aunque, llámenme desconfiado, pero siento que esa no es toda la verdad detrás de esto. Aunque no tenemos de otra más que optar por esa idea de hacernos más fuertes como objetivo actual. Nunca había entrenado desde que recibí mi armadura, así que no debo quedar atrás en esta lucha…- seiya pensó en athena y en sus amigos, siendo su más grande motivación.
-¿pero no creen que es algo casi imposible alcanzar ese poder con solo entrenar? Nos tomaría años, e incluso creo que ni siquiera así sería suficiente- afirmo naruto un tanto decaído.
-pero tenemos que hacer algo y con urgencia, no por nada hizo lo que hizo, así que... ngh!- un fuerte dolor en las costillas ataco a ichigo haciéndolo caer de rodillas.
Naruto y goku lo ayudaron a levantarse casi de inmediato, seiya por su parte se da cuenta que en el lugar del impacto en el costado de su torso se podía ver entre un pequeño orificio de la ropa una desfiguración de las costillas. Dejado claro que el simple y burdo golpe de gogeta pudo haberlo destrozado si quisiera.
-goku, si dices que este es tu mundo ¿crees que puedas llevarnos a un lugar donde podamos reposar? Ichigo está bastante grave- sugirió el caballero de pegaso a lo cual goku asintió.
-síganme… creo saber dónde estamos exactamente-
-oigan, ¿creen que mientras puedan explicarme detalladamente lo que sucede?- pregunto el ninja a lo cual seiya se dispuso a contárselo mientras conversaban para conocerse un poco mejor
Y así los 4 guerreros mas fuertes comenzarían su viaje para lo que se les avecinaba en el fututo…