Capitulo 5: Hacia Kioto

-Battle-

En el área de observación ya se habían reunido muchas más personas cuando escucharon hablar sobre la legendaria magia llamada "Hamon" por parte de un comunicado de Azazel, todos querían investigar más sobre dicha habilidad. Akeno miraba con preocupación la pelea, pues hasta hace poco Ise había sido apaleado por su padre, mientras que Alessandra a su lado animaba a Ise junto con Raynare. Mukae mantenía una expresión curiosa al igual que Ophis, tal parecía que dicha habilidad había despertado un gran interés en ambas. Circe comandaba a todos los ángeles caídos que habían llegado para investigar al Hamon, sorprendiendo a todos pues parecía casi excitada ante el gran hallazgo que suponía dicha habilidad en su "jefe". Finalmente Scarlet miro por el cristal abrazando más a ella a su hijo mientras una expresión de preocupación pasaba por su rostro.

Ise miraba con seriedad a Baraqiel, en verdad deseaba acabar pronto la batalla, más sabía que debía alargarla para que el padre sobreprotector de Akeno se tranquilizara un poco y no siguiera con deseos de asesinarlo cuando salieran de esa arena. Ise se agacho un poco y de inmediato sumergiendo su mano en el agua la levanto lanzando el agua que levanto hacia Baraqiel. En un principio todos vieron escépticos esta acción, más después notaron como las gotas de agua se afilaban como si de agujas se tratasen y salían disparadas hacia el ángel caído. Rápidamente Baraqiel bloqueo dicho ataque creando un escudo de luz, más por culpa de esta acción perdió de vista a Ise.

-¿Dónde está observando, Baraqiel-san? –Ise estaba cayendo a la espalda del ángel caído con sus manos brillando con rayos anaranjados, mostrando que estaban cargadas de Hamon –Overdrive Chop

Ise dio un poderoso golpe de karate a la espalda de Baraqiel, que fue acompañado por una gran explosión de luz producida con el Hamon para después verse a Baraqiel cayendo herido, seguido por el joven dragón que dejaba salir una cola reptiliana de escamas rojas y daba un tremendo golpe con ella, lanzando hacia el pequeño bosque a su oponente. Baraqiel logro extender sus alas para levantar el vuelo poco antes del impacto, para después mirar a Ise y lanzarle un poderoso relámpago, el cual a duras penas logro esquivar.

-¿Qué sucede Baraqiel-san? –Ise aterrizo sobre la copa de un árbol y sonrió de forma burlona -¿Acaso no me iba a derrotar para que no hiciera cosas pervertidas con su hija?

-¡Te voy a despellejar! –Baraqiel lanzo un potente rayo sagrado a donde se encontraba Ise, destruyendo el árbol más el chico salto a otra copa sonriendo de forma altanera

-¿Cómo desea que le pongamos a su primer nieto? –Pregunto riendo el castaño para después saltar a una hoja más –Oh, tal vez debamos tenemos unos 10 niños y 10 niñas

Baraqiel continuaba destruyendo uno a uno todos los árboles que se encontraban en el lugar, hasta que Issei quedo entre una barrera hecha con los troncos derribados de los árboles, los cuales estaban comenzando a encenderse debido a los rayos que lanzaba el ángel caído. El padre de Akeno se colocó frente al castaño y miro con una pequeña sonrisa al chico, realmente lo logro acorralar en aquel claro al castaño y estaba listo para atacarlo… hasta que vio como el chico sonreía confiado.

En un rápido movimiento el castaño corrió a gran velocidad hacia Baraqiel, logrando propinarle un poderoso golpe directamente en el pecho, más de inmediato fue repelido por un golpe del ángel caído y lanzado hacia los troncos que cubrían su escape. Ise cubrió sus manos con Hamon y toco el piso, comenzando a irradiar con él a todas las hojas que se encontraban dispersas tapizando la zona por culpa de los arboles destruidos por Baraqiel. El ángel caído comprendió el plan del castaño al observar que su cuerpo igualmente estaba irradiado del Hamon y ver que las hojas se levantaban en dirección hacia él, girando con fuerza como si de cuchillas se tratasen.

-¡Hamon Biomagnetic Overdrive! –Las hojas atacaron a Baraqiel con fuerza y este intentaba cubrirse de los golpes como podía tanto con sus alas y sus rayos, más las hojas eran demasiadas y estaban causando heridas en su cuerpo -¿Qué le parece mi fuerza señor Baraqiel?

-¡Inútil! –El ángel caído cubrió su cuerpo de rayos y fue contra el castaño, mas este tomo con su mano las llamas en los troncos y las cargaba con su Hamon, propagándolas por sus dos brazos cubiertos de escamas -¡Te reto a intentarlo mocoso!

-¡Red Fire Hamon Overdrive! –Ise salto en contra del ángel caído con sus brazos brillando con fuerza de color rojo debido al Hamon y las llamas que los cubrían

Ambos comenzaron un feroz intercambio de golpes, los cuales centellaban con intensidad y brillaban cada vez que impactaban en el cuerpo del enemigo, Ise se notaba bastante cansado pero no parecía ceder pronto y Baraqiel a pesar de estar recibiendo algo de daño, no parecía importarle esto. En determinado momento por un descuido de Ise, Baraqiel logro ver una abertura y dio un golpe directo a un costado de la cabeza de este, lanzándolo al piso por tremendo impacto.

Issei una vez en el piso miro al ángel caído y sus ojos regresaron a la normalidad, realmente no creía poder continuar en esas condiciones y sonriendo simplemente suspiro para después ver al cielo artificial que fue testigo de su combate. Cerro sus ojos y sonrió ampliamente para exclamar como si no fuera nada: "Perdí"

-A pesar de que deseo matarte, si lo hago mi hija me odiara mucho más de lo que ya me odia –Exclamo el pelinegro para después darle la espalda al castaño –Vivirás por ahora

-Todo lo que dije antes… lo retiro señor Baraqiel, solo buscaba hacerlo molestar por mi estrategia –Se disculpó el heraldo de los dragones para después levantar un poco su mano -¿Se contuvo demasiado?

-Sí, pero si te hubiera seguido tomando a la ligera seguramente me hubieras causado un daño considerable –El padre de Akeno vio al Sekiryuutei y con una pequeña sonrisa rio –Hamon, un arte para destruir criaturas sobrenaturales, ¿Quién fue el tonto que se lo enseño a un dragón?

-Fue un hombre que encontré durante mi entrenamiento en las montañas, era bastante excéntrico y no paraba de comer como si estuviera en un picnic eterno –Issei rio un poco y después prosiguió –Se llama William A. Zeppeli… espero poder reencontrarme con el viejo alguna vez

-Seguramente lo harás chico –Baraqiel hizo una seña para que Azazel hiciera pasar al equipo médico, el cual de inmediato cubrió al castaño –Espero verte pronto nuevamente, Issei Hyoudou

-Battle Fin-

-Pov-

Mi cuerpo me dolía a horrores, de verdad necesitaba descansar un poco antes que hacer cualquier otra cosa, pero tenía que moverme, después de todo mi trabajo me pedía dirigirme hacia el territorio Youkai para comenzar a hacer los tratados correspondientes con ellos. Baraqiel me ayudo a levantarme y después hizo aparecer debajo de nosotros un circulo de transporte, seguramente nos llevaría al área médica de Grigori. Mis ojos se cerraron por unos momentos, a decir verdad usar el Hamon siempre me dejaba bastante cansado, por lo cual decidí simplemente dormir hasta recuperar mis fuerzas.

Cuando mis ojos se abrieron sentía demasiado peso sobre mí, no porque mi cuerpo me doliera, sino al contrario se trataba de una sensación bastante agradable, pero por alguna razón sentía algunas cosas encima mío. Cuando mire hacia abajo mi sorpresa fue bastante grande ¡Las chicas estaban encima mío! Asia abrazaba con fuerza mi brazo derecho mientras que Akeno estaba con mi brazo entre sus pechos, sobre mi pecho se encontraban Bonnie y Mukae, mis piernas estaban siendo ocupadas por Alessandra y Circe, mientras que sentada a mi lado dormía Raynare abrazando suavemente mi cabeza. ¡Estoy en el paraíso! ¡Padre, Madre, Gracias por haberme hecho hombre!

Al ver bien pude caer finalmente en cuenta, ¿Dónde estaba Scarlet? Probablemente se encontraba cuidando de nuestro hijo… De cierta forma me siento culpable por estar aquí rodeado de chicas mientras ella esta con nuestro pequeño, creo que en cuanto tenga tiempo libre saldré a caminar con ambos… tal vez pueda hablar con Sirzechs-sama para pedirle permiso de ir al inframundo, después de todo tarde o temprano tendremos que comenzar las negociaciones con los demonios. Cerré nuevamente mis ojos intentando dormir un poco más, en verdad necesitaba descansar un poco de todo lo que estuvo sucediendo últimamente.

-Fin POV-

-Azazel Pov-

-Entonces, están conscientes de toda la situación ahora, ¿Verdad? –Pregunte con seriedad a las dos personas que estaban frente a mí, en verdad estaba un poco nervioso más lo disimulaba

-Por supuesto, Azazel-san –Respondió uno de ellos con seriedad para después mirar hacia su reloj –Debemos retirarnos, vayamos a beber juntos otro día

-Claro que sí, le aseguro que ese día será más pronto de lo que espera –Conteste sonriendo de lado para después ver como ambos individuos desaparecían en un círculo de transporte –En verdad fue difícil

-Lo sé, Azazel-san, pero igualmente es necesario –Ddraig, o mejor dicho Scarlet, estaba sentada junto a mí, mientras abrazaba a su primogénito con cariño -¿Está todo listo como lo acordamos?

-Por supuesto que si –Le mostré a Scarlet un papel en donde habían varias fórmulas mágicas y al final una línea como si necesitaba que alguien lo firmase –Sera viable solamente por 15 días, ¿Esta bien ese tiempo?

-Es más que suficiente, no se preocupe Azazel-san –Ddraig se levantó de su asiento con una pequeña sonrisa para después verme por sobre su hombro –Dele mis saludos a Albion, y dígale que si sigue siendo tan mojigata se quedara soltera por otro siglo mas

No comprendía realmente como había iniciado la pelea entre ambos dragones celestiales, y realmente era un asunto en el cual no quería inmiscuirme, debido a que quien entraba en conflictos de mujeres terminaba peor que muerto. Mordí fuerte mi dedo índice, haciéndolo sangrar, y con este dibuje mi firma en el papel para después hacerlo desaparecer, como si este simplemente se evaporara en el aire.

-Espero el chico este bien con esto –Susurre para después continuar con mi mayor enemigo en Grigori, aquel que me separaba de las hermosas mujeres pechugonas y mi afición por las Sacred Gear… el papeleo…

-Azazel-san –Por la puerta apareció el chico de cabellos chicle y sonrió ampliamente –El Sekiryuutei vino, ¿Verdad? ¿Puedo pelear contra él?

-Lo siento, pero ya regreso a su casa –Indique con una pequeña sonrisa, a decir verdad la alegría de este chico siempre me divertía pues parecía una versión menos obsesiva de Vali –Pero, puede que lo encuentres en Kuoh si vas a su casa

-Kuoh… oh es donde vive Asia-chan –Exclamo el chico para después salir corriendo -¡Iré a ver a Asia-chan, gracias Azazel-san!

Mire la dirección en la que fue el chico y simplemente reí un poco, tal parece que las cosas se pondrán un tanto interesantes por allí.

-Fin Azazel Pov-

-Pov-

Una hora después de haber estado acostado, me levante de la cama, parece que las chicas se habían despertado antes que yo y ya estaban en el piso inferior de la casa, por lo cual decidí acercarme a mi armario y buscar algo que usar, decidiéndome simplemente por un short de color azul marino y una playera de color negro, después de almorzar me colocaría algo más formal para poder ir a Kioto con la facción Youkai. Baje tranquilamente las escaleras mientras me peinaba con una mano el cabello, hasta llegar a la sala, logrando ver a todas las chicas de mi grupo, incluyendo a Bonnie y Scarlet utilizando un uniforme de una escuela que nunca había visto, pues se trataba de una blusa color blanco, similar a un Sailor Fuku con la parte del cuello azul con una línea amarilla, y corbata pequeña de color rojo, mientras que sus piernas estaban cubiertas por una falda azul celeste, ¡En verdad todas se veían hermosas!

Los pequeños pechos copa A de Bonnie y Scarlet, los pechos copa B en crecimiento de Mukae, los grandes pechos copa C de Raynare y Alessandra, además de los enormes pechos copa D de… ¡Circe tiene pechos bastante grandes! No son como los de Akeno, pero aun así son más grandes de lo que aparentaban con sus ropas holgadas de siempre. En cuanto las chicas notaron de que las estaba observando, todas tuvieron un ligero sonrojo en su rostro, a excepción de Circe que se froto suavemente su hombro para después colocarse un cigarrillo en su boca.

-Estas cosas son muy pesadas, por eso siempre uso vendas –Exclamo molesta la chica con ojeras para después encender su cigarrillo –Por allí está tu uniforme, tenemos que alistarnos para ir de encubierto a Kioto

-¿Ir en cubierto? ¿Cómo? –Pregunte confundido mientras me acercaba a uno de los sillones de la sala, encontrando un uniforme que consistía en una camisa de color blanca a botones, una chaqueta de color azul oscuro, una corbata y pantalón igualmente de azul oscuro

-Los Youkai de Kioto son demasiado territoriales, difícilmente les dejan entrar a los extranjeros "paranormales" entrar a sus dominios, además de que los Onmyouji igualmente buscan cualquier excusa para destruir algún "monstruo" que amenace su paz –Explico tranquilamente Alessandra mientras sonreía y se ajustaba correctamente la corbata –Siempre me han gustado los uniformes japoneses, son muy cómodos y curiosos

-Ya veo –Susurre mientras leía el escudo de la academia a la que pertenecían los uniformes –"Academia privada Himawari" suena como un buen lugar

-De hecho no aguantaríamos más de un mes, Ise-san –Dijo un tanto temerosa Mukae-chan, sonrojándose demasiado cuando levante la mirada para verla con curiosidad –Esa academia es realmente exigente, los estudiantes que están allí realmente son lo mejor que puedes encontrar… para bien o para mal

-Pareces saber mucho de esa academia, ¿Ya estuviste allí antes? –Pregunto curiosa Alessandra viendo a Mukae-chan, quien sonrojada asintió -¿En serio?

-Sí, unos compañeros de ella nos llamaron preocupados para que la ayudáramos a controlar su Sacred Gear y no se saliera de control en la academia –Indico Raynare sonriendo para después acariciar la cabeza de Mukae-chan –Estaba cursando su primer año cuando la sacamos de su academia

-Ya veo –Susurre mientras caminaba hacia la cocina, no sin antes mirar una última vez hacia atrás –Me cambiare aquí para probarme el uniforme, no me espíen

-¡Hai! –

De inmediato comencé a cambiarme detrás de la barra, intentando ser lo más rápido posible para que ninguna de las chicas me viera, confió mucho en ellas, pero realmente no deseo arriesgarme a que ellas me vean usando paños menores. Después de unos minutos me levante de la barra llegando a donde se encontraban ellas, en cuanto me vieron simplemente sonrieron y levantaron el pulgar en señal de aprobación. Yo voltee hacia el horno de microondas y viéndome en su vidrio pude observar cómo, a decir verdad y sin alardear, el uniforme me quedaba bastante bien, posiblemente lo conservaría después de esta misión para algo más.

-¿Qué sucedió con Akeno y Asia? –Pregunte viendo a las chicas, quienes de inmediato se tensaron un poco -¿Hay algo que no me están diciendo?

-Tranquilo Ise, simplemente les contamos el asunto y les dijimos que no lo divulgaran a nadie –Respondió Bonnie sonriendo de forma tranquila para después abrir una brecha dimensional –Vamos, tenemos que ir a Kioto, Azazel-chan nos logró conseguir unos departamentos para quedarnos allá

-Ya veo, entonces vámonos –Exclame con cierta seriedad para después ver al techo –Mis padres ya están enterados que nos iremos, ¿Cierto?

-Eh… -Todas simplemente miraron a un lado pensando

-Esperemos hasta la cena –Exclame riendo para después caminar hacia el pequeño armario que teníamos en el piso inferior, y al abrirlo encontré dentro a Akeno y Asia amordazadas y amarradas -¡¿Qué está sucediendo aquí?!

Las chicas simplemente rieron nerviosas y de inmediato cada una se fue a su estilo de la casa, dejándome totalmente solo con Akeno y Asia, quienes me rogaban con los ojos que las liberara de inmediato de sus ataduras. De inmediato procedí a quitarle todas sus ataduras a las chicas, quienes una vez libres se abrazaron con fuerza a mi repegando sus encantos en mi pecho ¡Dios si no hubieran estado atadas hace unos momentos hubiera sido un sueño! Aunque… ¡No! No es momento de pensar en eso.

-¿Qué sucedió? –Pregunte intentando parecer lo más centrado posible en el tema

-Esas chicas nos explicaron la situación, después cuando nos íbamos a retirar dijeron que no podíamos decir nada y nos encerraron aquí –Respondió con molestia Akeno mientras unos ligeros rayos salían de su cuerpo –Voy a tener que darles un castigo

-No puedes Akeno, no por ahora al menos –Indique con una pequeña sonrisa –Después te dejare que las castigues, pero primero yo lo hare

-¿Ise es un sádico como Akeno-senpai? –Pregunto sorprendida Asia al tiempo de que se alejaba un poco de mi

-¡No, yo no…! –Pero antes de poder responder, Akeno se movió rápidamente a mi espalda y me abrazo ¡Sus pechos, sus pechos están en mi espalda!

-Asia-chan~ si a Ise le gustan este tipo de cosas, ¿Renunciarías a el? –Pregunto curiosa y con voz seductora la pelinegra a mi espalda, repegando aún más sus pechos en mi espalda

-Yo… yo… yo… yo… ¡Si a Ise le gusta yo lo hare! –Grito al tiempo de que corría hacia mí para abrazarme a sus pechos, no son tan grandes como los de Akeno ¡Pero Asia ha estado creciendo este tiempo que he estado fuera!

Mi cuerpo en verdad se estaba poniendo caliente, ¡Dios quería poder hacer cosas pervertidas con ambas! De forma inconsciente mis manos fueron hacia los pechos de Asia y suavemente estas comenzaron a acariciarlos, causando que el rostro de la rubia se sonrojara con fuerza y comenzara a jadear debido a mi acción. Akeno parecía estar confundida y Asia quería que me detuviera, pero mi mente se estaba nublando… en verdad deseaba hacerlo… ahora mismo quería…

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-¡Hentaiyarou! –Ddraig apareció de la nada y me dio un fuerte golpe lanzándome fuera de la casa por la ventana y haciéndome volar un poco más hasta caer en el jardín del vecino -¿Estas bien, Asia-san?

-¡Ha… Hai! –Grito un tanto confundida y temblorosa Asia -¿Qué sucedió?

-El idiota apenas se está recuperando de su "celo" –Explico Ddraig mientras se acercaba a la ventana y me veía con una pequeña sonrisa – ¿Ya estas mejor?

-Hai… -Respondí un poco adolorido mientras me levantaba –No tienes que ser tan ruda

-Eso te pasa por engañarme, todavía teniendo una hija y tu acosando a otras chicas –Me regaño con enfado Scarlet mientras iba hacia el sillón y cargaba nuestro huevo en sus brazos –Ven pequeña, mami ya castigo a tu pervertido padre

-Espera, ¿Cómo sabes que es una niña? –Pregunte sorprendido al tiempo de que regresaba de un salto a la casa –Amor… ¿Cómo sabes que es una niña?

-¡¿Amor?! –Exclamaron sorprendidas Akeno, Asia y la misma Scarlet

-Y-yo… bueno… después de lo que hicimos… creo que… sería normal decirlo –Conteste bastante apenado mientras rascaba mi mejilla -¿Te molesta?

-¡No, para nada! –Dijo de inmediato Scarlet para después bajar un poco la voz y mirarme con una pequeña sonrisa y un bastante marcado sonrojo en su rostro –Y… respondiendo a tu pregunta… instinto de madre

-¡Espera! ¿Ise tiene un hijo? –Pregunto sorprendida Akeno mientras me veía al igual que Asia

-Bueno… es una larga historia –

Scarlet y yo nos fuimos a sentar junto con Akeno y Asia en la sala, comenzando a explicarles todo nuestro "asunto" hasta llegar a la parte en que Scarlet y yo tuvimos un huevo. Por un inicio ambas se notaban bastante tristes, en verdad quería poder decirles algo para animarlas, más antes de poder pensar en que decir, Asia se acercó a Scarlet y con sumo cuidado cargo a nuestro huevo con una pequeña sonrisa.

-Bueno, si se irán será peligroso que lleven a su pequeña, yo la cuidare mientras tanto –Exclamo Asia con una pequeña sonrisa mientras arrullaba suavemente nuestro huevo –Además creo que Rassei me podrá ayudar un poco jeje

-Muchas gracias Asia-chan –Exclamo apenada Scarlet viendo a la rubia cargando a nuestro hijo, en verdad lucia muy tierna así

-Ara ara Asia está intentando sacar puntos con Scarlet-san –Exclamo riendo Akeno para después acercarse y acariciar el huevo –Tranquilo Ise, me asegurare de quien tu sabes no sepa nada de esto

-De hecho necesito que hablen con alguien por mí –Mire con seriedad a las chicas para después proseguir –Díganle a Kaichou que notifique a los Maou ocurrirá algo importante dentro de cuatro días en la academia Kuoh, a las 8:00 PM exactamente

-¿Qué planeas hacer Ise? –Pegunto Akeno mirándome con cierta preocupación

-Solamente demostrar que soy difícil de matar –Me levante y sonriendo con confianza me apunte a mí mismo –No se preocupen, todo estará bien

Akeno asintió sonriendo y después miro a Asia quien se notaba un poco pensativa sobre el asunto, realmente me siento curioso por saber que pasa por la mente de la pequeña Asia en estos momentos. Como si mi respuesta hubiera llegado, la puerta se abrió de golpe mostrando a un chico de cabellera color rosa y ojos ambarinos, quien de inmediato comenzó a buscar con la mirada por toda la habitación hasta que encontró a su objetivo.

-Asia-chan~ vamos a jugar –El pelirrosado entro a la casa y camino hasta Asia para después acariciarle la cabeza –Asia-chan, ¿Tu sabes donde vive esa persona súper fuerte que supuestamente parte cocos con las nalgas?

-¡¿Eh?! ¿De quién hablas? –Pregunto sorprendida y sonrojada la rubia mirando al recién llegado

-Del Sekiryuutei por supuesto –Respondió el de cabellos extraños para después mirar el huevo –Oh Rassei tuvo un hijo, ¿Verdad?

-No Ryuto-san, lo que sucede es que… -Las palabras de Asia fueron interrumpidas cuando me levante para ver al chico -¿Ise?

-¿Quién eres? ¿No te enseñaron a tocar? –Pregunte un poco celoso, pues hablaba muy familiar con Asia

-Oh perdón, mi nombre es Ryuto Amano –Se presentó el pelirrosado extendiendo la mano –Estudio en Kuoh en tu mismo salón, Ise-san

-¿En mí mismo salón? –Pregunte curioso mientras respondía su saludo, realmente nunca lo había visto en mi vida

-Sí, entre poco después que te fuiste y allí conocí a Asia-chan –Respondió el pelirrosado para después mirar a la rubia –Oh cierto, tenía que hacer algo importante… ¿Qué era?...

-Ryuto-san, mejor regresa en otro momento –Exclamo la rubia mientras empujaba ligeramente al chico pelirrosa

-Oh lo siento Asia-chan, vendré después jejeje –Ryuto camino hacia la salida para después darme una última mirada –Te veo luego, Issei-san

En cuanto aquel misterioso chico salió de la casa, Asia respiro tranquila y simplemente me miro haciendo con sus manos un ademan de que la disculpara por tan extraño acontecimiento. Sonreí y acaricie la cabeza de Asia para después ir hacia mi habitación, debía preparar algunas cosas para el viaje y en verdad tenía que hacerlo de forma urgente. Antes de irme, pude ver como Scarlet se quedaba hablando con Akeno y Asia, seguramente les indicaba los cuidados que tenían que tener con nuestro hijo, en verdad es una buena madre.

Alrededor de las 18:00 hrs. Mis padres llegaron a casa y les avisamos que saldríamos por unos días para hacer un pequeño viaje de estudio, a lo cual ellos dieron su aprobación, y luego de despedirnos, entramos por una brecha creada por Bonnie-chan, llegando a un parque de Kioto. Una vez estuvimos allí, Bonnie nos miró a todos y a cada uno nos entregó una pieza de ajedrez con una pequeña sonrisa en sus labios.

-Hemos comprimido el poder de todas tus piezas dadas por Azazel-chan para poder crear estas piezas, son más similares a las que tienen los demonios y son mejores –La pequeña pelinegra camino hacia una nueva brecha dimensional y nos dio una última mirada –Salieron 3 juegos, pero Ise-san solo puede tener uno por ahora

-Está bien –Mire la pieza de rey en mi mano y de inmediato la absorbí en mi cuerpo para después mirar a las chicas –Ustedes deberían reservar la suya hasta el momento de pelear, o nos detectaran con mayor facilidad

-Hai –

Nuestro pequeño grupo se dirigió hacia un edificio departamental, en el cual nos hospedaríamos en tres diferentes departamentos para poder cuidarnos igualmente ante cualquier ataque. Sacamos pajillas para ver como estaríamos acomodados, siendo que Circe y Raynare estarían en un departamento, Alessandra y Mukae dormirían en un departamento más y finalmente Scarlet y yo estaríamos en otro. Los departamentos con suerte tenían cerca de 8 tatamis, realmente eran cómodos a pesar de su reducido tamaño y nos ayudaría para no llamar tanto la atención.

Al ser ya tarde decidimos descansar esta noche y mañana planear nuestras acciones en el descanso de la academia, allí nos contactaría un "agente en cubierto" que habían enviado allí para apoyarnos. Estaba recostado en el futon que compartíamos Scarlet y yo, por alguna razón miraba al techo como se había convertido en una maña mía últimamente, posiblemente lo hago porque si miro lo suficiente hacia arriba poder ver la respuestas a mis preguntas o tal vez simplemente lo hago porque no tengo nada mejor que hacer en esos momentos.

-¿Otra vez pensando en cosas sin sentido? –Me pregunto Scarlet al tiempo que salía del pequeño sanitario que tenía la casa y caminaba hasta recostarse sobre mí

-No realmente… me preocupan todos los hechos actuales –Susurre al tiempo de que abrazaba a mi pecho a Scarlet –Desde el nacimiento de nuestro hijo hasta la reunión que tendremos con los Youkai e incluso el hecho de que tarde o temprano tendré que volver a verla…

-¿Qué piensas hacer cuando la veas? –Pregunto Scarlet curiosa mientras se acurrucaba en mi pecho

-Sinceramente… no lo sé… tal vez intente ignorarla o simplemente haga como que no la conozco… -Mire a Scarlet quien me sonreía levemente, para después besar su frente – ¿Tu que me recomendarías?

-Noquearla y dejarla en un bosque de Europa a que la violen los orcos y trolls –Fue la simple respuesta de la pelirroja para después besar suavemente mis labios –Mejor deja de pensar en ella y concéntrate en la hermosura que tienes ahora mismo frente a ti, ¿Si, Ise-chan?~

-Oh, ¿Por qué debería hacerlo? –Pregunte con una pequeña sonrisa de lado, mientras Scarlet gateaba sobre mí

-Porque cuando nuestro bebe nazca, nosotros no tendremos mucho tiempo para hacer cosas juntos –Suavemente Scarlet se acercó a mi cuello y comenzó a besarlo con lentitud

-Hmmm… pero si lo hacemos tendrás otro huevo –Mis manos fueron hacia las pequeñas nalguitas y comencé a masajearlas suavemente

-Tengo condón –Susurro a mi oído mientras lentamente comenzaba a abrir la pequeña blusa que usaba como pijama

-¿Ise-sama? –Exclamo Mukae-chan al tiempo de que entraba por la puerta, sonrojándose con fuerza al vernos como estábamos –Siento interrumpir, pero…

-¿Sucedió algo? –Pregunte de inmediato con preocupación

-¡No! Es solo que… tengo miedo –Mukae-chan se acercó a mí con la cabeza baja, mostrándome sus manos para que viera usaba sus guantes –Mañana regresare a mi escuela… ¿Y si me rechazan de nuevo? ¿Y si alguien me guarda rencor?

-Tranquila Mukae-chan, no debes temer a nada –Bese la frente de Mukae-chan y después la abrace a mi pecho con una sonrisa paternal –No tienes por qué preocuparte, ¿Si?

-¿Puedo dormir contigo? –Susurro Mukae-chan al tiempo de que se acurrucaba en mi pecho –Por favor Ise-sama

-Yo… -Mi mirada se fijó en Scarlet, ella lucia molesta más simplemente suspiro y asintió para después abrazar mi otro brazo –Esta bien, pero solo por esta noche, ¿Si?

-Hai… Ise-sama –Mukae sonrió para después aferrarse aún más a mi brazo y acurrucarse conmigo en el futon junto con Scarlet que se apodero de mi otro brazo

-Buenas noches, Scarlet, Mukae-chan –Cerré mis ojos y me dispuse a descansar todo lo posible, mañana sería un día bastante largo, al menos en mi opinión

Al día siguiente, todos ya estábamos vestidos para ir a la academia Himawari, a decir verdad todas las chicas estaban realmente bellas en su uniforme, pero el único problema era que Circe se colocó una cajetilla de cigarrillos en su hombro y llevo un gorro similar a un panda, el cual se notaba un poco viejo y sucio. Fuera de eso, todos íbamos vestidos de acuerdo a los estándares, pero para no llamar la atención nos dividimos, yendo Mukae-chan y yo junto a Scarlet por un camino, y Circe, Raynare y Alessandra por el otro camino.

La mañana en la academia realmente paso bastante rápido, puesto que simplemente me presentaron y después comenzaron las clases, con un pequeño examen de diagnóstico para ver cómo iba el grupo, ¡Esos exámenes se hacían semanales! Dios, no quiero imaginar que sucedería si tuviera que hacer esos exámenes cada semana en la academia Kuoh. Los resultados los dieron al instante, realmente me sentía abrumado al ver la calificación que me dieron en dicho examen.

-70… apenas logre pasar –Susurre mientras veía mi examen y después reía -¿Qué tal les fue a ustedes?

-Bueno, no estaba tan difícil realmente –Circe simplemente me mostro un examen con un gran 100 en color rojo, ¡Circe es increíblemente inteligente!

-Di lo mejor de mi jejeje –Alessandra me mostro un examen con un 95, realmente era una calificación bastante alta

-Perdí un poco la practica –Comento Mukae-chan mostrándome un examen con 99 –Antes lograba sacar el 100

-No te preocupes, si fueras a Kuoh realmente serias de las primeras en el salón –Sonreí y después acaricie la cabeza de Mukae-chan -¿Qué tal les fue a ustedes?

-Como siempre, excelencia en mi trabajo –Dijo con orgullo Raynare mostrándome su examen con un 100 al igual que Circe, en verdad ella está orgullosa por este logro

-¡¿A quién le importa un examen como este?! –Grito molesta Scarlet para después correr molesta, mas tropezó y dejo caer su examen junto a ella con un claro 15, y en cuanto me acerque a ella para ayudarla a levantarse, se soltó a llorar -¡No es justo! ¡Todo ha cambiado después de tantos años! ¡Antes era de las más inteligentes, no es justo!

-Ya tranquila –Inmediatamente ayude a Scarlet para que se levantara y la abrace a mi pecho –Cuando salgamos de aquí iremos por un helado, ¿Qué te parece?

-¿Crees que soy una niña pequeña? -Pregunto molesta Scarlet para después darme la espalda

-Sera de chocolate –Comente sonriendo, viendo como Scarlet inflaba las mejillas –Con nueces

-Está bien, te perdonare por ahora –Suspiro la pelirroja para después dejar su examen dentro del escritorio –Ahora mismo debemos atender el "otro asunto"

Asentí ante las palabras de Scarlet y junto con mi grupo fuimos hacia la azotea del edificio, allí nos encontraríamos con nuestro contacto e informante de los movimientos de los Youkai. Una vez llegamos allí, no vimos ningún alma en el lugar, solamente una banca de color blanco hecha de madera y varias masetas con flores de diferentes colores, realmente hermosas. Después de unos segundos, una enorme muñeca de vestido rojo con una forma similar a aun águila antropomórfica, bajo al tejado de la academia llevando en su espalda a un chico de cabellera blanca bastante larga, facciones finas y ojos de color rojo, sus ropas eran curiosas pues eran de color blanco con una especie de delantal de color azul marino con unas marcas similares a tres ojos de color rojo.

El chico peliblanco nos vio para después asentir y transformar a la muñeca en un diminuto monigote de papel, el cual guardo dentro de su bolsillo y después sonrió haciendo una pequeña reverencia. Nosotros hicimos lo mismo por educación, más yo no pude despegar mi vista del joven, algo en él se me hacía realmente extraño, pero no podía decir que era. Con una seña les indique a las chicas que fueran a los extremos de la azotea para cuidar que nadie nos estuviera espiando y a la vez nosotros pudiéramos defendernos de cualquier ataque.

-Mi nombre es Issei Hyoudou y vengo de parte de los dragones –Exclame presentándome con cierta seriedad extendiendo mi mano

-Un placer conocerlo Hyoudou-san, mi nombre es Akifusa Keikain –El peliblanco respondió el saludo con una pequeña sonrisa –Yo provengo de la familia Keikain de Onmyouji y hemos estado observando los últimos movimientos de la facción Youkai

-¿De los Onmyouji? –Pregunte sorprendido para después ver como el recién nombrado Akifusa asentía con calma – ¿Por qué nos están ayudando?

-Desgraciadamente en estos momentos carecemos de fuerza para enfrentar los problemas actuales debido a "ciertos inconvenientes" así que hemos decidido aceptar la tentadora propuesta de Jiraya-san sobre ayudarnos a resolver este problema –Explico el Onmyouji para después mirar a Scarlet –Un placer conocer a la gran dragón gales Ddraig

-En estos momentos llámame Scarlet –Dijo la pelirroja con una pequeña sonrisa para después cambiar a una expresión más seria -¿Podemos ir directo al punto? Siento que nos observan

-Eso es imposible, ninguna de las chicas ha percibido algo –Susurre mirando a los alrededores, realmente no parecía haber nadie allí

-Olvídalo, posiblemente estoy un poco paranoica –Scarlet miro a Akifusa y después prosiguió -¿Nos guiaras hasta donde se encuentra la central de la facción Youkai?

-De hecho ya están en ella –Exclamo sonriendo el peliblanco para después sacar otro pequeño muñeco de papel –Síganme por favor

Desde el pequeño muñeco salió una fuerte luz y este se transformó en una lanza que lucía ser realmente antigua. Akifusa nos dio la indicación de que diéramos unos pasos atrás y después de hacerle caso, dio un poderoso corte hacia el frente, abriendo una brecha en la cual se podía ver una especie de pueblo en una zona similar a donde se encontraba la ciudad, cosa que realmente me sorprendía. Era como si en lugar de la ciudad existía ese pueblo.

-Los Youkai viven en mundos de sombras, mundos superpuestos a este –Explico Akifusa para después pasar –Entren, no podemos dejar mucho tiempo abierto este portal

Sin dudarlo, todos atravesamos el portal lo más rápido posible, cerrándose detrás nuestro, más me pareció ver por el rabillo del ojo como dos figuras habían entrado al mismo portal, aunque en donde nos encontrábamos no había nadie. De inmediato intente percibir alguna presencia, pero tal parecía nos encontrábamos totalmente solos.

-¿Sucede algo? –Pregunto Alessandra curiosa mientras me observaba

-No, no es nada –Susurre para después comenzar a seguir al Keikain hacia el centro de operaciones Youkai