CAPITULO 1:Remembranzas
Era difícil contar uno a uno los recuerdos que había tenido durante toda su vida fueran buenos o malos, sin embargo, podía definir muy bien aquellos a los que se aferraba su corazón, en especial, de aquel del que estaba siempre acompañado colgado por tres pequeños cuadros sobre la pared cerca de su escritorio, sus largos y finos dedos alcanzaron a rozar uno de ellos evocando el día en que había sido tomada aquella fotografía, hay aparecía él rodeado de sus más allegados amigos, Ash y Misty. Sonrió de lado al recordarlo. Siguió el recorrido hasta toparse con otro, hacía más de tres años que aquella pintura había sido tomada después del normalmente caos ocasionado por el Equipo Rocket, y ahora, tres años después, aquello parecía ser solo una ilusión desvanecida por él paso del tiempo.
O:-Aquel fue un gran día, ¿no lo crees Tracey?, (se escucho una voz a sus espaldas)
T:-Profesor, (se sorprendió)
O:-Lo siento, no quería asustarte
Hacía seis años que Tracey se había convertido en el asistente personal del profesor Oak y ayudado en sus investigaciones, ya que siendo un joven observador y pionero del mundo, había colaborado enormemente en el campo de la investigación gracias a sus grandes conocimientos que podía decirse, rayaban en lo científico)
T:-No se preocupe solo estaba recordando viejos tiempos, (una sonrisa ladina se formo en su rostro cuando volvió hacia la fotografía)
También recordó que fue allí donde conoció por primera vez de una manera más abierta a los hermanos Petalburgo pues, la interacción que tenía con ellos solo era posible a través de un intercomunicador por un corto tiempo.
Max era un joven tranquilo con grandes conocimientos acerca de los Pokemon y profundos deseos de convertirse en entrenador, y May, ella era extrovertida, una coordinadora novata de su región quien poco a poco ganaba su lugar, ambos, en ese entonces compañeros de viaje de Ash en su recorrido por Hoenn, reconociendo de inmediato, lo agradables y leales que podían ser hacia el entrenador.
O:-Te entiendo, hace mucho que Ash no viene a Pueblo Paleta
T:-Si, y por eso no hemos podido reunirnos todos como en esta fotografía
Hacia cerca de un año en aquel entonces que el morocho no había pisado su natal Pueblo Paleta junto a su gran amigo pikachu, quien, según el profesor, le había causado serios problemas al entrenador al grado de ser electrocutado innumerables ocasiones gracias a su apático comportamiento.
Sus ojos viajaron nuevamente por aquel retrato hasta detenerse en una persona en especial… Misty, la joven pelirroja líder del gimnasio en ciudad Cerulien que, aprovechando un descaso y al enterarse en aquella ocasión de que el chico promesa de Kanto visitaría su hogar no dudo en ir a su encuentro reuniéndolos a todos en un solo sitio.
O: (Asintió suavemente), -Por cierto Tracey, casi olvido lo que venía a decirte, Misty está al teléfono, quiere hablar contigo
T:-Gracias Profesor enseguida bajo
O:-No demores mucho, a una dama no se le hace esperar, (esbozo una sonrisa antes de salir por la puerta)
T:-Lo tendré en cuenta, (también sonrío y echando un último vistazo a lo que había sido su distracción durante varios minutos se dispuso a salir. Aquella tarde había sido memorable, porque a pesar del tiempo y la distancia, sus lazos afectivos y de camaradería parecían seguir intactos… o al menos, eso quería creer…)
Los años pasaban y con ellos venían grandes cambios
…
El laboratorio del profesor Oak era mucho más grande de lo que aparentaba ser, y eso, contando solo la parte interior pues que tendría que recorrer un largo pasillo, bajar escaleras, y cruzar por dos amplias habitaciones para llegar a su destino, a veces se preguntaba por qué alguien como el profesor no tenía más teléfonos cerca de las habitaciones como la gente normal, eso le evitaría por mucho una innecesaria caminata a paso apresurado y la necesidad de tomar más oxigeno para sus pulmones, sin más, su mano se estiro tan rápidamente que casi tiro el teléfono antes de poder contestar.
T:-Si, Misty ¿sigues ahí?, (dijo al momento de colocar el auricular en su oído)
M:-¿Tracey?, (se oyó una voz del otro lado)
T:-Si soy yo, lo siento demore un poco… espera te pondré en la pantalla, (y tan simple como presionar un botón la imagen de la pelirroja apareció en el monitor), -Bien, así está mejor
M:-Ni que lo digas, (sonrío)
T:-¿Y, a que debo tu llamada?, ¿Está todo bien en Cerulien?
M:-Si no es nada importante, es solo, (un ligero rubor cubrió sus mejillas mientras nerviosa jugaba con sus dedos), -Bueno…, (apenada aparto su mirada de la de él)
T:-Necesitas que te ayude en algo ¿Cierto?, (Interrumpió después de seguir todas y cada una de sus nerviosas acciones, los años a su lado le habían enseñado a descifrar cada una de sus reacciones y lo que estas significaban, no por nada era observador)
M:-Lo siento Tracey, (junto sus manos a manera de súplica), -Es solo que necesito un poco de mano de obra, ¿Podrías ayudarme?
T: (Y en respuesta solo sonrió, su amistad con Misty había crecido considerablemente en los últimos años al igual que la confianza y estima, ya no solo era el joven compañero de años atrás con el cual viajo por todo el archipiélago naranja en el que solo los unía el compañerismo, sino que ahora era el joven a quien ella coloco en uno de los rangos más altos de amistad, casi tan equiparable a la que tenía con Ash)
M:-Verás ayer por la noche mis hermanas regresaron muy tarde de unas locaciones, y las muy despistadas olvidaron sus llaves así que solo lanzaron piedras hacia la ventana de mi habitación para tratar de despertarme, (suspiro derrotada)
T:-Déjame adivinar, rompieron el vidrio
M:-Ojala solo fuera eso… arrojaron una piedra tan grande que no solo acabo con el cristal sino que también logro despertar a Azurrill, el pobre se asusto tanto, que lanzo un chorro de agua por todos lados, esta demás decir que daño el sistema eléctrico en mi alcoba, (volvió suplicar con las manos unidas), -Tracey por favor, si hubiera sido otra parte de la casa créeme que llamaría a alguien para que lo hiciera pero sabes que no me gusta que extraños entren a mi habitación
T:-De acuerdo, te ayudare, (respondió dejando escapar un leve suspiro, a veces le sorprendía lo tímida que llegaba a ser Misty y lo dispuesto que él estaba en ayudarla siempre que podía aun si ella no se lo pedía), -Estaré ahí antes del medio día, ¿te parece?
M:-¿Antes de medio día?, (pregunto confundida), -¿Que hoy no tienes trabajo con el profesor Oak?
T: (Negó suavemente), -No te preocupes el profesor entenderá, además estos días no hay mucho que hacer en el laboratorio así que puedo ir en este mismo instante si lo prefieres
M:-Lo dices en serio, (sus ojos brillaron)
T:-Debe ser incomodo para ti estar en esa situación, así que entre más pronto lo resuelva podrás estar nuevamente cómoda
M:-No es nada que uno o dos días no se pueda soportar
T: (Sonrío suavemente), -Te veré en unas horas
M:-Gracias Tracey, eres el mejor, (y después de esto corto la comunicación)
T: (Tracey aguardo unos segundos más frente al video teléfono esbozando una pequeña sonrisa, hacía tiempo que había descubierto la agradable sensación de tranquilidad que le provocaba estar frente a la chica pelirroja y lo cómodo que se sentía cuando estaba a su lado)
O:-Tracey, terminaste de hablar con Misty?, (un profesor interesado se mostraba por la puerta)
T:-Si… necesita que la ayude con algo
O:-Ya veo, y ¿cuando piensas partir?
T:-Ahora mismo si es que no le importa
O: (Rió de buena gana, de sobra sabia lo servicial y condescendiente que podía llegar a ser su asistente hacia los demás, sobre todo, hacía las Waterflower), -De acuerdo solo trata de hacer un buen trabajo, quieres, (sin decir más se fue por donde había entrado pensando por unos segundos en la afinidad que ambos jóvenes compartían)
…
Era casi medio día cuando ya se encontraba a las puertas del gimnasio de Ciudad Cerulien en donde un enorme Dew-Gong sobre el gimnasio le daba la bienvenida como desde hace algunos años, decidió esperar unos minutos antes de entrar como era su costumbre, no sabía muy bien por qué lo hacía pero ese lugar le gustaba, era como su segundo hogar.
Sus ojos diestros viajaron por toda la recepción en busca de algún rostro familiar, más tuvo que adentrarse un poco para que fuera recibido por cierta rubia oji-verde quien presurosa corrió a su encuentro, y como siempre, solo para hablarle de todas las "cosas" maravillosas que había hecho al lado de sus hermanas en el tiempo en que él estuvo ausente y de otras que quizá pudieran hacer juntos, era cierto, Daisy se había convertido en una gran amiga al igual que Violet y Lily eso sin mencionar a la menor de las Waterflower pues lo veían como un miembro más de su familia, y eso para él era gratificante.
La voz de Misty no tardo mucho en resonar en sus oídos y su sonrisa se agrando al reconocer su figura entrar por la misma puerta que él cruzo minutos antes, y que al igual que siempre, parecía recibirlo con gran alegría. Sin duda esa joven le era maravillosa y creyó que no podía verse más perfecta, al menos para él. Su cabello encendido en un tono más obscuro caía sutilmente en cascada sobre sus hombros, pues desde hacía un par de años, había dejado de lado la típica coleta que la caracterizaba, llevaba puestos unos shorts azul cielo con un top blanco y un chaleco de igual tono azul deslavado por el frente con zapatillas rojas tipo sport, en lo personal su apariencia no podía lucir más fresca para aquella calurosa tarde de otoño.
M:-Hola Tracey, hace mucho que llegaste?
T:-Hola Misty, (primero saludo), -Acabo de llegar de hecho
D:-Si, y no hace ni cinco minutos
M:-Me alegra que no hayas tenido ningún contratiempo
T:-Así es, pude llegar en lo acordado… puedo preguntar, ¿De dónde vienes?
M:-Bueno… salí a tomar un poco de aire, (contesto dubitativa), -En verdad lo necesitaba
T:-¿A tomar aire?, (hizo expresión de incredulidad), -Y puedo preguntar ¿Por qué?
M:-Te lo explicare en cuanto lo veas…, no sabes cómo me alegra que vinieras a ayudarme
T:-No es nada, sabes que es un placer
D:-Awww Tracey, (se quejo)
Ambos jóvenes voltearon a ver a quien parecía una decepcionada joven actriz que hasta ese momento se había mantenido al margen de la conversación
D:-No me digas que solo viniste por que Misty te lo pidió, (pregunto desilusionada), -Y yo que pensé que venias de visita y que tal vez podrías llevarnos a Lily a Violet y a mí a hacer algunas compras, ya me hace falta maquillaje y solo me quedan algunos botes de mi esmalte favorito, además necesito a alguien que me lleve por la tarde a las locaciones de la última película que estoy filmando…
T:-Bueno… yo… (Respondió nervioso, era bien sabido el trato especial que a su modo las Waterflower tenían hacia el observador)
M:-¿Debes estar bromeando?, (reto), -Llame a Tracey para que me ayudara con la instalación de luz en mi habitación, te recuerdo quienes fueron las culpables?, (enfatizo)
D:-Azurrill por supuesto, (contesto sin mucha convicción)
M:-¿Qué dijiste?, (gruño molesta)
T:-Ya, ya, cálmate Misty, (hizo un ademan con ambas manos para que se calmara), -Por qué no entramos de una vez y me muestras que fue lo que ocurrió, (y colocándose tras ella se la llevo por los hombros antes de que una pelea se desarrollara)
…
M: (Suspiro derrotada), -A veces me pregunto cómo es que mis hermanas lograron manejar el gimnasio por tanto tiempo si en lo único que piensan son estupideces
T:-No digas esas cosas Misty, sabes bien que aunque ellas sean así ponían todo de su parte
M:-Tienes razón, creo que soy muy injusta con ellas a veces
T:-Ya… ya lo creó, (rió con nerviosismo)
Al encontrarse en frente a su alcoba Misty abrió la puerta y entro tan rápido como pudo seguida por él quien lo hizo más despacio, y por lo que veía, las cosas parecían ser más delicadas de lo que creía. Innumerables hojas yacían unas colgadas de un pequeño lazo que cruzaba la habitación de lado a lado mientras que otras estaban esparcidas sobre la cama, pequeño orden dentro del desorden, algunos muebles todavía seguían húmedos formando pequeños charcos sobre el suelo y eso sin mencionar el aire ligeramente frio que se colaba por el vidrio roto de la ventana.
T:-Vaya, Azurrill si que se entusiasmo… y hablando de él ¿en donde esta?
M:-Hace un rato lo lleve al centro Pokemon para que lo revisara la enfermera Joy y de esa manera asegurarme que no paso de un susto ya que desde hace algunos días el pobre ha estado muy nervioso, (y dando un nuevo vistazo por todo alrededor opto por volver a su antiguo trabajo antes de que decidiera salir)
T:-¿Qué estás haciendo?, (pregunto un poco confundido)
M:-Ah, esto, (sus manos se movían ágilmente tratando de secar algunos documentos que tenían un poco de agua con un pequeño trapo), -Son papeles de la liga, se supone que debería de enviarlos mañana por la mañana al comité Pokemon de Kanto, pero con esto, solo se ha retrasado
T:-¿Y ahora que vas a hacer Misty?, no creo que vayas entregarlos así, ¿o me equivoco?
M:-No, (Negó con la cabeza sin despegar su vista del escritorio), -Por fortuna, Zarina, una de las secretarías de la elite me hizo el favor de entregarme de nuevo los formatos, y sabes algo, no fue fácil convencerla, (saco un pequeña memoria de su bolcillo)
T:-Y es por eso que llegaste poco después que yo ¿cierto?
M:(Asintió ligeramente apenada por haber sido descubierta),-Lo único que me preocupa ahora es perder la información de los entrenadores que tenía en estos documentos, algunos ya se ven borrosos ¿no crees?, (tomo una hoja y se la mostro al observador)
T:-¿Y crees que lo lograras?
M:-Eso espero Tracey, (respondió sin mucho ánimo)
El joven observador pensaba que aunque fuera una tarea titánica Misty la realizaría, sin embargo, por el tono de voz empleado y estudiar sus facciones sabía que eso no le sería nada fácil, y con un "ahora vengo" de su parte había salido unos minutos para más tarde regresar con una caja llena de herramientas entre sus manos, lo mejor era enfocarse en su trabajo dejando a la joven realizar el suyo sin ningún tipo de interrupciones o distracciones. Lo primero por hacer era restaurar la electricidad en la habitación ya que esta consumiría la mayor parte de su tiempo, logro que logró hacer horas después tras un arduo trabajo. La luz había vuelto, le había costado, pero al final lo había logrado, ahora solo restaba un pequeño detalle que no tardaría más de 20 minutos en realizar, la ventana.
Tracey lucho algunos segundos tratando de equilibrar torpemente un marco de metal después de que su mano chocara contra este y antes de que terminara por ceder en el suelo, su cuerpo se inclino hacia el piso para tomarlo por la parte trasera, al incorporarse nuevamente y voltearlo no pudo si no abrir sus ojos en autentica sorpresa… era ella, en ese retrato se encontraba Misty y a su lado había alguien más y ese alguien no era otro si no Ash. Ella lo tomaba del brazo mientras una gran sonrisa se fijaba en su rostro entretanto él, sujetaba de su gorra con la mano libre pues parecía haber sido tomado desprevenido y con algo de impulso, ambos, justo en el ángulo correcto frente a la cámara. Inconsciente sus dedos se apretaron contra el metal.
M:-Que bien, pudiste arreglarlo, (dijo haciendo referencia a la electricidad al momento en que entraba nuevamente a la habitación), -Dime, ¿te costó mucho trabajo?
T:-No te preocupes, lo importante es que ya está arreglado, (le respondió saliendo levemente de su estupor)
M:-¿Tracey estas bien?, (se acerco al joven quien apenas parecía prestarle atención)
T:-Por supuesto, ¿por qué no había de estarlo?, (el observador era consciente de los sentimientos que la chica tenia hacia el entrenador que, aun a pesar del tiempo y la distancia estos parecían estar latentes, y eso… dolía), -Yo… no había visto esta fotografía antes, (se la mostro tratando de parecer normal)
M: (Su semblante cayo inmediatamente), -Bueno… hace algunos días la encontré dentro de uno de mis libros… Brock la tomo un poco antes de que terminara nuestro viaje por Jhoto, (fue lo único que dijo antes de volver a sus deberes tratando de no mostrar mayor interés en el tema pues no comprendía desde cuando hablar de su "gran amigo" le causaba mayores complicaciones)
T:-Ya veo, (no sabía cuánto tiempo había permanecido observando el retrato y la verdad no le importaba, aquella fotografía tenía un tinte especial de lo que en días pasados fue la armonía y complicidad entre los dos entrenadores, y que de igual manera pensó, jamás podría igualarse a la que él ahora tenía con Misty al verse también reflejado también sobre el cristal)
Cerro sus ojos unos momentos tratando de recordar el día en que empezó a mirarla de una forma diferente, lo sabía, y aun así no estaba tan seguro, y fue desde que ella había regresado de su viaje por Jhoto siendo casi obligada por sus hermanas a tomar su lugar como líder de gimnasio mientras que ellas tomaban unas glamurosas vacaciones durante el largo periodo de un año. Jamás imagino que gracias a sus constantes visitas y viajes improvistos al lado de la pelirroja lo llevarían a forjar el más grande de los respetos y la suma admiración con la que día a día se retroalimentaba, y solo el tiempo diría, que aquello era un asunto peligroso
T:-¿Aun lo esperas?, (pregunto tranquilamente sin esperar demasiado)
M:-¿Qué?, (volteo a verlo), -¿De quién…, (inmediatamente cayó al notar que Tracey no había soltado ni dejado de mirar el retrato que sostenía entre las manos)
T:-Dime, ¿aun lo esperas?, (volvió a preguntar de forma casi monótona)
M: (Aquellas palabras dichas por su joven amigo tenían una connotación diferente a la que hubiera esperado, reconocía sus palabras y el punto al cual quería llegar, más era un tema difícil de tratar aun con tantos años de por medio), -Yo… no se dé que me estas hablas
T:-Sabes perfectamente a lo que me refiero Misty, (espeto tranquilamente lúcido de estar pisando terreno prohibido sin tener un punto de retorno, seguía sin entender el verdadero significado de cada palabra que salía de su boca o lo que esperaba que estas causaran al ser pronunciadas)
Misty era hermosa e inteligente, con un carácter tan fuerte e irascible que haría que hasta el más malhumorado de los garyados se sintiera acobardado y eso, en algún insano punto lo emocionaba. Siempre pensó que ella era como el agua, cambiante y cristalina. La profundidad de sus ojos no tenían comparación y aquella solo había sido sino una más de las razones para sentirse atraído hacia ella. Decidida y audaz, terca y fácilmente irritable, jamás creyó que tantos defectos podrían convertirse también en sus más apetecibles virtudes, y que él como principal espectador, podía fácilmente degustar
También conocía a la perfección el hecho que desde hace algunos años un abismo había crecido separando a ambos entrenadores debido a sus diferentes objetivos que no solo los afectaba en sus crecientes carreras, sino que también, en lo que alguna vez llamaron amistad y en el caso de la joven, la ilusión de su primer amor a la cual parecía seguir aferrada
T:-Sabes… yo creo que… deberías continuar con tu vida
M: (El sonido de algunos papeles cayendo resonaron en la habitación)
T:-…Te mereces algo mejor, (era consiente en todo sentido del efecto y daño causado, y aun sin mirarla, pudo deducir lo contrariada que la joven se encontraba recogiendo del suelo lo poco que había dejado caer pensando quizá en lo "loco" que se había vuelto o que beedrill lo habría picado, no era que tuviera algo en contra del entrenador puesto que era uno de sus mejores amigos, pero nadie mejor que él, sabía por todas las desilusiones que había pasado la pelirroja cada que el morocho regresaba Pueblo Paleta sin hacerla participe de su llegada, o de todas aquellas ocasiones en las que el joven parecía más interesado por otras personas y sus respectivas carreras que por la de ella misma)
Y en medio del silencio, sus ojos se cerraron algunos segundos antes de volver el retrato en su lugar, quizá había cruzado la línea en un intento frustrado de reafirmar lo ya sabido y habiendo hecho eso, se dispuso a acabar con lo poco que le quedaba por hacer ya que era lo mejor para aquel momento. No se arrepentía por lo dicho y esperaba que con eso su muy querida amiga pudiera reparar más claramente en sus emociones sin importar que hubiera sentimientos involucrados de su parte. Sus manos diestras tomaron la herramienta adecuada para poder aflojar el cristal roto dejando que los leves rechinidos llenaran la habitación que minutos antes se había sumido en un profundo silencio, sin embargo…
M:-No creo que esperar sea la palabra correcta, (dijo con voz baja evidenciando su actual estado melancólico)
T:-¿Cómo?
M:-Siendo sincera… creo que desde hace mucho deje de hacerlo, (sus ojos y manos seguían en su labor solo que más lento, alineaba los papeles en turno y colocaba sobre ellos un clip mientras seguía organizando otro tanto siendo incapaz de mirar al observador quien se mantenía paciente en espera de sus siguientes palabras), -Aunque… hay algo que si me duele…
T:-Misty, (susurro quedamente)
M:-Creo que Ash ya no piensa en mí, (esta vez se atrevió a levantar la vista, afligida como se sentía se aferro a lo que en esos momentos valía todo para ella, Tracey)
Para ella no era raro que Tracey conociera realmente sus sentimientos hacia el entrenador, de alguna manera estos siempre quedaban expuestos en una u otra forma aun sin quererlo, pero eso era todo, nadie aparte de él conocería lo que realmente había en su corazón aunque los demás juraran saberlo, de igual forma, todo quedaba en especulaciones que ella nunca se encargaría de reconocer, tal y como lo había hecho siempre
T:-Discúlpame Misty, por mi culpa tuviste que recordar momentos tristes, (respondió sincero e igualmente afligido, no hacía más que golpearse internamente por haberle causado daño a quien no lo merecía)
M: (Negó suavemente con la cabeza esbozando una ligera sonrisa), -Perdóname tu a mí, no sé por qué te dije eso… así que lo mejor será olvidarlo
Y una vez más ambos dejaron que el silencio los cubriera antes de sumirse cada uno entre propios pensamientos que sin duda los llevaba a rumbos diferentes pero con un destino en común… el entrenador
T:-Sabes, creo que Ash es un tonto, (pronuncio después de minutos de mutismo y sin notarlo, sus labios se curvaron en una ligera sonrisa al contemplar nuevamente a la joven frente a él), -No tiene derecho de hacerte sufrir de esa manera
M:-Tracey, (lo miro confundida)
T:-Yo en su lugar… yo en su lugar… jamás te habría abandonado Misty… nunca te haría sufrir
No sabía exactamente lo que había sucedido, aquellas palabras que aun flotaban en el aire no pudieron haber sido distorsionadas, al menos no para él, porque ya todo estaba claro
Tracey jamás la haría sufrir, nunca la dejaría