¡Buenos días/noches! Oooh, ¿que tenemos aquí? Si señoras y señores, un nuevo fanfic con 28 capítulos :D ¿Buscan una lectura que tenga absolutamente de todo? Sean bienvenidos entonces :3 Conocí este fanfic gracias a un PM de E's-pen, así que ovaciones para él. Nuestra protagonista esta vez sera la elegante violonchelista Octavia, que tendrá que ir a Ponyville, donde obviamente se encontrara con demás ponys de fondo y Mane 6. Si, es una temática muy común en el fandom, pero no se dejen engañar. Esta historia tiene mucho que ofrecer.

Recuéstense en sus sillas, porque esto empieza...

La Orquesta Real de Ponyville

Escrito por Distaff Pope y traducido por MIkimoco

Día 1: Exiliada

¿Pueden ponerse peor las cosas? C̶̶̶a̶̶̶s̶̶̶i̶̶̶ ̶̶̶t̶̶̶o̶̶̶d̶̶̶a̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶m̶̶̶i̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶i̶̶̶o̶̶̶n̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶t̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶r̶̶̶e̶̶̶n̶̶̶a̶̶̶l̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶t̶̶̶á̶̶̶n̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶d̶̶̶i̶̶̶d̶̶̶a̶̶̶s̶̶̶,̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶t̶̶̶o̶̶̶y̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶x̶̶̶i̶̶̶l̶̶̶i̶̶̶a̶̶̶d̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶m̶̶̶i̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶i̶̶̶u̶̶̶d̶̶̶a̶̶̶d̶̶̶ ̶̶̶n̶̶̶a̶̶̶t̶̶̶a̶̶̶l̶̶̶,̶̶̶ ̶v̶̶̶i̶̶̶v̶̶̶i̶̶̶e̶̶̶n̶̶̶d̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶n̶̶̶ ̶̶̶u̶̶̶n̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶u̶̶̶e̶̶̶b̶̶̶l̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶l̶̶̶l̶̶̶e̶̶̶n̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶l̶̶̶o̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶y̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶n̶̶̶ ̶̶̶u̶̶̶n̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶D̶̶̶J̶̶̶ ̶̶̶i̶̶̶n̶̶̶c̶̶̶u̶̶̶l̶̶̶t̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶m̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶m̶̶̶p̶̶̶a̶̶̶ñ̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶u̶̶̶a̶̶̶r̶̶̶t̶̶̶o̶̶̶,̶̶̶ ̶̶̶u̶̶̶n̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶r̶̶̶i̶̶̶n̶̶̶c̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶f̶̶̶u̶̶̶r̶̶̶i̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶n̶̶̶m̶̶̶i̶̶̶g̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶y̶̶̶ ̶̶̶o̶̶̶t̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶p̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶n̶̶̶d̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶q̶̶̶u̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶h̶̶̶a̶̶̶g̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶l̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶i̶̶̶m̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶i̶̶̶b̶̶̶l̶̶̶e̶̶̶.̶̶̶. No, si este diario tiene que tener una crítica catártica, no puedo quejarme sin dar una apropiada actualización, así que se supone que debo volver a mi último día en Canterlot para explicar cómo las circunstancias me obligaron a venir a Ponyville.

Desperté esa mañana, con mi taza de té para rememorar adecuadamente los acontecimientos del día anterior mientras planeaba el curso del nuevo día, luego pasé las próximas tres horas practicando con mi violonchelo. Después de eso, fui a hablar con el conductor en una reunión que él había programado un par de días antes. Asumí que era para discutir mis ultimas actuaciones y para asegurase de que yo estaba esforzándome para salir y socializar más. Él recientemente se había hecho la idea de que mi dedicación a mi oficio de alguna forma estaba perjudicando mi desarrollo social.

Recibí la primera indicación de que las cosas no iban a suceder según lo previsto, cuando entré en su oficina y me encontré con que las princesas reales lo rodeaban. Mientras me inclinaba ante ellas, trate desesperadamente de pensar en qué cosa posiblemente había despertado en ellas un interés por mi; yo había causado un gran revuelo hace unos años cuando me convertí en la primera pony terrestre violonchelista en unirse a la Orquesta Real de Canterlot y había sido invitada a tocar para la Gran Gala del Galope y la Fiesta del Jardín Ecuestre, pero después de eso desaparecí del ojo del publico para trabajar en perfeccionar aun más mi oficio, y la princesa tampoco se había molestado en decirme algo. También estaba mi breve encuentro con la Princesa Luna, pero eso había sucedido hacia años y no había hablado con ninguna de ellas desde entonces.

—Por favor, siéntate Octavia—, dijo la Princesa Celestia, y rápidamente cumplí con su petición.

—SABEMOS QUE NUESTRA PRESENCIA AQUÍ ES INESPERADA, PERO NO TEMAS, PORQUE TRAEMOS BUENAS NOTICIAS—, dijo la Princesa Luna, cuando me reuní con ella hace años, ella previamente había dejado de utilizar la Voz Real de Canterlot, cosa que la mayoría de los ponys que vivían en un radio de varias millas alrededor del castillo se habían familiarizado bastante, tomándolo como una consecuencia de su regreso. Aparentemente, o ella tuvo una recaída o estaba intentado fastidiar a algún pony (Muy posiblemente a mi, porque…bueno, no voy a rememorar nuestra ultima reunión)

—Si, gracias hermana—, dijo Celestia, haciendo una mueca cuando su hermana habló, —Lo que queremos decir, es que nos reunimos con el Sr. Pianissimo para decirte que serás promovida del tercer puesto al primer puesto

—Disculpe, princesa—, le dije, luchando para mantener la compostura mientras la sangre subía a mi cabeza. —¿Acaba de decir que quieren que yo ascienda al primer puesto?

—Exacto, mi pequeño pony, sé que esto es algo repentino, pero el Sr. Pianissimo me aseguró que tú eres uno de los ponys más trabajadores que jamás ha conocido.

—POR ESA RAZÓN, HAS SIDO ELEGIDA PARA AYUDAR EN LA FORMACION DE LA NUEVA ORQUESTA REAL DE PONYVILLE.

"Ella esta intentando fastidiarme entonces", pensé. Mi humor pasó de la sorpresa eufórica a solo sorpresa. Iba a ser enviada a Ponyville, un pueblo que era completamente desconocido hasta que la nueva princesa de Equestria estableció su residencia allí.

—Aunque me siento muy halagada, princesa—, dije, —Creo que alguien más experimentado podría hacer un mejor trabajo para formar su Orquesta de Ponyville.

—DIJIMOS LO MISMO; PERO EL SR. PIANISSIMO NOS ASEGURO QUE USTED ES EL PONY PERFECTO PARA EL TRABAJO. TAMBIÉN DIJO QUE ES LOGICO QUE UN PONY TERRESTRE FORME LA ORQUESTA, DADO QUE PONYVILLE FUE ORIGINALMENTE FUNDADA POR PONYS TERRESTRES.

Así que, Luna no estaba tratando de fastidiarme (necesariamente), el Sr. Pianissimo estaba tratando de deshacerse de mi, un pony terrestre quien ni siquiera debería ser capaz de atar un moño correctamente y que estaba haciendo quedar mal a sus unicornios.

—Si, el Sr. Pianissimo fue muy insistente, y después de varias horas de discusión, finalmente acordamos que tú eres la candidata ideal para el trabajo—, dijo Celestia, sonriendo con benevolencia mientras el Sr. Pianissimo trataba de ocultar su sonrisa. —Este es un gran honor, y sé que puedes formar una orquesta digna de mi hermana.

—Espera, ¿qué?—, pregunté, intentando entender cómo Luna se involucró en esto. ¿Por qué en Equestria ella iba a formar su orquesta en Ponyville? Canterlot tiene tamaño de sobra para soportar dos orquestas, e incluso si ella quisiera distanciarse de su hermana, no tenía necesidad de ir a Ponyville. Nunca habría una situación tan grave que requiriera que un pony fuera a Ponyville.

—Es bastante simple en realidad—, dijo Pianissimo, entrando finalmente en la conversación, —Has sido…—, pude verlo luchar para suprimir su sonrisa, —…elegida para hacer una orquesta únicamente superada por la Orquesta Real de Canterlot en el…encantadoramente rustico pueblo de Ponyville—. Tal vez él podría ir a formar una orquesta en la luna, o mejor, en el sol.

—Muy bien—, dije, —Si estas tan seguro que no vas a reconsiderarlo, con mucho gusto voy a tomar esta generosa oferta, solo dame un par de semanas para empacar mis cosas y para encontrar una casa en Ponyville.

—ABSURDO. LA ORQUESTA NECESITA ESTAR LISTA PARA SU PRIMER ACTO ANTES DE LA CELEBRACION INVERNAL DE LA LUNA. TU ALOJAMIENTO YA FUE RESERVADO Y TUS POSESIONES FUERON EMPACADAS MIENTRAS HABLABAMOS. EMPEZARAS EL VIAJE CON EL PRIMER BRILLO DEL SOL POR LA MAÑANA.

Eso fue todo, mi vida en Canterlot había terminado, las princesas y yo hablamos un poco más, pero la verdad es que yo no estaba prestando atención. Estaba demasiado ocupada pensando en cómo me gustaría pasar mis últimas horas en Canterlot antes de decidir el curso de acción apropiado. Espero que las princesas no dijeran nada muy importante durante ese tiempo. Una hora más tarde, abandone la oficina, coloque sobre mi espalda el estuche de mi violonchelo y fui a observar por ultima vez mi adoptada ciudad natal.

Aunque soy de Manehattan por nacimiento, siempre me pareció que esa ciudad es demasiado llamativa y brillante, como si desesperadamente intentara impresionar a todos con su opulencia. Durante la mayor parte de mi juventud, me encontré anhelando estar en una ciudad que poseyera una verdadera sofisticación y majestuosidad, una absoluta confianza en uno mismo que los nuevos ricos de Manehattan no tienen. Encontré esa gracia cuando hice mi primer viaje en tren a Canterlot. Incluso en la lejanía, mis ojos se sintieron atraídos por las torres majestuosas y los arcos suavemente pronunciados. Más tarde, mientras recorría las calles de la ciudad, vi un cuarteto de cuerdas tocando en una cafetería estilo parisino y allí vi mi primer violonchelo.

No podía creer que había logrado vivir durante diez años sin ver tal magnifico instrumento. Era elegante sin ser ostentoso, y encajaba perfectamente con mis teorías pre-adolescentes de refinamiento. Antes de darme cuenta, estaba caminando hacia el semental que lo tocaba, tenía que tocarlo, sostenerlo con mis cascos solo una vez. La banda terminó su canción, "La belle fille de lune", al acercarme al violonchelista, y antes de que él pudiera continuar con su próxima canción le pregunte si podía sostenerlo por unos segundos. Él sonrió y me lo permitió, y hasta la fecha, todavía sin saber por qué, le doy gracias por su generosidad. Era demasiado pequeña para mirar por encima del violonchelo, pero el arco encajaba en mis cascos perfectamente y en ese momento sentí como si hubiera descubierto mi vocación (Yo nací con cascos muy maleables, una rara condición que resultó beneficiosa en mi trabajo y también me permitió ser una de las pocas yeguas en Equestria capaces de escribir con sus cascos)

Seria bueno decir que mi primera actuación con el violonchelo fue una obra maestra tan perfecta que hizo llorar a los sementales, pero eso seria poco realista. En realidad, fue un terrible y ruidoso desastre que para mejor logró alcanzar un rango apenas adecuado, pero fue suficiente. En ese momento, sabia lo que quería hacer con mi vida; iba a pasar cada día aprendiendo a tocar el violonchelo como merecía que se lo tocara. Cuando terminé mi actuación, bajé el arco, porque eso es lo que uno hace cuando termina una canción, y los espectadores aplaudieron educadamente. Mis padres se precipitaron para decirme que había obtenido mi cutiemark, una clave de sol púrpura que coincidía con el color de mis ojos. No me importó. Había descubierto el violonchelo, el resto era inmaterial.

Y ahora, estaba obligada a irme. Irme de la ciudad que me enseñó lo que significa ser refinado. Irme de la ciudad que me había dado mi cutiemark. Irme de la ciudad que me había dado mi violonchelo. Irme de de la ciudad que había formado a la yegua que soy ahora. Aun así, si debía irme, entonces al menos podía darle a la ciudad un último regalo antes de partir. Caminé hacia los Jardines de Equestria, tomé el violonchelo de mi espalda y comencé a tocar. Empecé con "La Guerra Lunar" y continué con "El Lamento de Celestia". Ambas canciones son sobre la caída de Luna y su destierro, después me di cuenta de eso. Como un concierto, no era mucho, pero los ponys se detenían a escucharme, algunos aplaudieron, otros incluso intentaron darme dinero, y me gusta pensar que mis actuaciones hacen que sus días sean un poco mejor. Dos horas más tarde, terminé mi interpretación improvisada, y me dirigí a mi apartamento.

Entré en casa para encontrarme adentro con la Princesa Luna, esperándome. —Me alegró que por fin regresaste, temía que habías partido hacia Ponyville antes de tiempo—, ahora ella volvía a hablar como un pony normal.

Como si leyera mi mente, ella respondió, —Ah, debo pedir disculpas, estaba usando la Voz Real de Canterlot esta mañana porque sabia que eso molestaría a mi hermana. Ella odia que le recuerde que ella no pudo adaptarme a la sociedad moderna equestre. Y puesto que ella me esta obligando a realizar mi orquesta en Ponyville, pensé que podría utilizar eso para recordárselo—, la princesa sonrió, fue…raro verla bromear y actuar como un pony normal después de su pequeña actuación de ese día, y era incluso más raro ver que ella no estaba molesta conmigo. No es que estuviera quejándome.

— Espera, ¿quieres decir que no quieres elegir a Ponyville?—, le pregunté, comprendiendo finalmente lo que estaba diciéndome.

—Por supuesto que no, aunque yo tengo varios amigos en el pueblo, es demasiado pequeño para soportar una orquesta completa. Eres afortunada si logras formar un cuarteto de cuerdas.

—Así que, ¿por qué elegiste a Ponyville si sabes que no puede albergar una verdadera orquesta?

—Porque Celestia es mi hermana y una vez que ella tiene algo en mente no puedes detenerla. Ella quiere que Ponyville se convierta en una ciudad propiamente dicha, y para eso, se necesita una orquesta adecuada. Le había expresado mi deseo de reformar la Orquesta Real Lunar y ella decidió matar dos pájaros de un tiro—, Luna se encogió de hombros, parecía que estaba acostumbrada a la intromisión de su hermana.

—Ah, ya veo, así que…¿hay algo en particular que quieras hablar conmigo o…?—, O simplemente decidiste entrar a mi apartamento sin razón, pensé.

—Si, claro. Si bien entiendo que estarás ocupada tratando de formar una orquesta completa en Ponyville—, la princesa rió, —Quiero que te tomes un tiempo para disfrutar del ambiente local. No hay muchos pueblos como Ponyville, y seria una pena que no pudieras experimentarlo por ti misma.

—Por lo tanto, para aclarar, ¿tu entraste en mi apartamento para decirme que me…divierta?

La princesa asintió. —Eso y hacer amigos. Hablando de eso, asegúrate de saludar a Twilight Sparkle de mi parte. Buenas noches, Octavia.

Me incliné ante la princesa mientras abandonaba mi apartamento. Después, caminé por todo mi antiguo hogar. Había logrado colocar todo lo que tenía en tres cajas, bueno, todo excepto mi violonchelo. Nunca podría confiárselo a algún pony de mudanzas. La cama que venia con el apartamento estaba intacta, y después de pedir una pizza, toqué mi violonchelo durante una hora, me quité mi moño y fui a dormir. Mañana iría a Ponyville.

Wow, que buena introducción :D En pocas palabras, el autor ya nos presento a Octavia. Como pueden ver, aquí es refinada al extremo. Ademas, tiene una misión similar a la de Twilight al principio de la serie. Estas princesas deberían innovar un poco, ¿no? ¡Nos vemos en el siguiente cap!