Hey hey hey!, sup' bitc *esquiva pañales sucios, balones, balas, tomates, y huevos podridos* QAQ Lo sientoooooo! De verdad! Me odio con todo mi kokoro por haberlas hecho esperar dos semanas! en serio!, pero es que escribir en inspiración no funciona! Queda feo el cap! Y tonces no gusta!, en serio lo siento, no me odien! Aquí lo tienen, no las entretengo más, ya respondo reviews:-
Enjerekuso Usuyase:- tranquila, no problem con eso. Normal que la metan hasta el fondo, son ellos, no por nada los llaman la generación de los idiotas(¿). Siiiiiiii! xD se dieron cuenta de que la cagaron aun mas de lo que debían! El juego es de lo mas genial *w* debes matar a todas las que se enamoren de tu sempai (y te juro que pensé en Kise con eso xD me gustaría que hubiera un peinado rubio que no fuera el de vegeta, para decir que es fem-kise :V). no, no, eso lo vas a ver ahorita .v. con Kise es imposible que los odie de verdad, solo lo dijo porque estaba frustrado, pero Kise es un pan de Dios, los perdonara QwQ. Quien no? Disfrutar al máximo las vacaciones = acostarse a las 5 am y dormir hasta las 2 pm xD. Gracias! Espero que te guste este que viene, me estuve matando para terminarlo, y el siguiente si no se tarda (Isa:-mentiraaaa. Nana:- shut the fuck up!).
Karu-suna:- sempai! Holis QwQ! (por jashin! Yo también uso esa expresión! xDDD) soy malvada y como le digo a una amiga, yo respiro maldad, la como y desayuno, es muy nutritiva, sabes?. Yah yah, sufrieron por 10 caps xD mucho, yo los aprecio. Son demasiado animales ¬¬. Pero Kise se va a dejar querer, el no aguanta mucho sin dejarse xD hablamos del pan de Dios Kise Ryouta. No importa, gracias por tomarte la molestia en leer el fic QwQ, aquí está la conti! QwQ
Mimichibi-Diethel:- si, a decir verdad me queda un poco lejos xD, muchas gracias por la idea, cariño~ hahahahahhaa. Me siento tan malvada~. Oh eso? Sii xD, y si, ya tiene que enfrentarse a esto. Muhuhuhuhuh…. Muahahahahahhahahahahhahahahahhahahahhahahhahahhahahha! *cara de psicópata* (sorry por los dedazos, es que no me lo betearon) a leer…. Muhuhuhuhuhu upupupupupupupupupu~
Soy may:- lose, lose, son unos estúpidos, pero ¿Qué mas se puede hacer? Asi son ellos, y se les quiere con idioteces y todo xD. No, vale, tranquia, no es como si fuera a morir ni nada *silbidos inocentes* no señor xD . tranquila, no son puros insultos, es que tu no has visto un review mio cuando estoy molesta, eso si que es una bomba de groserías xD. Hahahaha, aquí esta el cap!
Hisamicchi:- todas dicen eso xD! Son muy pendejos, pero ya lo van a arreglar… o tal vez no lo hagan… muhuhuhhahahahahahahahahahahahahaha! Ok no xD. Gracias, en serio. dsfruta del cap!.
Guest:- hahahahahahahaha xD me encanta crear este tipo de reacciones en mis lector s! probablemente, yo me nutro de su sufrimiento, tu sabes, como los dementores xD. Ellos siempre la cagan, pero estaban frustrados al igual que Kise. Noh noh, puede que lo logren… o puede que haya funeral *silbidos inocentes* es que es absurdo pensar que no forma parte de ellos cuando él mismo sabe que es un idiota xD. :V Akashi tiene claro que la cago. ( tu comen me dio tanta risa xD, creo que mori!, amo esto!) hay gracias, que bueno que te guste cuando cortamos los caps, me alegra mucho xD. Es que a Takao le gusta el dolor, todos lo sabemos xD eeeeem, pues, eso se sabra… en el cap…. Tal vez… tienes que leer xD! No hay de que, disfruta este!
Naye:- son unos imbéciles, ya lo he oído unas mil veces y lo sigo afirmando, no se si es de nacimiento o donde lo aprendieron pero su nivel de estupidez compite con el mio ¬¬. No vale, yo tambien pensé en hacerlo yandere por un min, pro no quedaba con el adolorido kokoro de Kise en ese momento -.- todas queremos meternos allí y apapacharlo con amorps y decirle que nosotras lo queremos Q-Q . tranquila, me alegra que sigas el fic QwQ. No me mates QAQ!
Onodera Sophie:- hehehehehehe, me encanta darle en los feels a la gente, amo hacerlo, disfruto de hacerlo xD. Hahahahaha! Yo también odio hacerlo sufrir pero al mismo tiempo lo amo!. Si, si, se van a reconciliar… en el funeral… muhuhuhuhahahahahahahahahahahahaha! Ok no xD. Ya me han suplicado eso, soy imune a las suplicas de las lectoras *se sopla las uñas(¿(* tranquila que aquí esta la conti, espero que te guste!
Sophia:- no hay por donde xD, tenga agua, yo se la doy, solo a 99.95! esta en oferta (¿). Hahahahahahaha, venir… hahahahaha si, Yukio, hahahahaha venir, si, hahahahaha xD ok no xD. Eh no ._. no vendrá, lea para que sepa! (habrá funeral) (¿).
Nanami:- chinga tu madre :D esos fueron muchos Review! Me siento feliz de que lesguste mi fic! Gracias! Lamento haberles hecho esperar! Aquí está el siguiente cap!
Isabella:- Disclaimer:- Kuroko no Basuke no nos pertenece.
Nanami:- ahora, A leer!.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Chapter 13:- ''we sorry…''
-.
-.
-.
-.
-.
Sus manos temblaban, un nudo creció en su garganta, las lágrimas cayeron de sus orbes dorados, tenía miedo... Mucho miedo. Apretando la mandíbula su temor se mezcló con la furia ¡¿Por qué tenía que ser tan cobarde?!, ¡¿Por qué no podía terminar con esto y ya?!, Solo lograba demostrar cuánta razón tenía Aomine... Apretó el vidrio en su mano izquierda sin parar su mirada desorbitada de las difuminadas cicatrices en su muñeca.
Su sempai no le amaba... Ni siquiera se molestó en comunicarse para saber cómo estaba. Sus amigos no le querían cerca, no solo la generación, sino, los demás también, tampoco había ningún intento de comunicación por parte de ellos... Estaba solo. Completamente solo. Aguantó la respiración, llenándose repentinamente de valor, ya no sería un cobarde, no más, iba a acabar con esto ahora.
Con la mirada llena de determinación y tristeza acercó el vidrio a su muñeca con la intención de causar daño a la vena más visible en ella, y así, desangrarse. Desaparecería, solo un poco más y...
-¡Kise-kun!- exclamó una voz muy conocida para él desde el otro lado de la puerta, golpeándola con fuerza, desesperación, sobresaltando al rubio y haciendo que este soltara de golpe el trozo de vidrio que estuvo a milisegundos de cortar su muñeca, el cual, rodó lejos de él hasta algún lugar de la habitación.
Había estado tan cerca, tanto. El modelo entró en un fuerte estado de shock, intentando que su cabeza procesara lo que estaba sucediendo, simplemente no podía creerlo. La puerta volvió a ser tocada con fuerza, haciéndole brincar en su sitio por segunda vez y logrando sacarle de sus pensamientos.
-Kise-kun, por favor...-pidió con voz temblorosa, en un tono que nunca antes había escuchado en el de cabellos celestes, uno suplicante- Sé que estás enojado con nosotros y que, tal vez, no quisieras vernos más nunca, pero, por lo que más quieras, solo te pido que me abras la puerta y escuches lo que tengo que decir...-el silencio le siguió a esa petición, el rubio estaba demasiado sorprendido como para formular palabra alguna.
Por otro lado, Kuroko, tomó aquel silencio como un rechazo directo, sus ojos se llenaron de lágrimas sintiendo como sus esperanzas eran apagadas... Solo para re-encenderse. No, no pensaba rendirse, no cuando por fin tenía una pequeña oportunidad. Tomó aire, preparándose para hablar, aunque no obtuviera respuesta por parte del modelo.
-Kise-kun... Está bien, no tienes que abrir si no quieres, yo... Yo puedo hablar desde aquí, te ruego que me escuches-dijo el de cabellos celestes. Ryouta cerró sus ojos fuertemente, te va a decir que te odia... Era cierto... De seguro le iba a decir lo mucho que le- Lo siento- ¿Eh?- Lo siento tanto, Kise-kun- pero... ¿Qué era lo que estaba pasando? ¿Por qué Kuroko...? -de verdad no espero que me perdones después de todo lo que ha sucedido... Desde el principio yo supe lo importantes que éramos todos para ti, yo... Yo te vi ese día-confesó, llamando la atención del modelo.
¿Ver? ¿Ver qué? ¿De qué estaba hablando Kuroko?, Continuaba sin comprender nada de lo que este le decía, pero decidió callar y escuchar al más bajo, capaz y así entendía de lo que hablaba.
-Yo te vi... Llorando en los vestidores aquel día que decidimos separarnos-los orbes dorados se ampliaron ante aquella confesión-... Y... No hice nada porque estaba demasiado ocupado pensando en vencer a todos como para consolar a un amigo... Fui un egoísta... Estuve tan equivocado en aquel entonces... No... No solo en aquel entonces, incluso ahora fui un estúpido-hizo una mueca ente el modo en que el de menor estatura se dirigía hacia sí mismo, no lo era, claro que no...
El rubio se recostó de la puerta, pegando su oreja a esta para escuchar mejor las palabras del jugador fantasma de Seirin, quien con voz cada vez más afligida, temblorosa y cargada de culpa, continuaba hablando sin parar.
-…Tan indiferente, te trataba horrible, incluso, llegaba a ignorarte… yo… yo…-de la nada, el de menor estatura, quedo en silencio mientras el rubio analizaba todo lo que Kuroko había dicho, no podía creerlo… él… ¿él no le odiaba?, siempre pensó que era una molestia para el de cabellos celestes y que este le odiaba… pero nunca pasó por su cabeza que era el más bajo quien pensaba que él le odiaba…
Una opresión en su pecho se hizo presente, algo en su corazón le susurró al oído 'Abre la puerta' y casi sin notarlo se levantó del suelo, obedeciendo aquella orden, al hacerlo se encontró con algo que nunca creyó ver en su vida. Un Kuroko con el rostro lleno de lágrimas que caían sin parar de sus ojos, en cuanto este levantó la mirada solo se le quedo viendo y, en menos de lo que cantó un gallo, rodeó la cintura del rubio con sus brazos, enterrando su rostro en su pecho, sollozando fuertemente.
-¡Lo siento tanto!- exclamó contra su camisa, la cual, ahogo el sollozo, Kise continuaba sin moverse, shockeado por lo que estaba pasando, mientras escuchaba como el de cabellos celestes le pedía desesperadamente su perdón sin parar, una y otra vez. Tetsuya nunca le había abrazado de aquel modo en toda su vida, es más, nunca le había abrazado, siempre era él quien lo hacía…
Sintió otro apretón por parte del más bajo logrando sacarle de sus pensamientos, rápidamente se dispuso a corresponder el contacto, recostando su mejilla de la cabeza del de orbes celestes y haciendo pequeños círculos en su espalda con sus manos en un intento de tranquilizarle.
-E-entonces… ¿T -tu no me odias, Kuroko?-cuestionó el rubio al otro, quien con los ojos muy abiertos vio hacia arriba, cruzando su mirada celeste con la dorada del otro.
-¿Yo?, ¿Cómo podría odiarte?, deberías de ser tú quien me odiara a mí- le respondió Tetsuya con voz ronca, sorprendido por lo que este le había dicho.
-Yo nunca podría odiarte, Kuroko- dijo el modelo con una suave sonrisa en su rostro, pero el más bajo solo pudo hacer una mueca de dolor ante las palabras del otro, apretando el abrazo y confundiéndole, ¿Es que había dicho algo malo?.
-No me odias… pero sigues molesto- murmuró contra la camisa del modelo, haciéndole levantar una ceja, ¿Pero de donde sacaba el de cabellos celestes esas cosas?- Ya no me llamas Kurokocchi…- Kise se sorprendió, bajando su mirada hasta Tetsuya.
-Pero, Kuroko, yo pensaba que te molestaba que te llamara así… por eso ya no lo hago…-le respondió, notando como este demostraba la sorpresa en sus ojos, para que luego le siguiera la culpa.
-Yo… no me molesta, puedes decirme como quieras- dijo, volviendo a apretar su agarre en la cintura del rubio, escondiendo su rostro, pasando por alto la felicidad en los ojos dorados del más alto, quien también le abrazo fuertemente.
-Gracias, Kurokocchi- agradeció, sin notar como el sonido de varias personas corriendo resonaba por los pasillos, hasta parar justo a un costado de ellos. Los dos adolescentes levantaron la mirada, encontrándose con toda la generación de los milagros frente a ellos.-… Chi- intento decir, siendo interrumpido por el pelirrojo, quien fijo su mirada en la mano derecha del rubio.
-Ryouta, tu mano…- dijo, haciendo que todos fijaran su atención en ella, abriendo mucho los ojos, sorprendidos. El modelo levantó su mano.
-Oh, esto, pues…- pero antes de poder continuar fue agarrado del brazo y halado hasta dentro de la habitación, al baño, por el peliverde, quien, con habilidad y rapidez, buscó entre todas las cosas del hotel hasta encontrar el kit de primeros auxilios, sentando al As de Kaijo en un lugar del baño mientras comenzaba a curar su mano con eficiencia.
-¿Cómo...?- intentó preguntar el de piel morena.
-Ah, con la lámpara, al entrar tropecé con ella y me lastimé la mano-respondió Ryouta sin quitar su atención del peliverde quien se encargaba de su mano. Luego de que aquella pequeña conversación terminara todo quedo en un rotundo silencio, solo rotó por el pequeño sonido de los minúsculos fragmentos de vidrio que se habían enterrado en su mano cayendo en un envase de metal que traía el kit.
-Listo- murmuró el de lentes levantándose una vez vendó su mano derecha, el modelo asintió callado, hundiéndose en sus pensamientos ¿Por qué hacían todo esto? No los entendía, una tensión se formó completamente en el ambiente, nadie parecía querer ser el valiente que lo rompiera, al menos, no hasta que el más alto de todos estallo corriendo hasta los brazos del rubio y rodeándole con los suyos mientras sollozaba.
-¡Ki-chin, lo siento, de verdad lo siento!- exclamó el de cabellos purpuras, aferrándose a Ryouta quien por poco pierde el equilibro al haber sido tomado desprevenido.- ¡Prometo nunca ser malo contigo otra vez! ¡También te daré de mis dulces cuando quieras! Y-y lo siento mucho, Ki-chin no quiero que estés triste, no te lastimaremos más- lloriqueo contra el hombro de Kise, sorprendiendo a todos.
-M-Murasakibara…- murmuró asombrado, recibiendo un sollozo aún más fuerte en su hombro y muchas más disculpas y palabras sin sentido por parte de la muralla de Yosen, rápidamente envolvió sus brazos alrededor de este, en un intento de calmarle.-Murasakibara, ya…-
-¡No!-exclamó, interrumpiendo al rubio-¡Ki-chin me tienes que decir murasakibaracchi, o si no te aplastaré!- gritó entre sollozos, apretando tanto al otro que llegó al punto de comenzar a asfixiarle.
-¡Está bien, está bien, Murasakibaracchi, me asfixias!-exclamó Kise, intentando separarse desesperadamente de abrazo, antes de morir por falta de aire. Pero al escuchar como el modelo le llamaba, el de cabellos purpuras, aflojó el agarre por sí solo, sintiéndose alegre.
-¿Ki-chin no está molesto conmigo?-cuestionó Atsushi inocentemente, mirando con ojos brillantes al rubio quien solo le sonrió suavemente.
-Claro que no estoy molesto contigo- contestó Ryouta, aliviando completamente al más alto. Fue cuando notó como el de cabellos azulados se acercó un paso hacia ellos, fijando su atención completamente en el moreno, mientras se separaba ligeramente del de cabellos purpuras, quien se negó a desenvolver sus brazos de su cuello, colocándose detrás del modelo y recostando su barbilla de su cabeza.
-Kise yo…- comenzó a hablar frunciendo el ceño, preguntándose a sí mismo… ¿Por dónde empezar?- Yo quería decirte que… tu sabes que no soy muy bueno en estas cosas- le dijo, levantando su brazo y llevando su mano hasta su nuca- Pero… yo… perdóname, por favor, discúlpame por todas las cosas que he hecho… por haberte llegado a ignorar, por decir que eras molesto… bueno, tu y yo sabemos que soy un idiota- aquello le logró sacar una pequeña risa al modelo- ¡Oye! ¡No te rías mientras me disculpo!... ehmm y pues, yo de verdad, lamento haber sido tan… tan… tan yo.- un nudo creció en su garganta a medida continuaba hablando.
-Aomine… yo- intento decir el rubio, siendo interrumpido.
-No, Kise.- le dijo el de cabellos azulados- Déjame terminar, por favor… fui un maldito imbécil, ¿Vale?, Yo… de verdad siento haberte contestado mal y hasta haberte cortado las llamadas solo por estar amargado. Lamento no haberte ayudado a levantarte en aquel partido… yo… yo lo deseaba de verdad…. Pero… mi maldito orgullo no me permitió… no me permitió hacerlo… y-yo… Kise, lo siento tanto-dijo con voz rota- No queríamos lastimarte, no me di cuenta de cuanto te lastimaba, ¿Qué tipo de amigo soy? No me di cuenta de que pude llegar a lastimarte tanto hasta que fue demasiado tarde y tú ya…- una solitaria lágrima cayó por la mejilla del de piel morena, asombrando al rubio, nunca, en todo lo que llevaba conociendo a Aomine… le había visto… llorar…
-Aomine… Aominecchi- susurró el rubio, sorprendiendo al otro, quien había jurado que jamás iba a volver escuchar ese apodo salir de los labios del rubio, un alivio recorrió su cuerpo, sintiendo como la cálida mano del modelo limpiaba aquella lágrima que había logrado escapar de sus ojos.- No hables como si estuviera muerto, estoy aquí, ¿Ok? –el moreno hizo una mueca, sosteniendo el brazo del rubio donde estaba.
-Pero tu…- sus orbes zafiros se fijaron en la muñequera, y sin palabras el rubio comprendió lo que quería decir el de cabellos azulados, dejándose hacer el As de Touou le quitó lentamente la muñequera izquierda, mostrando así las cicatrices difuminadas en su muñeca haciendo que todos hicieran una mueca de dolor ante ellas.- Lo siento, Kise- se disculpó, lanzándose hacia adelante y abrazando al rubio fuertemente, siendo correspondido casi al instante.
-Está bien, está bien- le dijo suavemente al moreno, intentando tranquilizarle, el moreno apretó la mandíbula, frunciendo el ceño.
-No, Kise, no está bien, por mi culpa, por culpa de todos nosotros… tú…- la frustración en las palabras del de cabellos azules casi se pudo sentir en el aire, mientras el rubio volvió a limpiar las lágrimas que escaparon de los orbes zafiros del As de Touou por segunda vez.
-Ya, está bien, Aominecchi, te perdono- susurro el modelo con suavidad y una sonrisa, recibiendo una brillosa mirada azulada antes de volver a ser abrazado y que el moreno se separara de él, dejando que Midorima dieran un paso al frente de Kise, arreglándose los lentes con su mano izquierda y, con la derecha, sacando un pequeño objeto de su bolsillo, tendiéndoselo al rubio quien, confundido, lo tomó en sus manos, notando que era un pequeño llavero de un gato negro.
-Ehem- dijo el de cabellos verdes, volviendo la atención del modelo a él- Ese… ese es el objeto de la suerte de hoy de Géminis… un llavero de gato negro…-murmuró, fijando su mirada en el piso, avergonzado por la acción para luego tomar aire y mirar directamente a los orbes dorados del otro.-… Lo siento…- le dijo al rubio con voz algo vacilante pero firme en lo que decía.
-Midorima…- dijo Kise sorprendido, fijando su mirada en el objeto y guardándolo en su bolsillo, luego lo pondría en sus llaves, un regalo de Shintaro no era algo que recibiera todos los días. Volvió a levantar su mirada, encontrándose con la mirada color esmeralda del As de Shutoku. Todos vieron expectantes al peliverde, quien con los nervios a tope, y deseando no decir algo estúpido, comenzó a hablar.
-Sé… sé que a veces mi carácter no es el mejor de todos, y que puedo llegar a ser muy desagradable, yo nunca… yo nunca quise decirte esas cosas como 'muérete' o 'molesto', eres uno de los pocos… a-amigos- un sonrojo se vio presente en su rostro- Que tengo y… no sé qué es lo que pasa conmigo al responderte así, y yo… lo siento tanto, Kise- se disculpó el de cabellos esmeraldas volviendo su mirada al suelo nuevamente- T-tampoco… Tampoco me molesta que… me digas… M-Midorima…cchi…- el rostro de Shintaro a ese punto ya había comenzado a competir con el cabello de Akashi, pero valió la pena, pues aquellas palabras le habían sacado una gran sonrisa al rubio.
-Gracias… Midorimacchi…- susurró el de cabellos rubios, recibiendo un rápido asentimiento por parte del de lentes, y a medida este se puso a un lado de él, colocó una mano en el hombro del modelo mirando hacia otro lado apenado. El pelirrojo dio un paso adelante, con total confianza y rostro serio.- Akashi…- el aludido frunció el ceño, levantando sus orbes bicolores hasta el modelo.
-Que yo sepa no te he dado el permiso para que dejaras de llamarme Akashicchi, Ryouta- dijo, haciendo abrir mucho los ojos al otro, sorprendido por sus palabras. Un suspiro escapó de los labios del capitán de Rakuzan- ¿Sabes, Ryouta?, Hace un tiempo creía ser absoluto… pero me equivoqué…- aquellas palabras lograron asombrar a todos, quienes le miraron con total incredulidad- Yo no puedo ser absoluto si dejo a una de las personas más importantes para mí de lado, por eso… pido tu perdón, Ryouta, discúlpame por haber sido un mal amigo, no tiene justificación lo que hice… por ello… lo siento, Ryouta- los orbes bicolores se encontraron con los dorados, transmitiendo a través de ellos todo el pesar que sentía en ese instante.
-Akashicchi…- Kise estaba asombrado ante aquellas palabras, y la mirada del pelirrojo…- Gracias… a todos, de verdad… - Kuroko lentamente se acercó al rubio, rodeando su cintura con sus brazos, tomándole desprevenido, Seijuurou sonrió, acercándose para imitar la acción del de cabellos celestes, en un pequeño espacio a un lado, Aomine rodeo la espalda del modelo con un brazo y Murasakibara continuaba pegado al cuello de Kise, por ultimo Midorima se acercó un poco más, rodeando tímidamente el brazo del rubio con el suyo, en un mini abrazo.-Chicos…- susurró con una sonrisa, correspondiendo el abrazo de todos- Gracias…-
El contacto duró un largo rato, de nuevo la familia que una vez fueron se volvió a unir, para nunca separarse otra vez.
Tú ya estas…
¿Uh?, ¿Otra vez tú?, Cállate, no te escucharé de nue-
Tú ya no estás solo…
Eh… no, ya no… nunca más…
…
…
…
Tan perdido estuvo en su mente que en el momento en que su celular vibró en su bolsillo salto en su lugar, asustando a todos y causando que el bello momento se arruinara con unas cuantas típicas quejas del moreno, el cual se había llevado un buen golpe del codo del modelo. Kise ignoró al de cabellos azulados, buscando su teléfono y respondiéndolo sin ver quien llamaba.
-Hey, ¿Cómo está todo por allá, Kise?-saludó una voz conocida para él, haciéndole levantar una ceja, mientras una sonrisa se formaba en su rostro, pero que oportuno… desde el principio supo que todo fue extraño, pero ahora solo le faltaba algo para confirmar su pequeña teoría.
-Nijimuracchi… ¿De casualidad sabes que los chicos están aquí?, Akashicchi y los demás…- dijo tentativamente, estrechando sus ojos en sospecha mientras el otro callaba y luego de unos sospechosos segundos de vacilación le respondió.
-¡No puede ser! ¿En serio? no lo sabía, Kise- les respondió el otro con voz tensa, causando que el modelo hiciera un mohín.
-Nijimuracchi, dime la verdad, ¿Planearon todo esto?- cuestionó, colocando rápidamente el teléfono en alta voz, para que todos escucharan la conversación, escuchó un suspiro del otro lado del teléfono.
-¿Cómo lo descubriste?- preguntó haciendo una mueca, juraba que no lo iría a notar, pero claro, no todo sale como es esperado.
-No sé, tal vez, ¿El muy sospechoso secuestro…?- respondió con diversión en su voz, logrando sacar una pequeña risa al azabache.
-Lo sé, no fue de mis mejores planes- contestó con una suave sonrisa.- Pero… ¿todo salió bien?- pregunto con preocupación, esperaba que la cuerda de idiotas no lo hubiera arruinado todo esta vez.
-… Todo salió perfecto… gracias, Nijimuracchi- dijo el rubio, agradecido desde al fondo de su corazón. Justo cuando el otro le iba a contestar logró escuchar un alboroto en el fondo, varios gritos y hasta golpes, unas cuantas quejas por parte de Shuzo y una voz muy familiar para el rubio, una que hizo revolotear mariposas en su estómago, continuó la conversación.
-¡Kise!- exclamó el de ojos gris acero, casi con desesperó- ¿Estás bien? ¿Nada pasó, verdad? ¿El montón de mocosos no te hicieron nada, verdad? ¡Te juro que si te hicieron algo los patearé por unas escaleras a todos y cada uno de ellos!-gruñó el de cabellos azabaches. Ryouta solo se pudo quedar pasmado, quedándose sin palabras mientras el otro le llenaba de preguntas sin parar- ¿Has comido bien? ¿No has hecho alguna estupidez o sí? Lo siento, quería llamarte, pero el imbécil de Takao tiró mi teléfono por la ventana y los otros idiotas no me dejaban salir de aquí, ¿Estás bien, verdad?- cuestionó frunciendo el ceño con preocupación, el rostro del rubio no podía estar más rojo ante todas aquellas preguntas, sonriendo como nunca al escuchar la explicación, por un momento había pensado que… en serio a veces podía ser un tonto.
Por otra parte, los otros adolecentes miraban con todo el interés del mundo el rostro sonrojado de su amigo, levantando una ceja, ¿Por qué el modelo reaccionaba de ese modo ante las preguntas? Es más, ¿Por qué siquiera reacciono así al escuchar la voz del otro? Eso era algo extraño, sospechoso. El pelirrojo estrechó la mirada, con una sonrisa creciendo en su rostro, comenzando a unir las piezas de este entretenido rompecabezas, comprendiendo todo.
Una sonrisa creció en el rostro del rubio-Yukiocchi… tranquilo, estoy bien- le respondió, callando las preguntas casi al instante- Todo está perfecto- Kasamatsu tarareó inseguro, sin creer mucho lo que decía su pareja, pero, no detectaba mentira alguna en su voz, cosa que le alivió, estaba bien y eso era suficiente para él.
-Kise, yo…-susurró Kasamatsu, llamando la atención del modelo, quien solo inclinó la cabeza como un cachorro confundido, esperando que este dijera algo más. El azabache tomó aire, dándose valentía para pronunciar las siguientes palabras-Te extraño…- de nuevo, las mejillas del rubio tomaron una tonalidad rojiza, su corazón comenzó a latir rápidamente, mientras una sonrisa alegre crecía en su rostro.
-Yo también, Yukiocchi…- le respondió con voz alegre, mostrando la emoción por la palabras del otro en esta, haciendo sonreír al capitán de Kaijo- ¿Hablamos luego?- cuestionó, recibiendo una afirmativa automática por parte del otro, miró su teléfono al cortar la llamada casi a regañadientes, no quería que el saldo de Nijimura se acabara por esa llamada, pues llevaban un buen rato hablando.
Todos le miraron expectantes, esperando a que alguien dijera algo, esperando romper el silencio que se había formado luego de la extraña llamada. Claro, hasta que un brazo rodeo los hombros del rubio, acercándole más al adolescente de piel morena, el cual lucía una gran sonrisa.
-Bueno, hemos pasado por mucho el día de hoy… ¿Qué tal si vamos a las aguas termales a pasar el rato?- propuso alegre, haciendo que todos se miraran entre ellos y asintieran estando de acuerdo con aquella idea, saliendo de la habitación entre bromas y risas, como si nunca hubieran peleado, felices de que por fin todo este mal sueño haya acabado.
Y muy en el fondo, mientras caminaban juntos, la generación de los milagros, juraron que nunca volverían a lastimar de este modo el corazón de su adorado amigo rubio. Lo cuidarían como si fuera de cristal. Se asegurarían de ello…
…Su luz nunca se volvería a apagar.
-.
-.
-.
-.
-.
Nanami:- y bueno, nos vemos en el siguiente y… ul…. Ul… QAQ no puedo decirlo!
Isabella:- *suspiro* se que es triste, pero debes decirlo…
Nanami:- QAQ dilo tu!
Isabella T_T no! Es tu fic! Dilo tu!
Nanami:- fue por tu cumple! Dilo tu!
Isabella:- no!... digamoslo juntas…
Nanami:-… tienes razón…
Isabella y Nanami:- el próximo es el ultimo capitulo de este fic
Nanami:- *se va a llorar a una esquina* Mi bebe! Buahhhhh!
Isabella:- T_T duele mucho, pero al fin va a terminar….
Nanami:- yo…. Yo agradezco a todos! Por haber apoyado mi fic hasta el final y… y!
Isabella:- guárdatelo para el próximo cap…
Nanami:-… tienes razón…
Isabella y Nanami:- hasta el siguiente cap! Gracias!
Reviews? Q-Q