No soy dueño de Naruto o Fairy Tail

Naruto y Fairy Tail pertenecen a sus respectivos creadores, por el momento muajajajajaja, ejem sin mas el capitulo.

-mmmmm-personaje hablando
-(mmmmm)- personaje pensando

-mmmmm-personaje sobrenatural hablando
-(mmmmm)- personaje sobrenatural pensando


Capítulo 3: La busqueda

Ríos de magma corrían por el lugar donde un encuentro de dos fuerzas similares se llevaba a cabo, siendo un grupo de Dragones superiores los espectadores de tal encuentro.

"¡Kaeienryu no Hoko! (Rugido del Dragón de Fuego Eterno)" El rubio-azabache desató su ataque a quema ropa, siendo el pecho de Ignel su objetivo.

"¡Karyu no Tekken! (Golpe de Hierro del Dragón de Fuego)" Al mismo tiempo que usaba su gran abanico para detener un golpe de fuego de parte del Dragón.

¡BOOOOMMM!

¡CRASHHHH!

Una explosión de fuego seguida de un objeto impactando en una gran formación rocosa provocaron sonidos caóticos, para que segundos después un borrón oscuro saliera de entre la nube de humo y se posicionara frente a otra silueta rodeada en una nube de fuego dorado, sin embargo el cansancio ya le hacía mella.

"Ah… ah… ah…" Respiraba con dificultad cierto Dragon Slayer que sostenía cansinamente su abanico de guerra con el que se había protegido de varios ataques del oponente frente a él, siendo la única arma que resistió el fuego del Rey Dragon.

"Nada mal pequeña cría, pero aún te falta mucho para estar a la par de los Dragones de categoría Rey" Dijo el gran reptil saliendo de esa espesa nube ardiente con partes de su cuerpo ligeramente oscurecidas.

"Jejeje, la tienes difícil Naruto, pero no por nada eres el ninja número uno en sorprender a la gente" Oyó una voz en su mente.

"Demuéstrale de que está hecho el chico de la profecía Naruto-chan" Dijo esta vez una voz femenina.

"Kurama, Mata-chan, ¡Esta vez no sabrá que lo golpeó Dattebayo!" Exclamó en su mente mientras una sonrisa salvaje adornaba su cara y se lanzaba sobre el Dragón de un solo salto.

Los demás veían entretenidos el encuentro, sobre todo por la demostración de habilidades del rubio-azabache al haber ejecutado un gran número de ataques de Dragon Slayer.

"¿Por cuánto tiempo lo has entrenado Atlas?" Preguntó la Dragona del cielo a su congénere sin despegar la vista del rubio-azabache que respiraba agitado para en un instante aumentar su poder ofensivo y lanzarse al ataque.

"Lo he entrenado durante un año" Fue la inmediata respuesta del mencionado ganándose varias miradas incrédulas de los demás espectadores.

"¡Imposible! ¡Este no puede ser el resultado después de un año!" Replicó el Dragón de las sombras; Skyadrum de manera exaltada.

"Ese gaki tiene muchos trucos bajo la manga, en especial uno que le ayudó a acelerar su entrenamiento, he aprendido que subestimarlo es cometer un enorme error" Explicó brevemente el Dragón de llamas, recordando que durante ese tiempo recibió buenos golpes a su orgullo por parte del rubio, ante tal comentario todo el mundo tuvo sus dudas.

De regreso al encuentro, nuestro héroe ya estaba frente a Ignel mientras hacía sellos de mano confundiendo a todos con excepción de Atlas Flame "(Esto se pondrá divertido)" Pensó el mentor del rubio-azabache con humor sabiendo lo que se venía.

En cambio Ignel descartó sus dudas de lo que hacía el Uzumaki para luego lanzar un poderoso rugido de fuego que tomó desprevenido a Naruto, o eso pensó el Dragón hasta que "¡Suiton: Suijinchu! (Elemento Agua: Pilar de Agua)" Fue la exclamación del Uzumaki mientras sus mejillas se hinchaban levemente, y luego surgía una explosión acuática que logró contener su ataque Ígneo.

Los espectadores tenían las quijadas hasta el suelo ante lo que estaban presenciando, pero el más afectado fue el Rey de las Llamas.

"¡Qué demonios!" Exclamó Ignel al ver la gran cantidad de agua surgida de la nada que contuvo su ataque.

"(Estoy seguro que el agua surgió de su boca, ¿Acaso su Metsuryu Mahou contiene más de un elemento?)" Pensó bastante conmocionado el Rey de los Dragones de Fuego recordando esos breves instantes donde el ojiazul preparó su ataque.

Sin embargo empezó a meditar mejor acerca de lo que pasó hace unos momentos.

"(No, la energía que usó era más densa que la magia, y además no hubo círculo mágico ¿Entonces…?)" Era su hilo de pensamientos, antes de que en medio de la bruma que los ataques anteriores provocaron pudiera distinguir cómo un rubio-azabache aumentaba su poder mágico al grado de que se sentía el ambiente pesado.

Entonces pudo verlo sostener una flama brillante en su mano derecha, que estaba levantada a la altura de su hombro.

"Je… no me quedaré a recibir eso pequeña cría" Dijo Ignel con un mal presentimiento mientras abría sus alas preparándose para volar.

Pero en ese instante.

"¡Chidori Nagashi! (Mil Pájaros Aleatorios)" Escuchó un par de voces similares a su espalda antes de sentir una corriente eléctrica recorrer cada ala.

"¡Kehh! ¡¿Qué rayos…?!" Exclamó con ligero dolor el Dragón antes de voltear y ampliar sus ojos ante lo que veía, un par de rubio-azabaches sujetaban de la base cada ala mientras electricidad rodeaba sus cuerpos.

"(¿Qué clase de magia es esta? No… ¿Acaso este humano está usando magia?)" Pensó contrariado Ignel, ya que las réplicas que lo atacaban emanaban un aura diferente al que estaba frente a él.

"¡Doton: Dai Chidoukaku! (Elemento Tierra: Gran Movimiento del Núcleo de la Tierra)" Oyó decir a otra voz mientras sentía como lentamente iba hundiéndose en la tierra.

Ubicó su mirada en un tercer rubio-azabache junto del que sostenía la llama y que deducía era el original, este había puesto ambas manos en el suelo por lo que llegó a la conclusión que esa réplica era quien usaba esta técnica basada en el elemento tierra, entonces aumentó su aura desapareciendo a ambos rubios que le imposibilitaban volar al momento de rodearse de intensas llamas.

"No me esperaba esto pequeña cría, realmente te he subestimado, pero eso ¡Se acabó!" Dijo antes de agitar sus alas para volar.

En ese instante y con más de la mitad de su cuerpo dentro del enorme agujero bajo tierra lo percibió frente a él.

"Aprieta los colmillos y siente esto… ¡Kore Ga…! ¡Uzumaki no Kenda! (¡Esta es…! ¡La verdadera técnica Uzumaki!)" Exclamó mientras dejaba caer la llama en su mano al suelo donde provocó una gran explosión de fuego, y un pensamiento surgió en la mente de Ignel cuando vio las llamas acercándose a él.

"(Esto va a doler)" Y cerró sus ojos antes de sentir el impacto.

¡BOOOOMMM!

Un torrente de fuego golpeó duramente al Dragón mientras las llamas ascendían, al cielo y de entre el mar de llamas surgía el Uzumaki al rojo vivo y con fuego en diversas partes del cuerpo golpeando a Ignel con lo que se podría denominar golpes fantasmas, ya que varias siluetas del mencionado conectaron poderosos golpes ardientes al pecho del Dragón antes de que el original golpeara al final para terminar con un movimiento ascendente en un pequeño giro de fuego.

Por su parte, Ignel sintió cada golpe y el poder del fuego utilizado contra él perfectamente.

"(¡Gahh! De nuevo esa… energía)" Pensó mientras era levantado varios metros siendo sacado del agujero donde estaba, para luego caer de espaldas con su cuerpo en llamas y un dolor punzante en el centro de su pecho, aunque una sonrisa satisfecha podía ser vista por el rubio-azabache que después de elevarse un par de metros caía en cuclillas elegantemente, para luego erguirse y sentir la brisa nocturna con los ojos cerrados.

Segundos después sintió el problema sin resolver de esa técnica, aunque no pudo evitar sonreír satisfecho.

"Meh… eso fue todo" Murmuró antes de caer de espaldas al suelo, con la vista del gran cielo nocturno prácticamente frente a él.

"Fue un buen encuentro pequeña cría, estoy seguro que algún día podrás luchar de igual a igual contra los Dragones del más alto rango, dime… ¿Cuál es tu nombre?" Escuchó preguntar a un Ignel que ya de pie frente a él que lo veía con una sonrisa, cabe mencionar que tenía leves rasguños y un hilo de sangre cayendo de su hocico así como una pequeña quemadura en forma de puño en su pecho.

"Uzumaki Naruto… ese es mi nombre…" Fue la respuesta del Dragon Slayer que cerrando los ojos lentamente empezó a reunir energía, no sin antes sonreír.

ʺJejeje como lo suponía, apenas y pude dañarte levemente" Mencionó el rubio-azabache sonriendo aún con los ojos cerrados.

El Dragón comenzó a caminar en dirección de los demás.

"Tú tampoco luchaste seriamente, te contuviste un poco manteniendo en secreto la mayoría de tus habilidades, fue un placer cruzar puños contigo… Uzumaki Naruto" Dijo casualmente el sonriente y complacido Ignel que no detuvo en absoluto su andar.

"Jajaja ese sujeto se dio cuenta, es bastante interesante, sin duda alguna tiene bastante experiencia en batalla" Habló el enorme zorro desde la mente del ojiazul.

"Una vez que Naruto-chan domine todas sus habilidades estoy segura que ese Dragón no tendría muchas oportunidades de enfrentarte" Dijo ahora la gata de dos colas mientras la enorme sonrisa del rubio-azabache cambiaba a una más suave.

"Te equivocas Mata-chan, creo que aún así la pelea sería bastante intensa" Murmuró para sí mismo mientras abría sus ojos con el Sharingan en ellos, aunque solo lucían dos tomoes en cada ojo demostrando que aún no alcanzaba su máximo potencial.

Minutos después y gracias a Kurama pudo recuperar energía suficiente para levantarse y lentamente dirigirse hacia donde estaban Ignel y su mentor, así como los demás que aún seguían con expresiones incrédulas ante lo que vieron hace unos momentos.

"Coff coff…" Fue la tos fingida de Atlas Flame que los sacó de su pequeño trance y enfocaron su vista en el rubio frente a ellos.

"Ejem… antes que nada ningen, ¿Cuál es tu nombre?" Preguntó el líder con duda mientras Atlas, Ignel y Naruto tenían gotas en la nuca por la pregunta del Dragón.

"Uzumaki Naruto…" Respondió con duda el Uzumaki mientras los demás Dragones asentían dando a entender que habían tomado nota de esto.

Para el rubio-azabache y sus inquilinos era fácil saber que debido al shock de verlo usar técnicas distintas al elemento de su Metsuryu Mahou no prestaron atención cuando Ignel preguntó su nombre, por lo que se preguntaba cuál sería su reacción al ver todo su poder una vez pudiera usarlo libremente, pero dejando de lado esos pensamientos se concentró en lo que el líder de la Fracción pacifista tenía que decirle.

Este le miró como estudiándolo antes de volver a hablar.

"Yo, Georgius, líder de los Dragones de alto nivel y líder de la fracción a favor de la convivencia con los humanos, te acepto como el primer Dragon Slayer de la historia… Uzumaki Naruto" Habló con autoridad mientras los demás de alto nivel lo veían con respeto.

"Ahora te encomendare tu primera misión…" Y con eso dicho procedió a darle los detalles al ojiazul de dicha misión.

Horas después

Una vez terminada la reunión, y que cierto rubio-azabache se halla retirado hace tiempo, Georgius se dirigió al Dragón de fuego con una mirada interrogante que este supo interpretar.

"Es muy fuerte, su Metsuryu Mahou está bastante desarrollada, sus instintos de lucha se han pulido exhaustivamente, así mismo su experiencia en combate es alta" Informaba Ignel.

"De eso me di cuenta, ese ningen sabe luchar, sus movimientos son totalmente a consciencia y los ataques dirigidos a puntos vitales" "Comentó ahora la Dragona del Cielo bastante intrigada.

"Sus movimientos apenas producen sonido, su sigilo es interesante" Murmuró esta vez el Dragón de las Sombras.

"Él tiene una enorme resistencia, además de que posee un enorme poder mágico" Dijo ahora el Dragón Blanco con seriedad.

"Pero… esa energía que usó, me intriga, ese último golpe fue la unión de su Metsuryu Mahou con esa energía, de haberlo recibido cualquiera de medio nivel estaría severamente lastimado" Fueron las palabras del Dragón de Hierro mientras otros Dragones de alto nivel murmuraban sobre todo eso.

Georgius analizó el análisis de uno de los Dragones del más alto rango en sus filas.

"Aunque se puede ver que apenas lo domina, su poder fue drenado casi instantáneamente después de ese ataque" Comentó Ignel mientras masajeaba su mandíbula y el área del pecho, los puntos donde recibió ese ataque.

"¿Algo que agregar Atlas?" Preguntó el líder al Dragón de las llamas que solo sonrío un tanto divertido.

Todos dirigieron su atención a lo que diría el mentor del Dragon Slayer.

"Naruto es alguien interesante, lo encontré por casualidad hace un año cerca de mi territorio" Comenzó a relatar el Dragón.

"Al parecer este niño viene de otro lugar, ya que un portal dimensional se abrió cerca de mi cueva, así pude observar una figura salir de dicho portal y precipitarse a tierra por lo que fui a investigar" Continuó mientras los de alto rango alzaban una ceja incrédulos y otros bufaban sin creerse nada de lo dicho por el Dragón.

Atlas Ignoró a estos últimos.

"Cuando pude acercarme al lugar, vi a un ningen en condiciones lamentables, con su ropa hecha un desastre, heridas varias e inconsciente en el centro de un cráter" Explicaba con seriedad.

"Sin embargo yo no fui el único que fue atraído por el alboroto que causó, sino el mocoso de Crodius también llegó, obviamente no me sintió, así que lo dejé actuar y ver que sucedía" Siguió con su explicación.

"Ahhhh… ya me imagino que sucedió" Murmuró Georgius con un suspiro cansado.

"Como era de esperarse lo atacó, por lo que Naruto se defendió, debo decir que lo que vi fue algo que aún no termino de asimilar" Dijo Atlas con total seriedad, llegando a incomodar a los demás por el tono que usó.

"¿A qué te refieres Flame?" Preguntó intrigado Georgius.

"Desde el principio noté esta energía tan densa que él posee, aún estando bastante débil derrotó a Crodius con una manifestación de ese poder tan abrumador" Respondió el reptil ígneo con solemnidad.

"Solo puedo describirlo como un titán hecho de pura energía, aunque fue incompleto ya que solo el torso y su brazo derecho fueron creados, o al menos su sistema óseo lo fue" Intentó detallar Atlas sin mucho éxito.

Los demás intentaban imaginar tal cosa, pero negaban con expresiones inciertas.

"Puedo deducir que las costillas y los huesos de dicho brazo eran visibles, o ¿Acaso me equivoco?" Expuso la Dragona del Cielo al ser ella quien pudo imaginar ese hecho.

"Como era de esperarse de Grandine, así es, el torso se formó alrededor de él por lo que es un poder defensivo, pero…" Alabó a la Dragona e intentó complementar su deducción.

"También puede moverse en sentido ofensivo, entiendo… ¿Le has preguntado acerca de eso?" Fue Georgius quien dedujo lo demás mientras exponía otra duda.

Atlas asintió "Él pertenece a otra dimensión, donde los humanos usan esta energía, que es llamada Chakra" Empezó a explicar lo que el rubio-azabache le había dicho a él cuando empezó a entrenar bajo su ala.

"Esta energía les permite usar técnicas elementales, aunque los elementos que podían usar variaban en número entre ellos, Katon (Elemento Fuego), Suiton (Elemento Agua), Raiton (Elemento Rayo), Fuuton (Elemento Viento) y Doton (Elemento Tierra) eran los cinco elementos principales" Hablaba sorprendiendo a todos con cada palabra.

"Aunque también habían técnicas de otro tipo, como artes o ilusiones y lucha cuerpo a cuerpo, en fin, a estos ningen se les llamaba Shinobi, ninjas entrenados en sigilo, robo o asesinato" Explicó Atlas, aunque lo último incomodó a unos cuantos.

Grandine arqueó una ceja al escuchar esto.

"Eso es extraño, estoy seguro que ustedes también lo sintieron" Habló la Dragona a los demás.

"Es cierto, a pesar de todo ese mundo no es diferente al nuestro, había luz y oscuridad, según me dijo; él pasó por un entrenamiento especial para deshacerse de su odio ya que necesitaba poder controlar un gran poder que residía en su interior" Expuso mientras Georgius cerraba sus ojos.

"Entiendo, esa maldad y todo sentimiento impuro lo hacía perder el control al grado de no poder distinguir entre aliado o enemigo, ya veo, por eso el no tiene ningún sentimiento negativo en su corazón" Murmuró este.

"Así es, una gran guerra se libró en su mundo y para poder defenderlo de la oscuridad usó ese poder, aún así el enemigo se apoderó de una fuerza inconmensurable que causó gran devastación, a tal grado que eligió dar su vida con tal de que sus seres queridos vivieran en un mundo libre" Terminó de explicar el reptil ígneo.

Georgius y los Dragones de alto rango guardaron silencio ante las palabras de Atlas e internamente su respeto por el ojiazul aumentó considerablemente.

"Y ahora se involucra en otra guerra, pobre pequeño" Susurró Grandine maternalmente, pero con pesar en su voz.

"Cuando le expliqué la situación de este mundo no dudó en aceptar, él prefiere la paz, pero aún así es capaz de ver cuando la lucha es inevitable por lo que eligió luchar por su nuevo hogar" Hablaba Atlas con seriedad y respeto, siendo escuchado por todos.

"Un corazón libre de toda maldad, el deseo de proteger y hacer lo que es correcto así como una determinación inquebrantable, en ese momento lo supe, un digno heredero de nuestra magia" Dijo Flame con un gran orgullo en su voz mientras Ignel, Grandine, Weislogia, Metalicana, Skyadrum y Georgius sonrieron sintiendo el mismo orgullo que Atlas Flame.

Los demás Dragones de medio y bajo rango rugieron en son de respeto hacia su líder y los Dragones más fuerte así como en señal de aceptación hacia el primer Dragon Slayer de la historia.

En otro de los picos de la cadena montañosa que formaban los picos de Rozan, cierto rubio-azabache se terminaba de recuperarse por completo

"Uff… Ignel-ossan es muy fuerte" Murmuró retirando su camisa rasgada y acomodando su Gunbai (Abanico de Guerra) junto a una roca.

"Es cierto, pero ese golpe le demostró que no eres débil" Comentó el zorro recostado en su paisaje. El rubio-azabache observó la palma de su mano derecha antes de cerrarla formando un puño.

"Aun habiendo usado los jutsus elementales que puedo hacer, apenas lograría lastimarlo" Dijo mientras empezaba a reunir el rápidamente el Ethernano del ambiente.

"Es cierto Kurama, las escamas de los Dragones de alto rango son difíciles de penetrar" Dijo Matatabi sentada al lado del Kyubi que gruño en acuerdo.

Cuando sintió su poder llegar a cierto nivel el rubio-azabache hizo su sello característico "Kage Bunshin (Clones de Sombra)" Susurró con tono neutro.

¡PUFF!

Varios estallidos de humo dieron paso a decenas de clones que adoptaron posiciones de combate, ya sea con los puños llenos de fuego o entrando en Ryu Sennin Mode, mientras el original activaba su Doujutsu.

"Es hora de asimilar por completo la experiencia de Madara, y desarrollar por completo estos ojos, algo me dice que pronto necesitaré de todas sus habilidades" Dijo mientras los dos tomoes de cada ojo giraban y se ponía en posición de batalla al tiempo que sus clones se abalanzaban sobre él.

Seis meses después

Han pasado seis meses desde que el Uzumaki se presentó ante el concilio Dragón y peleó contra Ignel, en este tiempo llevó su cuerpo a sus límites con tal de tener un mejor control en sus poderes, pudiendo así aprender una Metsuuryu Ougi (Arte Secreta del Asesino Dragón) que lo sacó de un apuro al lograr derribar a Atlas Flame durante un encuentro de práctica, falta decir que esta vez el Dragón del Fuego Eterno fue poderosamente tocado al grado de ser herido

Ante esto, el enorme Dragón no pudo evitar sentir orgullo de su aprendiz, sin duda sería el Dragon Slayer más poderoso conocido, y eso que por ahora él era el único, pero Atlas sabía que ningún otro podría llegar a ser más poderoso que Naruto, sin duda había elegido bien.

El ojiazul estaba feliz con su progreso, a este paso en otro año podría darle una paliza a Ignel, o eso le había dicho Atlas cuando lo golpeó con ese arte oculto, también había dominado un par de jutsus elementales que le servirían más adelante.

Gracias a los conocimientos que obtuvo de los Bijus y los demás, conocía varios jutsus de cada elemento, aunque no podía dominarlos todos, hasta ahora ya llevaba un tercio aprendidos a la perfección por lo que esperaba que en unos tres años pudiera usarlos todos, ya se imaginaba pateando traseros escamosos. Lo único que no disfrutaba era la misión dada por Georgius, aún recordaba cuando este le encomendó la 'Sagrada Misión' y el comienzo de su martirio, aunque no pudo evitar sonreír con los prospectos que halló.

FLASH BACK

El rubio-azabache escuchaba atentamente lo que diría el líder de los Dragones.

"Tu misión es… buscar a los próximos Dragon Slayer, estoy seguro que puedo confiarte esta tarea tan importante" Dijo Georgius dejando al rubio y los demás Dragones atónitos, y no faltó quienes protestaran ante la decisión de su líder.

"¡Georgius-sama! ¡Esto es una tontería!" Exclamó fuertemente un Dragón del montón seguido de varios más que usaban casi las mismas palabras, pero no faltó el idiota que hablara de más.

"¿Acaso perdió la cabeza? Usted no puede hablar en serio ¡Es solo un insignificante humano!" Habló otro con desprecio en su voz y de una forma demasiado despectiva.

Los Dragones de alto rango se sintieron molestos ante esas palabras, pero antes de siquiera decir o hacer algo al respecto.

"¡Senpo: Rozan Sho Ryu Ha! (Arte Sabio: Dragón Ascendente de Rozan)" Exclamó una voz al tiempo que un Dragón de cuerpo serpentino hecho de llamas azules impactara en la quijada del idiota que habló, antes de enredarse en su cuerpo y con fuerza lo levantara varios metros para luego explotar en el aire causando gran estruendo.

¡BOOOOMMMM!

Todo mundo abrió sus ojos incrédulo al ver como el cuerpo del Dragón caía con daños graves causados por quemaduras y totalmente inconsciente, esto causó que los que habían hablado primeramente se callaran abruptamente y dieran un paso colectivo hacía atrás.

En tanto el Uzumaki mantenía la posición del ataque ejecutado, es decir; con su puño en alto mientras llamas azules recorrían varias partes de su cuerpo, pero sobre todo con esos ojos color verdeazulado con pupila rasgada color blanco que los llenó de un miedo inexplicable.

"Alguien más desea decir algo en contra de Georgius" Habló con voz calmada, misma que hizo recorrer un escalofrío a todos los Dragones que protestaron con ahínco.

Ninguno se atrevió a decir nada, ese poder era realmente abrumador, no en tamaño, sino en naturaleza.

"¡Bien hecho cachorro! ¡Enséñales quien es el alfa a esas lagartijas voladoras! ¡Que conozcan su lugar!" Exclamaba festivamente Kurama en su mente.

"Se han dignado a menospreciar el infierno que pasaste para obtener este poder, demuéstrales cuán equivocados están" Habló ahora Matatabi con voz calmada, pero que trasmitía una furia inconmensurable, al haberse encariñado con el Jinchuriki ojiazul esos comentarios realmente la molestaron.

Georgius y compañía sonrieron, sin duda sería un poderoso aliado en su lucha contra la otra fracción.

"Bien, ya que nadie más está en contra… Naruto te lo encargo" Habló el enorme Dragón dando por finalizada la discusión.,

Ante esto, el rubio-azabache salió del Ryu Sennin Mode y asintió con seriedad, para después envolverse en su fuego dorado habitual, y así transformándose en un reptil ígneo desplegó unas enormes alas para levantar el vuelo dirigiéndose montaña abajo dejando sorprendido a todo el mundo.

Ante esto Ignel no pudo evitar reír.

"Jajaja ese chico me cae cada vez mejor jajaja" Reía el Rey de las llamas mientras Atlas negaba divertido.

FLASH BACK END

Sin duda ese tipo lo hizo sentir molesto, y pensar que estaba en su fracción, por un momento pensó en acabarlo pero decidió no mancharse las manos por ahora.

Dejando sus pensamientos de lado, ubicó su mirada en las dos pequeñas frente a él que lo miraban de manera expectante.

"Onii-san ¿Tienes algo de comer?" Preguntó una de ellas, de cabello negro y ojos purpuras, mientras otra de cabello rubio y ojos verdes se hallaba escondida tras ella.

"P-Por favor" Tartamudeó con voz temerosa asomándose sobre el hombro de su compañera.

Por sus ropas en malas condiciones supo que eran huérfanos, probablemente sobrevivientes de algún ataque al pueblo semi-destruido que había visitado hacía tres días.

"¿Tienen un lugar en donde quedarse?" Preguntó con amabilidad mientras de entre bolsa de armas sacaba un pergamino para hacer un sello y en un PUFF aparecieran dos tazones de ramen que guardaba desde la Guerra en las Naciones Elementales.

Las dos pequeñas quedaron inmediatamente hipnotizadas por el olor de lo que la rubia pensó era la delicia de los dioses, por alguna razón el Uzumaki miró a la pequeña con un sentimiento de orgullo inexplicable, pero ignorando esto les hizo un gesto y los tres ahora estaban sentados alrededor de una caja de madera que servía de mesa.

Al poner los tazones en la mesa ambas no dudaron en tomarlos y comer rápidamente, sintiendo la calidez del alimento llenar sus estómagos vacíos ante la mirada comprensiva del ojiazul, en menos de dos minutos solo un par de tazones vacíos eran visibles en la mesa improvisada mientras ambas pequeñas se acariciaban sus estómagos satisfechos.

"No respondieron mi pregunta" Dijo el rubio-azabache con calma ganándose la mirada de ambas niñas.

"Lo siento Onii-san… es solo que…" Habló la pequeña azabache bajando la mirada al igual que la otra.

El rubio entendió lo difícil que era su situación, pero antes de decir algo fue interrumpido por otra voz infantil.

"¡Yozora! ¡Sena!" Gritaba un niño mientras corría por la calle donde se hallaban.

La gente que pasaba por el lugar no prestaban atención a nada de eso, ni siquiera al ojiazul que estaba acompañado de las dos pequeñas al tomarlo como un simple buen samaritano.

El niño al percatarse de este hecho, se apresuró a llegar a donde los tres estaban sentados y tomar a las niñas para ponerlas tras él.

"¡¿Que es lo que quieres?! ¡¿Acaso piensas hacerles algo?! ¡Pues no te dejaré!" Exclamaba el niño en modo protector mientras las pequeñas se sonrojaban ante el acto valiente del pequeño.

El rubio-azabache solo parpadeó antes de reír ligeramente haciendo tragar al pequeño que pensó no lo veía como una amenaza.

Este vestía con ropas desgastadas, de ojos y cabello negro que era cubierto por un gorro que cubría hasta las orejas.

El Uzumaki se levantó y se acercó al trío con calma tensando al pequeño, para luego estirar su mano en su dirección causando que este cerrara sus ojos con cierto temor, solo para abrirlos con sorpresa al sentir como el ojiazul acariciaba su cabeza gentilmente, entonces enfocó su rostro encontrando una cálida sonrisa llena de orgullo digna de un hermano mayor.

Este acto sin duda lo llenó de dudas.

"¿Cómo te llamas?" Preguntó el rubio-azabache con voz suave.

"Ko-Kodaka señor" Respondió el pequeño con duda y un poco de temor, mientras el ojiazul estudiaba al trío frente a él, todos de entre siete y nueve años si no se equivocaba.

"Interesantes nombres; Yozora, Sena y Kodaka" Murmuró para sí mismo mientras cerraba los ojos meditando lo que haría.

De un momento a otro los abrió y clavó su mirada en los tres niños que lo veían con duda.

"Dime Kodaka ¿Te gustaría ser fuerte?" Preguntó de repente el rubio azabache confundiendo a los pequeños.

"Puedo enseñarte magia, pero depende de tu respuesta Dattebayo" Aclaró el Uzumaki ganándose tres miradas diferentes, Yozora con confusión, Sena con estrellitas en los ojos y Kodaka con desconfianza.

Pero antes que el pequeño respondiera.

¡BOOOOMMMM!

Una explosión destruyó un edificio del pueblo ocasionando terror y pánico en la gente que empezó a correr despavorida, sobre todo al ver una figura descender del cielo.

"Jajaja patéticos humanos, son como cucarachas" Habló el enorme reptil volador con cierta diversión en su voz antes de escupir una bola de fuego destruyendo otro edificio del lugar.

¡BOOOOMMMM!

Columnas de humo oscurecían poco a poco el cielo mientras los tres pequeños se aferraban al Uzumaki que chasqueó la lengua un tanto irritado.

"Tch, estúpida lagartija" Murmuró llamando la atención del niño que estaba incrédulo ante la reacción del rubio "Kage Bunshin (Clones de Sombra)" Susurró creando una copia de él sorprendiendo a los pequeños.

Rápidamente el clon los tomó bajo su cuidado, pero cuando él se disponía a dirigirse donde el Dragón volaba un pequeño tirón en su pantalón lo detuvo.

"¿Qué…?" Se preguntó volteándose, solo para ver a la pequeña rubia mirándolo con lágrimas en sus ojos.

"No vayas, no quiero que…" Murmuró con dolor ante los malos recuerdos.

"Sena" Susurró sorprendido antes de agacharse y acariciar su cabeza con cariño.

"Si vas no volverás, aún si eres mago no podrás hacer nada" Habló ahora el pequeño aparentando calma para no preocupar más a las niñas, algo que el Uzumaki notó y lo hizo sonreír.

"Entonces mira bien, quizás así me respondas la pregunta que te hice" Y dicho esto de soltó del agarre de Sena y caminó con calma a donde el Dragón empezaba a aspirar aire para lanzar otro ataque.

Los tres vieron como el reptil al notar al rubio-azabache descargó su aliento ígneo sobre él, haciendo que las niñas derramaran lágrimas ante eso.

"Tch, yo se lo dije" Gruñó el pequeño mientras desviaba la mirada con tristeza, pero la pequeña risa del clon los llenó de duda.

"Jejeje… eso no vencerá a mi original" Dijo calmadamente, haciendo que los pequeños miraran de nuevo donde antes estaba el Uzumaki.

Lo que era una enorme bola de fuego empezó a perder tamaño ante la mirada atónita de los pequeños y algunos espectadores que aún había cerca y tenían esperanzas de que ese sujeto que parecía ser un mago derrotara al Dragón.

El reptil miró incrédulo como su ataque anterior desaparecía poco a poco.

"¡¿Pero qué?!" Exclamó cuando pudo divisar al ojiazul que aspiraba todo el fuego con su boca, incluso las llamas de los edificios que se quemaban fueron aspirados desapareciendo en su boca.

"Uff, eso estuvo bien Dattebayo" Dijo acariciando su estomago ante la mirada shockeada de todo el mundo.

El Dragón sacudió su cabeza no creyendo lo que vio.

"¡¿Qué demonios eres?!" Exclamó lanzándose sobre el rubio-azabache que sonrió de forma salvaje antes de saltar interceptando al reptil.

"¡Kaeienryu no Metsukyaku! (Patada Destructora del Dragón de Fuego Eterno)" Y dando un giro en el aire dio una patada voladora ígnea que impactó en la mandíbula del Dragón, que sintió como cada hueso de su cuello crujía ante tal fuerza demoledora mientras escupía sangre.

"¡Gwaag!" Se quejó desplomándose duramente contra un negocio de comida.

Los habitantes presentes miraron en shock como ese sujeto había golpeado fácilmente a ese Dragón, si no mal recordaban ningún mago podía hacerles frente ya que sus hechizos y habilidades apenas podían causarles daño, pero este tipo era diferente al resto, de eso no había duda.

El pequeño Kodaka veía bajo una nueva luz al ojiazul, entonces vio de reojo a ambas chicas tras él, y al recordar la pregunta que el ojiazul le hizo anteriormente tomó su decisión.

El Dragón se levantó pesadamente mientras enfocaba al rubio-azabache que lo miraba con calma.

"(¿Qué fue ese ataque? El daño que recibí de ese simple golpe es demasiado)" Pensó el reptil irguiéndose cómo pudo, mostrando que este medía cerca de diez metros de altura.

"Ningen… ese golpe… me dolió… ¿Qué clase de magia… estás usando?" Preguntó esperando ganar tiempo y recuperarse lo suficiente para retirarse e informar a su líder de una posible amenaza.

El Uzumaki sonrió ligeramente ante la pregunta ya intuyendo sus intenciones.

"Así que ese ataque te causó un daño considerable ¿Eh?, bueno, es lógico" Habló el ojiazul haciendo crujir sus nudillos.

Los pocos espectadores que veían el encuentro furtivamente prestaron toda su atención en lo que el chico diría.

"Esta magia se creó para pelear contra ustedes" Explicó cubriendo de fuego ambos puños y llenando de esperanzas a los habitantes.

"Metsuryu Mahou (Magia del Asesino Dragón)" Terminó su pequeña explicación saltando hacia el Dragón que intentó volar, solo para recibir el siguiente ataque del ojiazul.

"¡Kaeienryu no Yokugeki! (Golpe de Ala del Dragón de Fuego Eterno)" Y simulando alas el fuego cubrió sus brazos para atacar con corrientes de fuego dorado que lastimaron gravemente al reptil.

"¡Arghh!" Gimió en dolor antes de desplomarse al suelo después de haber logrado elevarse un par de metros.

Estando derribado alzó su vista para ver frente a él a ese humano que lo dejó en ese estado, gracias al ángulo y un poco de humo su figura se iba oscureciendo desde el torso hasta la cabeza, dejando visible una silueta oscura con ojos brillando como dos puntos rojos que lo hicieron temblar desde lo más profundo de su corazón.

"Soy un Dragon Slayer" Concluyó antes de que un círculo mágico apareciera frente a él al mismo tiempo que inflaba su pecho, alarmando al reptil que intentó levantarse con el deseo de huir de ahí.

Todo el mundo contuvo el aliento ante lo que se venía.

"¡Kaeienryu no Hoko! (Rugido del Dragón de Fuego Eterno)" Un gran rugido se escuchó acompañado de un torrente de llamas que arrasaron con todo a su paso avanzando hacia su objetivo.

"¡Grrrrrrrr!" Rugió con desesperación el reptil antes de ser arrastrado por el ataque que siguió de largo hasta salir del pueblo.

¡BOOOOMMM!

El Uzumaki observó detenidamente el sitio del impacto a la distancia antes de hacer una ligera mueca en decepción y voltearse para caminar hacia los pequeños.

ʺAnta ja moenee na (No eres lo suficiente para encenderme)" Dijo con voz audible a todo el público.

Un profundo silencio había caído en el lugar, hasta que.

"¡Eso fue increíble Onii-san!" Exclamó Yozora soltándose del clon y corriendo hacia el ojiazul, que sonrió al ver como la pequeña azabache se lanzaba sobre él.

"¡Waaaaaaa!" Rugió el pueblo completo al salir del shock empezando a rodearlo mientras festejaban con júbilo, por fin alguien era capaz de aniquilar a esas desalmadas criaturas.

Todo el mundo le hacía preguntas, pero al ser tantas personas hablando al mismo tiempo era difícil entenderles, el rubio-azabache subió a la pequeña sobre sus hombros que rió ante este gesto y se dirigió hacía su copia que se disipó al haber cumplido su rol, entonces detuvo su andar frente a los dos pequeños restantes, sobra decir que Sena se aferró a su pantalón inmediatamente.

Entonces su mirada se centró en el pequeño Kodaka, que lo miró intensamente y con una mirada decidida.

"Por favor enséñame, quiero hacerme fuerte para protegerme, para protegerlas y para proteger a aquellos que lo necesitan" Dijo con toda la convicción que pudo reunir, para luego proceder a inclinarse.

"¡Por favor, se lo pido! ¡Tómeme como su aprendiz!" Exclamó fuertemente llamando la atención de todo el mundo, que al ver las acciones del ojiazul lo dejaron hacer a su voluntad.

Ante esto, el rubio-azabache sonrió de forma zorruna, este chico tenía un gran espíritu y un noble objetivo, incluso su sonrisa creció al ver como Yozora desviaba la mirada con un sonrojo en sus mejillas, mientras Sena bajaba la mirada con un sonrojo más pronunciado y sintiendo como se aferraba a su pantalón por esto.

Incluso sus inquilinos no pudieron evitar comentar este hecho.

"Awwww, el príncipe quiere ser fuerte y proteger a sus princesas" Habló Nibi soñadoramente mientras el Kyubi sonreía con los ojos cerrados.

"Se parece a cierto cabeza hueca que conozco jejeje" Rió levemente mientras oía palabras de protesta por parte del ofendido ojiazul.

Haciendo un ligero puchero, el rubio-azabache ignoró lo dicho por el zorro antes de poner su mano sobre la cabeza del pequeño y sonreír.

"Esa es una buena respuesta, entonces es hora de irnos Dattebayo" Habló el ojiazul mientras Kodaka alzaba la mirada rápidamente sin poder creerlo, hasta que grito en jubilo aferrándose a la pierna del Dragon Slayer que acarició su cabeza con gentileza.

"Bien, entonces hacia Rozan" Dijo el ojiazul congelando a los pueblerinos que presenciaron todo.

Un silencio sepulcral invadió el lugar, cosa que notó el ojiazul y sabiendo muy bien la razón del porque desapareció de ahí con un Shunshin de fuego, haciendo que los lugareños abrieran sus ojos ampliamente ante esto.

En otro sitio, a las afueras del pequeño pueblo cuatro figuras eran visibles, tres pequeñas y una grande "Ne ne Onii-chan ¿A dónde vamos?" Preguntó Sena con entusiasmo en su voz.

"Nuestro destino es Rozan, la montaña de los Dragones" Respondió el ojiazul congelando a los pequeños.

"Pe-Pe-Pe..." Tartamudeaba Kodaka con enojo mientras apretaba los puños, en cambio las dos pequeñas tenían expresiones de dolor en sus rostros.

"Sé lo que piensan y lo que están sintiendo, pero esta magia solo puede ser enseñada por un Dragón" Explicó con seriedad el Dragon Slayer al pequeño trío que lo miró con sorpresa.

Este se agachó a la altura de los tres y los miró con calidez.

"Sé que este absurdo conflicto ha afectado a los humanos más que a nadie, yo también perdí a seres queridos a causa de situaciones similares" Hablaba mientras los atraía en un abrazo.

"Pero no debes de olvidar las palabras que dijiste, el poder que obtendrás es para proteger y defender lo que es correcto, no para la venganza" Dijo antes de apretarlos ligeramente.

"…" El pequeño asintió en silencio mientras se perdía en el calor que las palabras del ojiazul le trasmitieron, al tiempo que las pequeñas lloraban en su pecho.

Una vez que ellas se calmaron, y Kodaka se sonara la nariz después de aguantar las lágrimas como todo un hombre, empezaron a caminar por el terreno árido y con poca vegetación que separaba al pueblo de las montañas.

"En un par de horas llegaremos al campamento, ahí podrán bañarse y vestir ropa en mejores condiciones, también hay otros niños que aprenderán esta magia" Expuso el Uzumaki que recibió tres miradas interrogantes que lo hicieron reír ligeramente.

"Jejeje… No les dije, he buscado en varios lugares a aquellos que deseen aprender esta magia sin odio o rencor en su corazón" Aclaró el rubio ganándose tres miradas incrédulas de los pequeños.

Este solo sonrió de forma zorruna antes de volver la mirada al camino siendo seguido de los tres pequeños con más curiosidad que nunca.

Después de un par de horas, llegaron a un pequeño campamento conformado por tiendas y una gran hoguera en el centro, donde los tres pequeños pudieron observar a varios niños más que jugaban o hacían cosas para pasar el rato.

"Bienvenidos al campamento Alfa Dattebayo" Habló el Uzumaki sacándolos de su pequeño trance.

Estos lo miraron un tanto curiosos ya que este había inflado su pecho lleno de orgullo.

"Sabes, ese Dattebayo que se te escapo restó impacto al gran nombre que escogiste" Dijo Kurama con voz plana mientras el ojiazul se sonrojaba levemente.

"Jejeje que tierno eres Naruto-chan" Rió Matatabi divertida sonrojando más al ojiazul.

"¡Hmp!" El rubio-azabache se cruzo de brazos con un puchero ignorando la risa de ambos Bijus.

Los tres niños tenían enormes gotas en la nuca al ver como su ahora figura de hermano mayor pasaba de estar orgullosamente erguido, a encorvarse con un sonrojo para luego hacer un puchero, definitivamente empezaron a cuestionarse si fue buena idea venir con él.

Con un suspiro, el ojiazul dejó de lado lo sucedido y les sonrió a los pequeños.

"Bien, vamos a que se presenten con los demás" Dijo mientras entraba al campamento, ante esto los pequeños se miraron antes de asentir y seguir al rubio.

Observando con más calma, pudieron ver que la mayoría de niños tenían más o menos la misma edad que ellos.

"¡Onii-chan regresó!" Exclamó una voz infantil que detuvo en seco a los demás niños, quienes al distinguir la figura del ojiazul rápidamente corrieron hacia él.

"¡Onii-chan! ¡Naruto-nii!" Exclamaban mientras se lanzaban sobre un nervioso Dragon Slayer.

PAAMM

El rubio-azabache yacía derribado bajo un montón de pequeños que se aferraban fuertemente a él.

"¡Gahhʺ Cabe decir que los nuevos reclutas hicieron una mueca de dolor tan solo con verlo.

Minutos después, el rubio observaba a los pequeños que se habían formado en posición de firmes, llegando a casi veinte pequeños de entre siete y diez años.

ʺQuiero decirles que he terminado mi búsqueda, mañana partiremos para conocer a sus respectivos maestros, por ahora descansenʺ Fueron sus palabras a lo que los pequeños se dispersaron por el campamento.

Solo los tres nuevos quedaron.

ʺSerá mejor que se aseen, en la última tienda hay un baño termal, aquí hay algo de ropaʺ Sacando un pergamino de entre sus ropas.

PUFF

Varias prendas aparecieron por lo que después de escoger una muda, cada uno fueron a tomar un baño rápidamente.

El cazador de Dragones los vio alejarse, antes de dirigirse a su cocina improvisada, donde empezó a preparar la cena con la ayuda de algunos clones.

Minutos después

Todos los pequeños se encontraban reunidos en una gran mesa, mientras devoraban la comida preparada por el rubio, siendo el nuevo trío los únicos ausentes.

Este los observaba con una ligera sonrisa, al verlos tan animados y felices, recordando las condiciones en que encontró a cada uno.

ʺO-Onii-chanʺ

Una tímida voz infantil llamó su atención.

Dirigió su vista al origen de dicha voz, encontrándose con una pequeña rubia limpia y bien vestida.

Vestía un vestido amarillo hasta sus rodillas, no tenia mangas y dejaba sus hombros al descubierto, aunque la chaqueta azul se encargaba de cubrir esa parte, también llevaba zapatos blancos y su cabello atado en una coleta alta.

ʺOnii-sanʺ Murmuró la pequeña azabache al lado de la rubia.

Vestía unas mallas negras y una falda azul, blusa roja y un chaleco negro, calzaba unas pequeñas botas cafés.

Por último, el varón del trío.

ʺ…ʺ

Este vestía pantalones negros hasta los tobillos, una camiseta sin mangas color azul marino y una bufanda naranja en su cuello, calzaba unas botas cafés.

Lo que más destacaba en él era su cabello, al no llevar su gorro este estaba completamente a la vista.

Cabe decir que fue una sorpresa para el Uzumaki que Kodaka tuviera la misma combinación de colores en el cabello, aunque a diferencia de él, el del pequeño era natural.

Los demás chicos veían a las pequeñas levemente sonrojados, mientras las niñas centraban su atención en el chico.

ʺInteresante, parece ser que tenemos algo en común Kodaka Dattebayoʺ Mencionó con una pequeña sonrisa, apenando al chico.

El pequeño trío se acomodó en la mesa y se sirvieron algo de alimento, aunque la rubia se decepcionó al no ver ese manjar que el rubio les dio en aquel pueblo.

Naruto posó una mirada llena de orgullo sobre Sena, sin saber exactamente porque, pero lo desestimó de inmediato.

Tiempo más tarde.

Ya había oscurecido, y ahora todos los niños se encontraban alrededor de una fogata que los protegía del frío de la noche.

Todos se hallaban riendo y conociéndose, el peli-mixto se los había recomendado ya que en un futuro cercano debían de trabajar juntos, y era mejor conocerse desde este momento para fomentar la confianza.

Claramente él les compartió cosas sobre él, anécdotas de su infancia o peleas asombrosas así como varias historias, obviamente omitió algunos detalles respecto a su procedencia y habilidades que ellos no deberían de saber.

Así había pasado un par de horas, y todos los chicos se habían ido a dormir, estos se había distribuido en las diferentes tiendas de campaña evitando el frío de la noche.

Mientras tanto, Naruto se hallaba de brazos cruzados sentado sobre un tronco, observando fijamente el fuego de la fogata.

Este pensaba acerca de Kodaka, Sena y Yozora.

Por alguna razón se había encariñado con los pequeños, incluso consideró en instruirlos él mismo, pero casi instantáneamente se había arrepentido.

El recordar que los Equipos Genin eran de tres integrantes le hacía extrañar su hogar y preguntarse qué sería de la vida de sus amigos.

También recordó que Jiraiya había encontrado a un trío de huérfanos y los había entrenado, sin duda el saber que podría seguir sus pasos lo llenaba de cierta calidez, pero había reflexionado.

Si hacía eso… ¿No sería para satisfacer sus deseos egoístas?

Por un momento sintió que lo haría para calmar su dolor de lo que pudo haber sido su vida en Konoha.

¿Habría sido un Jounin-sensei?

¿Se habría enlistado en ANBU?

¿Habría logrado convertirse en Hokage?

¿Se habría casado?

Sonrió con cierta melancolía, esas preguntas ya no tenían significado ahora.

Pero las posibles respuestas dolían no saberlas.

Despejando sus dudas, alzó su mirada al cielo, contemplando el cielo nocturno.

ʺ¿Estás bien Naruto-chan?ʺ Oyó decir en su mente.

ʺSi, no te preocupes Mata-chanʺ Contestó con una pequeña sonrisa mientras regresaba su vista al fuego.

ʺNo te preocupes cachorro, estoy seguro que encontraras tu motivo de vivirʺ Consoló el zorro dentro de su mente.

ʺLo séʺ Fue su corta respuesta.

Se sentó en el suelo recargándose en el tronco antes de cerrar sus ojos y tratar de descansar, aunque se mantenía alerta por cualquier visitante no deseado que decidiera aparecer.

Los dos residentes internos hicieron lo mismo, no es que tuvieran otra cosa que hacer.

A la mañana siguiente

Otro día llegaba a Earthland, y nuestro héroe caminaba con calma seguido de varios pequeños en dirección a las montañas.

ʺNe ne Onii-chan ¿Cómo serán nuestros maestros?ʺ Preguntó curiosa la pequeña Sena.

Los demás prestaron atención a lo que les diría el Uzumaki.

ʺBueno, no sé cómo podría responderle eso, ya que solo conozco a los Dragones superiores y dudo mucho que alguno los tome como aprendicesʺ Respondió rascando su mejilla.

ʺ¿Porque? ʺ Preguntó un niño al azar.

ʺBueno, por lo que puedo deducir sé que no serían tan blandos como lo serán sus maestros, por lo que las probabilidades de sobrevivir son pocasʺ Volvió a responder, esta vez con expresión seria.

Los escuchas temblaron levemente ante tal respuesta.

ʺNo se preocupen, yo los cuidaré y evitaré cualquier incidente si tienen problemas con algunoʺ Complementó al recordar al Dragón que lo menospreció.

Con esas palabras la seguridad los llenó mientras seguían su camino.

Una hora después

El grupo se encontraba a media montaña, donde usualmente entrenaba el Dragon Slayer.

Frente a ellos se erguían varios dragones de distintos tamaños y colores, sin mencionar sus diferencias físicas bastantes notables, revelando en parte la naturaleza de dicho ser.

En medio de todos ellos, un enorme Dragón blanco con lo que parecían unas astas de ciervo, una barba bastante larga y un aura de majestuosidad, cabe decir que su apariencia física era la de un Dragón de cuerpo alargado.

ʺVeo que cumpliste con tu misión, Narutoʺ Habló bastante satisfecho el Dragón.

El mencionado asintió con seriedad.

ʺTodos ellos tienen algo especial, estoy seguro que usarán su poder por las razones justas, Georgiusʺ Comentó.

El Dragón asintió ante lo dicho por el chico.

ʺPuedo verlo, ellos poseen corazón y determinación así como un corazón puroʺ Dijo después de pasear su vista en ellos.

Normalmente los niños se sentirían intimidados, pero la presencia de Naruto les infundía seguridad.

Georgius centró su atención en sus camaradas.

ʺEscojan a sus aprendicesʺ Pidió con firmeza y serenidad.

Estos se movieron a la vez, empezando a rodear a los pequeños que se tensaron levemente, pero una mirada del ojiazul los tranquilizó.

Uno a uno, fueron eligiendo a sus aprendices, alejándose en varias direcciones para así empezar con el proyecto.

Hasta que solo quedaron cuatro.

El trío que el ojiazul había encontrado a lo último junto a un pequeño de cabello blanco.

Al mismo tiempo, solo quedaban tres Dragones junto a Georgius.

ʺ¿Cuál es tu nombre pequeña?ʺ Preguntó uno a la pequeña rubia.

Este era un dragón de escamas azules-verdosas, con curiosas aletas en brazos y cola, además de ser bastante delgada en comparación con otros del mismo tamaño.

Cabe decir que su voz era claramente femenina, además de tener un tono maternal.

ʺSe-Sena.. Mi nombre es Senaʺ Contestó con duda al principio, antes de hablar con decisión.

ʺBien pequeña Sena, desde ahora seré tu maestra, yo soy Umie, Dragona del Aguaʺ Se presentó.

Con un movimiento de su cola, tomó a la pequeña con gentileza para ponerla sobre su cabeza.

ʺCuídala mucho Umie-chan, y Sena, confía en ellaʺ Habló el rubio con tono cálido.

Lo mismo había dicho cada vez, pero esta vez era diferente con la pequeña.

ʺHmp, sabes que lo haré Naruto-chanʺ Respondió abriendo su alas.

ʺHai~ Onii-chanʺ Afirmó la pequeña de forma infantil.

Ella había empezado a sentirse cómoda con la Dragona, además la forma de tratarse con el Dragon Slayer le había confirmado que no tenía nada que temer.

ʺNos veremos pronto Sena-chanʺ Se despidió la pelinegra.

ʺCuídate, espero verte prontoʺ Fue el turno de Kodaka.

La pequeña asintió con una sonrisa, aunque tenía lagrimas sabía que esta despedida era temporal.

Alzándose en el aire, Umie emprendió vuelo a sitio desconocido.

ʺAhora es mi turno, Gaki te vienes conmigoʺ Dijo dirigiéndose al peli-mixto.

Lo tomó con una de sus garras, mientras el pequeño se retorcía.

ʺAegris, el dragón caído será tu maestro y tu perdición jajajaʺ Hablaba con diversión un tanto sádica.

Este era un Dragón oscuro, plumas negras cubrían su cuerpo siendo más numerosas en las alas y la cola.

Marcas tribales cubrían su torso y los brazos, ojos violetas con rasgadura además de llevar unas hombreras metálicas y deterioradas, curiosamente poseía tres pares de alas dándole un toque distintivo entre su especie.

Kodaka estaba azul del miedo al oír lo que dijo.

ʺNo asustes al chico Aegrisʺ Pidió el peli-mixto mayor dándole una mirada perezosa.

ʺBah… como quieras, nos veremosʺ Se despidió empezando a elevarse.

ʺNo olvides para que entrenas, Aegris será un buen maestro para ti, suerteʺ Se despidió el ojiazul.

ʺNos veremos Kodakaʺ Despidió esta vez Yozora.

El chico asintió con seriedad, antes de desaparecer junto al Dragón.

ʺCurioso, parece ser que me tocó alguien interesanteʺ Habló el último Dragón.

Cuerpo blanco con algunas formaciones escamosas parecidas a cristal color azul.

Alas de membranas azules, en cuyo lugar estaban unas pequeñas garras indicando que eran sus brazos, cuernos curvos hacia atrás de su cabeza.

Cada vez que hablaba neblina salía de su boca.

ʺMi nombre es Cocyutos, el Dragón de hielo… desde ahora tu maestroʺ Bajando su cabeza a su altura.

La pequeña se sintió levemente intimidada, antes de poner una expresión determinada y subir por el hocico del Dragón hasta llegar a su cabeza.

Con una ligera sonrisa, este se irguió de nuevo, fijando su vista en el ojiazul.

ʺCuidaré de ella Naruto, no tienes que preocuparteʺ Empezando a elevarse.

Este cerró sus ojos y sonrió para sí mismo.

ʺNos veremos Onii-san, visítame cuando puedasʺ Exclamó la pequeña.

El Mencionado alzó su mano y confirmó con un asentimiento.

El Dragón cabeceó con respeto al Uzumaki antes de perderse en la distancia.

ʺYo tomaré al pequeño restante, supongo que regresarás a entrenar con Atlas Flameʺ Habló el Líder de la Facción pacifista.

ʺAsí es, me he ausentado bastante tiempo, aún hay cosas que no he dominado incluyendo algunas técnicas propiasʺ Confirmó.

Georgius asintió ante esto.

ʺEntonces, hasta la próximaʺ Tomando al chico en su palma empezó a alejarse.

PUM

El peli-mixto entrecerró su vista en ellos, específicamente en el pequeño que Georgius llevaba en la mano.

ʺ¿Sentiste eso?ʺ Oyó en su mente.

ʺFue algo oscuroʺ Comentó una voz femenina.

ʺLo sé, pero así como vino despareció, quizás lo haya imaginadoʺ Contestó con seriedad.

ʺPuede ser, pero es mejor mantener un ojo sobre élʺ Sugirió el zorro.

ʺSolo si vuelve a pasar, lo mejor ahora es dominar mis poderes dormidos, los próximos años serán problemáticosʺ Declaró evocando su magia, para usar su Dragón volador de Fuego e ir con Atlas-.

ʺNaruto… ¿Cuál era el nombre del gaki?ʺ Preguntó el zorro en medio de su vuelo.

ʺNo recuerdo bien, él se mantuvo mucho tiempo callado mientras yo centré mi atención en Yozora, Sena y Kodakaʺ Respondió el ojiazul.

ʺMmmm… Creo que empezaba con A… Ab... Ak…ʺ Fue el aporte del Nibi.

ʺ¡Oh! Ya recordé, su nombre era… Agnologíaʺ Recordó el rubio con gesto algo avergonzado.

Sin detenerse, siguió surcando el cielo, sin saber que ese nombre causaría terror en un futuro cercano, además de marcar un nuevo inicio en su camino.


Aquí otro cap de este cross.

Dejaré el contestar los reviews para el proximo cap.

Aclaraciones:

Naruto poseerá dos magias: Dragón Slayer y Re-equip

Habilidades de Chakra completas, excepto algunas técnicas.

El como llegará a Fairy Tail ya lo había pensado desde hace mucho.

Aunque el usar la puerta eclipse me fue tentador, pero me apegaré al plan inicial.

Esas son respuestas a algunas preguntas que hicieron en algunos reviews.

Ja ne.