Declaimer: Los personajes de Fairy Tail no me pertenecen, son propiedad de Hiro Mashima. Los utilizo sin ningún fin de lucro.
– "pensamientos o recuerdos"
–hablan
Pareja: Natsu-Lucy
U/A: OoC.
Humor; Romance.
Summary: Lucy aprenderá a sobrellevar su relación, por un simple y contundente hecho; la mascota de su novio.

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::: Extraña Tarde a Tú Lado :::
(One-Shot)

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Lucy estaba más que feliz. Esa sonrisa que portaba, mientras se miraba en el espejo de cuerpo completo, el atuendo que momentos antes había escogido para la cita. La delataba. Su dicha era grande. Ya que Natsu le había propuesto pasar la tarde juntos.

Tan solo de recordar sentía cientos de mariposas revolotear en su estómago.

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"Natsu y Lucy tomaban un pequeño aperitivo, en el caso de ella, por que el primero se empaquetaba cerca de ocho onigiris, dos piernas eran sostenidas en sus manos, las cuales mordía y si a eso le agregamos que se había terminado una pizza completa, varios vasos de refresco, diferentes platillos de carne y sopas… Que decir.

– Lucy…– llamo a la chica sentada frente a él, por su parte ella solo se limito asentir, ya que tenia su completa atención – ¿Quieres pasar esta tarde en mí apartamento? – no pudo evitar la sorpresa reflejada en su rostro, y es que él a pesar de que vivía básicamente en su apartamento, nunca la había invitado al suyo. Sonrió.

– ¡Claro! – exclamo feliz.

– ¡Que bien! – dijo mientras le regalaba una sonrisa llena de jubilo. Si no fuera por que la comida se le estaba saliendo de la boca, ella definitivamente se la hubiera devuelto"

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Pero todas aquellas mariposas se convirtieron, en brasas del más intenso de los fuegos, y es que el muy descarado había dicho:

–"Lucy… tu pagas" – y salió de lugar dejando a una muy conmocionada rubia, y es que debía un mes de comida ¡Un mes! ¡Por dios¡ ¿Qué le pasaba a su novio?
Suspiro. Mejor no pensar en los malos momentos, y mejor creer, que esa tarde solo era de ellos, y todo marcharía bien. Una idea cruzo su mente…

– Y que tal si Natsu… me ha preparado una cena sorpresa…– tan solo pensar en esa posibilidad, hacia que sus ojos se iluminaran al imaginar; una tenue y melodiosa música de fondo, en medio del espacioso apartamento, una mesa para dos que este a su vez era iluminado con incontables velas, puestas en diferentes lugares y degustando el exquisito olor a comida; solo para ella y por ella.

Suspiró – Seria maravilloso… – y un sonrojo invadió sus mejillas ante su última idea – y que tal si… – se llevo una mano para cubrir su boca, ante la felicidad que le daba su imaginación – me pide matrimonio…– susurro.

Y con aquello último en sus pensamientos, miro el reloj de pared – Ya casi es la hora – agarro su bolso. El sonido de unos toques en la puerta llamó su atención. Allí estaba su momento que había esperado. Lentamente camino hasta la puerta, y la abrió con sumo, cuidado pues sus nervios estaban a flor de piel.
Una vez abierta solo pudo encontrarse con aquella desordenada cabellera rosa, tan conocida.

– ¡Lucy! –Exclamo alegre – te ves muy bien…– halago.

Ella no pudo evitar su sorpresa. Aquello había sido un halago proveniente de la persona mas despistada, atolondrada y poco perceptible para los detalles. ¿Se había dado cuenta de su arreglo personal?

– Gracias.

Ambos se encontraban caminando hacia el apartamento, contando trivialidades y cosas sobre sus amigos. Pero no podía evitar que los nervios se acrecentaran a cada paso; e innumerables ideas cruzaban su mente, poniéndola aun mas nerviosa. Pronto llegaron a un edificio de apartamentos pero no cualquiera si no ¡Los mejores del lugar y posiblemente de todo el lugar en cuestión!

Su vista se desvió a su acompañante – ¿Tu vives ahí…? – señalo el lugar.

Asintió – Sí… mi padre es dueño de una cadena de hoteles y construcciones de, apartamentos para solteros – paro en seco "padre… dueño… hoteles y apartamentos… solteros" necesitaba tiempo para digerir la información.

– Varios rentan aquí también… – Okey. Ella ya no seguía el hilo de la situación.

Ambos ingresaron al lugar, era bastante amplio y muy elegante como para que fuera para solteros, el de él, era uno de la planta alta así, que tuvieron que subir en un elevador. ¡Claro que antes! Natsu le había dicho que era mejor subir por la escaleras ya que le hacia falta un poco de ejercicio. Ganándose la vista de varias personas allí presentes, y es que lo había gritado a pulmón abierto.

Pronto estuvieron frente a la puerta de madera. Muy bonita en los gustos de Lucy. Y justo antes que se abriera sus nervios se dispararon.

– Lucy…– la voz seria de Natsu atrajo su atención – pase lo que pase no grites… – ¿Por qué le decía aquello? Y allí venia el momento al abrir la puerta…

Sí. Sus nervios se dispararon; al igual que sus ojos era un total cochinero ropa por aquí por allá, basura, comida, latas y varias plumas "¿Plumas?" Se cuestiono. O los cojines habían sido arañados y rasgados, al igual que la sala del lugar ¿Qué había pasado?

Primer pensamiento desechado: "No habría cena para dos".

– Siéntate… – ofreció amablemente, ella lo acepto, él camino hasta la puerta que según ella daba a la cocina – ¡¿Quieres tomar o comer algo?!

– ¡Un vaso de agua esta bien! – contesto.

Segundo pensamiento: "El lugar si era grande aunque; claro también el cochinero que había ahí".

Su vista se desvió hacia el ventilador, en uno de los pasillos, entrecerró sus ojos. ¡Que demonios era eso! Se acerco un poco al lugar cuidadosamente, para que este no se diera cuenta.

Suspiro aliviada por un momento, imagino que lo que daba vueltas era una persona – Son solo sus calzoncillos…– regreso de nuevo a sentarse. Pero al llegar al lugar no pudo evitar sentirse… incomoda, algo pasaba en ese lugar. Su vista se fijo debajo de un pequeño mueble donde estaba una pantalla, se agacho un poco para poder ver ¿Por qué Natsu tenia una fusta? Y entonces las palabras que le dijo este antes de entrar vinieron a su mente.

– "Lucy… pase lo que pase no grites" – ¿Acaso él…? Y se vio a si misma, atada de manos y piernas en una amplia cama mientras que Natsu, estaba de pie frente a ella, y golpeaba levemente la fusta en su otra mano. Un grito escapaba de los labios de Lucy

– "Lucy… te dije que no gritaras…"

Sus nervios se encresparon mas al escuchar su voz detrás de sí – Perdón... – se disculpo ¿Por qué? – No podía servir el agua así que… toma – le extendió el vaso. Ella lo tomo – ¡Voy a preparar algo! – y volvió hacia la cocina.

– ¡No es necesario no tengo hambre…! – lo que quería era irse justo en ese momento. De nuevo la voz de él atrajo su atención.

– ¡¿Quieres un poco de…?! ¡Gato rostizado! – ella abrió los ojos. Había escuchado bien él dijo; "gato rostizado" le estaba ofreciendo un gato. – ¡Digo un poco de pollo! – suspiro aliviada.

– ¡Sí! – no se iba negar. Necesitaba llevarse algo a la boca, o terminaría por comerse sus dedos de los puros nervios. Pronto él estuvo de vuelta, trayendo consigo un plato de piernas y alas pero… rostizadas no estaban… si no mas bien chamuscadas.

– Lo siento – asintió en compresión – es que mí gato… – entonces eso del plato, no era pollo si no su gato – se comió lo demás y dejo… esto… – de nueva cuenta suspiraba aliviada; así que no era su gato el del plato.

–Tienes un gato… nunca me lo mencionaste…– dijo un tanto molesta.

Sonrió – Lo traeré para que lo veas – volvió de nueva cuenta a la cocina se escucharon uno que otro insulto, cosas siendo aventadas y después de eso un silencio. Estaba a punto de levantarse e ir a ver, cuando de nueva cuenta salió trayendo consigo un gato color azul, con un pequeño pañuelo verde atado a su cuello – ¡Mira! Este es…–dijo con una sonrisa.

– Natsu… ¿Acaso pintaste el gato? – el negó diciendo "este es su color" – ya veo… – dijo no muy convencida – es bastante lindo…– asintió a su favor.

– Se llama Happy…– estiro un poco su mano para acariciarlo cuando de nuevo escucho la voz de Natsu – Happy ella es Lucy… espero se lleven bien – y entonces en ese momento abrió sus ojos y la miro directo a los cafés de ella.

– Mucho gusto Lucy… – su mano paro en seco. ¿El gato le acababa de hablar? ¿Los gatos hablan…? Miro a Natsu antes de gritar con todas sus fuerzas.

Tercer pensamiento antes de desmayarse: "Tampoco había propuesta de matrimonio. Y posiblemente se estaba volviendo loca".

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Momentos después Natsu observaba como Happy arrastraba una sabana y la acomodaba a un lado del cuerpo de Lucy, que se encontraba desmayada en el suelo. Happy junto las manos a la altura del pecho de la rubia y todas aquellas plumas las puso alrededor del cuerpo de la chica.

Y uniendo sus dos pequeñas gatunas manos, rezo por el alma de aquella rubia.

– Happy… no esta muerta…– murmuro Natsu al ver que este rezaba.

– ¿Acaso no quieres ser soltero de nuevo…? – Dijo mientras tomaba la manta y la tapaba completamente – estoy seguro que ella hubiese querido que siguieras con tu vida…– y prendió una veladora.

– Happy…– llamo a su compañero. El nombrado no le hizo caso, y tomando las piernas y alas, las metió en una bolsa amarrándolas a las manos de Lucy con cinta adhesiva ¿De donde había sacado todo eso? Se cuestiono Natsu. La volvió a cubrir.

– Y… eso ¿Por qué era...? – Happy negó ante la pregunta.

– Natsu… no sabes que el camino es largo… de seguro le dará hambre…– zafo su pequeño pañuelo y saco un pescado.

– ¿También le darás tu pescado…?– cuestiono incrédulo de lo que posiblemente era un milagro. Él nunca daba sus pescados.

– No – le dio una mordida – todo esto me ha dado hambre…– y le dio otra mordida.

– Por cierto…– Natsu se acordó de algo – ¿Qué hacías dentro de la estufa? parecía que querías ser pollo rostizado... tu dando vueltas…– dijo mientras una sonrisa se dibujaba ante el recuerdo.

– Tu novia me quería comer… la vi con ojos desilusionados cuando le dijiste que lo del plato era pollo – Natsu abrió los ojos ante lo dicho, entonces Lucy era una caníbal y no cualquiera si no una de gatos – debes cuidarme de ella.

– ¿Es por eso que no querías salir de la cocina? – Asintió – pero no era necesario que me tiraras todo lo que encontrabas a tu paso…

– Ni que fuera mucho – se hundió de hombros – solo era una docenas de platos, seis sartenes, unos cuantos vasos y tazas…– chupo los huesos de su pescado.

– Pero sabes me costo mucho robárselos a Lucy – entonces la vista del gato se fue directo al cuerpo tapado.

– Todo eso era de ella… – un "sí" salió de los labios de Natsu – ya veo…– y dejando de chupar el esqueleto de su pescado; destapo a Lucy y se lo pego con cinta adhesiva a las manos – te dejare que chupes los últimos huesitos de mí pescado – y unas lagrimas escaparon de sus ojos – espero ella te chupe igual que yo.

– Ya te dije que no esta muerta. – dijo con voz cansada. Entonces el timbre sonó, se dirigió hacia la puerta y la abrió. Era un repartidor.

– Se encuentra el señor Natsu Dragneel – pregunto amablemente.

– Si… soy yo – miro de reojo a su gato este ahora volvía de nueva cuenta a rezar.

– Firme aquí por favor – él firmo ¿Que estaría tramando su gato? Por que era seguro que todo eso era idea de la retorcida mente de Happy – esta bien… aquí esta su paquete…– le entrego una caja enorme, bastante liviana– muchas gracias – después de eso cerro la puerta ¿Qué contendría el paquete?

Volvió hasta la sala y se sentó. Empezó a destapar poco a poco el paquete. Sin embargo seguía mirando a su gato, su sorpresa fue mayor al ver unas cuantas bolsas negras para basura, con la marca registrada de: "Las mejores bolsas para sacar un cuerpo de su apartamento"

– Happy…– el nombrado dejo de rezar – ¿Que significa esto? – le mostro las bolsas.

– Bueno no piensas sacarla en un ataúd ¿O sí? – aquello lo desconcertó ¿Era en serio? la hacia ya muerta ¡Pero si estaba viva aún! – Además…– señalo las bolsas – son de las mejores… y no llamara mucho la atención – eso sonaba como si ellos la hubieran matado, y no quisieran dejar evidencia alguna – lee las instrucciones…

¿También tenía instrucciones?, saco un papelito que venia en el paquete.

– Antes de usar "Las mejores bolsas para sacar un cuerpo de su apartamento".

1: Asegúrate de que nadie te este mirando y que tu cómplice no quiera echarte de cabeza.
2: Fíjate que la bolsa no este rota, puesto que la empresa no se hace responsable de que el cuerpo se te caiga a medio camino.
3: Unas vez cumplidos los anteriores puntos, solo mete el cuerpo a la bolsa y ciérrala con la cinta "Para que no se te escape el muerto".

PD: Asegúrate que el muerto; sí este muerto, la bolsa no soporta movimientos.

¿Era en serio? ¡Hasta instructivo con advertencia y todo!

– Bien Natsu… manos a la obra…– Happy tomo una bolsa y verifico que estuviera bien, para que así no tuvieran problemas – yo abro la bolsa y tu la metes – ordeno.

El peli rosa jalo a Lucy un poco, y con sumo cuidado la metió dentro de la bolsa – Pero… ¿No tenemos la cinta "Para que no se te escape el muerto"?

– No te preocupes…– saco la cinta con la cual había atado la comida y el esqueleto – pero tengo "La cinta perfecta para interrogaciones, nunca deja hablar a las victimas".

– Pero no es solo para victimas ¿En verdad funciona…? – el gato asintió y empezó a enrollar la cinta, pero algo estaba mal, la cabeza de Lucy todavía estaba fuera.

– Tu novia esta cabezona…– menciono – estas bolsas son extra grande – fue en busca de otra bolsa – por cierto… estaba dentro de la estufa por que quería verificar que funcionara – él otro se acordó de lo sucedido y sonrió ampliamente – pero me quede atrapado… y daba vueltas por desesperación – le entrego la bolsa al peli rosa.

– ¡Listo! – dijo al ver el cuerpo totalmente tapado – ahora… ¡Pero que demonios estoy haciendo! – exclamo alterado al ver que todo el tiempo había estaba siguiéndole la corriente a Happy. Empezó a destaparla.

– Y tan bien que nos quedo…– se quejo – y solo son dos bolsas – suspiro.

– ¡Basta Happy! ya te dije que no esta muerta – y levándola la acomodo en el sofá – solo se desmayo de la impresión…

– Pero es una maleducada – volvió a quejarse – mira que desmayarse en una casa ajena – fue a la cocina y regresó de nueva cuenta, con un pedazo de pescado – recuerda esto Natsu… ella me quiere comer.

– Esta bien te cuidare – le dio la razón en ese momento, no quería discutir por que sabia que posiblemente ambos terminarían enojados.

Lucy empezó a removerse en su lugar. Parpadeo un par de veces hasta acostumbrase a la luz un poco ¿Dónde estaba? ¿Qué le había pasado? De repente su vista se fijo en el gato azul que la miraba fijamente con recelo.

– Ese gato…– lo señalo – Habla…

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Lucy y Happy se miraban con recelo. Ambos cuidaban los movimientos del otro, era una batalla donde el que predijera el movimiento del otro ganaba. Y ambos sabían una sola cosa "Yo ganare".

Mientras tanto Natsu volvía de la cocina, después de que Lucy despertara le había pedido un vaso de agua y a todo esto ¿Dónde estaba el otro vaso de agua? Observo la sala ignorando la corriente eléctrica que desprendía las miradas de su novia y gato.

–"Lo encontré" – estaba sobre la mesita donde se encontraba la pantalla. Suspiro aliviado era bueno saber que no había tomado ningún trago. Solo de recordar le daba escalofríos. Happy, llegaba a tener una mente en ocasiones muy retorcida.

Y es que en la cocina había una fuga de agua, por lo tanto, toda estaba en el piso, pero él no la había juntado de dicho lugar, aunque agradecía que no la hubiera tomado. Camino hasta quedar a un lado de ambos, estos ni siquiera rompieron su mirada.

– ¡Basta los dos! – dijo cansado al ver que ni caso le hacían. Ambos giraron al mismo tiempo y lo incineraron con la mirada ¡¿Ahora se suponía que el muerto debía ser él…?!

– Toma Lucy – le extendió el vaso de agua. Ella lo tomo, estaba a punto de beber un poco cuando su vista se desvió al paquete rasgado junto a las bolsas negras. Y justo en ese momento se dio cuenta de algo… ¡Por que demonios tenia atada una bolsa con las piernas y alas chamuscadas! ¡Y luego un esqueleto de pescado!

Happy sonrió al ver la cara de horror que ponía – Tu novia no es fácil de matar… ¿Y tú que me dijiste que la traías bien muerta? Pero si esta bien viva – Natsu hacia señas para que Happy no continuara, pero este simplemente pasaba de ellas.

Por el contrario Lucy dejo el vaso de agua en la pequeña mesita, y se dispuso a quitarse eso de las manos.

Miro a Natsu – Fue idea tuya ¿no?... – el negó y entonces solo quedaba un culpable – ¡Tú…! – Se acerco a Happy y empezó a estirarle las mejillas – ¿Qué tienes en mi contra?

Natsu estaba dispuesto a separarlos cuando la voz de su gato se escucho.

– No sabes que el camino a la vida eterna es largo… necesitabas comida – y se zafo del agarre.

Bufo molesta, ese gato no solo le provocaba ansias si no también la sacaba de sus casillas. Iba a volver a sentarse cuando miro un papelito en el sofá.

Casi le da un tic en el ojo al ver de qué se trataba –"Las mejores bolsas para sacar un cuerpo de su apartamento" ¿Quién rayos manejaría dicha empresa? Además ¿Cómo era posible que algunas personas las compraran? Después se fijo en una cinta, la tomo y empezó a leerla "La cinta perfecta para interrogaciones, nunca deja hablar a las victimas", no se supone que las victimas… ¡Bah!

Mejor dejar todo eso de lado, pero algo cruzo su mente ¿Natsu tendría un cuerpo en su apartamento? Y era por eso que le había pedido venir en la tarde, puesto que una vez se hiciera de noche sacarían el cuerpo ¿Acaso quería que fuera su cómplice…? Y no pudo evitarlo. Sus nervios se dispararon como nunca. No solo esa tarde se había enterado que algunos gatos llegan a hablar si no también se convertiría en la cómplice de un asesinato.

Ya hasta se imaginaba el encabezado del periódico: "Pareja juvenil comete asesinato, y obligan a los gatos a hablar".

– Lucy…– llamo el peli rosa – ¡Lucy! – Grito esta vez atrayendo la atención de la rubia – ¿te encuentras bien? – asintió.

– ¿Natsu estas seguro…? – Él no comprendió a que se refería – nunca lo he hecho… tu sabes sacar un muerto – termino murmurando lo último.

– No te preocupes, mi tío Arthur esta bien – Lucy lo miro – ayer lo lleve atrás del jardín – y es que él había entendido Arthur en vez de muerto (por si no le entienden XD).

– ¿Nadie se dio cuenta…? – cuestiono incrédula.

– ¡Claro! Incluso algunas personas me ayudaron, mientras yo arrastraba otras bolsas… era pesado…

– ¿No era el único que llevabas a enterrar? – Natsu parpadeo un par de veces.

– Lucy…– dijo serio – yo hablaba de que había llevado a mi tío al jardín a respirar aire libre – ella sonrió nerviosa – ¿De que demonios estabas halando tú...?

– De nada…– Happy que había estado escuchando la plática concordaba en que Natsu era bastante despistado, atolondrado y poco perceptible para algunas cosas.

Suspiro – Sabes tu novia no solo es rubia…– atrajo la atención de ambos – si no que piensa que tienes un cuerpo aquí – señalo el lugar.

El peli rosa volteo y miro a la rubia – Lucy… yo no tengo ningún puerco aquí. – Happy y Lucy se querían dar de cabezazos contra la pared ¿Qué tanto podía confundir las cosas?

– Olvídalo – le restaron importancia ambos.

– Por cierto… Lucy quería darte algo…– y esta vez se fue a su habitación. Mientras tanto los otros dos volvían a lo mismo.

– ¿Cómo es que estas viviendo con él? – Dijo la rubia sentándose y Happy la imitaba – no lo entiendo…– susurro.

– Me encontró metido dentro de un huevo – le respondió – pensó que era un dragón – Okey. Natsu lograba estar mas loca que ella – y me trajo a vivir con él – la miro con recelo.

El peli rosa volvió con una pequeña cajita entre sus manos color amarillo, con un lazo rojo que atravesaba la cajita por la mitad formando un moño a un lado. ¿Eso podría ser…? La felicidad llegaba de nueva cuenta a ella, como cuando le había pedido venir a su apartamento.

– Yo… quería darte esto – dijo una vez frente a ella. Lucy lo miro con los ojos brillosos, y después a su gato que se había puesto detrás de él.

Happy se percato de la mirada brillosa de Lucy – Natsu…– llamo con temor mientras le jalaba parte del pantalón – Lucy tiene hambre… y me quiere comer…– el nombrado observó a su novia y en efecto le brillaban los ojos al ver a su gato.

– Si tienes hambre. Todavía llevas las piernas y alas pegadas a las manos… Lucy – el momento romántico se rompió con aquello.

– No tengo hambre…– le contesto– dime ¿Que es…?

– Es un regalo de aniversario – le extendió la cajita y miro un reloj de pared. Era bastante tarde – creo que es momento de que regreses a tu casa – Ella ni le prestaba atención y destapaba la cajita solo para encontrar una llave color plata. "Como las que yo coleccionó" pensó al sacarla y observarla "la llave de Nicolás…" miro a Natsu con ternura.

– Ella también te quiere comer Natsu… solo hay que ver como te mira…– debía callar a ese gato lograba ponerla no solo tensa, nerviosa y enojada con lo que decía. Si no también daba algunas ideas locas.

– Lucy deja te digo algo – quito la vista del gato para enfocarla en su novio – no tengo buen sabor… no me he bañado en semanas…

– Ella lo podría tomar como condimento – volvió a murmurar Happy.

– ¡¿Qué?!

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Lucy observaba como Natsu caminaba al lado de su gato, el cual no podría sacarse de la cabeza durante algún muy buen tiempo.

Suspiró – Pero a pesar de todo…– miro la cajita. Tal vez no hubiera cena, música, comida o anillo de compromiso, pero se había acordado de su aniversario. 6 meses tan poco y a la vez mucho.

– Hime-sama… ¿Piensa entrar o se quedara ahí parada?

– Ya voy Virgo…– y dio media vuelta. Pero se percato que esta no le quitaba la vista de encima – ¿Sucede algo?

– ¿Eso…? – señalo sus manos.

– Es un regalo de Natsu por nuestro aniver…

La interrumpió – No me refiero a la cajita. Si no más bien… a la bolsa de comida, junto al esqueleto de pescado, que trae pegado a las manos…– ahora entendía por que la gente se le quedaba viendo cuando salieron del apartamento.

– ¡NATSU! ¡HAPPY!

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FIN…

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Notas de la Autora:
¡Hola!
Espero este pequeño One Shot, les gustara y hubiesen pasado un buen rato leyendo. Mencionar que este ya lo había publicado en , así que si lo leyeron allá, no es plagio XD. Es totalmente mío. Ojala alguien se apiade de mí, y deje su review. Así que nos estamos leyendo…

Bye Bye Hanasaki95 *-*7