Demonio/invocación hablando-demonio

Demonio/invocación pensando-(demonio)

Dragón hablando-Aun eres débil

Dragón pensado-(Aun eres débil)

-Deidad hablando-Estamos contigo.

-Deidad pensando-(Estamos contigo)

No soy dueño de Naruto o Fairy Tail, sus dueños son Masashi Kishimoto y Hiro Mashima respectivamente, solo soy dueño de las creaciones y personajes originales que cree en el transcurso de la historia, tampoco soy dueño de armas, técnicas, u personajes de otras series que aparezcan en esta historia.

Capitulo 2: 11 Años de Entrenamiento.

El sonido de los golpes resonaban con fuerza por todo el lugar, se trataba de un valle montañoso completamente desierto de vida con distintas formaciones rocosas y algunas montañas de pequeño y mediano tamaño. Una enorme explosión hizo temblar el suelo de aquel lugar cuando una gran extensión de suelo se cubrió completamente de hielo y nieve mientras que otra zona estaba cubierta de llamas que crepitaban mientras el suelo se quemaba. Dos chicas cayeron al suelo sobre sus pies una enfrente de la otra, la que había caído en la zona en llamas tenia el cabello medio largo, de color rosa suave al igual que sus ojos. Usaba unas sandalias negras, unos pantalones cortos blancos debajo de una especie de falda azul con los bordes amarillos que combinaba con su chaleco sin mangas, unas vendas tapaban sus pechos copa C y llevaba una bufanda blanca alrededor del cuello. Tenia unas lindas piernas, un cuerpo atlético, piel algo morena y el vientre plano.

La chica enfrente de la pelirosa y que se encontraba en la zona parcialmente congelada tenia el cabello blanco como la cal, liso y largo hasta sus muslos, ojos grises claros y piel blanquecina. Vestía con unas botas negras que le llegaban hasta las rodillas, un pantalón azul añil, una camisa morada de manga larga debajo de una chaqueta con capucha de color blanco con detalles azules y un par de pasadores de pelo con forma de copos de nieve. La figura de la albina no tenia nada que envidiarle a la pelirosa, cintura estrecha, anchas caderas, redondos pechos copa C y un redondo y bien formado trasero.

-¡Karyuu no Tekken (Puño de Hierro del Dragón de Fuego)!-Gritó la pelirosa incendiando su puño derecho mientras se lanzaba al ataque rápidamente.

-Kōriryuu no Tekken (Puño de Hierro del Dragón de Hielo)-Dijo con voz seria y tranquila la ojigris a la vez que su puño se rodeaba de un aura helada, los dos puños de ambas chicas colisionaron provocando una nueva explosión de fuego y hielo.

-Natsuki y Akiko están tan parejas como siempre.-Comentó otra muchacha mirando la pelea desde lejos.

Se trataba de una chica de estatura algo más pequeña que las otras dos que estaban peleando. De ojos marrones claros y cabello azul oscuro atado en dos coletas a los lados de su cabeza con un par de lazos rojos. Usaba unos zapatos negros de suela lisa, unas medias negras hasta medio muslo, una falda tableada azul y una chaqueta roja con un lazo amarillo alrededor del cuello. La figura de la chica era más bien discreta, de cuerpo pequeño que parecía que aun tenia que crecer un poco, delgada y pechos copa B.

-ZZZZZ.-Fue la respuesta de la chica que estaba al lado suya, durmiendo de pie y con una pompa saliendo de su nariz sacando una gota en la nuca a la peliazul.

La chica que estaba durmiendo era alta, de piel morena, cabello morado oscuro y aunque ahora no se viesen ojos de color verde agua. Vestía con unas sandalias sencillas, un pantalón vaquero corto y la parte de arriba de un bikini rojo y azul debajo de una chaqueta de manga corta de color azul que le llegaba por debajo de las costillas y que llevaba abierta. Poseía una figura curvilínea bastante desarrollada, anchas caderas, cintura estrecha, vientre plano y pechos copa D que apenas eran sostenidos pos su bikini. Una nueva explosión resonó a lo lejos haciendo que la pompa explotase haciendo lo que provocó que despertase y bostezase con pereza.

-Fuuwaaaaaa, ¿cuando llegué aquí?-Preguntó con voz somnolienta la chica ladeando un poco la cabeza de forma linda aumentado la gota en la nuca de la peliazul.

-¡Oe! ¡Wendy, Umiko! ¿Sabéis donde se ha metido Naruto_kun?-Preguntó una quinta chica llegando al lugar donde se encontraban las dos mencionadas.

Se trataba de una muchacha de cabello negro, largo hasta media espalda, ojos de un color rojizo oscuro y que llevaba varios pircings, 3 encima de cada ceja, 3 en el puente de la nariz y uno en la barbilla. Usaba unas botas negra de combate, un pantalón corto de color negro, una camisa marrón de tirantes que mostraba bastante escote debajo de un chaleco negro con los bordes grises, unos largos guantes negros sin dedos y una banda gris en la frente. Poseía una voluptuosa figura que no se molestaba para nada en esconder, figura de reloj de arena, torneadas piernas, un redondo trasero y unos pechos copa D algo más pequeños que los de la pelimorada.

Junto a la pelinegra había llegado otra chica, de cabello rubio atado en una cola de caballo alta con un mechón de cabello cayendo por el frente entre sus ojos marrones de los cuales al derecho tenia cruzado una cicatriz en forma de rayo. Usaba unas botas negras de tacón de aguja, unos ceñidos pantalones negros de cuero que delineaban a la perfección sus largas y hermosas piernas, una camisa de cuello alto, manga corta y color negro que no ocultaba para nada sus redondos pechos copa D, llevaba un abrigo de piel a modo de capa sobre sus hombros y usaba unos cascos de música con pinchos.

-No tengo idea Tsubaki, Hikari.-Respondió Wendy mientras a lo lejos resonaba una nueva explosión.

-Naruchi dijo que hoy seguiría entrenando su Mozō-jū: Zō no Michi (Imitación de Bestia: Camino del Elefante).-Comentó la aun adormilada Umiko.

-¿Donde demonios puede haberse metido?-Se preguntó Tsubaki rascándose un poco la cabeza justo antes de que ocurriese un gran estruendo, el suelo tembló bajo sus pies y a los lejos todas las chicas pudieron ver como una pequeña montaña de desmoronaba.

-¿¡Que carajos ha sido eso?!-Preguntó a nadie en especial Natsuki que casi se había caído de cara al suelo cuando ocurrió el temblor.

-Alguien ha derribado una montaña por allí.-Respondió con serenidad la peliblanca mirando al lugar donde antes había un montaña de pequeño tamaño.

-Creo que eso responde a tu pregunta Tsubaki.-Comentó con indiferencia Hikari de brazos cruzados.

Las 6 chicas no tardaron mucho en llegar al lugar donde aquella montaña se había derrumbado. En el sitio lo único que quedaba eran cascotes y una densa capa de polvo y tierra que poco a poco se iba asentando dejando ver una figura.

-Tch, un no es suficiente.-Oyeron decir a aquella figura.

Cuando el polvo se asentó todas pudieron ver a un chico de entre 18 y 20 años, de salvaje cabello negro que le llegaba hasta los hombros, ojos rojos como la sangre y que tenia una herida en forma de cruz cruzando su afilado rostro. El muchacho iba descalzo, usando únicamente unos pantalones grises atados a su cintura por un cinturón y una bufanda roja alrededor del cuello. El cuerpo del pelinegro, estaba bien desarrollo, era alto, tanto como la pelimorada y era bastante musculo pero sin llegar a parecer una masa de músculos. Por todo su brazo derecho se extendía un curioso tatuaje de estilo tribal que en el dorso de su mano parecía asemejar el rostro de un ser demoníaco.

-¿Creéis que algún día le durará una camisa más de dos días?-Cuestionó de forma burlona la rubia haciendo reír al resto.

-Es increíble, ha destrozado por completo una montaña pequeña y aun no le parece suficiente.-Dijo alguien llamando la atención de las chicas.

Se trataba de un pequeño gato de pelaje negro que curiosamente estaba sobre dos patas, tenia un cicatriz cerca de su ojo izquierdo, usaba unos pequeños pantalones y llevaba una pequeña espada a la espalda. Junto a el había varios gatos más, uno azul con una bolsa verde a la espalda que se encontraba comiendo un pescado junto a uno de pelaje gris y mirada aburrida ademas de otro que parecía un tigre en miniatura y que usaba unos pequeños auriculares rojos. Junto con los mencionados había una gata blanca que usaba un vestido azul y un lazo amarillo junto a otra de pelaje azul mar que usaba un vestido verde agua y que estaba durmiendo a pierna suelta.

-Aaaah, creo que la próxima vez debería de hacer más fuerza con las piernas en vez de con los brazos.-Se dijo así mismo el muchacho mientras caminaba con una mano en su barbilla hacia donde estaban las chicas y los gatos.-Hola chicas, ¿cuando habéis llegado?

-Pela conmigo Naruto_kun.-Dijo dando un paso al frente la pelirrosa haciendo suspirar a la pelinegra.

-Ayer ya te pateo el trasero Natsuki, hoy me toca a mi.-Dijo la pelinegra haciendo bufar a la ojirosa.

-De eso nada, hoy es mi turno.-Bramó la rubia uniéndose a la discusión, Naruto solo puedo reír cuando Natsuki, Tsubaki y Hikari empezaron a pelear por ver quien pelearía contra él.

De pronto todos oyeron un ruido y vieron como un "pequeño" dragón surcaba el aire y aterrizaba delante de ellos. El dragón media unos 3 metros, de escamas verdes y ojos amarillentos, sobre su lomo crecían algunas flores y plantas de distintos tipos.

-Naruto_sama, su padre me envía para decirle que lo espera en la sala de la tablilla para hablar con usted.-Informó el dragón al pelinegro.

-Entendido, dile que iré de inmediato pero que antes me gustaría tomar una ducha.-El dragón asintió antes de alzarse en el aire y volar de regreso al castillo que se divisaba a lo lejos.-Os veo luego chicas.-

-¡Un momento! ¿¡Y nuestro combate?!-Gritaron mientras el ojirrojo ya se empezaba a alejar corriendo.

-Mañana si queréis pelearé con las tres pero por ahora debo irme.-Contestó Naruto con una sonrisa antes de desaparecer en la lejanía.

-¿Me preguntó para que habrá llamado Acnologia_sama a Naruto_kun?-Se preguntó a si misma Wendy mientras la gata de pelaje blanca se colocaba a su lado.

-Probablemente sea sobre vuestro regreso al mundo de los humanos.-Comentó la gatita blanca llamando la atención de las demás chicas y felinos, a excepción de Umiko y la gata de color azul marino que ahora dormían juntas con pompas en sus narices.

Naruto llegó al castillo en poco tiempo y se fue directo a su cuarto para poder darse una ducha y cambiarse de ropa. Su cuarto era realmente amplio, con varias estanterías llenas de libros y una cama enorme de mullidas sabanas de seda, y en esta se encontraban dos chicas profundamente dormidas. La primera de ellas era Kurama que se veía tan hermosa como siempre, la segunda chica tenía un largo cabello rubio platinado, la piel algo morena y vestía un hermoso kimono blanco con el obi de color dorado y detalles rojizos. Era de figura delgada aunque su busto estaba al mismo nivel que el de la kitsune, llevaba unas pulseras doradas en sus tobillos y un par de brazaletes también dorados en las muñecas. Y en medio de donde cualquier hombre soñaría con estar, se encontraba un pequeño gato de pelaje rojo con una pequeña mata de pelo negro erizado sobre la cabeza y que sobre su frente portaba un par de gafas (como las que usaba Naruto al inicio de la serie).

-Que bien viven algunos.-Murmuró el muchacho viendo ronronear al feliz gato entre los suaves pechos de las dos chicas.

Naruto entró en su baño, se retiro la ropa y dejó correr el agua caliente de la ducha antes de meterse en ella. El agua empezó a correr por su cuerpo a la vez que el vapor inundaba el cuarto, el pelinegro se llevó una de sus manos a su rostro, sobre aquella cicatriz que tanto tiempo llevaba ya acompañándolo. Era increible lo rápido que había pasado el tiempo, ya casi habían pasado 11 años desde que llegó a Seichi sobre los lomos de Acnologia, 11 años desde que dejó atrás su existencia humana y se convirtió en lo que era hoy en día, un Ryujin.

Aun recordaba aquel día como si hubiese sido ayer, tras el ritual su padre lo llevó a un campo de entrenamiento para que viese por si mismo sus nuevas capacidad. Velocidad, fuerza, resistencia, aguante...todas estas características habían aumentado una verdadera barbaridad, prácticamente levantaba pesas como si se tratase de plumas y podía mantenerse corriendo durante horas. Al llegar la noche Acnologia lo llevó a su actual cuarto donde le explico un poco cual seria su rutina a partir de ese día, tras concluir su charla Naruto le pidió algo a su nuevo padre, que por favor, de alguna forma, le permitiese contactar con su familia para decirle que estaba bien, que se había marchado para poder volverse fuerte para luchar por su sueño y por sus seres queridos. El dragón negro le dijo que escribiese una carta, que el se encargaría de hacérsela llegar a sus padres, y tras ello dejó al chico dormir en el que a partir de ahora seria su cuarto.

Naruto apenas pudo pegar ojo aquella noche, estaba demasiado emocionado por todas las cosas que le esperaban a la mañana siguiente por lo que como no podía dormir pasó la noche escribiendo la carta que les mandaría a su familia. Tenia tantas, tantas cosas que decirles, y no tenia ni la más mínima idea de por donde debía empezar a contarles, por lo que comenzó con algo sencillo, contándoles sobre que estaba al tanto de que Kurama había quemado su red de chakra al ser sellada en él, y que por supuesto no les culpaba de nada, entendía perfectamente porque hicieron lo que hicieron.

Continuó hablándoles sobre sus sueños, sobre querer ser el Hokage y proteger la villa y sobre querer ser fuerte para proteger a sus personas queridas. Les habló sobre que había conocido a alguien que lee podía entrenar para ser fuerte sin necesidad de usar chakra, claramente omitió todo lo de los dragones y lo de haberse vuelto un medio dragón por razones obvias. Culminó la carta diciéndoles que no se preocuparan por él, que iba a entrenar todos los días para volver alguien fuerte capaz de cumplir sus sueños y que en unos cuantos años regresaría a la villa.

Cuando Naruto terminó de escribir la carta el sol ya despuntaba en el horizonte, Agnologia no tardo mucho en aparecer para iniciar su primer día de entrenamiento, cuando el dragón negro tomó la carta la pregunta del Uzumaki fue obvia, ¿como les iba a hacer llegar la carta a su familia? Agnologia le contesto que todos los dragones de alto nivel tenian como subordinados algunos grupos de animales, por ejemplo él tenia bajo su mando al clan de los lobos negros, al clan de las hidras y al clan de los cuervos, los cuales se encargarían de entregar la carta.

Naruto solto un "ooooh" y bastante emocionado siguió a su "padre" por los largos pasillos del castillo, el lugar era realmente inmenso, tras varios minutos caminando al fin salieron de la edificación y se dirigieron a una zona algo apartada desde la cual se oían algunos ruidos. Al llegar el rubio vio a los demás dragones junto a aquella chica de cabello azul que conoció el día anterior y unas cuantas chicas más. Había una pelirosa que entrenaba contra una chica de cabello negro, una rubia que las miraba aburrida, una chica tranquila de cabello blanco que hacia estiramientos y una pelimorada que dormía en el suelo tan tranquilamente.

Aquellas chicas se presentaron una por una ademas que le informaron al Uzumaki que ellas eran las hijas adoptivas de los otros 6 dragones por lo que serian sus compañeras de entrenamiento. Al parecer todas y cada una de ellas bajo sus propias circunstancias habían sido rescatadas por los dragones, la pelirrosa de nombre Natsuki era la hija de Dragneel, la chica del cabello azul con la que había hablado el día anterior se llamaba Wendy, la pelinegra se llamaba Tsubaki y era la hija de Metalicana, la rubia de mirada aburrida era Hikari la hija de Zeckrom, la serena chica de cabello blanco se llamaba Akiko, hija de Trishula y por ultimo la chica medio dormida de cabello morado era Umiko la hija de Poseidra.

Tras aquellas presentaciones el entrenamiento del rubio comenzó, los primeros meses de entrenamiento se centraron en hacer que Naruto entendiese, comprendiese y que fuese capaz de usar la energía conocida como Maho (Magia). El Maho era una energía que residía en el interior de cada ser viviente, en la tierra, en los mares e incluso en el mismo aire, hace miles de años, mucho antes de que la gran era ninja diese inicio, los humanos dejaron atrás el conocimiento para seguir usándola, prefiriendo centrarse en la investigación y la creación de armas de todo tipo y que cualquier persona pudiese usar.

Los meses para lograr manifestar su poder mágico se le hicieron eternos al chico, para lograr despertar su Maho debía ser capaz de conectar su propio poder con el poder de todo aquello a su alrededor y una vez logrado esto debía ser capaz de manifestar su propio poder fuera de su cuerpo. No fue fácil, ni rápido, pero al fin el pelinegro lo logró, con consecuencias algo...destructivas. Todos recordaban a la perfección aquel día, las chicas entrenaban con sus respectivos padres mientras el ojirrojo se mantenía en pose de meditación sobre una roca cualquiera con Acnologia observándolo desde lejos.

El gran dragón negro bostezó algo aburrido, sabía que Naruto aun tras haberse convertido en un Ryujin tardaría su tiempo en ser capaz de manifestar su Maho, no solo por su inexperiencia, sino porque sus cantidades de Maho eran descomunales y al igual que pasaba con el chakra, cuanta más cantidad se tiene de este más complicado es de manipular. Todo empezó como una suave vibración, las chicas detuvieron sus entrenamientos cuando empezaron a sentir como el suelo temblaba muy ligeramente, los 7 dragones dirigieron su mirada al pelinegro que poco a poco era rodeada de una energía oscura con tintes rojizos, esta era la unión de sus dos mayores poderes, los que había heredado de su padre, la energía negra representaba su poder de la oscuridad y su poder rojizo el poder de la destrucción.

Natsuki, Wendy y Umiko sonrieron al ver a su amigo lograr despertar su poder, Akiko miraba lo que ocurría con su característico rostro sereno aunque en sus ojos se podía verse reflejado algo de sorpresa y alegría, Hikari alzó una ceja al sentir el poder de Naruto mientras Tsubaki sonreía de emoción, al parecer al fin tendría un buen contrincante a parte de Hikari. Acnologia iba a acercarse a su hijo para felicitarlo y contarle como iba a ser su entrenamiento a partir de ese día, pero algo hizo que se detuviera y lanzase un grito al ver lo cerca que estaban las chicas del pelinegro.

-¡Todas, cuerpo a tierra!-Gritó Acnologia justo antes de que ocurriese.

El poder de Naruto estalló como si de un géiser se tratase, su poder se elevó hasta los cielos dejando a las chicas y los dragones completamente sin palabras, Acnologia era sin duda el más sorprendido de todo, no solo por la cantidad de poder de su hijo, sino porque entre los tintes rojos y negros podía ver correr varias centellas doradas que brillaban con fuerza como estrellas en una noche oscura. El gran dragón negro apenas podía creérselo, Naruto no solo tenía sus poderes de destrucción y oscuridad, sino también el poder de creación de su tatarabuelo Felgrand, era increible, sabía de sobra que Naruto llegaría a volver alguien muy poderoso pero que tuviese también ese poder que prácticamente se podría catalogar como divino era muy asombroso.

Cuando el poder de Naruto se estabilizó todos los presentes sintieron las misma sensación de armonía y paz, era como si todos se hubieran sumergidos en un lago de agua serena y tranquila. El ryujin abrió lentamente sus ojos sintiendo su cuerpo increíblemente ligero a la vez que más fuerte que antes, era una sensación increible, como si pudiera hacer cualquier cosa, una enorme sonrisa se formó en sus labios, con este poder podría cumplir sus sueños y sus metas, ser capaz de ser Hokage, incluso quien sabe si algo más increible, pero sobretodo, proteger a aquellos quienes eran importantes para él.

Al día siguiente Naruro y Acnologia se separaron del resto para poder hablar tranquilamente sobre algunas temas, entre ellos el poder de creación y como sería a partir de ahora el entrenamiento del Uzumaki. Naruto quedó muy impresionado cuando su padre le habló sobre el poder de creación, prácticamente podía crear cualquier cosa siempre y cuando sus reservas de Maho se lo permitiese, el chico había decir a su padrino que el padre de la era ninja, el Rikkudo Sennin, que era capaz de manipular los chakras Yin y Yang, poseía una técnica semejante, pero el dragón negro le dijo que su poder era mucho mayor. El realmente podía, literalmente, crear cualquier cosa que su imaginación fuese capaz de crear y que su poder fuese capaz de materializar, no había limite, pero por supuesto un poder de este nivel consumía verdaderas toneladas de Maho por lo que por el momento dejarían el poder de creación algo apartado mientras las reservas del chico se seguían expandiendo, era simple precaución.

Después de que el gran dragón negro le hablase sobre como funcionaba su poder de creación, comenzó ha explicarle sobre como iba a ser su entrenamiento a partir de ese día. Para empezar seguiría haciendo el entrenamiento físico que había echo hasta el momento solo que mucho más exigente, usaría unos pesos especiales en sus muñecas y pies, estos pesos aumentaban la presión de la gravedad sobre él y una vez que se acostumbrase a la presión ejercida, la aumentarían. Lo siguiente sería tratar de dominar las 2 magias para las cuales eran más apto, las magias que había heredado de Acnologia, la magia de oscuridad y la magia de destrucción.

La primera magia que Naruto fue capaz de empezar a dominar fue la magia de oscuridad, esta magia ocultaba, envolvía, absorbía y devoraba, era una magia en verdad versátil, pero que a su vez era una espada de doble filo bastante peligrosa. Esta magia según le dijo su padre estaba muy ligada a sus propias emociones pero sobretodo a aquellas como la ira, el odio...el mismo Acnologia en su juventud se había dejado llevar ligeramente por este poder e hizo cosa de las que ahora no se sentía para nada orgulloso.

La siguiente fue la magia de destrucción, esta se mostraba como un curioso fuego carmesí con ligeros tintes negros, y como bien indicaba su nombre era una magia que se basaba en la destrucción. El fuego de la magia de destrucción no estaba echo para quemar sino para destruir todo lo que se metiese en su camino sin dejar siquiera cenizas, la mayor dificultad de esta magia era el ser capaz de controlarla, si se usaba mucho Maho a la hora de usarla podrías dañarte a ti mismo y si usabas demasiado poco no serias siquiera capaz de manifestar una pequeña llama.

Fue casi un año y medio de entrenamiento infernal que fácilmente destrozaría por completo a una persona normal, pero Naruto era un ryujin por lo tanto sino entrenaba de esta forma no lograría resultados. Durante este año muchas cosas pasaron y la relaciones de Naruto con las chicas cambió, ya no las veía solo como sus amigas, ellas eran mucho más que eso, eran su familia y se juró a si mismo que nunca dejaría que nada malo le pasara a ninguna de ellas. Durante este tiempo su relación con Kurama también se volvió mucho más intima, para el joven e inexperto Uzumaki la kitsune era como una hermana mayor, aunque esto no duró por mucho tiempo la verdad.

Tras un año entero entrenando sus magias principales Naruto empezó a entrenar con las chicas en la magia conocida como Dragon Slayer, a las chicas y al pelinegro este nombre se les hacía extraño, después de todo, ¿porque les iban a enseñar una magia que supuestamente servia para matar dragones?

Acnologia les explico de donde vino el origen de este nombre, todo comenzó cuando la guerra entre dragones y humanos terminó, varios dragones tomaron bajo su cuidado a algunos niños que habían quedado huérfanos tras guerra, los dragones les enseñaron su lengua y su magia, por supuesto los niños humanos no eran capaz de usar la magia como lo hacían los dragones por lo que decidieron crear una magia que imitase la magia de los dragones. Tras varios años estos niños se convirtieron en adultos y decidieron volver al mundo humano para ayudar a los suyos, las personas de aquella época que vieron la magia de aquellos chicos empezaron a extender rumores de que con semejante poder deberían de ser capaces de matar a un dragón, y de ahí nació el nombre de Dragon Slayer.

Fueron dos duros años de entrenamiento para todos pero sobretodo para el rubio ya que el a parte de entrenar la magia Dragon Slayer tenia que seguir entrenando sus magias de oscuridad, destrucción y creación, ademas que Acnologia quería que el pelinegro supiese sobre otras muchas magias, todos los días el pelinegro acababa agotado. Naruto no era el único que durante aquel tiempo estuvo aprendiendo distintas magias, Wendy le había pedido a Grandeeney que le enseñara magia sanadora, a la peliazul no le gustaba realmente pelear por lo tanto quería poder ayudar al resto si algún día lo necesitaban.

Naruto y las chicas concluyeron aquellos 2 años de entrenamiento con una prueba de supervivencia, los 7 debían sobrevivir por su propia cuenta durante 10 meses en una isla tropical llena de bestias sedientas de sangre, caníbales, plantas carnívoras de todo tipo y peligros que pondrían su vida en peligro prácticamente cada día. Aquellos 10 meses fueron un autentico infierno, aunque también muchas cosas se empezaron a ocurrir aquellos días, después de todo, a esa edad poco a poco los sentimientos de amistad de las chicas por el Uzumaki empezaron a volverse más "intensas", mientras que el pelinegro, bueno, el no se enteraba de nada, tal vez por eso de que las chicas suelen madurar antes que los chicos.

Durante su estancia en aquella isla un día descubrieron algo bastante increible, en el campamento que habían creado en la playa de la isla un día habían aparecido unos extraños huevos de gran tamaño y de distintos colores. Casi de inmediato Natsuki, Tsubaki y Umiko propusieron la idea de cocinarlos para hacer un grandioso desayuno, idea que de inmediato fue desestimada cuando Wendy con pequeñas lagrimas en los ojos se puso delante de los huevos para protegerlos. Al final se decidió que cuidarían de los huevos, aunque eso si, con mucha precaución por lo que pudiese salir de estos; casi un mes más tarde los huevos empezaron a abrirse y de estos salieron 7 peludas bolas de pelo de distintos colores, cola y orejas de gato ademas de alas. Los pequeños gatos casi de inmediato parecieron elegir a sus dueños, el gato de pelaje azul claro se fue con Natsuki, la gatita blanca se fue con Wendy, el de pelaje negro con Tsubaki, el de pelaje gris se quedó con Akiko, el que parecía un pequeño tigre con Hikari, la otra gatita de pelaje azul mar se fue con Umiko y por ultimo el gato de pelaje rojo fuego se quedó con el pelinegro.

Cuando los 7 regresaron a la tierra de los dragones, sus padres y madres se asombraron al ver a aquellos gatos, Acnologia explico que esos seres no eran en verdad gatos aunque se parecieran a estos, los felinos eran exceeds, una raza de seres mágicos que supuestamente se habían extinguido hace siglos, los felinos quedaron igual de impresionados que los jóvenes ya que ni ellos mismos sabían lo que eran. Un silencio se formo en la sala donde estaban reunidos hasta que cierto ryujin decidió abrir la boca.

-¿Y que más da lo sean? Gatos o Exceeds, ¿acaso importa? Para mi Bullet es simplemente mi colega y eso es todo lo que me importa.-Fueron las palabras del sonriente pelinegro con el mencionado Bullet sobre su cabeza que asentía a sus palabras, las chicas no pudieron evitar sonreír y asentir a las palabras del ojirrojo, no podían importarles menos lo que fueran aquellos felinos, eran sus amigos y compañeros y eso era lo único que les importaba actualmente.

Tras aquello cierta kitsune pelirroja apareció en el lugar envolviendo al Uzumaki en un abrazo que según las chicas estaba durando demasiado tiempo, Kurama se dio cuenta de las miradas que le estaban lanzando las muchachas y ella les respondió con una mirada que decía claramente "MIO" haciéndolas enfurecer. Naruto por supuesto no se daba cuenta de nada de esto, e increíblemente esta vez no era porque fuese algo denso, sino porque estaba más preocupado por la terrorífica sonrisa que le había dirigido su padre al salir de la sala, sin duda se le avecinaba un nuevo infierno de entrenamientos.

Al día siguiente las preocupaciones de Naruto se hicieron realidad, su padre selló casi el 90% de todo su poder mágico, según el dragón negro era para que pudiese tener un gran control sobre las cantidades de magia que usaba y así no gastar Maho de forma innecesaria.

Las chicas y sus compañeros exceeds volvieron a sus entrenamientos con sus respectivos padres/madres mientras el pelinegro, Bullet y Kurama se quedaban con Acnologia, el gran rey dragón le explicó a su hijo sobre las dos magias que empezaría a aprender desde ese día, la magia God Slayer y la Devil Slayer. Al igual que pasó con la magia Dragon Slayer una nueva explicación de aquellos nombres y de esas magias llegó, lo primero fue lo primero, por mucho que lograse aprender esa magia no significaba que fuese a poder matar a un demonio, y mucho menos a un Dios.

Estas magias fueron creadas en los tiempos antiguos, ante de que la guerra de humanos y dragones diese inicio, los humanos tenían que defenderse de los ataques de los demonios que con facilidad escapaban del Makai el cual aun no estaba sellado completamente y su necesidad de supervivencia les ayudo a crear una magia la cual afectase de una manera especial a los demonios, tardaron siglos hasta perfeccionarla y al final un hombre lo logró, pero había una pega, para que un humano aprendiese esta magia debía de convertir una parte de su cuerpo en la de un demonio, y para esto se necesitaba de la sangre de un ser demoníaco para hacer la transformación. Tras aquellas palabras el dragón miró a su hijo y este como si supiese lo que su padre estaba pensando contestó con una sonrisa.

-Ya soy mitad humano y mitad dragón, volverme un cuarto demonio tampoco es para tanto, ademas, de esta forma podré entender mejor los sentimientos de Kurama_neechan.-Fue la respuesta del rubio que hizo sonreír al dragón negro, sonrojarse a la pelirroja y que el exceed alabase sus palabras.

El rey dragón después de aquellas palabras de su hijo siguió hablando explicando de donde venia la magia llamada God Slayer, en aquellos tiempo de dificultad para los humanos, que no solo debían enfrentarse a demonios sino también a seres mágicos y bestias mucho más fuertes que ellos, los Kamis decidieron ayudarlos de alguna forma por lo que les dieron a unos pocos elegidos la capacidad de hacer que su magia tuviese unas cualidades semejante a la de ellos. Aquella magia fue la que permitió a los humanos formar sus ciudades en aquellos tiempos, los siglos pasaron y aquella magia se transmitió de generación en generación, hasta que desgraciadamente llegó a manos de un grupo de personas demasiado ambiciosas que creían que con ese poder podrían derrotar a los Kamis, que equivocados estaban. Ni los Kamis mismo podrían negar que tuvieron algunas dificultades para enfrentarlos pero tampoco llegaron a ser una real amenaza, desde aquel momento los humanos fueron privados por siempre de aquel poder.

-Pero, ¿si por culpa de aquellos idiotas ese poder ya no se puede aprender? ¿Como voy a aprender esa magia?-Preguntó el desconcertado ojirrojo.

-Yo me encargaré de eso más adelante, por el momento vamos a centrarnos en la Devil Slayer y en que empieces a mejorar tus habilidades con la magia de creación.-Respondió Acnologia no dejando del todo convencido al pelinegro pero que no le quedó otra que aceptar la palabra de su padre.

Al día siguiente comenzó todo, Naruto decidió que seria su brazo derecho la parte de su cuerpo que se volvería demoníaca, con la decisión tomada el dragón negro empezó a trazar lineas en el brazo del pelinegro formando un curioso tatuaje, a continuación usando la sangre de Kurama terminó de formar el tatuaje que en el dorso de la mano parecía mostrar el rostro de un ser demoníaco. Una vez concluyeron los preparativos Acnologia dio paso al ritual, el poder del gran rey dragón se hizo sentir en la sala mientras el tatuaje del Uzumaki brillaba con intensidad. Naruto apretó los diente aguantándose las ganas de gritas de dolor, era como si estuviesen atravesando su brazo con un millar de agujas al rojo vivo, pero esto no era nada, no era nada comparado a cuando sus huesos y músculos se destrozaban y recomponían durante el ritual que lo convirtió en un ryujin.

Tras varios minutos de intenso dolor el ritual al fin concluyó, Naruto jadeaba de rodillas mientras Kurama y Bullet se acercaban a él para ayudarle a levantarse, dirigió su mirada su brazo derecho y lo que vio le dejó sin palabras. Todo su brazo desde el hombro hasta las yemas de sus dedos se habían vuelto de un color negro mate, sus dedos se habían vuelto alargados y afilados, un par de lineas de un brillante color rojo recorrían su brazo formando el extraño tatuaje. Acnologia al ver como su hijo miraba el brazo le dijo que con el tiempo y algo de entrenamiento podría hacer que su brazo volviese a tener su apariencia normal cuando él quisiera lo que sin duda le quitó un gran peso de encima al pelinegro.

Al día siguiente comenzó el entrenamiento que tal y como supuso el ojirrojo fue un completo infierno, tenia 90% de su poder sellado, ya no usaba aquellas pesas sino que usaba unas runas que aumentaban la gravedad sobre él y que al igual que las pesas cuando se acostumbraba a la presión la gravedad la aumentaban y con esto tenia que lograr dominar un nuevo poder mientras debía mejorar su manejo de su magia de creación ademas de seguir entrenando sus magias de destrucción, oscuridad y Dragon Slayer, aprender nuevas magia que su padre le enseñaba, entrenar su manejo de la espada y su estilo de combate, mejorar su control sobre su Maho, y no nos olvidemos de resistir los ataques sorpresa de Natsuki y Tsubaki, los duelos que Hikari le obligaba a tener con ella y las clases de magia curativa que Grandeeney le había echo tomar, si, sin duda fueron un par de años de pura tortura, pero el resultado no podía ser mejor.

A sus casi 16 años Naruto era en pocas palabras un verdadero monstruo que podría derrotar a un jounnin sin problema, tenia un control completo y perfecto del 30% de su Maho, su fuerza física que dejaría la fuerza de los Senjus a la altura del betún, su esgrima no era perfecta pero su madre Kushina estaría orgullosa, tenia un gran dominio de todas sus magias de oscuridad y destrucción, su magia Dragon Slayer era realmente asombrosa y su magia de Devil Slayer mejoraba día tras día, incluso había logrado hacer que su brazo recuperada su apariencia humana.

Su magia de creación seguía siendo algo un poco difícil de usar, cuando comenzó a entrenar con ella empezó con cosas pequeñas, le costó 4 malditos meses solo lograr crear una pequeña cuchilla del tamaño de un kunai. Sus practicas siguieron tratando de formar cosas más grandes y durante estas practicas el pelinegro se dio cuenta de algo, todas las armas que creaba parecían estar echas de oro ademas de estar decoradas con joyas, no entendía realmente porque ocurría esto, una teoría que tuvo fue que tal vez las creaba así porque no era capaz de imaginar el aspecto del arma, solo su forma, tamaño y peso.

Las chicas también habían mejorado mucho sus habilidades, Natsuki a pesar de ser algo inconsciente era muy hábil peleando, siempre lograba improvisar durante la marcha y hacer algo sorprendente, Akiko mantenía siempre la calma de una manera increible lo que le permitía analizar la situación y preparar su siguiente movimiento a la perfección. Tsubaki era muy parecida a Natsuki a la hora de pelear solo que ella era más salvaje ademas de que poseía una resistencia realmente asombrosa, Hikari solía ser seria a la hora de pelear pero cuando luchaba contra alguien que pudiese darle verdadera pelea mostraba una lado en verdad feroz de su personalidad, Umiko era...sin duda curiosa, cuando luchaba casi parecía estar jugando, se reía y sonreía todos el rato, pero cuando en una lucha se ponía seria...bueno digamos que nadie quería ver a la pelimorada seria. Wendy a quien luchar no le gustaba realmente había desarrollado un estilo de combate a distancia combinado con su magia de curación que le permitía luchar mientras aumentaba su poder de ataque o defensa gracias a algunos hechizos.

Durante aquellos años también ocurrió algo bastante interesante cuando cierto Uzumaki cumplió sus 15 años, desde hacía tiempo Naruto se había dado cuenta de que las chicas a su alrededor le provocaban un sentimiento que no era capaz de describir, simplemente cuando estaba cerca de ellas su corazón latía con rapidez y se sentía una gran calidez en su interior. Como decía, cuando el chico cumplió sus 15 algo raro empezó a pasar, las chicas incluidas Kurama solían tener la cara roja cuando hablaba con ellas ademas que se las veía algo raras, respiraban aceleradas ademas que no paraban de mover sus piernas como si se estuviesen aguantando las ganas de ir al baño. Naruto no tenia idea de que les ocurría, tal vez se habían enfermado o algo, eso era lo que pensaba un cierto día mientras estaba tumbado en su cama hasta que la puerta de su cuarto fue abierta.

El pelinegro se quedó sin palabras al ver a todas las chicas vestidas con ropas bastante...transparentes, pequeñas y muy eróticas, el ojirrojo no puedo decir nada antes de que las 6 chicas y la kitsune se le viniesen encima. Sin duda alguna Naruto no olvidaría aquella noche en toda su maldita vida, al día siguiente fue a hablar con su padre e increíblemente el normalmente serio Acnologia se estuvo riendo por casi 15 minutos, cuando el dragón negro al fin dejó de reír le explicó algo al pelinegro que le dejo sin palabras. Al parecer los dragones no tenían fase de adolescencia, de niños pasaban a adultos y de adultos a ancianos, y cuando un dragón pasaba de niño a adulto debía de empezar a encontrar pareja, para esto tenían cierta ayuda ya que sus cuerpos producían por si mismo unas feromonas que cuando entraban en contacto con alguien del sexo opuesto que podría ser una buena pareja iniciaban un proceso de excitación que al final acababa en una noche como la había tenido el Namikaze. Acnologia también le dijo que el efecto de estas feromonas era muy potente cuando se empezaban a expulsar por primera vez pero que con el tiempo se volvía más sutil, eso y que no se tenia que preocupar de nada, los dragones hasta que no llegaban a la mitad de su etapa adulta no eran capaces de fecundar un ovulo, claramente el dragón negro se llevo un grito de un bastante avergonzado Naruto.

Ese mismo día y tras hablar con su padre el pelinegro tomó una decisión, tal vez seria algo egoísta de su parte pero el simplemente no podía negar los sentimientos que tenia por lo que se encaminó a la sala donde se encontraban las chicas. Al entrar tuvo una gota en la nuca al ver como todas de pronto empezaban a ponerse algo nerviosas e incluso torpes, Hikari de echo al tratar de dar un paso casi se cae al suelo de cara, Naruto impuso la calma y habló con ellas de todo, les dijo sobre como se sentía cuando estaba con ellas, los sentimientos que cada una despertaba en él y que si querían lo podían tachar de pervertido pero que tenia claro una cosa, las amaba a las 7 con todo su ser. Las chicas sin duda se sorprendieron mucho de aquellas palabras, hicieron una rápida reunión y tras concluirla todas estuvieron de acuerdo, ellas también amaban a Naruto por lo que mientras el fue capaz de corresponder a sus sentimientos y nunca pusiera a una de ellas por encima de las demás, no les importaría del todo compartirlo.

Desde aquel día los días siguieron pasando con normalidad, con infernales entrenamientos que dejarían a cualquier humano echo papilla, fueron las noches las que se volvieron algo más "interesantes". Las chicas decidieron que para que no hubiese peleas a cada una de ella le tocaría un día de la semana para dormir, y lo que no era dormir, con el pelinegro. Fue durante aquellos días de descanso antes de empezar a entrenar la magia de God Slayer que su padre lo llevo por primera vez a aquella sala del palacio, el lugar se encontraba a varios metros bajo tierra, la sala era enorme, las ruinas de lo que parecía ser un antiguo templo se encontraban dispersas por todos lados y en medio de la gran sala se encontraba una enorme losa de piedra en la cual se encontraban grabadas unas extrañas palabras en un extraño idioma que el pelinegro no era capaz de entender.

Acnologia le explico que en esa losa estaba escrita una de las profecías más antiguas del mundo, en ella estaba escrita la historia antes de que los Kamis ascendieran y se encargaran de mantener el control en el mundo. La primera parte de lo que se encontraba escrito en la enorme tablilla era que en la antigüedad el mundo fue creado por unos seres llamados los Sin Nombre, ellos dieron forma al mundo y crearon los primeros seres vivos, vieron crecer a estos seres y ver como empezaban a poblar el mundo que ellos habían creado, pero entonces vieron como estos seres empezaron poco a poco a volver egoístas, cada vez más ambiciosos de poder y como cada vez su malicia iba creciendo. Aquellos seres decidieron acabar con ellos como castigo por su maldad, pero aquellos primeros seres vivos fueron más astutos, les tendieron una trampa, usaron el poder de aquellos seres en su contra y los sellaron en una dimensión para supuestamente toda la eternidad.

La segunda parte de la tablilla explicaba que los Sin Nombre no serian retenidos por siempre en aquella dimensión, su poder era demasiado como para que se les pudiese contener por siempre y algún día lograría regresar y cuando esto ocurriese tomarían venganza. El mundo entero seria sumergido en un completo caos por estos seres y nadie seria capaz de detenerlos, el mundo seria completamente destruido.

La tercera y ultima parte escrita no estaba escrita en aquel idioma tan extraño, era la lengua de los dragones y el pelinegro era capaz de leerla sin problemas. En ella se explicaba que un día un humano nacido con el alma de un dragón seria capaz de traspasar las barreras entre las dos especies aparecería en el mundo y lograría hacer que todas las especies se unieran y convivieran en armonía y que cuando llegase el momento y los Sin Nombre despertase en el los enfrentaría con ayuda de todos aquellos que durante su vida se habían reunido a su alrededor.

-Esta tablilla lleva aquí desde hace siglos, el castillo de echo se construyó aquí para poder protegerla.-Explicó el gran dragón negro con seriedad.-La tercera parte fue escrita por el primer Rey Dragón, el era capaz de ver el futuro y antes de morir tuvo una ultima premonición, en ella vio a un humano con el aura de un dragón que se encontraba frente a los Sin Nombre comandando un gran ejercito formado por cientos de seres distintos. Cuando nació mi antepasado Felgrand todos dieron por echo que era él quien aparecía en aquella visión, pero murió antes de que aquellos seres dieran siquiera señales de vida. Durante mucho tiempo creímos que el primer rey simplemente se había equivocado, hasta que apareciste tu, de nuevo había aparecido un humano con el alma de un dragón.-

-¿Entonces, se supone que yo debo lograr lo que pone en esa piedra?-Preguntó el pelinegro mirando a su padre.

-No lo se, quizás vuelva a pasar lo mismo que con Felgrand o quizás no, pero era nuestro deber adiestrarte y darte las armas para pelear si es que lo que vio el primer rey se hace realidad.-Fue la contestación del dragón negro mientras el ojirrojo volvía a mirar a aquella tablilla.

-...En la tablilla no pone quien ganará esa batalla.-Comentó el chico haciendo asentir al dragón.

-Lo se.-Respondió simplemente el Rey Dragón, Naruto tragó saliva con fuerza, de pronto sentía un enorme peso sobre sus hombros.

Los siguientes días todos vieron como el pelinegro actuaba de una manera muy diferente a su forma de ser amigable, tranquila y algo despreocupada, ahora siempre se le veía con un rostro serio y pensativo que la verdad, no pegaba para nada con él. Las chicas miraban algo preocupadas al ojirrojo meditando sobre una roca, querían ayudar a Naruto de algún modo pero no se les ocurría como, de pronto vieron como Naruto abría los ojos antes de elevar su voz y soltar un tremendo grito con toda su capacidad pulmonar que dejó confuso a todo el mundo. Con rapidez se bajo de la piedra y se encaminó hacia donde estaba su padre, Acnologia lo miró a los ojos y una pequeña sonrisa se formo en su cara al ver como una nueva resolución brillaba en aquellos orbes rojos.

-Padre, pelea conmigo.-Fueron las palabras del ryujin que sorprendió bastante a todos.

-Je, parece que al fin has tomado una decisión.-Dijo el Rey Dragón con una sonrisa haciendo asentir a su hijo.

-Así es, como tu me dijiste no sabemos si lo que pone en aquella tablilla sucederá o no, vosotros solo me habéis dado las armas para pelear en caso de que así sea. Ahora mismo realmente no se que es lo que haré si lo que pone llega a hacerse realidad, pero si tengo claro una cosa, algo que siempre he tenido claro, y es que pase lo que pase voy a proteger a las personas que amo con todas mis fuerzas sin importar lo que ocurra.-Declaró Naruto con un rostro serio y gran voluntad reflejada en sus ojos haciendo sonreír a todos los presentes.

El combate entre Naruto y Acnologia fue algo unilateral, el Uzumaki era fuerte cierto, pero aun le quedaban algunos años para ser capaz de igualar al dragón negro, aunque este tampoco podía negar que un par de golpe de su hijo le habían dolido lo suyo.

Un par de días después padre e hijo se reunieron en las puertas del castillo, Acnologia no le dio tiempo al pelinegro a preguntar nada, le dijo que se subiese a su lomo que debían ir a un lugar para que pudiese empezar a entrenar su magia God Slayer. El gran dragón negro surcaba el cielo a una velocidad de vértigo mientras Naruto disfrutaba del viento golpeando en su cara y de la sensación de velocidad.

-¿A donde nos dirigimos padre?-Preguntó el muchacho tras pasar un muro de nubes.

-Vamos hacia el reino de los dioses para que te den su bendición y puedas usar la magia de God Slayer.-Contestó el dragón negro sorprendiendo a su hijo.

-¿De verdad crees padre que ellos me darán su bendición?-Preguntó el muchacho que no estaba convencido de que los dioses después de aquella traición de los humanos fuesen a confiarle ese poder a él.

-No te preocupes, ya he hablado con ellos, y aunque es cierto que no te van a dar su bendición solo porque se lo pidas, han dicho que al menos hablaran contigo antes de tomar una decisión.-Le explicó el Rey Dragón con tranquilidad haciendo asentir al pelinegro.

El viaje gracias a la velocidad del gran dragón apenas duró un par de horas, poco a poco una gran cantidad de nubes de un tono dorado empezó a rodear a ambos, delante de ellos poco a poco se empezaron a formar los picos de 6 enormes montañas que rodeaban lo que parecía ser un gran palacio de estilo oriental. El dragón negro le explico que cada una de esas enormes montañas eran los templos de las 6 diosas que ahora se encontraban esperándolos en el palacio el cual era el lugar que usaban para sus reuniones. Naruto asintió a las palabras de su padre antes de que una palabra resonase en su cabeza, "Diosas", ¿eso significaba que todas eran mujeres?

En el palacio donde las 6 diosas se encontraban reunidas esperando la llegada de Acnologia y el pelinegro se respiraba una calma tensa algo inquietante, en una de las salas de la edificación se encontraban reunidas 6 mujeres de una belleza que solo podría ser catalogada como divina. Una de ellas, de hermoso cabello largo de color blanco con las puntas rojizas y ojos color dorado, tenia una sonrisa nerviosa en el rostro mientras esperaba al supuesto muchacho de la profecía del primer Rey Dragon junto a sus iguales. Ella era la diosa del sol, Amaterasu, quien vestía con un elegante kimono blanco con detalles en rojo, la diosa tenia la piel algo tostada y un cuerpo delgado de pechos copa D.

Al lado derecho de Amaterasu y mirando todo con diversión se encontraba la diosa de la luna, Tsukuyomi, la cual tenia una figura semejante a la de la diosa del sol pero sus rasgos eran completamente opuestos. La diosa de la luna tenia una largo cabello negro brillante, unos bellos ojos de color plateado y vestía un kimono negro con detalles plateados; Tsukuyomi esperaba con ganas esta reunión, tenia interés en el muchacho la verdad, aunque lo que más le interesaba era ver la reacción que tendría quien se encontraba a su derecha.

Se trataba de una mujer de cabello negro opaco atado en una coleta alta con dos mechones a los lados de su rostro e intensos ojos de color rojo que vestía con un kimono de batalla azul eléctrico sin la manga derecha y para tapar la zona de sus pechos usaba unas vendas las cuales apenas parecían ser capaces de soportar su copa DD. La pelinegra se encontraba de brazos con una mueca molesta en sus labios, en su cabeza un pensamiento estaba bastante claro y no dejaba de hacérselo saber a sus compañeras.

-Si Acnologia se cree que voy a darle mi bendición a su mocoso simplemente porque si va listo.-Comentó la diosa de las tormentas Susanoo.

-Su_chan al menos trata de darle una oportunidad, ¿entendido?-Dijo otra de las mujeres allí presentes.

La mujer se trataba de la diosa Izanami, ella tenia el cabello azul muy claro peinado con un flequillo por el frente y largo por detrás, tenia los ojos de color turquesa y su figura era realmente de infarto, grandes pechos copa E y anchas caderas. Vestía con un elegante y fino kimono de tirantes de color blanco con detalles azules que dejaba sus hombros al aire, su piel el blanca como la leche y sin ninguna imperfección. La peliazul giró su rostro para hablar con quien se encontraba a su derecha y al ver que esta estaba durmiendo le dio un toga en la frente.

-Itte, ¿a que ha venido eso?-Preguntó molesta la diosa Izanagi mientras se sobaba la zona golpeada.

Izanagi tenia el cabello rojo oscuro hasta la mitad de la espalda con un largo mechón de cabello que caía desde la mitad de su frente hasta el lado izquierdo de su rostro, sus ojos eran de un brillante color morado, vestía un kimono rojo con detalles en negro y oro. Su figura de reloj de arena no tenia nada que envidiar a sus compañeras, cintura breve, anchas caderas y redondos pechos copa DD casi E.

-Tenemos una reunión, no es hora de estar durmiendo.-Regañó la diosa peliazul a la ojimorada.

-¿Y porque a ella no le dices nada? Ni siquiera está prestando atención.-Preguntó algo indignada la pelirroja señalando a la ultima Diosa allí presente.

La mujer a la que Izanagi señalaba tenia el cabello plateado muy largo, hasta casi sus pantorrillas, unos extraños ojos amarillos que hoy parecían brillar con cierta emoción, usaba un kimono gris con detalles rojos y con un obi negro. El cuerpo de la diosa era tan desarrollado como el de sus compañeras, largas piernas que se dejaban ver gracias al corte alto del kimono, una cintura breve y unos pechos copa DD. La peliplata no prestaba ninguna atención a las conversaciones de sus compañeras pues se encontraba más ocupada poniéndose algo de sombra de ojos violeta y pintándose los labios de color morado fuerte.

-¿Porque te estas poniendo tanto potingue en la cara?-Preguntó Susanoo quien acabó con una palpitante vena en su sien ya que la ojimarilla la ignoró completamente hasta que terminó de ponerse correctamente el pintalabios.

-¿No es evidente? Me preparado para recibir a Naruto_kun, os recuerdo que para mi esto es un rencuentro.-Respondió la diosa guiñando un ojo de forma infantil.

-Oh, es cierto, después de todo tu fuiste quien selló a Kurama en él hace 16 años.-Comentó Tsukuyomi al recordar aquello que de alguna forma unía al pelinegro Uzumaki y a la diosa de la muerte, Shinigami.

-¡Exacto! Aaaah, me preguntó como habrá crecido, no he podido saber nada de él desde que Acnologia se lo llevó a Seichi, pero si mis cálculos están en lo correcto ahora debería de estar más caliente que el infierno en pleno verano.-Fueron las palabras cargadas de lujuria que la diosa peliplata dijo con algo de saliva cayendo de su boca haciendo que Iznami y Izanagi negasen con la cabeza, Amateratsu imitase un tomate, que Tsukuyomi riese y que la diosa de la tormenta la mirase mal.

-Eres una pervertida.-Dijo sin rodeos Susanoo.

-Y a mucha honra.-Admitió la diosa de la muerte cruzándose de brazos e hincando su pecho.

-¡Que ha sido eso!-Fue el grito de cierto sannin de los sapos que en ese momento se encontraba reunido con su alumna en la oficina de esta.

-¿Que es lo que ocurre sensei?-Preguntó algo alarmada Minako mientras agarraba uno de sus kunais especiales.

-Este este mismo momento, en algún sitio de este planeta, estoy seguro...¡Una hermosa mujer a admitido su propia perversión! ¡Es maravilloso!-Fue el grito del peliblanco que incluso lloraba lagrimas de alegría mientras la rubia Hokage le miraba con cara de poker.

-Sensei lárguese de mi despacho.-Fue la orden de la Namikaze que el sabio acató de inmediato, su alumna cabreada daba demasiado miedo.

-Acnologia ya ha llegado, vamos a recibirle, y ustedes dos dejen sus pleitos para otro momento y compórtense.-Dijo con voz autoritaria Izanami al ver como la diosa de la tormenta y la diosa de la muerte ya iban a comenzar una de sus peleas, ambas solo temblaron un poco por la severa mirada de la diosa peliazul y asintieron con la cabeza.

Las diosas se dirigieron a la entrada del gran templo, nada más salir vieron al gran dragón negro aterrizar delante suya, él al verlas hizo un gesto respetuoso con la cabeza mientras cierto pelinegro bajaba de su lomo de un salto. Las 6 mujeres vieron al chico que bajó durante unos instantes antes de tener cada una distintas reacciones, Amateratsu imitó a un tomate antes de desmayarse, se hubiese dado contra el suelo de no ser por Tsukuyomi que aprovechó el atraparla para que no viesen su rostro de mejillas sonrosadas, Susanoo sintió por un momento como sus mejillas se calentaban antes de chasquear la lengua y mirar para otro lado de forma brsuca, Shinigami lo miraba con ojos en forma de corazón y si fuese por ella ya lo estaría arrastrando a un cuarto del que no saldrían en muuuuucho tiempo. Izanami se le quedó mirando unos instantes antes de que sus mejillas se coloreasen y durante unos instantes sus ojos parecen brillar con algo de perversión y por ultimo Izanagi se rascó un poco su mejilla derecha y miró hacia otro lado cuando sintió como el calor se concentraba en su cara.

Naruto usaba por aquel entonces una botas sencillas, un pantalón oscuro ancho y una camisa negra de estilo oriental sin mangas que dejaba sus musculosos brazos al aire, alrededor de su cuello llevaba una bufanda roja que Natsuki le había regalado en su ultimo cumpleaños. Cuando el Uzumaki se bajó de encima de su padre se sacudió un poco el polvo de encima antes de darse cuenta que estaba siendo observado, al ver a las 6 mujeres delante suya se puso firme e hizo una reverencia.

-Buenos días, soy Naruto Namikaze Uzumaki, es todo un honor estar ante ustedes.-Dijo el pelinegro mientras hacia su reverencia, cuando las 6 mujeres vieron aquella cicatriz que surcaba el rostro del pelinegro sintieron un pinchazo en sus corazones.

-Ejem, y a nosotras nos alegra conocerte al fin en persona Naruto_kun, yo soy Izanami, ahora pasemos dentro para poder hablar con calma del asunto que nos atañe.-Fueron las palabras de la diosa peliazul tras calmarse y aclararse la voz.

-Claro, ¿pero padre como vas hacer para...-Trató de preguntar el chico como iba a pasar su padre dentro de aquel palacio que, si, era grande, pero ni de broma podría caber dentro el gran dragón negro; Naruto no pudo terminar la frase ya de pronto su padre se envolvió en un aura oscura de la cual al disiparse salió un hombre de unos 30 años, de abundante y salvaje cabello negro, ojos amarillos y que vestía con una traje negro bastante elegante con una capa también negra atada a su cuello con una elegante cadena plateada.

-Entremos, cuanto menos tiempo tenga que usar esta forma, mejor.-Fueron las palabras algo molestas del Rey Dragon mientras su hijo lo miraba con cara de tonto.

-¿Q-que, como, cuando, porque?-Balbuceaba el ojirrojo haciendo algo de gracia a las diosa.

-Deja de balbucear como un idiota de una vez, te hable de la magia Take Over, ¿no? Esta es otra forma de usarla, eso es todo.-Explicó el dragón negro algo molesto haciendo asentir a su hijo.

El muchacho y su padres fueron llevados al interior de la construcción y durante ese trayecto el ojirrojo pudo sentir una fija mirada que no se despegaba de él, cuando pudo captar de quien se trataba vio a la hermosa peliplata de labios morados guiñarle un ojo de forma picara, guiño que el le devolvió con una sonrisa y que hizo a la diosa de la muerte sonrojarse. Naruto siempre había sido algo denso en temas de chicas, pero desde que empezó su relación con las chicas había sido capaz de captar mejor cuando una le coqueteaba. Tras unos minutos llegaron a la sala donde anteriormente estaban reunidas las diosas, tomaron asiento y unas cuantas tazas de humeante té aparecieron sobre la mesa.

-Bien Naruto_kun, ¿porque crees que eres digno de que te demos nuestra bendición?-Fue la pregunta de Izanami, el chico termino de darle un trago a la bebida antes de responder.

-Bueno, si les digo la verdad, yo no se si soy digno o no de que me den su bendición.-Dijo el chico sorprendiendo a las deidades.-Padre me habló sobre como fueron traicionadas por un grupo de idiotas con más ambición que cerebro, si ustedes se niegan a darme su bendición, me parecería bien, yo mismo se lo que duele que las personas a las que te has prometido ayudar y proteger te traicionen.-

El chico hizo una pausa y una vez más todas sintieron ese pinchazo en el corazón al ver la cicatriz en la cara del Uzumaki, una cicatriz que le habían echo ninjas de su propia aldea y que el pelinegro se había propuesto que algún día cuando fuese Hokage protegería.

-Pero al vez que entiendo como ustedes se sienten, yo debo ser algo egoísta y pedirles que me den su bendición, no voy a recurrir a hablarles sobre lo que pone en la tablilla ya que deben de saberlo de sobra y deben de saber de sobra también que no tengo porque ser yo la persona de la que habla aquella profecía. Les pido su bendición porque quiero volverme más fuerte, más fuerte para cumplir mis metas, más fuerte para proteger a los que amo, y también, para si algún día por desgracia se cumple lo que pone en esa tablilla ser capaz de decir que protegeré a los débiles e inocentes, para ser capaz de luchas contra esos seres, para poder decir que los venceré, y sobretodo, para poder ser capaz de hacer todo lo que les he dicho.-Fueron las serias palabras del joven ryujin que dejaron a las 6 diosas sin palabras mientras Acnologia solo sonreír.-Pero de nuevo repito lo del principio, sabiendo como ustedes se deben de sentir tras aquella traición comprenderé perfectamente que me nieguen su bendición si esa es decisión.-

-Yo te daré mi bendición, quiero ver si de verdad eres capaz de cumplir con lo que has dicho Naruto_kun.-Fueron las palabras de una alegre Tsukuyomi que sonreía al muchacho

-Tsukuyomi_sama, muchas gracias.-Agradeció el muchacho con una reverencia.

-Y-yo también te-e daré mi bendición, cre-eo que tus palabras son honestas y muy nobles.-Fueron las palabras de una diosa del sol algo sonrojada.

-Muchas gracias Amateratsu-sama.-Agradeció de nuevo el pelinegro con una reverencia.

-También cuentas con mi bendición, tienes nobles motivos para desear ser más fuertes y puedo sentir que tu corazón no guarda ninguna malicia ni resentimiento, ademas que al igual que Tsukuyomi me gustaría verte cumplir lo que as dicho.-Dijo a continuación Izanami con una serena sonrisa.

-Opino lo mismo, a pesar del dolor que sentiste en el pasado has sido capaz de seguir adelante y poner la otra mejilla, creo que nosotras también deberíamos hacer lo mismo, también cuentas con mi bendición Naruto_kun.-Añadió la diosa Izanagi.

-Izanami_sama, Izanagi_sama, muchas gracias por sus palabras, les prometo que no las decepcionaré.-De nuevo el ojirrojo hizo una reverencia mientras agradecía a las dos diosas.

-¡Por supuesto también cuentas con mi bendición Naruto_kun! Pero eso, espero algo de agradecimiento a cambio, ¿me entiendes?-Dijo la diosa de la muerte con una sonrisa mientras mostraba alho de escote y guiñándole un ojo al chico.

-Por supuesto Shinigami_sama, le estaré infinitamente agradecido.-Respondió el pelinegro con una sonrisa, al parecer aun le quedaba un largo trecho para dejar su densidad atrás.

-Y bien Su_chan, ¿tu que dices?-Preguntó la diosa peliazul a la pelinegra diosa de la tormenta que estaba de brazos cruzados y ojos cerrados pensando, sus ojos de color azul eléctrico se abrieron y enfocaron directamente al pelinegro que no se amedrentó ante la fija mirada de la diosa.

-Antes de tomar una decisión, quiero que tengas un duelo contra mi, no te preocupes, no lucharé en serio, solo quiero saber cual es tu nivel para tomar mi decisión.-Dijo Susanoo sorprendiendo al muchacho que tras unos segundos sonrió ampliamente.

-Será todo un honor tener una pelea contra usted Susanoo_sama.-Contestó el muchacho haciendo sonreír un poco a la mencionada.

-Bien, entonces vallamos a mi templo, aquí no hay ninguna zona donde podamos pelear.-Dijo la diosa del trueno antes de que el suelo bajo los pies de todos los presentes brillasen.

Todos aparecieron de pronto en un gran reciento de altos muros y con un pequeño balcón en uno de estos muros, 5 de las 6 diosas se empezaron a dirigir a este balcón para ver el combate mientras la diosa del trueno se quedaba abajo, de pie y con los brazos cruzados. Acnologia se acercó a Naruto que estaba haciendo estiramientos para hablar con él un momento antes de subir junto a las diosas al palco.

-¿Estas seguro de esto Naruto? Susanoo_sama es muy fuerte, mucho más que yo y aunque no vaya a luchar en serio un mal golpe puede dejarte bastante tocado.-Le dijo Acnologia pero la sonrisa en el rostro de su hijo se iba.

-Eso lo se de sobra, pero el poder medirme contra una diosa no es algo que suceda todos los días, ahora mismo, como diría Natsuki_chan, estoy encendido.-Respondió el ryujin chocando sus puños, el Rey Dragon solo pudo sonreír a la vez que negaba antes de dirigirse al balcón con las diosas.

-Puedes comenzar cuando quieras.-Dijo la diosa pelinegra aun de brazos cruzados cuando el dragón negro llegó al balcón.

-¡Entonces allá voy!-Gritó emocionado el pelinegro lanzándose al ataque.

Naruto llegó en prácticamente un parpadeo frente a la diosa , en pleno aire trató de darle un patada giratoria que Susanoo simplemente esquivó echando un poco para atrás su rostro pero el ojirrojo no se quedó ahí, mientras su cuerpo giraba juntó sus manos que fueron rodeadas con el poder de la destrucción. Con una gran rapidez y sin darle tiempo de reaccionar a la pelinegra golpeó con sus manos en el estomago de la diosa, gracias a la explosión Naruto ademas logró poner algo de distancia, algo de humo se había levantado cubriendo a la diosa de la tormenta pero al disiparse el Namikaze vio que esta no tenia siquiera un rasguño, de echo no había ni una mota de polvo sobre su ropa.

-Espero que eso no sea todo lo que tienes.-Comentó la diosa con una voz algo decepcionado haciendo sonreír al pelinegro.

-Lo sabía, el nivel de una diosa es simplemente increible, bien, probemos con esto.-Fueron las palabras del chico antes de golpe el suelo con su palma derecha.

Las cejas de las diosas se alzaron cuando de pronto el suelo bajo el Uzumaki se oscureció por completo, casi parecía que el suelo se hubiese convertido en un charco de alquitrán, y a continuación vieron como el pelinegro se sumergía en aquel liquido con una sonrisa dirigida a la diosa de la tormenta que justo cuando el ojirrojo terminó de sumergirse y desapareció en aquel charco abrió grandes los ojos, separó sus brazos y empezó a mirar para todos lados. Las demás diosas también habían sentido lo mismo y ahora miraban a todos lados mientras el Rey Dragón sonreía de brazos cruzados.

-(No puede ser, ¿donde demonios se ha metido? He perdido completamente su rastro, es como si hubiese desaparecido del mundo).-Pensaba la diosa del trueno que al igual que sus compañeras no eran capaces de sentir al ruyjin, era como si se hubiese evaporado en el aire.

Susanoo miraba hacia todos lados hasta que de pronto la presencia del pelinegro volvió a hacerse presente a su espalda, giró sobre sus talones con velocidad solo para verlo aparecer de pronto con una par de hachas doradas en sus manos. Naruto empezó a mover las armas con habilidad tratando de golpear a la ojiazul que con simples y sencillos movimientos esquivaba los ataques del chico. De pronto el cuerpo del Namikaze fue rodeado de electricidad y su velocidad en solo un instante aumento una barbaridad, la aceleración del movimiento del pelinegro ocurrió tan de pronto que Susanoo apenas tuvo tiempo para moverse a un lado para dejar pasar el corte de las hachas del Uzumaki. Un pequeño corte apareció en el kimono de la diosa pelinegra que al verlo frunció el ceño antes de mirar al ojirrojo que volvía a desaparecer en aquel chaco oscuro haciendo desaparecer de nuevo completamente su presencia.

-¿Como hace eso? Nosotras deberíamos de ser capaces de sentir a cualquier ser vivo por muy bien que sepa ocultar su presencia-Dijo la diosa de la luna lo que todas se preguntaban en voz alta.

-Ustedes son capaces de sentir la presencia de cualquier ser vivo, en este mundo.-Fueron las palabras de Acnologia que captaron la atención de las diosas en el balcón.

-¿A que te refieres con eso Acnologia?-Preguntó con genuina curiosidad Izanami.

-Esa técnica que esta usando Naruto lo que hace es transportarlo a "otro mundo" una dimensión de bolsillo que el mismo ha sido capaz de crear con mucho estudio y entrenamiento. Al ser técnicamente "otro mundo" ni siquiera ustedes son capaces de detectar su presencia cuando se encuentra allí.-Explico el dragón negro haciendo que los ojos de las diosas se abriesen como platos.

-(No esta nada mal, y no es solo eso, ese chico sabe como funciona la aceleración electromagnética y la utiliza para aumentar su velocidad en el momento justo en que su enemigo no puede reaccionar. Maldita sea, esta empezando a caerme bien).-Pensó la diosa de la tormenta con una sonrisa justo cuando la presencia del pelinegro volvía a hacerse presente a su espalda.-Pero ya es hora de terminar con este juego.-

Susanoo cuando sintió la presencia del ryujin a su espalda se giró a una velocidad más que asombrosa, lo ojos del Uzumaki se abrieron enormes cuando vio la mano de la diosa de la tormenta acercarse a su cara con intención de agarrarlo, pero justo cuando estaba por hacerlo, la mano de la ojiazul lo atravesó como si se tratarse de humo, un humo negro que se deshizo en el aire. Los ojos de Susanoo estaban muy abiertos pero no tuvo tiempo para preguntarse que había ocurrido ya que de nuevo sintió la presencia del chico a su espalda, solo que esta vez por duplicado. Al girarse se topó con un par de pelinegros, uno cargando una espada de estilo occidental y otro con una katana, amabas armas de un brillante color dorado, los cortes de los dos Uzumaki no se hicieron esperar y la pelinegra tuvo que empezar a retroceder hasta que harta de esto expulsó una pequeña onda electrica de su cuerpo que deshizo a los dos ojirrojos en humo negro.

-Esos son...¿clones de cuerpo?-Preguntó en voz alta Amateratsu mientras un nuevo par de pelinegro se lanzaba al ataque.

-Jajajaja, por supuesto, es algo que no le puede faltar a un shinobi.-Comentó la diosa de la muerte mientras veia a la ojiazul batallar contra los clones.

-¿Como los creas?-Preguntó Izanagi a Acnologia.

-A decir verdad, no estoy seguro del todo, solo sé que usa su magia de creación y su magia de oscuridad para crearlos, ese chico siempre esta probando nuevos trucos cuando no esta entrenando, según me dijo Trishula el otro día incluso le pregunto si era posible usar dos elementos a la vez durante la magia de Dragon Slayer.-Respondió el dragón mientras seguía viendo el combate de la diosa que cada vez parecía molestarse más.

-¡AAAAAAAAAHHH! ¿Es que no sabes hacer más que esto? Con tus estúpidos clones no lograras nada.-Fue el grito molesto de la diosa de la tormenta mientras destrozaba otro par de clones.

-En eso se equivoca Susanoo_sama, he logrado tiempo para poder hacer esto.-Fue la respuesta del pelinegro que resonó por todo el habitáculo.

De pronto en el techo un gran charco negro apareció dejando salir de este poco a poco al pelinegro con una enorme sonrisa, todas se preguntaban a que se refería hasta que vieron salir aquello del charco de oscuridad. Se trataba de un enorme y dorado cañón de fácilmente 1 metro y medio de largo y de un calibre de al menos 70cm, los ojos de todas las diosas estaban abiertas como platos al ver semejante arma en manos del ryujin. Un potente sonido resonó por todo el lugar cuando el cañón empezó a cargarse al máximo de potencia mientras una gota de sudor caía por la sien del pelinegro.

-!Glorius Cannon, Annihilator Shot¡-Gritó el Uzumaki antes de que la gran arma dejase ir todo su poder.

El estruendo solo era comparable al de un terremoto de fuerza 10, las diosas y Acnologia tuvieron que levantarse de sus asientos para no salir volando, casi parecía que la montaña que pertenencia a la diosa de la tormenta fuese a ser destruida por el poder de aquel cañón dorado. Tras casi medio minuto la descarga de poder terminó, el cañón dorado desapareció en polvo dorado mientras Naruto caía al suelo dando un giro, el pelinegro respiraba con dificultad y amenas lograba mantenerse en pie, el Glorius Cannin y su Annihilator Shot eran actualmente su mejor y más poderosa técnica, pero tenían 3 grandes handicaps. La primera el tiempo que tardaba en materializar el Glorius Cannon, la segunda la enorme cantidad de energía que necesitaba para el Annihilator Shot, prácticamente ahora mismo estaba seco, y por ultimo que ese ataque seria completamente inutil en un combate real ya que alguien con la suficiente velocidad no tendría problemas para esquivarlo, pero gracia a los clones el pelinegro había logrado hacer que Susanoo se estuviese quita lo suficiente como para poder usarlo. Una gran humareda cubría el campo de batalla donde antes se encontraba la diosa ojiazul pero poco a poco se fue asentando y los ojos del ryujin se encontraron con algo que, a decir verdad, ya se esperaba, después de todo estaba luchando contra una diosa.

-No voy a negarlo, eres muy fuerte, hacia siglos que nadie me hacia tener que emplear una de mis armas divinas.-Se escuchó decir a la diosa de la tormenta mientras su figura se dejaba ver, la pelinegra estaba completamente intacta con uno de sus brazos alzados en el cual se encontraba un pequeño escudo de forma redonda.-Pero ahora si, ya es hora de terminar con esto.-

La diosa se lanzó contra el pelinegro que ya no moverse podía con el puño en alto, ni siquiera se vio el golpe, solo un borrón negro que atravesó en un segundo toda la sala antes de atravesar una pared.

-¡Naruto!-Fue el grito de Acnologia que fue corriendo a ver como se encontraba su hijo mientras la diosa aun estaba con el puño alto.

-¡Pedazo de idiota se suponía que no te ibas a exceder!-Gritó Izanami mientras Amatatsu, Tsukuyomi y Izanagi ya salían corriendo tras el dragón.

-¡ESTÚPIDA MARIMACHO! Si le ha pasado algo a mi Naruto_kun, no se como, pero juro que te mato.-Fue el grito de la diosa de la muerte que hizo al fin reaccionar a la ojiazul.

-¿EH? ¡O-o-o-oh mierda!-Gritó la diosa de las tormentas antes de empezar a correr tras sus iguales.

Todos llegaron al lugar donde había ido a parar el Uzumaki tras el puñetazo de Susanoo, no se había caído ladera abajo prácticamente por centímetros, estaba tirado en el suelo con lo que parecía ser una gran y pesado escudo dorado sobre él. El escudo media unos 2 metros y tenia un grosor de al menos 5 centímetros, pero aun así en mitad de este se encontraba una gran abolladura con forma de puñetazo. Al igual que el cañón el escudo se deshizo en polvo dorado dejando ver a Naruto el cual estaba tirado con los brazos en alto como los boxeadores cuando son noqueados.

-Me-e tiemblan hasta las uñas.-Murmuró el chico que tras aquel golpe le vibraba todo el cuerpo y era completamente incapaz de moverse hasta que una cálida sensación se expandió por su cuerpo.

-Co-on esto deberías estar mejor-Dijo la diosa del sol con amabilidad.

-¡Muchas gracias Amateratsu_sama! Ahora me siento genial.-Agradeció el muchacho con una de sus típicas sonrisas haciendo que la cara de la peliblanca se supiera de un color rojo intenso.

-Entonces, Susanoo_sama, ¿que opina de mi hijo? Lo cree digno de recibir su bendición.-Preguntó el dragón haciendo que la mencionada diosa mirase al chico a los ojos, un ligero sonrojo apareció en sus mejillas antes de que chasquease la lengua y mirase para otro lado.

-Coff, coff, bu-ueno, creo que con tus habilidades no seria mala idea darte mi bendición, pero ten por seguro que si me decepcionas te lo haré pasar mal.-Dijo la diosa haciendo sonreir al chico.

-Se lo prometo, no la decepcionaré Susanoo_sama.-Respondió con una gran sonrisa el Uzumaki haciendo que el sonrojo en la cara de la diosa de la tormenta aumentase.

Las diosas, el ryujin y el Rey Dragón regresaron al palacio, siguiendo las insctrucciones de Izanagi el pelinegro se sentó en el suelo mientras las diosas trazaban unas marcas en el suelo a su alrededor, una vez que terminaron de trazar las marcas las 6 diosas rodearon al pelinegro. Las marcas en el suelo empezaron a brillar cuando las diosas empezaron a dejar salir su divino poder, poco a poco esas marcas en el suelo empezaron a moverse colocándose sobre la piel del ojirrojo que miraba todo esto bastante asombrado.

-Naruto Namikaze Uzumaki, desde este día llevaras nuestra bendición, que nuestro poder te permita obtener tus metas y objetivos, pero a cambio deberías cumplir con estas promesas.-Empezó a decir Izanagi cuando las todas las marcas se colocaron sobre la piel de Naruto.

-Nunca usaras este poder para hacer daño a los inocentes.-Dijo Amateratsu mientras una de la linea que había trazado ella brillaba como el mismo sol.

-Lo juro.-Dijo el pelinegro con seriedad, la linea brilló intensamente antes de desaparecer.

-Usarás este poder para traer el orden y nunca el caos.-Dijo ahora Tsukuyomi mientras su linea brillaba como la luna en medio de la noche.

-Lo juro.-Respondió el ojirojo mientras de nuevo la linea trazada por la diosa de la luna brillaba con fuerza antes de desaparecer.

-Nunca usarás este poder para obligar a la gente a acatar tu voluntad.-Dijo la diosa Izanagi mientras su linea brillaba en rojo intenso.

-Lo juro.-Y de nuevo la linea trazada por la diosa brillo intensamente antes de desaparecer.

-Usaras este poder para erradicar el mal que crean aquellos con corazones hundidos en la maldad.-Dijo la diosa Izanami haciendo brillar su linea.

-Lo juro.-La linea brillo con intensidad antes de desaparecer como las demás.

-Nunca dejaras que este poder llene tu corazón de soberbia y prepotencia, serás justo y noble justo como se espera de un guerrero bajo nuestra protección.-Fueron las palabras de Susanoo mientras su linea brillaba como un relámpago.

-Lo juro.-Y la linea al igual que las demás desapareció.

-Y por ultimo, usarás tu poder siempre teniendo respeto por la vida y la muerte.-Concluyó Shinigami mientras su linea brillaba en un espectral tono morado.

-Lo juro.-Respondió por supuesto el muchacho haciendo que la ultima linea desapareciese.

-Desde este día quedas bajo nuestra divinas protección, se nuestra espada y nuestro escudo en aquellos lugares a los que no podemos ir, recibe nuestra bendición.-Dijeron todas las diosas a la vez haciendo que una vez más todas las lineas brillasen a la vez.

Naruto sintió en ese momento la sensación más increible de toda su vida, era tan, pero tan diferente a cuando se convirtió en ryujin o de cuando se volvió un Devil Slayer, no había ningún dolor, era todo lo contrario, se sentía realmente fantástico. Sentía como todo su cuerpo era rodeado de una maravillosa y cálida sensación que lo envolvía y abrazaba todo mientras las lineas se empezaban a mover hacia a su espalda formando el dibujo de un escudo con un par de alas a los lados y dos espadas cruzadas por detrás. La luz de las lineas se fue apagando haciendo desaparecer el dibujo de la espalda del pelinegro que sentía con algo de molestia como esa maravillosa sensación se desvanecía.

El ritual terminó con aquello, Naruto había recibido la bendición de las diosas y ahora podría usar la magia de God Slayer, las diosas hablaron con él un par de horas y acordaron que en 2 semanas el chico volvería para empezar su entrenamiento con ellas. Tras eso el pelinegro y su padre regresaron a Seichi para comunicarle a todos lo sucedido y digamos que durante esa dos semanas el Uzumaki tuvo que compensarles a las chicas el año entero que pasaría lejos de ellas. Cuando llegó el día el ojirojo tomó sus cosas y junto con Bullet abandonó el territorio de los dragones a lomos de su padre.

Fue un año de lo más loco, entrenó en el territorio de cada diosa durante dos meses, empezó en el territorio de Tsukuyomi, siguió con Amateratsu, luego fueron Izanami e Izanagi, después continuó con Shinigami y la ultima fue Susanoo. Naruto, que normalmente catalogaba los entrenamientos de su padre como infernales, conoció un nuevo nivel con las diosas que hizo que muchas veces se plantease si no estaban locas o si estaban tratando de matarlo, aunque eso si, esos entrenamientos le hicieron llevar sus habilidades a un nivel con el que ni el mismo podría haber soñado. Durante ese tiempo en los reinos de cada diosa también ocurrieron bastantes cosas que acabaron con cierto pelinegro sudando la gota, y no precisamente por los entrenamientos.

Cuando en año en el reino de las diosas terminó el Uzumaki regresó a Seichi convertido en todo un hombre de 17 años, las chicas, los exeeds y los dragones le habían preparado una enorme fiesta de bienvenida que acabó muy entrada la noche. Mientras los dragones y los exeeds se divertían viendo a Igneel y Zeckrom pelar entre ellos completamente borrachos, el ryujin y las chicas recuperaban el tiempo perdido en la recamara del ojirojo que al día siguiente se le vio caminar con profundas ojeras mientras las chicas caminaban radiantes y con sendas sonrisas.

Las siguientes semanas el pelinegro tuvo por primera vez unas vacaciones, su padre le dijo que le vendrían bien para descansar de todo el entrenamiento de los últimos años y para prepararse para su ultima prueba antes de regresar al continente elemental. Durante este tiempo el Uzumaki aprovecho para tener algunas citas con las chicas ademas de estudiar y poner a prueba algunas cosas que aun tenían pendientes.

Las dos semanas se pasaron volando y la prueba final no solo para Naruto sino también para Natsuki, Wendy, Akiko, Tsubaki, Hikary y Umiko llegó, cada uno serian llevados a una zona donde todas sus habilidades serian probadas y donde tendrían que entrenar hasta que terminara el año. Como una excepción a los exeeds se les permitió acompañarlos pero con la condición de que no intervendrían en la prueba. Con todo claro cada uno de ellos se marcho a lomos de su padre/madre al lugar donde tendría lugar su prueba, cierto pelinegro sentado con las piernas cruzadas ya se imaginaba el lugar donde tendría lugar su prueba, el lugar más parecido que había en la tierra al Makai, la isla conocida como la Reina de la Muerte.

Desde las alturas el muchacho pudo ver la geografía de la isla, se trataba de una isla volcánica con varios volcanes activos y que de vez en cuando entraban en erupción, la tierra era completamente negra y no había ningún tipo de vegetación. Acnologia aterrizó en una zona desértica y dejó bajar a Naruto y a Bullet, ambos llevaban unas michinas con las cosas más esenciales, el Rey Dragón le dijo un par de palabras de animo a su hijo antes de volver a alzar el vuelo para regresar a Seichi. Cuando la figura del dragón negro se perdió a lo lejos el ryujin y el exeeds se miraron a los ojos antes de sonreír y empezar a caminar, lo primero seria encontrar algún lugar para asentar un campamento.

La verdad, la estancia en la isla tampoco fue tan difícil para el pelinegro, después de todo con el nivel que tenia luchar contra los seres y demonios que allí habitaban no era especialmente complicado, el agua la tomaba del mar y la depuraba usando agua y la comida la conseguía gracias a una de sus magias que le permitía hacer crecer cualquier tipo de vegetación. Lo complicado de la prueba era encontrar al guardián de la isla y derrotarlo, así era como se completaba la prueba, pero por el momento el Uzumaki no había sido capaz de encontrar ni rastro de ese guardián. Fuer casi a finales de año cuando al fín dio con la ubicación de este, se había metido a explorar el interior de uno de los volcanes cuando de pronto apareció desde el interior de la lava alzándose en el cielo con grandeza.

El ser frente al pelinegro era simplemente majestuoso, había leído sobre ellos en libros para nunca había visto uno de verdad, y ahora estaba frente a él, la supuesta ave inmortal agitaba sus alas de fuego dorado delante suya. Era grande, de al menos 2 metros y unos 5 de ancho contando sus alas, de hermosos ojos color rubí que brillaban con fuerza mientras enfocaban al ryujin que le devolvió la misma mirada con una amplia sonrisa, Bullet tomó distancia y el combate entre el muchacho mitad dragón y la inmortal ave de fuego dio inicio.

Ninguno de los dos tenia claro cuando duró el combate, bueno Bullet que los estaba viendo si, había estado dando y recibiendo golpes por más de una semana y parecía que ninguno de los dos fuese a caer, pero al final el pelinegro logró alzarse con la victoria. Su cuerpo estaba completamente cubierto de heridas y quemaduras y estaba bastante seguro que debía de tener algún hueso roto, apenas era capaz de levantarse del suelo hasta que algo húmedo se coló por su garganta. Sus ojos se abrieron como platos cuando antes él apareció una hermosa mujer de cabello rubio platinado y ojos color rubí, la rubia había capturado sus labios y no lo saltaba, aunque el tampoco es que hiciese mucho esfuerzo porque lo hiciese. Las heridas y quemaduras ademas de los huesos rotos de Naruto empezaron a sanar mientras la lengua de la mujer se movía sin parar dentro de la boca del ojirrojo, cuando ambos se quedaron sin aire la rubia se separó del ryujin unidos aun por un hilo de saliva, el Uzumaki solo podía ver su hermosa figura muy parecida a la de Kurama con cara de tonto hasta que la ojirubí tras una pequeña risa habló.

-Fufufu, al parecer vuestro padre tenia razón, sois justo el amo al que llevaba siglos esperando, por favor cuide bien de mi a partir de ahora Naruto_sama.-Dijo la rubia con una hermosa sonrisa.

-¿Eh?-Era lo único que el cerebro del chico fue capaz de hacerle decir en esa situación antes de que la hermosa muchacha lo abrazase, por cierto, ¿mencioné que ella estaba completamente desnuda? ¿O que el pelinegro apenas y tenia un trozo de tela medio quemada para tapar su hombría?

Tras conseguir imponer la calma, que la chica se pusiera algo de ropa a pesar de que ella decía que no le importaba ir desnuda ante su amo y de que el pelinegro se pusiera algo de ropa, Naruto le preguntó que a que se refería con eso de ser su amo que no paraba de repetir. La mujer para empezar se presentó como Houki y le explicó al Namikaze que en la antigüedad los fénix fueron los más nobles y prestigiosos familiares de los magos, muy pocos eran aquellos que lograban tener como su familiar a uno de los legendarios pájaros de fuego. Pero desgraciadamente cuando los humanos empezaron a abandonar el conocimiento y uso del Maho los fénix al igual que muchos otros clanes de familiares fueron olvidados y poco a poco sus números empezaron a descender, la inmortalidad de los fénix no era exactamente como muchos pensaban, ellos si podían morir de viejos y para desgracia de estos cuando los humanos dejaron atrás todo lo relacionado con el Maho la gran mayoría de los fénix eran ya muy viejos y la única que había sido capaz de sobrevivir hasta estos días era Houki que por aquel entonces era apenas una recién nacida.

-Los fénix solo aceptamos como nuestros amos a aquellos que logran derrotarnos en un combate justo, es por eso que a partir de ahora soy su fiel sierva Naruto_sama, aré cualquier cosa que usted me pida.-Fueron las devotas palabras de la fénix que debido a el tono con el que lo dijo y como mostraba sus grandes pechos se podía malinterpretar fácilmente.

Las siguientes semanas hasta que el tiempo que debía estar en la isla de la Reina de la Muerte el muchacho se la pasó tratando de lograr que Houki dejase de llamarle con el sama, Naruto se sentía realmente extraño cuando era llamado de esa forma, pero ni diciéndoselo un millón y medio de veces logró hacer la fénix dejase de llamarlo de esa forma. Durante este tiempo el pelinegro también aprendió que la rubia podía transformarse en un hermoso brazalete si el lo deseaba lo que sin duda le vendría bastante bien para cuando regresará a Konoha, de Kurama no tenia que preocuparse ya que ella aun podía habitar el sitio donde antes estaba sellada y gracias a eso no tendría que explicar su presencia y ahora con lo que le había revelado Houki tampoco tendría que explicar la suya.

-(Parece mentira que hace menos de un mes que volví de la isla con Houki, me alegra que se lleve bien con las chica).-Pensó Naruto al salir de la ducha y empezar a vestirse para ir a ver a su padre.

Naruto vestía con una botas negra con un refuerzo metálico en la puntera, unos anchos pantalones negros dos cinturones rojos cruzados alrededor de su cintura, una camisa gris oscura debajo de una chaqueta negra de cuello alto con algunos detalles en color amarillo. Alrededor de su cuello llevaba la bufanda de color rojo que le había regalado Natsuki hace años, su mano derecha portaba un guante negro sin dedos y una fina cadena negra que enrollada a lo largo de su brazo.

-¿Jefe? ¿Cuando has llegado?-Preguntó un recién levantado Bullet con voz adormilada.

-He llegado hace un rato, tengo que ir a hablar con mi padre, ¿te vienes?-Preguntó el chico mientras se terminaba de atar los cordones de las botas.

-Claro Jefe.-Dijo el felino antes de escabullirse de entre los brazos de las dos chicas lo que hizo que estas gimiesen de disgusto.

-Bien, vamos a ver que es lo que quier decirme padre.-Dijo Naruto antes de abandonar la sala de ir hablar con su padre, probablmente esta sería la ultima vez que lo haria en bastante tiempo ya que en una semana él junto a las chicas y los exceed volverían al continente elemental.

-Se acabó, y antes de continuar, FELIZ NAVIDAD, con algo de retraso, Y FELIZ 2017.-Grita el escritor mientras las chicas tiran serpentinas.-Lamento el retraso gente, pero es que ya podéis ver el tamaño del cap, 15k palabras, este es el cap más largo que he escrito en todo lo que llevo en FF y esa es la razón por la que me he retrasado tanto, bueno eso y ya sabéis, la familia, los amigos, los empachos por comer demasiado, y todas esas cosas que ocurren en estas fechas del año jajaja. Bueno queridos lectores como siempre espero que les haya gustado cap, decirles que varias cosas como el entrenamientos con las diosas, la batalla contra Houki, etc, lo acabaré mostrando más adelante en flash backs o en algunos Omakes. Como siempre si os ha gustado el cap, tenéis alguna duda, sugerencia, opinión o consejo, espero vuestros reviews con ganas.-

-Esperamos que todos tengáis una muy buena entrada a este año 2017 en el que seguro muchas cosas buenas os van a suceder a todos.-Dice Ryuko entrando en plano.

-Y por favor, seguir acompañándonos este nuevo años como lo habéis echo los anteriores.-Dice Harumi entrando en plano junto a cierta pelirroja.

-Esperamos que este nuevo año sigáis apoyando a este vago escritor, por muy difícil que os sea hacerlo.-Añade la Airi pasando un brazo por encima del escritor que siente como una flecha con la palabras VAGO se clava en su espalda.

-Que tengan todos unas felices fiestas junto a sus seres queridos.-Dice Yui haciendo una sonrisa.

-Pues lo dicho gente, espero que todos tengas una genial entrada a este año 2017 para el que yo ya os estoy preparando unas cuantas cosas que creo que os gustaran, un día más este escritor se despide de vosotros, cuidaos mucho, no os olvidéis de pasaros por mis demás fics y si tenéis tiempo por mi canal de Youtube (AkumaNoRyu) yyyyyy hasta la próxima, ja ne.

Reviews:

Hero Of Avalon: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, ojalá este te guste tanto o más.

Reload32: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, y aquí está el nuevo cap, a ver que te parece.

Zafir09: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, espero que te hayan gustado las elecciones que he echo para las hijas de los dragones, y no te precupes, Haku será mujer.

J. Dead: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, contestando a tu primera pregunta, tiene dos mellizas, Natsumi y Mito, respecto a la segunda pregunta, no será todo poderoso pero si será muy, muy fuerte, pero para eso tengo pensados enemigos a su nivel, y si, esas mujeres estarán en su harem, y contestando a tu ultima pregunta, tendras que esperar al próximo cap para saberlo ;)

CCSakuraforever: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, tus ideas me gustan mucho pero Naruto no tendrá chakta, es algo que tengo decidido, pero espero que te hayan gustado las habilidades que tiene.

naruto tendo rikudo: Gracias por el review compañero, y aquí esta el nuevo cap, espero que te guste.

diego muoz agama: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, próximamente aparecerán más chicas de Fairy Tail, solo tienes que esperar, y cualquier recomendación siempre es bienvenida.

Victor018: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, más que un lado oscuro será como una segunda personalidad a la hora de combatir enserio, y el harem estará compuesto tanto por personajes de FT como de NARUTO y otros animes.

daniel dragneel: Gracias por el review y me alegra que te haya gustado el cap, y siento mucho la tardanza, espero que tras leer el cap puedas decir eso de más vale tarde que nunca amigo.