Este fic participa de la actividad del mes de febrero del foro "¡Siéntate!": "Concursos: Besos Inolvidables".
La actividad trata de escribir un fic donde se "recree" el BESO que se eligió. De una película/anime/serie/libro a elección.
Beso que elegí: Del "Titanic", cuando Jack y Rose están en la proa del barco.
Aclaraciones:
-Ennegrecidas y comillas: pensamientos (solo ennegrecido puede ser un sonido).
-Palabras entre los guiones: diálogos.
-Sin guiones: narración.
-Subrayado: (ennegrecido) título, lugar, tiempo.
Otra cosa: Puse a Rin como una adolescente, les diré que tiene 15 años.
Disclaimer: aunque quisiera que fueran de mi propiedad, los personajes son de Rumiko Takahashi. La historia es mía (¡¿porque es lo único mío?!).
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Sesshomaru, junto con Jaken y Ah-Un, se dirigían a la aldea en donde Inuyasha y su grupo vivían. ¿La razón? Una excursión que le prometió a su joven protegida, la última vez que la visito.
Jaken soltó un suspiro, en lugar de su amo.
El demonio se detuvo donde terminaba el bosque de Inuyasha. Ese era el punto en que había concordado con su protegida, antes de volver a sus viajes.
Cerca de la casa de la anciana Kaede, Rin se despedía de su tutora, Kagome, Sango y Shippo. Inuyasha y Miroku no estaban presentes, debido a su trabajo exorcizando, y los hijos de ambas parejas estaban jugando en el interior de la casa de la sacerdotisa más vieja.
−Cuídate mi niña− le dijo en un abrazo la sacerdotisa mayor.
−La tendré, anciana Kaede− afirmo Rin. Las otras dos mujeres también le dieron un abrazo cada una.
− ¿Y sabes a dónde iras?− se atrevió a preguntar Kagome.
−En realidad no sé−ríe− pero conociendo al señor Sesshomaru, de seguro será algo sorprendente.
Luego de eso, salió corriendo hasta el punto acordado con su amo.
Con Sesshomaru…
El demonio observo como la adolescente corría en su dirección, con su siempre radiante sonrisa. Lo primero que hizo ella, fue ir a abrazar al demonio verde.
− ¡Señor Jaken, tanto tiempo sin verlo!− lo estrujaba muy fuerte y lo había elevado del suelo.
− ¡Ya suéltame, mocosa!− se removía entre los brazos de la chica. Riendo, la muchacha lo baja hasta el suelo, y él volvió a quejarse− ¡Y no exageres! La última vez que nos vimos fue hace seis meses.
−Seis meses son mucho para un humano− dijo Rin.
− ¡Así es, para un horrendo e insignificante humano como…−una piedra en su cabeza y su cara en la tierra fue lo que continuo−… tú.
−Vámonos− ordeno Sesshomaru, dando la vuelta y elevándose hacia el cielo. Rin se subió al lomo de Ah-Un, quienes siguieron a su amo.
Jaken…se desmayó….o quedo en coma, quizás.
OoOoOoOoOoOoOoO
Rin estaba muy entusiasmada. Desde hace mucho perdió de vista la aldea, y tanto era su entusiasmo que no se dio cuenta de la ausencia de cierto lacayo lambiscón.
Por su parte, Sesshomaru SI se había dado cuenta de eso. Conocía un detalle muy importante del demonio enano: cuando Rin aparece, sus quejas imparables también. Deshacerse de él sería todo un alivio.
Visualizo algo, mejor dicho un lugar. Era donde quería llevar a Rin. A la muchacha le encantaban los lugares exóticos, y ese en particular le causaría un dolor de oídos por los chillidos de emoción de la joven humana.
Descendieron hasta tocar tierra y Rin salto del lomo del dragón para ponerse al lado de su señor. Junto a él, observo lo mismo que el ojiambar.
−"Maravillada"−laexpresión de Rin fue suficiente para el peli plata para ver cuánto le encanto.
−Señor Sesshomaru, esto es increíble− dice más sonriente− No puedo creer que recordara que siempre quise ver cómo era el mar.
El otro no dijo nada, su mirada seguía hacia la enorme masa de agua azul.
Ellos estaban cerca de la orilla de un acantilado. Podían escuchar las olas romper con las rocas, y como estas las salpicaban, para repetir el mismo proceso, una y otra vez.
Rin se situó en la orilla del acantilado, sintiendo el viento en su cara, y sus cabellos danzar con este. Abrió sus brazos y las palmas de sus manos tenían la misma sensación que el de su cara.
−"Se siente tan suave, y es indomable"− pensó la muchacha− "igual a la señorita Kagura"− se atrevió a pensar, soltando una risa.
Como si la demonio de los vientos hubiera leído el pensamiento de la humana, la brisa golpeo a la joven por detrás. Este causo que ella perdiera el equilibrio, yéndose hacia adelante.
Hasta que los fuertes brazos del demonio la sujetaron por la cintura, evitando su tercera muerte.
Respiro tranquila, sabiéndose salvada.
−Gracias señor Sesshomaru, casi me caigo− dijo recalcando lo obvio. Recibió un "Hmph" como respuesta. No se movieron de su posición.
La brisa volvió a ser suave y a tocar su cara, también la de Sesshomaru.
La chica de 15 años miro hacia la cara de su señor, y por su cabeza se le paso una idea, que para sus quince años era algo común, pero peligroso sabiendo de quién se trataba.
El demonio de ojos dorados fue sorprendido con un beso de parte de su protegida, un tierno e inocente beso. Un momento eterno para él, que fue cortado por ella segundo después.
El viento dejo de soplar, y la protegida del demonio pareció olvidar su "travesura" con su amo y señor. Corrió hasta a Ah-Un, riendo por lo que había hecho, dejando al demonio confundido por las acciones de ella.
−"Humanos, ¿Quién los entiende?"−Sesshomaru fue con su protegida, dejando de lado lo ocurrido. Un tema del que tal vez no se vuelvan a repetir…
−"Ese fue mi primer beso"− pensó sonrosada la azabache, acariciando a Ah, mientras Un insistía por un cariño.
−"Demasiado dulce para ser humana"− el sabor de los labios de la de ojos chocolate, aún estaban en los suyos.
…Quizás se vuelva repetir. Con una luna llena y un "si, acepto".
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No fue tan bueno.-. Pero me salió del alma (y de escuchar una y otra, y otra, y otra vez "My heart will go on")
Voten por este fic horroroso que ni llega a la gran Agatha y las experimentadas del foro.
¡Tengan compasión!
Reviews y reviviré a Jaken (creo que lo mate… gracias a dios (?)).
Sayonara! Goodbye! Tschuws!