…Días después…
Emma despertó muy temprano aquel día, la bebe no paraba de moverse, miro hacia su costado derecho y vio a Killian profundamente dormido. Se levantó tratando de no hacer mucho ruido… se dirigió a la cocina donde se sirvió un vaso de agua y se sentó en el desayunador.
La casa estaba en suma tranquilidad, Henry había vuelto tarde la casa de unos amigos, en este último tiempo había hecho varios amigos. Emma se limitó a apoyar la cabeza sobre la mesa y cerro de a poco sus ojos, seguro fueron segundos en los que se quiso dormir pero escucho el ruido de alguien caminado cerca suyo y su sistema de alerta la hizo prepararse, desde que había regresado dormía poco y estaba sin dudas estaba a alerta todo el tiempo, en su interior sentía miedo de hecho estaba aterrada… se alivió al ver que era Henry sirviéndose un vaso de leche.
-Perdón ma- le dijo su hijo guardando la jara en la heladera –no quise despertarte-.
-No pasa nada kid- le respondió –No he podido dormir en toda la noche… tu hermanita no ha parado de moverse y cada vez patea con más fuerza- esta última oración comenzó a elevar su voz y hablar a la súper barriga que tenía.
Henry tomo asiento a su lado –Duelen?- Emma simplemente sonrió –Cuando se mueve la bebe… duele?- ella asintió con la misma sonrisa, de oreja a oreja –Antes que te fueras dijiste que la voz de Killian la calmaba quizás la mía también-
-Probemos- le respondió su madre.
-Hola- comenzó Henry con una pequeña sonrisa –Es extraño hablarle a una panza pero todo está en orden por acá así que no tenes de que preocuparte… Yo te voy a cuidar…- Emma se emocionó al oír a su hijo –Podrías quedarte un rato quieta mama no la está pasando bien…- dijo con una sonrisa, cuando estaba por seguir Emma lo interrumpió cerrando con toda su fuerza su mano sobre el hombro de el –Que pasa ma?- pregunto alarmado al ver la cara de Emma.
-Una contracción- dijo frunciendo los dientes y apretando el ceño.
-Qué hago?- pregunto alarmado.
-Llama a Killian- y grito.
Henry fue corriendo hacia la habitación de su mama donde estaba Killian profundamente dormido, lo sacudió pero solo logro que el pirata se diera media vuelta y siguiera durmiendo.
-Killian… la bebe… despertate- dijo nervioso Henry.
-Ajam- le respondio dormido Killian –El ron el ron!- susurro.
-Dale! Despertate… la bebe- volvió a insistir Henry.
-Dentro de Emma- volvió a susurrar.
-No Killian la bebe viene- le siguió insistiendo.
-Buenisimo entonces- le respondió.
-NO KILLIAN!- dijo elevando la voz –La bebe está por nacer… creo que viene-
-Como que viene?- pregunto sin entender.
-Si mama esta abajo con contracciones… podes apurarte- Henry volvió con Emma que la encontró apoyada sobre la pared mientras trataba de respirar normalmente –Y mama?- pregunto.
-Creo que definitivamente vas a conocer a tu hermanita- le respondió Emma. Todo ocurría muy lento en aquel momento.
-Swan- grito Killian colocándose el garfio mientras ingresaba a la sala con el bolso que habían preparado unos días antes y en eso apareció en una nube violeta, Regina.
-Todo listo… vamos, gracias por llamarme Henry- otra nube violeta inmundo la sala.
En el hospital, los esperaban Snow y Charming junto a Ruby y Granny's, Henry y Regina se quedaron con ellos mientras monitoreaban a Emma. Whale informo que tendrían que esperar a la fase activa del parto para poder inyectar la epidural, Killian se quedó en la habitación con Emma donde la lleno de preguntas "Ahora que viene?" "Segura que está todo bien?" "Necesitas algo?" "En necesario todas esas máquinas?" "Busquemos otro médico", Emma estaba adolorida que no necesitaba a Killian llenándola de preguntas.
-Cariño podrías buscarme un jugo o agua por favor?... Siento como gusto metálico en la boca- le mintió, Killian salió corriendo de la habitación.
-Como te sentís?- le pregunto Snow entrando.
-Duele- le informo –Killian duele-
-Está hecho un manojo de nervios- le contesto Snow –Entendelo- dijo mientras le tocaba la frente a su hija –Las contracciones como vienen?-
-Normales por ahora- dijo Emma mientras se tocaba su vientre –Le pedi que me buscara algún jugo… necesitaba silencio- y cerró los ojos mientras disfrutada la calidad de la mano de su mama –Quedate- le pidió.
Las contracciones comenzaron a ser cada vez más fuerte, tanto que le impedía hablar. Killian se había quedado un tiempo en la sala de espera con Charming.
-No estoy listo- dijo Killian comenzando la charla.
-Nunca se está listo- le respondió Charming.
-Nunca imagine ser padre- volvió a hablar Killian.
-Nunca creí que mi hija terminaría con vos- le respondió Charming.
-No quiero ser padre, no seré un buen padre- dijo Killian.
-Vas a levantarte y vas a dar la cara en aquella habitación, mi hija te necesita- David hablo como si fuera aquel príncipe que fue una vez en el bosque encantado –Lo hecho está hecho y ahora vas a ir y me vas a demostrar lo equivocado que estoy con vos-
Killian ni dudo y camino hacia la habitación, donde estaba Snow sentada junto a Emma y ella descansaba en el pecho de su madre –Hey love- dijo más tranquilo. Emma no respondió, se limitó a limpiarse la cara… Se acercó a ella sigilosamente y se sentó donde había estado sentado horas antes. Snow volvió a la sala de espera, Emma le tomo la mano a su novio con fuerza mientras fruncía el ceño y apretaba los dientes, así estuvo por un tiempo hasta que quedaron marcadas sus uñas en él.
-Mi residente me informo que esta todo en perfectas condiciones, te voy a revisar una vez más Emma… - después de chequearla su obstetra hablo –Ya estamos, esa bebe quiere salir ya- dijo Allison con una sonrisa.
-Espera- grito Emma –Llama a mi mama- le pidió. Killian salió corriendo hacia la sala de espera y pidió que entrara Snow.
-Killian el garfio… dámelo- le pidió Charming, así con las manos temblorosas lo quito y se lo entrego. Dentro de la habitación a Killian le colocaron un camisolín y se colocó junto a Emma tomándole la mano –No me sueltes la mano- le dijo, ella lo miro con una sonrisa, simplemente se contestaron con la mirada… su respuesta era simple, era "nunca".
-Ok Emma… cuando yo te diga vas a pujar, trata de no gritar porque te va a quitar fuerzas y ahora las necesitamos más que nunca- Emma apretó sus labios y asintió –Ok puja- Emma apretó con fuerza la mano de Killian y la de Snow, frunció el ceño y pujo –Para… para… respira profundo-
-No puedo más- dijo Emma exhausta –No puedo- dijo queriendo llorar
-Lo último love- le dijo Killian. Emma pujo con todas su fuerzas, tanto que lanzo un grito ahogado –No tires el ancla ahora dale- le dijo en forma de ánimo.
Emma estaba completamente bañada en sudor y su rostro rojo debido a toda la fuerza que estaba realizando. Esa pujada no había sido suficiente, aquella bebe no quería salir tan pronto asi que Allison le pidió que sacara fuerzas de donde no había porque ahora definitivamente era la última, la rubia obedeció a las órdenes de su médica y pujo con tal fuerza que mientras lo hacía le clavaba sus uñas a Killian, su grito fue tan desgarrador que las luces comenzaron a titilar sin cesar acompañando el grito, algunas de quemaron que fue sorpresa para todos menos para Whale que estaba ayudando a Allison.
-Que esperabas Emma?- pregunto Whale debido a la reacción de sorpresa de todos por las luces –Estas trayendo magia al mundo- le dijo de forma divertida.
Hubo unos pocos segundos de silencio en la habitación, Emma se recostó sobre la cama tratando de recuperar el aire, Killian no comprendía que pasaba y Snow comenzó a acariciar la frente mojada de su hija. Todo fue lágrimas para los tres cuando escucharon a la beba llorar a los gritos.
-Tiene pulmones fuertes- volvió a hablar Whale de forma divertida.
-Felicitaciones Emma- dijo Allison con una sonrisa –Es una nena- mientras la llevaba envuelta en una manta blanca hacia su madre.
Emma era un mar de lágrimas mirando aquella preciosura que a poco iba cesando su llanto, Killian no reaccionaba al respecto simplemente miraba aquella escena con lágrimas en los ojos sin saber qué hacer ni que decir.
-Es perfecta Emma- dijo Snow mirando con ternura a su hija y reciente nieta –Felicitaciones a ambos por la segunda beba más linda que he visto en 30 años- refiriéndose a que Emma había sido la primera y deposito un beso en la frente de ambas.
La bebe se había calmado a los pocos segundos que la depositaron en el pecho de Emma –Gracias- dijo la rubia mirando a Killian llorar, el pirata la miro sin comprender –Gracias por este regalo tan perfecto- siguió hablando la rubia.
-Swan te amo- le confeso el pirata y la beso, sin importarle que estuviera su suegra en la habitación.
-Queres tenerla?- le pregunto Emma con una sonrisa.
-No, no está bien así- le respondió Killian. No sabía cómo sostener a un bebe, tenía miedo de dejarla caer parecía tan frágil en los brazos de su novia.
-Simplemente tenes que acunarla en tus brazos… dale- insistió Emma pasándosela- Alai este es papa…- dijo cuándo por fin la deposito en los brazos del pirata, Killian la miro sorprendido –Alai significa alegría-
-Es perfecto- respondió Killian con una sonrisa y con su hija en brazos –Es simplemente perfecta-
