¡Hey muchachones míos! xD Y que tal X.x acá les comento que sigo atada hasta el cuello con las clases del nuevo ciclo y TnT aunque amo la medicina, en verdad me mata xD... pero así y todo no puedo dejar de publicar y escribir para ustedes, también con esto en parte me desestreso xD y gracias a todos por darse el tiempo y leer estas locuras que escribo jejejeje...

Ya y ahora si un day más... esta vez gracias a la palabra de Anamicenas XD mi baby acá ya la segunda y falta una jejejeje me diste trabajito mujer ¡Por eso te adoroooo! ¡Así que agradecimientos a ella jajajaja xD!

¡Bueno ya sin más les dejo el cap y linda lectura!

Disclaimer: Todos los personajes son de Kishimoto-sensei con respecto a lo demás cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia xD...


DAY 11: PROMISE

Era muy temprano ese día, aproximadamente 7 de la mañana. Shikamaru estaba bostezando rumbo al hospital llevando consigo una pequeña bolsa con cosas que su mujer había olvidado meter en la maleta del bebé que desde hacía un mes ya tenía preparada.

Él no entendía como era posible que Temari necesitara más cosas, se suponía que habían revisado el bolso unas 10 veces antes de que sucediera el gran momento.

Luego de haber ido un rato a su casa por fin llegaba al hospital para estar junto a su esposa y bebé recién nacido. La noche había sido demasiado larga, todo el día anterior había sido demasiado largo. Sin embargo, la recompensa llegó luego de 18 horas de esfuerzo por parte de Temari y de nervios por parte de él. A las 2 am había nacido su hijo, un perfecto bebé con buen peso, con buena talla, con todos los deditos en sus manos y pies.

Shikamaru abrió despacio la puerta de la habitación donde pasaron a Temari luego de haberse recuperado del parto. Allí encontró a su madre sentada cerca a la ventana bordando una camisita, que supuso sería del bebé, y a su esposa durmiendo en una cama al lado del cunero donde estaba su hijo también completamente dormido.

- Mamá… - susurró como saludo Shikamaru.

- Hola hijo… - también habló despacio Yoshino - cayeron rendidos de cansancio - sonrió la mujer dirigiendo su mirada a la nueva mamá y a su nieto recién nacido.

- Gracias mamá - Shikamaru respondió la sonrisa de su madre con otra - …ve a descansar tú también, yo me quedo con ellos ahora.

Yoshino guardo sus cosas en su cartera y se preparó a salir.

- Bueno muchacho, te los encargo - abrazó a su hijo - descansaré un poco y trataré de regresar al mediodía con algo para que comas.

- Te espero entonces - mencionó el nuevo papá mientras le abrirá la puerta a su madre.

Ambos se despidieron con un beso, quedando ya solamente la nueva familia de tres.

Shikamaru decidió que era buen momento para ordenar lo que había traído, y sin hacer mucho ruido arregló todo.

No demoró mucho en terminar, así que para no aburrirse pensó que sería buena idea ahora sentarse un rato y velar el sueño de las dos personitas más importantes para él en ese momento. Primero paso a ver a Temari, quien dormía plácidamente, para él parecía un ángel con aquellos rizos dorados cayendo por los lados de su rostro. Se acercó y simplemente le dio un beso en la frente tratando de no perturbar su sueño. Al notarla tan tranquila quiso quedarse allí a su lado y perderse en ese semblante tan bonito.

Se estaba acomodando en una silla al costado de su esposa, cuando de repente su mirada se fijó en la pequeña cuna trasparente que estaba hacia el otro lado, en donde un bultito de mantas comenzaba a moverse armónicamente.

Curioso cambio de posición y con temor se sentó al lado del cunero donde su hijo parecía, aun con los ojos cerrados, sentir que alguien estaba cerca.

A pesar de toda la emoción del parto, Shikamaru sólo había atinado a llorar y cargar a su hijo unos minutos durante ese momento. Fue un parto muy largo y los médicos decidieron llevarse rápidamente al bebé para revisarlo, ya que al nacer el pequeño solamente había emitido un ligero llanto. Temari se asustó mucho y no quería que se llevaran a su niño, felizmente Shikamaru supo controlar la situación y la calmó diciendo que todo iba a estar bien. Gracias a dios, en verdad todo salió muy bien y trajeron al niño luego de media hora diciéndole que estaba en perfecto estado. Fue ese el momento donde pensó irse a casa, ya que su madre estaba presente él podría ir un rato a cambiarse y descansar mientras acomodaban al bebé y Temari en una habitación.

Y allí estaba en ese instante viendo a ese pequeño ser, tan puro e indefenso. Tuvo que contener nuevas lágrimas, ya no podía estar llorando, ahora era él quien tenía que proteger a su rey. Era increíble, el bebé se movía inquieto, tenía toda la vitalidad que había sentido a través del vientre de Temari. A partir de ese momento ese niño iba a depender totalmente de él y su esposa, le entró algo de miedo, pero en su interior una voz le decía que lo iba a ser bien.

Tímidamente Shikamaru estiró su mano y la colocó cerca de la mano de su hijo. Era tan chiquita, toda la mano de Shikadai era del tamaño de su dedo meñique. Sonrió, nunca había sonreído tanto, de repente la pequeña manito cogió con fuerza aquel dedo que era de su mismo tamaño. Él no se atrevió a deshacer ese lazo, sin embargo quería seguir viendo a su bebé por lo que con su otra mano suavemente empezó a sacar la mantita que cubría el cuerpecito del pequeño.

Su niño era grandecito había medido unos 52 cm y pesado 3,300 kg. Tenía el cabello tan moreno como su padre y una nariz pequeñita e idéntica también a la de él. La genética era maravillosa, no se podía negar que era hijo suyo, todo un Nara. Shikadai estaba vestido con un roponcito blanco del hospital y en su piecito derecho tenía un brazalete azul en el que estaba marcado: "NARA", la fecha y la hora del nacimiento. Definitivamente era increíble que él hubiera sido participe de la creación de esa vida, era parte de él y su sangre.

Shikamaru veía embobado al niño que aún tenía su dedo bien agarrado, pero sin previo aviso el bebé comenzó a emitir grititos que anunciaban un llanto más fuerte.

- Sshh… - trató de mecer suavemente con su mano libre a su pequeñito - no llores bebé - pero el niño seguía mostrando en su carita signos de fastidio ya que al tratar de calmarlo había soltado su dedo.

Él no quería que Temari se despertará, por lo que valientemente se levantó de la silla para cargar a su hijo. Por primera vez en su vida sintió que su cuerpo temblaba tanto por miedo a hacer caer a Shikadai, despacio cogió a su niño y volvió a sentarse. Al parecer, sentirse en los brazos de su padre hizo que el bebé se calmará un poco y perezoso empezará a tratar de abrir sus ojitos.

- Hola… bebé… - habló Shikamaru bajito por temor a dañar incluso con su voz al pequeñito que tenía arrullando en sus brazos - Soy tu papá. ¿Qué tal, amiguito? Le diste mucho trabajo a tu mamá ¿sabes? - Shikamaru no podía dejar de mostrar una sonrisa.

Shikadai comenzó a llevar a su cara una de sus manos en señal de molestia por la luz que se mostraba antes sus ojos abiertos.

- ¡Hey! Shikadai - Shikamaru llamó su atención tomando el pequeño brazo de su hijo para alejarlo de su rostro y así evitar que se arañe inconscientemente - Hay mucha luz ¿no? - mencionó al darse cuenta que era por eso que el bebé trataba de tapar su rostro y volver a cerrar sus ojitos.

El nuevo padre se paró y se volvió a sentar en otra silla que estaba más alejada del lugar donde daba la luz directamente.

Fue en ese instante que notó que Shikadai le mostraba unos ojos verdeazulados totalmente abiertos frente a él y aunque tenía la mirada desenfocada era seguro que Shikadai trataba de descubrir quién era aquel ser que lo cargaba en brazos.

- ¡Hey, amigo!... - pronunció sorprendido Shikamaru - Parece que tendré que darle el crédito a tu madre por esos ojos - el bebé bostezó ocioso.

Shikamaru no sabía qué hacer, su hijo era tan perfecto para él. Nunca se iba a cansar de verlo.

La imagen de su padre y Asuma pasaron por su mente ante la imagen de su propio hijo, era ese el momento que más los necesitaba y sin embargo ya no estaban con él, tuvo que tragar un poco de saliva para controlar aquella sensación de vacío que sintió.

- Oye pequeño, estoy seguro que tu abuelo hubiera estado rebozando de felicidad al verte - el bebé lo miraba fijo como preguntándose sobre que hablaba - Sabes te pareces demasiado a él, seguro ahora se hubiera estado riendo al ver mi cara de bobo. Asuma por otro lado estaría dándome el sermón de sobre como los bebés son una lata y probablemente con Mirai en brazos.

Shikamaru se dio la vuelta y dirigió a la ventana para observar que tal estaban las nubes ese día. Verlas siempre le daba valor, ya no simplemente las envidiaba por ser libres y dejarse llevar por el viento, ahora las admiraba porque a pesar de todo eso ellas nunca sucumbían ante ninguna tempestad, al contrario eran las que ocasionan tormentas y cambios.

- Shikadai… - continúo hablando dulcemente mientras colocaba una mano en alto sobre el rostro de su hijo para que la luz no le diera directo a aquellos ojos que ya lo habían atrapado, tanto como los Temari - Yo tuve dos hombres importantes en mi vida, hombres que ahora no están a mi lado físicamente pero si estoy convencido que nos observan en este momento.

Tan amena era la charla con su hijo que Shikamaru no se percató que detrás de él, en la cama, Temari ya había abierto los ojos al escuchar los pequeños quejidos de su bebé. Y ahora con una sonrisa de medio lado estaba escuchando claramente todo lo que decía su esposo, metida aun entre las sábanas.

- Sabes amigo… tengo miedo - Shikamaru movía sus brazos de un lado a otro despacio meciendo a Shikadai, al parecer al bebé le gustaba que hiciera eso porque ya otra vez está tratando de cerrar los ojos para dormirse de nuevo - Tengo miedo de no ser como ellos, solo espero ser la mitad de lo buenos que fueron - el reciente padre volvió alejarse de la luz y colocar su dedo meñique cerca de la manita de su bebé, el cual aunque estaba medio dormido lo cogió fuertemente - Te prometo dar todo de mi para hacerte un hombre que este orgulloso de quien es y capaz de decirme que le bastó con solo verme la espalda para convertirse en alguien de bien - él sonrió al sentir la calidez de aquel cuerpecito que tenía en su pecho, respirando acompasado a su propio ritmo. En verdad era cierto eso de enamorarse a primera vista.

En ese instante Temari no pudo contenerse y al moverse sin querer dejo caer una botella de plástico con agua que tenía en la mesita que estaba al lado de su cama. Shikamaru sobresaltado se giró y vio a su mujer conteniendo una risita, inmediatamente se dio cuenta que Temari había estado escuchado todo, ocasionando que se sonrojara hasta las orejas.

- ¡Hey problemática! ¿Qué haces espiándonos? - gruño indignado pero bromeando - ¿Desde dónde escuchaste?

- ¡Oh! "¡Parece que tendré que darle el crédito a tu madre por esos ojos!" - imitó entre risas Temari la voz de su marido.

- ¡Qué graciosa! - frunció el ceño Shikamaru, pero no pudieron aguantarse más y ambos empezaron a reírse produciendo que Shikadai emitiera un ligero llanto en señal de protesta.

Temari aun divertida le hizo un gesto a Shikamaru para que le entregara a su bebé, ya que el pobre hombre estaba entrando en desesperación al ver que Shikadai incrementaba el volumen de sus quejidos.

- Así que ya te enseño sus ojos… - comentó Temari. Shikadai se había calmado cuando ella le coloco su seno en la boca.

- Si… - Shikamaru estaba concentrado en aquella imagen tan maternal, verla alimentando a su niño era maravilloso - Me encantan, son como los tuyos.

- Bueno al menos debía dejar mi marca ¿no? - rió ella mientras cogía una manita de su bebé - Es hermoso, gracias Shikamaru.

- Al contrario Temari, yo soy el único que debería darte las gracias - el joven Nara se acercó y le dio un beso en la frente a su esposa - Gracias por darme a mi rey y una nueva razón de vida - ella no pudo evitar sonrojarse ante aquellas palabras.

Shikamaru se acomodó junto su mujer en la cama pasando uno de sus brazos por su cintura y haciendo que ella se apoyara en su pecho.

- ¿Está comiendo bien? - preguntó él algo preocupado al ver que su hijo de vez en cuando dejaba de succionar el seno de Temari.

- Creo que sí, una enfermera amablemente me explico como debía hacerlo y se supone que debe beber de los dos por lo que debe tomarse su tiempo - la nueva madre sonrió y paso una mano por la cabecita de Shikadai dándole cariño.

Fue allí donde ella vio que Shikamaru se había quedado con la mirada fija a la nada. Esto le preocupo, esa era la cara que ponía cuando tenia una preocupación grande, lo conocía como la palma de su mano y sabia muy bien que su esposo le estaba dando vueltas al asunto de ser padre.

- ¡Shikamaru! - exclamó llamándolo seriamente - Mira quita esa cara... Sabes yo también tengo miedo pero míralo... ¿Crees que este pequeño vaya en verdad a dar tantos problemas? - Temari estaba con el ceño fruncido y expectante a lo que iba a decir Shikamaru.

Él la miró sorprendido, bueno se esperaba que su mujer lo regañara ¿Pero en serio le estaba haciendo esa pregunta?. Shikamaru puso la mirada en su hijo y la respuesta se le hizo clara, en verdad ese niño iba a ser todo un problemático, y sin poder más con la risa empezó a carcajearse de lo lindo.

- ¡OYE! - Temari se escandalizó - ¿Te burlas de mi? - ella tuvo que mecer un poco a Shikadai porque ante el ruido que hacia su padre el pequeño se había asustado y comenzado a moverse como loco en sus brazos.

- Mujer... en serio me vas a matar... claro que sera un problemático, si es tu hijo - dijo él aun entre risa mientras se limpia las pequeñas lagrimas que había soltado por esta - tranquila... ya no estoy preocupado - con confianza le mostró su típico rostro relajado.

Temari se pego más a él y Shikamaru le dio un beso en la mejilla para demostrarle que ya no había ningún sentimiento de temor en su ser.

- Lo haremos bien, después de todo tenemos ángeles que se encargaran de guiarnos en el camino - Shikamaru confiaba en eso y Temari sabia muy bien que aquellas palabras eran totalmente ciertas, al fin ya al cabo ellos nunca estaría solos.

Ambos padres se quedaron un rato en silencio observando ya como su hijo dormía plácidamente aun pegado al pecho de su madre. Definitivamente ese niño iba a ser el más consentido de todos, ese iba a ser el rey que protegerían y volverían un adulto genial.


Promise es promesa xD y que momento más importante para hacer una promesa que en el nacimiento de tu hijo. La verdad es que al tener la palabra en lo primero que pensé fue en esta situación xD una realmente tierna. Los lazos que unen a un hombre con su hijo son muy diferentes a los de una mujer por lo que trate de plasmar eso en este cap y creo que me salio bonito ¿o no? jejejeje.

Espero en verdad que les haya gustado este cap, el cual me lleno de feels al escribirlo TnT ¡Siempre imagine que Shikamaru papá seria así de bello!

¡Ah! Y los agradecimientos a todos mis muchachones que me dejaron review:

A mi white (mujer! gracias xD por darte una vueltita por este fic, :V besos zukulentos para ti), a Silvin (Xd belleza que lindo escribes me encantan tus historias donde incluyes a Karui, besosssss), a Shika! (oe hombre sabes que te quiero, xD que bueno que te gusto jejejeje lo sabía), a cuchufly (ooohhh la alegría es mía al verte alegre :) beshooooo), a mi amoreee Anamicenas (omg tus reviews me llenan de amorshhh jajajaja mazamorra pa ti :V este cap es con mucho cariño para ti), a anita (XD dios muchachona no creas que no me he leído tu historia ya la tengo en favoritos TnT te debo reviews pronto te los dejaré jejejeje xD espero la actualización), oohhh yeah a mi cositaaaaa Glow... (¡Mi vida! xD porque yo sin ti y tu sin mi dime quien puede ser feliz... lalala xD ya tu sabes jajaja :V BESAZOS CHOCOLATONES) y finalmente a mi esclava... digo a mi bellezaaaaa Ismilley xD (mujer no llores yo te abrazo ozhe si! xD te doy un Lee la próxima ok si! xD Toma este cap como un regalito extra por tu cumple jojojojo)

¡Y bueno ahora si me despido dejandoles muchos besos y abrazosssss xD estamos leyéndonos!

P.D: MUCHACHOS POR MOMENTO DEJO CERRADOS LOS PEDIDOS DE DAYS PORQUE AHORA XD ME DOY CUENTA QUE TENGO UN MONTÓN DE DAYS POR RESPONDER JEJEJEJE, PERO NO PIENSEN QUE NO HABRÁ MÁS PEDIDOS, VOLVERÉ A ABRIR PEDIDOS PRONTO CUANDO YA NO TENGA MUCHOS DAYS POR RESPONDER ASÍ QUE GRACIAS POR LA PACIENCIA ¡BESITOS!