El gran día (parte 3)


Todos aplaudieron y ellos se separaron levemente sonrojados.

-Ahora, felicitamos a los novios por este grandioso día.- Dijo Alexi desde el micrófono y sonrió ampliamente.- ¡Que su amor dure por el tiempo que deba durar!

-Gracias.- Respondió Louis con un hilo de voz, sus ojos se habían llenado de lágrimas que trataba de contener, Hachiro le besó en la frente con dulzura.

-Ya, no llores, pequeño Lou.- dijo Hachiro con voz suave para calmar al castaño, cuando éste se tranquilizó, el pelinegro alzó la voz.- Muchas gracias a todos por acompañarnos en este momento tan especial para nosotros. Disfruten la fiesta.

Al poco tiempo todos habían vuelto a lo que se encontraban haciendo, la pareja se dirigió hacia donde estaban los padrinos, Estela hablaba animadamente con Testudo sobre lo que habían pasado durante la batalla contra Law.

-Hola.- Saludó Louis mientras se acercaba.

-Hola, Louis, felicidades por tu gran día.- Respondió Estela con una amplia sonrisa.

-Debería agradecerte por el incidente del ramo en tu boda.- Dijo el castaño con tono divertido.- De no ser por eso, de seguro aun ni estaría comprometido con Chiko.

-Sí, pero ahora estas casado con él.- Agregó Testudo con una amplia sonrisa.- Por cierto, ¿cómo está tu dragón.

-Ah... está bien y de un tamaño considerable.

-Eso es bueno, espero que le estés dando los cuidados necesarios.- Dijo la estrella con voz tranquila.

De repente Raphael se acercó hacia donde estaban ellos.

-Hola, Testudo.- Saludó con una amplia sonrisa.

-Ah, hola, Raphael.- Respondió Testudo, la estrella notó que el ángel llevaba en brazos al pequeño Yamir.- Vaya, ya han crecido mucho tus pequeños arcontes, ¿eh?

-Sí, el tiempo pasa muy rápido.- Raphael hizo una pose dramática.

Por otro lado, Louis hablaba algo con Hachiro cuando se acercaron a ellos dos de las acompañantes de Testudo, se trataba de la tigresa humanoide y la arconte.

-Buenas noches.- Saludó amablemente la arconte.- Venimos con Testudo de parte de la emperatriz de Talesworld, yo soy Ageka y mi compañera es Rasha, somos emisarias de lugres lejanos.

-Buenas noches.- Respondió Louis e hizo una leve reverencia.- Es un placer tenerlas con nosotros esta noche tan especial.- Dijo con una amplia sonrisa.

-Tenemos unos presentes para ustedes.- Agregó Rasha y les extendió una cajita con escamas color anaranjado ensartadas en oro, el joven la recibió y al abrirla se encontró con que dentro habían dos dijes en forma de plumas de otro con una gema en forma de gota ensartada, ambos dijes estaban sujetos por unas cadenas tipo brazalete.

-Son hermosos.-Susurró y cerró la caja, Hachiro la tomó con ambas manos como a un tesoro preciado, abrió la tapa y se dio cuenta que tanto ésta como el reverso de los dijes tenían algo grabado.

-Interesante.- Susurró el pelinegro.

-Es una cajita de Sirrush.- Explicó la tigresa.- Como el Sirrush es un ser casi divino, la cajita resiste a todo tipo de inclemencias, pude ser usada para resguardar lo que más aprecian y con el tiempo pesto no se dañe.

-Y los dijes son lágrimas de arconte.- Agregó Ageka.- Son un lazo que sólo la pareja tiene y, sin importar la distancia la gema brillará hasta que logren reencontrarse cuando lo amerite el momento. Ah, y por supuesto, están cordialmente invitados a Talesworld por parte de la Talesmaster.

-Muchas gracias.- Remató Louis con una amplia y sincera sonrisa. Las emisarias regresaron a su mesa con una expresión de satisfacción.

La pareja de recién casados se quedó por un momento en silencio, aun cuando la música llenaba el ambiente sintieron un mini silencio incómodo.

-¿Y ahora qué? –Preguntó de repente Hachiro para romper con el silencio, Louis levantó los hombros. De repente, como si hubiera desafiado al tiempo aparecieron casi de la nada Matheo y Raphael, entre los dos cargaron a Hachiro y lo llevaron hasta el centro del salón ante la mirada expectante de todos. Alexi subió al escenario y son una sonrisa divertida habló por el micrófono.

-Ahora invitamos a los caballeros a pasar al centro, jejeje, entreguemos al novio.-Dijo animadamente con una sonrisa divertida.

Louis miró con una gotita en la frente y una sonrisa irónica cómo entre varios cargaba a su ahora esposo. De repente vio que se acercaba a él Estela, la princesa alternaba miradas entre él y lo que estaba sucediendo en el centro.

-A ver... quítenle los zapatos... el saco... la camisa.. Los pantalones, okno. – Alexi se aguantó una risa al ver el rostro lleno de vergüenza del pelinegro.

-Se ve que se están divirtiendo.- Comentó Estela con una sonrisa, Louis sólo sonrió y asintió.- Tu boda es adorable.

-Jeje, gracias.- Respondió el castaño mientras se rascaba la nuca.- La tuya también fue hermosa.

No siguieron conversando porque el pelirrojo mandó traer a Louis al centro.

-Y bien, aquí está el novio.- Respondió Alexi, entre varios dejaron caer de manera poco amable a Chiko al suelo, el joven estaba desgarbado, sin saco ni zapatos, y totalmente despeinado, Louis no pudo evitar soltar una leve risa.- Dinos, ¿todavía lo quieres?

-Jajaja, sí.- Respondió entre risas el chico y abrazó al mayor, una exclamación de ternura invadió el lugar.


Wendy miraba divertida la escena, de repente, algo captó su atención: cerca de una de las esquinas se encontraba Ken cruzado de brazos con una expresión de satisfacción en el rostro, la castaña se acercó con una mirada inquisidora.

-¿Ahora qué hiciste?- Preguntó ella con una sonrisa divertida, algo le decía que Ken había tenido una pequeña venganza. El oji amarillo sonríe de lado y jaló a alguien fuera de la esquina, Wendy no pudo evitar soltar una carcajada al ver a Milo con un vestido azul con detalles rosas y un poco de maquillaje en el rostro.

-Se podría decir... que alguien recibió su karma.- Respondió Ken mientras reía, el peli azul le intentó fulminar con la mirada, pero falló monumentalmente.


Sentimiento más puro y tierno que el amor

Ninguno

¿Es posible amara a primera vista?

Quien sabe

¿Cuánto podría durar el amor?

Durará lo que tenga que durar

¿Hay límites para el amor?

No existen fronteras de ningún tipo


Después de la fiesta algunos de los invitados se fueron, mientras que otros se quedaron en el castillo, total, había habitaciones de sobra.

La pareja de recién casados se encontraba en sus aposentos, listos para una larga y bella noche a solas.

-Te amo.- Dijo Hachiro y besó a Louis en los labios, un suave y tierno beso, el castaño se sonrojó pero le sonrió.

-Yo también. – Respondió y abrazó al pelinegro, lo besos fueron pasando a algo más que duró un buen rato, mejor dicho, toda la noche, una noche bella y estrellada donde ellos se mostrarían el amor que sentían uno por el otro de la forma más íntima que pudieron.

Al amanecer del día siguiente el primero en despertar de los dos fue Hachiro, el mayor, aún adormilado y algo exhausto por la noche anterior se incorporó con pesadez y se dirigió al baño para darse una buena ducha, no sin antes darle un tierno beso en la frente a su "pequeño castaño", Louis se removió entre las sábanas y sonrió soñadoramente.

De repente, un ruido lo alertó, no era el sonido del agua dentro del baño, era diferente, parecía... un gorjeo o un sonido que él no lograba identificar. Se puso algo encima y comenzó a inspeccionar la habitación en busca de lo que producía dicho sonido, no tardó en dar con la fuente. Cuando lo encontró, el castaño abrió los ojos desmesuradamente y ahogó un grito.

Hachiro logró captar que algo no andaba bien allá afuera, cerró la llave del agua y salió del baño con sólo una toalla cubriendo su mitad inferior del cuerpo.

-¿Qué pasó, Lou?- Preguntó con notable preocupación al ver al joven hincado en una esquina, se acercó unos pasos pero se detuvo en seco cuando el castaño se incorporó.

-Oye... Chiko.- Empezó a hablar con timidez.- De pura casualidad, ¿el gato que me regalaste era normal...?- Preguntó aún de espaldas, Hachiro se quedó como piedra por unos instantes.

-No... no tengo idea. ¿Por qué preguntas... acaso...?- No terminó de decirlo porque el joven se había volteado a verle, el pelinegro se sorprendió de sobremanera al ver que Louis estaba cargando entre sus brazos a un bebé de no más de diez meses, su cabello aún escaso era blanco con una pequeña rayita en color aguamarina, sus ojos, grandes e inocente eran turquesa y su piel era de un pálido como de porcelana, pero definitivamente lo que más llamaba la atención era que de su cabecita sobresalían un par de orejitas de gato color gris pálido,.

-Debemos cuidarlo.- Dijo Louis mientras arrullaba al pequeño, él sabía que ese bebé era el gatito que un día antes Hachiro le había regalado, también sabía que por ende debía cuidarlo, bebé o gato.

Hachiro se quedó en silencio por unos segundos, pero luego sonrió y se acercó al castaño.

-De acuerdo.- Dijo con una sonrisa.- Pero, ¿cómo se va a llamar?

Louis se quedó pensativo, aún no le había puesto nombre, sin embargo, tuvo un "flashazo", una idea.

-Haru... –susurró, el bebé rio inocentemente y extendió sus manitas.- ¿Te gustó?- El castaño sonrió y lo abrazó con un poco más de firmeza.- Mi pequeño Haru... somos tu familia.


Fin.


Y aquí termina el fic *w* lo siento por la tardanza, pero se me secó el cerebro u.u

Bueno, ¿pd?

Pd. ¿qué les pareció?

Pd2. No sabía cómo terminarlo, y tengo el presentimiento de que si no lo terminaba ahora, no lo haría nunca (okno XD)

Pd3. Jeje, no me acuerdo cómo era completo eso que hacen en las bodas de que cargan al novio y le hacen esas cosas, pero quería meterlo XDPd4. ¡soy un desastre con los oc! TToTT

Pd4. Sí, Haru fue el primero que adoptaron, pero s el segundo menor, adoptaron a Deshi un año después cuando éste tenía cuatro años, un año después tuvieron a Kalari y al final adoptaron a Luca.

Pd5. A Milo le llegó el karma XD

Pd6. Tal vez suba un poquito de contenido extra a Deviantart.

Pd7. Para los que también están leyendo Parallel, decidí subir l historia por separado de los integrantes de la Banda Zero a Deviantart, como que FictionPress no me latió mucho para esa historia :v

Bueno, eso sería todo, mañana tengo examen de Física (¡noooo!)

¡Nos leemos! :D